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Experiencia de aprendizaje 3
Utiliza diversas fuentes, para indagar sobre un hecho, proceso o problema histórico,
evaluando la pertinencia, fiabilidad y validez de esas fuentes
Explica los cambios, las permanencias y las relaciones de simultaneidad entre los
diversos problemas históricos a partir de la formulación de preguntas
Elabora explicaciones sobre hechos, procesos o problemas históricos relevantes a nivel
político, social, ambiental, económico y, considerando la perspectiva de los
protagonistas
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Recuerda:
El ensayo es un texto argumentativo que se utiliza para exponer pensamientos e ideas sobre un
tema de interés. Es un texto que ayuda a reflexionar al lector sobre una realidad del contexto
social, científico, económico, educativo, ambiental, etc.
Características
Trata de un tema específico.
Es riguroso porque el autor se ajusta a temas reales.
Puede ser de tipo filosófico, reflexivo o crítico.
Recurre a gran variedad de recursos discursivos, como la cita textual, la definición, la
anécdota, el recuerdo; estos recursos contribuyen a la argumentación
Estructura Descripción
Explicamos brevemente la importancia del tema a través de un
texto breve y coherente. Presentamos la tesis (una idea o postura
Introducción que se quiere defender con diversos argumentos). Recuerda que,
en torno a la tesis gira todo el ensayo.
La prosperidad que experimentó la sociedad norteamericana en las décadas de 1910 y 1920 fue
consecuencia de factores como la renovación del sector energético, la consolidación de nuevos
sectores industriales, el aumento de la productividad y del mercado de consumo, y del incremento
de la actividad empresarial, todo lo cual se manifestó en un crecimiento de 15 % anual entre 1914
y 1918. También hay que considerar que este auge no fue experimentado de manera homogénea
por toda la sociedad.
La clase media se benefició de este impacto: se estima que hacia 1929 una de cada tres familias
norteamericanas tenía un nivel de vida por encima de lo que se consideraba “decente” y que
permitía cubrir más allá de sus necesidades básicas. Fueron asimismo beneficiados por la
reducción de la tasa de desempleo, que bajó del 12 % al 3,2 % entre 1921 y 1929.
Los obreros sufrieron un doble impacto, ya que mientras sus beneficios sociales se incrementaban
considerablemente mediante sueldos elevados, vacaciones pagas, planes de seguro y jubilación,
en tanto organización sindical, su influencia se redujo considerablemente, ya que el número de
obreros afiliados descendió de cinco a tres millones. La prosperidad familiar había derrotado a la
política de protesta, como lo indica el hecho de que entre 1920 y 1928 el número de huelguistas
decreciera de un millón trescientos mil a tan solo trescientos mil.
Los campesinos fueron los menos beneficiados con esta coyuntura. Frente a los bajos precios del
mercado respecto a los productos agrícolas, un número considerable de ellos no pudo hacer
frente a las deudas y vieron embargadas sus tierras. En muchos casos, los antes propietarios
pasaron a ser simples arrendatarios de los nuevos dueños de sus tierras.
Adaptación de EE.UU. y la Gran Depresión. Historia Global Online.
http://historiaglobalonline.com/2009/04/17/eeuu-y-la-gran-depresion/
Con tal término se designa en Europa occidental a la segunda mitad de la década de 1920 y en
EEUU a toda ella. Fueron años de crecimiento económico y de transformaciones políticas, sociales
y culturales. El crack bursátil de Nueva York de 1929 y el inicio de la crisis de los treinta pudo un
abrupto final a esos “felices veinte”.
La economía norteamericana, ahora la más grande y la más rica en términos per capita, se
encontraba inmersa en una fase expansiva como consecuencia de la difusión generalizada de las
innovaciones resultantes de la Segunda Revolución Industrial a la producción (acero barato y de
calidad, electricidad, maquinaria agrícola e industrial autopropulsada, etc.) y al consumo de las
familias (automóvil, electrodomésticos, teléfono, etc.). En buena medida, los “felices veinte”
norteamericanos anticiparon pautas de consumo que veremos extenderse, primero, por Europa
occidental en la “Edad de oro” del crecimiento económico de la segunda posguerra mundial (1950-
1973) y, más tarde por el resto del mundo. El dinamismo de la sociedad norteamericana es
también perceptible en otras manifestaciones (cultura, costumbres, etc.). Pasados los peores años,
la República de Weimar se caracterizó también por una gran creatividad intelectual.
A fines de 1924, no faltaban, pues, motivos para un cierto optimismo. De hecho el crecimiento
económico de la segunda mitad de los años veinte no se circunscribió a Estados Unidos.
En este contexto más favorable, en unos algunos países se comenzó a considerar seriamente la
posibilidad de abandonar los tipos de cambio flotantes –es decir, no fijos- y retornar a ese símbolo
de un pasado mejor representado por el patrón oro. Anticipándose a la Conferencia de Bruselas
(1920), Estados Unidos, junto a un grupos de países especialmente integrados en su economía
(Cuba, Filipinas, Nicaragua, Panamá) ya había dado ese paso. Pero otros países carecían de las
reservas de oro necesarias para seguir ese ejemplo. A fin de evitar los problemas que podrían
derivarse de ello cuando por fin se hiciese realidad la ansiada recuperación económica, en la
conferencia de Génova (1922), convocada por la Sociedad de Naciones, se adoptó por primera vez
en la historia un sistema monetario internacional negociado entre numerosos países. Se trataba de
una versión algo modificada del patrón oro clásico. Consistía en admitir como base monetaria no
sólo el oro, sino también divisas convertibles en oro. En la práctica, éstas fueron la libra esterlina y
el dólar. También se permitía a cada país que adoptase el patrón cambios oro cuando y al tipo de
cambio que estimase oportuno. Esto es, de manera descoordinada.
Los efectos económicos del retorno al patrón de cambios fijos dependieron crucialmente del tipo
Una importante novedad político-económica de los años veinte es el creciente papel económico
del Estado respecto a la época del laissez faire prebélico. Anticipando lo que ocurrirá en versión
ampliada en la segunda posguerra mundial, el gasto público tendió a aumentar, particularmente en
sus capítulos más sociales (pensiones, desempleo, salud, educación y vivienda). En una muestra en
la que figuran las economías más avanzadas, el gasto público pasó de representar el 11% del PIB en
1870 al 13% en 1913 y 1l 23% en 1937.
http://www.historiasiglo20.org/HM/3-2.html
Han sido muchas las posturas tomadas por los especialistas en la elaboración de hipótesis que
conduzcan a establecer las causas de la gran depresión de los años treinta. La teoría económica
marxista ha hecho hincapié en el análisis de las grandes crisis del capitalismo achacándolas a la
descoordinación entre producción y consumo. La sobreproducción ha estado siempre en el punto
de mira de los historiadores de este período, como Nogaro, como clave explicativa de la crisis del
29. Para Nere, en cambio, la sobreproducción es un mito ideologizado y no explica todas las
posibilidades causales.
Trataré de elaborar en este epígrafe una síntesis de los factores que causaron la crisis de los años
treinta. Estos factores son: La sobreproducción, el desorden monetario y la desigual y relativa
recuperación económica.
2.1 La Sobreproducción
La producción supera las necesidades reales de consumo a partir de 1925, sobre todo en los
Estados Unidos, donde los Stocks aumentaban conforme se reconstruían las economías europeas.
Las causas de la sobreproducción son:
· Distribución desigual de las rentas, que lleva implícita la limitación del consumo a las capas
sociales más ricas, que en la mayor parte de los países no eran muy numerosas. Galbraith señala
que en los Estados Unidos el 5 por 100 de la población recibía la tercera parte de la renta
nacional.
· Mantenimiento de precios de monopolio, tipo cartel, que obligaba a la existencia de grandes
cantidades de stocks sin vender, al comprometerse los fabricantes a mantener unos precios
pactados de antemano.
· Desfase entre precios agrícolas e industriales: los primeros crecen más lentamente que los
segundos y hacen disminuir, por tanto, el poder adquisitivo de los campesinos ( importante
clientela de la industria.
· La reconstrucción de las economías europeas, y el incremento de producción de algunos países
menos desarrollados o coloniales durante la guerra, junto con el desenfreno productivo de los
Estados Unidos.
El sector agrario fue el más perjudicado por los excedentes invendidos y la consiguiente baja de
precios, cuyo índice pasó de 147 en 1925 a 138 en 1929.
¿Qué medidas se debieron tomar para evitar la crisis de 1929 en Europa y el Perú? El
aumento de la productividad y del mercado del consumo y de incremento de la actividad
empresarial
¿Por qué? Para seguir a nivel de productividad y economía y no llegar a crisis como esta
pasando hoy x hoy en nuestro país
¿Qué lecciones nos deja esa crisis para enfrentar la que hoy estamos viviendo? Aprender de
aquellos personas que ya pasaron por una situación difícil nos ayuda a nosotros a superarlas
mejor. Ejemplo. La situación de covid que vivimos no sólo a puesto en jaque a la economía
mundial, si no que esta suponiendo una prueba de fuego para muchas personas a nivel
personas a nivel personal.
¿Qué cambios y permanencias puedo señalar respecto de la crisis que hoy estamos viviendo?
Poniendo un ejemplo que es de covid 19 y la huela indefinida que hubo a dejado muchos
cambios crisis económicas crisis políticas
Al redactar el ensayo se debe considerar mencionar los cambios, las permanencias y las relaciones
de simultaneidad entre los que ocurrió en Europa y lo que ocurrió en Perú así como la perspectiva
de los protagonistas
Redacta tu ensayo