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Prefiere habitar los bosques y las montañas donde encuentra su comida y puede
ocultarse. Su población era hace tiempo, seguramente, de dos millones de
individuos. En la actualidad, la especie está protegida y se considera que existen
entre 500 mil y 750 mil osos negros en ese continente. La subespecie de Nuevo León,
México se considera en Peligro de Extinción.
El oso negro no hiberna en sentido estricto, sino que pasa el invierno en un estado
de somnolencia, viviendo de las reservas de grasa acumuladas durante el otoño. Es
omnívoro, aunque su régimen alimentario es en mayor parte vegetal. Contrariamente a
los prejuicios, el oso negro es un buen nadador y trepa fácilmente a los árboles
para escapar de un peligro.
Características físicas
El oso negro mide generalmente entre 140 y 200 cm de largo.4 Su altura hasta la
cruz es de entre 100 y 130 cm.5
El oso negro es más pequeño que el oso polar y el oso pardo. Su peso depende de la
edad, del sexo del animal y la temporada: en otoño, el oso negro engorda y acumula
reservas de grasa con el fin de pasar el invierno. Las hembras pesan entre 40 kg y
180 kg (media de 70–80 kg),6 mientras que los machos pesan entre 60 y 275 kg (media
de 120 kg). Se encontró un macho de 400 kg en el condado de Craven, en Carolina del
Norte.7
Los osos negros son capaces de tenerse de pie y de andar sobre sus patas traseras:
éstas son ligeramente más largas (13 a 18 cm)8 que las patas delanteras. Cada pata
está dotada con cinco dedos con garras no retráctiles utilizadas para rasgar, cavar
y subir a los árboles. Los osos negros poseen una gran fuerza física: Un oso negro
de apenas 54 kg (120 libras) puede voltear con una pata delantera fácilmente, una
roca de entre 140 y 147 kg (310 y 325 libras).9 Un golpe de una pata delantera
basta para matar a un ciervo adulto.
El oso negro posee ojos pequeños, orejas redondeadas, un largo morro puntiagudo de
color marrón, y una cola relativamente corta (8–14 cm). Sus ojos son marrones. Su
visión no es especialmente buena pero la experiencia pone de manifiesto que le
permite distinguir los colores. En cambio, su oído y su olfato están muy
desarrollados; su lengua ágil y sus labios móviles le permiten comer pequeñas bayas
y hormigas. Por último, su perfil facial recto y su morro puntiagudo lo diferencian
del Grizzly, que vive también en América del Norte. El oso negro es sin embargo más
pequeño.10