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Curso

Discursos de Odio: Definiciones y Estrategias para Prevenirlo

Clase 3

Política, democracia y odio

Objetivo

● Situar históricamente los discursos de odio en el marco de los sistemas políticos

democráticos, y analizar sus consecuencias actuales y potenciales.

1. Política y discurso de odio

Uno de los grandes desafíos que abre el debate sobre el discurso de odio es su

vinculación, dado su entramado ideológico, con los discursos políticos. En épocas en las que

se debate el rumbo de la humanidad —atravesadas por crisis económicas, humanitarias y

ambientales— los debates políticos se crispan y muchas veces terminan configurándose

dentro de los discursos de odio, con ataques frontales a supuestos enemigos a quienes se

responsabiliza, de manera reduccionista, de todos los males. El odio se transforma entonces

en la plataforma para dirimir la disputa política.

Como venimos diciendo, los discursos de odio no son frases sueltas, opiniones

aisladas, sino que efectivamente se articulan y refuerzan visiones del mundo excluyentes,

discriminatorias, opresivas. En este sentido, se estructura como una forma de ideología de la

violencia. Esta situación se fortalece, ya que en muchos casos las sentencias de odio

reducen debates complejos a insultos y hostigamiento. De modo reduccionista, las diferencias

en asuntos político-ideológicos se dirimen mediante el ataque público.

En este marco, cabe decir que las crisis económicas son terreno fértil para el

crecimiento de estos discursos. Allí donde las respuestas políticas y sociales no alcanzan,
cuando grandes sectores de la población se encuentran ante la situación de que su esfuerzo

laboral no resulta suficiente y las narrativas políticas que luchan contra la desigualdad no

brindan respuestas, resulta un refugio, un atajo, buscar enemigos directos como causantes

de esos contextos.

En contextos de crisis económicas, desde los discursos de odio se refuerza la idea de

que aquel más débil, aquel diferente, “el otro”, “el vago”, “el que no se esfuerza” se está

quedando con lo nuestro (nuestro dinero, nuestro trabajo, nuestra educación, nuestros

servicios de salud). Este fenómeno muestra su faceta más ideológica cuando se encuentra

con discursos que culpabilizan a estos mismos grupos de una cierta degradación de la moral

o del tejido social.

Sobre este asunto en particular, Alejandro Grimson y Menara Guizardi (2021) analizan

en el libro Las configuraciones del odio, cómo el odio ha atravesado la historia argentina, a

partir de argumentaciones que demuestran que no se trata de un fenómeno nuevo. Sin

embargo, remarcan sobre la importancia que tomó en los ámbitos político y académico

analizar el odio en los últimos 20 años. En su narrativa recorren el panorama global, para

luego focalizar en la historia y las particularidades de nuestro país. A partir del análisis del

concepto de odio y con el fin de explicar diversos procesos internacionales, latinoamericanos

y de la historia argentina en la segunda mitad del siglo XX y el siglo XXI, proponen:

En conjunto los estudios internacionales revisados nos permiten establecer tres puntos

analíticos fundamentales para situar las configuraciones del odio en el siglo XXI. En primer

lugar, que el odio adentró los procesos representacionales de los sectores sociales que se

autoidentifican como clases medias (en su amplio abanico de subrepresentaciones: media-

baja, media-media, media-alta) y se estableció como un recurso discursivo con creciente

aunque heterogénea) legitimidad. En segundo, que estos discursos se convirtieron en un

recurso político empleado particularmente por las derechas, en consonancia con grandes

medios de comunicación, lo que instituyó un nuevo marco interpretativo con aspiraciones

hegemónicas. Este marco político/comunicacional constituye una de las piezas centrales del
giro a la extrema derecha vivido en diferentes grados por distintos países del Norte y del Sur

global. Por último, aunque con tintes contextuales variados, estos usos de los discursos de

odio responden a un cuadro internacional más amplio, caracterizado por las crisis agónicas

del neoliberalismo y por la debilitación de las democracias. (Grimson, Guizardi, 2021, p. 108)

En la fuente citada, Grimson y Guizard recorren en la historia argentina, y también

latinoamericana, cómo el discurso de odio se trenza con el discurso político. De esta forma,

expresan, se construye representación política a través de la autoafirmación de ciertos

sujetos mediante el ataque a otros grupos. La colectivización en torno al odio se transforma

en una representación social y política. En este punto, el ataque y hostigamiento a los grupos

históricamente vulnerados que venimos trabajando, también se complementa con el ataque

por motivos ideológicos y aparece la idea del aniquilamiento del adversario como única salida

viable.

2. Discurso de odio y genocidio

La vinculación entre genocidios y discursos de odio no parte de una idea a priori sobre

lo que puede traer como consecuencia el hostigamiento sostenido hacia un grupo de

personas. Se trata, por el contrario, del estudio de evidencias históricas en torno a los

genocidios, que muestran que estos son circundados por el crecimiento de la cultura del odio

y el segregacionismo.

En este sentido, cuando hablamos de genocidio estamos hablando, según la

Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio (ONU, 1948), de

prácticas sistemáticas perpetradas con la intención de destruir, total o parcialmente, a un

grupo nacional, étnico, racial o religioso. Esta primera definición consolida la idea de los

ataques dirigidos y sistemáticos, planteados como parte de una estrategia política y social de

aniquilamiento, que involucra muchas formas en particular.


Nos interesa retomar una lectura sobre cómo estas prácticas atroces se encadenan

con el crecimiento del discurso de odio, no como destino fatídico, sino porque son

organizados y conducidos políticamente, para consolidar una determinada representación.

Para reflexionar sobre esto, analizaremos la propuesta de periodización que realiza

Daniel Feierstein (2011) en su obra El genocidio como práctica social, que reformula las

relaciones sociales desde la construcción del sujeto “otrorizado” hacia su exterminio, físico y

psíquico, pero también como sujeto social e histórico. Se entraman entonces la realización

material del genocidio y la realización simbólica. Estas etapas no son propuestas como

yuxtapuestas, sino como conceptos que se articulan entre sí. Las seis etapas que propone el

autor son:

● Primer momento: la construcción de una otredad negativa. En esta etapa se

resalta particularmente la consolidación del binomio “normal-anormal” como parte de la

consolidación de esa autoafirmación y la delimitación de los otros. Esto se traduce en

distintos símbolos, mensajes, discursos, que consolidan estas ideas. Efectivamente,

gran parte de lo que venimos delimitando como discurso de odio. Así, Feierstein

afirma:

El poder retoma símbolos y características existentes en el imaginario colectivo, construye

nuevos símbolos y mitos, refuerza los prejuicios latentes a fin de construir un sujeto social

como negativamente diferente. Intenta delimitar dos campos: los iguales, los sujetos

cotidianos, mayoritarios, como distintos cualitativamente de los otros, de aquellos que no

quieren ser como todos y por lo tanto, que no deben ser. (2011, pp. 216)

 Segundo momento: el hostigamiento. Esta etapa remite al hostigamiento, que se

produce cuando la negativización de la otredad ya no es únicamente simbólica. Se

caracterizan dos tipos de acciones: una física y otra legal. Un primer tipo de acción es

aquella (aparentemente) espontánea, de choque, de la fuerza social dominante para


amedrentar y perseguir a los otros. En la segunda acción, se responsabiliza

exclusivamente al poder estatal que construye normativas que consolidan las

prácticas discriminatorias. Esta doble acción busca generar una reclusión cada vez

mayor del sujeto hostigado.

 Tercer momento: el aislamiento. Se trata de delimitar el espacio físico, pero también

social, político, que está habilitado para el sujeto perseguido.

 Cuarto momento: las políticas de “debilitamiento sistemático”. En esta etapa se

conjugan una serie de políticas que buscarán el resquebrajamiento físico y psíquico, a

través de la pauperización de las condiciones de vida, la amenaza constante, la

humillación.

 Quinto momento: el aniquilamiento material. El proceso de aniquilamiento que es

llevado adelante en un genocidio no remite únicamente al aniquilamiento físico, la

muerte y desaparición de personas, sino también en el exterminio histórico del sujeto

social y su autodeterminación. En este sentido, esta cruenta etapa se articula con la

constante construcción de las ideas que sustentan el genocidio, e incluso a posteriori

la construcción de una narrativa propia.

 Sexto momento: la “realización simbólica” de las prácticas sociales genocidas.

La realización de estos procesos no son únicamente los cientos, miles o millones de

muertes, sino aquello que expresan hegemónicamente en el ámbito simbólico e

ideológico. En la realización simbólica, se consolida la transformación de las

relaciones de cualquier sociedad que haya atravesado un genocidio. Las víctimas ya

no son solo las personas atacadas directamente, sino el entero de la población, que

ve sustancialmente afectada su vida política, económica, incluso afectiva.

En este recorrido que realiza el autor, podemos encontrar una de las formas de

vinculación conceptual construida a partir del estudio de sucesos históricos reales, entre el

discurso del odio y los genocidios. En este sentido, se muestra cómo la generación

sistemática de discursos amenazantes, segregacionistas, estigmatizantes genera el marco


cultural para la concreción de las matanzas. Sobre esto, se puede complementar con la

lectura del artículo Discurso de odio, la causa de los genocidios (Licón, 2017), en el que se

realiza un recorrido histórico para analizar cómo se vinculan estos dos fenómenos.

A su vez, en su sexta etapa, Feierstein comienza a articular lo que trabajaremos en el

próximo apartado: la vinculación entre el odio y los discursos negacionistas de los genocidios.

3. Caja de herramientas. Propuestas del portal Educ.ar para debatir sobre el

negacionismo y los discursos de odio

Una de las expresiones de la vinculación entre discurso de odio y genocidios es el

negacionismo, una corriente político-ideológica que se dedica mediante diversas estrategias a

negar la verdad histórica vinculada a los genocidios. Para profundizar sobre este tema, les

presentamos cuatro videos producidos por el portal Educ.ar (2023), en el marco del ciclo

Narrativas Negacionistas. La escuela frente a los discursos de odio, en los que encontrarán

los testimonios de cuatro especialistas.

Por un lado, Daniel Rafecas, Juez Federal y especialista en Derecho Penal, indaga

sobre el efectivo vínculo del negacionismo con los proyectos políticos. Como venimos

analizando, los discursos de odio no se tratan solo de una expresión emocional de la

discriminación, sino que esconden un proyecto de sometimiento y subyugación de ciertas

poblaciones. En el episodio Las políticas de Memoria, Verdad y Justicia frente a los discursos

de odio (Educ.ar, 2023a), Rafecas reflexiona sobre cómo el negacionismo es fundamental

para la articulación ideológica. En este sentido, sostiene que es “moralmente necesario”

negar los crímenes de lesa humanidad para sostener los discursos de odio. Sobre estas

bases, discute sobre la legislación que combate el negacionismo.

Por su parte, Valeria Thus, Doctora en Derecho Penal y especialista en Derechos

Humanos, retoma en el capítulo El derecho a nombrar el sufrimiento (Educ.ar, 2023b), los

debates sobre la disputa jurídica y la herramienta penal para luchar contra la construcción de

los discursos negacionistas de las verdades históricas, a partir de un recorrido por la


legislación internacional. En estos puentes, profundiza en la vinculación entre discursos de

odio y negacionistas, y el debate en torno a la libertad de expresión que suscita. En esta

búsqueda, nos propone discutir sobre la “tensión entre libertad o igualdad”.

En el episodio Confrontar las lógicas de representación y banalización de los

discursos negacionistas (Educ.ar, 2023c), Daniel Feierstein, Doctor en Ciencias Sociales y

especialista en el estudio sobre genocidios, propone algunas premisas vinculadas a las

motivaciones psicosociales que nuclea en torno al odio y la negación. A su vez, define una

parte importante de los discursos negacionistas y, a partir de ahí, plantea una manera de

vincularse con el odio.

Finalmente, en el capítulo Del clima de intolerancia en las redes sociales a las formas

de violencia directa (Educ.ar, 2023d), Micaela Cuestas, Doctora en Ciencias Sociales y

especialista en Comunicación y Cultura, propone varias facetas para seguir visualizando la

vinculación entre el odio y el negacionismo, y realiza una lectura científica del fenómeno de la

propagación del odio a través de los medios digitales pero vinculado de manera dialéctica y

permanente con la realidad física.

4. Reflexiones finales

En el desarrollo de esta clase, buscamos darle cuerpo al debate netamente político

que atraviesa los discursos. Proponemos ver en profundidad los enunciados que estamos

analizando, es decir, quitar el foco específicamente en las palabras o cada acto comunicativo

en sí, para comenzar a discutir efectivamente la narrativa en la que se encuadran, la cultura

del odio que reflejan y la ideología política en la que efectivamente se entraman.

Comprender el odio requiere entender el pasaje entre la emoción a nivel individual y

una ideología que busca sostener la subyugación de ciertos sectores de la sociedad. No toda

persona que odia parte de un discurso negacionista, pero existe la tendencia política de

ciertos grupos a conducir los odios dispersos hacia un espectro en particular, del cual pueden

obtener rédito político.


Se trata entonces de comprender el proyecto político y cultural del odio, alejándonos

de las acciones individuales. Este movimiento nos permite poner el debate —ya no en una

falsa idea de “libertad de expresión” que muchas veces busca en realidad licencia para

ejercer violencias— sino en la cuestión de la igualdad, la diversidad, los obstáculos de las

personas para vivir una vida plena.

Actividad

A partir de los conceptos desarrollados en los 4 capítulos del ciclo Narrativas Negacionistas.

La escuela frente a los discursos de odio (Educ.ar, 2023), les proponemos reflexionar sobre

alguno de los ejes propuestos por los especialistas y compartir un comentario en el foro.
Referencias

Educ.ar (2023a). Daniel Rafecas. Las políticas de Memoria, Verdad y Justicia frente a los

discursos de odio. Narrativas Negacionistas. La escuela frente a los discursos de odio.

https://www.youtube.com/watch?v=_QLqxj0AWaE

Educ.ar (2023b). Valeria Thus. El derecho a nombrar el sufrimiento. Narrativas

Negacionistas. La escuela frente a los discursos de odio.

https://www.youtube.com/watch?v=YKPoLBbGkpw

Educ.ar (2023c). Daniel Feierstein. Confrontar las lógicas de representación y banalización de

los discursos negacionistas. Narrativas Negacionistas. La escuela frente a los

discursos de odio. https://www.youtube.com/watch?v=TxPbqizmGpk

Educ.ar (2023d). Micaela Cuesta. Del clima de intolerancia en las redes sociales a las formas

de violencia directa. Narrativas Negacionistas. La escuela frente a los discursos de

odio. https://www.youtube.com/watch?v=gtVEY8a8N8c

Feierstein, D. (2011). El genocidio como práctica social. Entre el nazismo y la experiencia

argentina. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

https://fce.com.ar/wp-content/uploads/2020/11/FeiersteinGNE.pdf

Feierstein, D. (2016). Introducción a los estudios sobre el genocidio. Buenos Aires: Fondo de

Cultura Económica. https://fce.com.ar/wp-content/uploads/2020/11/Feierstein-

IESG.pdf

Grimson, A., Guizardi, M. (2021) Las configuraciones del odio. Apuntes para una historia

Argentina. En Arredondo, M. y Atilio A. Boron, A. (Comps.). Clases medias argentinas.

La política del odio y el temor. Buenos Aires: Ediciones Luxemburg.

Licón, Y. (19 de enero de 2017). Discurso de odio, la causa común de los genocidios.

Amnistía Internacional. https://www.amnistia.org/ve/blog/2017/01/1706/discurso-de-

odio-la-causa-de-los-genocidios
Bibliografía recomendada

Serra Perelló, L. (2018). Discurso de incitación al odio: Análisis desde los derechos humanos

y pautas interpretativas. Barcelona: IDHC

https://www.idhc.org/arxius/recerca/Discurso_incitacion_odio.pdf

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