Está en la página 1de 2

Adolfo López Mateos

Instituto Nacional de Protección a la Infancia

En los años treinta, la mayoría de los niños en el barrio de La Lagunilla solían asistir
a la escuela vestidos con ropa desgarrada y calzando sandalias, con un modesto
desayuno de pulque y tortillas duras en sus estómagos.

Los tiempos cambiaron, y por un giro del destino, una de esas mujeres, que
ayudaron a los niños a alimentarlos con comida decente, Eva Sámano, se convirtió
en la esposa de Adolfo López Mateos, quien, durante su presidencia en 1961,
inspirado por la preocupación de su esposa, decretó la creación del Instituto
Nacional de Protección a la Infancia (INPI).

Este nuevo organismo autónomo, con personalidad legal y recursos propios, tenía
como objetivo principal salvaguardar a los niños utilizando todos los medios
disponibles y proporcionando servicios complementarios a los estudiantes,
especialmente a través de la distribución de desayunos. Esta iniciativa ya había
comenzado en 1959, cuando se distribuyeron 30,000 porciones de comida, las
cuales rápidamente resultaron insuficientes.

El INPI continuó con esta labor y no se limitó a eso, también ofreció servicios de
guardería, jardín de niños, asesoramiento nutricional, clínicas, banco de leche y
centros de rehabilitación para personas con discapacidades.

Museo Nacional de Antropología

El Museo Nacional de Antropología (MNA) fue construido entre 1963 y 1964 durante
el mandato del presidente de México, Adolfo López Mateos, y bajo la dirección del
renombrado arquitecto mexicano, Don Pedro Ramírez Vázquez. El MNA fue
oficialmente inaugurado el 17 de septiembre de 1964 y desde entonces se ha
mantenido como el recinto más icónico destinado a preservar el legado prehispánico
de México. Se erige como un símbolo de identidad para las generaciones que
desean explorar sus raíces culturales.

El MNA dispone de más de treinta mil metros cuadrados de espacios de exhibición,


compuestos por 22 salas, diseñadas para satisfacer tanto necesidades educativas
como científicas. Cada sala fue concebida por equipos especializados, que
incluyeron investigadores, redactores, expertos en museografía, educadores y
técnicos, con el propósito de apelar tanto a la mente como a las emociones de los
visitantes.
Se buscó lograr funcionalidad y al mismo tiempo evocar emociones, permitiendo
que los visitantes adquirieran conocimiento de manera objetiva, mientras
conectaban con su identidad y encontraban su lugar en el mundo.

También podría gustarte