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Resumen.
El ganado porcino es una de las especies de interés zootécnico con mayores índices de
prolificidad, lo que la ha convertido en una de sus ventajas competitivas con respecto a
otras especies, sin embargo, un punto crítico que afecta la productividad de la industria es
la mortalidad en los primeros días postparto. Por ello, disponer de un lugar especial para
atender eventos de parto (salas de parto) y brinden un confort a la madre suponen un punto
importante para reducir las altas mortalidades de lechones en el sector porcino.
Introduccción.
La crianza de ganado porcino es una de las de mayor auge entre los sectores pecuarios de
produccion animal, esto se ve reflejado en datos del consumo per-capital de la carne de
cerdo. En colombia el sector porcicola se ha consolidado, tanto es asi que disputa los
prmeros puestos estre las proteinas de origen animal mas consumidas, pasando de 4.8kg de
carne de cerdo en el 2010 a consumir 12.2kg en 2021 según datos de Porkcolombia y
realizando aportes sustanciales al PIB pecuario que al 2018 fue de 4.8% (Minagricultura,
2019). Ademas de esto, los sistemas porcinos presenta una serie de cualidades que los hace
atractivos con respecto a otros sistemas de producción animal, por ejemplo su precocidad y
prolificidad productiva en comparación con otras especies domésticas de ínteres zootécnico
como los bovinos, según Porkcolombia el promedio de lechones nacidos totales por
camada es de 12.4 individuos, datos que no difieren en gran medida con los obtenidos por
países como España, Portugal y Francia con promedios de 14.6, 15.3 y 14.6
respectivamente. Aunque es cierto que estos atributos son un gran as bajo la manga de los
productores, también se debe hacer énfasis en los puntos críticos del sector porcícola, uno
de ellos y el cual se tratará en este artículo de revisión es la mortalidad de ocurre en los
primeros días postparto en lechones, pues según datos de Porkcolombia el índice de
mortalidad en la postparto hasta finalizar la lactancia fluctúa entre el 2.5% y 5%, esta
fluctuación esta determinada por el manejo de la cerda antes y durante el parto, pero
tambien por las instalaciones de la granja y la incidencia de efectos ambientales sobre el
neonato. Estos dos ultimos factores son muy importantes.
Discusión.
Existen diversos factores que influyen en la mortalidad durante el parto y lactancia, los
cuales se clasifican en tres grupos de factores predisponentes: unos propios del lechón,
otros de la cerda y otros ambiéntales (Gonzales et al., 2011). Entre los factores ambientales
se destacan los que tiene que ver con las condiciones que presenta la instalación en la cual
se reciben los neonatos. El lechón en el medio uterino esta inmerso en una burbuja de
comodidades que le proporciona todo lo necesario para su desarrollo, con temperaturas
entre 38°c y 40°c (Sarubbi et al., 2016). Sin embargo, el medio exterior es agreste con
temperaturas más bajas (20°c y 25°c) lo que condiciona la supervivencia del lechón, en aras
de mitigar el impacto que puede ejercer la temperatura ambiente en el neonato se
transportan las cerdas una semana antes del evento a la sala de parto, un ambiente que no es
común para la cerda, pues en este espacio solo vive durante el parto y la lactancia y por lo
cual es posible que se presente un cierto grado de estrés (Luna, 2009). La sala de parto es
un lugar equipado para brindarle un ambiente controlado a los lechones recién nacidos, con
una temperatura y humedad relativa óptimas para su desarrollo. Según Anguita (et al.,
2010) en la sala de parto se genera un conflicto de intereses entre los requerimientos de la
madre y el lechón, pues el lechón presenta una zona termoneutral entre 30°c y 37°c, por
otro lado, la madre disminuye la ingestión de alimento a estas altas temperaturas. Gastaldo
& Rossi (2014) afirma que temperaturas superiores a 20°c provocan estrés, aumento de la
frecuencia cardiaca y respiratoria, dificultades en los retornos del celo y bajo consumo de
alimento en la cerda, por lo que recomienda que las salas de parto mantengan una
temperatura entre 18°c y 20°c y mantener zonas específicas con temperaturas entre 30°c
para los lechones, de igual forma Pedersen (et al., 2015) propone requerimientos térmicos
de los neonatos de primera, segunda y tercera semana siendo de 28°c, 26°c y 24°c
respectivamente, en cuanto a la humedad relativa propone rangos entre el 60% y 70% los
cuales presentan un estado de bienestar para los neonatos y la madre, además de ello hace
énfasis en la velocidad de los vientos ya que esta es una de las formas en que el neonato
pierde calor corporal y sugiere que se mantengan en rangos de 0,2 a 0,4 m/s.
Conclusiones.
Se confirma la importancia de la sala de parto dentro de las granjas porcinas, como
una estrategia para contrarrestar los altos índices de mortalidad en lechones que se
pueden presentar en sistemas al aire libre.
Aunque las salas de parto actuales son espacios necesarios para los sistemas de
producción porcina, se debe implementar alternativas que permitan reducir la
condición de estrés de la madre y la expresión de la conducta natural por la cual se
castiga al sector Porcicola.
Los altos niveles de estrés en la cerda pueden acarrear problemas futuros y
contribuir a altos índices de mortalidad en los primeros días de vida de los lechones.
Referencias Bibliográficas.