Alabanza 25 de julio de 2021.

Ya no soy esclavo del temor. En el Salmo 23 “Aunque ande en valle de sombras no temeré mal alguno. Jehová
pelea por nosotros y estaremos tranquilos con el Rey de Reyes y Señor de Señores. El cielo y la tierra pasarán
mas su Palabra no pasará. En el mundo tendremos aflicción, pero somos mas que vencedores.

Oramos por el Modelo de Familia: Restaura la familia en Venezuela y a nivel mundial, orando por la familia
representada en la Iglesia Emanuel en el Nombre Poderoso de Cristo Jesús. Oramos por Israel, dice su palabra
Bendeciré a los que te bendigan. Bendecimos a toda Israel, su fauna. Su flora, su gente. Bendice y guarda su
tierra en el Nombre Poderoso de Jesús. Te damos gracias y nos ponemos de acuerdo en la unidad por nuestro
país, Venezuela, bendice cada territorio, municipio, clamamos por esta nación y nos ponemos de acuerdo para
declarar bendición y restauración de nuestra tierra, en el Nombre Poderoso de Cristo Jesús; intercedemos por
Venezuela para derribar, destruir y anular todo espíritu de ansiedad, de enfermedad, de miseria, y restauración
de todas las personas afectadas por Covid y toda enfermedad. Cristo la llevó a la Cruz del Calvario. Amén.

Prédica por el Pastor Eliecer Blanco 25/07/2021.-

Gracias Señor por tu paz, por la tranquilidad por tu amor eterno. Amén. Salmo
119 (NVI): “Dichosos los que van por caminos perfectos, los que andan
conforme a la ley del Señor. Dichosos los que guardan sus estatutos y de todo
corazón lo buscan. Jamás hacen nada malo, sino que siguen los caminos de
Dios. Tú has establecido tus preceptos, para que se cumplan fielmente. ¡Cuánto
deseo afirmar mis caminos para cumplir tus decretos! No tendré que pasar
vergüenzas cuando considere todos tus mandamientos. Te alabaré con
integridad de corazón,
cuando aprenda tus justos juicios. Tus decretos cumpliré; no me abandones del
todo”.
Amar la Palabra de Dios, encender la llama por su Palabra. Dios nos trae su
palabra. Recordando de aquel que edificó la Casa sobre la Roca y aquel que
edificó sobre la arena. La roca es la Palabra de Dios. No debemos desagradar
a Dios. La Palabra de Dios dice Mateo 18:19-20: “Además les digo que, si dos
de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les
será concedida por mi Padre que está en el cielo. Porque donde dos o tres se
reúnen en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”.
Su Palabra lo dice no pecar contra El, en mi corazón atesoro tu Palabra. Ella es
viva y eficaz como lo dice en Hebreos 4:12 (NVI) 12 Ciertamente, la palabra de
Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos.
Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los
huesos,[a] y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón”.
Tenemos una batalla continua. Mi Dios suplirá no te preocupes. Dios abre
puertas. La Palabra tiene poder en nuestras vidas. El salmista dijo en el Salmo
119:11: “En mi corazón atesoro tus dichos para no pecar contra ti”.
Las tempestades vienen, pero, la Palabra nos confortan, nos anima y activa
nuestra Fe. En el Salmo 119:16: “En tus decretos hallo mi deleite, y jamás
olvidaré tu palabra”. Y el Salmo 119:105: “Tu palabra es una lámpara a mis
pies; es una luz en mi sendero”. Tu palabra y tu Ley, es parte de mi vida;
reconfirmemos este pacto de nuestro padre; me regocijo y deleito en tu Palabra.
En Daniel 3, encontramos la historia de Sadrac, Mesac y Abednego; fueron
echados al horno de fuego sino adoraban la estatua; se mantuvieron de pie,
nuestro Dios nos libra de todo mal. Somos la sal y luz de éste mundo. El
enemigo viene a matar, destruir y robar. Mientras más grande sea la
circunstancia, mas grande va a hacer la bendición de Dios. Adorar y dar gracias
a Dios tengo que hacerlo, amemos, abracemos su Palabra. La Palabra es el
escudo y la espada; no sé tu situación y circunstancia; lee, valora y atesora su
palabra y aumenta el tiempo de amar, abrazar y atesorar su Palabra. En
Apocalipsis 3:20 dice: “Mira que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz
y abre la puerta, entraré, y cenaré con él, y él conmigo”. Si tu vida pende de un
hilo; recuerda: No desmayes, como dice en Isaías 41:10 (RVR): “ 10 No temas,
porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo;
siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”. Ora sin
cesar, búscame y reconforta tu Pacto con Dios. Amén.