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Como empuñar el arma correctamente

Todos estaremos de acuerdo en que de la manera que empuñemos el arma,


dependerá en gran medida el resultado del disparo. Según la mayoría de
tiradores de alto nivel, el empuñar el arma de forma correcta, supone al
menos el cincuenta por ciento del éxito en los impactos
Una vez que hemos conseguido la posición idónea del cuerpo, de acuerdo a
nuestra morfología, viene lo más importante, la correcta colocación de la
mano, bien sea derecha o izquierda en la empuñadura de la pistola.
En principio debemos considerar tres puntos, muy importantes, tanto en la
mano como en la empuñadura.

• El espacio entre el dedo pulgar y el índice (dedo de disparo) deberá


quedar colocado justo debajo de la mira trasera.

• La parte inferior de la palma de la mano, al lado de la muñeca


(articulación del carpo) deberá estar en contacto con la base de apoyo de la
empuñadura, vulgarmente conocida como "talonera".
• La parte superior de la articulación media del dedo corazón sujetará la
empuñadura por su parte delantera superior, justo debajo del guardamonte.

Cuando estos tres puntos de la mano están correctamente colocados en los


lugares designados en la empuñadura, formarán un triángulo.
Teóricamente, si tenemos en cuenta lo que se denomina COG de
construcción, el lugar idóneo para sujetar el arma estaría en el punto rojo
dentro del recuadro, pero por razones obvias nos va a ser completamente
imposible, por lo que intentaremos acercarnos, lo más físicamente posible,
a esta marca, que será el punto en el recuadro azul, el cual tomaremos
como centro de la sujeción triangular del arma.
Esta técnica de sujeción está basada en la aplicación de la ley de la palanca.
Este enfoque nos dará la posibilidad de sostener la pistola con la actividad
muscular mínima, ahorrando energía y minimizando el arco de movimiento
de la misma.
Cuando aplicamos presión sobre la empuñadura, es importante y esencial
que, al hacerlo, no existan fuerzas laterales. Todas las fuerzas de presión
deben ejercerse en un eje a 90º paralelo al cañón.

Tres dedos, el meñique, el anular y el dedo corazón, deberán rodear la


empuñadura con una presión que nos resulte cómoda y que al mismo
tiempo sea suave y continua, la cual siempre será aplicado por las falanges
medias de los dedos. Cualquier otra aplicación de fuerzas, que no sean
éstas, tendrá como consecuencia desviaciones laterales respecto al eje del
cañón.
El dedo más importante de la mano, el dedo índice, debe estar libre
de cualquier contacto con la empuñadura. Sólo de esta manera se crean las
condiciones óptimas para la correcta actividad del dedo al presionar sobre
el gatillo y la acción del disparo.
De no ser este el caso, es decir, si el dedo del gatillo estuviese en contacto
con la empuñadura, todo intento de disparo se traducirá en un movimiento
lateral de la pistola disminuyendo tanto la precisión como la exactitud del
mismo.

Por último, las falanges de los dedos pulgar - meñique - corazón - anular,
pueden tener contacto con la empuñadura, de hecho la tienen, pero no
deben ejercer ninguna presión significativa sobre la misma.

Finalmente, aquí está la foto que muestra los puntos de presión y la


transferencia de las fuerzas permitidas en la técnica de empuñar.

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