RECUPERACIÓN DE LAS PÉRDIDAS

Adaptación a la
Pérdida-Dolor Pérdida

Shock Ayudar a Otros

Entumecimiento Afirmación

Negación Nueva Esperanza

Nuevas Normas
Arranques
de Conducta
Emocionales

Nuevas Fuerzas
Coraje

Nuevas Relaciones
Miedo
Problemas de
“Reingreso”
Añoranza
Desorganización
Desorganización
Vacilación
Pánico
Depresión

Culpa Aislamiento
Soledad
 HACER DUELO

Hacer duelo es un trabajo. Es el trabajo de enfrentar la pérdida.

Enfrentar incluye 3 tareas básicas:

1. Aceptar la realidad y la permanencia de la pérdida.

2. Experimentar y expresar el dolor de la pérdida.

3. Adaptarse a la vida sin la persona o el objeto que se perdió.

Las flechas indican que no se termina la primera tarea antes de empezar la segunda,
y que podemos movernos de una tarea a otra varias veces hasta que cada una sea
terminada.

No se puede enfrentar la pérdida y el dolor constantemente. Al igual que todos los

trabajos importantes, el trabajo de hacer duelo requiere descansos donde esquivamos
el dolor de vez en cuando.

Esquivar o evitar el dolor puede ser involuntario (como en la fase inicial cuando uno está
en estado de shock) o voluntario. Es sano siempre y cuando uno no se estanque allí.

El resultado de terminar bien el trabajo del duelo será encontrar un “normal” nuevo o
diferente. Esto quiere decir encontrar una nueva relación al ser querido o a lo que se
perdió, y tener nueva energía para reinvertir la vida. Cuando logramos “dar vuelta a la
esquina” de nuestro dolor, lo vemos desde una perspectiva diferente. El duelo no
desaparece, pero si se termina el trabajo de hacer duelo.