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2002
Roberto Rebolloso Gallardo
ORÍGENES DE LA CIENCIA EN NUEVO LEÓN
Ciencia UANL, enero-marzo, año/vol. V, número 001
Universidad Autónoma de Nuevo León
Monterrey, México
pp. 8-17
Línea de tiempo
Orígenes de la ciencia
en Nuevo León
Roberto Rebolloso Gallardo*
de pensamiento escolástico, por un El despotismo ilustrado hispano lismo mexicano, según el mismo Hale,
lado la línea franciscana con Duns fue el predominio de un Estado fuerte
Scoto a la cabeza y, por el otro lado, De acuerdo con José Miranda (1962), en el sector político, apoyado en un
la línea jesuita que estaba más cerca- el despotismo fue una de las corrien- régimen económico de individualismo
na al dominio de la razón. tes más influyentes en Nueva Espa- sin trabas» (1972, p. 310).
ña. Este sistema, promovido por Car-
Enciclopedismo francés los III, era una cultura refinada pro- El positivismo
tectora de las artes, pero limitada su
Esta escuela tiene su origen en la obra influencia a una pequeña minoría y Se inicia con Augusto Comte (1798-
L’Encyclopédie de Denis Diderot con poco interés de que llegara a las 1857) en su Cours de Philosophie
(1713-1784). Fue creada con el afán masas. positive. Aquí lo más importante del
de divulgar el saber científico. En el saber lo constituyen los hechos
fondo se trata de aclarar las cosas y La filosofía moderna o física ex- comprobables, por lo que la ciencia
disolver el error. Refleja el ambiente depende de la observación exacta. Su
perimental
de la época, además de un odio ex- influencia se da en casi toda la cien-
tremo al cristianismo. Se puede decir cia y en la filosofía moderna. En In-
Este nuevo tipo de saber rompe con
que es la base teórica de la Revolu- glaterra sus principales representan-
el esquema tradicional del conoci-
ción Francesa. tes son John Stuart Mill (1806-1873)
miento medieval, gracias a un nuevo
y Herbert Spencer (1820-1903). En
paradigma: la ciencia físico-matemá-
México su mejor difusor es Gabino
tica. En este sentido la naturaleza
Barreda, quien introduce el positivis-
puede ser conocida con mayor pro-
mo en México.
fundidad, gracias al giro experimental
Francisco Ruiz Solís, en su artí-
que tomó con Galileo, Descartes, Fran-
culo «Apuntes para la historia del pen-
cis Bacon, Thomas Hobbes (1588-
samiento científico de Nuevo Léon»,
1679) y John Locke (1632-1704).
ensaya una cronología, primera en su
género, de los intelectuales y científi-
El liberalismo económico cos de estas épocas hasta el presen-
te, por lo que a finales del siglo XIX se
Según Charles A. Hale, el liberalismo, concentra en desglosar el papel que
en el caso de México, floreció a partir tiene el positivismo y su impacto en
de 1830 y como una reacción a las el contexto educativo.
corporaciones privilegiadas. Éste se Bien sabemos que el positivismo
derivó de Helvetius (1715-1771) y en México ha sido ampliamente estu-
Bertham, quienes proponían que los diado por Leopoldo Zea (1968) y ha
propios individuos buscaran en su sido una tendencia filosófica que ha
utilidad la razón de su existir. En el influenciado a intelectuales y científi-
fondo «el rasgo distintivo del libera- cos desde la mitad del siglo XIX hasta
nuestros días. Para entender esta ten- El evolucionismo no fueron ajenas las nuevas ideas de
dencia, en el caso de Nuevo León, es la ilustración y el enciclopedismo»
necesario revisar a los clásicos para A finales del siglo XIX se puede en- (1993, p 25). Es importante apuntar
ver que subyace en autores como contrar un incipiente corriente filosó- que su biblioteca es la mejor eviden-
Rafael Garza Cantú, autor de Algunos fica que cobraba auge con la publica- cia de un trabajo académico incipien-
Apuntes acerca de las letras y la cul- ción de El Origen de las Especies de te.
tura de Nuevo León (1910). Expone Carlos Darwin (1809-1882) en 1859. El modelo educativo naturalmen-
de manera erudita y enciclopédica lo Fue tanto el éxito que para 1876 ya te estaba centrado en la enseñanza
que había sido el desarrollo de la cul- se habían vendido 16,000 ejempla- de una filosofía escolástica, donde se
tura en los últimos 100 años, fincando res tan sólo en Inglaterra. Obra tradu- vetaban o rechazaban avances cien-
su atención en los poetas y prosistas, cida al español en 1876 empieza a tíficos que se daban por ese tiempo
por lo que automáticamente deja de estar presente en la enseñanza de las en Europa y que por consecuencia
lado la producción científica. ciencias en el Colegio Civil, según se vienen a impactar años más tarde,
Cavazos señala en su obra sobre puede descubrir en las publicaciones según lo certifican algunos estudio-
el Colegio lo siguiente: «El 12 de agos- de la época. sos de la época (Fortes, 1991, p. 20;
to de l886, se expide la Ley de Ins- Miranda 1962).
trucción Pública. A proposición suya, José María Parás, gobernador de
se hacen cambios notables, en el capí-
Las primeras Nuevo León, establece la primera cá-
tulo de enseñanza de preparatoria. Él instituciones académicas tedra de medicina en l826. La funda-
introduce los racionales y filosóficos ción del hospital del Rosario en 1793
programas implantados por Gabino El Colegio Seminario es de enorme trascendencia para el
Barreda y que están basados en las desarrollo de la medicina en el norte
doctrinas educacionales de Augusto Las diferentes monografías sobre la de México (Muriel, 1991, p. 211 y
Comte. Por vez primera se adoptan historia de Nuevo León señalan como 55). «El 27 de febrero de 1826, en
en Monterrey los planes de estudio de la primera institución formativa cul- Decreto provisional número 73 que-
la Escuela Nacional Preparatoria» tural al Real y Tridentino Colegio Se- dó autorizada la fundación de una
(1957 p. 91). minario de Monterrey. Institución aca- escuela Médico-Quirúrgica en Mon-
Gabino Barreda implanta el posi- démica fundada por Andrés Ambrosio terrey» (Aguirre Pequeño, p. 12). Sin
tivismo en la Escuela Nacional Pre- de Llanos y Valdez en 1792, según embargo, ésta se da hasta dos años
paratoria en 1867, corriente a la que lo señalan diferentes autores (Tapia más tarde al ser contratado el Dr.
naturalmente el Colegio Civil se incor- Méndez, 1976, p. 58). Lugar donde Pascual Constanza, quien resulta ser
pora y que años más tarde es critica- se enseñaba latín, retórica, aritméti- un problema por su falta de seriedad
da por las ideas del Ateneo de la Ju- ca, álgebra, filosofía, derecho canó- en la enseñanza de la medicina se-
ventud. Abelardo Villegas desarrolla nico y civil, además de tener el mo- gún relata Martínez Cárdenas (l989,
un excelente capítulo sobre el asunto nopolio de la enseñanza, Flores de pp. 29-31). Aunque en palabras de
(1993, pp. 36-59). Nuncio señala que «Al impulso que David Alberto Cossío «El proceso cien-
significó el Seminario Tridentino para tífico de más importancia dado en
la cultura en el Nuevo Reino de León, Nuevo León, en medio de una vida
azarosa de escasez y de guerra, fue La importancia de señalar las bo- Además de las cátedras de filoso-
indudablemente el establecimiento de ticas como evidencia de la ciencia en fía, psicología, lógica, metafísica, fi-
la cátedra médico-quirúrgica del Dr. Nuevo León es importante por las si- losofía moral y francés, se ofrecen
Pascal Constanza. Puede verse, en guientes razones: cursos de medicina operatoria y obs-
voluminoso expediente del año de · Las boticas, así como las apote- tetricia, anatomía, fisiología, física,
1829, todo lo relativo al proyecto de cas, eran centros de acopio de farmacia y botánica. Entre los profe-
fundación y sus dependencias, con- substancias y materiales médicos sores cabe destacar particularmente
sistentes en una huerta botánica, un que ayudaban a mejorar la salud al Dr. José Eleuterio González, al Dr.
anfiteatro anatómico, y una santa clí- de la gente. Ignacio Garza García, al Lic. Juan N.
nica». (Tomado de Aguirre Pequeño · El uso de la herbolaria tradicional de la Garza y Evia, Manuel Ma. de la
p. 15). o medicamentos tradicionales de Garza. Aquí cabe resaltar el importante
Se puede afirmar, sin lugar a du- la región ayudan al desarrollo de papel que juega el Lic. don José de
das, que el Dr. José Eleuterio Gonzá- la medicina sujeta a prueba y error Jesús Dávila y Prieto (Rangel Frías,
lez es quien viene a ser realmente el en términos médicos. 1984, p. 13).
primer enseñante de las ciencias mé- · Como centros de experimentación Quizá la enseñanza de la medici-
dicas y farmacéuticas, además de ser de nuevos medicamentos apare- na sentó las bases para que la co-
un excelente cirujano. Aquí cabe se- cidos en otras latitudes. rriente de moda, el positivismo, poco
ñalar que Gonzalitos había sido for- a poco se impusiera sobre la escolás-
mado inicialmente en la tradición El Colegio Civil tica. Además de considerar el giro que
científica del occidente de México, por dio el conocimiento experimental
lo que es fácil vincularlo a otro cientí- Gerardo de León señala como año de como la nueva forma de explicación
fico de igual calibre: Leonardo Oliva, fundación el año 1857 (1990, p. 54). de todo; el modelo de enseñanza fue el
de Guadalajara. (Kumate, 1984, p. Esta institución fue el punto de arran- ofrecido por el Colegio de Minería, que
363). que de la educación científica. Gra- había empezado en la ciudad de Méxi-
Con la llegada de Gonzalitos y cias a la visión de un personaje tan co en 1792 (Izquierdo, 1958, p. 8).
otros médicos se inicia propiamente determinante en la cultura de Nuevo
el desarrollo de la medicina como León, como fue el Dr. José Eleuterio El Colegio Civil
entidad científica, ya que anteriormen-
te los ciudadanos norestenses esta-
González, lo que nos lleva a conside- y la evidencia científica
rar que Monterrey para ese momento
ban expuestos, en su mayoría, a cu- ya empieza a tener un clima científi-
randeros y charlatanes. A la par de sus cátedras, la biblioteca
co, por lo que esta institución acadé- del Colegio se integra con los fondos
En ese sentido la creación de la mica viene a llenar un vacío y ade-
cátedra de farmacia impulsó la apari- del antiguo Seminario, en especial los
más, sin sustituirlas, abre una puerta de derecho y medicina. Sin embar-
ción de boticas hacia l866. De he- a otras corrientes de pensamiento di-
cho, Martínez Cárdenas asienta en su go, la evidencia en torno al contenido
ferentes a las enseñadas en el Co- de su acervo sigue siendo muy pobre
libro, arriba mencionado, 12 boticas legio Seminario (donde se enseñaba
reconocidas por el Estado (pp. 46 y en sus primeros años (Flores, 1993,
la escolástica). p. 38).
47).
Colegio Civil, publicado en el año de De este modo García Naranjo nos o enfermedades que atacan al orga-
l957, por los talleres de El Porvenir, expresa, cincuenta años después, lo nismo humano. El maravilloso arse-
hace un recuento del estado científi- que sucedía a finales del Siglo XIX en nal de instrumentos y aparatos, de
co del Colegio, gracias a la visita de la institución educativa más importan- sustancias y compuestos químico-bio-
un funcionario público que pidió le te del Norte de México. La ciencia lógicos, que el arte ha puesto en ma-
mostrara las instalaciones, y ya en el estaba en un proceso de continua re- nos del actual profesionista, han he-
recorrido, el mismo autor, después de petición y casi nada de investigación cho su lucha en contra de la enferme-
mostrar la biblioteca con sólo dos es- experimental. dad más eficaz y ventajosa” (p.288).
tantes de libros, relata lo siguiente: Por otro lado, habría que consi-
-Tenemos, señor, un gabinete de derar el profesorado con que contaba Sociedades científicas
Física, un Laboratorio de Química, un la institución en el ocaso del siglo XIX
Museo de Historia Natural y un Ob- y principios del XX, según el mismo Un término aplicado a las organiza-
servatorio Meteorológico, pero temo García Naranjo lo expresa en sus ciones formales en las que se incor-
señor que vaya usted a encontrar muy Memorias. Entre lo que cabe desta- pora la actividad científica, de acuer-
pobres nuestros equipos. car, gente de las profesiones libera- do con la tradición científica de otros
-Vamos a verlos, -me dijo, levan- les (jurisprudencia, medicina, ingenie- países como Francia (Academie de
tándose de su asiento- y yo le fui lle- ría o farmacia), por otro lado, las mis- Sciences), Alemania, Inglaterra (Royal
vando por los departamentos mencio- mas asignaturas básicas que se en- Society) y Estados Unidos de Améri-
nados, que le produjeron una impre- señaban trigonometría, cosmografía, ca; las instituciones científicas eran
sión deplorable. literatura, raíces griegas y latinas, las que difundían la ciencia, además
Los aparatos de física le parecie- dejaba poco espacio para el manejo de ser los nodos que facilitaban la co-
ron adecuados para una escuela ele- experimental de otras disciplinas municación entre científicos. En Méxi-
mental: llamó al laboratorio de quí- como la física, la botánica y la misma co, hasta después de la Reforma se
mica un amontonamiento de botes sin química. fundan institutos y sociedades cientí-
importancia. Por otro lado, el Dr. Daniel Mir, ficas, por ejemplo, la Sociedad Cien-
-Cada alumno -me dijo- debería en su libro Monterrey habla entrevis- tífica Humboldt, fundada en 1862
tener su mesa especial, y hacer indi- ta al Dr. Atanasio Carrillo, médico de (Fortes, 1991 p. 20).
vidualmente sus experiencias; y aquí, larga trayectoria, quien expone sus No es así para nuestro caso don-
por lo que veo, el profesor es el único impresiones sobre el desarrollo de la de más bien parecían clubes de ami-
que experimenta, y los discípulos se medicina: gos interesados en asuntos científicos
limitan a ver. ¡Así no se estudia quí- “El desarrollo de la ciencia médi- y además de su corta duración. El mo-
mica en una escuela superior! ca en el estado data de la época en delo de sociedad que se funda en
El Museo de Historia Natural y el que yo intervine en ella, en l888. Ha México tiene semejanza al Ateneo
Observatorio Meterológico le parecie- destacado sobre todo por la aplica- científico, literario y artístico de Ma-
ron peores, y así por el estilo, despec- ción del numeroso y notable material drid (1885) donde se combinaba la
tivamente y con descarnada franque- de investigación para el conocimien- ciencia con la creación literaria y ar-
za, se expresó del Colegio Civil. (pp. to de las causas y efectos reales que tística (Villacorta, 1985). En realidad,
216-217)». intervienen en las diversas dolencias
la primera institución científica pare- método más moderno hasta entonces, logías existentes en otras latitudes y muy
ce haber sido fundada en 1865. En el sistema Pattison (p. 84). Para un poca o casi nada de generación de tec-
la tabla II se hace una relación de las estudio más amplio ver Modesto Bar- nología a nivel local (p. 9-21).
principales sociedades científicas en gallo (1969) La amalgación de los
Monterrey, de 1865 a 1942, de minerales de plata en hispanoamérica Los orígenes de la
acuerdo a diversas fuentes documen- colonial, México, Compañía Fundidora
tales. de Monterrey Fierro y Acero.
Universidad de Nuevo León
Por otro lado, en el sector textil se
A principios del siglo XX no hay cam-
Ciencia y tecnología puede encontrar una referencia seme-
bios sustanciales en términos gene-
jante en Marron, quien estudia los orí-
en Nuevo León genes de la sociedad industrial de rales; sin embargo, la infraestructura
Coahuila, y donde apunta lo siguien- científica es mayor. Por otro lado, la
La industria minera y textil te con respecto a la fábrica de la Bue- presencia del Dr. Atanasio Carrillo
na Fe: «La maquinaria es de la más mantiene un nivel que es envidiable
La industria del siglo XIX no ofrece moderna, construida en Inglaterra: y que viene a desembocar en la fun-
datos de desarrollo científico, dado están montados trescientos telares y dación de la Universidad de Nuevo
que por lo general la industria mine- sus correspondientes aparatos de pre- León. La universidad, fundada en
ra, agrícola, textil e industrial depen- paración e hilados; y se están prepa- 1933 por decreto oficial del Gobierno
dían absolutamente de la tecnología rando doscientos telares más, cuya del Estado, según el Diario Oficial del
adquirida en Europa y Estados Uni- instalación quedará terminada para fin 7 de junio 1933, de acuerdo con la
dos. De acuerdo con lo planteado por del presente año» (p. 70). información disponible la primera
O. Flores, hablando de la industria universidad se termina el 28 de sep-
tiembre de 1934. Estos años fueron
minera en el siglo XIX, señala lo si- Adaptación tecnológica
guiente: «ya para esos años, Nuevo cruciales para la fundación de la uni-
León tenía haciendas de Beneficio versidad, ya que sirvieron de prepa-
El trabajo de Juan Ignacio Barragán ración para la segunda fundación de
(primitivas fundiciones), conforme a «Empresarios del norte e importación
los mejores y más modernos méto- 1943. Autores como Gerardo de León
de tecnología a principios del siglo Torres, Rodrigo Mendirichaga, Santia-
dos de fundición: los principales eran XX», es muy elocuente en este senti-
dos: la denominada El Progreso en go Roel son bastante claros sobre el
do, ya que establece las modalidades asunto.
Santa Catarina, a pocos kilómetros de utilizadas en particular por un grupo
la ciudad de Monterrey; y la de San En este periodo, de acuerdo con
empresarial para la adquisición de los informes de Rectoría publicados
Pedro a poca distancia del Sur. La tecnología, las que estaban basadas
primera tenía seis y la segunda cua- en la revista Universidad, existen po-
en las exposiciones industriales, via- cas referencias de investigación rela-
tro hornos de patente alemana, con jes de negocios, redes de contactos
máquinas hidráulicas de soplo. En cionados con las ciencia. Para 1944,
de negocios. Por lo que esto nos con- según consta en el informe del rector,
todas ellas se procuraba afinar el duce a considerar que en el desarro-
metal, para aprovechar la plata que aparecen las primeras referencias so-
llo científico y tecnológico es más el bre la actividad científica.
pudiese tener. La primera seguiría el bien resultado de adaptación de tecno-
14 CIENCIA UANL / VOL. V, No. 1, ENERO-MARZO 2002
ROBERTO REBOLLOSO GALLARDO
Enciclopedismo 1775-1800 Sin nombre (6) 1896 Antonio Morales, Felipe Gue-
rra Castro, Héctor Lozano,
Filosofía moderna o física experimental 1780 Osvaldo Sánchez y Lorenzo
Palau
Liberalismo económico 1830-1853 Sociedad Científico-Literaria 1899 Santiago Roel Melo, Héctor
(1) (4) González, Joel Rocha y
Positivismo 1867-1910 Dr. José Eleuterio González Fortunato Lozano
(5)
Evolucionismo 1879
Sociedad Científico-Literaria 1900-1904
Renacimiento (2)
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