República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación

Universidad Arturo Michelena
Valencia, Edo. Carabobo

Análisis sobre El Efecto Mariposa

(argumento)

Estudiante:
Mariangel Avila

Sección:
2M

Agosto de 2019
Varias veces a lo largo de nuestras vidas nos hemos preguntado cosas
como: ¿cómo sería mi vida si no hubiese estudiado en tal lugar, o no
hubiese hecho tal cosa, y no hubiese conocido a tales personas que me
hicieron vivir estas experiencias? Y así, pensando que a lo mejor
quisiéramos cambiar algunas cosas, o que nada pudo haber ocurrido de
mejor manera que como lo hizo. Pienso que El Efecto Mariposa fue una
película en la que se jugó hasta otros niveles con esa idea, y se ilustra
muy claramente desde el comienzo, proyectando una cita que explica la
teoría del efecto mariposa, viniendo de ahí el famoso título.

Cuando pensamos en las cosas que quisiéramos haber evitado,

siempre hay un mínimo detalle que, podemos dejar ir, o arrepentirnos
de él el resto de nuestras vidas, y ese pequeño detalle es lo que traza la
delgada línea entre lo que sucede y lo que no. El caso de Evan y sus
problemas mentales son simplemente la puerta para darle cabida a este
experimento, y llegar a probar el punto inicial sobre la teoría del Efecto
Mariposa. No es la primera vez que vemos una película sobre viajes en
el tiempo, pero es inevitable, porque es verdad que todo ya está
inventado, pero la manera en la que desarrollamos y le damos un toque
propio a las cosas, es lo que da la impresión de que es algo nuevo e
innovador, creando así una historia como la de Evan, junto a las
abstractas condiciones a su alrededor.

Esta película consta de cuatro finales distintos: el final dramático (donde

Evan y Kayleigh se pasan por un lado en la calle y no llegan a mirarse,
pero se reconocen de alguna manera), el “feliz” (que tira por la borda
todo el concepto de la película y ni siquiera debió existir), el abierto (en
el que Evan termina persiguiendo a Kayleigh en la calle) y en el que
Evan se ahorca en el vientre de su madre a punto de dar a luz. Y cada
uno de los finales te dan mucho de qué pensar (excepto el feliz). El
último es el más fuerte y agridulce de todos, a mi parecer, al lograr la
infelicidad y tristeza de una persona, pero la felicidad y plenitud del
resto. Además, te hace darte cuenta de que los otros dos bebés ya
habían hecho lo mismo (ahorcarse con el cordón umbilical), y, por lo
tanto, puede que los demás hayan pasado por una historia igual o peor
a la de Evan, por ende, hayan decidido simplemente no nacer,
pensando que aquella maldición moriría junto con ellos. Por ello, el
padre de Evan pensó que matar a su propio hijo sería la mejor solución.

Dejando de lado los juegos mentales que te deja la trama, esta película
podría darte la conclusión de que lo que sea que ocurrió en nuestro
pasado, fue definitivamente lo mejor. Que por algo no tenemos la
capacidad de ir al pasado y arreglar nuestros errores para manipular el
presente (ya que todos terminaríamos locos como Evan), y que hay que
perdonarnos a nosotros mismos y dejar ir lo que ya sucedió. No
podemos cambiar nuestro pasado, pero sí podemos aprender de él, y
construir un mejor presente con lo que ya tenemos, y así, no permitir
que nos persiga para siempre.