Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El fideicomitente puede ser aquella persona física que no sea considerada como
incapaz por la legislación común, es decir, que tienen capacidad de goce y de
ejercicio.
El fideicomitente debe ser propietario de los bienes que transmite a la fiduciaria, ya
sea que integren parte o la totalidad de su patrimonio. Los restantes atributos de la
personalidad, como el nombre del Estado civil y del Estado de nacionalidad, el
domicilio y la capacidad jurídica deben ser declarados y acreditados fielmente en la
operación fiduciaria. De que se trate.
Los menores de edad, aunque aún cuando estén emancipados, que no cuenten con
la autorización judicial para transmitir por conducto de sus representantes, los
bienes de su propiedad de acuerdo a la legislación común, el matrimonio del menor
de edad no emancipado facultándolo para la libre administración de sus bienes,
aunque requiere autorización judicial para enajenar, gravar o hipotecar sus bienes
raíces. Por extensión, la celebración de una operación fiduciaria sobre bienes
propiedad del menor requieren autorización judicial.
Las personas Morales extranjeras de naturaleza privada a las que les reconoce tal
carácter el artículo 2736 del Código Civil pueden ser fideicomitentes en tanto
cumplan con los requisitos de fondo y forma. Que para su existencia,
funcionamiento, transformación, liquidación, disolución y fusión les impongan las
leyes de su país, previa autorización de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Esta
autorización la concederá la dependencia pública del Poder Ejecutivo cuando la
persona moral extranjera de naturaleza privada compruebe.
Que estén constituidas conforme a las leyes de su país, que sus estatutos no
contienen nada que sea contrario a las leyes mexicanas de orden público que
tengan representante domiciliado en el lugar donde van a operar suficientemente
autorizado para poder responder de las obligaciones que contraiga la persona moral
y que una vez considera la autorización, inscriban sus estatutos en el registro
público de la propiedad.