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Voces: GROOMING - REDES SOCIALES - MENORES - PORNOGRAFIA

Título: La prevención de daños causados por grooming en redes sociales. Tres propuestas
para su abordaje

Autor: Cosoy, Diego

Fecha: 1-nov-2022

Cita: MJ-DOC-16880-AR | MJD16880

Producto: MJ

Sumario: I. Introducción. II. Planteo del problema. III. El rol de progenitores y tutores.
Responsabilidad parental. IV. Tres propuestas preventivas para un mismo problema. V.
Conclusiones.

Por Diego Cosoy (*)

I. INTRODUCCIÓN

En el presente asistimos a una importante proliferación en el desarrollo de tecnologías de la


información y comunicación (en adelante TIC) (1). Éstas repercuten significativamente en las
prácticas sociales, representando enormes desafíos para las sociedades modernas en general
y para el Derecho en particular.

Asimismo, observamos que la utilización de las denominadas «redes sociales» genera efectos
significativos en el desarrollo de la vida cotidiana de las personas, tanto en el entorno virtual,
como en el mundo físico, con impacto jurídico; tales como la difusión de información inexacta
(fake news), difamaciones y discursos de odio (hate), vulneraciones al derecho al honor
(deepfakes), nuevas modalidades delictivas como el phishing, nuevos tipos de acoso
(cyberbulling).

Este trabajo tiene por objeto analizar dichos efectos en el caso de la figura conocida como
grooming y promover la prevención de los daños causados a niños, niñas y adolescentes (en
adelante NNA) en el ámbito de las redes sociales. En este sentido: ¿Cómo se producen estos
daños? ¿Existe alguna forma de prevenir su causación? ¿Qué lugar ocupa la responsabilidad
parental y la de los titulares de medios digitales en esta materia? Estas son algunas de las
preguntas que intentaremos responder, abordando la normativa hoy vigente y sus posibles
reformas.

II. PLANTEO DEL PROBLEMA


1. Redes Sociales.

Una red social es una forma de representar una estructura social, donde elementos tales
como individuos u organizaciones están relacionados entre sí de acuerdo a algún criterio, por
ejemplo, una vinculación profesional, de amistad o parentesco.A partir de allí se construye una
línea que conecta los nodos que representan a dichos elementos (Rodríguez Hauschildt,
2014:1). En otras palabras, «son sitios de Internet (plataformas informáticas) que permiten a
los usuarios mostrar su perfil, subir fotos, contar experiencias personales, chatear con sus
amigos y, en general, compartir e intercambiar contenidos de todo tipo (información, opiniones,
comentarios, fotos y videos)» (Tomeo, 2010:1).

Muchos derechos fundamentales pueden verse afectados por el uso de estas tecnologías y
merece especial atención su impacto en los jóvenes, debido a que este colectivo de usuarios
se encuentra más indefenso ante los riesgos y amenazas de las nuevas tecnologías, dada su
falta de madurez suficiente y los peligros intrínsecos del entorno virtual.

Ciertamente, es lógico afirmar que los NNA de esta generación han nacido con las redes
sociales motivo por el cual el uso de estas tecnologías en su caso es bien extenso y pueden
ser considerados «nativos digitales». Según un informe realizado por UNICEF,
«aproximadamente la mitad de los niños, niñas y adolescentes reconoce haber aceptado
alguna vez en una red social a personas que realmente no conocían, llegando en muchos
casos a citarse físicamente con estas personas» (2). El hecho de que tengan un gran manejo
de las nuevas tecnologías, no obsta sus mayores dificultades para identificar los riesgos y para
actuar correctamente ante ellos.

Las redes sociales constituyen una vía propicia para el despliegue de conductas singularmente
perjudiciales para los usuarios. En particular, el grooming objeto del presente análisis se ha
incrementado luego de la pandemia. Todo ello, nos obliga a analizar la problemática desde una
posición que permita armonizar el acceso de los jóvenes a los medios informatizados,
atendiendo a su interés superior y priorizando el resguardo de su esfera personal debido a que
de resultar dañada podrá implicar una imposible reparación posterior (Valente, 2011:4).

2.Grooming.

En primer lugar, el término grooming, es un anglicismo que se traduce en conductas de


acercamiento o acicalamiento, configurándose como delito en distintos países de América
Latina (3). Sin profundizar en la materia penal, es importante señalar que en nuestro país el
grooming se encuentra tipificado como un delito penado con hasta cuatro años de prisión
(conf. Ley 26.904/13). Cabe aclarar que en el año 2017 se amplió localmente el marco
regulatorio, al adherir la Argentina al Convenio europeo sobre ciberdelincuencia (No. 185, del
Consejo de Europa o Convenio de Budapest y Ley 27.411/17).

Así, podemos definir al grooming como el «accionar deliberado que, mediante conductas que
buscan generar una conexión emocional entre un adulto y un NNA, sea de amistad o de otra
índole, deriva en prácticas abusivas de tipo sexual de las que es víctima la persona menor de
edad, y que pueden vincularla incluso al mundo de la prostitución o del contenido sexual
infantil» (Nocera, 2014:265). Por su parte, nuestra jurisprudencia lo ha definido como «un
acoso ejercido por un adulto que realiza acciones para establecer una relación y un control
emocional sobre el niño o niña con el fin de 'preparar el terreno' para el abuso sexual» (4). Si
bien el acosador podrá valerse de diversos medios para ejecutar el contacto, como por ejemplo
el chat de un videojuego, en el presente nos centraremos en aquellos que se valen de redes
sociales para entablar la comunicación.

Es importante resaltar que este tipo de acoso no involucra una acción de consecuencias
inmediatas, sino que es un proceso que se desarrolla en diversas etapas. Así, en un primer
momento el acosador procederá a entablar lazos «amistosos» con el niño, niña o adolescente
mediante redes sociales pudiendo utilizar perfiles falsos. En una segunda fase, los datos
personales recolectados por el adulto tales como contactos, gustos o preferencias, son
utilizados para generar una falsa sensación de familiaridad. Finalmente, el groomer solicitará
material audiovisual de contenido sexual al o la joven.Si lo consigue, puede dar por finalizado
el acoso o utilizarlo como un elemento extorsivo (amenazando con publicarlo o mostrarlo a
familiares) para solicitarle más material o inclusive generar un encuentro que derive en abuso
sexual u otros delitos de suma gravedad (Warlet, 2021:4). Cabe aclarar que este tipo penal es
un delito de peligro abstracto y, según nuestra jurisprudencia, el hecho delictivo se consuma
cuando se entabla la comunicación con la persona menor de edad (5).

3. Derechos afectados.

Este tipo de delito tiende a menoscabar derechos fundamentales de las personas menores de
edad reconocidos en nuestra Constitución Nacional, en los Tratados de Derechos Humanos y
en el Código Civil y Comercial de la Nación (en adelante CCCN). Dentro del amplio abanico de
derechos afectados es posible destacar el derecho a la imagen, a la intimidad, a la privacidad y
al honor. Por otra parte, aquellos derechos vinculados al desarrollo del proyecto de vida de la
víctima y derechos en internet o derechos digitales. Asimismo, el avance de las etapas
referidas en apartados anteriores puede derivar en lesiones a la integridad psicofísica de los
NNA. El enunciado propuesto no resulta taxativo sino que ilustra el enorme impacto que estas
acciones producen en diversas categorías de derechos del colectivo objeto de análisis,
íntimamente vinculados al derecho a no ser dañado o -alterum non laedere- (6) reconocido en
los artículos 19° y 75° inciso 22° de la Constitución Nacional.Aquí, resulta prudente mencionar
las palabras de la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el novedoso precedente
«Denegri» al afirmar que «el creciente uso de herramientas de tecnología informática suscita
numerosos interrogantes respecto de su campo de aplicación a la luz de los derechos
fundamentales» (7).

Cabe decir que, dadas las características intrínsecas del entorno virtual, las consecuencias
dañosas descriptas pueden resultar incontenibles y susceptibles de ser reproducidas en forma
indefinida, tornando la prevención como única propuesta adecuada para la evitación o
contención de sus efectos lesivos en los derechos del colectivo bajo estudio.

III. EL ROL DE PROGENITORES Y TUTORES. RESPONSABILIDAD PARENTAL

El CCCN consolidó diversos avances doctrinarios y normativos en materia de Derecho de


Familia, evolucionando desde un sistema regido por la patria potestad, término ligado al
derecho-poder del pater familias romano sobre sus hijos, hacia otro de responsabilidad
parental, ligado al deber de cuidado y educación de los descendientes, dando lugar a que hoy
se hable de un derecho-deber.

Se hace explícito en los Fundamentos del CCCN y vale la pena destacar el fuerte valor
pedagógico y simbólico del lenguaje. Entendiendo que los términos utilizados por el legislador
no resultan neutros, a diferencia de la patria potestad, sugerente de la dependencia absoluta
del niño dentro de una estructura familiar jerárquica, el concepto de «responsabilidad
parental» se vincula a una serie de facultades y deberes representativos del compromiso de
ambos progenitores de orientar al hijo/a hacia la autonomía (Medina, 2014:2).

Así, el régimen de responsabilidad parental actual impone deberes y asigna facultades a los
padres sobre sus hijos como el de educarlos, cuidarlos, abastecerlos de sus necesidades
básicas, vigilar que no causen daños. Es importante señalar que el CCCN recepta la normativa
internacional en materia de derechos de personas menores de edad vinculada a principios de
Derechos Humanos de jerarquía constitucional, entre los cuales con fines prácticos, cabe
mencionar el derecho a ser oído y la autonomía progresiva.Aquí, observamos que «el
concepto de la autonomía progresiva permite que a medida que los niños adquieren mayores
competencias, aumentan su capacidad de asumir responsabilidades, disminuyendo
consecuentemente la necesidad de orientación y dirección de sus padres, contenido y finalidad
de la responsabilidad parental» (Pellegrini, 2015:467).

Por otra parte, se ha sostenido que «el principio de autonomía progresiva se desprende como
una derivación obvia del reconocimiento de la condición jurídica de los NNA como sujetos de
pleno derecho» (Herre ra, 2017:43). En este sentido, «se afirma que, a mayor autonomía,
disminuye la representación de los progenitores en el ejercicio de los derechos de los hijos»
(Kemelmajer de Carlucci, 2014:30). De esta manera, «se ha superado el paradigma
capacidad-incapacidad propio de la época seudo tutelar en el que se inscribía el Código Civil.
En cada caso habrá que verificar el discernimiento del niño, su madurez intelectual y
psicológica y el suficiente entendimiento» (Ibid, 2014:33).

Los principios vertidos resultan relevantes a la hora de pensar propuestas preventivas para el
monitoreo y control de la actividad de personas menores de edad en redes sociales. En la
actualidad, las plataformas delegan una porción importante del control de grooming en los
usuarios. A modo de ejemplo, «Meta Platforms, Inc.» plantea en sus términos y condiciones:
«Si tienes menos de 18 años, te recomendamos que también pidas ayuda para solucionar el
problema a tus padres o a otro adulto de confianza. Además, puedes hablar con un consejero
o administrador de la escuela a quien le tengas confianza» (8). Esta atomización del sistema
de control, en cabeza de los usuarios, se funda en una alegada imposibilidad para controlar el
masivo contenido o mensajería que se vierte a diario en las plataformas.

Ahora bien, a medida que avanzamos en el tratamiento del tema, aparecen nuevos
interrogantes ¿Es razonable delegar el citado control en los jóvenes? ¿Tendrán ellos el grado
de madurez suficiente para abordar estas problemáticas por su propia cuenta en determinados
casos?Asimismo, en razón del desarrollo progresivo los NNA, con el tiempo, irán adquiriendo
autonomía para decidir cómo desenvolverse en el entorno digital. De esta forma, ¿Cómo
podrán los progenitores y tutores controlar las comunicaciones de los NNA sin reprimir este
derecho?

La jurisprudencia ha entendido que «son los adultos de la familia quienes al controlar


comunicaciones pueden llegar a detectar las señales de peligro» (9). Así, el rol de los
progenitores, y usuarios en general, toma preponderancia a la hora de controlar los peligros a
los cuales los más jóvenes se encuentran expuestos. Sin embargo, tal rol resulta insuficiente
al observar que aproximadamente uno de cada tres usuarios en internet son NNA (10) y,
muchos de ellos, carecen del grado de madurez suficiente para denunciar por su cuenta las
situaciones de abuso ante el proveedor del servicio, la autoridad judicial, escolar o, inclusive,
ante sus progenitores o tutores. Sobre esta cuestión, resultará esencial el diálogo y la
comunicación fluida con los jóvenes para el abordaje de esta problemática (11).

IV. TRES PROPUESTAS PREVENTIVAS PARA UN MISMO PROBLEMA

La incorporación del art. 1711 en el CCCN responde a una evolución en materia de Derecho
de Daños y suele asociarse a la idea de una constitucionalización del Derecho Privado. A su
vez, ciertos principios de jerarquía constitucional cómo el deber genérico de no dañar, forman
parte de la codificación y fueron receptados en la función preventiva de la responsabilidad civil
con miras a la protección integral de la persona humana. Se ha afirmado que «la prevención
significa, en esencia, el deber de actuar ex ante del daño consumado» (Calvo Costa, 2018:8).
En línea con lo expuesto, seguidamente planteamos diversas propuestas preventivas con
relación al tema que nos ocupa:

a.Formación, capacitación y concientización

Debido a un emblemático y triste caso que tuviera lugar en diciembre del 2016, se sancionó en
Argentina la Ley N.° 27590/20 conocida como «Mica Ortega - Prevención y Concientización
del grooming» por la cual fue creado el «Programa Nacional de Prevención y Concientización
del Grooming o Ciberacoso» (12). La norma obliga a capacitar sobre la materia a la comunidad
educativa de nivel inicial, primario y secundario de instituciones privadas y públicas. Asimismo,
promueve el desarrollo de campañas de concientización e impone la obligatoriedad de informar
los procedimientos de actuación en estos casos, entre otras propuestas. Sin profundizar en
cuestiones de autonomía provincial y municipal referidas a la política educativa, se advierte
que la mencionada ley invita a las provincias, municipios y a la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires a adherir. Así lo han hecho, a modo de ejemplo, las provincias de San Luis, Salta y
Catamarca mediante las leyes provinciales N.° 1055, 8259 y 5700 respectivamente. Por su
parte, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires cuenta con la Ley N.° 5775/16, para la prevención
del ciberacoso sexual, como normativa local y no ha adherido hasta la fecha a la propuesta
nacional.

Sin lugar a dudas, la ley nacional representa un gran avance en materia preventiva debido a la
importancia del abordaje interdisciplinario en este tipo de problemáticas (13).

El rol esencial de la comunidad educativa para la prevención del grooming también surge de la
Ley de Educación Nacional Nº 26206/06 debido a que en su artículo 67° inciso «e» señala la
obligación de los docentes de proteger y garantizar los derechos de las niñas, los niños y
adolescentes que se encuentren bajo su responsabilidad. Asimismo, la escuela tiene el deber
de comunicar cualquier vulneración de derechos ante la autoridad administrativa de protección
en el ámbito local (art.30, Ley N.º 26061/05) (14). Por otra parte, según la Ley N.° 26150/06
se creó el Programa Nacional de Educación Sexual Integral (ESI), que con el tiempo incorporó
la prevención del grooming (15) entre los núcleos de aprendizaje de niveles primario y
secundario.

Lo expuesto hasta aquí, en sintonía con las obligaciones adoptadas por el Estado mediante la
Ley N.° 26061/05 de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes
refuerza el rol esencial que tendrá la comunidad educativa para el abordaje integral del
grooming. Sin adentrarse en discusiones respecto a la Responsabilidad del Estado, resulta
interesante mencionar con referencia a los establecimientos educativos públicos, que «si bien
el deber de prevenir constituye una obligación de medios y no de resultado, debe ser asumida
por el Estado como un deber jurídico propio y no como una simple formalidad» (16).

Finalmente, observamos que el normal desarrollo de la vida de los NNA se encuentra


inescindiblemente vinculado a una sana convivencia digital, razón por la cual las mejores
propuestas preventivas deben comprometer tanto la formación, capacitación y concientización
de la comunidad educativa de los niveles inicial, primario y secundario, como asimismo la de
sus progenitores y tutores, en miras a un acompañamiento de ese desarrollo y al correcto
abordaje de las vicisitudes que allí surjan.

b. Sanciones pecuniarias disuasivas.

Ante el silencio normativo, tanto en doctrina como la creciente jurisprudencia en la materia ha


expresado diferentes posiciones respecto al factor de atribución aplicable a la responsabilidad
civil de redes sociales. Nuestros tribunales han tenido la oportunidad de pronunciarse sobre
los daños causados a través de plataformas digitales diversas.En ese sentido, al analizar el
caso de responsabilidad de los motores de búsqueda, la Corte Suprema de Justicia de la
Nación asoció su responsabilidad al conocimiento fehaciente individualizado sobre los
contenidos lesivos (17). En el año 2019, la sala B de la Cámara Federal de Mendoza extendió
la aplicación de este razonamiento a la red social Facebook planteando que «en su calidad de
red social, presenta las mismas obligaciones y responsabilidades» (18) respecto a la
desindexación de contenidos ilícitos.

En otro orden de ideas, tomando nuevamente el ejemplo de «Meta Platforms, Inc.», se


observa en sus términos y condiciones que «desarrolla tecnologías y servicios que permiten
que las personas se conecten, creen comunidades y hagan crecer sus negocios» (19). En
este sentido, es posible postular que los proveedores de redes sociales introducen en la
sociedad una actividad potencial e intrínsecamente riesgosa con fines lucrativos
predisponiendo sus condiciones de uso. Conforme la teoría del riesgo creado y riesgo
provecho resultará claro que recaerá sobre ellos un rol central a la hora de prevenir los daños
que puedan causar en el ejercicio de su actividad profesional con especial foco en mitigar los
efectos lesivos sobre sujetos hiper vulnerables en razón de su grado de madurez y las
condiciones impuestas por el entorno virtual (20).

Podemos observar cómo a la protección dispuesta por el Derecho de Daños en el CCCN se


suma el sistema tuitivo del Derecho del Consumidor, de jerarquía constitucional en
Argentina.En este orden de ideas, para prevenir los daños causados a niños, niñas y
adolescentes por grooming a través de redes sociales, de lege ferenda, este trabajo propone la
incorporación de sanciones pecuniarias disuasivas en la Ley N° 27590/20 para los titulares de
tales plataformas, con fundamento en el artículo 52 bis de la Ley de Defensa del Consumidor.

A modo de ejemplo, observamos que la Comisión Europea en mayo del corriente ha propuesto
un nuevo «Reglamento para prevenir y combatir los abusos sexuales de menores en línea» -
actualmente en discusión en el Parlamento Europeo- con referencia a la difusión de material
asociado al abuso infantil, como asimismo al grooming (21), imponiendo obligaciones
conjuntas para los Estados miembro y los titulares de redes sociales, con miras en la
protección de los NNA.

En general, con relación a los proveedores de servicios de TIC, el reglamento plantea que
éstos se encuentran en una posición única para detectar posibles abusos sexuales infantiles
en línea, razón por la cual deberían informar al respecto a las autoridades competentes,
cuando haya motivos razonables.

Por otra parte, se establece que los Estados de la Unión Europea deberán designar una
autoridad de coordinación que permita la fiscalización y control ju dicial o administrativo de lo
dispuesto por el Reglamento con el fin de minimizar el riesgo de detecciones y denuncias
equivocadas. El Reglamento propuesto también faculta a los Estados para la aplicación de
penas y de multas coercitivas contra los proveedores (art. 35).

A nivel local, pensamos que resultaría positivo dotar al Programa Nacional de Prevención y
Concientización del Grooming o Ciberacoso, de la facultad de monitoreo y seguimiento de
causas en esta materia. Así, con independencia de los montos indemnizatorios que los
operadores judiciales puedan reconocer a los damnificados, podría disponerse la imposición
de multas civiles destinadas a financiar las campañas de concientización, capacitación y
formación en prevención de este delito y el financiamiento que requiera el Programa.Ello
significaría un apoyo de los proveedores de servicios de redes sociales al control o
fiscalización del grooming, propiciando la disminución del peso que desde los términos y
condiciones de las plataformas se coloca sobre las espaldas de los más jóvenes, de sus
progenitores, tutores y otros usuarios. Por otra parte, resultaría un importante apoyo para la
efectiva ejecución por parte del Estado de las políticas públicas previstas en la Ley N°
27590/20.

c. Otra propuesta subsidiaria. Inteligencia Artificial (IA) y Big Data para proteger a NNA.

Conforme se ha analizado a lo largo de este trabajo, es posible afirmar que «la prevención de
daños, esa meta fundamental y anterior a alcanzar, no sólo es técnicamente compleja (por la
inabarcable cantidad de información que se genera en Internet), sino que puede entrar en
conflicto con otros valores fundamentales» (Brodsky, 2017:494). En este sentido, la Unión
Europea ha demostrado importantes avances regulatorios y doctrinarios en materia de nuevas
tecnologías. En este marco se discute el antes mencionado «Reglamento para prevenir y
combatir los abusos sexuales de menores en línea». Allí, se plantea que las redes sociales
deberán efectuar evaluaciones de riesgo y adoptar medidas tendientes a mitigar los peligros
que introducen sus servicios. Para permitir la innovación y garantizar la proporcionalidad y la
neutralidad tecnológica, el reglamento no da un detalle taxativo de las medidas de mitigación
de daños, dejando al proveedor un grado de flexibilidad importante a la hora de su adopción
debiendo contemplarse la intervención humana, la periodicidad, la suficiencia de los datos
utilizados, entre otros lineamientos. Así, según su artículo 19° los titulares de redes sociales
no serán responsables cuando hayan adoptado, de buena fe, estas medidas.

Conforme lo expuesto hasta aquí, serán los proveedores de servicios quienes se encuentren
en mejores condiciones para elaborar, proponer, desarrollar y llevar a la práctica tecnologías
que permitan la prevención de daños.A raíz de esto, cabe resaltarse que la utilización de IA y
Big Data en materia penal y para la prevención de delitos, ha traído enormes críticas en razón
de los sesgos o bias que poseen ya que estos sistemas se encuentran cargados de valores y a
menudo producen resultados no deseados e inclusive discriminatorios (22).

Así, por ejemplo, el sistema COMPAS utilizado en algunos estados de los Estados Unidos
para el cálculo algorítmico de la probabilidad de reincidencia penal exhibió resultados
sesgados, dando los valores más altos a personas afroamericanas (23). Asimismo, la
organización The Algorithmic Justice League elaboró el informe «Gender Shades» (24) en el
cual, luego de analizar diversos sistemas de reconocimiento facial basados en IA, logró
determinar que sus algoritmos tienden a dar tasas de error del 0,8% en «hombres de piel
clara» (lighter males) mientras que la tasa asciende a 34,7% en «mujeres de tez oscura»
(darker females), a quienes incluso, en algunos casos, los sistemas no logran registrar,
entregando resultados sumamente discriminatorios.

Por otra parte, actualmente nos encontramos atravesando la era de la pos privacidad
comprendida como «la sublimación social del individuo al control absoluto, privado y público
sobre sus datos, y a la pérdida de la autodeterminación, libertad y autonomía» (Faliero,
2019:95). Desde una perspectiva crítica del mencionado escenario y contemplando lo
propuesto en el Reglamento Europeo, los sistemas que desarrollen las compañías para el
control del grooming deberán ser elaborados respetando en la mayor medida posible la
protección de las esferas de privacidad e intimidad tanto de los NNA como del conjunto de
usuarios que utilizan diariamente estas plataformas. De esta forma, si estos realizaran un
tratamiento informatizado de datos, dada la normativa vigente su licitud dependerá de la
existencia de los siguientes supuestos, vinculados a diversos principios de la materia; a
saber:(i) consentimiento libre, informado y expreso del titular; (ii) limitación a la finalidad
indicada al recopilarlos; (iii) no excesividad del dato, es decir, suficiencia, pertinencia y
minimización necesaria para su fin; (iv) conservación limitada a los fines y (v) confidencialidad.
En otras palabras, los sistemas en cuestión debieran operar respetando el mayor nivel de
seguridad posible.

Las problemáticas expuestas, nos invitan a pensar que la aplicación de nuevas tecnologías a la
prevención del grooming deberá desarrollarse, por los proveedores de servicios de redes
sociales, en un marco de respeto al principio de no discriminación, la intimidad, la privacidad y,
esencialmente, con respeto a la integridad y dignidad de la persona humana que utiliza a diario
estas plataformas.

V. CONCLUSIONES

A lo largo del trabajo, he sugerido que la sana convivencia digital resulta indispensable para el
normal desenvolvimiento de la vida de los niños, niñas y adolescentes. También hemos
identificado al grooming como uno de los variados peligros propios del entorno digital, de
especial significación.

Así, con independencia de los enormes beneficios que el avance tecnológico incorpora, resulta
claro que a su vez genera potenciales riesgos, resultando necesario progresar hacia marcos
regulatorios que permitan el desarrollo y el acceso a los recursos tecnológicos por parte de los
niños, niñas y adolescentes, con prevención de daños.

Asimismo, sin relegar el importante rol que desempeñan los progenitores, tutores, y la
comunidad educativa en su conjunto, podemos concluir que los proveedores de servicios de
redes sociales poseen un lugar central en esta tarea preventiva, debiendo éstos aportar
soluciones técnicas para la reducción, contención y mitigación de daños.?

Bibliografía.

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Sandra M.; Meza, Jorge y Boragina, Juan Carlos (dirs.), Derecho de Daños. Análisis bajo el
Código Civil y Comercial de la Nación, Buenos Aires, Hammurabi, 2017.
- Calvo Costa, Carlos A.«La pretensión preventiva en el derecho de daños», LA LEY
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- Faliero, Johanna C., «El Derecho al anonimato: revolucionando el paradigma de protección


en tiempos de la pos privacidad», Ad Hoc, Buenos Aires, 2019.

- Herrera, Marisa, «Manual de Derecho de Familia», Abeledo Perrot, Buenos Aires, 2017

- Kemelmajer de Carlucci, Aida; Herrera, Marisa y Lloveras Nora (dirs.), «Tratado de derecho
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- Nocera, Luis Angel. «El grooming en la legislación argentina» en Libro Informática y Delito.
Reunión preparatoria del XIX Congreso Internacional de la Asociación Internacional de
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http://www.saij.gob.ar/luis-angel-nocera-grooming-legislacion-argentina-dacf140652-2014-
08/123456789-0abc-def 2560-41fcanirtcod

- Tomeo, Fernando. «Las redes sociales y su régimen de responsabilidad civil», 14/05/2010,


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comentado, Infojus, 29/05/2015, t. 2, p. 467. Disponible al 07/09/2022 en
http://www.saij.gob.ar/docs-f/codigo-comentado/CCyC_Nacion_Comentado_Tomo_II.pdf

- Valente, Luis Alberto «La violación de los derechos personales en la sociedad de la


información o tecnocomunicacional», 11/07/2011, elDial DC15C5.

- Warlet, Rosa Alicia R.«Algunas reflexiones sobre la Ley 27.590 -Mica Ortega-», 24/02/2021
,Microjuris MJ-DOC-15783-AR | MJD15783.

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(1) Entendidas como aquellas tecnologías que tienen por objeto transportar y distribuir
señales, datos o metadatos a través de redes de telecomunicaciones conforme define la Ley
N.° 27078/14.

(2) UNICEF (2017). «Niños en un mundo digital». Disponible al 12/06/2022 en


https://www.unicef.es/educa/blog/ni%C3%B1os-ni%C3%B1as-entorno-digital

(3) GROOMING ARGENTINA ONG (2014). «¿Qué es el grooming?». Disponible al


18/06/2022 en https://www.groomingarg.org/?gclid=CjwKCAjw77WVBhBuEiwAJ-
YoJF0X0t5v43ZVv-KmkP0WOAT2F3Bk95gwKmmmG7cNDeGhvxZavM
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(4) Cámara Criminal y Correccional de Río Tercero (Córdoba), Sala II, «T.N.A.p.s.a Abuso
Sexual con Acceso Carnal, etc.». Sentencia del 09/09/2020. Id SAIJ: SUR0022599

(5) Tribunal de Casación Penal de La Plata (Buenos Aires), Sala I, «Luna Jonatan o Luna
Yonatan Omar s/ recurso de casación». Sentencia del 14/03/2019. Id SAIJ: FA19010083

(6) Ulp., 1 reg. D. 1.1.10 pr: «Iuris praecepta sunt haec: honeste vivere, alterum non laedere,
suum cuique tribuere».

(7) CSJN. «Denegri, Natalia Ruth c/ Google Inc. s/ derechos personalísimos. Acciones
relacionadas». Sentencia del 26/06/2022. Id SAIJ: FA22000052.

(8) Meta Platforms, Inc (Facebook), «¿Qué debo hacer si alguien me pide que comparta en
Facebook una foto o un video donde aparezco sin ropa o en actitud provocativa, o si me
amenaza con compartir una foto que ya envié?» disponible al 13/06/2022 en https://es-
la.facebook.com/help/1381617785483471/?
helpref=search&query=grooming&search_session_id=26678895684
a8f5d656b87aab8d393a&sr=1

(9) Juzgado de Paz. Villa Gesell. Buenos Aires «L., L. A. c/ N. N. M. s/ Medidas protectorias».
Sentencia del 19/11/2020. Id SAIJ:FA20010100

(10) UNICEF (2017), «El estado Mundial de la Infancia» disponible al 15/06/2022 en


https://www.unicef.es/publicacion/estado-mundial-de-la-infancia-2017-ninos-en-un-mundo-
digital

(11) Provincia de Buenos Aires (2020), «Guía de actuación frente a situaciones de acoso
sexual en entornos digitales hacia niñas, niños y adolescentes o Grooming». Disponible al
18/06/2020 en https://cuidarnosenred.mjus.gba.gob.ar/grooming/guia-grooming/.

(12) TELAM (2020), «Micaela Ortega, la niña de 12 años cuyo caso impulsó la ley de
grooming». Disponible al 17/08/2022 en https://www.telam.com.ar/notas/202011/534650-
micaela-ortega-la-nina-de-12-anos-asesinada-que-impulso-la-ley-d -grooming.html

(13) Según entrevistas realizadas a personal superior de establecimientos educativos públicos


de la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires efectuadas en el
marco del Curso de Daños en Mayo del 2022, no se observa un significativo impacto de la
citada norma en la comunidad educativa, donde a modo de ejemplo, registramos que se da
prioridad a discutir otras problemáticas como el cyberbullying o violencia intrafamiliar, entre
otros indispensables abordajes que desarrollan las escuelas en la Argentina.

(14) Ministerio de Educación de la Nación (2021). «Desafíos para la construcción de una


ciudadanía digital: el rol de la comunidad educativa en la prevención del grooming» Disponible
al 18/06/2022 en https://www.educ.ar/recursos/157283/el-rol-de-la-comunidad-educativa-en-
la-prevencion-del-groomi/download/inl ne.

(15) 2018 - Resolución C.F.E. Nº 340 - Núcleos de Aprendizaje Prioritarios para Educación
Sexual Integral. Disponible al 04/08/2022 en
https://www.argentina.gob.ar/educacion/esi/normativa.

(16) CNCAF. Sala V, «Fernández, Corina Nydia Beatriz c. EN s/ daños y perjuicios».


Sentencia del 17/11/2021. AR/JUR/181365/2021.

(17) CSJN. «Rodríguez, María Belén c/ Google Inc. y otro s/ daños y perjuicios». Sentencia
del 28/10/14. Fallos:337:1174.

(18) Cámara Federal de Apelaciones de Mendoza, sala B, «P., A. E. c. Facebook Argentina


S.R.L. s/ Medida autosatisfactiva». Sentencia del 24/05/2019. AR/JUR/12577/2019

(19) Meta Platforms, Inc (Facebook), «Condiciones del servicio» disponible al 23/10/2022 en
https://www.facebook.com/legal/terms

(20) SECRETARÍA DE COMERCIO INTERIOR, Resolución 139/2020 RESOL-2020-139-


APN-SCI#MDP, 27/05/2020.

(21) Unión Europea (2022), «Proposal for a REGULATION OF THE EUROPEAN


PARLIAMENT AND OF THE COUNCIL laying down rules to prevent and combat child sexual
abuse», COM/2022/209. Disponible al 06/08/2022 en https://eur-lex.europa.eu/legal-
content/EN/TXT/?uri=COM%3A2022%3A209%3AFIN&qid=1652451192472

(22) European Commission for the Efficiency of Justice (CEPEJ) (2018). «Carta ética europea
sobre el uso de la inteligencia artificial en los sistemas judiciales y su entorno». Disponible al
18/06/2022 en https://campusialab.com.ar/wp-content/uploads/2020/07/Carta-e%CC%81tica-
europea-sobre-el-uso-de-la-IA-en-los- istemas-judiciales-.pdf

(23) Propublica (2016). «Machine Bias». Disponible al 05/09/2022 en


https://www.propublica.org/article/machine-bias-risk-assessments-in-criminal-sentencing

(24) ALGORITHMIC JUSTICE LEAGUE PROJECT (2018). «Gender Shades». Disponible al


05/09/2022 en http://gendershades.org/overview.html

N. de R.: Este texto implica una profundización y modificación al trabajo de investigación


presentado por los estudiantes Tamara Alloco, Diego Cosoy, Nadia Gorosito y Lucía Oliva
durante el 1° cuatrimestre del 2022, en el contexto de la asignatura «Derecho de Daños»,
Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, a cargo de la Dra. Sandra Wierzba,
quien conjuntamente con el Dr. Kevin Rother realizó el proceso de tutoría.

(*) Estudiante avanzado de Abogacía en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos


Aires. Se desarrolla profesionalmente en la Subsecretaría Legal y Técnica de la Universidad
Nacional de Quilmes.

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