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|UNIVERSIDAD ESPAÑA

Psicología clínica.
Primer Semestre.
PSICOLOGÍA GENERAL II
ENSAYO: CHRISTY BROWN Y LA CONQUISTA
CON EL PIE IZQUIERDO.

Catedrática: Psic. Nancy Karina Orozco Ibáñez.


Alumno: Jorge Valles Martínez.

Guadalupe Victoria, Dgo., septiembre 2023.


Introducción.
1. INTRODUCCIÓN.

2. CHRISTY BROWN Y LA CONQUISTA CON EL PIE IZQUIERDO.

2.1. Vida temprana.

2.2. Adolescencia.

2.3. Terapias.

2.4. Exposición artística y reconocimiento público.

2.5. Unificación de lazos familiares

2.6. Superación económica y prosperidad.

3. CONCLUSIÓN

4. REFERENCIAS.
INTRODUCCIÓN.
El presente trabajo de investigación conlleva un ensayo respecto a la vida y obra de
Christy Brown, artista irlandés principalmente conocido por su libro titulado “Mi pie izquierdo”
en el que relata cómo fue vivir la vida bajo la parálisis cerebral atetoide, y cómo logró
convertirse en un artista famoso.

La vida y obra de Christy Brown, el renombrado pintor y escritor irlandés, son como un
monumento a la capacidad humana para trascender adversidades y superar limitaciones
impuestas por la discapacidad. Su historia ha sido inmortalizada en la película "Mi pie
izquierdo", que logra plasmar los desafíos y triunfos de este artista singular con una sensibilidad
impecable.

Christy Brown vino de una familia humilde de Dublín, y desde su infancia enfrentó la
adversidad de una parálisis cerebral severa que limitaba su movimiento a un solo miembro: su
pie izquierdo. Sin embargo, esta circunstancia no fue un impedimento para que Christy
desarrollara un talento innato y una determinación que lo llevaron a explorar el mundo del arte.
No obstante, el talento de Christy no se limitó a las palabras.

A través de los trazos, plasmó en lienzos la belleza y la complejidad del mundo que lo
rodeaba. Sus pinturas, impregnadas de una sensibilidad única, revelan una profundidad
emocional y una perspectiva singular que lo distinguen como un maestro del arte visual.

El impacto de Christy Brown en el mundo del arte y la literatura no puede ser


subestimado. Su habilidad para trascender las barreras físicas y comunicar su visión del mundo
es un testimonio conmovedor de la capacidad humana para adaptarse y prosperar en
condiciones adversas.

Su obra ha perdurado como un faro de inspiración, iluminando el camino de aquellos


que se enfrentan a desafíos aparentemente insuperables. En los trabajos de Christy Brown,
encontramos una lección sobre la capacidad humana de transformar limitaciones en triunfos.

La película ha resultado agradable, por lo cual, se ha puesto especial empeño en la


redacción. Se espera que el ensayo resulte del agrado del lector, y que, por consecuente, lo
motive en su búsqueda de superarse a sí mismo para cumplir sus metas, tal como lo hizo Christy
Brown.
CHRISTY BROWN Y LA CONQUISTA CON EL PIE
IZQUIERDO.
La limitación que marcó el inicio del progreso eventual; Christy Brown y su catarsis
ante la adversidad física y emocional es para muchos una de las historias más conmovedoras e
inspiradoras del siglo pasado, pues le demostró al mundo que ni la parálisis pudo impedirle ser
un hombre libre. La Real Academia Española define a la catarsis como un efecto purificador y
liberador que causa la tragedia en los espectadores suscitando la compasión, el horror y otras
emociones. Dicha descripción queda acorde al proceso por el que Christy Brown pasa a lo largo
de la película.

Desde joven, Christy Brown enfrentó un camino lleno de desafíos. Su cuerpo no


siempre respondía como deseaba. En lugar de rendirse, decidió que esa adversidad sería el
punto de partida hacia el crecimiento personal.

Al adentrarse en esta historia, es inevitable sentirse inspirado. La determinación de


Christy no tuvo límites; enfrentó momentos difíciles, pero siempre mantuvo su mirada en el
horizonte, decidido a superar cada obstáculo. Lo que hace la historia de Christy aún más
especial es que no solo es una lección de vida para él, sino para todos los lectores. Recuerda
que, sin importar las circunstancias, la verdadera libertad está al alcance de todo aquel decidido
a superar sus propios límites.

El legado de Christy Brown perdura como un faro de esperanza, y su historia es un


recordatorio de que la vida está llena de posibilidades, incluso cuando parece lo contrario.

Vida temprana.

Christy Brown nace el 5 de junio de 1932 en Dublín, siendo uno de los 13 supervivientes
de ese día. Esta circunstancia va más allá de lo literal, ya que su condición parecía sugerir que
no estaba destinado a una vida plena. Diagnosticado con parálisis cerebral atetoide, enfrentó
dificultades físicas y emocionales. Creció en un entorno sociocultural conservador y religioso,
donde constantemente se destacaba por ser diferente. Este ambiente complicado lo sumió en la
melancolía y la depresión. Sin embargo, para desafiar la percepción que tenían de él, desarrolló
una personalidad resistente, evitando ser visto como débil, lo que lo enfrentó a mayores
desafíos.

En su hogar, el padre de Christy, un hombre emocionalmente inestable y propenso a la


violencia, creó un ambiente difícil. Esta situación sugiere la teoría de que el oprimido anhela
convertirse en opresor, a veces de manera inconsciente. En tales circunstancias, es complicado
crecer sin adquirir rasgos negativos.

Christy fue objeto de burlas e insultos por su condición, lo que lo llevó a buscar formas
de expresar sus penas. Al ser una persona altamente sensible, encontró en la pintura un medio
para comunicar su talento, especialmente con su pie izquierdo, una de las pocas partes de su
cuerpo que podía mover con libertad.

Erik Erikson creía que todo ser humano pasa por una serie de crisis a lo largo de nuestra
vida. Estas crisis son desafíos que obligan a la persona a crecer y cambiar. Si supera estas crisis
de manera saludable, se desarrolla como una persona funcional. Sin embargo, si no supera estas
crisis, puede desarrollar problemas psicológicos. En el caso de Christy, él no pudo superar la
crisis de la confianza versus desconfianza en su infancia. Esto se debió a que no tenía un entorno
estable y confiable. Como resultado, Christy desarrolló desconfianza, pesimismo y frustración.
Estos rasgos negativos perduraron a lo largo de su vida, debido a sus limitaciones físicas y
sociales.

La necesidad de no parecer débil se combinó con el rechazo y la condescendencia


debido a la falta de comprensión de su enfermedad. Esta problemática persiste en la actualidad
para personas en situaciones similares a la de Brown.

Christy sorprendió a su familia al escribir el nombre de su madre, quien fue una figura
crucial en su vida y en su biografía. Este logro llenó de orgullo a su padre, quien celebró con
un trago. Aunque su madre lo trató con amabilidad, le instó a buscar independencia, un consejo
que se convirtió en un catalizador para su desarrollo.
Adolescencia.

Con el tiempo, Christy desarrolla sus habilidades sociales, pero esto no elimina el
rechazo que algunas personas sienten por él debido a su condición física. Esto se hace evidente
cuando con esmero pinta un regalo para la chica de la que se había enamorado la noche anterior.
Ella expresaría que no puede aceptar el obsequio, ya que ve en la parálisis de Christy un rasgo
poco atractivo. Este evento sería uno de muchos que alimentarían su profunda tristeza.

Una de las cosas que más le incomodaba a Christy era la falta de un espacio propio para
pintar, su medio para desahogarse y expresar sus sentimientos, ya que su parálisis le impedía
comunicarse de manera legible. Esto se refleja no solo en la película, sino también en la historia
de la pintura, donde la utiliza como medio para exteriorizar emociones complejas y profundas
que las palabras no siempre pueden explicar. Las pinturas de Brown son un vistazo a su talento
y a su sensibilidad, así como a su amor por quienes lo ayudaron a superar sus miedos,
inseguridades y amores no correspondidos.

La relación con su padre no fue fácil, llegando incluso a sentir repudio por el señor
Paddy la noche que provocó que su hermana se viera obligada a abandonar la casa por su
embarazo no deseado, lo que lo devastó. Aunque se comprende la reacción impotente de
Christy, es importante mencionar que rara vez se expresaba de manera asertiva fuera de sus
pinturas, a menudo siendo insensible cuando algo lo frustraba. La incapacidad para expresar
sus sentimientos debido a sus limitaciones físicas le afectó a largo plazo, ya que sin la pintura
se veía forzado a reprimir sus emociones. Es esencial para el ser humano vivir sus emociones,
ya que, en un sentido poético, se dice que llorar es lo que evita que el corazón se seque.

Durante la fiesta benéfica, Mary Carr observa algunas de las pinturas de Brown, las
cuales incluiría en su libro biográfico. Entre ellas se encuentra la pintura que hizo para la
primera chica de la que se enamoró, esta vez unida con cinta adhesiva. Esto no solo se interpreta
literalmente, sino que también simboliza la eventual sanación emocional que Brown
experimentaría con el paso de los años y las experiencias

Terapias.
Un momento crucial en la vida de Christy Brown fue conocer a la doctora Eileen Cole,
quien le proporcionó terapia para mejorar su movimiento y habla. La doctora le mencionó una
clínica especializada en parálisis en Dublín donde el tratamiento era gratuito.

Christy aceptó, pero al llegar expresó su rechazo al ver que estaba llena de niños,
temiendo ser tratado como uno de ellos, algo que detestaba profundamente.

Frente a la obstinación de Christy, la doctora Cole se ofreció a proporcionar la terapia


personalmente, mostrando un genuino interés en su bienestar. Finalmente, lo convenció al
decirle que podría expresar sus sentimientos con mayor claridad si mejoraba su movimiento.
Así comenzaron las terapias en casa de los Brown. Con el tiempo, Christy dejó de resistirse, no
solo al tratamiento, sino también se mostró más abierto con la doctora Cole. Sus padres notaron
en él una voz más alegre y llena de esperanza.

En la vida real, la persona adecuada puede "derribar las barreras que el ser humano
construye para no ser herido". Sin embargo, este mismo tono preocupaba a su madre, quien
sabía que Christy estaba irremediablemente enamorado de Eileen, temiendo que le rompiera el
corazón. Su enamoramiento se reflejó en un retrato que hizo de la doctora y en cómo
constantemente repetía frases de "Hamlet", un libro que la doctora le recomendó no solo como
ejercicio de dicción, sino también porque sabía que le gustaría, al ver en él el corazón de un
poeta. En repetidas ocasiones, Christy expresó sin éxito su amor a Eileen, ya que ella lo tomaba
como una muestra de aprecio y no como una declaración de amor hacia ella, lo que lo frustraba.

Exposición artística y reconocimiento público.

Un día, la doctora Eileen comparte con Christy una noticia que marcaría un hito en su
vida: sus obras de arte serían expuestas en un prestigioso museo para resaltar su innegable
talento. Durante esta exposición, Christy expresa su deseo de ser reconocido no solo como un
artista excepcional, sino también de liberarse de la etiqueta que conlleva como artista
parapléjico. Esta misma situación se refleja en la vida real, donde a menudo los logros se ven
opacados por la prensa amarillista y otros medios que enfatizan incómodamente aspectos que
personas menos educadas interpretan como defectos, ya sean condiciones físicas, orientación e
identidad sexual, raza, entre otros. Este escenario es desalentador para cualquier individuo, al
sentir que sus logros y creaciones se reducen a simples sombras de condiciones que dichos
sectores etiquetan de manera despectiva.

Después de la exitosa exposición, Christy y sus compañeros se reúnen en un elegante


restaurante para celebrar el triunfo. Es entonces cuando Christy decide expresar nuevamente su
amor hacia Eileen, quien responde al elogio, aunque no de la forma en que él esperaba. Sin
embargo, Christy elige este momento para aclarar que lo que siente es un amor de naturaleza
romántica, pero Eileen, una vez más, malinterpreta sus palabras. Esto deja a Christy algo
decepcionado, llevándolo a expresar su aprecio por todos los presentes en la cena, incluido
Peter. Esta expresión es bien recibida por Eileen, quien comparte que está a punto de casarse
con Peter en unos meses. Esta noticia provoca en Christy una desilusión de una magnitud que
nunca antes había experimentado. Este cambio abrupto en su comportamiento se refleja en el
consumo excesivo de alcohol y respuestas groseras hacia los presentes, culminando en una
rabieta que provoca un intercambio de insultos con la doctora Eileen, quien se muestra
indignada por la conducta errática y violenta de Christy.

Este desafortunado episodio lleva a Christy a interrumpir su proceso de terapia y


hundirse en una tristeza aún más profunda que en ocasiones anteriores. Cuando lo deseado y lo
que sucede no coinciden, puede generar una profunda consternación. Las desilusiones
desestabilizan emocionalmente al individuo. Es normal sentir frustración cuando las
circunstancias no se alinean con las aspiraciones, especialmente en áreas tan importantes como
el amor. En este contexto, la experiencia de Christy subraya la importancia de aceptar estas
desilusiones como parte inevitable del crecimiento personal.

Unificación de lazos familiares.

Después de un evento emocionalmente impactante, Christy cayó en una profunda crisis,


llegando al punto de contemplar dar fin a su vida. Tras un intento fallido de aliviar su
sufrimiento, se refugió en el excesivo consumo de alcohol para amortiguar el dolor. Esta
respuesta, aunque común, representaba una estrategia de afrontamiento ante circunstancias
emocionales abrumadoras, pues el individuo se percibe incapaz de enfrentar las realidades que
lo abrumaban.

Al notar esta espiral autodestructiva, la madre de Christy se convirtió en una fuente de


apoyo y orientación. Con amor y sutileza, le brindó palabras de aliento que resonaron
profundamente en él. Lo comparó con su padre, señalando que ambos tenían una apariencia
tosca pero un corazón sensible, como un circuito electrónico que oculta una complejidad vasta.
Este rasgo de Christy surgió como respuesta a la necesidad de no parecer frágil. La madre de
Christy le instó a comprender que las verdaderas victorias provienen del corazón, no de una
fachada. Le animó a no reprimir sus emociones, sino a aceptarlas y permitirse sentir en plenitud.

Decidida a implementar un cambio significativo en la vida de su hijo, la señora Brown


se dirigió al patio, donde el suelo aguardaba como una superficie de trabajo lista para la
intervención de un ingeniero. Con manos llenas del amor de una madre, comenzó a excavar.
Cada movimiento representaba un gesto de esperanza, una promesa de un mañana mejor para
su amado hijo. Este acto desconcertó a Christy, quien abandonó su cuarto para investigar. La
madre, con determinación, deseaba crear un espacio personal para él, un santuario donde su
arte pudiera florecer en total libertad, donde encontrara consuelo y sanación en cada trazo y
color. Este gesto conmovió profundamente a Christy, quien se disculpó por su comportamiento
previo y se unió a la construcción. Juntos, crearon no solo un cuarto, sino un refugio.

El señor Brown y el resto de la familia llegaron perplejos. La repentina construcción les


sorprendió, pero comprendieron el significado profundo de este acto de amor. Como una
demostración del cariño raramente expresado hacia su hijo, el señor Brown decidió unirse,
convocando a sus otros hijos para completar el nuevo santuario. Este acto reveló que, aunque
alguien sea firme y reservado, siempre encontrará formas de manifestar afecto cuando el amor
que siente es sincero, como un programa que ejecuta una función específica de manera
silenciosa pero efectiva.

Aunque a veces la coraza formada por malas experiencias puede opacar este amor, es
crucial recordar que la valentía no radica en la ausencia de miedo, sino en la acción a pesar de
él, todo en nombre del amor, tal como lo hizo el señor Paddy con Christy, quien encontró en
esta construcción una forma de construir un nuevo vínculo.
La construcción llegó a su fin, consolidando una nueva y profunda conexión afectiva
entre padre e hijo. Las paredes del cuarto no eran solo de ladrillos, sino de amor, comprensión
y esperanza. En ese espacio, se forjó una alianza irrompible entre dos almas que, a pesar de las
dificultades, encontraron el camino para sanar juntas. Gestos como estos, ya sean pequeños o
grandes, pueden trazar un rumbo completamente distinto en la manera en que el hombre se
relaciona con nosotros. Por esta razón, Christy decide incluir a su padre en la galería de sus
pinturas.

Desafortunadamente, un fatídico día llegó el fallecimiento del señor Brown. Es


entonces cuando se evidencia el aprecio que sentía Christy por su padre, quien incluso no dudó
en pelear para defender su honor.

Superación económica y prosperidad.

Posterior a esta serie de hechos, Christy solicita a uno de sus amigos que se encargue
de ayudarlo a redactar su biografía en un libro, mismo que se mantuvo ventas
considerablemente exitosas. Así, fue como poco a poco ayudó a la economía de su hogar. A
raíz del creciente éxito que empezó a generar gracias a sus pinturas y la difusión de su vida, es
invitado a una fiesta en beneficencia de las personas parapléjicas del mundo. Esto resulta
además como un buen ejemplo de cómo convertir algo que pudiera parecer tan común como el
recuento de una vida en algo que es capaz de sacar al hombre adelante.

La publicación del libro no es solo un capítulo en la vida de Brown, sino también un


logro trascendental que repercute positivamente en la sociedad, pues logra un aporte a cambiar
el modo en el que se ven a los individuos parapléjicos y a eliminar el estigma que se tenía hasta
ese entonces.

Más adelante, se presenta el matrimonio entre Mary y Christy; Después de pasar una
vida en búsqueda de una pareja que le complementara, finalmente la había encontrado. Lo que
en un inicio supondría uno de los obstáculos más invasivos para Christy, encontraría su
superación en el epítome de su vida. Esta unión se une como las demás expresiones de su
superación, lo que surge como un recordatorio concreto de la capacidad humana para convertir
desafíos en oportunidades de crecimiento y realización personal.
CONCLUSIÓN.
La vida de Christy Brown está marcada por desafíos físicos y emocionales, lo que
inspira al lector a reflexionar sobre la superación personal. Desde su infancia, enfrentó
limitaciones físicas severas que lo llevaron a luchar por comunicarse y moverse. Observar a
otros vivir plenamente mientras él batallaba contra su propio cuerpo lo motivó a buscar un
propósito. Descubrir su habilidad para escribir y pintar con su pie izquierdo se convirtió en un
punto de inflexión. Crear arte se convirtió en su vía de escape, su medio de expresión y su
forma de conectarse con el mundo.

Aprender a dominar su cuerpo, coordinar movimientos y plasmar sus pensamientos en


el lienzo fue un proceso arduo. Enfrentó frustración y autocrítica, pero nunca se rindió. En lugar
de permitir que la adversidad lo derrotara, usó su arte como una salida para liberar emociones
y experiencias.

En su camino hacia la superación personal, Christy Brown demostró que la


perseverancia y la pasión pueden superar cualquier obstáculo. Su catarsis llegó cuando pudo
expresarse plenamente a través de su arte, cuando sus creaciones se convirtieron en un
testimonio de su lucha y triunfo.

El epítome de su vida se encuentra en su legado artístico, que sigue inspirando a otros


a superar sus propias limitaciones. La historia de Christy Brown recuerda al lector que, a pesar
de las dificultades, todo ser humano tiene la capacidad de encontrar su voz y alcanzar la
superación personal a través de la determinación y la creatividad. Conmueve conocer la vida y
obra de este ilustre artista, una historia que sin necesidad de exageraciones es de carácter épico
y una invitación a todos los sectores a buscar siempre romper sus propias barreras en busca de
algo mucho más grande que el temor a lo desconocido, ya sea la felicidad u otro significado
que cada individuo elija. Rendirse no es una opción, seguir adelante pese a las trabas en el
camino sí lo es, siempre recordando que el progreso no es lineal. Al mirar en retrospectiva el
sendero recorrido, se revela un progreso asombroso, otorgando una sensación de logro que
impregna el espíritu del hombre. Esta satisfacción no proviene solo del hecho de haber
alcanzado una meta, sino de la plena comprensión de haber enfrentado y conquistado diversas
adversidades. Al lector se le invita a reflexionar sobre la siguiente frase: "El imperio Romano
no se construyó en un día".
REFERENCIAS.
Sheridan, J. (Director). (1989). My Left Foot: The Story of Christy Brown [Film]. Granada
Television.

Asale, R.-. (s. f.). Catarsis | Diccionario de la Lengua Española. «Diccionario de la lengua
española» - Edición del Tricentenario. https://dle.rae.es/catarsis

Morris, C., & Maisto, A. (2005, 12.ª ed.) Introducción a la psicología. Prentice Hall. Clinical
Psychology Solves Complex Human Problems. (2014). American Psychological
Association. https://www.apa.org/education-career/guide/subfields/clinical

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