Universidad de Guayaquil

Facultad de ciencias naturales

Ingeniería ambiental

Fundamento de Ingeniería
Ambiental

Índice de Calidad de Aire

Nombre:
Nahomy Valle

Docente:
Ing. Walter González

Curso:
Semestre II
 Índice de calidad de aire ambiente

Índice de calidad del aire - ICA corresponde a un valor adimensional entre 0 y 500
puntos. Es un indicador que puede utilizarse para identificar cualitativamente la
calidad del aire de la ciudad y su impacto en la salud de las personas. En 2008, el
Ministerio del Medio Ambiente anunció el PROTOCOLO DE MONITOREO Y
MONITOREO DE LA CALIDAD DEL AIRE, a partir del cual se calcula el ICA, sus
efectos en la salud y las medidas preventivas implementadas de acuerdo con los
valores del ICA.
Esta medición considera cinco contaminantes principales nocivos para la salud
humana y el medio ambiente:
• Material particulado (PM2.5 y PM10)
• ozono troposférico (O3)
• Dióxido de nitrógeno (NO2)
• Dióxido de azufre (SO2)
El valor del índice de calidad del aire ICA se mide en una escala de 0 a >500 y define
seis categorías de peligro, cuanto mayor sea el índice, peor será la calidad del aire.
A nivel cualitativo, la serie ICA se divide en seis partes:
• Bueno: color verde (ICA 0-50)
• Medio: color amarillo (ICA 51-100)
• Nocivo para grupos sensibles a la salud: color naranja (ICA 101-150)
• Nocivo para la salud: color rojo (ICA 151-200)
• Muy nocivo para la salud: color violeta (ICA 201-300)
• Peligroso: color marrón (ICA superior a 300)
Las partículas finas (PM2,5) son el contaminante más perjudicial.
 Contaminantes del aire

Las fuentes exactas de contaminación del aire exterior pueden variar mucho de un
lugar a otro, pero hay dos categorías principales de contaminación del aire: partículas
y gases.
El material particulado consiste en partículas sólidas que varían en tamaño desde 10
micras hasta 0,003 micras.
Algunas partículas provienen de fuentes naturales, como las tormentas de polvo y el
humo de los incendios forestales. Sin embargo, la mayoría de las partículas son el
resultado de actividades humanas como los gases de escape de los vehículos, las
emisiones industriales y la quema de cultivos agrícolas, todo lo cual ha empeorado
debido al crecimiento de la población mundial y la industrialización.
La mayoría de las partículas son el resultado de actividades humanas, como los gases
de escape de los vehículos, las emisiones industriales y la quema de cultivos, todo lo
cual se ha visto exacerbado por el crecimiento de la población mundial y la
industrialización.

Las emisiones de partículas al aire libre más comunes son:

 • PM10: partículas gruesas entre 10 y 2,5 micrones de tamaño, como polvo,
polen, esporas de moho y partículas de combustión grandes. Estas partículas
pueden ingresar al tracto respiratorio e irritar los ojos, la nariz y la garganta en
altas concentraciones, causando síntomas a corto plazo como tos, estornudos
y picazón.
• PM2.5: Partículas finas entre 2,5 micras y 0,3 micras de tamaño, que consisten
principalmente en partículas de fuentes de combustión más pequeñas, como
escapes de vehículos, emisiones industriales y humo de incendios forestales y
productos de tabaco. Las partículas PM2.5 se consideran las partículas
contaminantes más comunes y peligrosas. PM2.5 es lo suficientemente
pequeño como para ingresar al tejido pulmonar y al torrente sanguíneo, donde
puede acumularse en el sistema circulatorio y aumentar el riesgo de
enfermedades cardíacas y pulmonares. PM1: Partículas finas entre 1 micra y
0,3 micras de tamaño. Las partículas PM1 también pueden ingresar a la sangre
y afectar muchos órganos en todo el cuerpo. Las partículas PM1 tienen un área
de superficie total más grande que las partículas típicas PM2.5, lo que permite
que las partículas PM1 lleven químicos tóxicos a la superficie y causen aún
más daño al cuerpo.
• Partículas ultrafinas (UFP): partículas pequeñas de menos de 0,1 micras. Las
UFP también se pueden inhalar en los pulmones y entrar en el torrente
sanguíneo. Las UFP causan estrés oxidativo generalizado en el cuerpo, lo que
provoca una variedad de efectos en la salud, que incluyen enfermedades
cardíacas, enfermedades pulmonares y daño cerebral.

Contaminantes gaseosos
Los gases son sustancias que no tienen una forma o tamaño definidos y están
compuestos de moléculas tan pequeñas que se mueven de manera desigual a través
del aire debido al movimiento browniano y chocan con otras moléculas en el aire. Este
comportamiento puede hacer que muchos gases en el aire dificulten su movimiento
en tiempo real.
Los gases contaminantes, especialmente los gases de efecto invernadero como el
dióxido de carbono (CO2), se han convertido en un problema creciente de calidad del
aire a medida que el clima de la Tierra se calienta y fija los gases en la atmósfera. El
dióxido de carbono exterior también es un peligro para la salud en la calidad del aire
interior, el CO2 exterior aumentado se mezcla con el CO2 interior, que se eleva a
niveles peligrosos si hay poca ventilación. El calentamiento global también ha
aumentado la duración y la gravedad de los incendios forestales en varias partes del
mundo, lo que ha resultado en emisiones cada vez mayores de dióxido de carbono
cada año.

Los contaminantes gaseosos más comunes en condiciones exteriores

son:
• Dióxido de carbono (CO2): El dióxido de carbono es una molécula gaseosa
que consta de un átomo de carbono y dos átomos de oxígeno. Medido en
partes por millón (ppm), el CO2 no se considera dañino a unas 400 ppm. Sin
embargo, el CO2 por encima de 1000 ppm puede desplazar el oxígeno de los
pulmones, causando síntomas cognitivos y de salud. El CO2 por encima de
5000 ppm puede ser fatal.
• Ozono (O3): El ozono es una molécula natural que consta de tres átomos de
oxígeno. En lo alto de la atmósfera, el ozono es una barrera natural contra la
dañina radiación ultravioleta (UV) del sol. Pero el ozono troposférico, creado
cuando el calor de la luz solar reacciona con las sustancias químicas de las
emisiones, puede causar síntomas como dificultad para respirar, tos y dolor de
garganta. Con el tiempo, la exposición al ozono puede dañar los pulmones y
empeorar condiciones como el asma y el enfisema.

Tecnología de control de la calidad del aire ambiente

Cuando las partículas del aire ambiental o los gases como el dióxido de carbono
alcanzan niveles altos, se insta al público a considerar cuánta contaminación del aire
exterior toleran para realizar las tareas diarias. Debido al aumento de los riesgos para
la salud, los colectivos sensibles como los que padecen enfermedades respiratorias
o los niños y los ancianos deben tener especial cuidado.
Sin embargo, ninguna contaminación del aire debe considerarse segura para la salud
humana. Esto es especialmente cierto para las partículas PM2.5, que se encuentran
entre los contaminantes del aire más peligrosos.

Cómo medir la calidad del aire en el hogar

Aunque algunos contaminantes del aire interior provienen del exterior, la verdad es
que la mayoría de ellos se liberan dentro del propio edificio. Esto se debe a las

personas que viven en él y pasan por él, los muebles, los materiales de construcción,
la limpieza o quema de combustibles o los animales domésticos. Forma una mezcla
de impurezas muy diferentes.

Lo que necesitas saber

Los medidores de calidad del aire ambiental brindan la primera línea de defensa para
detectar contaminantes del aire que son peligrosos para la salud.
El monitoreo de alta precisión de la calidad del aire ambiental utiliza sensores que
detectan contaminantes del aire tanto sólidos como gaseosos y pueden usar esa
información para enviar información importante sobre la salud a una aplicación o para
automatizar la ventilación y la filtración.
Aprender más sobre lo que hay en el aire puede reducir su riesgo de exposición a la
contaminación del aire y ayudarlo a controlar la calidad del aire.
Si la contaminación del aire exterior es alta, cierre las ventanas y puertas. Las
personas expuestas a la contaminación del aire exterior pueden estar expuestas a
ella.
• Reducir el uso de vehículos a gas y otros dispositivos que utilizan un motor de
combustión interna.
• Considere comprar un automóvil híbrido, eléctrico o de hidrógeno.
• Limite sus viajes esenciales a aproximadamente una vez por semana para
reducir sus emisiones personales.
• Si es posible, camina, monta en bicicleta o usa el transporte público. Los gases
de efecto invernadero están disminuyendo.
• Limite el uso de electrodomésticos a gas o eléctricos y apáguelos cuando no
estén en uso. Los gases de efecto invernadero se reducen tanto como sea
posible.
• Apague las luces y otros aparatos electrónicos cuando no estén en uso. Los
aparatos eléctricos y de gas son los más utilizados.
• Cambie a energía solar u otras fuentes de energía renovable para alimentar su
hogar.
• Apague las luces y otros aparatos electrónicos cuando no estén en uso.
• Use un purificador de aire para reducir los contaminantes interiores del exterior
o filtre en el interior.
Conecte el monitoreo de la calidad del aire a los sistemas HVAC interiores para que
los datos de calidad del aire enciendan automáticamente los ventiladores HVAC
cuando se detecten niveles altos de contaminantes en el interior. Los sistemas HVAC
interiores pueden ser más eficientes.
Use una máscara contra la contaminación del aire al aire libre si las concentraciones
de partículas son altas.
En cualquier caso, no cabe duda de que la contaminación del aire interior puede tener
efectos nocivos para la salud, y por ello es necesario conocer con la mayor precisión
posible el nivel de contaminación de nuestro entorno. Solo conociendo algunas de las
sustancias tóxicas del aire inhalado y el grado de humedad relativa, podemos
desarrollar la solución de ventilación más adecuada para cada caso.

Parámetros de medición de la calidad del aire interior

Como norma general, para medir la calidad del aire interior se analizan los siguientes
parámetros:
 • Concentración de formaldehído: Pertenece al grupo de los compuestos
orgánicos volátiles (COV). Procesado especialmente para su uso industrial
generalizado, es probablemente el compuesto químico orgánico más
producido en el mundo. Es altamente inflamable y altamente volátil.
• Concentración de material particulado: El material particulado es una mezcla
de partículas líquidas y sólidas, sustancias orgánicas e inorgánicas
suspendidas en el aire. Su composición es muy diversa: sulfatos, nitratos,
amoníaco, etc. y causar reacciones químicas en el aire.
• Nivel de CO2 o gas de dióxido de carbono: Este es un gas incoloro e inodoro
que es parte de la naturaleza y que en realidad no es tóxico, pero desplaza el
oxígeno y puede causar asfixia en altas concentraciones por encima de las
30,000 ppm. Este es el principal indicador para determinar la necesidad de
renovación del aire.
• Nivel de NO2 o dióxido de nitrógeno: Es un compuesto químico gaseoso, tóxico
e irritante. Se produce por incendios forestales o erupciones volcánicas,
aunque también se produce de forma natural como consecuencia de la
descomposición de los nitratos orgánicos. La exposición continua a NO2 está
asociada con diversas enfermedades respiratorias.
• Nivel de SO2 o dióxido de azufre: Es un gas incoloro, picante e irritante. La
principal fuente de emisiones de dióxido de azufre es la quema de productos
derivados del petróleo y carbón en centrales eléctricas y calefacción central.

Sensores para la evaluación de la calidad del aire interior

Algunos de los sensores más utilizados para evaluar la calidad del aire interior son:
• Sensores de CO2: se utilizan para medir el dióxido de carbono en partes por
millón (ppm). Los más comunes son los sensores infrarrojos de CO2, que
funcionan según el principio de que los compuestos absorben energía en una
determinada longitud de onda.
• Sensores de concentración de compuestos orgánicos volátiles: Los
compuestos orgánicos volátiles (COV) son sustancias químicas que contienen
carbono que se encuentran en la mayoría de los seres vivos y que se
convierten fácilmente en vapores o gases. Este tipo de sensor convierte la
lectura a partes por millón (ppm) equivalentes para seguir una referencia
similar a los sensores de CO2.
• Sensores PM 2.5: evalúan partículas finas en suspensión. Este tipo de
partículas, que pueden ser de muy diferente origen, pueden provocar
 problemas respiratorios e incluso enfermedades cardiovasculares.
Normalmente se utilizan sensores de tipo láser para medir este parámetro.
Sensores de humedad: también llamados termohigrómetros. Miden la
temperatura y la humedad relativa en un ambiente determinado. Su uso está
muy extendido porque la humedad afecta a la calidad del aire interior.

Mejorar la calidad del aire interior

Medir los contaminantes es solo el primer paso para mantener una buena calidad del
aire interior. Debemos utilizar este conocimiento para activar estrategias y soluciones
para mejorarlos.
Cabe recordar que mantener una buena calidad del aire interior no depende
únicamente de la medición de contaminantes. También es importante implementar
estrategias y soluciones que nos ayuden a mejorarlo. Algunos de estos pueden incluir:
• Ventilación efectiva: una de las formas más efectivas de mejorar la calidad del
aire interior es garantizar una ventilación adecuada. Esto puede requerir la
instalación de sistemas de ventilación mecánica que renueven constantemente
el aire, especialmente en espacios cerrados donde el aire puede estancarse.
• Uso de purificadores de aire: los purificadores de aire pueden ser útiles para
eliminar partículas y contaminantes del aire. Algunos de ellos pueden incluso
filtrar compuestos orgánicos volátiles y partículas PM2.5 o PM1, mejorando
significativamente la calidad del aire.
• Control de humedad: Mantener el nivel adecuado de humedad puede ayudar
a prevenir el crecimiento de moho y otros contaminantes biológicos que son
dañinos para la salud. Los deshumidificadores pueden ser útiles en climas
húmedos, mientras que los humidificadores pueden ser útiles en climas secos.
• Elección de materiales de construcción y muebles: Algunos materiales de
construcción y muebles pueden liberar contaminantes al aire. Elegir materiales
y muebles que contengan compuestos orgánicos volátiles puede mejorar la
calidad del aire interior.
• Mantenimiento regular: La limpieza y el mantenimiento regulares de los
sistemas HVAC pueden prevenir la acumulación de polvo y otros
contaminantes que afectan la calidad del aire.
Con la ayuda del Índice Nacional de Calidad del Aire (ICA), es posible verificar la
calidad del aire que indican las estaciones de medición de la red nacional de
monitoreo en tiempo real y de manera sencilla. El ICA también contiene consejos de
salud para el público en general y grupos de población vulnerable, así como
información sobre la evolución del estado de la calidad del aire en los últimos meses.
El diseño del índice permite filtrar los datos por la tipología de estación. Las estaciones
se clasifican en función de las fuentes de
emisión predominantes: estaciones de
tráfico, estaciones industriales y
estaciones de fondo (donde el nivel de
contaminación no está dominado ni por el
tráfico ni por la industria).
El índice se calcula para todas las
estaciones de medida con datos de al
menos un contaminante, pero las
estaciones que no tienen los datos de
todos los contaminantes, se muestran con un círculo traslúcido. Los puntos negros
del índice indican estaciones para las que no se han recibido datos y los datos
calculados por modelización van seguidos de un asterisco.
Según la Organización Mundial de la Salud, el 99% de la población mundial respira
aire insalubre y la contaminación del aire provoca 7 millones de muertes prematuras
cada año. PM2.5, que se refiere a todas las partículas de hasta 2,5 micrómetros de
diámetro, es el mayor riesgo para la salud y, a menudo, se usa como una medida de
los estándares legales de calidad del aire. Cuando se inhala PM2.5, se absorbe en el
cuerpo y entra en el torrente sanguíneo, lo que está relacionado con enfermedades
como derrames cerebrales, enfermedades cardíacas, enfermedades pulmonares y
cáncer.
Para abordar esta crisis de contaminación del aire, varios expertos advierten que los
gobiernos deben tomar medidas urgentes para fortalecer la regulación de la calidad
del aire, incluido el monitoreo de PM2.5 y otros contaminantes.
La contaminación del aire proviene de muchas fuentes, incluidas las emisiones
antropogénicas (o las emisiones causadas por el hombre, como el uso de
combustibles fósiles en los vehículos y la cocina) y fuentes naturales, como las
tormentas de polvo y el humo de los incendios forestales y los volcanes.
Los sistemas de monitoreo de la calidad del aire están equipados con sensores
diseñados para detectar contaminantes específicos. Algunos utilizan láseres para
escanear la densidad de partículas en un metro cúbico de aire, mientras que otros se
basan en imágenes de satélite para medir la energía reflejada o radiada desde la
Tierra.
Los contaminantes asociados con la salud humana y los impactos ambientales
incluyen PM2.5, PM10, ozono troposférico, dióxido de nitrógeno y dióxido de azufre.
Cuanto mayor sea la concentración de contaminantes en el aire, mayor será el índice
de calidad del aire (AQI) en una escala de 0-500. Un valor de AQI de 50 o menos se
considera seguro, mientras que más de 100 se considera poco saludable. Según la
iniciativa de socios de UNEP IQAir, en 2021 solo 38 de 117 países y territorios tenían
un índice de calidad del aire promedio saludable.
Las bases de datos de calidad del aire procesan lecturas de monitores de calidad del
aire gubernamentales, ciudadanos o satelitales para obtener valores de los datos
recopilados por el ICA. Esas bases de datos pueden ponderar los datos de manera
diferente según la confiabilidad y el tipo de contaminación que se mide.
En 2021, el PNUMA, en colaboración con la iniciativa IQAir, desarrolló la primera
calculadora de exposición a la contaminación del aire en tiempo real, que combina
lecturas globales de monitores de calidad del aire confirmados en 6475 ubicaciones
en 117 países, territorios y territorios. La base de datos prioriza las lecturas de PM2.5
y utiliza inteligencia artificial para calcular la exposición por hora a la contaminación
del aire para los residentes de casi todos los países.

¿Cómo pueden los gobiernos mejorar esta supervisión?

El monitoreo de la calidad del aire es
particularmente débil en África, Asia Central
y América Latina, a pesar de que estas
regiones están densamente pobladas, lo que
significa que la contaminación del aire puede
afectar de manera desproporcionada a
ciertos grupos de personas. Los gobiernos
deberían aprobar leyes que hagan de este
tipo de monitoreo un requisito legal, mientras
invierten en la infraestructura existente para
mejorar la confiabilidad de los datos. Al mismo tiempo, la integración del uso de
sensores de calidad del aire de bajo costo mejorará la gestión de la calidad del aire
en los países en desarrollo, dice Alexandre Caldas.
"Los sensores de calidad del aire económicos son más fáciles de implementar y
pueden reducir significativamente los costos operativos, lo que los convierte en una
opción pública cada vez más viable en áreas sin estaciones de monitoreo
gubernamentales y en áreas remotas", agregó.
Para combatir el impacto generalizado de la contaminación en la sociedad, el PNUMA
lanzó la campaña #SinContaminación (#BeatPollution en inglés), una estrategia en
favor de medidas rápidas, a gran escala y coordinadas contra la contaminación del
aire, la tierra y el agua. La estrategia pone de manifiesto el impacto de la
contaminación en el cambio climático, la pérdida de recursos naturales y
biodiversidad, y la salud humana. A través de mensajes fundamentados en datos
científicos, la campaña muestra cómo la transición hacia un planeta sin
contaminación es vital para las generaciones futuras.
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