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AMAR A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS

ÉL SÍ DE FIDELIDAD Y DEL AMOR: El SÍ de fidelidad y del amor, consiste en cumplir y observar la


Ley de Dios, desde que el hombre tenga uso de razón, por ser hijo de Dios. El SÍ que debe dar cada
hombre, no debe ser de palabra sino de obra, guardando la ley de Dios. Mientras guardemos los
mandamientos y nos portemos bien, estamos dando al Señor el SI de fidelidad y amor.
Para confirmar esto, traemos a la memoria estas palabras del señor: “No todo el que dice: Señor,
Señor, entrará en el reino de los cielos, si no el que hace la voluntad de mi Padre.”

El hombre puede y debe aumentar el amor y fidelidad, mediante las buenas obras, obedeciendo a
la Ley Divina, conservando la gracia de Dios en su alma. Alimentando su alma con los Sacramentos dignamente recibidos.

OBLIGACIONES PARA CON DIOS Y EL PRÓJIMO:


1.- Para con Dios: El hombre racional está obligado a rendirle un culto y de amarlo porque lo merece, ya que el nos ama infinitamente y
nos da todo lo que necesitamos par ala vida corporal y espiritual. Estas obligaciones están contenidas en la observancia de los
Mandamientos de Dios y la Iglesia.

2.- Para con el prójimo: Los fariseos le preguntaron a Jesús: “¿Cuál es el Mandamiento más grande de la Ley? “, Respondiendo a esto Jesús
que el primero era amar a Dios sobre todas las cosas y el segundo amar al prójimo como a uno mismo. Amar al prójimo es desearle todo
bien material y espiritual, porque todos somos hijos de Dios. Prestarles servicios según las posibilidades. Consolarle en la penas y miserias
de la vida. Darle buenos consejos y ejemplos, Ser comprensibles y tolerantes.

EL CULTO: Es toda manifestación que hace el hombre y en esto implicamos las palabras, actos, gestos hacia una persona por su dignidad.
Adorar a Dios es apreciar y respetar todo lo prescrito en su ley.

CLASES DE CULTO:
Culto Supremo o de Latría: Se llama también de adoración y pertenece únicamente a Dios. A El le rendimos esta clase de culto en
reconocimiento a su soberano y excelencia.
Culto de Hiperdulía: Esta clase de culto se rinde a María Santísima, por ser madre de Dios. Es un culto especial.
Culto de Dulía: Se rinde este culto a todos los santos que están en la bienaventuranza y han sido canonizados por la Iglesia Católica.

El Culto Externo: Pueden ser públicas y privadas:


Culto Público: Llamamos así al culto que el hombres realiza públicamente, mediante actos externos. Ej. Los actos que realizamos en los
retiros Espirituales, que son: El rezo del Santo Rosario, El Vía Crucis, Las Procesiones, La Santa Misa, etc.
Culto Privado: Se rinde a Dios de una forma privada o particularmente. Ej. Nuestras Oraciones al levantarse y al acostarse, cuando lo
rezamos a Dios en la capilla, etc.

DEBERES QUE COMPRENDE EL PRIMER MANDAMIENTO: Son cuatro


1.- Creer en Dios.
2.- Esperar en Él.
3.- Amarle sobre todas las cosas.
4.- Darle el culto debido.

¿Qué nos prohíbe el primer mandamiento?


Adorar ídolos o dioses falsos o creer en ellos.
Creer alguna cosa contra la fe, o dudar de alguno de sus misterios, o ignorar los necesarios.
Desconfiar de la misericordia de Dios.

Práctica de las virtudes Teologales:


Para amar debidamente a Dios y amarle sobre todas las cosas, hemos de practicar las virtudes teologales, la fe, la esperanza y la esperanza,
especialmente la fe, creer en Dios, pues si no creyéramos en El ¿cómo podríamos esperar en El y amarle?

CONTRARIAS A ESTAS VIRTUDES SON:


La duda; respecto a Dios, que consiste en la vacilación en el creer.
La incredulidad; que es el menosprecio de la verdad revelada, ya sea por la herejía, la apostasía; la desesperación y la presunción; la
indiferencia, la tibieza, y el odio a Dios. La superstición, la idolatría: politeísmo, satanismo; la adivinación y la magia o hechicería y el
espiritismo; la irreligión: tentar a Dios, sacrilegio, simonía: el ateísmo, y el agnosticismo.
La Infidelidad: Es la carencia total de fe en los no bautizados.
La Herejía: Es la negación de una o varias verdades de la fe por quién está bautizado.
La Apostasía: Es la negación de todas las verdades reveladas. A estos pecados hay que añadir otros modernos contra la fe.
La Indiferencia: Es lo que viven muchos de los que dicen que todas las religiones son buenas y en realidad no practican ninguna.

La pérdida de la fe que puede tener lugar por un error culpable. Se puede recobrar por el arrepentimiento del pecado cometido contra ella.
Las personas para mantener su fe deben frecuentar la lectura de la Biblia y practicar las enseñanzas de la Iglesia.

ACTIVIDADES:
1. Elabora un cuadro de doble entrada de lo que manda y lo que prohíbe el primer mandamiento.
2. Escriben y estudian la pregunta de la separata
3. Formulan su compromiso de vida.

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