CALAVERITA LITERARIA

MAESTROS DE LA URBANA 401 ESCUELA RAMÓN CORONA

En los alrededores de la escuela, ya se siente el día de muertos, los del más allá nos visitan y
todos están muy contentos.

El altar de los difuntos de colores se engalana, lo decoran los alumnos es tradición mexicana.

Ya va ser el día de muertos y la huesuda ya está cerca, pues viene por los maestros que aún
están en la puerta.

Llega la huesuda a este hermoso plantel, es la escuela Ramón Corona donde se viene aprender.

Está en duda la fiesta, está en duda el canto, lo único seguro es que irán al campo santo.

La muerte ya está lista para salir en su día, con la directora LOLITA acordó su estadía.

Trece maestros me puedo llevar esta vez, si es que me apuro antes de la kermesse.

LOLITA directora pareces mi abuelita, puesto que tendrás la escuela muy ordenadita.

En primero voy a ver, chin están la maestra TANA y SUSY otra vez, si me las llevo, estos
chiquitos nunca aprenderán a leer.

Al llegar a su trabajo el maestro Ángel se asustó, por que la calaca huesuda lo esperaba en su
salón.

Ups, aquí es 3 año, no me lo puedo llevar, pues hay muchos distraídos que tiene que apoyar.

No hay manera de salvarse, todos confían en su suerte, pero desafortunadamente no escaparán

de la muerte.

Pasaré al otro salón o por Dios está La maestra KARLITA, porque será que de quinto nunca la
quitan y si me la llevo, no, capaz que se vuelve loquita.

Voy por el maestro SERGIO que desde cuando lo ando buscando, aunque sus historias, él siga
contando.

Aquí sexto es, el maestro LEONEL tranquilo si es, pretexto no tengo para llevármelo pues.

¿Qué es lo que está pasando? a nadie me estoy llevando, ¿a quién me voy a llevar? ¿A las de la
mesa directiva o a los del aseo escolar?

Mi lista es muy clara, no la tengo que alterar, ya sé que a MARTINA y SILVINA las tengo que
perdonar, pero ¿habrá maestros que aún me pueda llevar?

Toda triste la calaca otro maestro buscó en el aula de quinto grado al maestro HUMBERTO
encontró y entre las sillas se escondió y por la ventana vio que la maestra VICTORIA y el maestro
IGNACIO estaban haciendo oración.

Es de no creerse comentó la calaca, no sé porque se asustan si yo no doy lata.

La huesuda entristecida se fue corriendo a la kermes para ver a quien veía y la invitaba esta vez.
Encontró a los maestros BETO y VIOLETA comiendo gelatina pastel y dijo de seguro me los llevo
esta vez.
Y esa calaca flaca a la maestra LOLITA se llevó, y de esa mujer tan guapa solo el recuerdo ahí
quedó.

La calaca toda cansada con voz fuerte exclamó, de esta escuela me voy, yo solo quería un pan
de muerto que ni la maestra ABIGAIL me dio.

Ya se va la muerte pues no fue buena su estadía y prometió a los maestros que ha esta escuela
nunca volvería.

Hay mamita este año te has de quedar solita, pero te invitamos mejor ir con la súper Claudita, en
donde encontraras mucha dicha y no andarás tan solita.