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IRRI AJR

IRRI

DE LA IDEA DE
RECONOCIMIENTO AL
RECONOCIMIENTO AL A LAS
IDEAS.

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IRRI AJR

AIDER JULIAN ROMERO CALDERON

DE LA IDEA DE RECONOCIMIENTO AL
RECONOCIMIENTO A LAS IDEAS.

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IRRI AJR

Agradecimientos:

“A todo y todos aquellos que sucumbieron en mi mente, para


dirigir mi pensamiento en su contra o respeto, por hacerme
consciente de lo inestable del mundo y del desequilibro que eso
me provoca dentro.”
AJR.

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IRRI AJR

A la memoria de todos los que caen y suplican un poco de


misericordia con el mundo que les rodea.
Por todos los que luchan, porque vivir dignamente es de
humanos.
No os rindáis ni perecéis, consigue la pieza fundamental para
escapar de esta espiral.
AJR.

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IRRI AJR

Prologo.

Siempre intentando reconocerme. Las confusiones, la pereza y una que


otra barrera má s han dispuesto el querer olvidarme de mi mismo. Hoy
decidí escribir porque tengo tiempo y es mi deseo hacerlo. La
incertidumbre que me traía hace algunos añ os de posibilitar o no la
expresió n de mis ideas ya no me atañ e tanto, ahora veo má s necesario
determinar mis ideas y eso debido a distintas circunstancias.

La principal es que estoy olvidando lo que he creado hasta ahora y está


haciéndose urgente volver a plantearlas para recuperarlas. Estoy
olvidá ndome de mi mismo y si lo hago me integrare a un sistema, a unas
instituciones que no deseo aun penetrar, no hasta tener una base que me
permita actuar con voluntad e individualidad.

Otra razó n de gran afá n es que no puedo dejar al mundo solo mientras
perece. Desde ahora debo concentrarme má s sino quiero arriesgarme al
suplicio, para mí des fortunio la inmediatez está haciendo estragos en mí:
veo lo superficial olvidá ndome de entrar en profundidad. Esto debido en
gran parte a que me he destinado a finalidades que no compete la
finalidad ú ltima , solo por asegurar algunas cosas que me consistirá n
seguridad pero no una felicidad, pues esta solo se conseguirá logrando
algo para expresar y posibilitar.

Este texto contendrá mis reflexiones sobre el mundo y abrirá la vía para
una transformació n de la realidad. Todo esto se dirigirá bajo un precepto,
un concepto, una palabra: El Reconocimiento.

El reconocimiento como medida de todas las cosas y fuente principal del


sentido y existencia del hombre será el faro que nos destinara a un paso
por la historia, por el hombre y por todas aquellas instituciones que ha
implementado por este mundo donde aun respiro.

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Al final de esas consideraciones, invocare unos principios para dirigir mi


teoría a una posibilidad cierta de cambio. La transformació n por medio de
esa finalidad que me he podido facultar: la salvació n. Para ello el
momento actual me propone unas medidas necesarias, porque frente a la
realidad se propondrá no lo posible, sino lo necesario así este se presente
como utó pico.

Aun entonces las ú nicas expectativas ciertas con este texto es poder
terminarlo, poder armar una red ló gica que contribuya a identificarme
como individuo y por lo demá s veremos que podremos aportar para la
finalidad ú ltima que maneja este texto: El Reconocimiento de una nueva
realidad, donde se estructuren nuevas posibilidades de existencia y
creación que permitan el EQULIBRIO del mundo en que nos encontramos.

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Capitulo primero I:
El Ser.
Entre las maromas por las que mi mente ha pasado durante este último
lapso de creación del conocimiento he decidido pulir lo que hasta ahora
ya tengo concebido. Es verdad como dije antes que me he olvidado de mi
mismo, pero al igual me es satisfactorio que al encontrar un poco de
espacio y tiempo siempre me es factible reencontrarme.

Este capítulo en un inicio tenía por propuesta explicar los cinco atributos
del hombre o del ser, más sin embargo debí renovarlo puesto que era una
charla monótona que nada que ver con mi yo y la finalidad de este texto.
Sin más escarapelas me propondré a explicar al Ser desde sus atributos
los cuales posibilitan el Reconocimiento.

Como idea general tendremos este precepto: el Ser se compone de cinco


atributos principales que son los sentidos, la razón, las emociones, la
voluntad y la capacidad.1
Los sentidos son la base inicial que permite relacionar al hombre con el
mundo, posibilita conocerlo por medio de la recolecció n de informació n.
Los sentidos son bá sicos y creo que todo aquel que lea esto sabrá de
cuales hablo. Aun así los sentidos por si solos permite percibir este
mundo pero no darle una valoració n al mismo. Solo se nos aparece un
á rbol, una mesa, una escalera, una vaca y una empanada. Es necesario que
el hombre posea otros atributos con los cuales interactuar en el mundo.

La Razón es nuestro segundo atributo, estos días que transitan me la han


pintado como algo horrible, como el asesino perfecto porque en si misma
se legitima para obrar a cualquier acto. Cada vez que hablan de la razón
dirigiéndose a esa direcció n pienso en la frase de Nietzsche que decía que
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Hay que entender que el hombre como ser es muy variado, estos atributos que me encuentro nombrando
aquí no son absolutos y como estos hay muchos más. Simplemente me resulta necesario explicar estos cinco
atributos con el fin de que se entienda de una forma más completa la teoría del Reconocimiento.

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Dios estaba muerto y que ahora el hombre le era dado todo. Si era verdad
dicho argumento 2 es de suponer que como el todo está dado, el hombre
ya no tiene límites y de colocarlo en un panorama moral (en una medida
de grados morales) al ser humano se le está dado hacer el mal y el bien
segú n disponga y legitime la Razón.

Siguiendo esta línea diré que la razón es inherente en nosotros es el


sistema de legitimació n de la realidad, ella la estructura, la enjuicia y la
califica. Nos direcciona a la finalidad deseada, y es de nosotros como
individuos el dirigirla a un fin digno lejos de ese precepto Nietzscheano
del todo es posible y dirigirla al nuevo precepto de mi autoría: Dirigir la
razón, como atributo inherente del hombre a lo necesario.3

El tercer atributo dispone mi absoluta concentración. Son las emociones


un atributo que me trae mucha ambigüedad. Se puede decir con ayuda de
Fernando Gonzales que las emociones son reacciones nerviosas que
surgen como respuesta distintos circunstancias del medio y del estado en
que nos encontremos. Es así como con la razón legitiman o deslegitiman
nuestro conocimiento, estos dos otorgan valor a lo que hacemos y nos
disponen frente a la exterioridad y nosotros mismos. De vez en cuando
estos chocan, uno quiere una cosa y el otro una cosa distinta, a veces se
concilian y se dirigen juntas a una sola finalidad.

Es como el caso de mi amor a una muchacha, la razón me indica, me


aconseja que le hable, que la haga parte de mi existencia de manera más
profunda y sin embargo la emoción, ese impulso nervioso que me impide
acercarme con seguridad me hace dejarla en el olvido, cuando bien ella se

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Aun así sigo viendo iglesias, pues ni modo no le creeré nada porque a pesar que quisieron matar a Dios
otro ya está puesto en su lugar. Más tarde hablare de ello pero una suposición no vendría nada mal para
usted señor (a) lector.
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¿Qué es lo necesario? Esta pregunta se responde asemejando lo necesario con lo bueno de Aristóteles. En
tanto lo bueno es lo que permite la existencia del hombre y lo necesario es lo que facilita el equilibrio en el
mundo, la existencia del mundo se mantendrá con lo necesario no con lo que deseamos. Seré mas concreto
con la necesidad pero, ello será en capítulos superiores a este.

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me presenta como una posibilidad de completar una parte de mi ser que


nunca he llegado a saciar.4

Dejémonos de intereses vanos a pesar que esto haga esta charla escrita
muy interesante, amenos pues claro no les preocupe lo que pase con la
vida amorosa de este humilde autor. Pues bueno es hora de seguir con un
atributo muy importante, creado desde San Agustín y se ha mantenido
nuestros días, uno de los pilares principales de la existencia humana que
ha posibilitado todo tipo de conquista y cochinadas. Es el medio esencial
más no absoluto que materializa las ideas del hombre: La voluntad.

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