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EDITORIAL: FONTAMARA
AÑO: 2017
MÉXICO
ISBN: 978-607-736-4276
EL ARTE COMO TERAPIA
Coordinadora
Pamela S. Jiménez draguiCeviC
Para los modernos, los libros son objetos de consumo y elementos mate-
riales de la cultura, pero un libro es mucho más. Los libros son saetas de
utopía hecha letra; testamento de enigmas para tensar los misterios; gara-
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Tomando esta última frase, los libros, como la memoria que per-
dura para sostenernos como trapecistas siempre a punto de caernos,
viviendo el riesgo de reinventarnos, apenas sosteniéndonos con el vo-
lantín de la curiosidad, ésta que nos ha permitido desarrollarnos como
humanos al grado de inventar las artes, las ciencias, los problemas
universales y hasta de producir objetos como los libros, en este caso.
Ahora me permitiré comentarles sobre los conceptos que configuran
este libro como: artista, crecimiento interior y proceso.
Artista. «Toda persona que crea o que participa por su interpretación
en la creación o la recreación de obras de arte, que considera su crea-
ción artística como un elemento esencial de su vida, que contribuye así
a desarrollar el arte y la cultura, y que es reconocida o pide que se la re-
conozca como artista, haya entrado o no en una relación de trabajo u
otra forma de asociación».1
Crecimiento interior. Cómo, a través de una evolución personal,
se obtiene una coherencia armónica entre lo que se piensa, se siente, se
dice y se hace, que busque el bien personal y colectivo.
Proceso.2 «Conjunto de actividades mutuamente relacionadas o que al
interactuar transforman elementos de entrada y los convierten en resulta-
dos». En un proceso artístico existe una conexión entre cuatro elementos
que permiten la manifestación de la obra artística: la voluntad, la mente, el
espíritu y los sentimientos. A su vez, es esencial destacar los Ejes temáti-
cos: la musicoterapia, desde un ámbito gestáltico que tiene como objetivo
que el terapeando «logre la madurez y la autonomía para elegir libre y ade-
cuadamente lo que su organismo necesita y desea para su sobrevivencia,
desarrollo y actualización» (Ocampo, 2011). La psicodinámica, que se
basa en la creencia de que el trabajo terapéutico es buscar, en cada uno de
los pacientes, lo que es propio y saludable, y reintegrarlo a la personalidad
en una forma autónoma, mientras que la danza en su sentido terapéutico
1
uneSCo (27 de octubre de 1980), “Recomendación relativa a la condición del artista”.
2
Administración, de James Arthur Finch Stoner, R. Edward Freeman, Daniel R. Gil-
bert y Pilar Mascaró Sacristán.
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Fuentes consultadas
Baftiem van der meer, Kena (2015), Filosofía y danza, inBa, México.
moraleS, Elí (2008), Sujeto y estructura. Lacan Psicoanálisis y Moder-
nidad, Ediciones de la Noche, México.
navarro ariaS, Roberto (2005), Psicoterapia corporal y psicoenergéti-
ca. Principios y técnicas, Pax, México.
oCamPo, Teresa (2011), Conferencia llevada a cabo durante la especia-
lidad en Fonoterapia en mayo, Instituto Integro, Guadalajara, Jalisco.
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II El arte
Una de las características más significativas del arte es que se crean conexio-
nes personales y emocionales con él; teniendo el derecho de reclamar como
nuestros aquellos fenómenos artísticos que nos mueven. De esa manera, el
arte desempeña un poderoso papel en la construcción de circuitos y redes
identitarias, en el desarrollo de sentidos de distinción y en la acumulación de
capital cultural. Sin embargo, y a pesar de que todos creamos conexiones con
el arte, casi nadie podría decir con exactitud qué es arte, porque definir la pa-
labra arte es sumamente complicado; desde su nacimiento con los griegos y
los romanos (incluso ya entrado el Renacimiento), significaba básicamente la
forma correcta de hacer las cosas. Al separarse las ciencias y los oficios del
ámbito del arte e incluir en éste a la poesía, comenzó en el Renacimiento una
serie de discusiones en torno a la definición de la palabra arte, definiciones
que a lo largo de los tiempos han incluido palabras como belleza, mimesis,
forma, experiencia, y recientemente creatividad. Estos caminos sinuosos que
desde entonces se han surcado hasta llegar a la expresión contemporánea
más reciente de arte, han construido definiciones de la palabra que algunos
adoptarán con mayor facilidad que otros.
En los diccionarios se podrá encontrar que arte es una disciplina o activi-
dad que requiere ejercerse con habilidad, talento y creatividad en un sentido
de contexto literario, musical, visual, de puesta en escena y (recientemen-
te) de concepto, que involucra tanto a las personas que lo realizan como a
quienes lo observan, y con esta definición de arte estarán satisfechas la ma-
yoría de las personas, no obstante, quienes están inmersos en el proceso del
arte, como filósofos, teóricos, pensadores y artistas, seguirán buscando in-
cansablemente definiciones, desde las que no disipan ninguna duda como
la de Jean Arp, quien en 1920 (aproximadamente) expresó: «Todo es arte».
O la de Dino Formaggio, cuando en 1953 comentó: «Arte es todo lo que los
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Entonces, ¿es necesario que los artistas, y en particular los artistas es-
cénicos tengan alguna afectación anímica para poder producir un choque
en el espectador? ¿Tanto los creadores artistas como los espectadores se
deben encontrar inmersos en un estado alterado de las emociones?
En el caso particular de quien esto escribe, se plantea que lo que se re-
quiere es fomentar en el artista escénico una inteligencia emocional que le
permita transitar por distintos estados emocionales sin que esto trastoque
su salud mental y/o física. Se propone realizar un trabajo consciente de
los cambios en sus emociones que le permitan influir en la construcción de los
personajes que tendrá que interpretar en una puesta en escena.
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Conclusiones
En los tiempos de Descartes, se creía que para pensar bien había que pensar con
la «cabeza fría», distanciada de las emociones. Pero en los últimos años se ha
empezado a establecer fehacientemente que la emoción desempeña un papel
muy importante al momento de decidir. Es más: se piensa mejor y se decide me-
jor si la emoción está a tono con el pensamiento racional (Damasio, 2006: 204).
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Las diferencias en las respuestas no sólo son en cuanto a la percepción de una emo-
ción en particular, también lo son en el tiempo en el cual se puede considerar que se
llegó a una emoción pura y el tiempo que requiere para obtener control de la emoción.
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Sólo el 20 por ciento de los participantes la define claramente como miedo.
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No es suficiente nacer para la humanidad, nos hacemos humanos con los demás
y en tanto estos procesos de mediación cultural nos ubican dentro de la con-
dición humana. La corporeidad es un concepto que se inscribe dentro de la
condición humana en la medida que reconoce el determinismo biológico de
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Fuentes consultadas
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I Introducción
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2. El simbolismo
1
Original en inglés.
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III Alcances
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• Reducción de ansiedad.
• Disminución significativa de la depresión.
• Cambios en la autoestima e imagen corporal.
• Progresos en la relación con otros y en los intercambios sociales.
• Capacidad de elevar los niveles de atención y beneficiar el proceso
cognitivo (Reca, 2005).
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1. Conciencia corporal
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La antigimnasia es una técnica creada por la fisioterapeuta francesa Thérese Berthe-
rat en la década de los años Setenta. En su obra El cuerpo tiene sus razones, Bertherat
expone esta técnica como de autocura, enfocada en el desarrollo de la conciencia cor-
poral y la liberación de tensión a partir del trabajo de la musculatura interna. Ella
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Imagen 4
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b) Movimiento consciente:
Para realizar este ejercicio se necesita una liga de ejercicio o banda
elástica. Puede ser también un resorte de mercería de 10 centíme-
tros de ancho, además de un tapete de yoga.
Diagnóstico inicial: Caminar por el espacio del que se disponga
haciendo consciente cada una de las partes del cuerpo y poniendo
atención a qué partes del cuerpo se mueven y qué partes no.
Elegir deliberadamente alguna parte del cuerpo que se note con
poco o nulo movimiento; dependiendo la parte del cuerpo escogi-
da, el ejercicio se puede realizar acostado, sentado o de pie a libre
elección, tomando en cuenta siempre la comodidad y equilibrio.
Ayudado por la liga, tensionar la parte afectada realizando movi-
mientos que alarguen la parte del cuerpo que se trabaje, tratando
de estirar lo más lejos posible la liga y siguiendo el ritmo de la res-
piración, realizar varias repeticiones: «estirar, sostener y soltar»,
«estirar, sostener y soltar».
Sin llegar al agotamiento, realizar el ejercicio las veces necesarias,
cuando se sienta que es suficiente, suspender y relajar todo el cuer-
po tendiéndose sobre el tapete, enfocar la respiración y, cuando para
ti (o para uno) sea pertinente, iniciar el movimiento para llegar a la
posición de pie.
Diagnóstico final: Realizar movimientos suaves comenzando con
la parte del cuerpo que se trabajó e incorporando después todo el
cuerpo en movimientos suaves de baile, comprobando la ganancia
en elasticidad y movilidad.
Recomendaciones: En la búsqueda de mayor flexibilidad y movi-
miento siempre debe seguirse el movimiento natural de las articu-
laciones, no hacer la extensión en posiciones forzadas para la arti-
culación.
Resultados esperados: Mayor movilidad en partes del cuerpo que no
la tenían, recuperación de extensión y elasticidad en articulaciones.
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Éste es un ejercicio básico de la técnica, para obtener resultados correctivos se reco-
mienda consultar con un especialista.
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3. Dolor y movimiento
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Imagen 5
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Imagen 7
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4. Ejercicios de relajación
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En este caso es altamente recomendable consultar con un especialista.
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Fuentes consultadas
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I Justificación
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II Marco conceptual
1
Proceso: Es un conjunto de actividades mutuamente relacionadas o que al interactuar
transforman elementos de inicio convirtiéndolos en resultados. En un proceso artístico
existe una conexión entre cuatro elementos que permiten la manifestación de la obra
artística: la voluntad, la mente, el espíritu y los sentimientos.
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a) La definición del iSo: identidad sonora y única del ser humano. Con-
junto de energías sonoras, acústicas y de movimiento que pertenecen
a un individuo y lo caracterizan (producto de la herencia, vivencias
en el útero y experiencias logradas hasta la edad adulta).
b) Las cuatro estructuras energéticas iSo:
• iSo universal: energías corporo-sonoro-musicales que se en-
cuentran en el inconsciente y que caracterizan, desde hace mi-
lenios, al género humano.
• iSo guestáltico: energías corporo-sonoro-musicales que se en-
cuentran en el inconsciente y que se van desarrollando a partir
de las vivencias desde la concepción.
• iSo cultural: energías corporo-sonoro-musicales, vivencias que
se dan a partir del nacimiento y que se nutren del medio am-
biente en el que se desenvuelve el individuo.
• iSo grupal: energías corporo-sonoro-musicales, identidad cam-
biante a partir de la interrelación con un grupo que comparten
circunstancias y que se identifican en sus canales de comunica-
ción (esto es esencial para un proceso terapéutico).
c) Establece la diferencia entre iSo e imprinting: el iSo es un fenóme-
no dinámico y el imprinting es estático (como la primera impre-
sión o primer impacto).
d) Objeto intermediario: elemento u objeto capaz de permitir el paso de
energías de comunicación corporo-sonoro-musicales entre personas
(instrumento musical). Es importante que el musicoterapeuta descu-
bra cuál es el instrumento musical adecuado para el artista, pues está
ligado al iSo guestáltico y al iSo universal del paciente.
e) Objeto integrador: es el instrumento corporo-sonoro-musical que
permite que dos o más personas se puedan interrelacionar entre sí.
Normalmente, el instrumento es membranófono y de percusión.
Este instrumento lidera sobre los demás instrumentos de un grupo
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2
Weir, L.E. (1952), Music Therapy. Proceedings of the National Association for
Music Therapy, The Allen Press, Lawrence, Kansas, pp. 129-132. Citado en Alvin,
Juliette (2005), “Efectos fisiológicos y psicológicos de la Música”, en Musicoterapia,
Paidós, Ecuador-Barcelona.
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Figura 2
Objetivos
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Bases
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Función de la música
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Principios
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Etapas
Método
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Ejercicio 1 (grupal)
Justificación
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Objetivos
Metodología
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Procesamiento
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Justificación
Objetivos
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Metodología
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Descripción
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Ejercicio 3 (grupal)
Justificación
Objetivos particulares
Metodología
Investigación aplicada o de intervención para transformar la percepción
y conciencia del paciente a partir del reconocerse a sí mismo como al-
guien que pertenece a un grupo.
La propuesta musical para el ejercicio 3 es la que se muestra en la Tabla 3.
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Descripción
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Procesamiento
Conclusiones
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Fuentes consultadas
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La eutonía fue creada por la alemana Gerda Alexander a partir de sus expe-
riencias personales, proponiendo una síntesis del conocimiento total del ser
humano que integra emociones, aspectos psicosomáticos y la expresión del ser.
Concebía la disciplina creada por ella como «un camino de búsque-
da de la unidad psicofísica del hombre dentro del mundo occidental»
(Alexander, 1983: 1). Así, consideraba que esta unidad de cuerpo y men-
te se logra gracias a una observación y aplicación intensa y consciente
sobre las tensiones musculares y nerviosas (tono neuromuscular; siste-
ma neurovegetativo y sistema neuromotor).
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Aprender a hacer eso requiere ensayar ese paso mentalmente antes de ha-
cerlo: por ejemplo usted decide extender su pierna desde la cadera hasta el
pie. Se ha demostrado por medio de la electromiografía, midiendo la acti-
vidad de los músculos, que no se involucra acción muscular alguna y, sin
embargo, se puede ver y medir la pierna que se ha estirado. Lo que se in-
volucra parece ser el movimiento de los ligamentos que conectan unos
huesos con otros (Alexander, s/f).
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Contacto consciente
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IV De la forma a la estructura
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En este sentido, se puede expresar que el tono está afectado por nu-
merosas variables propias de la persona, como pueden ser sus cambios
de estados emocionales (alegría, tristeza, miedo, etcétera), lo que se co-
noce como psicotono, así como también distintos estados de alteración,
estrés o sobreexcitación (hipertono), o aquellos de cansancio, inactivi-
dad o depresión (hipotono).
Cuando hay afectaciones de tono alto, las cuales se prolongan en el
tiempo, se producen zonas musculares aisladas de funcionalidad, acor-
tamientos, reducción del rango articular que trae como consecuencia
una notoria disminución de la movilidad. Hipertonías crónicas no sólo
generan alteraciones posturales, también provocan trastornos metabóli-
cos y procesos degenerativos articulares.
Por el contrario, cuando se generan zonas en el cuerpo con hipotono, pro-
duce inestabilidad articular, pesadez corporal y desgano, entre otros efectos.
Estas alteraciones propician que el tono neuromuscular no fluctúe,
característica necesaria para que la persona se adapte a su entorno y so-
brelleve las necesidades que éste le ocasiona.
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V Ejercicios
Se dispone a los alumnos por el piso del salón y se les pide que tomen una po-
sición decúbito dorsal. Se les solicita que cierren los ojos y que poco a poco
vayan soltando el peso de su cuerpo sobre el piso. Luego, el eutonista va
guiando a los alumnos en un inventario corporal, para que observen y regis-
tren cómo perciben los apoyos de su cuerpo en el piso, cómo es esa huella o
dibujo que los apoyos de cuerpo dejan en el piso en el momento inicial de la
clase o actividad. Se les pide que observen las zonas con mayor o menor apo-
yo, así como las que se les hacen más o menos presentes. Una vez registradas
estas observaciones, se les pide que dibujen con un lápiz en una hoja la for-
ma en que percibieron su cuerpo y que dentro de ésta pinten más oscuras las
zonas que percibieron con más apoyo y más claras las zonas que menos apo-
yaban, dejando en blanco las zonas en las que no percibieron apoyos.
Finalizado el dibujo, se les pide que nuevamente se acuesten en de-
cúbito dorsal, el eutonista va guiando a los alumnos para que con sus
manos comiencen a tocar y a despertar la sensibilidad de la piel que re-
cubre su cuerpo. Esto puede ser rozando, palpando o deslizando la piel
cuando está cercana a un hueso. Comenzando desde la piel que recubre
ambos pies y finalizando con la piel que recubre el rostro y la cabeza, así
como el cuero cabelludo y el cabello.
Una vez que los alumnos terminan esta actividad, el eutonista los vuel-
ve a guiar para que realicen un inventario corporal observando cómo se
encuentran los apoyos de su cuerpo en ese momento, haciendo énfasis en
percibir cuáles zonas apoyan y cuáles no. Finalizado el inventario, se les
pide a los alumnos que en otra hoja dibujen la silueta de su cuerpo tal cual
la perciben en este momento y dentro de ella pinten más oscuro las zonas
que percibieron con mayor apoyo y más claro las zonas que sintieron con
menos apoyo, dejando en blanco las zonas que no apoyaban. Para finalizar
se les pide comparar el dibujo del inicio con el dibujo final.
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Se dispone a los alumnos por el piso del salón, y se les pide que tomen
una posición en decúbito dorsal. Se les solicita que cierren los ojos y que
poco a poco vayan soltando el peso de su cuerpo hacia el piso. Una vez
que los alumnos logran encontrar una posición de confort, el eutonista los
va guiando para que comiencen a tocar con ambas manos su cuerpo, con
la intención de explorar su forma, tamaño, dimensión, y percibirlo con el
mayor detalle posible. Una vez finalizada esta actividad, se les entrega un
trozo de arcilla para modelar y se les pide que modelen en este material
su cuerpo, de acuerdo con lo que percibieron en la experiencia anterior.
Se dispone a los alumnos por el piso del salón, y se les pide que tomen una
posición en decúbito dorsal. Se les solicita que cierren los ojos y que poco
a poco vayan soltando el peso de su cuerpo hacia el piso. Luego, el eutonis-
ta va guiando a los alumnos en un inventario corporal, para que observen y
registren cómo perciben la piel del cuerpo y así comparen cómo sienten la
piel que está cubierta por la ropa, cómo roza y es rozada por ésta. También
se les pide que observen la piel que no está cubierta por la ropa, pero que es
rozada por el aire o por el piso y, a través de estas consignas, se va realizan-
do un inventario por toda la piel que recubre el cuerpo. Luego de finalizada
esta actividad, el eutonista les solicita que observen la piel en la totalidad
del cuerpo como un todo que envuelve y contiene. Seguido de esto, se da
la consigna de comenzar a movilizar de manera muy sutil, con micromo-
vimientos, distintas partes del cuerpo, manteniendo la atención en la piel
con la intención de observar qué partes de ésta se pliegan y qué partes se
estiran. Poco a poco, la consigna va pidiendo que los movimientos comien-
cen a ser más amplios y así, de manera paulatina, pasar de movimientos
a desplazamientos en el espacio. Luego se les indica que los desplazamien-
tos se realicen desde las partes de la piel que se pliega o desde las partes que
se estiran, explorando formas de generar movimientos diferentes a los que los
alumnos están acostumbrados. Para finalizar, se les indica que regresen a
la quietud, a la posición en decúbito dorsal, y que lleven la atención a la totali-
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Se dispone a los alumnos por el piso del salón, y se les pide que tomen
una posición en decúbito dorsal. Se les solicita que cierren los ojos y que
poco a poco vayan soltando el peso de su cuerpo hacia el piso. Luego, el
eutonista va guiando a los alumnos en un inventario corporal, para que
observen y registren cómo perciben la piel del cuerpo y así comparen
cómo sienten la piel que está cubierta por la ropa, cómo roza y es rozada
por ésta. También se les pide que observen la piel que no está cubierta por
la ropa pero que es rozada por el aire o por el piso, y a través de estas consig-
nas se va realizando un inventario por toda la piel que recubre el cuerpo.
Luego de finalizada esta actividad, el eutonista les solicita que observen
la piel en la totalidad del cuerpo como un todo que envuelve y contiene.
Seguido de esto, se da la consigna de comenzar a movilizar de manera
muy sutil, con micromovimientos, distintas partes del cuerpo mantenien-
do la atención en la piel con la intención de observar qué partes de ésta se
pliegan y qué partes de éstas se estiran. Poco a poco la consigna va pidien-
do que los movimientos comiencen a ser más amplios y así, de manera
paulatina, pasar de movimientos a desplazamientos en el espacio. Luego
se les indica que comiencen a experimentar emitiendo sonido de vocales
con la intención de que éste salga desde los pliegues o los estiramientos de
la piel. Pasados unos minutos, se les agrega la consigna de que exploren
diferentes volúmenes e intensidades sonoras. También se les puede in-
corporar como una última consigna que se explore la creatividad sonora
teniendo siempre presente qué se pliega y qué se estira de la piel.
Se dispone a los alumnos por el piso del salón y se les pide que tomen una po-
sición en decúbito dorsal. Se les solicita que cierren los ojos y que poco a
poco vayan soltando el peso de su cuerpo hacia el piso. Luego, el eutonista va
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Conclusiones
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Fuentes consultadas
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Introducción ..............................................................................................11
Fuentes consultadas ..................................................................14
CaPítulo i
CaPítulo ii
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CaPítulo iii
La Musicoterapia ......................................................................................63
I Justificación ............................................................................63
II Marco conceptual ..................................................................64
III Marco teórico .......................................................................65
IV Características de la música y de la musicoterapia..............69
V Organización de la musicoterapia .........................................72
VI Finalidad de los procesos de intervención en la
musicoterapia ............................................................................75
VII Propuesta de práctica..........................................................79
Ejercicio 1 (grupal) ...................................................................80
Ejercicio 2 (grupal) ...................................................................84
Ejercicio 3 (grupal) ...................................................................89
Fuentes consultadas ..................................................................92
CaPítulo iv
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