ADORACIÓN

23.11.2023

1. Exposición del Santísimo

2. Rezo de Vísperas
3. Adoración

1.- INTRODUCCIÓN
El próximo domingo celebraremos la Solemnidad de Cristo Rey del
Universo, que como Señor de todo lo creado vino a servir. El servicio
es una oportunidad que Jesús nos brinda para continuar su presencia
con nuestra vida y entrega a los demás, viviendo un nuevo modo de
ser y estar en el mundo.
Vamos a pedir en este encuentro con el Señor de modo especial por
las personas constituidas en autoridad sobre los pueblos:
gobernantes, políticos y magistrados. Para que sirvan al bien común
de los pueblos a ellos encomendados como Cristo, Hijo del hombre
ha venido a servir.
CANTO: Viva Cristo Rey, Dumas & Mary
https://youtu.be/xka_VlGBwiI?si=2gFOMjQ7a0WLi4Su

2.- EVANGELIO
Leemos, hermanos, del Evangelio según San Mateo (Mt 20,25-28):
“Y, llamándolos, Jesús les dijo: –Sabéis que los jefes de los pueblos
los tiranizan y que los grandes los oprimen. No será así entre
vosotros: el que quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro
servidor, y el que quiera ser primero entre vosotros, que sea vuestro
esclavo. Igual que el Hijo del hombre no ha venido a ser servido sino
a servir y a dar su vida en rescate por muchos.”
Palabra del Señor
Gloria a ti, Señor, Jesús.

SILENCIO
3.- REFLEXION. Del discurso de San Juan pablo II en el Jubileo del año
2000 a los gobernantes, parlamentarios y políticos (4.11.2000).
“La vocación a la acción política tiene unas exigencias y los objetivos; para
vivirla es necesario ser conscientes de las dificultades y riesgos que
comporta. (…) El cristiano que actúa en política —y quiere hacerlo “como
cristiano”— ha de trabajar desinteresadamente, no buscando la propia
utilidad, ni la de su propio grupo o partido, sino el bien de todos y de cada
uno y, por lo tanto, y en primer lugar, el de los más desfavorecidos de la
sociedad. PAUSA
(…) La preocupación esencial del hombre político debe ser la justicia, la paz
y la solidaridad. (…) Sólo así se podrá poner freno a la búsqueda del poder
político y riqueza económica por encima de cualquier referencia a otros
valores.
(…) Aquellos cristianos que se sienten llamados por Dios a la vida política
tienen la tarea —ciertamente bastante difícil, pero necesaria— de doblegar
las leyes del mercado “salvaje” a las de la justicia y la solidaridad. Ese es el
único camino para asegurar a nuestro mundo un futuro pacífico, arrancando
de raíz las causas de conflictos y guerras: la paz es fruto de la justicia. PAUSA
(…) La misión de formular y aprobar las leyes es una tarea que aproxima el
hombre a Dios, supremo Legislador, de cuya Ley eterna toda ley recibe en
última instancia su validez y su fuerza obligante.
(…) Nosotros, los cristianos de este tiempo formidable y maravilloso al
mismo tiempo, aun participando en los miedos, las incertidumbres y los
interrogantes de los hombres de hoy, no somos pesimistas sobre el futuro,
puesto que tenemos la certeza de que Jesucristo es el Dios de la historia, y
porque tenemos en el Evangelio la luz que ilumina nuestro camino, incluso
en los momentos difíciles y oscuros.
Que el Espíritu Santo derrame sobre los dirigentes políticos, gobernantes y
magistrados el Espíritu de la verdad y el amor, la fuerza y la luz que
necesitan.
SILENCIO
CANTO: Señor a quien iremos, Canto católico
https://youtu.be/N5LECNqQs7Q?si=LxgtGp2Bo3pL2CHR
4.- ORACIÓN A CRISTO REY DEL UNIVERSO POR LAS
PERSONAS CONSTITUIDAS EN AUTORIDAD Y LOS POLÍTICOS.
1) Jesucristo, Hijo de Dios omnipotente y eterno, Creador, Rey y
Señor de la historia, Supremo Legislador, de quien emana y depende
todo poder: te pedimos por los hombres y mujeres políticos católicos
y los hombres de buena voluntad sobre quienes recae la tarea del
servicio a la nación, imploramos la ayuda de Tu Espíritu para el
ejercicio de la política como ciencia, arte y virtud, para edificar la
justicia social y el bien común.
Todos: Ilumina y fortalece, Señor, a tus servidores. PAUSA
2) Da, Señor, a los gobernantes la gracia de testimoniar, como Santo
Tomás Moro, su patrón, la inalienable dignidad de la conciencia, sin
abandonar la constante fidelidad a la autoridad y a las instituciones,
para que sepan afirmar con su vida que el ser humano no se puede
separar de Dios, ni la política de la moral. Dales fortaleza para animar
con el espíritu del Evangelio el orden temporal, respetando su
naturaleza y su legítima autonomía. Infunde en sus corazones la
humildad necesaria para que se reconozcan siervos inútiles, y el
valor y la perseverancia para hacer todo como si dependiera de ellos,
abandonándose en Ti porque todo depende de Ti.
Todos: Ilumina y fortalece, Señor, a tus servidores. PAUSA
3) Enseña, Señor, a los políticos a promover la verdad moral e
irrenunciable de defender la vida humana y su dignidad desde la
concepción hasta la muerte natural; a tutelar a la familia fundada por
un hombre y una mujer y protegerla en su unidad y estabilidad; a
reconocer la libertad de los padres en la educación de sus hijos; a
eliminar cualquier forma de esclavitud o discriminación de las
personas; a impulsar el derecho a la libertad religiosa; a desarrollar
una economía al servicio de la persona en un marco de justicia,
solidaridad y subsidiariedad, y a trabajar incansablemente por la paz
que es siempre "obra de la justicia y efecto de la caridad".
Todos: Ilumina y fortalece, Señor, a tus servidores. PAUSA
4) Pedimos, Señor, por los constituidos en autoridad, que les enseñes
a hacer Tu voluntad queriendo todo aquello que quieres Tú,
precisamente porque lo quieres Tú, como Tú lo quieras y durante el
tiempo que Tú lo quieras; que les des Tu gracia para ser obedientes
a otras autoridades, comprensivos con sus colaboradores, solícitos
con todas las personas y generosos con quienes se dicen opositores
o enemigos; que les ayudes a superar son austeridad el placer, con
generosidad la avaricia, con amabilidad la ira y con fervor la tibieza;
que sepan tener prudencia al aconsejar, valor en los peligros,
paciencia en las dificultades y sencillez en los éxitos. Muéstrales,
Señor, cómo hacer de la política un camino de santidad, para que
nunca se avergüencen de Ti ante el mundo.
Todos: Ilumina y fortalece, Señor, a tus servidores. PAUSA
5) Señor, que nunca falte a las autoridades tu luz a su mente, tu
fuerza a su voluntad y el calor de tu caridad a su corazón, para que
amen de verdad a quienes han de servir. Infúndeles un sentimiento
vivo, actual y profundo del orden social, pensado por Ti, y haz que un
día, por realizar la misión de servir, puedan gozar de Ti bajo la mirada
amorosa de Tu dulcísima Madre, por toda la eternidad.
Todos: Ilumina y fortalece, Señor, a tus servidores. PAUSA
Padrenuestro…

Sacerdote:
Señor Jesús,
tú cargaste la cruz sobre tus hombros y
nos has enseñado el camino de servir.
Ten misericordia de nosotros,
e ilumina y fortalece a todas las personas
constituidas en autoridad sobre los pueblos;
Ayúdales y ayúdanos a todos a servir contigo al Padre
y a nuestros hermanos, para que siendo artífices de un mundo más
justo, pacífico y solidario alcancemos la vida eterna.
Te lo pedimos a ti, que como príncipe de la paz reinas
sobre el universo y sobre la humanidad
por los siglos de los siglos. Amén.

5.- BENDICIÓN Y RESERVA EUCARÍSTICA.