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Relaciones interespecíficas e intraespecíficas.

Imagen de una parte de una colmena en donde se ve en el centro a una reina rodeada de abejas obreras. Como
son todas de la misma especie se dice que es un tipo de relación intraespecíficas.

Relaciones interespecíficas e intraespecíficas.


Si imaginamos un ambiente conocido cualquiera, seguramente podremos imaginarnos los
seres vivos que habitan en él. Sin conocer exactamente la gran cantidad y variedad de
especies que conforman poblaciones que se desarrollan y viven en esos ambientes
podremos decir que en tal ambiente vamos a encontrar tal especie y no otra, por ejemplo.
si nos imaginamos el polo norte podremos decir que nos imaginamos a los osos polares y
si pensamos en el polo sur podremos decir que nos imaginamos pingüinos. Pero también
empezamos a pensar de qué manera se relaciona con otros seres vivos y ahí pensamos en
cómo se alimenta o de qué manera se reproduce y si tiene vida solitaria o colonial.
Entonces pensamos que comerá el osos polar o los pingüinos y vamos armando a pesar de
nuestras dudas relaciones entre distintas especies que podemos asociar a esos osos
polares o a los pingüinos. En cuanto a la relación entre los osos polares que se ve en la
imagen siguiente, se dice que es una relación intraespecíficas, es decir entre organismos
de una misma especie, y si lo analizamos entre los osos y las focas que forman parte de sus
dietas hablamos de relaciones interespecíficas. Es decir entre individuos de distintas
especies.

En la imagen se ve a una madre con dos crías de osos polares alimentándose de una foca.

En cuanto a los pingüinos ellos viven formando colonias muy complejas formadas a veces
por millones de individuos que se relacionan entre sí. Estos mismos pingüinos se
relacionan con todo un grupo de peces de los que se alimentan y por otro gran grupo de
predadores de los que tienen que cuidarse. Entonces, en relación con los otros pingüinos
decimos que es un tipo de relaciones intraespecíficas y en cuanto a su alimentación o a sus
predadores establece relaciones interespecíficas.

Imagen de la colonia de pingüinos emperadores más grande del mundo en la Antártida.


Imagen esquemática de una red alimenticia de la Antártida. Podemos ver en el caso de los pingüinos
con que otras especies están directamente o indirectamente relacionados, a esas relaciones las
llamamos relaciones interespecíficas.

Las relaciones interespecíficas son de diversos tipos y por ellos vamos a definir alguna de
ellas aclarando que pueden existir otras que no vamos a considerarlas. Algunas de ellas
dan beneficios a las dos especies y otras por ejemplo pueden beneficiar a una sola y
perjudicar a la otra, por ejemplo en el caso de la depredación, en la que una especie se
beneficia, el predador, y otra población de perjudica, las presas.

Foto de una rana predadora y su presa la mariposa, claramente la rana se beneficia y la mariposa se
perjudica. Estos animales e4stablecen un tipo de relación interespecífica llamada depredación.
Otro tipo de relación interespecífica es la llamada comensalismo en donde una especie o
población se beneficia de esa relación y la otra permanece indiferente pero que también
puede beneficiarse. Un ejemplo característico es el de las rémoras y los tiburones.

Las rémoras son peces que viven muy cerca de los tiburones de gran tamaño, y se benefician en
protección y también en que se alimentan de los restos de comida que producen los tiburones cuando
muerden a sus presas o también se pueden alimentar de los parásitos que puedan aparecer en los
tiburones. A primera vista el tiburón no recibe beneficio pero eso está en duda ya que también las
rémoras pueden alimentarse de sus parásitos.

Otro tipo de relación para analizar es el inquilinismo, en ésta relación interespecífica una
especie se refugia en el cuerpo de un organismo que permanece indiferente, aunque
también puede beneficiarse.

El pez payaso vive entre los tentáculos urticantes de las anémonas de mar y de esta manera recibe
protección, la anémona de mar recibe de beneficio algunos restos de alimento del pez pero en esta
relación de inquilinismo el pez payaso es el gran beneficiado al vivir entre los tentáculos de la
anémona.

Otro tipo de relación interespecífica es la llamada mutualismo en donde se produce una


relación entre individuos de distinta especie en donde ambas se benefician mutuamente.

Las hormigas acarrean a los pulgones al interior de los hormigueros donde le brindan protección y allí
se alimentan de un sudado que ellos producen en relación con unos hongos que se forman.

La simbiosis se da cuando las poblaciones reciben un beneficio mutuo de su relación pero


a diferencia del mutualismo la relación que se estable es obligada, no pueden vivir por
separadas las especies. Por ejemplo los líquenes están formados por algas y hongos o
cierto tipo de bacterias asociadas con las raíces de algunas plantas.
Los líquenes los podemos reconocer sobre troncos o sobre piedras y es una relación obligada entre
algas y hongos en donde el beneficio está relacionado entre el intercambio de materia entre ellos.

En el parasitismo, una especie se beneficia que se llama huésped a expensas de otra que
se llama hospedador. El parásito debe mantener vivo al hospedador ya que si éste llegara
a morir también moriría el huésped o sea el parásito. Hay parásitos que viven dentro del
cuerpo del hospedador mientras que otros viven fuera del cuerpo del hospedador, a esos
parásitos se los denominan endoparásitos y ectoparásitos respectivamente.

Foto de una llamada lombriz solitaria que se puede encontrar en los intestinos de mamíferos entre ellos
humanos. Ejemplo de endoparásitos.
Distintos tipos de parásitos. Endoparásitos y ectoparásitos.

Relaciones de competencia se da entre poblaciones que compiten por un mismo recurso, por ejemplo los
herbívoros compitiendo por los mismos pastos o plantas los carnívoros compitiendo por sus presas.

Las hienas y las leonas compiten por un territorio en donde se encuentran sus recursos alimenticios.

Relaciones intraespecíficas.
Al igual que las relaciones interespecíficas las relaciones intraespecíficas también las
podemos diferenciar ya que hay de diversos tipos, pero en general se acepta que hay de
dos tipos, las de atracción y las de rechazo.
Las interacciones de atracción se clasifican en familiares, gregarias y sociales.
Las llamadas familiares son aquellas que están relacionadas con la reproducción de la
especie y los cuidados a las crías, las gregarias son aquellas relacionadas con migraciones,
formación de cardúmenes, o manadas de mamíferos. En ellas aparecen conductas
defensivas, como cuando un animal ve un predador y aviso a todo el grupo o la formación
de grupos para la caza de las presas. Las sociales son asociaciones permanentes entre
individuos de una especie en donde no podrían vivir fuera de los grupos a los que
pertenecen. Ejemplo característicos las hormigas o las abejas que viven exclusivamente en
colonias.
Las relaciones intraespecíficas familiares se dan vinculadas a la reproducción.

Las relaciones intraespecíficas gregarias son las que se dan como en el ejemplo de los elefantes de la
foto y tienen la función de buscar espacios nuevos de alimentos y de defensa de los grupos.

En los hormigueros o en los termiteros suelen vivir millones de individuos de una misma especie y cada
individuo no puede vivir fuera de los hormigueros o termiteros.

Relaciones intraespecíficas de rechazo se caracterizan por mantener distanciados a los


individuos de la misma población en general vinculada a la escasez de recursos o por
cuestiones reproductivas y se pueden identificar de dos tipos básicos, por interferencia
que se da cuando los individuos compiten físicamente por peleas o marcado de territorio
para conservar los recursos disponibles en él. Rechazo por explotación se da cuando el
individuo más dominante de una población come primero que otros porque es más fuerte
que el resto o simplemente no deja nada para el resto.

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