“Borrador 3” Marco Teórico y Marco Contextual

Por medio de esta investigación mostraremos un estudio con enfoque multidisciplinario, este
pretende incluir aspectos históricos, socioculturales y contemporáneos de los cánones de
belleza en la moda en México. La intención que nos planteamos es generar un revisionismo a
la cosmovisión de cultura y opinión en la belleza partiendo de la moda de manera sociológica
y antropológica como ya lo veremos citado en los siguientes autores y autoras, su aparición
en el escrito es de suma importancia por el análisis social que agregan a estos campos de
estudio sobre nuestro tema.
Para comenzar a desarrollarlo visualizamos su relevancia en la actualidad y el mundo
contemporáneo, por ello es indispensable apropiarnos de los conceptos en los que nuestra
población se ve imbuida ya que la interpretación de estos enriquece la investigación , para
estudiarlos de manera correcta empleamos un ejercicio tanto practico como teórico, pues,
pese a que mantenemos un enfoque sociológico y tenemos conocimientos básicos en la
metodología observativa, acercarnos a la población y, en cierta manera al pertenecer a ella,
no se podemos dejar de lado las visiones subjetivas que se dan por entendidas en los cánones
de belleza en moda. Parte de nuestro motivante fue abordarlo en un terreno nacional,
dedicamos concreta atención al interés de nuestra población en su multiculturalidad, legado,
expresión, historia y, entre otras cosas, a aprender cómo dignifican el valor sociológico de la
moda.

Los autores y autoras de nuestra actualidad han proporcionado conocimientos importantes

mediante la producción de sus tesis, por ello, pensamos que el valor agregado que nos
brindan desde su manera de observar el mundo, las perspectivas críticas y sus estudios de
género complementan de manera acertada nuestro escrito:

Se concluye que ningún sistema de moda puede canalizar todas las identidades
estéticas y culturales, además de que hay desiguales sistemas de la moda que se están
desarrollando en diferentes etapas y que son negados por la suposición de que no
concuerdan con los códigos establecidos por el sistema tradicional. En relación con la
identidad mexicana, aunque se aprecia un ligero cambio, se necesita de la autocrítica
y el diálogo honesto dentro de la sociedad mexicana, así como de su internalización y
conciencia de su alteridad (Ruiz y Zarina, 2017: 45).

Así, no sólo porque vivimos en una coyuntura donde las influencias europeas,
norteamericanas, asiáticas y nacionales convergen, (de manera fugaz, incluso desde la
mezcolanza), perdimos la inquietud en buscar cómo enlazar el interés de conocer la historia
en y de la moda, por medio de un retrato narrativo como medio de exposición sociocultural.
De ello se despliega su importancia con el paso del tiempo y entendiendo el mensaje que
proporcionaron, a la par de su interpretación actual, concretamos que sus respectivas
preocupaciones y observaciones en la moda como movimiento social, entra en un estado
cíclico que muestra repeticiones y reinterpretaciones a través de los atuendos, por ejemplo:
Modas que en el pasado tienen una metodología económica como el "Vogue", a otras actuales
como el "Vaporwave" reafirman con total uso de tecnologías modernas el avance no solo
histórico o social sino cultural; cabe resaltar que estos géneros de moda (incluyendo a los que
no hemos mencionado), tienen una enorme carga cultural e ideológica, con lo cual hará el
común y muy escuchado término "Aesthetic" es difuso y subjetivo en la era actual sobre
quienes lo portan, este es completamente usado e ideologizado en la modernidad, lo que
verifica que a medida de que pasa el tiempo la moda también va transformándose y
evolucionando.

Todo lo anteriormente mencionado fue importante para emplear el análisis a nuestra

población universitaria, especialmente en alumnos y alumnas de la carrera de Comunicación
y Periodismo en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón del turno matutino del
presente semestre 2024-1.

Profundizando lo anterior, debemos observar que a lo largo de la vida uno de los grandes
temas que cobra relevancia a cierta edad es nuestra forma de ver la vida, donde los objetos
utilitarios como atuendos, accesorios, zapatos o maquillaje se convierten en “moda” y a esto
se le suma lo que podemos concebir como “canon de belleza”, lo cual nos deja pensando
¿Realmente qué es? ¿A qué se refieren estas palabras? Pueden ser un concepto tan diverso
que “entramos en un callejón sin salida”. La ropa puede ser un aspecto positivo como
negativo, puede nutrir nuestros pensamientos sobre posturas específicas de la vida cotidiana
o, puede generar problemáticas emocionales, físicas y psicológicas como la anorexia o
bulimia, sin embargo, vamos a adentrarnos en estos temas desde lo sociológico.

Para iniciar, recurrir a diferentes autores y autoras así como algunos personajes, nos va dando
guía de lo que conceptualmente podemos entender en la moda con relación a la belleza:

La belleza física escapa al eterno femenino y puede ser cultivada y reivindicada por
ambos sexos. No es justo hablar de una belleza unisex. Ni la feminización del varón
ni la masculinización de la mujer deberían llevar al mismo ejemplo de identidad
única. La igualdad existiría más bien en una libre alteridad, hay una gran cantidad de
masculinidades diversas así como también feminidades (Nannini, 2016:23).

Aquí, la autora nos abre un panorama controvertido entre los arquetipos de cómo debe
concebirse la belleza femenina y masculina, en la actualidad nuestra generación está
rompiendo con ese modelo separatista en cuanto a lo que es estipulado usar para definir
nuestra belleza. Agregando a lo anterior, esta se podría tornar como un término subjetivo,
pues a pesar de que existen parámetros ortodoxos sobre el concepto impuestos por grandes
marcas, cada una y uno de nosotros “nos vamos creando” a partir de la elección de nuestros
gustos, comodidad y usar lo que puede estar “de moda”; así mismo, no debemos olvidar que
este último término se enlaza completamente en lo que se nombra como belleza.
Al ser este un factor cultural y social se va gestando el auto concepto desde la individualidad
de (en ocasiones) cómo manifestar nuestras posiciones ante lo político, económico, cultural,
entre otros; de aquí se puede partir en que la belleza está ligada a los movimientos sociales,
quizá, por los años 20s las mujeres solían usar prendas largas y elegantes, mientras que los
hombres vestían con trajes y sombreros de copa, esa era la belleza de la época, ahora
(exclusivamente hablando de las mujeres) no hay una preocupación tan marcada con lo que
concierne a lo sutil, podemos ver el regreso de las mini faldas, crop tops y pantalones
holgados como en los 2 mil, quizá unos cuantos años antes de que naciéramos, el valor
agregado que le damos a lo bello también se enlaza con la preocupación que tenemos en la
cuestión emocional y psicológica.

Nannini recupera de Vigarello (2005) un pensamiento que reafirma lo anterior “… respecto

de una belleza colectiva que ya entrando en los ‘90 impone como moda tener un estilo propio
y por sobre todas las cosas la búsqueda del bienestar personal” (p. 238). Agreguemos también
lo que la autora recupera de una entrevista a una diseñadora “la mayoría de las personas que
consumen moda buscan identificarse con un grupo, con un canon de belleza o con un
status”. En adición, podemos hablar de cómo ciertos aspectos corporales dan signos de
belleza y prestigio, ejemplo de ello son las mujeres kayanas de Tailandia con la estética de su
“cuello de jirafa”, en China la modificación del tamaño de los pies, en Mauritania mujeres
con obesidad, Nueva Guinea y Etiopía destaca por la manera en que se realizan los tatuajes,
en fin, se podrían mencionar muchos más ejemplos de lo que diversas culturas considera
como belleza, lo cual no excluye la elección de atuendos que también sirven como distinción
y continuidad de costumbres y tradiciones.

De modo similar Miguel comenta:

En las sociedades contemporáneas, en donde la estatización del consumo

cobra cada vez mayor relevancia, la moda se perfila como un elemento crucial
que se articula con este proceso, de manera tal que ambos funcionan como
medio de expresión para el individuo (2019: 10).

En otras palabras, la manera en que cada una y uno de nosotros nos expresamos puede tener
similitudes, sin embargo somos nosotros y nosotras quienes le ponemos “un toque diferente”
a lo que vestimos, existe una gran necesidad de ser distinguirnos, consideramos que,
pertenecemos a una mezcla donde se gesta todo lo que nos hace, configurando de a poco el
resultado de nuestra idiosincrasia. También podemos ejemplificar esta necesidad de "ser
parte" con las tribus urbanas: “facheros”, “jipis”, “buchones”, “reggaetoneros”, como sea que
los conozcamos, según la estética que cada una de estas debe llevar, quien quiera estar en el
grupo debe cumplir con ciertas características y, mientras más fiel sea la apariencia a lo que
psicológicamente se considera, más bello o atractivo se representa.
Es evidente que la belleza es un ente psicológico construido a partir de nuestros sentidos, el
ámbito que nos interesa en esta investigación viene desde la observación, esto no quiere decir
que los sentidos restantes sean menos relevantes. A partir de esta reflexión, nos damos cuenta
de que el canon de belleza en la moda ejemplifica que todo de lo que nos rodeamos tiene
relación, la sociedad es un conjunto de similitudes, contrastes, tensiones, contradicciones y
rupturas por agregar algunos aspectos, en medida de la extensión de nuestra diversidad lo que
entendemos como belleza se ajusta a la pluralidad de creencias, estilo de vida, preferencias y
pensamientos, hecho que, analizándolo está adherido a la vestimenta que portamos.

Nannini (2016) nos da una perspectiva en la que la belleza y la moda cumplen roles cruciales,
desde el aspecto económico y de poder que ejercemos:

Hay quienes se sienten a gusto pudiendo elegir minuciosamente sus

vestimentas en otros lugares, no necesariamente comprando lo que el mercado
dicta y cuando lo dicta, y a partir de eso pueden expresar parte de sus
personalidades e identificarse con otras estéticas y cánones de belleza que
difieren de los dominantes (p. 45).

Como es por muchos conocido, tanto la belleza como la moda se reinventa. Los y las jóvenes
estudiantes nos encontramos en diversas ocasiones con la angustia en la cuestión económica,
no sabemos si nos alcanzará el pasaje en camino a la universidad o si podemos comprar algo
de comer en caso de no llevar alimentos desde nuestra casa; ahora, si le sumamos que en la
mayoría de las veces tenemos una preocupación por cuidar nuestra identidad ( que,
determinadamente contempla la ropa que usamos y los modelos que consideramos atractivos)
esta se va moldeando según la visión colectiva.

El poder adquisitivo esta aunado al estatus, vemos a alguien portando una chamarra y
pantalón de marca, cabello brillante, ondulado, es de tez blanca y ojos de color miel, una
sonrisa deslumbrante y su corporalidad es delgada (depende mucho de nuestros gustos
físicos) de inmediato nuestra mente nos puede remitir a un Ser digno de considerarse bello.
Pero, ¿Si no tenemos estas características físicas? ¿Si el presupuesto que destinamos para
nuestro cuidado personal es reducido? ¿Y si la adquisición de nuestra ropa no proviene de
marcas reconocidas sino de bazares o ropa de segunda mano? El poder que tenemos se verá
contrastado con quienes lo poseen, por ello reiteramos que, la belleza es subjetiva en medida
de nuestro entendimiento y perspectiva, incluso, desde nuestras posibilidades y limitaciones.

Sin embargo, Fuenmayor (2006) nos recuerda lo que Foucault por muchos años analizó
sobre las relaciones de poder, agregando que para percibir el impacto de este es necesario
saber “… cuáles son sus mecanismos, sus efectos, sus relaciones, los diferentes dispositivos
de poder que se ejercen, en niveles y modalidades tan distintas, en ámbitos y con extensiones
tan distintas en la sociedad” (p. 222). Finalmente esto ayuda a que comprendamos que
nuestra necesidad de pertenencia e identidad y la manera en la que concebimos la realidad
estará constantemente sujeta a la existencia del otro, ya sea de manera individual o colectiva;
así, por medio de estos mecanismos de poder podemos construir una concepción en cuanto a
nuestra manera de observar cómo la moda y la belleza se pueden mezclar hasta volverse un
solo ente.

La importancia de la moda no es simplemente una cuestión de estética, tendencias o clases, el

concepto como también sus ideales han trascendido más allá, convirtiéndose en un arte o un
medio de expresión, aparte de un atisbo de cómo se vivía o cómo se vive en un espacio y
tiempo específico ubicado en la historia. "En la actualidad, la moda en México sigue
evolucionando a tal punto que ya no se puede hablar de una vestimenta única que identifique
a los mexicanos. Y es que de hecho nunca se pudo" (Sanper México, 2023).
Con todos los matices y contextos que conlleva la moda y su repetición en México, esta se
convierte en un medio poderoso para transmitir mensajes, expresar valores personales y
sociales, aún así, esto no significa que los cánones de belleza en la moda no manejen
discursos elitistas, capitalistas y clasistas, pero no por eso debe perderse de vista el nutritivo
estudio sociológico de identidad que nos ofrece. Ruiz y Zarina (2017) recuperan de Barnard
(1940) que:

Identidad es en sí una dualidad, informada por el individual y el colectivo al mismo

tiempo. En la teoría de la moda, las cuestiones de identidad y su relación con la
historia, cultura, raza y género, además de las experiencias vividas, afectan la manera
en como un individuo decide su forma de vestir (1940).

En el contexto de esta investigación, el canon de belleza en la moda adquiere un papel

fundamental como vehículo de expresión social y política. En primer lugar, la moda se
convierte en una herramienta de empoderamiento y autoexpresión, el alumnado utiliza la
vestimenta para comunicar sus valores, creencias, política, manifestaciones e ideales, ya sea
mediante el uso de prendas con mensajes, la elección de los colores o la adopción de estilos
asociados a movimientos específicos, los cánones se convierten en un medio a través del cual
los y las estudiantes pueden expresar su identidad y sus necesidades, más aún en un contexto
nacional en el que somos jóvenes de un "mundo líquido". También, la moda se utiliza para
abordar cuestiones sociales de relevancia, pensamos que nuestra población de estudio es
propensa a estar altamente consciente de los problemas contemporáneos y a través de su
estilo, pueden generar activismo y conformar una postura crítica.
La moda se convierte en una plataforma para la denuncia a la desigualdad, la injusticia, la
sostenibilidad y otros temas de impacto social; el canon de la belleza en la moda que se
vislumbra en la comunidad estudiantil protagonista un espacio donde se rescatan, celebran y
dignifican las raíces culturales, la diversidad de México y la sociología de género, lo cual
sirve de plataforma para promover el cambio, es así como el rol de la belleza y la moda se
convierten en un canal por medio del cual los y las jóvenes pueden hacer oír sus voces y
contribuir a la construcción de una sociedad tanto más inclusiva como consciente.
Por otro lado, el sincretismo en la moda se refiere a la fusión o mezcla de elementos con
diferentes culturas, tradiciones y estilos en la estética individual, una época o del país. Este
pensamiento hace que el mexicano no se vea a sí mismo como una mezcla sino "...como una
abstracción…" (Paz, 1950: 87).
La moda mexicana es conocida por su rica herencia cultural y étnica, a lo largo de la historia
ha incorporado influencias de diversas fuentes, incluyendo las culturas indígenas, la
colonización española y la de otras culturas extranjeras, hablando paradójicamente de una
descolonización con usos de cultura colonial, el alumnado de Comunicación y Periodismo se
ha visto interesado en hacer uso del sincretismo para exponer su propio mensaje y, al mismo
tiempo de brindarnos una crítica haciendo uso de redes sociales, consumismo y/o alternativas
de compra, es así como logramos obtener su perspectiva respecto a los cánones de belleza en
la moda desde su vida cotidiana, lo que nos proporcionó observar un abanico enriquecedor de
estilos.

También , el sincretismo de la comunidad que investigamos implicó que nuestras miradas

notaran la interacción y fusión de estas influencias diversas que logran crear estilos únicos y
expresiones culturales propias, aunque también, se genera crean mensajes en varias ocasiones
difuso por el poco interés que hay en el: "¿que están vistiendo?" tanto como: "¿por qué es
bello?", muchas preguntas aquí pueden resultar variantes, tanto como el de donde viene su
ropa, su concepto de belleza, lo que consideran que se afianza a su estilo de vida, entre otras,
esto mismo puede manifestarse en los tejidos, patrones, bordados, diseños y accesorios que
reflejan una combinación de tradiciones culturales.

Al final estas teorías de la moda solo logran desestimar las posibilidades y formas
alternativas de los sistemas de la moda, particularmente aquellas que se encuentran
fuera de la cultura occidental, al convertirlas en un fetiche colonial de su propia
creación, erosionado aún más las identidades fragmentadas (Ruiz y Zarina. 2017).

Como es conocido, los roles que desempeñamos como jóvenes es esencial en la creación de
una identidad en los cánones de belleza en la moda mexicana, su importancia radica en su
capacidad para colaborar y cuestionar las normas preexistentes en la industria de la moda, lo
cual hace que se promueva un enfoque más inclusivo y diverso, esto lo logramos al aportar
una perspectiva tanto "fresca" como dinámica a la moda mexicana. Nuestra energía creativa,
mentalidad abierta y voluntad de explorar nuevos conceptos de belleza desafían los ideales
establecidos, al unirnos en una comunidad, podemos influir en la redefinición de los cánones
de belleza al promover una identidad que celebra la diversidad étnica, cultural y personal,
esto a través de un trabajo en conjunto, así los y las estudiantes podemos explorar cómo
diferentes culturas, tradiciones y perspectivas convergen en un único concepto de belleza y
moda.

Referencias

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https://www.redalyc.org/pdf/5886/588666484007.pdf

Miguel, P. (2019). La moda objeto de análisis (1a ed.). Paula Miguel (ed).
https://sociologiadit.files.wordpress.com/2021/03/la-moda-objeto-de-analisis-paula-miguel-e
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Nannini, V. (2016). Moda, Comunicación y Poder: ¿Qué vestimos, por qué y qué queremos
decir con eso? [Universidad Nacional De Rosario].
https://rephip.unr.edu.ar/bitstream/handle/2133/6618/TesinaNanniniModa.pdf?sequence=3

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Sanper. Sanper.
https://spmexico.mx/web/la-evolucion-de-la-moda-en-mexico-a-traves-de-los-anos/

Fuentes

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