UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN

FACULTAD DE MEDICINA

RESUMEN
“UN RECORRIDO POR LA HISTORIA SOBRE EL
LAVADO DE MANOS”

CURSO: PRIMEROS AUXILIOS

AREQUIPA - PERÚ
2021

UN RECORRIDO POR LA HISTORIA SOBRE EL LAVADO DE MANOS

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 Las enfermeras y en sí todo el personal de salud está en constante contacto con el
paciente, lo que lo expone a ser portador y transmisor potencial de agentes patógenos. Es por
eso que la técnica del lavado de manos es una de las formas de prevenir las enfermedades
transmisibles y una de las más económicas y eficaces también. Se resalta su importancia con la
situación epidemiológica actual a nivel mundial, como medida de precaución al manipular
elementos que hayan tenido contacto con sangre, fluidos corporales o secreciones, por lo que el
uso de barreras protectoras, lavado de manos y adecuado manejo de desechos son importantes.

Florencce Nightingale fue la primera impulsora del proceso de la higiene de las manos,
ella afirmaba que cuando había una enfermedad se rompía la dermis y con ello se creaba una
puerta de entrada para microorganismos.

Ignaz Semmelweis fue un médico húngaro, llamado el “salvador de madres” porque

descubrió que la ocurrencia de sepsis puerperal podía ser disminuida drásticamente
desinfectando las manos, para ello propuso lavarse las manos con una solución de hipoclorito
de calcio. Sin embargo, sus observaciones entraban en conflicto con la opinión médica de su
tiempo y sus ideas fueron rechazadas, puesto que Semmelweis no fue capaz de proporcionar
una explicación satisfactoria para lo que proponía. Sus estudios constituyen la primera
evidencia del beneficio del lavado de manos en el control de enfermedades infecciosas. Es así
que se concluye que los médicos que hablaron sobre el tema no fueron reconocidos
inmediatamente por su aporte.

La cirugía cubana tuvo poco desarrollo durante el siglo XVIII ya que la enseñanza
universitaria era teórica y solo se practicaban operaciones externas. A finales del siglo XIX, en
los hospitales no existían lavamanos, se carecía de agua corriente o sencillamente en invierno el
agua era demasiado fría, lo que hacía que lavarse las manos antes de examinar al paciente fuera
difícil; a pesar de ello en Cuba se realizaron las primeras operaciones en grandes cavidades y se
comenzaron a aplicar métodos de asepsia y antisepsia por el doctor Gabriel Casuso Roque.
Además de él, Carlos Finlay, que sugirió el lavado de manos cuantas veces sea necesario
durante la tercera epidemia de cólera en ese país, fue una de las primeras referencias en Cuba
sobre el tema. Es así que una forma de recordar su obra y honrar su legado es lavarse las manos
antes y después de cada paciente.

Muchos estudios actuales confirman lo que Semmelwais había demostrado ya, pero a
pesar de haberse logrado un nivel de información básico sobre la importancia de la técnica
correcta del lavado de mano el personal no se concientiza. De esta manera todavía existe una
deficiencia en la práctica del lavado de manos en los servicios de salud. Quince a veinte
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segundos lavándose las manos con jabón reducen la probabilidad de propagación de
enfermedades intrahospitalarias y aseguran la eliminación eficaz de gérmenes.

Finalmente, se ha podido constatar que las infecciones nosocomiales se difunden a

través de las manos del personal sanitario, y los médicos tienden a ser mayormente el posible
vehículo de transmisión de estas. Mantener una adecuada higiene de manos es la manera más
sencilla y económica para controlar la diseminación de agentes patógenos y disminuir la tasa de
infecciones logrando atención de calidad al paciente.

REFERENCIAS

Naranjo-Hernández Y, Echemendía-Marrero M, Rodríguez R, Pérez L. Un recorrido por la

historia del lavado de manos. Arch Méd Camagüey. 2020; 24(5).