Está en la página 1de 5

Lógica

Daniela Itze Jimenéz Coronel


QROBTPU000239
Historia de la fundación de Querétaro
Santiago de Querétaro fue fundada en 1531 por Fernando de Tapia, chichimeca
convertido al catolicismo por el encomendero Hernán Pérez de Bocanegra. Su nombre
deriva del purépecha “lugar de las piedras grandes” y el apóstol Santiago. La tradición
relata que los españoles derrotaron a los chichimecas una vez que estos se rindieron
cuando lograron ver en el cielo una gran cruz y la imagen de Santiago Apóstol.

Los españoles que se avecindaron en Querétaro lo convirtieron en el primer


asentamiento permanente de peninsulares en el Bajío, conviviendo con los otomíes y
chichimecas asentados en la zona. Querétaro fue base para la fundación posterior de
ciudades en el Bajío, caso del Real de Minas de Guanajuato que se funda en 1554, la
Villa de la Purísima Concepción de Celaya en 1571, Aguascalientes fundada en 1575 y
León en 1576.

El Centro Histórico de Querétaro cubre 4 kilómetros cuadrados, con 203 manzanas y


un total de mil 400 monumentos protegidos. En la ciudad residen joyas arquitectónicas
de los siglos XVII y XVII, como los conventos de Santa Clara y Santa Rosa, el claustro
de San Agustín, el convento de la Santa Cruz, el convento de San Francisco (hoy
Museo Regional), y la Casa de la Corregidora. Probablemente sea este último
monumento el más importante de la ciudad en términos históricos y que actualmente es
el Palacio de Gobierno estatal.

La obra urbana de mayor envergadura fue la construcción del acueducto, obra que se
inició en 1726 y se concluyó en 1735. Su última parte es soportada por 74 arcos de
cantera con una longitud de 1,280 m.

Fue una de las ciudades más importantes durante el Virreinato. Para 1790, Querétaro
era la tercera ciudad más poblada del país con cerca de 30,000 habitantes, superada
por la ciudad de México con 104,760 y Puebla con 86,646.

Segundo Imperio Mexicano


Se llama Segundo Imperio Mexicano al Estado gobernado por Maximiliano I entre 1863
y 1867. Su proclamación como emperador fue posible debido a la segunda intervención
francesa, ordenada por Napoleón III y alentada por los conservadores locales.
Los historiadores llaman Segundo Imperio a este período de la historia mexicana para
marcar la continuidad con el Primer Imperio Mexicano, gobernado por Agustín I entre
1821 y 1823.Esa continuidad quedó legalmente establecida por el Pacto de
Chapultepec (1865), por el cual Maximiliano I adoptó a Agustín de Iturbide y Green,
nieto de Agustín I, y lo proclamó como su legítimo heredero.

La causa de la segunda intervención francesa a México fue la suspensión de los pagos


de la deuda externa a Francia, Gran Bretaña y España decretada por el gobierno de
Benito Juárez, al finalizar la guerra de Reforma (1858-1861).

Representantes de las tres potencias europeas se reunieron en Londres, donde


acordaron desembarcar tropas en el puerto de Veracruz para presionar a las
autoridades mexicanas.

El arribo de las tropas extranjeras tuvo lugar en 1862 y a partir de entonces se iniciaron
negociaciones con el gobierno de Juárez, que concluyeron con el retiro de las fuerzas
británicas y españolas.

Las tropas francesas se negaron a replegarse porque el emperador Napoleón III


planeaba instaurar una monarquía local que apoyara a los confederados en la Guerra
de Secesión, para así disminuir el poder de los Estados Unidos en la región del Caribe.

El proyecto del emperador francés fue apoyado por los conservadores mexicanos que,
tras ser derrotados en la guerra de Reforma, apostaron a imponer en su país un
gobierno de carácter monárquico. Con el visto bueno de Napoleón III, los
conservadores ofrecieron la corona al archiduque austríaco Fernando Maximiliano de
Habsburgo, quien aceptó la propuesta en julio de 1863 y adoptó el nombre de
Maximiliano I.

Mientras tanto, el ejército expedicionario francés había avanzado desde la costa hasta
el centro del país y, pese a ser derrotado en la batalla de Puebla, logró ocupar la
Ciudad de México el 10 de junio. A la espera de que Maximiliano llegará al país, el
gobierno estuvo encabezado por una regencia integrada por dos generales y un
arzobispo.

Maximiliano y su esposa, Carlota Amalia de Bélgica, llegaron al puerto de Veracruz en


mayo de 1864, haciendo una entrada fastuosa en Ciudad de México pocos días
después.

Independencia de México
El 16 de septiembre de 1810 estalló una revolución social de la cual nacería nuestro
país como una Nación independiente, libre y soberana. El 27 de septiembre de 1821
culminó la Independencia de México, después de una guerra de once años que fue una
gran revolución popular para librarse del dominio español. La guerra de Independencia
fue una masiva revolución popular, en la que decenas de miles de indígenas, de
afrodescendientes, de mulatos, de mestizos, campesinos, mineros y rancheros,
hombres y mujeres, engrosaron las filas insurgentes siguiendo al llamado del cura
Miguel Hidalgo y Costilla y, en unos cuantos meses, conformaron un ejército popular
que hirió de muerte al régimen colonial y desmanteló un sistema social opresivo y
excluyente. La lucha encabezada por Hidalgo y continuada por José María Morelos fue
un movimiento libertario y justiciero.

Después de once años de guerra civil, se presentó una coyuntura favorable para
ponerle fin mediante la alianza entre el jefe realista, Agustín de Iturbide, y el jefe
insurgente, Vicente Guerrero, quienes decidieron consumar la Independencia a través
de un pacto político que se plasmó en el Plan de Iguala, con el que se identificaron
prácticamente todos los grupos sociales del país y todas las regiones. Con el Plan de
Iguala, al que se adhirieron la mayoría de las provincias novohispanas, se consumó la
guerra de independencia y pudo surgir la Nación mexicana libre y soberana, con
nuevas instituciones y leyes en las que se concretaron algunas de las principales
demandas del movimiento insurgente: la abolición de la esclavitud y los tributos, la
soberanía popular, la libertad y la igualdad de todos ante la ley, demandas que
quedaron plasmadas en la Constitución Política de 1824 en la que se estableció que
México sería una República federal. De ese modo, la Independencia de México, la
primera gran revolución popular de la que nació nuestra Patria, consiguió importantes
logros: acabar con el régimen colonial, lograr la independencia, acabar con la
esclavitud y los tributos, establecer un régimen republicano y el reconocimiento de los
derechos individuales y de la igualdad ante la ley.

Leyenda de Querétaro
La zacatecana
La leyenda comienza con una pareja proveniente de Zacatecas por allá del siglo XVII
que tuvo que mudarse a Querétaro debido a los negocios de minería del esposo, todos
los veían como una pareja ejemplar y pudiente, salían a caminar tomados de la mano y
visitaban la iglesia.

Él viajaba mucho debido a su trabajo y ella se quedaba en casa con los sirvientes, se
cree que como consecuencia de la soledad que la mujer sentía inició un romance con
uno de sus empleados. La Zacatecana supo de podía quedarse con toda la fortuna de
su esposo por lo que ordenó a su amante que lo asesinara, él obedeció y continuaron
su amorío.
La gente comenzó a hablar del supuesto viaje de negocios del esposo pues pasaban
días y él no regresaba, así que la mujer para no dejar evidencia, decidió matar también
a su amante y enterrarlo junto con su marido.

Tiempo después, el pueblo se enteró del adulterio y decidió colgarla y exponerla en el


balcón de su casa, después se encontraron los cuerpos del empleado y el esposo en
estado de descomposición.

Bibliografia
www.inehrm.gob.mx

https://enciclopediadehistoria.com

https://patrimoniomundialmexico.inah.gob.mx/

También podría gustarte