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Introducción:
Según el diccionario de la lengua española, un milagro se define como un hecho no explicable por las
leyes naturales y que se atribuye a intervención sobrenatural de origen divino. En la Biblia encontramos
los milagros definidos como maravillas, prodigios y señales.
B. EL PROPÓSITO DE LOS MILAGROS ERA MOSTRAR QUE JEHOVÁ ERA EL DIOS VERDADERO
1. Elías mostró a través de milagros que Jehová es el verdadero Dios frente a los profetas de Baal.
(1 Reyes 18:20-40)
Nota: se debe entender que los dones de milagros consistían en comunicar la voluntad de Dios ya que los
primeros cristianos no tenían la Biblia completa.
Dios hoy sigue haciendo milagros de muchísimas maneras incluyendo puede ser, a través de un cristiano;
pero eso no indica que tenga que ver con los dones de milagros del Espíritu Santo.
III. ENTONCES, ¿QUÉ PASA CON LOS QUE PROFESAN TENER EL DON
HOY?
A. LOS MILAGROS TAMBIÉN PUEDEN SER REALIZADOS CON MALAS INTENCIONES
1. Los hechiceros de faraón realizaron milagros con magia para imitar los milagros de Moisés y Aarón
RVR60 Ex 7:22: "22 Y los hechiceros de Egipto hicieron lo mismo con sus encantamientos; y el corazón
de Faraón se endureció, y no los escuchó; como Jehová lo había dicho."
2. Los hechiceros de faraón se vieron limitados frente al poder de Dios
RVR60 Ex 8:18: "18 Y los hechiceros hicieron así también, para sacar piojos con sus encantamientos;
pero no pudieron. Y hubo piojos tanto en los hombres como en las bestias."
Conclusión:
Lamentablemente muchas personas aún están esperando una señal milagrosa para dar el paso de fe o
esperando que Dios haga un milagro visible para comprobar que es real.
En las Escrituras vemos cómo el pueblo de Israel experimentó en primera fila los milagros del Señor y aun
así dudaban si el Señor sería capaz de llevarlos a la tierra prometida.
Diariamente Dios cura milagrosamente a algunas personas. Dios aún realiza asombrosos milagros,
señales y maravillas; y algunas veces realiza esos milagros a través de un cristiano. Sin embargo, como
ya señalamos, no necesariamente son los dones de milagros del Espíritu.
El propósito principal para los dones de milagros era el “probar o autentificar” que el Evangelio era
verdadero y que los apóstoles eran verdaderamente mensajeros de Dios.
La Biblia no dice categóricamente que los dones de milagros hayan cesado, pero sí, establece el
fundamento por el que ya no pueden ser necesarios de la misma manera que sucedieron como se
registra en el Nuevo Testamento.