MACROECONOMICS: PRIVATE AND PUBLIC CHOICE

Autores: James Gwartney, Richard Stroup, Russell Sobel y David Marpherson

Capítulo XVI: CREANDO UN AMBIENTE PARA EL CRECIMIENTO Y LA PROSPERIDAD

 ¿Por qué es importante el crecimiento económico?

 ¿Cómo el crecimiento económico sostenido cambia los niveles de ingreso y de vida
de las personas?
 ¿Cuáles son las principales fuentes de crecimiento económico?
 ¿Qué instituciones y políticas promoverán el crecimiento y prosperidad?

A lo largo de la historia, la mayor parte de la población mundial ha luchado cincuenta,

sesenta y setenta horas por semana sólo para satisfacer las necesidades básicas de la
vida: comida, ropa y vivienda. Durante los dos últimos siglos, el crecimiento económico
sostenido ha cambiado esa situación para la mayoría de las personas en América del
Norte, Europa, Oceanía y Japón. Incluso en estas regiones, sin embargo, el aumento de
los ingresos no siempre ha sido la norma. Según Henry Phelps Brown, un autor y
economista británico del siglo XX, el ingreso real de los trabajadores ingleses de la
construcción se mantuvo prácticamente sin cambios entre 1215 y 1798, un período de
casi seis siglos. En otras partes de Europa, los trabajadores experimentaron un
estancamiento similar de los ingresos reales a lo largo de este período. Los bajos
ingresos y la pobreza generalizada siguen siendo la norma en la mayoría de los países,
en particular los de América del Sur, Centroamérica, África y para los países del sur y
centro de Asia.

¿Por qué algunos países crecen y alcanzan altos niveles de ingresos mientras que otros
se estancan? Los apartados sobre las claves de la prosperidad ya han abordado varias
dimensiones de este tema, pero ahora queremos considerarlo más directamente, y de
una manera más completa.

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LA IMPORTANCIA DEL CRECIMIENTO ECONÓMICO

Robert Lucas, el premio Nobel de 1995, ha declarado: “Una vez que empiezas a pensar
en el crecimiento económico, es difícil pensar en otra cosa". ¿Por qué Lucas y muchos
otros economistas ponen tanto énfasis en el crecimiento económico? El crecimiento
proporciona la fuente de mayores ingresos y niveles de vida. El crecimiento de la
producción real es necesario para el crecimiento del ingreso real. Sin crecimiento, no
se pueden lograr niveles de ingresos más altos.

El crecimiento económico amplía la capacidad productiva de una economía. Como el

GRÁFICO 1 muestra, una expansión en la producción se puede ilustrar dentro del
análisis de la frontera de posibilidades de producción. Por ejemplo, si un país
experimentó un crecimiento económico durante la primera década de este siglo, esto
significa que el país podría producir una mayor cantidad tanto de bienes de consumo
como de bienes de capital en 2010 con relación a 2000. Este crecimiento desplaza la
curva de posibilidades de producción de la economía hacia afuera (de AA a BB).

Cuando el PIB real de una nación aumenta más rápidamente que su población, el PIB
per cápita, es decir, el PIB por persona, también se expandirá. El crecimiento del PIB
per cápita significa más bienes y servicios por persona. En la mayoría de los casos, esto
significará que la persona típica tiene un nivel de vida más alto: una mejor dieta, mejor
salud y acceso a servicios médicos, una mayor esperanza de vida y mayores
oportunidades educativas. Los estudios también han demostrado que a medida que
aumenta el ingreso per cápita, las personas ponen más énfasis en el cuidado del medio
ambiente y, en general, dedican más tiempo a la recreación y el esparcimiento. Por lo
tanto, un ingreso per cápita más alto significa no solo más bienes materiales, sino
también un medio ambiente más limpio, más tiempo libre y la disponibilidad de una
amplia gama de bienes y servicios que la mayoría consideraría una mejora de la calidad
de vida.

El impacto del crecimiento económico sostenido

Hay una tendencia a pensar que una diferencia de 1 o 2 por ciento en el crecimiento
tiene poca importancia. Sin embargo, cuando se mantiene durante un período
prolongado, aparentemente pequeñas diferencias en el crecimiento pueden tener un
impacto enorme.

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La regla de los 70 proporciona una herramienta sencilla que puede ayudarnos a
comprender la importancia del decrecimiento sostenido. Esta regla hace que sea fácil
calcular cuántos años se necesitarán para que los ingresos se dupliquen a distintas
tasas de crecimiento. Se divide setenta por la tasa de crecimiento promedio de un país,
el resultado obtenido será el número de años necesarios para que un nivel de ingresos
se duplique. Por ejemplo, con una tasa de crecimiento anual promedio del 5 por ciento,
se necesitarían catorce años (70 dividido por 5) para que el nivel de ingresos se
duplique. Si la tasa de crecimiento anual promedio de un país fuera del 3,5 por ciento,
los ingresos se duplicarían cada veinte años (70 dividido por 3,5). A una tasa de
crecimiento del 1 por ciento, se necesitarían 70 años para que los ingresos se
dupliquen. (Nota: La regla del 70 también se aplica a la tasa de rendimiento de las
inversiones. Claramente, durante un largo período de tiempo, pequeñas diferencias en
las tasas de rendimiento pueden marcar una gran diferencia en el valor acumulado de
sus ahorros o inversiones).

El GRÁFICO 2 ilustra el impacto de las diferencias en las tasas de crecimiento durante

un período prolongado 30 años en este ejemplo. Considere cuatro países con el mismo
nivel inicial de ingreso per cápita, $ 10,000. El gráfico indica cuáles serán sus ingresos
30 años después con cuatro tasas de crecimiento diferentes: 4 por ciento, 2 por ciento,
1 por ciento y 0 por ciento. Después de 30 años, el país que crece a una tasa anual del 4
por ciento tendrá un ingreso de $ 32.434. Los ingresos del país que crece a una tasa del
2 por ciento serán solo de $ 18.114. Un país con una tasa de crecimiento del 1 por ciento
logrará solo un ingreso de $ 13.478 después de 30 años, mientras que los ingresos del
país con una tasa de crecimiento del 0 por ciento seguirán siendo de $ 10.000. Por lo
tanto, aunque los cuatro países tenían todos los mismos ingresos iniciales, 30 años
después, el nivel de ingresos del país con la tasa de crecimiento del 4 por ciento será
mucho mayor que la de los demás.

Las diferencias en las tasas de crecimiento sostenido durante algunas décadas

alterarán sustancialmente los ingresos relativos de los países. Por un lado, las naciones
que experimentan períodos sostenidos de rápido crecimiento económico ascenderá
rápidamente en la escala de ingresos y, finalmente, logrará ingresos altos. Por otro
lado, las naciones que crecen lentamente o experimentan disminuciones en el nivel de
PIB real per cápita descenderán en la escala económica.

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FUENTES CLAVES DE CRECIMIENTO ECONÓMICO Y ALTOS INGRESOS

¿Por qué algunos países crecen y alcanzan altos niveles de ingresos mientras que otros
siguen siendo pobres y menos desarrollados? Las ganancias del comercio, el
descubrimiento empresarial y la inversión son las principales fuentes de crecimiento
económico. Echemos un vistazo más de cerca a cada uno.

Las ganancias del comercio

Como hemos destacado a lo largo de este libro, el comercio es mutuamente ventajoso.

Todas las partes que comercian potencialmente ganan, y esto proporciona la
motivación para el intercambio. El comercio mueve mercancías, servicios y recursos de
personas que los valoran menos a personas que los valoran más. Eso también ayuda a
los socios comerciales a lograr mayores niveles de producción y de ingresos como
resultado de la división de trabajo, especialización y adopción de métodos de
producción en masa. Cuando los individuos y las empresas se especializan en aquellas
actividades en donde su costo de producción es bajo, podrán producir más resultados.
De manera similar, las producciones más grandes y el costo unitario más bajo se puede
a menudo lograr cuando un bien o servicio se suministra en grandes cantidades. Por
ejemplo, bienes que van desde lápices hasta automóviles y reproductores de DVD se
pueden producir de manera más económica cuando son suministrados por empresas
que los producen en millones en lugar de miles.

Es fácil reconocer que nuestro nivel de vida sería bajo si no pudiéramos comerciar con
otros, ya que todos adquirimos numerosos bienes a través del comercio que serían
costosos o imposibles de producir por nosotros mismos. Suponga que usted y otros en
su vecindario, el municipio, la ciudad o incluso el estado no podrían comerciar con
forasteros. Claramente, su nivel de vida disminuiría drásticamente porque obtendría
menos beneficios de la especialización y de las economías que acompañan a los
métodos de producción a gran escala.

Es difícil exagerar la importancia del comercio en nuestro mundo moderno. Cuando los
individuos y las empresas pueden comerciar en un área de mercado más amplia, serán
capaces de producir una producción mayor y consumir un paquete de bienes más
diverso. En cambio, los obstáculos que restringen el comercio, ya sea nacional o
internacional, reducirán la producción, los ingresos y el nivel de vida general de la
población.

Emprendedurismo, tecnología y el descubrimiento de mejores formas de hacer las cosas

El descubrimiento de nuevos productos que son altamente valorados en relación con

el costo y el desarrollo de nuevos métodos de producción que reducen los costos
proporcionan una fuerza impulsora para el crecimiento económico. Algunas veces
estos descubrimientos reflejan el avance tecnológico. En otros casos, son los
resultados de la innovación; la aplicación práctica, extensión y difusión de nuevas
ideas, procesos y tecnologías. Claramente, el uso de la capacidad intelectual para
descubrir nuevos productos y los procesos de producción de menor costo han
mejorado sustancialmente nuestras posibilidades de producción. Durante los últimos
250 años, la sustitución de trabajo humano por máquinas accionadas por motor; los
desarrollos de cereales milagrosos, fertilizantes y nuevas fuentes de energía; y mejoras
en el transporte y las comunicaciones han mejorado enormemente los niveles de vida.
Las innovaciones y los avances en tecnología continúan afectando la disponibilidad de
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bienes y servicios. Solo piense en los nuevos productos introducidos durante los
últimos cincuenta años: reproductores de CD, TV de alta definición,
microcomputadoras, procesadores de texto, hornos microondas, videocámaras,
teléfonos, reproductores de DVD, cirugía de derivación cardíaca, reemplazos de
cadera, cirugía ocular LASIK, aire acondicionados, etc. Estos productos han cambiado
enormemente la calidad de nuestras vidas.

Los productos nuevos y mejorados han reemplazado a los antiguos y, a menudo, los
han vuelto obsoletos. El automóvil reemplazó al caballo y la carreta; el procesador de
texto reemplazó la máquina de escribir; el fonógrafo fue reemplazado por el
reproductor de casetes, que más tarde fue en gran parte reemplazado por
reproductores de CD y ahora MP3. Joseph Schumpeter, el gran economista austriaco,
se refirió a este proceso de descubrimiento y reemplazo como "destrucción creativa".

Pero los productos nuevos y mejorados no surgen por casualidad. Deben ser
descubiertos. Esto destaca el papel del emprendedor, el tomador de decisiones
dispuesto a asumir riesgos y probar nuevas ideas. Algunas de las nuevas ideas serán
buenas, pero muchas no lo serán. La mayoría de los nuevos negocios fracasan en los
primeros años y relativamente pocos se convierten en grandes éxitos como lo hicieron
Microsoft, eBay o FedEx.

Para tener éxito, un emprendedor debe ser bueno para descubrir cómo aplicar el
conocimiento científico de una manera práctica. Por ejemplo, Henry Ford jugó solo un
papel menor en la invención y desarrollo del automóvil. No obstante, literalmente
"puso a América sobre ruedas” a través de su aplicación de la especialización y la
división del trabajo. A través de su innovación técnica de la línea de montaje, redujo el
costo de producción de los automóviles. Este ahorro de costos se traspasó a los
consumidores en forma de precios más bajos, lo que hizo que los automóviles fueran
asequibles a más personas. Pronto, casi todo el mundo podía permitirse un coche y, en
consecuencia, Ford se vio beneficiado tanto en ventas como en beneficios récord. Más
recientemente, Fred Smith, presidente y fundador de FedEx, se dio cuenta de que la
era de las computadoras generaría una fuerte demanda de un sistema de entrega
rápida. Descubrió cómo combinar el transporte terrestre y aéreo en una red de
entrega capaz de transportar un paquete prácticamente durante la noche a cualquier
parte del mundo. Sin innovadores como Ford, Smith y millones de otros que operan a
menor escala, los avances científicos son simplemente ideas que esperan ser
descubiertas y llevadas al mercado.

Antes de probar una nueva idea, es difícil saber si es buena. Desde el punto de vista del
crecimiento económico, es de vital importancia que los empresarios tengan un fuerte
incentivo para probar nuevas ideas, pero también es importante que los proyectos
derrochadores que reducen el valor de los recursos se detengan. En una economía de
mercado, las ganancias y las pérdidas logran estos objetivos. Nuevas ideas que
aumentan el valor de los recursos -creando suficiente valor para los consumidores para
compensar el costo de oportunidad de producción- generan ganancias económicas
para los emprendedores que las descubren. Por el contrario, las ideas que agotan los
recursos de otros usos más valiosos y convertirlos en algo no tan valioso para los
consumidores da como resultado pérdidas, lo que proporcionará a los empresarios un
fuerte incentivo para descontinuar tales proyectos. Por lo tanto, el proceso de
mercado promueve tanto el descubrimiento de mejores formas de hacer las cosas
como la terminación de proyectos que reducen el valor de los recursos.
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Inversión en capital físico y humano

El equipamiento puede tener un impacto sustancial en la capacidad de producción de

una persona. Incluso Robinson Crusoe, que vive en una isla deshabitada, podría atrapar
más peces con una red de lo que podría con sus manos. Los agricultores que trabajan
con tractores y arados modernos pueden cultivar muchos más acres que sus
bisabuelos, que probablemente trabajaban con azadas. Del mismo modo, la formación
educativa y la formación que mejoran los conocimientos y las habilidades de los
trabajadores pueden mejorar enormemente su productividad. Por ejemplo, un
ebanista, calificado tras años de formación y experiencia, puede construir armarios
mucho más rápida y eficientemente que un neófito.

Inversión tanto en capital físico (máquinas) como en capital humano (conocimiento y

habilidades) pueden ampliar la capacidad productiva de un trabajador. A su vez, las
personas que producen los bienes y servicios más valorados por otros tenderán a tener
ingresos más altos.

Otras cosas son constantes, los países que utilizan una mayor proporción de sus
recursos para producir las herramientas, las máquinas y las fábricas tenderán a crecer
más rápidamente. En consecuencia, la asignación de más recursos para la educación y
la formación también mejorará el crecimiento económico. Sin embargo, es importante
reconocer que la inversión no es un "almuerzo gratis". Cuando los recursos más se
utilizan para producir máquinas, fábricas y escuelas, se utilizan menos recursos
disponibles para producir bienes de consumo corriente.

Durante las décadas de 1960 y 1970, muchos economistas que analizaban el

crecimiento económico destacaron la importancia de los insumos (por ejemplo, más
bienes de capital y más educación) como la fuerza impulsora del crecimiento
económico. Sin embargo, mientras que la inversión es una fuente de crecimiento, una
alta tasa de inversión no garantiza un crecimiento rápido. Las experiencias de las
economías de planificación centralizada de los países del antiguo bloque soviético
ilustran este punto. Estas economías tenían altas tasas de formación de capital y
rápidas mejoras en los niveles de escolaridad. A pesar de sus altas tasas de inversión,
su desempeño no fue impresionante. Crecimiento lento y bajos niveles de vida
eventualmente llevaron a su colapso.

El GRÁFICO 3 resume las tres principales fuentes de crecimiento económico y altos

niveles de ingresos. También resume cómo y por qué cada uno de los tres factores
contribuye al crecimiento e ingresos de una economía.

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El entorno institucional

El comercio, el descubrimiento empresarial y la inversión no ocurren en el vacío. Son

influenciados por las instituciones y las políticas de un país. ¿Qué importancia tienen los
normas y regulaciones políticas, comerciales y sociales que conforman el medio
ambiente institucionalidad de un país. ¿Qué instituciones y políticas prometen mejorar
el desempeño de una economía? Durante las últimas décadas, una considerable
investigación se ha centrado en estas preguntas. Sobre la base del trabajo de Peter
Bauer y Douglass C. North, el análisis moderno del crecimiento destaca la importancia
de las instituciones y las políticas para el desarrollo y la eficiencia en el uso de los
recursos. Daron Acemoglu del MIT, Robert Barro de la Universidad de Harvard y Barry
Weingast de la Universidad de Stanford se encuentran entre los principales
contribuyentes a la reciente literatura en esta área. Este enfoque institucional enfatiza
que cuando las naciones fomentan un entorno económico, la gente comerciará,
invertirá y participará en actividades empresariales de una manera que estimule el
crecimiento económico y posibilite altos niveles de ingresos. En muchos sentidos, el
enfoque institucional moderno del crecimiento refleja la visión de Adam Smith, quien
también destacó la importancia de las políticas y las instituciones.

El economista destacado: Douglass North (1920-2015)

El ganador del Premio Nobel de Economía en 1993, Douglass C. North es el más conocido por su
aplicación tanto de la teoría económica como del análisis estadístico a temas en el campo de la
historia económica. El trabajo del profesor de la Universidad de Washington en St. Louis, ha
demostrado que el desarrollo de las leyes de patentes y la corporación como entidad legal
fueron fuentes importantes de crecimiento económico durante los siglos XVII y XVIII. Su análisis
del vínculo entre el cambio institucional y el progreso económico han jugado un papel
importante en el desarrollo de la teoría moderna del crecimiento.

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QUÉ INSTITUCIONES Y POLÍTICAS PROMUEVEN EL CRECIMIENTO

El proceso de crecimiento refleja una combinación de factores y, a menudo, están

interrelacionados. Como el rendimiento de un equipo atlético refleja el rendimiento
conjunto de los miembros del equipo, el crecimiento económico se determina
conjuntamente. Y así como uno o dos jugadores débiles pueden reducir el rendimiento
general del equipo, la debilidad en una o dos áreas claves pueden dañar
sustancialmente el desempeño general de una economía.

Si bien numerosos factores influyen en el crecimiento, algunos son de vital

importancia. Vamos a examinar más de cerca varios factores que son fundamentales
para el proceso de crecimiento.

Sistema jurídico: seguridad de los derechos de propiedad, estado de derecho e

imparcialidad en el cumplimiento de los contratos

Como discutimos en el Capítulo 2, los derechos de propiedad privada protegen

legalmente a las personas contra quienes usarían la violencia, el robo o el fraude para
tomar cosas que no les pertenecen. Lo importante de la propiedad privada es la
estructura de incentivos que crea. Cuando los servicios laborales, otros recursos,
bienes y activos son de propiedad privada, la gente tendrá un fuerte incentivo para
participar en actividades productivas, acciones que aumentan el valor de los recursos.
Con derechos de propiedad privada bien definidos y aplicados, la gente sale adelante
ayudando y cooperando con los demás. Los empleadores, por ejemplo, deben
proporcionar a sus empleados y otros proveedores de recursos con al menos un trato
tan bueno como puedan. Para tener éxito, los dueños de negocios deberán desarrollar
y brindar a los clientes potenciales bienes y servicios que valoran mucho (en relación
con su costo). Los emprendedores tienen un fuerte incentivo para innovar y descubrir
nuevos y mejores productos como también métodos de producción. Los inversores
tendrán un potente incentivo para buscar y emprender proyectos productivos. El
resultado final: cuando la propiedad es de propiedad privada, las personas pueden
mantener lo que ganan; esto les proporciona un poderoso estímulo para desarrollar y
utilizar recursos sabiamente, innovar y descubrir mejores formas de hacer las cosas, e
invertir y conservar para el futuro. Como acabamos de comentar, estos son los
principales ingredientes que subyacen al crecimiento y a los altos niveles de ingreso.

A lo largo de la historia, la gente ha buscado y establecido alternativas a los derechos

de propiedad privada que pensaban que serían más humanitarias o más productivas.
Las incidencias de estas experiencias han variado desde infructuosas hasta
desastrosas. Hasta la fecha, no hay registro de un arreglo institucional que brinde a las
personas la mayor libertad e incentivo para usar los recursos productivos y
eficientemente como lo hace la propiedad privada.

Por el contrario, cuando los derechos de propiedad privada son inseguros o muy
restringidos, se erosiona la capacidad de los empresarios para dedicarse a la actividad
productiva. Los ciudadanos gastarán más tiempo tratando de tomar la propiedad de
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otros a través del saqueo político y legal y menos tiempo dedicarán a la producción y el
desarrollo de los recursos. Cuando los activos de un ciudadano o inversor corren el
riesgo de ser tomados por otros porque los derechos de propiedad no se hacen
cumplir, el incentivo para invertir en la construcción de capital productivo que ayuda a
generar prosperidad disminuye. Como resultado, el crecimiento se retrasará y los
ingresos estarán muy por debajo de su potencial.

La seguridad de los derechos de propiedad a menudo se ve socavada por la

inestabilidad política, los disturbios civiles y guerra. Históricamente, algunos gobiernos
han confiscado los activos físicos y financieros de sus ciudadanos, les impusieron
impuestos punitivos y utilizaron regulaciones para castigar a los que no están a favor
con el régimen político actual. A los países con una historia como esta les resultará
difícil restaurar la confianza y restablecer la seguridad de los derechos de propiedad.

Desafortunadamente, el clima político de muchos países pobres y menos desarrollados

es muy inestable. En algunos casos, el prejuicio, la injusticia y el estatus de riqueza
altamente desigual crean un ambiente fértil para la agitación política. En otros casos, la
corrupción política y la historia de favoritismo hacia una clase dominante proporcionan
las semillas para el malestar. En los últimos años, la inestabilidad política ha contribuido
al pésimo desempeño económico de varias naciones, incluyendo la República
Democrática del Congo, Haití, Nicaragua, Rusia e Irak.

Mercados competitivos

Como Adam Smith enfatizó hace mucho tiempo, cuando la competencia está presente,
los individuos tenderán a promover el bienestar general. Por el contrario, cuando la
competencia es débil las empresas tienen más margen para subir los precios y
perseguir sus propios objetivos y menos incentivos para innovar y desarrollar mejores
formas de hacer las cosas.

La competencia es una fuerza disciplinaria tanto para compradores como para

vendedores. En un entorno competitivo, los productores deben proporcionar bienes a
bajo costo y servir a los intereses de los consumidores; si no lo hacen, otros
proveedores lo harán. Empresas que desarrollan productos mejorados y descubren
cómo producirlos a bajo costo tendrán éxito. Vendedores que no quieren o no pueden
proporcionar a los consumidores con productos de calidad a precios competitivos
serán expulsados del mercado. Esta proceso conduce a mejores productos y métodos
de producción y dirige los recursos hacia proyectos que generan más valor. Es un
poderoso estímulo para el progreso económico. Las políticas como la libre entrada en
los mercados de bienes, laborales y la libertad de intercambiar bienes y servicios
promueven la competencia y el progreso económico. Por el contrario, políticas como
las subvenciones comerciales, os controles de precios y las restricciones de entrada
sofocan la competencia y obstaculizan el progreso económico.

La competencia también es importante en el mercado de capitales de una nación. Si la

inversión va a aumentar la riqueza de una nación, el capital debe canalizarse hacia
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proyectos productivos. Cuando el valor del producto adicional derivado de una
inversión excede el costo de la inversión, el proyecto aumentará el valor de los
recursos y, por lo tanto, creará riqueza. Por el contrario, si el valor de la producción
adicional es menor que el costo de la inversión, el proyecto reducirá la riqueza. La
competencia ofrece a los inversores privados un fuerte incentivo para evaluar los
proyectos cuidadosamente y asignar sus fondos a los proyectos que esperan producir
las tasas de rendimiento más altas. A su vez, los proyectos rentables tenderán a
incrementar la riqueza no solo del inversor sino también de la nación.

Estabilidad de precios y del dinero

Un entorno monetario estable proporciona la base para el funcionamiento eficiente de

una economía de mercado. Por el contrario, la inestabilidad monetaria y de precios
hace que tanto el nivel de precios como los precios relativos sean impredecibles,
genera incertidumbre y socava la seguridad de los intercambios contractuales. Cuando
los precios aumentan un 20 por ciento un año, un 50 por ciento el año siguiente, 15 por
ciento el año siguiente, y así sucesivamente, la capacidad de las personas y las
empresas para desarrollar planes razonables a largo plazo y las decisiones de inversión
se ven socavadas. Muchos inversionistas y los tomadores de decisiones empresariales
trasladarán sus actividades a países con un medio ambiente más estable. Los
extranjeros invertirán en otros lugares y los ciudadanos a menudo harán todo lo
posible para sacar sus ahorros (fondos potenciales de inversión) fuera del país. Como
resultado, las ganancias potenciales de la formación de capital y actividades
comerciales que podrían haberse realizado no se materializarán.

Regulación mínima

Como hemos subrayado, los beneficios del comercio y el espíritu empresarial son
fuentes importantes de crecimiento y altos niveles de ingresos. Cuando las
regulaciones reprimen el intercambio y limitan la entrada a diversos negocios y
ocupaciones, retardan el progreso económico. Por tanto, es importante que tales
regulaciones se mantengan al mínimo.

Quienes proponen las regulaciones a menudo argumentan que la regulación propuesta

mantendrá la desigualdad fuera de un mercado, prohíbe la competencia desleal,
aumenta los salarios, reduce los precios o restringe el despido de los trabajadores.
Para un analfabeto económico, a menudo parece un "almuerzo gratis".
Desafortunadamente, las regulaciones son un instrumento contundente y, a menudo,
tienen consecuencias no deseadas. Las restricciones que dificultan el despido de un
empleado reducirán el incentivo de los empleadores para contratar trabajadores. Las
regulaciones diseñadas para mantener alejados a rivales no deseados limitarán la
competencia y conducirán a precios más altos. Fijar precios por debajo del nivel del
mercado conducirá a escasez y deterioro en la calidad de un producto o servicio, pero
fijar precios por encima de los niveles del mercado generará excedentes. La lista de
efectos secundarios no deseados de las regulaciones sigue y sigue.

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Además, cuando los gobiernos se involucran mucho en jugar a favoritos imponiendo
regulaciones que favorecen a unos a expensas de otros, animan a la gente a dedicar
más tiempo a la búsqueda de rentas, tratando de obtener favores del gobierno. En
lugar de centrarse en cómo producir mejores productos a un costo menor, las
empresas dedicarán más tiempo a cabildear con oficiales del gobierno. Como
resultado, una regulación extensiva tenderá a distorsionar y corromper el proceso
político. Incluso la toma de decisiones democráticas de política se deteriora a medida
que los funcionarios del gobierno intercambian favores regulatorios a los intereses
comerciales y laborales a cambio de contribuciones y otros favores personales.

La regulación es un pobre sustituto de los derechos de propiedad bien definidos y del

mercado voluntario de intercambio. Políticas regulatorias que obligan a los
comerciantes a atravesar diversos caminos son casi siempre contraproducentes. Un
país no puede realizar todo su potencial a menos que las restricciones que limitan el
comercio y aumentan el costo de hacer negocios se mantengan en un mínimo.

A muchas personas les preocupa que sin la regulación gubernamental en el mercado

de alimentos, seguridad y otros artículos, las personas se vean perjudicadas por
productos defectuosos o por empleadores que proporcionen condiciones de trabajo
inseguras. Sin embargo, bajo un sistema legal con una sólida ejecución de la
responsabilidad, los individuos y las empresas son responsables de sus acciones que
dañan a otros. Los perjudicados estarán en una posición para cobrar daños y perjuicios
en un tribunal de justicia. Por lo tanto, las regulaciones mínimas junto con un buen
sistema legal trabajan en conjunto para promover la prosperidad.

La evasión de tasas impositivas elevadas

Las altas tasas impositivas absorben una gran parte de las recompensas generadas por
las actividades productivas, lo que hace que sea menos atractivo para las personas
trabajar y emprender en proyectos empresariales rentables. Las personas a las que no
se les permite quedarse con gran parte de lo que ganan tienden a no ganar mucho.
Algunos de ellos, tal vez aquellos con cónyuges que trabajan, abandonarán la fuerza
laboral para trabajar en casa donde su trabajo no está sujeto a impuestos. Otros
simplemente trabajarán menos horas, se jubilarán antes, o aceptan trabajos con
vacaciones más largas o un lugar más preferido.

Los impuestos elevados también reducen la eficiencia económica. Porque crean una
gran brecha entre el costo de un empleador de contratar a un trabajador y el salario
neto del empleado, tienden a llevar estas transacciones a la economía ilegal, o
mercados negros, donde la estructura es menos segura y los derechos de propiedad
menos seguros. Las altas tasas impositivas también fomentan que las personas
compren artículos que sean deducibles de impuestos aunque no estén tan valorados
como bienes no deducibles de precio similar. Peor aún, las altas tasas impositivas
pueden impulsar a más ciudadanos productivos al extranjero donde los impuestos son
más bajos. Todas estas cosas retrasarán al país del crecimiento económico.

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Apertura comercial

Al igual que el comercio nacional, el comercio internacional es mutuamente

beneficioso. Permite a los residentes de un país utilizar más de sus recursos para
suministrar bienes que pueden producir a un bajo costo para el mercado mundial y
utilizar el producto de la venta para comprar bienes que son costosos para ellos de
producir a nivel nacional. Juntos, los socios comerciales pueden producir más bienes y
servicios y adquirir una variedad más amplia de ellos a precios más baratos. La apertura
comercial y la competencia que se deriva de ella también mantendrá a los productores
nacionales alerta: será menos probable que engañe a los consumidores con precios
altos, por ejemplo.

Por el contrario, las políticas que restringen el comercio internacional sofocan este
proceso y retrasan el progreso económico. Obviamente, los aranceles (impuestos
sobre los bienes importados) y las cuotas se incluyen en esta categoría porque limitan
la capacidad de los ciudadanos nacionales para comerciar con personas de otros
países. También lo hacen las restricciones comerciales que impiden los intercambios
internacionales que involucran activos financieros y reales. Cuando los mercados
financieros de una nación se integran con el mundo, la nación podrá atraer ahorros de
todo el mundo al precio más bajo posible (o tasa de interés). Asimismo, sus ciudadanos
tendrán acceso a las oportunidades de inversión más atractivas, independientemente
de dónde se encuentren esas oportunidades.

Como resultado, las empresas nacionales podrán adquirir capital financiero a un menor
costo, y los inversores nacionales podrán obtener rendimientos más atractivos. La
sección de comercio internacional de este libro analizará estos temas con más detalle.

Otros factores que influyen en el crecimiento y los ingresos

A lo largo de los años, los economistas han desarrollado varias teorías sobre por qué
algunos países crecen y alcanzan altos niveles de ingresos mientras que otros siguen
siendo pobres. Algunas de estas teorías pueden tener validez; otras son incorrectas o
incompletas. En esta sección, consideraremos factores no institucionales que a
menudo se piensa que influyen en el crecimiento.

1. CRECIMIENTO DE LA POBLACIÓN: Thomas Malthus desarrolló una de las

primeras teorías del crecimiento económico, o más exactamente una teoría
sobre por qué el crecimiento no puede sostenerse. Malthus argumentó que,
dado que los ingresos por persona aumentaron muy por encima del nivel de
subsistencia eso desencadenaría un boom demográfico que pronto haría que
los ingresos volvieran al nivel necesario de subsistencia. La población crecerá
exponencialmente mientras los recursos necesarios para expandir la
producción solo crecería linealmente, un rápido crecimiento de la población
pronto eliminaría los niveles de ingresos por encima de la subsistencia. Esta
imagen sombría de la existencia en o cerca de la subsistencia ha hecho que
algunos se refieran a la economía como la "ciencia lúgubre".
12
 Afortunadamente, la historia ilustra que esta teoría no es válida. La teoría
ignora el papel de las mejoras tecnológicas, la innovación y el descubrimiento
de mejores formas de hacer las cosas. También ignora que las personas tienen
cerebro y dos manos, además de boca. Hoy, algunas de las áreas más
densamente pobladas del mundo, lugares como Hong Kong, Singapur y Japón
también tienen algunos de los ingresos per cápita más altos del mundo.
2. RECURSOS NATURALES: Hay una tendencia a pensar que la riqueza de las
naciones depende en gran medida de los recursos naturales. Los recursos
claramente dan a algunas naciones una ventaja. Por ejemplo, países ricos en
petróleo como Arabia Saudita, Bahréin y los Emiratos árabes Unidos tienen
ingresos per cápita sustancialmente más altos que otros países similares con
pocos recursos naturales. Pero es igualmente claro que la dotación de recursos
no es la principal fuente de diferencias entre países en crecimiento e ingresos.
Algunos de los países del mundo con mayores ingresos tienen pocos recursos
naturales. Aparte de su puerto, ni Hong Kong ni Singapur tienen importantes
recursos naturales. Asimismo, Japón tiene pocos recursos e importa casi todo
su suministro de energía industrial. No obstante, las tasas de crecimiento de los
tres se encuentran entre las más rápidas del mundo desde 1960. Por el
contrario, muchos países ricos en recursos como Nigeria, Venezuela y Rusia
tienen bajos niveles de ingresos y malos registros de crecimiento económico.
Estas observaciones muestran que las instituciones son mucho más
importantes que los recursos. Los países que siguen políticas sólidas pueden
importar los recursos necesarios para el crecimiento y la prosperidad. Sin
instituciones y políticas sólidas, sin embargo, los países ricos generalmente no
pueden sostener un crecimiento fuerte y alcanzar altos niveles de ingreso. La
abundancia de recursos a menudo puede socavar el incentivo para adoptar
instituciones sólidas. Históricamente, la riqueza de recursos ha llevado a
menudo a conflictos, inestabilidad, regímenes con políticas autoritarias e
incluso la guerra. Esto ha dado lugar a lo que algunos denominan la "maldición
de los recursos", la opinión de que la abundancia de recursos a menudo
conduce a la adopción de políticas contraproducentes que socavan la utilidad
de los recursos.
3. AYUDA EXTRANJERA: En las décadas de 1950 y 1960, se creía ampliamente que
la asistencia de países desarrollados de altos ingresos a países menos
desarrollados de bajos ingresos proporcionarían a estos últimos con el capital
inicial necesario para iniciar el proceso de crecimiento. Dados sus bajos
ingresos, muchos creían que sería imposible para los países pobres ahorrar lo
suficiente para financiar importantes proyectos de inversión como carreteras y
plantas generadoras de energía. Además, se pensaba que los efectos de estos
proyectos proporcionaban la base para el crecimiento económico. Por tanto, si
los países ricos del mundo proporcionaban ayuda, podría canalizarse hacia
inversiones que desencadenarían el crecimiento y el desarrollo.

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 Si bien la teoría sonaba razonable, la experiencia fue dramáticamente diferente.
La ley de las consecuencias no deseadas ayuda a explicar por qué. Por su
naturaleza, la ayuda está impulsada por consideraciones políticas en lugar de las
fuerzas del mercado. No es sorprendente que la ayuda se canalizara a menudo
hacia proyectos diseñados para mantener el control del liderazgo político actual
y, en algunos casos, incluso terminó en sus cuentas bancarias personales.
También hubo efectos secundarios dañinos en el desarrollo de los mercados.
Los países de ingresos altos a menudo ofrecían a países menos desarrollados la
prueba de productos agrícolas y de hecho utilizaron esta ayuda como vehículo
para entregar los productos excedentes resultantes de sus programas de
sostenimiento de los precios agrícolas. A su vez, esta ayuda interrumpió los
mercados en los países menos desarrollados y redujeron su capacidad a largo
plazo de producir productos alimenticios.
Los estudios indican que la ayuda fue en gran medida ineficaz y, en ocasiones,
desastrosa. Al mismo tiempo, los países pobres que registraron el crecimiento
más impresionante durante 1960-1990, como Hong Kong y Singapur, recibieron
poca ayuda extranjera. En cambio, ellos siguieron políticas de apoyo a la
distribución del mercado y respetaron la propiedad privada. Por el contrario, los
países que recibieron la mayor cantidad de ayuda registraron un crecimiento
poco impresionante y ahora tienen los niveles de ingresos per cápita más bajos
del mundo. En la mayoría de los casos, también se caracterizaron por adoptar
políticas de controles de inversión, restricciones comerciales y sistemas legales
y políticos corruptos que socavan el progreso económico. A no ser que se lleve
a cabo un cambio institucional generalizado, los residentes de estos países se
enfrentan a un futuro sombrío.
4. CLIMA Y UBICACIÓN: Jeffrey Sachs de la Universidad de Columbia ha estado en
la vanguardia de los que sostienen que las condiciones climáticas tropicales y la
ubicación lejos de los principales mercados del mundo afectan negativamente
al crecimiento y los ingresos. Según este punto de vista, el calor y las
condiciones climáticas tropicales húmedas erosionan el nivel de energía de los
trabajadores y aumentan el riesgo de enfermedades incapacitantes y
potencialmente mortales como la malaria. Como resultado, la productividad y el
nivel general de desarrollo se retrasan en las zonas tropicales. Además, la
distancia de viaje a los principales mercados del mundo de Europa Occidental,
América del Norte y Japón hacen que los países tropicales sean poco atractivos
como ubicación para instalaciones productivas. Esto, también afecta
negativamente a sus perspectivas económicas.
Los niveles de ingresos de los países tropicales, con algunas excepciones, son
generalmente más bajos que los ingresos de los países de climas más
templados. Pero también es cierto que las instituciones y las políticas de las
sociedades de la mayoría de los países tropicales son menos consistentes con la
obtención de beneficios del comercio, emprendedurismo e inversión. Por tanto,
la mayoría de los economistas creen que el desempeño de los países tropicales

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 es en gran parte un reflejo de su mala calidad institucional, en lugar de su clima
y ubicación.

Instituciones, políticas y prosperidad

La gravedad de la recesión de 2008-2009 ha centrado la atención de los responsables

de políticas en las fluctuaciones económicas y acciones para combatirlas. Este es un
tema importante, pero también lo es el crecimiento económico. Además, la forma y
estructura de los incentivos son fundamentales tanto a una política de estabilización
sólida como a la consecución de niveles elevados de crecimiento y de ingresos. A
menos que los países adopten instituciones y políticas que apoyen el comercio, el
descubrimiento empresarial y la inversión privada, no podrán sostener el crecimiento a
largo plazo y lograr altos niveles de ingresos. Mientras que otros factores como los
recursos naturales, el clima y la ubicación ejercen cierta influencia, las instituciones y
las políticas son la principal fuente de diferencias entre países en las tasas de
crecimiento y los niveles de ingresos.

Como indicó el destacado economista William Baumol, las reglas del juego hacen la
gran diferencia; ellas determinan qué hacen los individuos con su tiempo, talentos y
energía. Baumol señaló que el entorno institucional puede alentar la producción de
actividades improductivas o incluso destructivas. Cuando las instituciones y las
políticas brindan derechos de propiedad seguros, un sistema judicial justo y
equilibrado, estabilidad monetaria y límites efectivos a la capacidad del gobierno para
transferir riqueza a través de impuestos y regulaciones, es más probable que los
individuos creativos se involucren en el desarrollo de productos, la inversión y otras
actividades productivas. Sin embargo, si el entorno legal y regulatorio no protege los
derechos de propiedad y se usa a menudo para favorecer a algunos a expensas de
otros, los mismos individuos en cambio es más probable que se involucren en intentos
de manipular el proceso político y legal con el fin de saquear la riqueza de los demás.
Búsqueda de rentas, cabildeo, sobornos y otras formas de saqueo reemplazan a las
actividades productivas.

Por ejemplo, cuando los empresarios saben que las fuerzas del mercado se utilizarán
para asignar bienes, un empresario siderúrgico reaccionará a una competencia más
intensa tratando de encontrar una mejor manera de producción de acero
(emprendimiento productivo). Pero cuando los rescates políticos son más probables,
el productor de acero tendrá más probabilidades de presionar para obtener subsidios,
protección arancelaria o favores (emprendimiento improductivo). A su vez, las
instituciones que fomentan la actividad productiva y desalienta los contraproducentes
conducirán a un mayor crecimiento y mayores ingresos.

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