TRANSMISIÓN Y LIQUIDACIÓN DE LA EMPRESA

Transmisión de empresas
Es un Plan especialmente pensado para pymes, que promueve la continuidad de
las pequeñas y medianas empresas viables en peligro de desaparecer por
problemas distintos a los económicos (por ejemplo, por jubilación o cambio de
orientación profesional). De esta manera, se evita la pérdida de capital económico
y puestos de trabajo. Ofrecemos a los propietarios de pequeños negocios la
posibilidad de encontrar gratuitamente un comprador en un entorno neutral y
respetando su confidencialidad.
Vender tu negocio no es una tarea fácil, requiere preparación, respetar una serie
de pasos, y sobre todo encontrar al comprador ideal.
A través del Plan de Apoyo a la Transmisión de Empresas (iniciativa del Ministerio
de Industria, Comercio y Turismo, a través de la Dirección General de Industria y
de la Pequeña y Mediana Empresa) facilitamos el contacto entre las personas
interesadas en comprar, vender o traspasar empresas o negocios.
ventajas que se tienen al comprar una empresa en funcionamiento Facilita la
posibilidad de emprender sin empezar “desde cero”, siendo una alternativa
distinta para los emprendedores. La compra de una empresa en funcionamiento
puede ser una opción atractiva en determinados casos, Los empresarios ya
establecidos pueden crecer adquiriendo una empresa, bien generando economías
de escala que mejoren su productividad o bien diversificando su actividad, Se
evita la pérdida de capital económico y puestos de trabajo.
El Plan de Apoyo a la Transmisión de Empresas cuenta con una red de puntos de
atención repartidos por el país: Puntos de Atención Adheridos (servicios gratuitos)
y Entidades Asesoras (servicios profesionales remunerados).

Una transmisión por actos entre vivos

Esta transmisión puede realizarse en una disposición por ley, como puede ser la
quiebra o el concurso, o mediante alguno de estos contratos:
Donación: contrato en el que el donante transfiere al donatario de forma gratis la
propiedad
Compraventa: es un contrato oneroso que sirve para transmitir la propiedad.
Cesión onerosa o gratuita: transmisión de un derecho entre vivos.
Permuta: contrato en el que ambas partes se comprometen a transferirse de
forma recíproca la propiedad de dos cosas (similar a un truque).

Una transmisión mortis causa

Solo cuando el sucesor sea el heredero del causante. No obstante,
el beneficiario solo sucede al causante en ciertos bienes o derechos.
Es importante que sepas que no todos los derechos pueden cederse. Por tanto,
dependerá de Tres factores:

De la naturaleza del mismo: esto son los derechos de personalidad (derecho al

honor, a la libertad, entre otros) y derechos de familia (relacionados con el
matrimonio, por ejemplo).
De una prohibición de ley: estos son los beneficios de carácter social como la
maternidad, las jubilaciones, indemnizaciones por accidentes de trabajo, etc.
De la voluntad de las partes en el título de la obligación: el arrendatario no
puede transferir el contrato de arrendamiento si el mismo contrato se lo
prohibiera.

Sucesión empresarial
En este sentido, no podemos hablar de transmisión de negocios sin mencionar la
sucesión empresarial, cuando se adquiere la totalidad o algunos elementos de
una empresa que ya está funcionando, puede darse una situación de sucesión de
empresas, y aunque se cambie el nombre, la razón social o titulares (haya
diferentes socios o empresarios individuales), este se considera el mismo negocio.
Y por tanto la sucesora debe asumir todas las responsabilidades de la anterior.

La Liquidación de Empresas
Es un procedimiento judicial cuyo objeto es la venta rápida y eficiente de los
bienes de la Empresa Deudora que se ha vuelto inviable económicamente, con el
objeto pagar a sus acreedores.
Proceso de liquidación de una Empresa:
consiste en la extinción de tu negocio o empresa. A través de esta operación la
compañía saldará todas las deudas pendientes frente a terceros, cobrará los
créditos pendientes frente a sus deudores y, por último, repartirá el patrimonio
que aún quede en la empresa entre los socios,
En el mundo de la contabilidad, liquidación se refiere al proceso de vender todos
los activos de una empresa para generar dinero para pagar los créditos, o
cualquiera a quien la compañía le deba dinero, La liquidación de una empresa es un
proceso que se lleva a cabo al momento en el que se da por finalizada una
sociedad o negocio, dejando la actividad económica en total inactividad; es decir,
la empresa y su actividad interna y externa queda disuelta en su totalidad, lo que
implica a su vez su desaparición del tráfico

Pasos a seguir para disolver y liquidar una sociedad

Elaboración del balance de liquidación.
Acuerdo de disolución, con el reparto del patrimonio entre los socios.
Elevación a público del acuerdo ante notario.
Presentación de la escritura de disolución y liquidación en el registro mercantil.
Si la crisis de insolvencia es tan pronunciada que la empresa misma se ha vuelto
inviable desde el punto de vista económico, resulta de capital importancia que el
emprendedor que un aplazamiento innecesario de la decisión del cierre de su
negocio, puede empeorar la situación ya no sólo de la empresa y sus acreedores,
sino que también la del mismo emprendedor y sus trabajadores. El bajar
definitivamente la cortina, sin hacer un cierre formal y ordenado de la empresa
puede devenir en una pesada mochila que impedirá al emprendedor levantarse
nuevamente. Por el contrario, el cierre de una empresa mediante una liquidación
permite concluir un proyecto de forma ordenada, respetando a la vez los
derechos de sus trabajadores y acreedores, la liquidación permite a los Deudores
subsanar su situación financiera, extinguiendo el saldo insoluto de las deudas,
incentivando la creación de nuevos emprendimientos. Por otra parte, establece
ciertos beneficios tributarios para el acreedor.
el reparto entre los socios del patrimonio resultante después de haber cobrado
los créditos pendientes y haber satisfecho las deudas sociales. Durante esta etapa
la sociedad mantiene su personalidad jurídica pero su actividad ordinaria sigue
paralizada.
La liquidación de una sociedad puede ser de 2 tipos, teniendo cada una sus
distintas motivaciones:

Disolución Voluntaria

Se realiza por voluntad de los socios, sin que haya deudas que obliguen al cierre de la
misma. Dentro de los posibles motivos que lleven a la disolución voluntaria de la
sociedad, se encuentran:

 Cese de la actividad o actividades que constituyan el objeto social, por

voluntad de los socios.

 Caducidad de la empresa (según estatutos)

 Incapacidad de llevar a cabo el objeto social.

 La finalidad que dio la creación de la sociedad, ha dejado de existir.

 Paralización e inoperancia de los órganos sociales.

Disolución Forzosa

Se produce por la insolvencia de la empresa, al no poder hacer frente a los pagos ni

refinanciar las deudas y seguir operando, lo que puede conllevar el concurso de
acreedores. Es decir, cuando la sociedad no puede hacer frente a la totalidad de las
deudas, pudiendo conllevar la quiebra y suspensión de pagos.
Más concretamente, los motivos de liquidación por asuntos económicos pueden ser:

 Existencia de pérdidas que reducen el patrimonio neto por debajo de la mita

del capital social.

 Reducción del capital social por debajo del mínimo legal.