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Polifarmacia
Prefacio
Nosotros, los médicos, juramos no causar ningún daño. Una de las formas más comunes en que los médicos pueden
causar daño es recetando medicamentos innecesarios y/o prescribiendo medicamentos que interactúan negativamente
con otros medicamentos.
DEFINICIÓN
Ha habido muchas definiciones de polifarmacia. Masnoon1 tabuló 138 definiciones de polifarmacia, de las cuales 111
utilizaron una definición numérica. El número más común fue cinco o más medicamentos. Algunos hicieron la
importante distinción entre medicamentos apropiados versus inapropiados o problemáticos.2 Más que el número de
medicamentos, la definición que favorecemos de polifarmacia es el uso de uno o más medicamentos innecesarios o
inapropiados, ya que, en nuestra opinión, esa es la verdadera asunto. A Beers, de esa pequeña universidad de
Westwood, se le ocurrió clasificar los medicamentos inapropiados. Creemos que prescribir medicamentos inadecuados
es probablemente más preocupante que el número absoluto de medicamentos.
Las enfermedades crónicas aumentan en frecuencia con el envejecimiento.3 Por lo tanto, no es sorprendente que la
cantidad de medicamentos recetados aumente con el envejecimiento y que la polifarmacia sea un problema importante
en los pacientes mayores.
Los silos de atención médica pueden brindar atención eficiente para afecciones específicas, pero a menudo los
proveedores de atención médica en estos silos no se toman el tiempo para abordar todos los medicamentos que necesitan.
El paciente puede ser recetado por médicos de otros silos. Como resultado, el paciente corre el riesgo de sufrir
polifarmacia con posibles interacciones entre fármacos.
De 1988 a 2018, el porcentaje de estadounidenses que usaban cinco o más medicamentos recetados aumentó
del 4 % al 11 %.4 Para las personas de 65 años o más, el porcentaje se disparó del 13,8 % al 41,9 % durante
este mismo período. No hubo diferencias significativas por sexo. Hubo algunas diferencias por origen étnico: los
estadounidenses de origen asiático y los hispanos/latinoamericanos de mayor edad tuvieron el porcentaje más
bajo (6,6%), y los ancianos afroamericanos tuvieron el porcentaje más alto de tomar cinco o más medicamentos
recetados (12,4%).
Las compañías farmacéuticas de Estados Unidos están amasando dólares. En promedio, los estadounidenses
gastan el doble ($1126 per cápita) que sus pares en otros países en medicamentos recetados ($552).5
Tres cuartas partes de las personas de 50 a 65 años usaban medicamentos recetados en comparación con el
91% de las personas de 80 años o más. Aún más importante, el número de medicamentos recetados aumenta
de 13 entre las edades de 50 y 64 años a 22 para las personas de 80 años o más.6 La tragedia es que más de
la mitad de los costos de las recetas para las personas de 65 años o más provienen de su propio bolsillo. , y para
las personas de 80 años y más, este porcentaje aumenta al 67%.
Los estadounidenses mayores, que representan sólo el 13 % de la población de EE. UU., compran el 40 % de
todos los medicamentos de venta libre (OTC).7 Estos medicamentos de venta libre incluyen tratamientos para
alergias, infecciones de las vías respiratorias superiores, artritis, acidez de estómago y estreñimiento.7 Más que
3 millones de estadounidenses informaron haber usado remedios a base de hierbas.6 El suplemento del NHIS
2002 incluía preguntas relacionadas con medicamentos alternativos, y el 12% los había usado.8,9
Uno de nosotros (ELS) estaba en los Institutos Nacionales de Salud, liderando una iniciativa para reducir la
polifarmacia que incluía entrevistas de radio y televisión. Después de una de estas entrevistas, ELS recibió una
llamada de un administrador de un hogar de ancianos que me dijo con orgullo que iba a suspender todos los
medicamentos a sus residentes mayores. Debemos ser
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Prefacio xiii
Edward Schneider, MD
Escuela de Gerontología Leonard Davis de la USC
1946 Avenida Serrano Norte
Los Ángeles, CA 90027, EE. UU.
REFERENCIAS