Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Carta Grupo
Carta Grupo
«El que ama a su mujer, a sí mismo se ama porque nadie jamás aborreció a su
propia carne»
Entonces cuánto mayor infractor será aquel que no solo no ame al prójimo
sino que tampoco se ame a sí mismo. Y cuan mayor mentiroso será si encima
dice «Yo amo a Dios». Porque el amor a Dios en una sola frase se resume.
Sean pues como niños, como barro en manos de alfarero. Pues estas dos
cosas estimándose menospreciables son moldeadas por un tercero para dar
lugar a algo cuyo valor es muy superior a su forma anterior. Tengan ustedes
este mismo sentir, consideren su actual forma como sin valor alguno, ríndanse
al Señor para que mediante su Espíritu sean transformados en algo valioso.
Escudriñen las escrituras y ponganlas en práctica para que alimenten su fé.
Anhelen el don del Espíritu Santo, por el cual recibiremos la adopción. No se
turbe vuestro corazón si en algún momento, con alguna tentación, tropiezan.
Recordad que Juan escribió
«Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere
pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo»
No teman, pues nunca hubo camino cuesta arriba que no sea dificultoso.
David