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Objetivos y lentes

¿Sabes que los objetivos son tanto o más importantes que el cuerpo en una cámara de fotos? Te contaremos porqué en las
páginas del siguiente capítulo.

Según la Real Academia Española de la Lengua un objetivo es una lente o un sistema de lentes de un instrumento óptico. En
fotografía, la definición de objetivo podría ser mucho más extensa y detallada. Estas lentes están dentro de un tubo o cilindro que
va conectado al cuerpo de la cámara y por el que pasa la luz hasta el material fotosensible.

En el siguiente capítulo hablaremos de las lentes que componen un objetivo y de sus materiales. Nos detendremos en explicar
qué es la luminosidad de un objetivo y en qué se basa. Dejaremos claro qué es la distancia focal y la profundidad de campo y
cómo utilizar ambas con fines creativos a la hora de sacar fotos. Para ello será imprescindible que tengamos claro cómo funciona
el diafragma del objetivo y para qué sirve la velocidad de obturación.

Además de todo esto, dedicaremos algunas páginas a explicar con detenimiento los tipos de objetivos que existen según su
distancia focal. Sabremos así qué es un gran angular, un objetivo normal o un teleobjetivo sin olvidarnos de los objetivos zoom.
Todo esto nos llevará a no tener ninguna duda sobre qué objetivo utilizar en cada ocasión.

Nos detendremos también en lentes menos convencionales como son los llamados Ojos de Pez o los objetivos para
macrofotografía.

Siguiendo con el campo de la fotografía a objetos o sujetos muy pequeños, nos encontraremos los tubos o fuelles de extensión y
los anillos de inversión.

Sabremos al finalizar el capítulo qué son y cómo funcionan.

Las Lentes del Objetivo


Los objetivos surgen por la necesidad de perfeccionar y enfocar la imagen en las primitivas cámaras estenopéicas.

Un objetivo es un tubo que dirige el haz de luz hacia el interior de la cámara fotográfica. Este tubo alberga en su interior una
lente o un conjunto de lentes convergentes y divergentes que pueden ser de diferentes materiales. La calidad del objetivo vendrá
determinada por la calidad de estos materiales y la cantidad de estas lentes.

Estas lentes positivas y negativas crean un conjunto de lentes complejo que funciona como una única lente positiva, es decir,
convergente. Las lentes convergentes concentran el haz de luz en un punto formando allí la imagen. Este punto se forma sobre el
plano focal que es donde está la película y se llama Punto focal o simplemente Foco.

Las lentes del objetivo tienen un tamaño, una forma y una posición concreta y determinan el Eje óptico de la misma. El centro
óptico de la lente es el punto de referencia que determinará la distancia focal de nuestro objetivo y que se encuentra muy cerca
del diafragma. El diafragma es el que determina qué cantidad de luz llega al plano focal y que, por lo tanto, formará la imagen.

El funcionamiento de un objetivo se basa en la visión humana pero tiene ciertas diferencias. Nuestra visión es dinámica, es decir,
nuestro cerebro analiza lo que el ojo ve en toda su dimensión, se valora el espacio donde se encuentra el objeto y enfoca los
diferentes puntos de interés.

Al contrario que el ojo, la imagen capturada por los objetivos es estática por eso el ángulo de la toma es limitado.

La distancia focal
La distancia focal es la longitud que hay entre el centro óptico de la lente hasta el punto focal cuando enfocamos nuestro objetivo
al infinito. Esta distancia se expresa en milímetros y es uno de los factores que determina qué el tipo de objetivo es el que
necesitamos usar en cada ocasión.
Cuanto más grande sea la distancia focal mayor será la imagen en un modo proporcional. Esto significa que un objetivo con una
distancia focal de 50 mm produce imágenes el doble de grandes que uno de 25 mm aunque su ángulo de visión será menor.

Estos ángulos de visión pueden ir desde los 5º a los 180º dependiendo del tamaño, grosor y disposición de las lentes.

Este grado de la escena que captan los objetivos está directamente relacionado con su distancia focal y en función de esto se
clasifican.

Los objetivos pueden ser Normales o Estándar, Grandes angulares, Ultra gran angulares, Teleobjetivos o Super Teleobjetivos.

La luminosidad
Una de las cualidades principales por las que los objetivos se distinguen es por la cantidad de luz que dejan pasar al interior de
la cámara.

Los objetivos tienen varias características básicas que determinan el resultado final de la fotografía. Una de las más importantes
es la que llamamos luminosidad.
La luminosidad de un objetivo hace referencia a la cantidad de luz que puede llegar a entrar a través de su lente frontal y que
llegan a la película exponiéndola.

Como ya vimos, la cantidad de luz que pasa por el objetivo depende del Diafragma.

Cuanto más sea capaz de abrirse, más luz entrará. Por lo tanto, los objetivos más luminosos serán aquellos en los que su apertura
de diafragma sea mayor. Siendo esta apertura el diámetro del diafragma situado en el interior del objetivo.

Esta apertura se mide con el Número f/. El número f/ es una escala universal de aperturas que se basa en unidades llamadas
pasos de diafragma. Los valores de esta escala son los siguientes:

En esta escala vemos los pasos de diafragma más utilizados aunque éstos pueden alcanzar valores desde el f/1 hasta el f/64.

Los números crecen a medida que la abertura se hace menor, por tanto f/5.6 es más pequeña que f/4 pero más grande que f/8.

Cada paso dobla o reduce a la mitad la cantidad de luz que entra por el objetivo.

Por ejemplo con una abertura de f/16 la película recibe el doble de luz que con una de f/22 pero la mitad que con f/11.

Un número f/ más bajo, indica una abertura mayor, y un número f/ más alto, indica una abertura menor.
La luminosidad que tiene un objetivo viene impresa o grabada en él y se indica de la siguiente manera: Por ejemplo, tenemos un
objetivo de distancia focal fija 50 mm que tiene la siguiente inscripción 1:1.4. Esto significa que la apertura máxima es de f/1.4,
por lo que podemos decir que nuestro objetivo es muy luminoso.

En objetivos zoom lo común es encontrar dos inscripciones de las aperturas máximas. Por ejemplo, un objetivo zoom con una
distancia focal 18 - 200 mm y la inscripción 1: 3.5 - 5.6 significa que la apertura máxima cuando usemos el objetivo en 18 mm
será de f/3.5 y cuando lo usemos a 200 mm será de f/5.6.

Estas aperturas cambian porque la luminosidad está directamente relacionada con la distancia focal.

La Profundidad de Campo
Descubriremos qué es la profundidad de campo y cuáles son sus posibilidades creativas a continuación.

La profundidad de campo es, según su definición más extendida, la zona que hay, tanto por delante como por detrás, del punto
máximo de enfoque y donde la fotografía todavía es razonablemente nítida. Grosso modo, podemos decir que la profundidad de
campo es la zona enfocada de una imagen.

Tener una imagen con mucha profundidad de campo significa que la zona nítida de la imagen es amplia. Una foto con poca
profundidad de campo nos ofrece muchas zonas de desenfoque y una parte pequeña de nitidez.
Dominar este recurso fotográfico hará que avancemos un paso más en el camino de convertirnos en un buen profesional de la
imagen.

Jugando con la profundidad de campo podemos hacer que la vista del espectador se concentre más en unos puntos que en otros y
podemos resaltar lo que verdaderamente nos interese en ese momento de la escena.

Factores de la profundidad de campo


En la cantidad de profundidad de campo en una imagen intervienen siempre tres factores: La apertura del diafragma, la distancia
a la que está el motivo a fotografiar y la distancia focal del objetivo.

En cuanto a la apertura de diafragma, cuanto más abierto esté éste, es decir, cuanto más pequeño sea el número f/, menos
profundidad de campo tendrá.

Por el contrario, a medida que vamos cerrando el diafragma, es decir, aumentando el número f/, la profundidad de campo se irá
haciendo mayor y la zona nítida irá creciendo proporcionalmente. Obtendremos como resultado una imagen con más
profundidad de campo cuanto menos luz entre por el diafragma.
Por otra parte, para obtener imágenes con mayor profundidad de campo teniendo en cuenta la distancia focal debemos trabajar
con objetivos que ofrezcan distancias focales cortas. Cuanto mayor sea la distancia focal, menor será la profundidad de campo.

Combinando todos los factores podemos obtener profundidades de campo aún mayores o menores.

Los objetivos normales


En función de su ángulo visual, los objetivos se clasifican en diferentes categorías. Revisaremos los objetivos estándar o
normales en esta página.

Consideramos objetivos normales a los que tienen una distancia focal aproximada a los 50 o 55 mm. (para formato 35m m.)
Estos objetivos se llaman normales ya su separación de planos es similar a la del ojo humano.

Este ángulo es el resultado de combinar la longitud focal de los objetivos con el formato que tiene nuestra cámara.

Las fotos resultantes utilizando este tipo de objetivos estándar son bastante similares en perspectiva y tamaño a lo que nuestros
ojos ven.

Este tipo de objetivo ni reduce ni amplía la realidad por lo que son bastante utilizados por los fotógrafos.

Se caracterizan por la poca distorsión y la naturalidad que ofrece en la perspectiva, excepto en la toma fotográfica realizada
desde muy cerca. Estos objetivos, a su vez, son los que se suelen fabricar con mayores aperturas de diafragma por lo que son
muy luminosos.
Este tipo de objetivos son los que solían llevar incorporados las cámaras analógicas tradicionales, no sólo por su similitud con el
ojo humano sino porque su fabricación resultaba más barata.

Hoy en día suelen utilizarse para fotografiar situaciones generales en las que los sujetos y objetos deban mantener sus
proporciones reales.

Objetivo Gran Angular


Los objetivos del tipo gran angular son ideales para fotografiar un área muy extensa de un paisaje.

Llamamos objetivo gran angular a aquel que abarca focales inferiores a la conocida como estándar o normal (50 mm) y que tiene
un ángulo de visión superior a los 45º.

Por lo tanto, los objetivos gran angulares cubren cualquier plano de extensiones amplias que se encuentre delante de la cámara.

Cuanto más se reduce la distancia focal en un objetivo, el ángulo de visión cubierto va aumentando. Esto provoca que la
sensación de alejamiento sea mayor también.

En la visualización a través de estos objetivos los objetos más cercanos se aprecian exageradamente grandes, mientras que los
más distantes parecen trasladados o empujados hacia atrás y más pequeños de lo son realmente.

El uso más extendido de los grandes angulares se da en la fotografía de paisajes relegándose bastante su uso en retratos.

Esto es debido a 2 principales motivos. El primero es obvio, al tener un ángulo de visión tan grande, capta más parte de la
escena, cosa que es preferida en este tipo de fotografías.
El segundo motivo es una de las principales desventajas de los angulares. Ésta es la distorsión que provocan. Esta distorsión no
sólo se produce en el tamaño de los objetos y en su distancia sino también en su forma.

Ésta es más pronunciada en los bordes de la imagen y también cuanto más corta sea la distancia focal y la distancia al objeto o
sujeto en la toma.

Los Teleobjetivos
Para fotografiar motivos que están a grandes distancias lo mejor es un teleobjetivo.

Los teleobjetivos son aquellas lentes que abarcan focales superiores a las focales estándar o normales. Existen tres tipos de
teleobjetivos en función de su longitud focal. Éstos pueden ser cortos, medios o largos.

Los teleobjetivos cortos tienen una distancia focal que oscila entre los 70 mm y los 200 mm para una película de paso universal
o 35 mm.

Los medios van desde 200 a 400 mm y finalmente los largos o super teleobjetivos tienen longitudes focales de 400 mm en
adelante.
El ángulo de visión de los teleobjetivos es mucho más estrecho y sólo podemos encuadrar una pequeña parte de la toma real que
estamos viendo. Estos objetivos eliminan los elementos sobrantes que se encuentra alrededor del centro de interés.

Se utilizan, por lo general, para acercar un motivo, por muy lejano que se encuentre.

Al usar teleobjetivos tenemos la impresión de que los elementos se encuentran más cerca unos de los otros de lo que percibimos
con los ojos. Podemos incluso llegar a perder la referencia del espacio que hay entre ellos y verlos amontonados.

Este tipo de lente es ideal para fotografiar naturaleza, deportes o actividades al aire libre. Esto es debido a que tienen una
profundidad de campo muy reducida y centran perfectamente la atención en el objeto o sujeto elegido.

Cuanto más aumentemos la distancia focal, el ángulo de visión será más estrecho y la profundidad de campo será menor por lo
que perderemos la nitidez en el fondo de la escena.

El principal defecto de estas lentes es que necesitan películas de alta sensibilidad debido a su poca luminosidad y, por lo general,
también, el uso de trípode ya que, además de evitar con él el movimiento en la imagen, aguantaremos su elevado peso.

Los Objetivos Zoom


Los objetivos zoom se caracterizan por tener diversas distancias focales que podemos ir modificando con rapidez.

Las distintas distancias focales de los objetivos zoom se consiguen cuando accionamos un mecanismo interno a través de un aro
de giro que rodea al objetivo. Este mecanismo consigue reordenar las lentes haciendo que la longitud focal sea mayor o menor.

Como ocurre en el resto de objetivos, a mayor distancia focal, el ángulo de visión será más estrecho, reduciéndose el espacio de
la escena a capturar.

Varifocal y Parfocal
Los objetivos zoom pueden ser de dos tipos en función de sus lentes, pueden ser varifocales o parfocales.

Los objetivos parfocales son aquellos que mantienen el punto de enfoque sea cual sea su distancia focal. Es decir, si enfocamos
en la distancia focal máxima, no habrá que volver a enfocar a medida que vamos reduciendo la distancia focal.

En los zoom varifocal hay que ir corrigiendo el enfoque a lo largo de todo el rango de distancias focales

Esta clase de objetivos es uno de los más utilizados por los profesionales fuera del estudio ya que son cómodos de usar.

Los objetivos zoom se clasifican también como: Teleobjetivos zoom, grandes angulares zoom o macros zoom.
Como desventaja principal nos encontramos que suelen ser más grandes y pesados que los de focal fija. Además de que no
suelen ser muy luminosos. La apertura más habitual suele ser entre f/4.5 o f/5.6. Existen modelos bastante luminosos en los que
su precio se dispara.

Como principal ventaja, la comodidad de no tener que ir cambiando constantemente de lente cuando estamos en una situación
muy variada que requeriría de distintos tipos de objetivos de focal fija.

Los objetivos todoterreno


Existen en el mercado objetivos que abarcan un amplio rango de distancias focales. Desde las distancias propias de los grandes
angulares hasta las propias de los teleobjetivos.

Estos objetivos son conocidos con el nombre de todoterrenos.

Su principal ventaja es que no hay que cambiar constantemente de objetivo en situaciones que necesitamos usar todas las
distancias focales posibles.

Como desventaja está la merma de su calidad con respecto a los objetivos con focales fijas.

Aunque existen modelos de muchos rangos focales, el más habitual es un objetivo 18-200 mm.

Ultra Gran Angular


Los objetivos gran angulares con más ángulo de visión son conocidos como Ojos de Pez.

Dentro de los objetivos gran angulares existe un rango de ellos llamados Ultra Gran Angular o Super Gran Angular y los
objetivos Ojos de Pez.
La principal característica de estos objetivos es el ángulo de visión que abarcan llegando a ser superior a 180º en el caso de los
ojos de pez.

Los Ultra Gran Angulares y los Ojos de pez a menudo son confundidos pero no son lo mismo.

La principal diferencia entre ellos es que los Ojos de Pez devuelven, necesariamente, fotos con las líneas rectas distorsionadas y
los Ultra Gran Angulares no tienen por qué. De hecho, la distorsión de los objetivos Ojos de Pez es deliberada mientras que en
los Ultra Gran Angulares la distorsión se busca por el fotógrafo con fines artísticos.

Ojos de Pez Circulares o Diagonales


Los objetivos ojos de pez circulares capturan una vista de 180º completa en todas direcciones y dan como resultado una imagen
que concentra toda la información en un círculo central y que, normalmente, deja los bordes negros.

En los ojos de pez diagonales o full frame, ese ángulo de visión de 180º se captura a lo largo de la diagonal de la película o
sensor. Aunque no captan una imagen tan angular como los ojos de pez circulares, las fotos resultantes no tienen los bordes
negros y no resultan tan artificiales.

Para ambos tipos de objetivo se recomienda acercarse al motivo a fotografiar lo más posible. Con ello conseguiremos dar la
sensación de estar dentro de la fotografía y el uso de ultra grandes angulares y de ojos de pez cobrará más sentido.
Objetivo macro
La macrofotografía nos acerca a los objetos y seres más pequeños. Conozcamos los objetivos que nos ayudan a ello.

Se llama Objetivo Macro a un objetivo que tiene la capacidad de enfocar a distancias muy corta. Esta capacidad permite
también reproducir el tamaño real de los objetos o sujetos fotografiados. Es decir, los elementos ocuparán en el negativo, como
mínimo, el mismo tamaño que ocupan en la realidad. Esto significa que tendrán una relación de aspecto de 1:1.

Este tipo de objetivos son los que llamamos Macro reales. También existen lentes que ofrecen relaciones de aspecto superiores,
2:1, 3:1, etc. Por el contrario, encontramos los llamados "Falso Macro" que tienen relaciones de aspecto 1:2, 1:4, etc. Esto
significa que no amplía el total del original, sino la mitad o una cuarta parte.

La distancia focal de los objetivos macro oscila, normalmente, entre los 50 y los 200 mm. Elegiremos la longitud focal en
función de las necesidades que tengamos y las posibilidades de fotografiar la escena deseada más o menos cerca.

La profundidad de campo se ve muy reducida al tener que acercarnos tanto a los objetos para poder enfocarlos. Para compensar
esto, los objetivos macro reales suelen tener un diafragma capaz de cerrarse hasta f/32.

Este cierre de diafragma nos obliga a usar velocidades de obturación muy lentas por lo que será difícil obtener una buena toma
sin un trípode o si tenemos delante un motivo en movimiento.

A veces, será necesario el uso de flashes especiales para este tipo de fotografía.
Son ideales para realizar fotografías de naturaleza, flores, insectos, y también para fotografía de producto o de objetos pequeños
como sellos o monedas.

Fuelles y tubos de extensión


Los tubos o anillos y los fuelles de extensión son un complemento de los objetivos con el que podemos hacer fotografía de
aproximación.

Aunque los tubos de extensión y los fuelles de extensión no son lo mismo funcionan de manera similar. Ambos se interponen
entre el objetivo y el cuerpo de la cámara para aumentar la distancia entre el motivo a fotografiar y el plano focal.

Con ello conseguimos reducir la distancia mínima de enfoque y, como consecuencia, el sujeto u objeto fotografiado, ocupará
más espacio en la película o sensor.

Anillos o tubo de extensión


Los tubos o anillos de extensión son cilindros huecos que en un extremo tienen la montura para la cámara y en el otro la montura
para el objetivo.

Estos anillos pueden ser de 3 tamaños, 12, 20 o 36 mm, los más habituales, y pueden combinarse entre sí lo que nos daría una
distancia total de 98 mm si usamos los 3 juntos. También existen modelos con una combinación de tamaños de 13, 21 y 31 mm.

También pueden tener un funcionamiento manual o automático. Los anillos manuales no tienen mecanismos para que la cámara
reciba los datos del objetivo por lo que perdemos la comunicación con ésta y por lo tanto la información que ésta nos da con
respecto a la apertura de diafragma o al enfoque.
Los anillos automáticos en cambio sí están dotados de mecanismos con los que poder transferir los datos del objetivo a la
cámara.

Fuelles de extensión
Los fuelles de extensión tienen un funcionamiento similar al de los tubos de extensión con la importante diferencia de que la
separación de la cámara y el objetivo es ajustable gracias a ese fuelle.

Al igual que con los tubos de extensión, los fuelles pueden conservar los automatismos de la cámara o no. Los que lo conservan
tienen un precio mucho más elevado que los que no.

Los fuelles de extensión traen una clavija para insertarle un cable disparador doble. Estos disparadores accionan el diafragma y
el obturador a la vez por lo que podemos enfocar con el diafragma abierto y cerrarlo para disparar .

Tanto los tubos como los fuelles tienen como principal desventaja la disminución de la luminosidad y la dificultad de tomar
fotos sin trípode o a sujetos que se estén moviendo.
Anillos inversores
Los Anillos de Inversión permiten montar los objetivos de manera invertida en el cuerpo de la cámara.

Una de las maneras más sencillas y económicas de introducirnos en el mundo de la macrofotografía o fotografía de
aproximación es a través de los anillos de inversión. Un anillo inversor no es más que un adaptador que nos hace posible que un
objetivo se ponga al revés en la cámara.

De este modo reducimos la distancia mínima de enfoque pudiendo acercarnos más al objeto a fotografiar y consiguiendo que
éste ocupe más espacio en la película o sensor de la cámara. Así conseguimos que en la imagen final el motivo vea aumentado su
tamaño.

Estos anillos por un lado tienen una rosca y por el otro lado el mismo sistema de montura de la cámara.

Con la montura se acopla el anillo a la cámara y se enrosca la parte frontal del objetivo a la otra parte del anillo. Así el resultado
será tener una cámara con la lente invertida.

Esto consigue convertir un objetivo convencional en uno macro ya que la imagen se forma en un tamaño mucho mayor en el
plano focal.

Como principal desventaja de este sistema para fotografía de aproximación es la pérdida de los controles mecánicos del objetivo
en cuanto a enfoque y apertura de diafragma.
También es posible utilizar esta técnica con dos objetivos unidos entre sí con este anillo de inversión.

Mientras un objetivo está unido a la cámara de modo convencional el otro hace las veces de lente de aproximación.

Se recomienda utilizar objetivos de focal fija con los anillos de inversión y conviene recordar que cuanto más angular sea la
lente, es decir, cuanto más pequeña sea su distancia focal, mayor será el aumento del objeto. Como norma, con un objetivo de 50
m m. se consigue una relación de aspecto de 1:1 mientras que con un 28 m m. podemos alcanzar 2:1 de ratio.

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