Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
19 I primavera-verano 2017
a ñ o 1 0 I n úm . 1 9 I p r i mave r a - ve r a n o 2 0 1 7 I $ 8 5. 0 0
ISSN 2007-0942
Revista desdisciplinada de psicología social
04 Presentación
Contenido 07
21
Identidad: El lado oculto de los movimientos sociales
DE TILMAN EVERS
59 Solo es un ser
elalmapública
61 Camino a casa
ALMA ANDREA OROZCO FIERRO
62 El piano
NICOLE MORA JIMÉNEZ
63 Lápiz de grafito
ANDRUS MAYA CORTÉS
65 Jueves
HONORINE TORRES REYES
REVISTA EL ALMA PÚBLICA, año 9, núm. 19, primavera – verano 2017, es una publicación semestral
editada por Angélica Bautista López. Concepción Béistegui núm. 1702, colonia Narvarte, Delega-
Directora editorial
ción Benito Juárez, C.P. 03020, Tel. 58044600, ext. 2518, www.elalmapublica.net, elalmapublica@ Angélica Bautista López, uam-i
elalmapublica.net. Editor responsable: Angélica Bautista López, Reservas de Derechos al Uso
Exclusivo No. 04-2015-121716453900-102, ISSN: 2007-0942. Certificado de Licitud de Título y
Contenido No. 14961, otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilus-
tradas de la Secretaría de Gobernación. Impresa por Digicenter de México, S.A. de C.V., Avenida
Plutarco Elías Calles núm. 1810, colonia Banjidal, C.P. 09450, Delegación Iztapalapa. Este número
se terminó de imprimir el 30 de junio de 2017 con un tiraje de 500 ejemplares. Distribuidor Angéli-
ca Bautista López. Concepción Béistegui núm. 1702, colonia Narvarte, Delegación Benito Juárez,
C.P. 03020. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del
editor de la publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los www.elalmapublica.net
contenidos de la publicación sin previa autorización de Angélica Bautista López.
El Alma Pública I Revista desdisciplinada de psicología social I Año 10 I Núm. 19 I Primavera-Verano 2017
68 Un cabello
ACXEL ADRIÁN MAZÓN SANTAMARÍA
75 Oscuridad
LESLY ABIGAIL CRUZ GARCÍA
79 De pasajeros…
GLORIA PAOLA OVIEDO MARTÍNEZ
80 El mejor objeto
ERICK MOISÉS NOLASCO GONZÁLEZ
82 Hojas
JENNYFER TERESA MIRANDA GUZMÁN
ys
que se puede llamar mentalidad o espíritu, no son listas de contenidos de con-
ciencia, ni ideas ni sentimientos constituidos, sino que el pensamiento colectivo
que aparece en las distintas época y que pertenece a un proceso de evolución—
dice él— de la civilización, radica especialmente en formas, modos, estilos, ma-
neras de ir haciendo los pensamientos, sentimientos, miedos, ilusiones, planes,
ideas; es decir, que se trata de formas de la conciencia social, no de contenidos.
Y que se puede sintetizar para la actualidad en lo que sigue: piénsese lo que
se piense, imagínese lo que se imagine, siéntase lo que se sienta, y actúese como
se actúe, no importa, siempre se hará distanciándose de lo que haga, estable-
ciendo una separación entre el sujeto y el objeto, justo como estipula la ciencia
natural; y dada esta separación sujeto-objeto, los otros sujetos, los congéneres, el
vecino, son concebidos y vistos como si fueran objetos, y uno mismo, en tanto su-
jeto, también se autoconcebirá como un objeto más. Y además, sobre los tres, na-
turaleza, prójimo, uno mismo, se puede ejercer control, de modo que el dominio
sobre la naturaleza, la dominación que se ejerce en la sociedad, y el autodominio
o autocontrol de los estados afectivos que se practica en la sociedad contem-
poránea, son en realidad un mismo proceso, una misma forma, y se tienen que
entender como un mismo acontecimiento, el cual, como concluye el mismo Elias,
está aún muy lejos de poderse llamar civilizado.
A todo esto se le podría denominar claramente psicología colectiva,
siempre y cuando su autor estuviera de acuerdo.
LOS EDITORES
Criterios de publicación
• Los textos presentados para dictamen deben ser inéditos.
• Se pueden presentar traducciones para dictamen.
• Los textos tendrán una extensión máxima de 25 cuartillas (65 golpes x 23 líneas
a doble espacio), incluyendo gráficas, tablas, anexos, etcétera. Se escribirán en
fuente Times New Roman, a 12 puntos, en procesador de palabras Word o en for-
mato de texto enriquecido (extensión .rtf).
•
primavera-verano2017
1. INTRODUCCIÓN
dudas aumentan a medida que proliferan los nuevos huyendo de nuestros modos de percepción y de nues-
grupos sociales: asociaciones de trabajadores organi- tros instrumentos de interpretación. Lo que se dice
zados independientes o hasta opuestos a las estruc- respecto a los países industrializados de Europa Occi-
turas sindicales tradicionales y a los partidos políti- dental probablemente es aplicable también a América
cos; movimientos de paracaidistas, núcleos vecinales Latina: la vinculación entre movimientos sociales y el
brotando virtualmente en todas las grandes ciudades conocimiento de lo social se rompió. Cualquier tentati-
latinoamericanas y comunicándose entre sí local y va para recomponerlo debe partir del doloroso recono-
hasta nacionalmente; innumerables comunidades de cimiento de la ruptura.
base de la Iglesia católica expandiéndose en grandes No sabemos lo que son estos nuevos movimientos
áreas rurales; agrupaciones indígenas irrumpiendo es- sociales y cualquier dirección que tomemos en busca
pontáneamente en el escenario político, asociaciones de una nueva comprensión nos llevará, en alguna me-
de mujeres e incluso grupos abiertamente feministas; dida, a cometer errores. Desde el momento en que el
comités de derechos humanos transformándose en fo- error mayor, obviamente, sería el de insistir en viejas
cos de comunicación y conciencia social; encuentros de categorías comprobadamente inadecuadas, tenemos
jóvenes; actividades educativas y artísticas populares; la libertad de experimentar.
coaliciones para la defensa de las tradiciones e intere- Las páginas siguientes pretenden ser un ensayo en
ses regionales; movimientos de defensa del medio am- esa dirección. Sus limitaciones necesarias están claras
biente; un tejido irregular de grupos de ayuda mutua desde el inicio. Lo que quiero decir puede ser resumido
entre desempleados y personas pobres. Todo esto para en cuatro puntos:
quedarnos apenas en los ejemplos de los tres países en 1) el poder político como categoría central de las cien-
que tengo un poco de experiencia: Brasil, Chile, Perú. cias sociales es una concepción sumamente limitada
Y en los mismos países: criminalidad causada por el para comprender a los nuevos movimientos sociales; el
hambre, bandas asaltando supermercados; millares de potencial de estos no se relaciona principalmente con
campesinos marchando sobre ciudades del interior en
1 EVERS, T. (1985). “Identidad: El lado oculto de los nuevos movi-
busca de comida; una rebelión armada antimodernista mientos sociales”. En: Punto de Vista. Revista de Cultura (8-25), Buenos
(Sendero Luminoso); estigmas de miseria, opresión po- Aires. Selección de Jahir Navalles.
el poder sino con la renovación de padrones sociocul-
turales y socio-psíquicos de lo cotidiano y su penetra-
ción en la microestructura de la sociedad.
2) el camino de este proceso creativo es necesariamen-
te abierto, embrionario, discontinuo y surcado de con-
tradicciones, por lo tanto difícil de comprender. Son los
primavera-verano2017
den ser pensados, todavía, como entidades sociales e individuales completas, sino
como fragmentos de subjetividad atravesando la conciencia y la práctica de per-
sonas y organizaciones.
ys
Los esfuerzos de las dictaduras militares para suprimir la participación polí-
tica, mediante el cierre de los canales tradicionales de articulación, tuvieron el
efecto exactamente opuesto de politizar las primeras manifestaciones sociales
por vivienda, consumo, cultura popular y religión. Surgiendo durante un periodo
de profunda crisis de izquierdas —debida más al propio deterioro teórico y prác-
tico que a la represión— la creación de formas nuevas y autónomas de expre-
sión social fue tanto una necesidad como una oportunidad. La gran diversidad de
grupos, cursos, centros de ayuda mutua, comités, etc., es “espontánea” solo en el
sentido de no obedecer planes comunes y de no obedecer a ningún control cen-
tral; en efecto, esta “espontaneidad” representa un arduo y paciente “trabajo de
hormiga”, de organización y estructuración de pequeños núcleos en la tentativa
de enfrentar las amarguras de lo cotidiano.
Paralelamente a la aparición de nuevos campos de acción política, comenzaron
a surgir nuevas formas análogas de “hacer política”. Cuando hablamos de “repen-
sar la política” o en “prolongar la esfera de lo político” permanece intacta la refe-
rencia central y definidora de la política propiamente dicha. Como último reducto
del centralismo conceptual continuamos considerando una esfera especializada a
la política, en la cual contribuyen las diversas manifestaciones de la vida social y a
partir de la cual estas manifestaciones pueden ser alteradas.
de poder está infiltrada en mayor medida por la vida social? Hablar de política
como algo que se destaca de la realidad social no es en modo alguno una ley
natural, sino una construcción histórica de la sociedad burguesa profunda-
mente arraigada en las formas de percepción de griegos y troyanos. Claro que
la larga práctica social e intelectual de esta separación tuvo sus soportes ma-
teriales en las estructuras sociales. Así, un conocimiento social organizado en
torno de la abstracción del poder está muy bien sustentado en la experiencia
histórica.
A pesar de eso, al ser una construcción histórica, nuestra práctica diaria
—comenzando con nuestro modo de percepción— puede ser orientada para
reforzar o atenuar esta posición central y separada del poder. Mi impresión es
que el elemento “nuevo” de los nuevos movimientos sociales consiste exacta-
mente en la creación de pequeños espacios de práctica social en los cuales el
poder no es fundamental y no podremos entender esta potencialidad mientras
la encaremos desde el ángulo de un poder apriorístico.
Un aspecto que sugiere la posible insuficiencia de las interpretaciones ac-
tuales es que el surgimiento de los nuevos movimientos sociales no está vincu-
lado a situaciones políticas específicas creadas por las dictaduras militares, ni a
las estruendosas derrotas de los partidos de izquierda.
El hecho es que este mismo término está siendo usado para definir nuevas
formas de manifestación social también en países industrializados y de que exis-
tan analogías obvias entre estos movimientos, es una indicación adicional de que
no deben su existencia a un contexto político específico, y sí a factores que se
encuentran en las raíces del actual desarrollo social de las sociedades capitalistas.
PRIMERA TESIS
EL POTENCIAL TRANSFORMADOR DE LOS NUEVOS MOVIMIENTOS
SOCIALES NO ES POLÍTICO SINO SOCIO-CULTURAL.
Ya nos habituamos a encontrar una serie de rasgos comunes en la mayoría de los
nuevos movimientos sociales (naturalmente, no en todos ellos). Entre esas carac-
terísticas repetidas podemos destacar su número relativamente bajo de partici-
pantes, estructuras no burocráticas y hasta informales, formas colectivas de tomar
decisiones, distanciamiento social relativamente pequeño entre los líderes y los
demás participantes, formas poco teóricas e inmediatas de percibir y exponer los
objetivos del movimiento, etc. Muchos de estos grupos están directamente envuel-
tos en actividades culturales (en el sentido más amplio), otros trabajan con música,
teatro, danza, poesía u otras manifestaciones culturales para divulgar sus objetivos.
Frecuentemente los observadores ven en esas características una indicación
de la naturaleza débil y prepolítica de esas agrupaciones. De acuerdo con ese pun-
to de vista, las actividades culturales son un camuflaje táctico o una ingenuidad
política. Mientras estos movimientos estén obligados a vivir en una realidad dada
de poder, este postulado es justificable.
Mientras tanto, puede ser que haya otro lado de la moneda, donde estas for-
mas de actuación y asociación no se vean negativamente como formas inmaduras
de hacer política, sino positivamente como embriones de una vida social menos
estigmatizada por los flagelos del capitalismo actual en su versión periférica. ¿Por
qué la experiencia de la cooperación debería ser ilegítima en una sociedad marca-
da por la feroz competición por la supervivencia? ¿Por qué relaciones personales
apoyadas en bases más igualitarias que utilitarias deberían ser consideradas in-
maduras en un medio capitalista cuya tendencia es convertir toda la vida social
en relaciones de mercado? ¿La cultura, en tanto campo originario de la expresión
humana, tendrá que esperar por la revolución? ¿La solidaridad tiene solamente
primavera-verano2017
usted mismo”, que no nos puede ser dado por otro y menos aún venir de la estra-
tosfera del poder político. Debe ser construida desde abajo, sobre la base de una
práctica social consciente y autodeterminada.
Tal vez el eslabón tan buscado entre la cuestión nacional y la cuestión social pueda
ser efectivamente encontrado en el “trabajo de hormiga” diario de esos movimien-
tos para rescatar de la sociedad dominante pedazos de vida expresiva individual y
colectiva. Y, ¿quién sabe?, este lado oculto de los nuevos movimientos sociales puede
esconder también la profunda necesidad de la reevaluación de la democracia como
noción central en el ámbito de las recientes discusiones. Así, aun débiles y fragmen-
tados, los nuevos movimientos sociales exhiben una posición clave para cualquier
proyecto emancipatorio en América Latina. Ellos son un proyecto emancipatorio.
ys
tes de un nuevo “ser sujeto”. Naturalmente esto implica una profunda revisión
de las concepciones tradicionales sobre sujetos sociales y sobre el proceso de su
constitución.
Dentro de la tradición marxista, los sujetos sociales tienen existencia objetiva
a priori, bajo la forma de clases sociales. Ellas se constituyen objetivamente como
clases mediante el desarrollo de la conciencia que de a poco se aproxima a esta
realidad objetiva. La conversión en actores políticos pasa por la ampliación de la
organización que representa esta conciencia plena de la realidad al incorporar un
número creciente de individuos.
Nada de eso parece sustentar nuestra comprensión actual de los procesos so-
ciales en América Latina. No podemos concebir más una utopía positiva como
una meta histórica fija a la cual se llega por medio de mecanismos preestable-
cidos. Debemos imaginarla como un proceso largo y sinuoso de emancipación
cuyo desenlace —si es que existe uno— es desconocido. En consecuencia, el su-
jeto sería el individuo plenamente realizado dentro de una sociedad desalienada
o, en otros términos, un sujeto no reconocible en el comienzo, que aparecerá solo
en el hipotético final del proceso. Hasta que llegue este momento habrá algunas
dialécticas difíciles: un progreso en términos de estructuras sociales dependerá
de un progreso del sujeto y viceversa. Es más que probable que no hay nada más
allá de un rudimentario sujeto por ser, luchando contra las inacabadas estructuras
siendo hechas que le corresponden.
Si esto fuera verdad, las consecuencias para nuestras formas de conceptuar
sujetos históricos no podría tener más alcance. Dos aspectos saltan a la vista. En
primer lugar, si el proceso de emancipación jamás se concluye, también es per-
manente el proceso de constitución de sus sujetos. Por lo tanto, ningún individuo
primavera-verano2017
18 19
elalmapública
ys
ra para todo el mundo, y su éxito fue sensacional. Pre- directo. No se esforzaba en recorrer, con aburrimiento,
sentaba la historia íntegra de la arquitectura, desde la los siglos; danzaba, decían los críticos, por los caminos
cabaña de barro hasta el rascacielos, narrada con los del tiempo como un juglar, un amigo y un profeta.
términos de un hombre de la calle, pero dándole a esos Decía que la arquitectura era efectivamente la
mismos términos la apariencia de ser científicos. Su más grande de todas las artes, porque era anónima
autor declaraba en el prefacio que era un intento “de como toda la grandeza. Decía que, tal como debía ser,
devolver la arquitectura a quien pertenece: al pueblo”. el mundo tenía muchos edificios famosos, pero pocos
Más adelante declaraba que deseaba ver al hombre renombrados arquitectos, puesto que en realidad nin-
medio “pensar y hablar de arquitectura como habla de gún hombre aislado ha creado nunca nada de impor-
béisbol”. No aburría a sus lectores con los tecnicismos tancia en arquitectura o en cualquier otro orden. Los
de los cinco órdenes, el pilar y el dintel, el arbotante y el pocos cuyos nombres han perdurado, fueron realmente
hormigón armado. Llenaba sus páginas con relatos ca- impostores que expropiaron la gloria del pueblo como
seros de la vida cotidiana de las amas de casa de Egipto, otros expropian su riqueza. “Cuando contemplamos la
de los zapateros remendones de Roma, de las queridas magnificencia de un monumento antiguo y referimos
de Luis XV, lo que ellas comían, cómo se lavaban, dón- su ejecución a un hombre, nos hacemos culpables de
de hacían sus compras y el efecto que los edificios te- estafa espiritual. Olvidamos el ejército de artesanos
nían sobre sus existencias. Pero causaba en sus lectores desconocidos a quienes nadie ha cantado, que les pre-
la impresión de que estaban aprendiendo todo lo que cedieron en la oscuridad de las edades, que se afanaban
tenían que conocer sobre los cinco órdenes y el hormi- humildemente –todo heroísmo es humilde–, contribu-
gón armado. Provocaba en los lectores la impresión de yendo cada uno con su pequeña aportación al tesoro
que, tanto en lo pasado como en lo presente, no había de su tiempo. Un gran edificio no es la invención propia
problemas ni hazañas ni metas del pensamiento más de un genio u otro. Es simplemente la condensación del
allá de la común rutina cotidiana del pueblo anónimo; espíritu del pueblo.”
que la ciencia no tenía finalidad y significación más allá Explicaba que la decadencia de la arquitectura se
sobre la influencia sobre la rutina: que los lectores sola- había producido cuando la propiedad privada había
mente con vivir sus días oscuros estaban representando remplazado el espíritu comunal de la Edad Media,
y realizando los más altos objetivos de cualquier civili- 1Los Sermones en piedra, de Ellsworth M. Toohey, fueron publica-
zación. Su precisión científica era impecable y su erudi- dos en enero de 1925.
y que el egoísmo de los propietarios individuales –que no edificaban con otro
propósito que el de satisfacer su propio mal gusto, “todo afirma que un gusto
individual es un mal gusto”– había arruinado el efecto planteado de las gran-
des ciudades. Demostraba que no existía tal cosa como la voluntad individual
desde que los impulsos creadores del hombre están determinados, como todos
los demás, por la estructura económica de la época en la cual vivieron. Expre-
primavera-verano2017
saba su admiración por todos los estilos históricos, pero amonestaba contra su
desenfrenada mezcolanza. Descartaba la arquitectura moderna, establecien-
do que “hasta ahora no ha representado nada, salvo el capricho de individuos
aislados, que no ha demostrado ninguna relación con ningún gran movimiento
espontáneo de masas, y de esta manera no tiene consecuencias. Predicaba un
futuro mejor, donde todos los hombres serían hermosos y sus palacios armonio-
22 23 sos y todos iguales, según la gran tradición de Grecia, “madre de la Democracia”.
Cuando escribió esto, daba a entender –sin ninguna grieta en la serenidad de
elalmapública
su estilo– que las palabras que se veían ahora en la impresión ordenada habían
sido borroneadas en el manuscrito por una mano vacilante de emoción. Pedía a
los arquitectos que abandonasen la búsqueda egoísta de la gloría individual y
se dedicaran a dar forma al genio de sus pueblos respectivos. “Los arquitectos
son siervos, no líderes. No deben conservar sus pequeños egos, sino expresar el
alma de sus países y el ritmo de su tiempo. No deben seguir las ilusiones de la
fantasía personal, sino buscar el común denominador que acercará su trabajo al
corazón de las masas. Los arquitectos, mis amigos, no deben buscar razones. El
asunto de ellos no es mandar, sino ser mandados.” Los anuncios de Sermones en
piedra llevaban citas de los críticos: “¡Magnífico!”, “No igualado jamás en toda la
historia del arte”, “Una oportunidad para conocer a un hombre encantador y a
un pensador profundo”, “Lectura obligatoria para todo el que aspire al título de
intelectual”.
Parecía que había grandes deseos de ostentar tal título. Los lectores adquirían
erudición sin estudiar, autoridad sin costo, juicio sin esfuerzo. Resultaba agrada-
ble contemplar un edificio y criticarlo como un profesional con la memoria puesta
en la página 439; tener discusiones artísticas y cambiar las mismas frases de los
mismos párrafos. En los estudios de los arquitectos distinguidos oyó de pronto
decir: “¿Arquitectura? ¡Ah, sí, Ellsworth Toohey!”
Una utopia consciente de serlo:
Reseña a Anarquismo es movimiento
da conceptualización de la anarquía (p. 13). ne que hay un resurgimiento del anarquismo a partir
Fue a partir de los recientes sucesos mundiales que de los cambios sucedidos en lo político, lo cultural y lo
han emergido a la superficie política y cultural diversos tecnológico. Generando mayores posibilidades de hori-
colectivos que, indignados, enojados, encabronados, de- zontalidad, de auto-organización, de difusión de ideas y
cepcionados, llevados hasta el cansancio, retomaron al- propuestas, de denuncia de acontecimientos violentos
gunas de las ideas anarquistas clásicas, pero ante todo allende las fronteras, de inclusión de voces que estu-
24 25 las llevaron a la práctica, las hicieron reales y no fueron vieron relegadas, de propagación de iniciativas locales
meras sugerencias de actitudes y comportamientos, que impactan otras conciencias. Las ideologías se ve-
elalmapública
generando así otras maneras de confrontar la opre- rán derrumbadas al cuestionarlas frontalmente y des-
sión, la represión, la imposición de ideas y acciones. No de diversos flancos posibles. Por fin, si contemplamos
se trata tan sólo de incorporar al anarquismo algunos los cambios culturales, observaremos que la crisis de
de los elementos de un pensamiento político elabora- la ideología legitimadora de la modernidad y, especial-
do fuera de su seno. Se trata, sobre todo, de producir mente, el cuestionamiento de sus presupuestos esen-
conjuntamente, con otros colectivos también compro- cialistas –que negaban la posibilidad de la libertad–, así
metidos en las luchas contra la dominación, elementos como la quiebra de sus perspectivas escatológicas –que
que se incorporen a la tradición anarquista haciéndola sacrificaban el presente en beneficio del futuro- y la crí-
moverse (p. 28). tica de sus pretensiones totalizantes –que trituraban las
Para Ibáñez, el anarquismo ha sido parte de la rea- singularidades y la diversidad–, no podían sino reforzar,
lidad desde el momento en que han existido prácticas de rebote, ciertos presupuestos anarquistas (p. 48).
de opresión, de desigualdad, algunas visibles y sutiles, El anarquismo está inmerso en las prácticas que se
o aquellas otras que fueron expuestas y denunciadas, realizan, no en su nombre, sino contra las instancias y
y donde atentar contra éstas queda justificado, empero dispositivos que generan condiciones de desigualdad
el anarquismo es una constante provocación. Se trata, u opresión, mismas que pueden ser políticas, tecnoló-
por consiguiente, de arrancar espacios al sistema para gicas y culturales, mismas que han cambiado a través
desarrollar experiencias comunitarias que tengan un de los años, influyendo en la transformación de los
carácter transformador, porque sólo cuando una acti- presupuestos anarquistas. Razón por la cuál Tomás da
vidad transforma realmente y radicalmente una reali- seguimiento a los distintos escenarios que se han des-
dad –aunque sólo sea de modo provisional y parcial– es plegado con el anarquismo, empero, los crítica y contra-
cuando se establecen las bases para ir más allá de una argumenta al disponerlos como subtítulos: anarquis-
mera –aunque siempre necesaria- oposición al sistema, mo, neoanarquismo y postanarquismo.
Y no, no son sólo neologismos, exponen el paulatino identificando las estrategias del poder cada vez más
registro del movimiento anarquista, de su renovación y sutiles, mismas que siguen impactando en la reali-
de su resurgir, para muchos éste ya no habría de existir, dad cotidiana. Con la multiplicación de las facetas de
para sus detractores hace mucho que tendría que haber nuestra existencia que pasan a ser blanco de las inter-
desaparecido, para los conservadores tendría que man- venciones del poder, también se multiplican, en con-
tenerse inconmovible aunque pasaran los años, para secuencia, las ocasiones de intervención concreta del
los neoanarquistas tendría que renovarse a partir de lo anarquismo y, paralelamente, también se intensifica el
que se veía, vivía, combatía en su actualidad. Por ello sentimiento de que el ejercicio del poder constituye un
Ibáñez se enfoca en cómo han sucedido estos cambios, fenómeno omnipresente del que conviene preocuparse
el anarquismo clásico era visto de manera esencialista en primerísima instancia, como siempre lo ha afirma-
y por ello se evitaba cualquier influencia, intercambio, do el anarquismo (p. 59).
conversación, con otros colectivos y/o manifestacio- La crítica hacia el anarquismo es la exigencia por ser
ys
nes. Tenía oídos sordos a cualquier otra postura crítica. constante y frontal, debe provocar malestar tanto a los
El anarquismo es necesariamente cambiante porque que lo profesan como a los que lo niegan, a los que lo
su inmutabilidad contradeciría el tipo de realidad que citan como a los que lo inculcan, a los que lo desconocen
es. Esta modalidad de ser no carece de consecuencias como a los especialistas en éste, y esa crítica no puede
porque, por ejemplo, si es cierto lo que aquí adelanto, reducirse a un dossier de textos que tengan la palabra
entonces no hay nada más alejado del anarquismo que “crítica” entre sus páginas, ni tampoco verse expuesta en
concebirlo como una entidad intemporal, inalterable, una actitud de radicalismo ramplón, embestido con una
inmutable, definida de una vez por todas; y esto recusa, playerita de Proudhon y sus consignas, o a partir del es-
inmediatamente, toda pretensión de velar por su pure- cupitajo académico, donde algunos asumen que si ellos
za originaria y toda veleidad de instituirse como guar- o ellas no lo dijeron o criticaron, la crítica nunca sucedió.
dianes del tiempo (pp. 50-51). Tomás Ibáñez por su parte señala que tuvo que li-
La propuesta que hace Ibáñez se entrelaza con el re- diar tanto con los “guardianes del templo” anarquista
conocimiento de las discusiones sobre el tema, genera- como con los planteamientos académicos que se em-
das desde los espacios universitarios, ennoblecidas por peñaban en desdeñar al anarquismo clásico como por
los presupuestos post-estructuralistas y por los que se ensalzar el post-anarquismo sobre especializado. El
generaron a partir de la posmodernidad, el post-anar- postanarquismo […] ha dado muestra de su vitalidad al
quismo abreva de esas reflexiones pero también de los continuar alimentando un debate crítico en el seno del
acontecimientos históricos, locales, difundidos, de los anarquismo y al esforzarse por ponerlo en las diversas
que se tuvo registro desde finales del siglo XX –como manifestaciones contemporáneas de las prácticas de
el movimiento zapatista– hasta los más recientes –la lucha y las elaboraciones teóricas de la política radical,
primavera árabe o lo sucedido en las manifestaciones tal como se desarrollan en el seno pero también fuera,
en Seattle–. Enriqueciendo la discusión pero ante todo de la tradición anarquista (pp. 77-78).
26 27
elalmapública
La discusión no ha terminado, lo cuál hace evidente paron en los medios de difusión y de denuncia a los
la no conformidad respecto al tema, para algunos los cuales acudieron para deslegitimar los dispositivos
planteamientos de Tomás los convencerán de inme- del opresión, de exclusión, de poder, tan fue así que
diato; para otros, habrá que actuar con reservas, por los arcángeles permanecieron, y aprovecharon la con-
ello el autor, en éste libro citado, tiene un apartado de fusión creada a partir de la frivolidad de los recursos
adendas dónde discute de manera sistemática cómo tecnológicos que terminaron usándolos en su favor.
la posmodernidad, el post-estructuralismo y el relati- En la segunda adenda reintroduce los planteamientos
vismo impactaron en los presupuestos y en las prác- post-estructuralistas, pero para llegar a estos, Ibáñez
ticas anarquistas. En la primer adenda documenta a nos habla del mayo del 68, y de lo que los estructura-
la modernidad, y a la posmodernidad como épocas listas desdeñaron de sus discusiones, del esencialismo
históricas, y como ideologías, y sí, ambas lo son. Ya que que acogieron y de todo lo que desplazaron conve-
se pueden rastrear sus inicios y su desgaste, su agota- nientemente: el sujeto, el poder. Y, para finalizar, en la
miento, su declive a partir de las prácticas sociales que tercer adenda es obligado extendernos un poco más,
les han caracterizado. La razón y la emancipación, la nos habla de cómo y cuáles han sido las críticas hacia
imposición y su crítica serán los puntos a discutir en el relativismo, críticas que impactarán a las propues-
este apartado. Se dice que Dios ha muerto, pero ese tas postanarquistas, a saber:
lugar lo ocuparon los arcángeles científicos; y a estos Como el relativismo socava en su misma raíz el prin-
se les identificó, se les denunció, y esas nuevas voces cipio de autoridad y cuestiona radicalmente todos los
denunciantes, esos nuevos actores críticos, se entram- argumentos absolutistas, se encuentra en disposición
de traer mayor caudal de agua al molino del anarquis- rumores, 1.- el relativismo justifica, como última op-
mo que cualquier otra corriente filosófica (p. 127). ción, “la ley de la selva”, 2.- el nivel de compromiso
Además, sorprende esa campaña de descrédito que adquiere –o no– aquel que defiende los postula-
constante y la presencia de esos corta-cabezas que dos relativistas, y 3.- asumir que cada vez que se habla
no dejan pasar oportunidad para manifestarse en su de relativismo se está diciendo que todos los valores
contra, es bastante frecuente escuchar voces conserva- morales “valen” por igual. Ahora bien, las respuestas
doras poniéndonos severamente en guardia contra los de Tomás desenmascaran lo que los absolutistas sólo
efectos devastadores que tiene el relativismo sobre los quieren para sí mismos: el uso de la fuerza, por ejem-
valores morales de nuestra civilización. Pero tampoco plo, a la que también acuden aquellos que ostentan
es menos frecuente escuchar voces progresistas pro- el pensamiento racional, quienes racionalizan ese uso
clamar que el relativismo es peligroso, incluso para la para hacer “entrar en razón” a los disidentes, a los que
simple convivencia pacífica y civilizada, puesto que nos cuestionan esos usos discrecionales del poder. ys
abocaría a situar la fuerza bruta como el último recur- Sobre el compromiso que adquiere el relativista,
so para dirimir nuestras desavenencias (p. 128). se le interroga acerca de si es él o ella o ellos o ellas
Ese rechazo, esa bravuconería de los absolutistas, quienes defenderían a ultranza sus planteamientos,
asimismo de los expertos en la disección, mismos que desplegando todos los imperativos morales conocidos
se han amparado en (de) la razón científica, se enfo- y previamente acordados por los absolutistas para así
ca en dos cuestiones, la de verdad y la ética. Sobre la condicionar sus acciones, discursos, gestos, comporta-
segunda se despliegan y se difunden los siguientes mientos, asumiendo que eso es lo que se debe hacer, y
es, precisamente, cuando se cree en la trascendencia de desde la utilidad hasta la verdad. Que algo sea útil no
los valores, cuando se torna más secundario y prescin- significa que sea verdadero (p. 138).
dible que los defendamos o no (p. 133). El relativista es Lo que se expone es la asunción semántica univer-
puesto bajo la lupa vigilante para que en el momento salista de un ejercicio pragmático; lo que se discute es
que se equivoque, que claudique, que se niegue a salir la imposición de una gramática absolutista en nuestra
a las calles para defender lo que dice que defiende, se le vida cotidiana, y cómo nuestras prácticas sociales sólo
pueda restregar en la cara su insolencia al criticar a los, tienen sentido así, de esa manera. Todas estas serán
a las, que sí están dispuestos a dar la vida por ello. Así es las disertaciones conjuntas que han sido las constan-
como se le tachará de indiferente, y más cuando se pon- tes en las reflexiones de Ibáñez, que como alumno de
ga entredicho la finalidad de sus actos, los absolutistas Foucault, como lector de Cornelius Castoriadis, como
primavera-verano2017
dirán que al no defenderlos no pueden ser verdaderos, interlocutor de Michel Serres, como activista y como
empero, para el relativista no hay un valor último que psicólogo social, sigue sorprendiéndonos al ponernos
defender, ninguno es mejor que los otros. Así es como a pensar sobre lo que seguimos justificando, legiti-
responde el tercer cuestionamiento. mando, en nuestras formas de pensar y actuar, si es-
Sobre la cuestión de la verdad, la polémica versa tamos o no de acuerdo con él, no importa, a él no le
sobre cómo es que una sentencia “verdadera” tras- importa, a nosotros tampoco, aunque debo reconocer
28 29 ciende los límites de una realidad, para los absolutis- que me he descubierto inmerso en un gesto de com-
tas esto significa que el universalismo y el objetivismo plicidad cada vez que lo leo.
elalmapública
estarán ahí, para siempre y para todos, y que ponerlas Finalmente, es Tomás quien clama por ese pensa-
a discusión sería una afrenta a sus principios, cues- miento utópico que sostiene muchas de nuestras accio-
tión que al relativista le tiene sin cuidado, si se sien- nes e ideales, sin el cual mucho de lo que se ha hecho
ten ofendidos, allá ellos y su cientificismo. Pero bueno, nunca habría sucedido, el giro, en la actualidad, versa
el punto es el siguiente, para el relativista, la verdad sobre el mismo sentido de la utopía, ésta es sólo eso,
se sostiene como una contingencia socio-histórica, una utopía no una realidad y si uno se compromete con
el relativismo no pretende abandonar el concepto de las transformaciones sociales habrá de ser consciente
verdad, tan sólo pretende resignificarlo, alejándolo de de ello. Al igual que se dice, bromeando, que la nostal-
su conceptualización absolutista y situándolo en el gia ya no es lo que era, resulta que la utopía tampoco
marco pragmático. Lo que cuestiona el relativista no es exactamente la que fue antaño. Si observamos, con
es el valor pragmático de la creencia en la verdad, sino alguna atención, la renovación del anarquismo pode-
los supuestos filosóficos que el absolutista incorpora mos ver que la actual revitalización de la utopía es la
a esa creencia. La utilidad que representa el hecho de revitalización de una utopía plenamente consciente de
creer en la verdad no ofrece duda alguna al relativis- serlo, absolutamente convencida de no ser nada más
ta. Sin embargo, no puede dejar de recordarnos que el que una utopía (p. 85).
valor de uso no presupone nada más que eso, y que no
existe ningún puente lógico que nos permita transitar Por ello, leer a Tomás Ibáñez siempre es una delicia.
El día en que mujeres ineptas e incapaces ocupen cargos de responsabilidad se habrá logrado la
igualdad entre los sexos.
Esther Tusquets
Formas afectivas
de los movimientos
sociales
ys
tania jimena hernández crespo
E
físico, afectivo, erótico.
bifo
condiciones similares en toda la geografía planetaria, que representación política y liderazgo partidario,
por lo que es de esperarse que existan formas de que la democracia no es algo que se ejerza cada vez
respuesta similares en muchas partes del mundo. que es tiempo de elecciones, sino que se trata de
Dice Santos (2015: 23) que los movimientos son un proceso vivo. Estas formas de democracia di-
muy diversos, muy desiguales, pero que todos es- recta y asamblearia están presentes en casi todas
tán hablando y actuando básicamente contra dos las protestas y movilizaciones contra el sistema. De
32 33 grandes enemigos. Uno es la inmensa y cada día forma casi espontánea los movimientos recurren a
más agravada desigualdad social de nuestro tiem- construir formas de democracia directa, ya sea en
elalmapública
po y la otra es la dictadura, ya sea personal o finan- asambleas, o en reuniones por barrios, y no sólo,
ciera. En este sentido, es innegable la complejidad estos movimientos comienzan a cuidar las formas
y la similitud de las revueltas, ya que a pesar de las dentro de sus organizaciones. Cada vez más éstos
diferencias de los movimientos sociales, surgen en se erigen sin liderazgos y ésta se vuelve una forma
el tiempo donde la crisis del capitalismo se hace de resistencia fundamental.
cada vez más visible, y esto propicia que se gesten Estas luchas son portadoras de nuevas gramáti-
objetivos comunes, que aparezcan formas de orga- cas políticas, de nuevos discursos que amplían los
nización parecidas; que los discursos se comple- espacios de participación, así como la calidad de
menten. Todo esto nos lleva a pensar en análisis ésta; afirmando la primacía de lo público y colecti-
globales en los movimientos sociales. vo. En este sentido, los movimientos y las revueltas
Algunos de los movimientos y movilizaciones sociales están generando una consonancia entre
que se han dado en el mundo son ejemplos que nos su práctica y su discursividad, y ambas aparecen
hacen pensar la existencia de un proceso profun- atravesadas por la “revalorización de mecanismos
do de movilización y creación de un sujeto social democráticos de participación y decisión que, ins-
con determinadas características que, a su vez, va pirados en las referencias de la democracia direc-
transformando las formas de hacer y entender la ta, orientan tanto sus modelos organizativos, sus
política. La tendencia que advierte Santos (2015:
2 Como dice Aguiló (2014: 70), los movimientos y las
27) es que “la democracia representativa ha sido
revueltas están “contribuyendo al desaprendizaje de la de-
derrotada por el capitalismo. Hubo un tiempo en
mocracia liberal como vía transformadora, es decir, al des-
que se pensó que la democracia representativa-li- mantelamiento de las representaciones hegemónicas que
beral podía poner límites al capitalismo. (…) Ahora presentan la democracia como un producto descontextua-
todo se está revirtiendo. Esta democracia no logra lizado, desideologizado y naturalizado.”
discursos y sus demandas hacia el Estado. En este ces, es política, pues al no reconocer las institucio-
sentido, por un lado, la promoción de formas parti- nes, no se buscan acuerdos con ellas o formas de
cipativas más horizontales y abiertas es vista como negociación: lo que se busca es su destrucción. El
reaseguro frente al peligro de ‘desconexión’ entre grito de ¡Que se vayan todos! es la respuesta a es-
los diferentes niveles organizativos, burocratiza- tas instituciones que son vistas como ilegitimas. Se
ción y manipulación. En ese terreno, la experimen- va creando una nueva politicidad en lo cotidiano y
tación zapatista cristalizada en la voz del ‘mandar desde ahí, “abriendo un campo político popular de
obedeciendo’ (Seoane, 2006: 229), es quizá la más acción extrainstitucional que reclama nuevos ámbi-
clara y sugerente, de esta consonancia entre los tos y espacios fundados en ejercicios de democra-
discursos y las prácticas”. Se toma así distancia de cia (experiencias de autorganización y participación
la política tradicional o institucional: en la política horizontales, inclusivas y plurales) articulados en-
ys
de arriba la palabra está corrompida, no tiene va- tre las redes y las calles/plazas” (Aguiló, 2014: 82).
lor. En la política de abajo, fundamentalmente en Lo que se ha producido es una ampliación de los
los pueblos indios, la palabra vale y constituye la espacios políticos y una democratización del espa-
unión entre el discurso y la práctica cotidiana. cio público, más allá de los momentos electorales y
Un discurso es el que se representa por el NO. del sistema parlamentario.
Los movimientos están definiéndose a partir del Muchos activistas de estos movimientos no
hartazgo y están esgrimiendo un NO frente a la sólo han ocupado calles, plazas, bancos y rodeado
crisis del capitalismo y sus furtivas salidas. La in- a las instituciones estatales para señalar los espa-
dignación se convierte en un gran NO ante todo cios públicos privatizados o confiscados por el ca-
aquello que no se quiere. Y es una forma de iden- pitalismo, sino que también han creado espacios
tidad, un elemento aglutinador, un tránsito a la de democracia radical y poder popular: acampadas
conformación de nuevos caminos o alternativas en plazas, asambleas en barrios y pueblos, centros
al capitalismo y un mensaje fundamental para la autogestionados, huertos comunitarios, radios co-
respuesta social. No hay alternativa, hay que con- munitarias, en donde no sólo se construyen otras
formarse con lo que hay, repiten una y otra vez los prácticas políticas sino también otras subjetivida-
ideólogos del sistema capitalista. Los movimientos des.3 Muchas de estas prácticas constituyen lo que
y las revueltas en todo el mundo responden con un puede llamarse “acciones rebeldes (Santos, 2003;
NO, y éste es también un desafío al sistema, a la en Aguiló, 2014: 82), formas de intervención social
política tradicional. Como dice Fernández-Savater, que se desvían del supuesto orden natural de los
este NO implica que “No queremos ser mercancías acontecimientos porque rompen con lo previsible
en manos de políticos y banqueros”, “no nos repre- y lo dado, abriendo espacios de posibilidad y espe-
sentan”. Se trata de un “NO dicho con el cuerpo,
con otros, en la calle. Un NO que redefine la reali- 3
Como dice Aguiló (2014: 83), estas prácticas que se
dad: la frontera entre lo que toleramos y ya no to- pueden denominar como no electorales presentan las si-
leramos, lo justo y lo injusto, lo digno y lo indigno. guientes características: “1) revelan un alto grado de po-
litización; 2) se producen con una intensidad y duración
Y que rompe (en los hechos) con un régimen de lo
variables; 3) sirven para visibilizar un conflicto, demanda
evidente y lo deseable” (Fernandez-Savater, 2014). o necesidad específica de la sociedad; y 4) permiten ejercer
Estas formas del NO se configuran como una la participación democrática como una práctica social coti-
política extrainstitucional. La desobediencia, enton- diana desde abajo.”
ranza por parte de sujetos que buscan construir y Este nuevo sentido común político, inscrito en una
recrear activamente la Historia, pero también su perspectiva de experimentalismo, diversidad y ra-
historia”. El mayor logro con estas acciones rebel- dicalidad, ha repolitizado la sociedad; ha redefinido
des es no sólo oponerse al estado de las cosas, sino el significado social y cultural de la democracia; ha
sobre todo construir otras formas de relación y de creado espacios contrahegemónicos de construcción
subjetivación y de relación fuera de las formas tra- política más allá (y a menudo en contra) de los es-
dicionales de la política. pacios institucionales, impulsando luchas sobre el
Desde hace unos años, los movimientos socia- uso y significado del espacio público; ha originado
les sin duda plantean una crítica radical al sistema. prácticas democráticas despreciadas por la política
Algunos de ellos entienden la lucha no sólo como liberal”. Ésta es la política de los nadie.
primavera-verano2017
grandes acciones hacia fuera, sino sobre todo como Es Nadie quien hace andar la rueda de la his-
formas internas, formas de organización en donde toria, son esas multitudes de las que hablan varios
el camino importa. Ya no se trata de que “el fin jus- autores, son esas formas por momentos incom-
tifica los medios”; más bien, estos movimientos o prensibles pero que están construyendo un suje-
sus revueltas ponen énfasis en los medios, en las to colectivo, resultado de una nueva época. Estos
formas de organizarse, en la toma de decisiones, en Nadie, dice Rodríguez Lascano (2005), no se rigen
34 35 las tareas, en las formas cotidianas de construcción por “las máximas del olimpismo del capital: más
de sus movimientos y organizaciones, bajo la idea alto, más fuerte, más rápido –es decir, más dine-
elalmapública
de que “los medios construyen el fin”. Esta nueva ro, más fama, más poder–, sino por las de los que
manera de hacer política se constituye como una no aspiran a medallas de oro sino simplemente a
política dotada de ética. En algunos casos los mo- cambiar al mundo: más bajo, más débil, más len-
vimientos o las movilizaciones se construyen des- to”, y de esa triada sacan su invencibilidad. Un
de la intuición, sin una idea clara de esta “nueva elemento fundamental de ese Nadie es que siem-
forma de hacer política”, pero sí con una distancia pre es autoconvocado, conlleva un proceso de auto-
fundamental respecto a las formas tradicionales de organización. Alejado de las formas de democracia
hacer política. No se trata de un ejercicio planifi- representativa como “gestión experta”, estos nadies
cado, sino más bien de una respuesta espontánea van construyendo una política como posibilidad al
al hartazgo de las formas políticas con las que se alcance de cualquiera, como práctica cotidiana des-
ha tenido contacto. En las revueltas en España una de la vida en común.
frase resume esa desconfianza que, a su vez, se con- Las formas de comunicación y de articulación
vierte justo en esperanza: “Si no podemos creer en de los movimientos, ya sea en un lugar específico
nadie, tendremos que creer en nosotros mismos”. o a lo largo del mundo, son en una compleja es-
Las nuevas formas de hacer política son las for- tructura de red. No tiene una dirección central,
mas en que la gente común y corriente hace suyos es más un entramado que a su vez implica formas
los espacios y tiempos de la política. Para Aguiló espaciales y temporales que se van combinando y
(2014: 80), “revelan el surgimiento de un inci- tejiendo entre sí. En las revueltas o levantamien-
piente sentido común político basado en lo que, tos en distintos países, nos encontramos con una
tomando como fuente de inspiración la filosofía muy compleja forma de convocar a las diferentes
política de Castoriadis (2007), puede llamarse una manifestaciones, que si bien pueden hacer uso
imaginación democrática instituyente y radical. de las redes sociales, son más bien un fenómeno
La barricada, las tomas, también se convierten en
un espacio para la existencia, en el que no sólo se trata
de mantener un espacio, sino donde se va gestando
una nueva posibilidad de ser y de existir.
de comunicación y de afecto. Estas formas inclu- ocupaciones son espacios en donde la gente acude
yen: lanzar una convocatoria acordada, ya sea por para organizarse, para dialogar, para resistir, para
un colectivo u una red de colectivos, que poco a aprender, para descubrir y en muchos casos para
poco comienza a difundirse en forma masiva ya ser escuchados y tomados en cuenta por primera
sea de boca en boca, en reuniones o asambleas, vez, es decir, para formar colectivo. Las tomas son ys
por el uso de mails, carteles, twitter, Facebook, etc., una respuesta espontánea a una determinada si-
pero que sin duda tiene que ver con un fenómeno tuación y poco a poco se transforman en un espa-
de un cierto clima social, más que con un llamado a cio político-organizativo. La barricada, las tomas,
determinada acción. Las acciones multitudinarias también se convierten en un espacio para la exis-
no surgen de una convocatoria hecha por alguien, tencia, en el que no sólo se trata de mantener un
sino que se trata de un clima social que encuentra espacio, sino donde se va gestando una nueva po-
en ésta un determinado lugar (espacio y tiempo) sibilidad de ser y de existir.
para su realización. La rabia, la indignación, el har- Es importante destacar que los movimientos
tazgo, el dolor, la esperanza, es lo que convoca en sociales, las revueltas, las rebeliones no deben ser
las manifestaciones, y ésta es activada por alguna consideradas sólo como prácticas racionales, por-
convocatoria a determinada acción. que existen también muchas formas afectivas que
Los espacios de lucha que han generado los suceden en dichos acontecimientos. Como dice
movimientos y las revueltas son las ocupaciones, Cava (2015), las experiencias de lucha de los nue-
las tomas, los bloqueos, entre otros. Podemos en- vos movimientos y de los ciclos insurgentes, desde
tender esto como sitios desde los cuales se resiste, Bolivia hasta España, producen transformaciones
y como espacios de encuentros y de construcción en los niveles de la sensibilidad; una nueva manera
de nuevas relaciones, de nuevos mundos. Ahí, los de sentir la democracia y la acción común, la rea-
movimientos se hacen visibles, se manifiestan, se lidad. “Los afectos generados por los buenos en-
expresan, se encuentran, se forman, se identifican. cuentros se cristalizan en hábitos, mezclándose
Desde Nueva York hasta El Cairo, las ocupaciones con los comportamientos más ‘naturalizados’. Si el
y las tomas son un elemento central. Se trata no capitalismo tiene una evidencia y una afectividad,
sólo de la ocupación de un espacio físico, sino de la tales construcciones político-afectivas tienen el
toma de los espacios simbólicos; se trata también poder de producir otras evidencias y otras afecti-
de marcar rupturas en los espacios y en los tiem- vidades”. La lucha no es sólo una acción racional,
pos de las formas de dominación. Su impacto no estructurada sólo desde una toma de conciencia,
tiene tanto que ver con las demandas en lo inme- sino muchas veces es un acto espontáneo que se
diato, sino con la fuerza del propio movimiento, mueve por la afectividad, por las emociones origi-
su capacidad de resistencia y de convocatoria. Las nadas ante una determinada realidad; la rabia, la
indignación, el enojo, el dolor, son los movilizado- sistema, en un proceso en donde los afectos están
res de las acciones colectivas y poco a poco se van presentes como formas innovadoras y movilizado-
descubriendo nuevas formas afectivas como la so- ras, que transmutan el pensamiento y las prácticas,
lidaridad, la esperanza, el cuidado, el miedo, entre y que a su vez van creando nuevas subjetividades
muchas otras. que regresan a la escena e impactan el proceso de
En este sentido, Berardi (2014: 160) se pregun- disposición de nuevas representaciones culturales
ta por qué los movimientos buscan ocupar una que se inscriben en la lucha de la humanidad con-
plaza, una calle, o un territorio, cuando “sabemos tra el capitalismo. Esto podríamos definirlo como
muy bien que allí no reside ningún poder político y una política de los afectos que se cristaliza como
que el sistema financiero no se localiza en una di- una política autónoma, anónima y cotidiana.
primavera-verano2017
mensión territorial”. Y responde que sucede de este Fernández-Savater (en Weber, 2015) comen-
modo porque lo primero que necesitan los trabaja- ta que las revueltas no son sólo el resultado de la
dores es la “reactivación de una dimensión afectiva gravedad de la situación y de la deslegitimación de
y territorial que permita reconstruir las condicio- los poderes, hechos que se han intentado estudiar
nes emocionales de la solidaridad”. Es el sentido como las condiciones objetivas de las sublevacio-
de la toma de las plazas, de las acampadas, planto- nes. Dicho autor plantea que existe un elemento
36 37 nes, la toma de las calles. Se trata entonces de una subjetivo en éstas, que es difícil de predecir y mu-
“sublevación colectiva que es antes que nada un fe- cho más de generar, y es lo que ha denominado
elalmapública
nómeno físico, afectivo, erótico. La experiencia de una “afectación”. Indica que “la afectación –más
una complicidad afectuosa entre los cuerpos”. que el interés o la identidad– es el primer motor
Para Fernández-Savater (2013), es precisamen- de cualquier proceso de subjetivación. Sentir un
te “eso que llamamos vagamente afectivo o emocio- problema como problema común. Sentir que algo
nal –es decir, la base inconsciente de nuestra vida pasa y te pasa, que hay que hacer algo al respec-
en común– lo que puede mover a alguien a consi- to de eso que pasa y nos pasa. La afectación es la
derar vecino a alguien que vive lejos y a plantarse antesala de la acción. No hay nada evidente o au-
enfrente de su casa para protegerle de un desahu- tomático en este proceso”. Los discursos construi-
cio. El sentimiento de que la vida de cada cual no se dos en el sistema, bajo la forma del individualis-
agota en uno mismo, sino que está interconectada mo, son para impedir dicha afectación, para seguir
a otras muchas vidas desconocidas”. Bajo la idea la vida, “mientras no me afecte a mí”.
de “somos el 99%”, estas interconexiones que pa- La insurgencia de las multitudes o las revueltas
recen ser más un campo de lo afectivo, es aquello de indignación, son sobre todo un fenómeno psí-
que está nutriendo a las diferentes revueltas, movi- quico y afectivo. El sentirse afectado o implicado
mientos e insurrecciones en el mundo. La solidari- en algo no es sólo un elemento que tiene que ver
dad como afecto va a ser un elemento fundamental con una cuestión de condiciones objetivas como el
en estos movimientos. hambre o la pobreza, sino que se trata de un despla-
Los movimientos sociales están cambiando las zamiento de la sensibilidad en el que lo que antes
formas de organización y de participación, y esto parecía normal e incuestionable, se convierte en un
implica una serie de construcciones y transforma- grito que no es posible sostener. Se trata entonces de
ciones complejas que responden, aunque no de un momento de indignación que estalla como forma
manera automática, a la crisis y al estado actual del de una multitud, pero que se viene construyendo de
muchos años atrás. Antes de irrumpir abiertamente mentos cuando lo legítimo ha dejado de serlo, para
en la escena pública, se va formando en los reductos convertirse en algo inaceptable. Para la insurgencia
protegidos por redes sumergidas en la vida diaria: de las multitudes deben conjuntarse tres elemen-
los pequeños grupos familiares, de amigos, veci- tos fundamentales: por un lado lo que Thompson
nos o compañeros de trabajo, las redes sociales que llama la economía moral de la multitud, es decir, la
comparten espacios de diálogo y de crítica, o inclu- disposición moral que se establece cuando algo es
so desde la soledad que observa un mundo con un intolerable, cuando existe una ofensa por “parte de
sinfin de dolores. las clases dominantes a las clases subalternas”. Por
Esto que podemos entender como un sentido otro, una conmoción o afectación que da pie a la
común va a disponer la substancia de la multitud y, insurrección, en donde la ofensa se llena de afectos
por supuesto, va a gestar las formas de conciencia y de formas sensibles para que la multitud pueda
ys
dentro de la multitud; se va a configurar en los sím- ponerla en acción. Y en tercer lugar, la cercanía de
bolos, pensamientos y formas de comunicación. los cuerpos y los corazones.
Ese sentido común es lo que va a conformar el nú- En este sentido, la insurgencia de las multitu-
cleo de la multitud. Tal como lo menciona Thomp- des y de las revueltas expresa esas formas profun-
son (1979: 65) en su ensayo sobre la Economía das, venidas desde abajo, que se gestan lentamente
moral de la multitud, refiriéndose a los “motines de en las mentalidades de la sociedad y que van con-
subsistencia”, devela la estructura subyacente que formando subjetividades diferentes a las formas
los soporta y los legitima: son como una reacción hegemónicas; que se guardan o se mantienen la-
a la “exportación en épocas de escasez [que] susci- tentes durante largos periodos, hasta que algo las
tó un profundo disgusto durante varias centurias. hace surgir para enfrentar las formas decadentes y
Un magistrado escribió lo siguiente en 1631, sobre abrir camino a posibles alternativas. En esta pers-
un motín debido a la exportación, en Suffolk: «ver pectiva, la crisis del sistema cobra mayor fuerza, ya
cómo les es arrebatado su pan y enviado a extraños que no se trata sólo de sus propias contradicciones
ha convertido la impaciencia de los pobres en furia –como sus crisis económicas–, sino sobre todo de
y desesperación desenfrenadas»”. Esta estructura una profunda crisis de dominio. El capitalismo no
instaura “un modelo de comportamiento estable- es sólo una forma económica, sino que es un sis-
cido por la costumbre”, que aparece como las nor- tema social. Cuando las sociedades comienzan a
mas que delimitan las acciones de las multitudes y cuestionar con fuerza el contrato social sobre el
que sobre todo van a plasmar el punto de inflexión cual se erige el capitalismo, la crisis de éste se hace
en donde se contrasta lo que es aceptable respecto mucho más profunda.
de lo que es intolerable. Como menciona Berardi (2014: 175), la suble-
Este punto de inflexión no sólo se refiere a las vación en contra del capitalismo financiero apunta
razones por las cuales surge la multitud o revuelta, hacia la recomposición del cuerpo social y afectivo.
sino a las formas morales que en ésta se muestra. El capitalismo ha disgregado este cuerpo social;
Cuando observamos una multitud generalmente el modelo del sistema capitalista actual ha sido la
somos impactados por la fuerza de ésta pero, sin fragmentación de todas las formas de tejido social,
duda alguna, esta fuerza tiene un componente mo- por lo que la recomposición de este cuerpo social
ral que tendrá que ser develado. Las irrupciones es la materia fundamental de estas formas de su-
de las multitudes o las revueltas son aquellos mo- blevación. Pensar la dimensión política desde una
cuestión de los afectos consiste en alejarse de la ló- otro, el contacto con el otro; esta activación del de-
gica utilitarista de la política y entenderla como una seo pasa por las multitudes y las revueltas.
forma de vida y de relación, de construcción de un Este deseo y la reactivación del cuerpo social
horizonte que se aleja de la política como mercan- pasan por lo que conocemos como contagio, es de-
cía. Es verla como formas comunes que tienen en cir, lo que no afecta directamente a los implicados
la mira elementos tan importantes como la digni- en la multitud sino que excede sus límites. Dice
dad, la memoria, la ética y el futuro. Las emociones, Fernández-Savater (2015a) que en la metáfora del
las pasiones, el deseo, los afectos, son constitutivos clima social se pretende simbolizar ese “proceso
de las sociedades. En momentos de cambio, éstos de subjetivación”.5 Un fenómeno difuso, expan-
guían fuertemente la acción, por lo que es funda- sivo, “climático”, que no se podría acotar en los lí-
primavera-verano2017
mental poner atención en el proceso afectivo de los mites de ninguna estructura u organización, sino
cuerpos sociales. 4 que aparece de forma constante e incluso invisi-
Es importante pensar en la reactivación del ble, pues es difícil medir los alcances de este cli-
cuerpo social. En las multitudes y en las revueltas ma social, hasta que se hace presente como forma
se trastocan las subjetividades a tal grado que la de sublevación. El clima social se refiere entonces
gente queda reconstruida en esa forma de cuerpo a “una afectación común y compartida entre un
38 39 social y comienza entonces, independientemente sinnúmero de personas, con distintos niveles de
del acontecimiento, a construir espacios de auto- intensidad y distintas formas de elaboración. Ni
elalmapública
solo evento. Se trata de un proceso lento, con un cia o intolerable) y en la idea de lo posible (sí se
flujo que va desde los estallidos de las multitudes puede)” (2013).
–a veces violentos y que irrumpen quedándose A manera de conclusión, podemos pensar en
por momentos– que pueden durar días o incluso formas políticas nuevas, gestadas desde los afec-
meses y que regresan a la aparente cotidianeidad, tos, una política autónoma, anónima y cotidiana.
pero con algo nuevo. Y que van moviendo las for- Cuando hablamos de política autónoma, se plantea
40 41 mas de sensibilidad para pasar un tiempo en el una separación entre la lógica estatal, institucio-
silencio y la invisibilidad –y ahí ir construyendo nal, y las formas de transformación. En la política
elalmapública
ys
se trata de una política de los nadie, la política ya de política constituidas en el sistema; se vuelve en
no se sitúa en la noción experta, sino en el senti- sí misma una herramienta para la transformación.
do común. Un sentido común cada vez con mayor El zapatismo ha mostrado la posibilidad y el ca-
intelecto en el sentido social y con mayores herra- mino de constituir pueblos en resistencia y rebel-
mientas para definir el rumbo de la propia vida. día permanente, no como una forma de oponerse
Estos nadies adquieren la forma de colectivos y se al gobierno sino como una forma de construir la
configuran en las multitudes. Se trata entonces vida, una vida mejor, en libertad, para las comu-
de una política en primera persona, una política nidades autónomas. Los y las zapatistas han roto
de los anónimos, construida en colectivo que se con la visión elitista de la democracia, haciendo
relaciona con los otros como iguales, como cóm- de ésta una práctica cotidiana que deviene de to-
plices, como compañeros, no como espectadores dos los integrantes de una comunidad. Han mos-
votantes o víctimas; una política de la acción di- trado además que para gobernarse no se requiere
recta, sin representaciones, que se diferencia del de expertos, es un gobierno de todos en el que la
sistema de partidos y de la política institucional. función es “obedecer lo que el pueblo mande”. Esta
Una política de las mayorías anónimas, ésas que experiencia ha sido un referente mundial durante
mantienen al mundo, con el trabajo colectivo y los 23 años ya y su contribución es innegable. Hoy en-
saberes compartidos; que le apuestan a la recons- contramos en muchas partes, en distintas formas y
trucción de la vida y del mundo. Una política de tamaños experiencias autogestivas y autónomas. La
la solidaridad y de la existencia del otro, una polí- gente se está volcando a las calles y a las plazas, no
tica sin vanguardia, sin líderes, cotidiana, que “se para definir la gran ofensiva sino para trabajar en
la rifa en la chamba”; una política de los afectos y colectivo y hacerse cargo de proyectos educativos,
los deseos conjugados; una política de los cuerpos de comercio, de salud, de cultura.
frente a la máquina; una política sin mayor defi- Esta autorganización proviene de la reconfigu-
nición que la aspiración de “simplemente cambiar ración de los afectos, las subjetividades, los de-
el mundo”; una política local, regional, nacional seos, la revaloración de lo público, las mutaciones
con un contenido internacional; una política que de la sensibilidad que se gestan en las insurreccio-
busca “conservar del pasado no las cenizas sino el nes de las multitudes; por supuesto que no sólo
fuego” (Rodríguez Lascano, 1999), una política de ahí, pero ahí tiende a mostrar la potencia como
las pasiones, de la vida que resiste cada día. forma de construcción de esa nueva realidad. La
autorganización no se da de forma automática; los www.eldiario.es/interferencias/Notas-politica-estadocen-
trica_6_248535164.html, consultado en junio de 2016.
hábitos y las estructuras mentales y afectivas no se
____ (2015). Entrevista de Weber, M. en el cuarto ani-
cambian tan sólo en la toma de una plaza. Lo que versario del 15M: “Debes cambiar tu vida”, en El diario.
está sucediendo es que se convierte en una cues- es recuperado en http://www.eldiario.es/politica/nuevos-
partidos-existen-gracias-creado_0_390211997.html.
tión práctica movilizada por el afecto y el deseo de
Goldstein, Fred (2012). El capitalismo en un callejón sin salida.
transformación. Destrucción de empleo, sobreproducción y crisis en la era de la
tecnología- un punto de vista marxista, Traducción de Manuel
Talens y Atenea Acevedo, Word View Forum. EUA.
Guattari, Felix y Rolnik, Suely (2006). Micropolítica. Cartogra-
BIBLIOGRAFÍA fias del deseo. Madrid: Traficantes de sueños.
Aguiló Bonet, Antoni (2014). “Radicalidad democrática y nue- Hardt, M. y Negri, T. (2004). Multitud: Guerra y democracia en la
primavera-verano2017
vos movimientos populares: las luchas por otras democra- era del imperio. Madrid: Random House Mondador. Traduc-
cias”. Centro de Estudos Socias da Universidade de Coim- ción Juan Antonio Bravo.
bra, Revista Ágora, Vol. 1, Nº 2, 2014 - pp. 65-86. En http:// Macarof, A. (2010). “Desafíos para pensar el/los Sujeto/s de
dx.doi.org/10.6035/Kult-ur.2014, consultado en marzo de los movimientos sociales”. En http://www.flacsoandes.
2016. edu.ec/sites/default/files/agora/files/1265143818.micro-
Aguirre Rojas, Carlos (2012). “Las revueltas populares de 2011 soft_word_union_de_asambleas_ciudadanas_
en perspectiva histórica”, Contrahistorias, la otra mirada de episteme_1_0.pdf, consultado en abril de 2016.
Clio, Segunda Serie, N° 18, marzo-agosto 2012. Rodríguez Lascano, Sergio (2005). “La izquierda entre las ce-
42 43 Anguiano, Arturo (2015). “El despojo de lo político y maneras nizas y el fuego”, en Voltaire.net, http://www.voltairenet.
para recobrarlo”. Ponencia presentada en el Seminario El org/article125838.html, consultado en febrero de 2016.
elalmapública
Pensamiento Crítico frente a la Hidra Capitalista. CIDE- ____ (2014). “Tiempo de crisis, tiempo de rabia”. En
CI-Unitierra, Chiapas, México. Viento Sur, http://www.vientosur.info/documentos/ Tiem-
Aragués Estragués, Juan Manuel (2015). “Multitud y diferen- po%20de%20crisis.pdf, consultado en marzo de 2016.
cia: para una política materialista”. En http://ssociologos. Santos, Boaventura de Sousa (2015). Revueltas de indignación y
com/2015/03/04/multitud-y-diferencia-para-una-politi- otras conversas. Proyecto ALICE. Sucre: Stigma.
ca-materialista/, consultado en abril de 2016. Seoane, J. (2008). “Los movimientos sociales y el debate sobre
Beasley-Murray, Jon (2015). “La clave del cambio social no es el Estado y la democracia en América Latina”, en Moreno,
la ideología, sino los cuerpos, los afectos y los hábitos”. O. (coord.) Pensamiento contemporáneo. Principales debates
Entrevista realizada por Amador Fernández-Savater; en políticos del siglo XX, Teseo, Buenos Aires.
El público.es, http://www.eldiario.es/interferencias/Pode- Subcomandante Insurgente Marcos (2003). “Siete pensa-
mos-hegemonia-afectos_6_358774144.html; consulta- mientos en mayo”. Mayo de 2003. Disponible en www.
do en mayo de 2016. enlacezapatista.ezln.org.mx, consultado en abril de 2016.
Berardi, Franco (2014). La sublevación, México: Surplus. Thompson, Edward, P. (1979). “La economía moral de la mul-
Cava, Bruno (2015). “Podemos entre hegemonía y multitud: titud”. En Tradición, revuelta y consciencia de clase. Editorial
Laclau o Negri”. En Revista Lobo Suelto, Traducción San- Crítica, Barcelona.
tiago Arcos, en http://anarquiacoronada.blogspot.com. Wallerstein, Immanuel (2008). “La depresión una visión a lar-
es/2015/03/podemos-entre-hegemonia-y-multitud.html, go plazo”, Revista Apuesta, Revista Alternativa de Política y
consultado en marzo de 2016. Cultura, No. 3, Abril de 2008. Disponible en http://revis-
Estrada Saavedra, M. (2010). La anarquía organizada: las taapuesta.blogspot.mx/2008/10/la-depresin-visin-largo-
barricadas como el subsistema de seguridad de la Asamblea plazo-por.html, consultado en marzo de 2016.
Popular de los Pueblos de Oaxaca. Estudios Sociológicos, ____ (2012). “Las contradicciones de la primavera ára-
vol. XXVIII, núm. 84, septiembre-diciembre, 2010, pp. be”, Contrahistorias, la otra mirada de Clio, Segunda Serie,
903-939 El Colegio de México, A.C. Distrito Federal, No. 18, marzo-agosto 2012.
México. Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.
oa?id=59820671009, consultado en abril de 2016. Zapatistas: “Desde Grecia y el Estado español nos cuentan
de las asambleas populares”, en Revista electrónica Ea-
Fernández Christlieb, Pablo (2014). El sueño de las multitudes. gainst.com Demand the Impossible, 28/06/2011, en http://
La bestia social. Universidad Autónoma Metropolitana. eagainst.com/articles/zapatistasdesde-grecia-y-el-estado-
Unidad Iztapalapa. División de Ciencias Sociales y Huma- espanol-nos-cuentan-de-las-asambleas-populares/, con-
nidades. Tirant Humanidades. sultado en marzo de 2016.
Fernández-Savater, Amador (2014). “Notas sobre una políti- Zibechi, R. (2005). Latiendo resistencia. Mundos nuevos y guerras
ca no estadocéntrica”. En eldiario.es recopilado en http:// de despojo. Cooperativa El Rebozo, Palapa editorial. México.
El pensamiento es
social y el lenguaje
también:
Una aproximación
a la naturaleza pública ys
de lo que ya hace
un tiempo hemos
encerrado
E
n este trabajo se argumenta que la emergencia tanto del pensamiento
como del lenguaje se adjudica, se sitúa, se le debe al marco sociocul-
tural en el que las personas están inmersas, y no a individualidades
o maduraciones de sistemas nerviosos centrales. Intentando evitar
revolcar de nuevo la discusión adentro-afuera, individuo-sociedad,
se trata la importancia de lo colectivo para la formación psicológica
de la gente, más específicamente se argumenta lo basal del lenguaje
en la constitución del pensamiento. Un pensamiento y un lenguaje
de naturaleza social y cultural, o mejor dicho “sociocultural”. Eso es
de lo que en este espacio se habla.
El pensamiento, incluyendo su origen, su forma dividualista, no por temor sino por caer bien, nos
y su quehacer, ha sido tratado y maltratado desde es imposible no caer de vez en cuando en una que
hace ya un tiempo, y se le ha metido en la cabeza a otra referencia a ella, algo así como que, de mane-
las personas, de a uno en uno, señalando que hay ra muy formal, ésta ha estudiado al pensamiento
etapas, zonas y herencias que van permitiéndole y frente a la resolución de problemas que tienen una
modelándolo. Ante ese buen o mal trato, depen- sola respuesta correcta y, como el problema provoca
diendo de quién esté leyendo, que no siempre ha al pensamiento, parece que cuando se da con ella
dominado el terreno de la psicología, compartimos ya no hay nada más qué pensarse; algo así. Ojalá se
la interrogante de John Shotter: nos disculpe caer en provocaciones.Por cierto, so-
bre lo anterior Jerome Bruner ha dicho con algo de
primavera-verano2017
¿Por qué parecemos estar, por así decirlo, tan “fi- mordacidad que “la inteligencia es lo que miden las
jados” a la idea de que, en alguna parte de todos pruebas de inteligencia” (Bruner, 1990, p.111; énfa-
nosotros, debe haber una “mente” que trabaja de sis en el original), algo que puede dar una esperanza
acuerdo con ciertos principios sistemáticos ya exis- a todo aquel al que le haya ido mal en el WAIS. Sin
tentes o “naturales” y que, mediante los métodos más lugar para la defensa, comencemos a exponer
apropiados, sería posible descubrir? (Shotter, 1993, uno que otro pensamiento nada nuevo, nada nuevo
44 45 p.45; énfasis en eloriginal). por lo mismo que se argumenta aquí.
Después de algunas conversaciones con gente
elalmapública
Por qué posicionar al pensamiento en una es- como George Mead, Lev Vygotsky, Charles Blondel,
fera privada y luego decir con algo de vergüenza e Michael Billig, Pablo Fernández, Jorge Mendoza
ironía: “yo estaba pensando lo mismo”. Este bien y Valentín Voloshinov, entre otros, diremos que el
puede ser un punto de partida para hablar de cómo pensamiento se constituye pura y esencialmente
el pensamiento y el lenguaje no son ni tan privados en un proceso social, colectivo, comunitario, por
ni tan únicos como regularmente se piensa -iróni- medio del lenguaje, lo que“parece” indicar que no
camente-, es decir, éste parece un buen momento debe aprisionarse en el cerebro. Algo sabido por
para adentrarnos a ese terreno que frecuentemente Charles Blondel, quien argüía que por medio del
deja más huecos de los que cubre –porque publicar lenguaje “la experiencia colectiva lastra nuestra
un texto científico y serio (que decirlo así al pare- propia experiencia y la dota de su universalidad.
cer es redundar) es de gente seria y que sabe mu- Desde el momento, entonces, en que el lenguaje
cho, pero no cualquiera escribe algo bonito que se es social, es forzoso que el pensamiento, del cual él
entienda–, el de la discusión y la argumentación, es la condición, lo sea de igual manera” (Blondel,
aquel en el que todo mundo se quiere meter in- 1928, p.89). Así las palabras, los argumentos y las
tentando convencer a alguien de algo, de lo que conversaciones pueden concebirse como el germen
sea, olvidando frecuentemente que al escribir más del pensamiento,es esa interacción social la que
que convencer hay que conversar, platicar, discutir. se encarga de dotarlo de signos para poder operar,
Conversemos. pues, es cierto,sin éstos nada de lo que llamamos
“pensar” sería posible: el pensamiento es un hecho
SOBRE EL PENSAMIENTO ideológico-social gobernado por el conjunto de le-
Aunque, como se mencionó arriba, intentamos eva- yes de ese sistema (Voloshinov, 1930). Por tanto,
dir una confrontación directa con la psicología in- entendemos que Voloshinov (1930) enuncie que se
ys
le puede dar voz al habla interna, refiriéndose a la social está encarnada. Cuando uno piensa hace lo
voz del pensamiento, o mejor dicho “voces”; y a Bi- mismo que cuando conversa con alguien más, se
llig (2003) advirtiendo su naturaleza retórica: una “reproducen diálogos del mundo externo” (Men-
persona que piensa “provee dos conjuntos de argu- doza, 2012, p.72) en donde no sólo se habla para sí,
mentos y se divide en dos partes, las cuales debaten por lo que el pensamiento es dialógico y argumen-
y se refutan entre sí”(p.22). tativo. Por supuesto incluso estando a solas quien
En efecto, no se trata de un cúmulo de imágenes piensa se dirige a todos los otros, como ejemplo el
o “representaciones mentales”, sino de voces,de infante que quiere salir a jugar y piensa en los “pe-
discusiones, del toma y daca,en donde la actividad ros” que la madre le dará (debes comer primero;
no has hecho la tarea) y en los argumentos que voz la que lo ocupa sino las voces de toda la comu-
debe ofrecer (no tengo hambre; no tengo mucha nidad, resulta sensato advertir que en él “cada uno
tarea) a fin de convencerla, “la percepción mutua tiene su auditorio social establecido” (Voloshinov,
está siempre presente” (Vygotsky, 1934, p.167); no 1930, p.108; énfasis en el original), o en otras pala-
es que el niño llegue “en blanco” “a ver qué pasa”, bras: “el público que todos llevamos dentro” (Fer-
esperando que se le ilumine la corteza. Del mismo nández, 1994, p.79). Por supuesto que los libros
modo, pasar de “amigos” a “novios” o el robo de también ocupan una silla en el auditorio: uno tran-
un beso son cosas que requieren, o al menos de- quilamente puede enrostrarle todo lo que quiera a
berían requerir, de pensamientos profundos, de la Lev Vygotsky o a George Mead, por fortuna cuando
organización de palabras, de argumentos, de todo uno se les acerca de nuevo ni Vygotsky ni Mead se
primavera-verano2017
un plan de origen conversacional, contemplan- quedan callados, menos cuando se juntan. Es por
do posibles riesgos y triunfos a fin de concretar el ese público que nuestro mundo “interior” se ase-
atrevimiento –para el primer caso– o la “canalla- meja tanto a la estructura social en la que nos en-
da” –para el segundo–. En dicho plan el pensador contramos; todo pensamiento ha sido ya pensado
escucha la voz de aquella persona a la que quiere y dicho, esa es su condición operante: los significa-
enamorar o ultrajar, se recuerdan persuasiones y dos colectivos –valga la redundancia– que orien-
46 47 amenazas, en donde el conquistador o bandido tan al mundo. De modo que aquel al que le gusta
–depende del caso– le pregunta qué podría pasar pensar, tarde o temprano llega a darse cuenta de
elalmapública
y qué no, y se responde, se advierte, se da ánimos, que todo lo que se le ocurra ya se le había ocurrido
se convence. Así es como decide si sí o si no. De a alguien más (Fernández,2005).
tal manera es como se fracturan hermosas her- Entonces el pensamiento no emerge gracias al
mandades o nacen amores con lista de reproches. desarrollo fisiológico de las personas, sino que se
Y lo mismo sucede en la escuela cuando no se hace construye a través de las prácticas culturales en
la tarea o no se ha terminado un ejercicio, o en el que éstas participan,interiorizando al lenguaje; en
trabajo cuando se llega tarde o se falta un día an- palabras más consideradas: “la cultura crea “próte-
tes. En nuestro pensamiento siempre hay alguien sis” que nos permiten trascender nuestras limita-
más con quien conversamos para actuar, para decir ciones biológicas “en bruto”” (Bruner, 1990, p.52).
–que es lo mismo–, para llegar a obtener algo, llá- La naturaleza social del pensamiento ya había sido
mese decisión, permiso, disculpa, cariño, recuerdo propuesta hace casi un siglo por el mismo Mead
o argumento. Y si hay quien de eso sabe es Pablo (1934a), para quien éste es “simplemente una con-
Fernández, quien nos dice que quien piensa, quien versación subjetivada o implícita del individuo
“conversa interiormente, se convierte en alguien consigo mismo” (p.90), arguyendo que su esencia
más, en aquel al que le habla, al que puede inter- se halla en “la internalización en nuestra experien-
pelar, juzgar, criticar, animar, alentar, replicar, etc.” cia de las conversaciones de gestos externas que
(Fernández, 1994, p.79), la misma idea que tenían llevamos a cabo con otros individuos” (p.90); ahí
los antiguos retóricos al concebir al pensamiento la frecuente descuidada importancia de la psicolo-
como una argumentación silenciosa del alma con- gía contemporánea por el intercambio discursivo,
sigo misma (Billig,2003). por las palabras como traficantes de cultura y edifi-
Sabiendo que el pensamiento tiene la estructu- cadoras de pensamientos y realidades. De entender
ra de una conversación pública y que no es una sola los arrebatos expuestos arriba, de entender que “la
mayor parte de lo que consideramos pensamiento determinados grupos sociales, debemos aprender
racional puede apreciarse de forma más adecuada a hacer determinadas cosas de la manera correcta:
como un proceso social de argumentación” (Billig, cómo percibir, pensar, hablar, actuar, y experimen-
1987, en Gergen y Gergen, 2008, p.65), nos será tar el propio entorno de una forma que sea inteli-
posible comprender que es en el lenguaje donde se gible para quienes nos rodean (Shotter, 1993, p.79;
debe poner el acento al estudiar los pensamientos énfasis en el original).
de la gente. Es aquí que lo social enmarca nuestro pensa-
Volvamos. Dado que la actividad mental “ope- miento y realidad para regirnos desde esa esfera,
ra” con lenguaje, ésta no debe mirarse como un ob- pero, como Mead (1934a) bien arguye, en el obrar
jeto, pues sólo puede ser comprendida e interpre- del individuo que es ya consciente de sí siempre
tada como un signo (Voloshinov,1930). Veamos. Al hay algo de novedad gracias al “yo”. Es decir que
insertarnos en la actividad social no sólo hacemos si bien el pensamiento del individuo opera con y ys
uso del lenguaje para comunicarnos con los otros, desde un marco social –incluyendo sus valores y
sino también para gobernar nuestra conducta y actitudes–, es su “yo”, que emerge sólo por me-
comprender el mundo: las palabras nos hacen ob- dio de la experiencia colectiva y por los signos ya
servar cosas (¡Mira ahí!); nos hacen cambiar de internalizados, el que “rehúye o abraza o reevalúa
parecer (¡Míralo así!); ordenan nuestras acciones y reformula lo que la cultura le ofrece” (Bruner,
(¡Primero piénsalo y luego responde!); nos hacen 1990, p.118), lo que el “mí” –de Mead– contiene.
recordar (¿Qué hicimos la semana pasada?); nos La actividad social se internaliza y el individuo, ya
alientan (¡Inténtalo de nuevo!); evalúan (¡Eso está en un plano reflexivo, es “libre” de elegir la manera
bien!); nos hacen verificar nuestras propias des- en que va a actuar; esa es la esencia del gobierno
cripciones (¿Por qué crees que es así?), etc. (Shot- de la conducta. Sobre la misma línea Billig (2003)
ter, 1993). El lenguaje se vuelve el instrumento psi- asevera: “nuestras experiencias diarias son organi-
cológico primario a lo largo de toda la vida: primero zadas por reglas sociales, que no sólo nos hablan
se nos instruye con palabras y luego las internali- de la naturaleza del mundo social, sino que tam-
zamos para instruirnos de igual manera. bién nos proporcionan información sobre cómo
Es en este sentido que Bruner (1997) ha dicho actuar de manera apropiada” (p.16). La participa-
que nada está “libre de cultura”, pero que tampoco ción individual es entonces la reacción propia al
son los individuos simples espejos, y por supuesto medio social cuando el individuo ha adquirido ya
así es. La internalización del lenguaje no es perma- las actitudes de toda la comunidad. Así que, como
nentemente una réplica de la actividad social como Blondel (1928) anunciaba hace casi cien años, no
tal, específica en cada momento, si así fuese nos hay pensamiento posible sin experiencia colectiva
miraríamos como máquinas encargadas de repro- y sin lenguaje.
ducir exactamente lo que en nosotros se “guarda” La vida “interna” entonces no es tan privada
–metafóricamente hablando– y no habría oportu- como se piensa, el mentado intercambio social y
nidad para el desarrollo del colectivo. En el pensa- discursivo es el mismo que se halla en el pensa-
miento hay organización de acuerdo al marco de la miento, por esta razón sostenemos que este último
misma experiencia social para decidir entre unas u “nace fuera, en el campo interactivo” (Fernández,
otras maneras de obrar. ¿Cómo? En un primer mo- 1994, p.79) y la individualidad está permanente-
mento al aprender a ser miembros responsables de mente condicionada por la experiencia colectiva,
Son todos en uno, ellos en mí, o en términos meadianos:
“yo” ante “mí”, y por más individualidad que se le quiera
notar a una persona, su pensamiento y su percepción del
mundo son naturalmente de orden social.
en otros términos: en todo momento la interpre- ces y los valores de los otros se encuentran del otro
tación de las cosas implica una iniciación social lado de la mesa, de ahí que incluso los pensadores
primavera-verano2017
(Blondel, 1928), pues “nuestro pensamiento no antiguos ya lo concibieran como un diálogo inter-
dispone de géneros, sobre todo de géneros supe- no (Voloshinov, 1930). Como sea, el pensamiento
riores, como si dispusiéramos de las palabras co- no anda con nosotros, acompañándonos en cier-
rrespondientes. Solamente el vocabulario puede tos momentos para sacarnos de problemas “se-
darnos la noción”(p.88). rios”, como un vidrio roto, un enredo con alguien
Entonces Mead (1934b) acertaba al declarar que o un examen, lo cierto es que nosotros andamos
48 49 “aun cuando una persona parece volverse hacia su en el pensamiento, siempre, respirándolo cada que
interior con el fin de vivir entre sus propias ideas, conversamos. Es decir: “el pensamiento anda suel-
elalmapública
está en verdad viviendo con otros que han pensa- to por la ciudad, y no encerrado en las conciencias
do (y dicho) lo que está pensando” (p.387; parén- de los individuos” (Fernández, 1991,p.10).
tesis agregado). Son todos en uno, ellos en mí, o
en términos meadianos: “yo” ante “mí”, y por más SOBRE EL LENGUAJE
individualidad que se le quiera notar a una perso- El lenguaje, igual que el pensamiento, ha sido se-
na, su pensamiento y su percepción del mundo son ñalado por la psicología solipsista como una ca-
naturalmente de orden social. Como un arquitecto pacidad individual y hasta instintiva (vgr. Pinker,
en un predio, lo colectivo en un individuo va cons- 1994), es decir un producto del desarrollo bioló-
truyendo, va delineando lo psicológico, y una vez gico, y los más indulgentes nos dicen que ser el
edificada la obra ya se le pinta y se le vuelve a pintar, traductor del pensamiento es su principal función.
se le cuelgan cuadros e ilusiones, se le quiere y se le Pero tanto pensamiento como lenguaje no residen
bendicen espacios, se le ponen muebles y personas, en nosotros, sino somos nosotros los que nos en-
así el pensamiento se va decorando, igual que una contramos en ellos, ya lo decía Charles Sanders
casa, que el individuo jura que es suya olvidando al Peirce: “así como decimos que un cuerpo está en
arquitecto que la levantó. Blondel (1928) exponía movimiento y no que el movimiento está en un
algo así, pero con más delicadeza: “nosotros termi- cuerpo, así debemos decir que nosotros estamos
namos por ser, en lo que se refiere a nuestra propia en el pensamiento, y no que el pensamiento está
conciencia […] palabras que se desbastan, y lo que en nosotros” (en Fernández, 1991, p.01), cierto.
de individual puede haber en nosotros se disimu- Como arriba se menciona, en el lenguaje hallamos
la a nuestros propios ojos bajo un revestimiento la clave para entender el pensamiento, ya que es a
social” (p.105). Podemos ahora concebir al pensa- través de signos que este último opera y no sólo
miento como una sigilosa tertulia en la que las vo- se manifiesta; en ese sentido y como ejecutivo de
call center, Vygotsky (1934) anunciaba lo que nadie colectiva. George Mead nos da un claro ejemplo de
quería comprar: el pensamiento no encuentra en el ello: “alguien dijo una vez que tenía grandes difi-
lenguaje una mera expresión, sino que halla en él cultades para escribir poesía; poseía muchas ideas
su realidad y su forma. pero no podía conseguir el lenguaje que necesitaba.
Sin más ni menos, el lenguaje es un sistema de Se le dijo, correctamente, que la poesía se escribía
signos a través del cual internalizamos y compren- con palabras, no con ideas” (Mead, 1934a, p.179).
demos el mundo en que vivimos, “la colectividad Y Blondel (1928), por su parte, asevera que el len-
se instala, se incorpora en nosotros, a través de guaje es cosa social, por lo que ningún sistema con-
la palabra” (Blondel, 1928, p.104-105); por lo que ceptual puede ser creado fuera de una colectividad.
todo signo no es sólo un reflejo o una sombra de Sabiendo que la génesis y la estructura del len-
la realidad, sino también un segmento material de guaje son de orden social (y recordando nuestra
ys
ella (Voloshinov, 1930). Dicho de otro modo, en las plática sobre el pensamiento), es claro que lo psi-
palabras que internalizamos va la vida social mis- cológico debe estar forzosamente dibujado por la
ma, el lenguaje es “el marco dentro del cual lo real comunidad a la que personas pertenecen, primero
es cognoscible, reconocible, comunicable y cons- viene la palabra, luego la idea, después, por fin, al-
tatable” (Fernández, 1994, p.88). Aunque si bien gunas veces, la cosa. Ésta no sería para nosotros lo
con el pasar del tiempo las comunidades se apro- que es, sin la idea que tenemos de ella, ni la idea
pian y/o construyen nuevas palabras o conceptos sin la palabra. El niño habla del mar, sabe que es
ad hoc a sus necesidades o caprichos, éstas siempre grande, verde o azul, antes de haberlo visto nun-
emergen de negociaciones y acuerdos sociales. Por ca. Nuestras conciencias de adultos están llenas de
ejemplo la palabra “bullying”, un anglicismo del estos mares, de los cuales nunca veremos la orilla,
que lo psicólogos se han apropiado para referirse de los cuales no adivinaremos la existencia, si la co-
al “acoso escolar”, algo que ha existido siempre, lectividad no nos revelara a través del lenguaje que
pero ahora el reconocimiento y uso de éste con- ellos existen y cómo son (Blondel, 1928,p.104).
cepto forma parte de la realidad social y del pen- Así sucede. Al adentrarnos al mundo social nos
samiento colectivo; siendo de gran utilidad hasta apropiamos de una cultura y un lenguaje que nos
para pedir trabajo o publicar libros. Entonces “no posibilita pensar y comprender el mundo, la vida,
existen signos en la naturaleza ni se constituyen lo que llevó a Vygotsky (1934) a proponer que “el
por generación espontánea, son una entera crea- pensamiento no se expresa simplemente en pala-
ción del ser social” (Medina, 2007, p.69), o sea que bras, sino que existe a través de ellas” (p. 147), y a
la vida de las palabras depende de que la interpre- Halbwachs (1925, en Mendoza, 2015) a decir que
tación de las mismas sea compartida, comunitaria, “los hombres piensan en común por medio del
50 51
elalmapública
lenguaje”(p.74). No son los ojos los que nos mues- ligibilidad y de la legitimación de las pretensiones
tran qué hay de frente ni por donde caminamos, es de verdad” (p.53; paréntesis agregado), lo mismo
el lenguaje el que nos permite ver (primero) y mirar que señala Potter (1996) al postular que el lenguaje
(después), temer y desear –aún no se ha sabido de refleja cómo son las cosas mediante descripciones
algún infante que, al echar un vistazo debajo de la y relatos, y que es sólo cuando estas descripciones
cama, se haya enfrentado al “coco” sin que haya de y relatos se divulgan por el mundo de los asuntos
por medio una madre ocupada que le haya contado humanos que se pueden considerar fiables. Hay
la historia (por cierto, les cuento que el “coco” fue razón en ambos. Uno halla en el lenguaje el signi-
gran amigo de sus madres, igual que la niñera)–. ficado de todo, de los sentimientos, de las cosas, de
Éste“crea o constituye el conocimiento de la reali- las situaciones: sabe lo que es un libro, una casa, el
dad” (Bruner, 1986, p.137), y hablando del carácter cariño, el desprecio, una “buena” o “mala” acción y
constructivo del lenguaje, Shotter (1993) esgrime hasta el peligro y el miedo... Por ello, con aires poé-
que “vivimos nuestra vida social diaria en una at- ticos pero concienzudos, se dice que “el universo es
mosfera de conversación, discusión, argumenta- un relato” (De los Ríos, 2011, p. 20). Expliquemos
ción, negociación, crítica y justificación; (donde) tomando prestado un simpático y elocuente ejem-
gran parte de ello se refiere a problemas de inte- plo de Richard Bloch que Blondel (1928) cita:
un niño […] se para delante de una maravilla azul, elegimos la manera en que nos comportaremos, ya
exclama su admiración, llama al mundo entero a lo recitaba Potter (1996): “el lenguaje construye la
su socorro. Pasa una persona mayor: es un hombre percepción que las personas tienen del mundo”
informado que lee un diario; echa un vistazo y, en (p.133); y Mendoza (2015) a su manera: “… pensa-
un tono medio escandalizado, dice: “¿Y bien? No es mos con palabras; y la manera en que percibimos
más que un escarabajo” Habiendo llevado de nuevo la esos vocablos, lo que significan y las relaciones que
sensación virgen al cuadro de la nomenclatura, habien- de ellos se desprenden también ejercen influencia
do hecho regresar el posible accidente a lo ya visto (noso- en lo que percibimos y sentimos”(p.75).
tros lo subrayamos), la persona se tranquiliza y se aleja Tanto es importante entender que la percepción
(p.128; énfasis y paréntesis en el original). y el conocimiento que tenemos del mundo están
situados dentro de un marco social, es decir, que
En el ejemplo el infante bien pudo haber visto los objetos y las situaciones no son independien- ys
una araña o una hormiga –“de esas que sí pican”–, tes de lo que acordamos colectivamente que sean
de ahí que se escandalice y se encuentre temero- (Íñiguez, Martínez y Flores, 2011), como también
so. Lo fascinante de la situación ocurre cuando la lo es entender que los significados del lenguaje son
persona le muestra –con palabras– que es sólo un situacionales, emergentes de una participación
escarabajo, y en realidad no sólo le está diciendo discursiva específica. Veamos. El lenguaje es un sis-
que es un escarabajo, sino también le está mostran- tema no uniforme que debe sus significaciones, la
do un trazo del mundo: el nombre del insecto, la interpretación de sus signos, al momento en que
ausencia de peligro, lo que debe o no sentir frente se les requiere, lo que no descuida Billig (2003) al
a él, etc. Ahora imaginemos que al llamado del in- argüir que “el significado de una pieza de razona-
fante acude primero su madre, quien no sabe qué miento discursivo o de una actitud expresada, no
insecto es pero se le parece a una araña, entonces reside meramente en el agregado de definiciones
dice al infante “aléjate, te va a picar” –aunque las de diccionario de las palabras usadas para expresar
arañas muerdan– y es cuando llega la persona que una postura, sino que también reside en el contexto
sabe que es sólo un escarabajo y se los dice, es has- argumentativo” (p.19); es de tal modo que “el dis-
ta entonces que ambos se tranquilizan. Frente a tal curso se compromete directamente con un aconte-
situación podemos cuestionarnos lo siguiente: ¿el cimiento de la vida y se mezcla con él formando una
peligro se encuentra en el insecto o en el lenguaje? unidad indisoluble. Por supuesto, el discurso en
Claro, el lector ha acertado, el peligro se halla en el sí, como un fenómeno puramente lingüístico, no
lenguaje –igual que el miedo–, en la realidad que puede ser verdadero o falso, osado o tímido” (Vo-
éste lleva en sí; pues el insecto es de cualquier ma- loshinov, 1987, p.175). En situaciones concretas, en
nera inofensivo, pero el infante no lo sabe, se aterra el contacto,es que el lenguaje halla sentido, por ello
con lo que su madre le dice y se calma con lo dicho Fernández (1994) asevera que éste es un acuerdo
por la otra persona: el lenguaje impone una pers- colectivo que tiene ya descrita la realidad antes de
pectiva en la cual se ven las cosas y una actitud ha- que ésta acontezca, pero que también se verifica en
cia lo que miramos (Bruner, 1986), por lo que son la realidad a cada momento. Y lo que sucede en la
los significados culturales los que guían y contro- escuela nos sirve para ilustrarlo brevemente: cuan-
lan nuestros actos individuales (Bruner, 1990). Así do en una sesión de historia general el enseñante
la realidad y el pensamiento se yerguen, así es como muestra a sus alumnos una imagen en la que se
puede apreciar una nube de humo y señala que en tos, sentimientos y memorias se construyen como
la segunda guerra mundial Estados Unidos envió parte del establecimiento de versiones de eventos y
una “bomba” a Hiroshima y otra a Nagasaki, el sig- viceversa (Potter y Hepburn,2007).
nificado de la palabra “bomba” no sólo es de la pa- Nos parece que ha quedado claro que no ha-
labra, sino del enunciado, del discurso, de la clase blamos de individuos capaces de crear un sistema
de historia y de la imagen: los alumnos se remiten a conceptual, ya que “la palabra no existe en un len-
un aparato explosivo. Y lo mismo ocurre cuando el guaje neutro o impersonal, sino que existe en la-
infante está por salir a jugar y nota que su bicicleta bios de otras personas” (Bajtín, 1981, en Mercer,
tiene una llanta sin aire, si el niño va en busca de 2001, p.93), siendo así una propiedad colectiva en
ayuda con su padre y este último le dice: “no sé si donde los significados no pueden ser ni privados
primavera-verano2017
está ponchada o sólo está baja… Trae la “bomba””, ni individuales –igual que no lo es el pensamien-
el significado –igual que en el ejemplo de la escue- to–. El lenguaje está ahí, en el medio: es en las con-
la– se encuentra en la relación palabra-situación; versaciones que las personas tienen y en los libros
el infante sabe que debe buscar ese aparato con el que leen que se labran un pensamiento y un modo
que las llantas se inflan, no piensa en conseguir un de ver la vida; la misma posición que puede encon-
explosivo para destruir su bicicleta –al menos no trarse en el pensamiento de Íñiguez et al. (2011),
52 53 cuando ya piensa con ambas“bombas”–. quienes sostienen que la realidad psicológica se
Es así como al lenguaje no se le puede separar construye a través de intercambios simbólicos y
elalmapública
de las prácticas sociales en las que las personas par- prácticas discursivas; y también en el de Darnton
ticipan, y si alguien lo sabía era Voloshinov (1987), (1984) al escucharle que el pensamiento está mo-
quien hablaba de ese contexto extra verbal argu- delado por la cultura, por los relatos.
yendo que la situación se incorpora al enunciado En síntesis. El lenguaje trafica cultura y reali-
para formar la estructura de su significado, y que dad, contrabandea pensamientos. No por nada
“el lenguaje adquiere vida y desarrollo […] en la se dice que éste es “el espacio social de las ideas”
comunicación verbal concreta, y no en el abstracto (Blondel, 1928) (p.87), o el pensamiento de la so-
sistema lingüístico de formas de la lengua, ni en la ciedad y su modo de ver la vida (Fernández, 2005).
psiquis individual de los hablantes” (Voloshinov, Ciertamente, la relación entre pensamiento y len-
1930, p.120), por lo que, volviendo al marco edu- guaje es tan íntima que no existe el primero sin el
cativo, no basta con dejar que los infantes “descu- segundo y luego viceversa: “una palabra sin pen-
bran” por sí mismos el conocimiento, como si se samiento es una cosa muerta, y un pensamiento
tratara de ir en solitario quitándole de a poco la desprovisto de palabra permanece en la sombra”
envoltura a la vida, sino que se debe orientar a los (Vygotsky, 1934, p.175). Desde hace tiempo se ha
niños por medio del lenguaje y enseñarles mejores trabajado esta idea sobre la naturaleza y la esencia
maneras de usar este último para pensar juntos constructiva del lenguaje, el mismo tiempo que ha
y, así, construir conocimiento, un conocimiento sido desdeñada, maltratada o concebida como su-
compartido. Es cierto que la construcción de la rea- plementaria, hace varias décadas que hemos inten-
lidad es igual que lo que se hace en el pensamiento, tado entrar en el pensamiento a través de las cabe-
un ir y venir de lo ya establecido colectivamente y zas, a tientas, a pruebas y a problemas, hace tanto
de la propia experiencia en las prácticas sociales, de que nos hemos encerrado y hemos encerrado todo,
modo que las versiones de nuestros pensamien- encontrando en los laboratorios la verdad y en lo
cotidiano superfluidad, sin querer notar lo innega-
ble: conocer o “imaginar un lenguaje es (conocer
o) imaginar una forma de vida” (Wittgenstein, en
Shotter, 1993, p.56; paréntesis agregado), un modo
de pensar.
ys
gundo norteamericano) que, hasta donde se sabe,
no tuvieron la fortuna de conocerse, aunque de ser
así seguramente se hubiesen entendido más que
bien y nosotros tendríamos ahora una revolucio-
nada psicología social. Por suerte, aunque cada uno
a su maravillosa manera, ambos dieron cuenta de
la importancia del andar colectivo y del lenguaje
en la constitución del pensamiento. Expongamos
de manera muy general algunos indicios de una
misma mirada sobre el lenguaje y el pensamiento
desde dos psicologías: la cultural de Vygotsky y la
social de Mead.
Para Vygotsky el lenguaje es un instrumento
psicológico que se halla en la cultura, mientras
que para Mead es un sistema de signos negocia-
do en colectividad. El primero de ellos sostiene
que las palabras llevan en sí significados que les
permiten su uso y existencia, en tanto que el se-
gundo arguye que sólo con símbolos significan-
tes el lenguaje puede crear situaciones y objetos,
es decir, ambos dicen lo mismo. El soviético y el
norteamericano coinciden en que la unidad basal
del lenguaje es el significado, y lo posicionan –
al lenguaje– como un medio que trafica cultura,
permite el desarrollo del intelecto y posibilita edi-
ficar una realidad social; ambos advierten que no
es un instrumento o sistema de signos de propie-
dad privada sino pública, o sea social y cultural,
y que la apropiación de éste ocurre en términos
interaccionales, en el intercambio con los otros impregnada de significaciones o interpretaciones
miembros de la colectividad. Así que para Vygots- comunes para que las personas puedan entenderse
ky y Mead el lenguaje es esencial en el desarrollo y apropiarse de toda una carga cultural. Vygotsky
psicológico de los individuos. ofrece grandes aportaciones al hablar de la media-
De igual manera, tanto en descripción como en ción –instrucción– escolar y la zona de desarrollo
idea, la naturaleza del pensamiento fue advertida próximo, arguyendo que el desarrollo de lo men-
por Vygotsky y por Mead. Vygotsky (1934) afirma tal en los infantes bien puede provocarse cuando
que el pensamiento no encuentra en el lenguaje se les proporciona ayuda, y que en cierto momento
una mera expresión, sino que halla en él su reali- esos infantes pueden hacer por sí mismos lo que
dad y su forma, de ahí que inicialmente lo llame antes no podían en solitario. Mead también habla
primavera-verano2017
“pensamiento verbal”; Mead (1934a), por su parte, del intercambio conversacional como una práctica
arguye que el pensamiento no es más que el uso de que posibilita que los procesos intelectuales se de-
los símbolos significantes prescindiendo de voca- sarrollen y complejicen, sosteniendo que es en ese
lización, un diálogo interno entre un “yo” cons- intercambio que el individuo se ve posibilitado a
ciente y un “mí” social. Para ambos pensadores el pensar y a hacer cosas. En estos términos interac-
pensamiento es la internalización del lenguaje, cionales, el soviético esgrime el proceso de resigni-
54 55 el primero hace hincapié en que la estructura del ficación en que el infante transita: de lo concreto
pensamiento es la misma que la del lenguaje ego- a lo abstracto, de los conceptos espontáneos a los
elalmapública
céntrico, y el segundo propone que pensar es in- conceptos científicos, donde estos últimos forman
ternalizar las relaciones sociales y llevar a cabo una jerarquías y generalidades que llevan al infante a
conversación con sí mismo. Coinciden en que el reorganizar todo su repertorio, algo que, advier-
pensamiento se constituye por medio del lenguaje te, demanda conciencia y control. Mientras que el
y no es más que un soliloquio “interno” que se lleva norteamericano propone que en un principio el in-
a cabo dentro del marco de la percepción grupal o fante opera con gestos que sólo tienen sentido –no
colectiva. Por ello, aseguran, no es posible ubicarlo significado–, para después apropiarse de símbolos
dentro de la cabeza de las personas, sino que éste significantes –con los que opera el pensamiento–,
también debe situarse forzosamente afuera: en lo lo que permite la adquisición de “universales” (al
cultural, en lo social, en lo colectivo. parecer los conceptos de Vygotsky). Es cuando el in-
Dentro de las esferas vygotskyana y meadiana se fante ya ha transitado por ese proceso, dirá Mead,
habla de cómo es que el lenguaje y el pensamiento que es capaz de provocar en sí mismo lo que pro-
se van edificando. Vygotsky señala que las prácticas voca en los otros: emerge la conciencia reflexiva
culturales son determinantes en el desarrollo del y el gobierno de la conducta. Dicho sea de paso,
lenguaje y del pensamiento y que la comunicación Vygotsky y Mead también anunciarán que el juego/
inteligente sólo se da en presencia de signos; en juego organizado (respectivamente) es una impor-
tanto que para Mead la comunicación inteligente tante práctica cotidiana en la que el infante puede
ocurre únicamente a través de gestos que son sím- no sólo reconocerse como un miembro social, sino
bolos significantes, él mismo dirá que sólo en tér- que puede adoptar las actitudes de todos los otros
minos de estos gestos es que puede existir el pensa- a fin de organizar el pensamiento y guiar su actuar
miento (Mead, 1934a). Tanto Vygotsky como Mead de acuerdo a las reglas y los propósitos colectivos.
proponen que la comunicación debe encontrarse Y de nuevo dos pensadores, separados por un mar,
miran igual y reconocen un mismo proceso de re- y el “mí” –en el pensamiento–, en donde el actuar
significación: el niño no se apropia del significado del individuo tiende a modificar su medio. El nor-
de una vez y para siempre, pues éste está sujeto a teamericano anuncia que cuando esto sucede el
una evolución y modificación durante el proceso individuo cambia, pero al hacerse un individuo di-
social de formación, el gobierno de la conducta y la ferente también afecta a su comunidad, lo que per-
conciencia/conciencia reflexiva son el producto de mite la posibilidad de una sociedad más altamente
toda una serie de prácticas culturales en las que los organizada.
infantes participan. Presentar al menos una somera comparación
Es tal la importancia que Vygotsky y Mead dan entre las propuestas de Vygotsky y las de Mead es
al lenguaje, que uno y otro sostienen que éste es el una tarea que puede poner en vergüenza a cual-
principal medio para instruirnos, antes y después quiera –como en este caso–, la confluencia de sus
de interiorizarlo. Vygotsky (1978) lo proponía al obras está por encima de un par de páginas y de ys
decir que el lenguaje es un instrumento con fines una descripción medio miope, sin embargo, se ha
prácticos: “los infantes resuelven tareas con ayu- querido platicar la idea de esa convergencia, más
da del lenguaje, así como con la de sus ojos y sus que lo puntual de la misma, para alentar a aquél
manos” (p.49), y aunque al decir esto se refiere con el que ahora conversamos a acercarse con la
al lenguaje egocéntrico, recordemos que para él el misma mirada de aquí –no con la miope, sino con
pensamiento tiene esa misma estructura, por lo la que mira convergencia– a esos titanes que ojalá
que al pensar hacemos lo mismo: hablamos aun- pronto de discretos ya tengan nada, a esos que en
que no se nos pueda escuchar. Mead (1934a) tam- una misma época pero en distintos lugares y sin
bién lo advierte al señalar que “hay más tendencia conocerse, andaban en los mismos pensamientos.
a descubrirse y dominarse en el gesto vocal que en Cuánto hay de cierto en eso de que “la más amplia
la expresión del semblante” (p.105), de manera que comunidad en la que se encuentra el individuo, la
al escucharnos hablar –razona– podemos prestar que está en todas partes y para todos, es el mundo
atención; y una vez prescindiendo de vocalización, del pensamiento” (Mead, 1994a,p.225).
el pensamiento se torna preparatorio de la acción
social. De modo que ambos sostienen que es con SOBRE OTRO CURIOSO CASO (NI TAN
el lenguaje que podemos guiar nuestro obrar y mo- DIVINO): LA PALABRA DE DIOS EN EL
dificar el ambiente. Y por cierto, Vygotsky asevera PENSAMIENTO.
que un nuevo tipo de percepción interna significa La gente crucificó a Nietzsche cuando gritó aquello
también un cambio hacia un tipo superior de acti- de que “Dios ha muerto”, y aunque había razón en
vidad que permite al individuo modificar el proceso el hombre, jamás la habría en la fe. Pero, ¿qué es
y entablar con él relaciones diferentes, además de cierto? , ¿cuál es el lado bueno? (porque para Dios y
que encuentra una íntima relación en el dominio sus hijos quien no está con ellos está en su contra):
de la naturaleza y el de la conducta, ya que, asegura, ¿Dios vivo o Dios muerto? Es cierto: Dios vive, lo
“la alteración de la naturaleza por parte del hombre que no quiere decir que exista. Expliquemos. Aun-
altera, a su vez, la propia naturaleza del hombre” que es cierto que Dios no existe, también es cierto
(Vygotsky, 1978, p.91). A lo que Mead (1934a) hace que vive en y para el grueso de la(s) sociedad(es), lo
referencia al argüir que es cuando se tiene concien- que se debe a que ocupa una parte importante en la
cia de sí que se sostiene una discusión entre el “yo” carga cultural que se trafica por medio del lenguaje.
“Dios es omnipresente”, gritan los más educa- bodas, los curas, los fieles (esos que sí van a misa),
dos de sus hijos, y tienen razón, en todas partes se las personas que sudorosas tocan a las puertas aje-
le menciona, en todos lados está de diferente for- nas en busca de colegas o adoloridos con tiempo
ma. Desde la madre que lo manda como guardaes- para una conversación o una lectura, entre tanto,
paldas: “ve con Dios” o “que Dios te proteja” o “que son espacios, artefactos, prácticas socioculturales o
Dios te cuide”, eso sí, poniéndole primero al hijo personas que se encargan de contener a Dios, ahí o
o al marido el chaleco antibalas de la frente hacia con ellos sí se le puede abrazar mientras se conversa,
el pecho y de un hombro hacia el otro; hasta el re- mientras se lee, mientras se mira. No es difícil notar
pelente de choques y de bandidos en el camión en que si uno se detiene, si uno se mete o si uno abre la
forma de estampa moderna, ese que arriba del pa- puerta, los espacios y las personas suelen hablar tan-
primavera-verano2017
rabrisas dice “Dios guía mi camino” o “Dios cuida to de él como con él. Es a través de las oraciones y de
de mí”, el que es suficiente protección para ir a 70 las súplicas, de los sermones y de las bendiciones, es
(kmph) en una calle que apenas da para 15 (kmph), a través del lenguaje que Dios sigue viviendo y sigue
aunque el chofer no tenga idea ni permiso de con- habitando en el pensamiento. Entonces podríamos
ducir, y qué importa, si cuando se le pregunta –a decir que Nietzsche formuló mal su argumento (di-
él y a cualquier automovilista atrevido– “¿traes li- cho esto con toda la dosis de ironía posible) o que no
56 57 cencia?” Frecuentemente uno escucha como res- sabía de psicología social, pero también podríamos
puesta: “la de Dios”. No hace falta acudir a misa decir que si se quiere asesinar a Dios, si se le quie-
elalmapública
los domingos para tener la seguridad de que sus re exterminar, no hace falta pecar tanto ni hace falta
representantes humanos se encargan, y se encar- hablar pestes de él (lo que contribuye también a su
gan bien, de no dejarlo morir; lo que si hace falta “vida eterna”), basta con mantenerse en silencio,
es rezar para sentirlo cerca, así la misa además de con dejar de mencionarlo por un tiempo, basta con
ser un ritual religioso es un quirófano, un cuarto sólo llevarlo en el alma, sin artefactos con explicacio-
en donde mientras más se habla, mientras más se nes, a ver si la cruz colgada en la pared de la sala o de
alaba, Dios más puede seguir en pie. la recámara no se convierte en una “t” para nuestros
Las iglesias, los confesionarios, las cruces, los hijos… A ver cuánto tiempo Dios puede sobrevivir
rosarios, los bautizos, las primeras comuniones, las en el pensamiento y en el corazón.
A MANERA DE CONCLUSIÓN… parece que en lo que Descartes plantea se le puede
Después de conversar acerca de la naturaleza social, notar extraviado, lo que se debe, sí, a la falta de re-
cultural, colectiva, del pensamiento y del lenguaje, cursos sígnicos (Descartes no encuentra palabras),
nos vemos obligados a caer en la misma trampa pero, en consecuencia, a la ausencia de pensamien-
que la gente a la que en un inicio se hacía referencia to; recordando que éste se constituye, emerge, se
al hablar del terreno en el que todos nos queremos organiza por medio del lenguaje, en menos pala-
meter, y en las palabras de René Descartes encon- bras: el pensamiento se yergue en signos. Por tanto:
tramos una buena oportunidad para persuadir a Descartes no puede decir lo que piensa = Descartes no
quien lee hacia nuestra línea de comprensión: ha pensado lo que quiere decir.
Las andanzas colectivas de cada persona no son
Tan serias son las dudas en que he caído (…) que el resultado de sus originales o innatas maneras de
ys
no puedo ni expulsarlas de mi mente ni ver modo pensar y de ser para con los demás, sino viceversa,
alguno de resolverlas. La sensación que tengo es cada ser humano se convierte en un ser social, en
la de haber caído en forma súbita en una vorágine un “elemento en activo”, siempre que comienza a
profunda que me hace rebotar de un lado a otro, escuchar, a conversar con otros, a interiorizar las
de modo que no puedo ni hacer pie en el fondo ni relaciones sociales a través del lenguaje. Dicho de
nadar hasta la superficie (Descartes, 1641, en Hum- otro modo, lo que va modelando, delineando, co-
phrey, 1992, p.28). sechando, trazando lo psicológico, al pensamien-
to, es esa especie de mente exterior, sociocultu-
Dentro de la psicología que pone el acento en ral, a la que a palabras, a significados nos vamos
que el pensamiento va avanzado al lenguaje, po- metiendo.“Yo estaba pensando lo mismo” es una
dríamos decir que Descartes piensa, y que piensa frase que, más allá de decirse por quedar bien, nos
mucho, pero con todo y su “poderío intelectual” permite entender que las personas compartimos
hablaríamos de un Descartes profundamente em- más que sólo gustos o intereses, porque en tanto
pobrecido de lenguaje, un erudito con un ligero in- coincidimos en épocas y en signos, compartimos
conveniente para “expresarse”; y no nos parece esa formas de ver el mundo, de ver la vida, formas de
una aproximación acertada. Por el contrario, nos pensar y de sentir.
BIBLIOGRAFÍA
Billig, M. (2003). Pensando y argumentando. Entornos. Revista Mead, G.H. (1934a). Espíritu, persona y sociedad. Desde el punto
de Divulgación de las Ciencias Sociales. 1 (2), pp. 10-28. (Obra de vista del conductismo social. México: Paidós, 1990.
original publicada en 1986). Mead, G.H. (1934b). Fragmentos de ética. En G. H. Mead
Blondel, Ch. (1928). Introducción a la psicología colectiva. Bue- (1990), Escritos políticos y filosóficos (pp. 383-390). Buenos
nos Aires, Argentina: Troquel, 1966. Aires, Argentina: Fondo de Cultura Económica.
Bruner, J. (1986). Realidad mental y mundos posibles. Barcelona, Medina, A. (2007). Pensamiento y lenguaje. Enfoques constructi-
España: Gedisa, 2004. vistas. México: McGraw-Hill.
Bruner, J. (1990). Actos de significado. Madrid, España: Alianza, Mendoza, J. (2012). Vygotsky y Bajtín: construcción social del
2006. conocimiento. En J. Mendoza, J. S. Sánchez y G. Martínez
(Comp.), La construcción del conocimiento, miradas desde la
Bruner, J. (1997). La educación, puerta de la cultura. Madrid, Es- psicología educativa (pp. 63-94). México: UPN.
paña: Visor, 1999.
primavera-verano2017
Gabriel Zaid,
El secreto de la fama
Solo es un ser
ys
ys
ría mi objeto favorito sin los pensamientos que valía la pena arriesgarse a ser los culpables
se me ocurren cuando paso por ese lugar casi de romperlo.
todos los días, cuando me detengo a reflexionar
• Lo conozco mejor que la palma de mi mano
sobre lo que me ha ocurrido durante el día.
(aunque todos sabemos que nadie conoce
Haré una lista de los criterios que utilicé
realmente tan bien la palma de su mano),
para considerarlo mi “objeto” favorito:
pues con el paso del tiempo, y especialmen-
te en los días en que me siento aburrida o
• Me permite pensar con claridad (cosa que
tengo mucha curiosidad, me he dedicado a
hoy pocos lugares permiten), lejos del bu-
prestar atención a cada detalle que me en-
llicio, de la gente y de los vendedores que
cuentro a lo largo de él: la ropa en la tienda
piden a gritos sacarte de tus pensamientos
hinduista al lado del restaurante vegano,
libres más profundos para ofrecerte una
el olor de la panadería y el restaurante de
“Pluma barata, pluma de novedad a solo $5
carne al carbón, las herramientas de la re-
pesos, que en Sanborns le viene valiendo
faccionaría que se encuentran tiradas gene-
hasta en $50”.
ralmente en el suelo, siempre con el corres-
• Es un lugar que me permite reflexionar pondiente olor a gasolina, los precios de los
sobre lo que he vivido en el día, pues son cortes de cabello, mechas, luces, extensiones
incontables las veces que me ha visto reír, y hasta depilación de bigote de las cinco
sentirme ansiosa de llegar a casa, arrepentir- estéticas que hay en los 750 metros para
me, preocuparme e incluso llorar. llegar a mi casa —¿Realmente es necesario
que existan tantas? Como si la gente tuviera
• Es una de esas cosas que no cambiaría aun-
cinco cabezas o el cabello creciera un
que pudiera, como ocurre con esos muñecos
metro al día—.
feos que a cualquier persona le parecerían
poco atractivos e incluso hasta desagrada- • Y finalmente, entre tantas cosas, los 250 pa-
bles, pero que a una persona, el dueño, le sos que debo dar luego de la última vuelta del
parece el objeto más valioso del mundo y no camino. No los conté, pero no me faltan las
lo cambiaría ni por un millón de muñecos ganas de hacerlo. Cuando llego a ese punto
nuevos y más guapos que el otro. O con las me siento satisfecha de haberlo recorrido y
personas que se rehúsan a tirar o vender la de haber aprehendido algo, tal vez trivial para
salsera de porcelana, aunque nunca prepa- otros, pero muy importante para mí, pues es
ren salsa o no sepan para qué se utiliza, pero uno de mis momentos favoritos del día.
El piano
Nicole Mora Jiménez
El piano es bastante versátil. Puede ser una decir que los candidatos perfectos para la labor
primavera-verano2017
clase de portavoz, una caja que armoniza son los que dejan de ejecutar el instrumento
y recita pequeños fragmentos de historias resu- porque así lo quieren—. parece más bien que es
midos en notas acomodadas en compases o un algo que deben hacer, aquellos con la necesidad
elegante mueble para acomodar portarretratos de demostrar su dominio implacable del instru-
con fotografías de familiares o cualquier clase mento. No obstante, existen los virtuosos que, al
de adorno. (Se podría decir que cualquier cosa ejecutar una melodía hacen sentir la vibración
que se coloque encima resalta bien en un mue- del efecto sonoro que cada nota tocada en el
62 63 ble como este). Incluso un piano rellena vacíos momento justo y bien armonizada produce al
en la vida cotidiana sin que esto se perciba. disiparse en el aire, para encauzarse en el oído.
elalmapública
No importa si uno está comiendo, conversan- Incluso uno se estremece y doblega ante una
do o caminando, las tenues notas emanadas de pieza tocada con sentido.
este artefacto —sin ser intrusivas— llenan vacíos Un piano es un artefacto que algunos usa-
que ni nuestras acciones ni nuestras palabras mos para inmortalizar fragmentos de nuestra
podrían llenar; hacen que el silencio deje de abru- vida. Un piano es una útil herramienta para
mar, aunque pase inadvertido y todo parezca nor- expresarnos si no queremos ser cuestionados,
mal. Aparentemente es una especie de música de porque podemos contar la misma historia en
fondo, ignorada por muchos y apreciada por los clave y seguirá sonando bien; podemos incluso
que alguna vez practicaron en él o simplemente reprochar a quien nos rompió el corazón y nadie
son aficionados de la música clásica. preguntaría al final por qué o trataría de decir-
Un piano puede marcar la diferencia entre nos cómo actuar. Al final, si no estropeamos la
un público conmovido y uno indiferente. En las melodía, solo aplaudirán. Solo los entusiastas
películas, las escenas tristes son acompañadas de la música notan la emocionalidad con que
por una pieza melancólica de piano y violín. uno toca. Un piano es una memoria externa a
En las manos apropiadas puede ser un eficaz la mente: tal vez no se recuerde vívidamente lo
medio para conciliar el sueño —me atrevería a que ocurrió, pero se recuerda cómo se sintió.
Tuve la desdicha de empezar un libro con la palabra yo, y de inmediato se supuso que, en
lugar de intentar descubrir leyes universales, estaba analizándome a mí mismo, en el
sentido mezquino y detestable de la palabra.
de poseer un borrador en su parte sacra dismi- madera, una llave de conversión entre la imagi-
nuye su seriedad? Como si poder eliminar los nación misma y el mundo físico, pero ¿por qué
trazos del hombre egocéntrico resultara peli- si es tan importante y valioso, se deja de exhibir
groso y, por ende, debiera estar encerrado como sin el menor recelo? Quizá es que su utilización
un animal salvaje en una jaula metálica, fría y no se puede reservar a una sola persona o a un
aislante, para evitar el mínimo contacto con él. solo grupo pese a la magnificencia y ostentosi-
Estirado, delgado y recto cual regente, en dad que lo encuadran.
64 65 ningún momento pierde su delicadeza y sutil El universo que guarda es tan vasto, amorfo
fineza, que evoca las inmaculadas notas pro- y líquido que su conversión sobre el papel queda
elalmapública
ducidas por el violín en Stravaganza de Vivaldi, inscrita en la minúscula punta del grafito, una
elegancia desbordada que al utilizarlo, los dedos transición que sucede del intelecto al papiro
de la mano que lo sostienen, comienzan a dejarlo como si de un reloj de arena se tratase y su pun-
tomar vida y en ese mismo instante nos vemos to medio fuera el cambio de relatividad espacial
inmersos en la danza hipnótica que va realizan- que da entrada a nuestro mundo perceptual,
do el lápiz en su trayecto sobre el lienzo, dando al Mutando de historias fantásticas a cuentas
empleador una dosis múltiple de exquisitez a los matemáticas, de trazos de figuras en escala de
sentidos, al ver plasmada la razón de la emoción. grises a la lista vespertina de las compras. Tan
Hecho de madera, un material que aun en variable es lo que guarda dentro de sí que si se
contacto con el ambiente mantiene una tempe- requieren 56 kilómetros de trayecto para ago-
ratura siempre agradable al contacto físico, invi- tarlo y todo a una velocidad prodigiosa para
ta con seducciones sensitivas a que el tacto se re- terminar con los 500 lápices que se producen en
invente sobre su superficie, deja una necesidad el mundo por segundo.
incesante de querer escribir, dibujar, rayar o lo Es común que las personas, en un proceso de
que a cada quien le venga en gana. No importa búsqueda o pensamiento, se lleven el lápiz a la
lo que se haga ni cuál sea el pretexto, lo impor- cabeza, como si de una varita mágica se tratara,
tante es no dejar de sentir su pulso ni de percibir y pudiera arrancar de las entrañas del cerebro
su aroma a familiaridad y calidez que emana de aquella cuestión que los tiene discerniendo
los poros de sus caras, vértices y aristas. entre cientos de representaciones mentales.
¿Instrumento milagroso u objeto común y
¿Qué tantas cosas pueden estar corriente? No importa la respuesta que se dé
encerradas en un lápiz? porque lo seguro es que ha sido trascendental
Pintado su exterior de amarillo ocre, revestido en manos de miles de personas en el curso de
por una fina capa de esmalte para resaltar las la historia y les ha dado voz y voto a quienes no
características del material y el color, el cual lo tenían.
Jueves
Honorine Torres Reyes
ys
no solo es eso, también es un día que, a compa- porque aparecen los anaranjados de un atarde-
ración del lunes caótico o el viernes de fiestas, cer que te penetran hasta el alma y hacen bri-
muchas veces pasa inadvertido. llar a las personas. Lo que hace que uno se fije
La llegada de este día indica que ya sobrevi- en esos tonos cálidos que resaltan los detalles
viste al lunes, tuviste martes para readaptarte en la gente, y en uno mismo, es que sea jueves,
a la rutina y a la neutralidad del miércoles para pues esto no ocurre en miércoles o martes: si
terminar de recuperar tu ritmo. Por eso cuando hay un atardecer que abraza y llena de energía
sientes que ya estás en sincronía con la vida y y amor, es jueves, no puede ser otro día. Ade-
además sabes que el viernes está por llegar, llega más nos hacen recordar esas películas vistas
esta especie de pausa llamada jueves, y como no sin querer, cuyo nombre muchas veces no re-
se piensa en él entonces cualquier cosa nueva cuerdas, pero cuyo recuerdo deja un agradable
que se haga en ese día le brinda relevancia. sabor de boca, algo parecido a esperanza, o
Además, el viernes y el lunes son parecidos también a esas películas de cine independien-
porque son cuando más gente hay en la calle te, no muy buenas, pero que por alguna razón
haciendo planes, ya sea para iniciar bien la hacen que uno se pierda en ellas y se olvide de
semana tratando de convencerse que ahora dónde está y de quién es, como si borraran. Esa
sí acabarán sus pendientes o para ponerse de pérdida momentánea y buen sabor de boca que
acuerdo con algunos amigos para salir a dis- aparece, es jueves.
La religión
como enigma
primavera-verano2017
destrozado, encontré que, a lo largo de la historia, de cualquier lugar del mundo, sin importar raza,
numerosos eruditos, escritores, poetas, filósofos e ideología o nivel socioeconómico son bienveni-
incluso señoras de mercado que gozan del bene- das al banquete para elegir cualquier platillo de
ficio de internet, han generado diversas hipótesis su agrado.
en torno a este tema; de todas ellas, una de las Para quien acostumbra asistir a este tipo de
que parece ser más precisa, y solo parece, porque comidas gourmet no supone una difícil tarea
es evidente que jamás será dilucidada del todo, entre la diversa gama, después de todo, es coti-
fue la enunciada por Nietzsche. Este señor que diano para cualquier creyente escoger aquello
habitó la Tierra durante un efímero periodo des- que lo hace él mismo. Sin embargo, para un ente
cribió la religión como una experiencia no verda- ingenuo y no informado como la presente,
dera, pues no es experiencia de una entidad real. resulta una tarea compleja decidirse por una
La definición anterior parece bastante obje- que parezca más adecuada o menos aversiva.
tiva, pues ¿quién en su sano juicio podría jurar Para no perderme más en el desastroso sen-
y perjurar la verdadera existencia de un ser con dero de las prácticas religiosas, decidí tomar
poder sin límites al cual no se ha visto jamás? del cuello al catolicismo para estrujarlo lo más
Sin embargo ¿qué tan objetiva resulta una sola posible y encontrar en sus entrañas la verdad de
descripción? Es evidente que la respuesta a eso su ser; después de todo, esta es una de las reli-
es nada. Aunque el pensamiento que Nietzsche giones que se denominaría mejor como el pastel
profesaba es uno de los mejores que se ha visto del que todos agarran.
en la historia de la humanidad, me parece que Al oprimir con fuerza, descubrí lo envuelta
la religión podría ser descrita en términos tan que me encuentro, todos los días, en su extraña
banales que una estudiante de universidad existencia. Noté que es verdad eso que dicen en
lograse entender. las calles de que Dios es un modo de vivir.
Aunque la comparación siguiente podría Me sorprendió enormemente que ahí estu-
parecer burda, encuentro divertido describir la viera, todo el tiempo, sin que yo lo notase; es
La religión como enigma
ys
decir, la religión católica, vista como yo la veo, nuclear. Esa cosa que se extinguirá cuando no
es el sonar de las campanas que anuncian la quede humano alguno en la Tierra, porque
hora de misa, los exquisitos y calientes tama- sin importar qué tan desolado se encuentre
les que se encuentran en las afueras de cada el mundo, con un solo ente incrédulo como lo
iglesia, el olor a flores característico del recinto, somos los humanos, la religión prevalecerá;
el inentendible habla del padre profesando porque es parte de nosotros, seamos creyentes o
oraciones a través de un micrófono para que no; porque es nuestro, es algo que nos represen-
incluso al más sordo de los sordos le llegue la ta como especie y como individuos; es esa nada
palabra de Dios. que se siente que presiona el alma eternamente
La religión también son los vestiditos blan- y envuelve todo lo que existe.
cos que revuelan en las piernas de las niñas el En conclusión, es sobrecogedor percatarse
día de su comunión, la fe ciega en un ser omni- de la verdadera omnipresencia que profesa
potente, la tan extensa Santa Biblia, los santos no solo la religión católica, sino cualquier otra.
decorando las de por sí excesivas paredes, las Al observar el devenir de la existencia de los
personas durmiendo en las sillas, el borracho que me rodean, es imposible no pensar que las
con su botella en mano, el insistente sonido de prácticas religiosas tienen una buena razón
los peregrinos tocando la puerta. Es ese no sé para existir. Incluso me hace cuestionar si los
qué que se encuentra en mi antología de José creyentes, a quienes yo denomino desafortuna-
Revueltas, en la tarea sobre el juicio de Aristóte- dos seres sin cerebro, sean los verdaderos des-
les, en el libro de historia; el grito al cielo cuando afortunados. Tal vez aquellos que profesemos
queremos que algo bueno pase, el querer des- una vida regida por la razón seamos los autén-
pertar de incontables personas; sencillamente es ticos desdichados; después de todo, pensamos
la nada inundando todo. que, para que algo tenga sentido, necesaria-
A pesar de la extensa y, probablemente, mente requiere el único y tan afamado susten-
innecesaria palabrería, aún no estoy muy se- to científico. Aunque es una suposición burda,
gura de qué tan bueno resulte adecuarse a las es probable que los que nos denominamos
creencias de determinada religión. Sin embargo, “ateos” hayamos creado nuestra propia reli-
entiendo con certeza que esta es lo que queda gión, una donde ponemos en el altar el procedi-
inerte entre lo que son las personas; eso que no miento preciso que nos permite desenmarañar
se mueve y probablemente resista un ataque las supuestas verdades del universo.
Un cabello
Acxel Adrián Mazón Santamaría
primavera-verano2017
sorprenderme, pues es una duda, entre muchas mas no hasta dónde, pues sin saberse de un lu-
otras, que me aqueja. Sinónimo de su color: el gar, uno no puede saber adónde va o dónde está.
café con leche, que sin raíz ha de mezclarse con Pero ya no es necesario.
el mundo dando origen a la singularidad. Pero Un cabello cruzado entre el tiempo y el espa-
este cabello es libre. Libre como solo los perdi- cio puede ser eterno. Puede romper las barreras
dos pueden serlo. de la inexistencia y a la par ser inmortal. La
Si no es tuyo ni mío, si no es de nadie, es de eternidad, es cierto, no es sinónimo de inmor-
él, de sí. Y como muchos en el mundo, un cabello talidad, pero ambas vienen a ser inseparables.
sin principio ni fin, de color café con leche, sin Si un cabello fuese entonces eterno e inmortal,
raíz y un dudoso brillo natural, no sabe que es seríamos una especie de ciclo andante. Somos
libre. No sabe que no pertenece más que a él. Y si el reflejo de un cabello sin principio ni final.
lo supiera, dudo entonces que de verdad lo sea. Porque los pies no son la base ni el centro, y la
Y cuando nos damos cuenta, un cabello no es cabeza dudo mucho que sea la finalidad de la
nuestro ni de nadie. Ha de crecer en algo llama- vida. Entonces el cabello somos nosotros, pero
do folículo piloso. Ha de tener como otros una nosotros no somos el cabello.
médula, como el tallo de una planta. Nuestra Podemos verlo como queramos, porque siem-
cabeza en ese sentido es un bosque, uno pobla- pre por alguna loca razón así sucede. A veces un
do, donde las partes que no se atiborran de pelos cabello es lo que queda cuando la eternidad e
y cabellos son resultado de la modernidad, de la inmortalidad se van. Porque para siempre va de
salvaje civilización, de la inseguridad. Pero ahí, la mano con lo ya mencionado, y un para siem-
en las zonas donde la ausencia desaparece, es pre eterno e inmortal puede durar un segundo,
el bosque y, en otro escenario, la jungla, que se una vida, un año o el tiempo entero, que viene
mira indescifrable pero viva. siendo lo mismo. Ahí, el viento nos toma y, como
Entre seis u ocho capas le conforman, se al cabello, nos lleva adonde nunca habríamos
protegen, se sostienen. En posición vertical, dará pensado llegar.
Ellos son
nosotros mismos
Adriana Deyanira Maldonado Jardínez
ys
construcciones culturales de cada episodio de jo, donde este representa el acceso a un mundo
la humanidad, ya que en él se vierten todas las inverso; y qué decir de Tolkien en El Señor de los
concepciones de lo ideal y lo viciado. Anillos con el espejo de Galadriel al que se atri-
La mente como el espejo tiene la capacidad buye la predicción del futuro.
natural e inherente de ser un designador rígido. Y es que, después de todo, ¿qué es un espejo?
El espejo es capaz de reflejar la realidad tal cual Es tan solo un objeto que da la imagen de algo.
70 71 es. La mente añade un componente interpre- No se puede recuperar una imagen de la hu-
tativo. La emisión de juicios de valor no afecta manidad que no esté impregnada de ese tejido
elalmapública
la realidad pero sí la percepción al propiciar la social que abarca las distintas formas y expre-
asimilación de ilusiones por un efecto defor- siones que caracterizan a esa sociedad, porque
mante. De acuerdo con Eco, diferenciar lo real en ello el hombre perfila sus valores y da senti-
de lo imaginario es posible si se descodifica la do a su existencia.
imagen deformada hasta obtener la imagen tal En la antigua Grecia, Sócrates recomendaba
y como se proyectaría en un espejo normal; esta el uso del espejo a quienes eran hermosos en
imagen real nos comunica perfectamente el re- pro de que se volviesen moralmente dignos de
ferente tal cual es. ¿Debemos replantearnos los su belleza, y a quienes eran faltos de belleza
cuestionamientos de Borges acerca de si somos para que mediante el cultivo de su espíritu se
el reflejo deforme de una realidad desconocida, ocultase tal carencia. No obstante, el uso de tal
un mundo imaginado por otros seres que se implemento era visto como algo meramente fe-
esconden en los espejos de la noche, y que son menino. La sola idea de que un hombre se mira-
también nosotros mismos? Probablemente sí, se al espejo en situaciones que no fueran estric-
pues existe un deseo desesperado de ver la rea- tamente necesarias era inconcebible, pues se le
lidad de un mundo que es el nuestro y que está juzgaba afeminado. Posteriormente se asumió al
cifrado, pero valdría la pena detenerse a pensar espejo como fuente de falsas apariencias.
en las implicaciones de una descodificación.
Las valoraciones a las que se ha sometido lo Búrlense ahora de los filósofos que disertan
real y lo fantástico del espejo a menudo condu- acerca de las propiedades del espejo: que in-
cen a múltiples escenarios de referencia expre- vestigan por qué se presenta en ellos nuestra
sados en historias como las que Oscar Wilde imagen vuelta hacia nosotros; con qué objeto
describe en El pescador y su alma donde el Espe- ha querido la naturaleza, a la vez que creaba
jo de la Sabiduría refleja todas las cosas del cielo cuerpos reales, que viésemos también sus
y de la tierra excepto el rostro de quien se mira simulacros; por qué, en fin, dispuso materias
en él; o Lewis Carroll en Alicia a través del espe- aptas para recibir la imagen de los objetos. No
Ellos son nosoros mismos
fue ciertamente para que contemplásemos de- infinito de un error, las copias incontenibles
lante de un espejo cómo nos arreglan la barba que alejan y degradan el arquetipo. “La tierra
ys
y la cara puliendo nuestro rostro de hombres. que habitamos es un error, una imprudente
(Seneca, Q. N. I, XVII) parodia” (Borges, 1980).
¿Por qué de pronto algo que parecería tan
Séneca afirma que el objeto de la existencia bello como el autoconocimiento desemboca
de los espejos es que el hombre se conozca a sí en esto? Tal vez porque nunca somos del todo
mismo y que este conocimiento solo puede darse conscientes de cuán imperfectos somos y esta
por la mediación entre la distancia de uno mis- realidad, al manifestarse, destruye. Cuando
mo al contemplarse como objeto. Si bien es cierto Galeano escribe su obra Espejos va hilando iró-
que el primer beneficio de la autocontemplación nicamente la historia de la humanidad desde
es el amor propio, se vuelve vicio volver al espejo sus orígenes hasta hoy, haciendo un inventario
una y otra vez hasta corromperse y desear im- general del mundo que advierte la prevalencia
punemente poseer aquel objeto, y entonces se le de las limitaciones de un pensamiento doloro-
construye a partir de todos los elementos posi- samente prejuicioso y esclavizado. Es la huma-
bles hasta que se torna abrumador el insoporta- nidad reflejándose a sí misma lo que estremece
ble hecho de no encontrar ante sí sino la propia cuando se hace evidente que se ha despreciado
imagen, tal como ocurrió con Narciso, que en la a sí misma.
pureza de su corazón creyó que si aceptaba no
conocerse viviría largo tiempo, sin embargo por
azares del destino se descubrió contemplándose
y en el deseo de poseerse desfalleció. Referencias
Esta naturaleza viciada del hombre ocupa Borges, J. L. (1989). Siete noches, México: FCE, p. 114.
la atención de Borges cuando expresa su aver- Chung, K.-W. (2007). Borges y el espejo. Actas del XV
Congreso de la Asociación Internacional de Hispa-
sión por los espejos: “Realmente es terrible que
nistas. Monterrey (4, 101-114).
haya espejos […] Nos hemos acostumbrado a
Eco, U. (1988). De los espejos. De los espejos y otros ensa-
los espejos, pero hay algo de terrible en esa yos. Barcelona: Lumen, p. 11-39.
duplicación visual de la realidad”. La abomina- Galeano, E. (2008). Espejos: Una historia casi universal.
ción que manifiesta es cuestión demográfica: México: Siglo XXI.
el deseo de frenar la propagación de la especie, Lavelle, L. (2007). El error de Narciso. Chile: Ediciones
el terror que le inyecta el género humano, la Universitarias de Valparaíso.
maldición del número creciente, el pulular Séneca, L. A. (2013). Cuestiones naturales I. Madrid: Edi-
incesante a las multitudes, la repetición al torial Gredos.
Más de un siglo
con nosotros
Ana Gabriela Guevara Nava
ys
hablar del pan. No sé realmente cómo empe-
zar; quizá deba hacerlo igual que en la mayo-
ría de las veces anteriores.
En el círculo social de jóvenes excitados
en el cual me desenvuelvo, no son pocas las
reuniones en las que las conversaciones se
tornan a los orígenes de las cosas, desde el
lenguaje y la religión hasta la cocina mole-
cular o las prótesis biónicas. En ese preciso
momento mi atención, que después de más
de cuatro cervezas se había vuelto dispersa,
regresa a la conversación, pues debo compar-
tirlo: “¿Qué podría ser más sorprendente que
la invención del pan?”, digo con voz emocio-
nada buscando aprobación en los rostros de
los presentes.
Para el desarrollo de esta técnica fueron
necesarios otros procesos aún más antiguos, fica es la curiosidad humana!, por supuesto que
como la utilización de un horno o la pulveri- lograríamos grandes cosas.
zación de los granos, en específico del trigo. En algún programa de esos que nos encan-
Alguien decidió agregarle agua a ese polvo y tan a las generaciones actuales, oí que si una
crearon una mezcla muy práctica de la cual persona solo dispusiera de harina y agua para
alimentarse. Y entonces érase una vez en Egipto comer el resto de su vida sobreviviría algún
un plato de esa mezcla, de porridge abandonado tiempo, pero si horneara esos mismos ingre-
por días en alguna esquina, probablemente ex- dientes, podría sobrevivir de ellos indefinida-
puesto al aire entre otras cosas. Todo iba normal mente. Esto me hace pensar que la técnica que
en la soleada Egipto cuando de pronto la masa hemos desarrollado para crear el pan lleva con-
comenzó a burbujear y alguien decidió prestarle sigo un valor adaptativo. ¡La percepción de pro-
atención. Asombrado por un fenómeno extraño, ducir más comida con tan pocos ingredientes! Y
y esto es lo que me llama tanto la atención, esta además con alto valor nutrimental. Tal vez esta
persona pudo reconocer la oportunidad y se sea la razón por la cual vemos al pan como un
preguntó: “¿Y si horneamos esto?”. ¡Qué magni- alimento tan cercano a la tierra, tan honesto.
No me traiga la canasta de pan
A pesar de que el pan no es natural —no cre- na por la vida; en cambio una baguette añejada
ce en ningún lado—, se siente muy arraigado a o un pan rústico me hacen sentir emoción ante
primavera-verano2017
las personas, en experiencias o aunque sea solo ponían en su boca. La mayoría de las personas
en pensamientos. no se daba cuenta de que entre la sopa de cebo-
El pan está en la mayoría de las culturas, en lla (Dentro de la cual te espera un trozo de pan
algunas es considerado sagrado, una promesa gratinado de queso gruyere) y la hamburguesa
de salvación. Es verdad que este pan milenario (que hasta obtuvo un premio gracias a su pan
del que hablo apareció de diversas maneras hecho en casa), la canasta de pan de cortesía
alrededor del mundo, y su elaboración varía de estaba entre los tesoros que hacen valer la vi-
una región a otra, pero me parece que en todas sita al restaurante. Para mí, oír: “No me traiga
partes este representa unidad, tiempos difíciles la canasta de pan, señorita” era emocionante.
y tiempos mejores, escasez y abundancia. Implicaba llenar las bolsas de mi mandil apre-
Son variados los sentimientos que me trae suradamente con esos trozos de pan caliente y
el pan, supongo que depende de su tipo, pero rechazados mientras cuidaba que ningún su-
en general me recuerda a mi familia. Hemos pervisor me viera.
dedicado infinitas horas en la cocina de mi casa Los primeros días de la semana el restau-
tratando de acercarnos a imitar lo más posible rante solía estar tranquilo y vacío salvo por los
el proceso para lograr esas hogazas de pan que clientes regulares a los que atendía con mucho
nos inundan el pecho de calor con cada crujien- gusto. En estos días, la gente de cocina solía
te mordida y desafortunadamente no hemos estar de buen humor y les regalaba a los mese-
conseguido lo que buscamos. Es una tarea inti- ros canastas de pan recién hecho y un poco de
midante pues, a pesar de la sencillez de su com- mantequilla, que yo disfrutaba infinitamente
posición, la elaboración es un proceso complejo. mientras pensaba que lo único que me gusta
Ese pan de rancho chorreado con piloncillo tanto como el pan en este mundo de cosas ma-
que mis papás comen con tanta alegría mayor- ravillosas es la fruta. Esas fueron las pequeñas
mente me trae nostalgia por mi infancia. Un recompensas que la vida me dio por aguantar el
croissant me recuerda a la pasión de mi herma- régimen casi militar del servicio de piso.
Oscuridad
ys
que puede generar, intentando sofocar su sen- llevar ante el vaivén de las mareas intermina-
tido fuerte y volviéndola más débil de lo que bles, el misterio de reconocer un cuerpo con las
en realidad es. La luz por su parte parece que manos y no con la vista, dejando fuera todos los
abraza todo y lo deja inmóvil ante su fuerza. La prejuicios generados por la luz.
oscuridad sin embargo es tan fácil de extinguir La luz representante de la levedad, esa leve-
76 77 que solo se requiere un poco de luz, como la dad de pasar frente a las miradas de los demás,
emitida por una cerilla, para hacerla marchar, caminando juntos, pero cada uno en un mundo
elalmapública
perdida y derrotada ante la fuerza de la otra. totalmente distinto, porque ver no siempre im-
Es débil y otorga la posibilidad de ser libre, una plica saber quiénes somos o qué piensa la per-
libertad absoluta del alma y el cuerpo. sona que va con nosotros; ver no es la verdad.
Al pensar en la oscuridad no me remonto La oscuridad, por su parte, implica misterio,
al miedo, sino que pienso en tranquilidad, esa conlleva absoluta verdad, el saberse único fren-
tranquilidad abrumadora y temida por muchos te a la inmensidad, porque realmente estamos
porque nos permite pensar y reflexionar sin la solos, podemos estar acompañados, pero nunca
oportunidad de dividir la atención entre lo que vamos a dejar de encontrarnos solos frente a
esté alrededor; en el silencio capaz de llevarnos otras personas que también están solas, sin
a pensar en aquello que no queríamos pensar, la posibilidad de que alguien más sepa lo que
que resulta difícil y muchas veces aterrador, sientes exactamente o lo que piensas, entonces
pero necesario para una humanidad sumergida ¿no es eso la soledad?
en la luz, en aparentar debido a la poca intimi- Pero no sería bueno que existiera una mala
dad que existe bajo ese foco reflector que evita interpretación de lo que se menciona como real.
sentimientos, que siente vergüenza, que nos La oscuridad es pesada, sí, pero igualmente es
hace enmascararnos para salir y observar. Re- necesaria, es indispensable ser distintos unos a
sulta de gran ayuda contar con esta intimidad los otros y sabernos distintos, conocer nuestras
concedida inmediatamente por la oscuridad, condiciones de vida y seguir con ellas; el hecho
en la cual se nos otorga la posibilidad de hacer de que la oscuridad nos haga conscientes de
gestos, de llorar, de sentirnos perdidos y vacíos; nuestra soledad no quiere decir que no estemos
pero también de sentir felicidad extrema y acompañados por otra soledad distinta y que
sentir el amor, ese amor que se consuma en la no se pueda cohabitar con ella, sino que esta es
oscuridad, no porque sea sucio o desagradable, inevitable y buena.
sino porque esta condición nos permite sentir No existe nada mejor que dos soledades
con todo el cuerpo, ser receptivos y dejarnos acompañadas en la oscuridad.
Divenire
de Ludovico
Einaudi Jean Alexis Meneses Hernández
Devenir.
ys
racterísticas de figura a medida que las frecuen-
1. Llegar a ser cias crecen. Fondo que no puede permanecer
2. Sobrevenir, suceder, acaecer. fondo. Fondo cuya naturaleza le pide ser figura.
3. (Filosofía) Realidad entendida como O llegar a ser figura.
proceso continuo. Teclas, blancas y negras, dicotomizadas
4. (Filosofía) Proceso mediante el cual de acuerdo a sus materiales, a su diseño, a sus
se hace o se llega ser. notas. Seis octavos es la marcha a la que es-
tas teclas van dibujando una figura inquieta,
Violines y violonchelos;
piano; sintetizador
muy tenue; compás en seis octavos; seis minu-
saltarina, que no puede ser estática, que no es
vacía, que es pensante, que es análoga a un ser.
Figura que permanece constante y cautelosa
tos con cuarenta y dos segundos; segunda pieza cuando su fondo se acrecienta, cuando se
en el álbum igualmente titulado; primer senci- magnifica y figura que es fondo cuando el
llo del álbum. fondo es figura.
Perteneciente al género minimalista, con- Teclas contra cuerdas, piano contra violines,
temporáneo a la época, “Divenire” logra retomar agudo contra grave, figura contra fondo, tiem-
las ideas clásicas acerca del devenir como proce- po contra espacio. Una constante batalla entre
so dinámico, sujeto al tiempo. opuestos en la que cada uno de estos desea
Dos agrupaciones de arcos frotando las fuertemente sobresalir, estallar, dejar de formar
cuerdas a diferentes ritmos, notas octavadas en parte de la pieza para formar una pieza por sí
dos diferentes figuras, es como está compuesto solos. O ser una pieza por si solos.
el fondo de la pieza. Un fondo que parece úni- Opuestos que en su intento de ser individua-
camente acompañar al melódico piano, pero les logran una fuerza intrínsecamente cohesiva.
que en ocasiones aumenta su intensidad lo- Se estiran y estiran, a más no poder, incluso
grando estar al mismo nivel que su protagónico hacia la misma dirección, pero el resultado es
acompañado. Intensidad que incluso desafía sólo uno: forman parte de un divenire. Devenir
al protagonismo y esencia de la melodía, y que que ellos crean o del que simplemente forman
demuestra que el fondo es igual de particular, parte. Devenir que parece terminar después de
fuerte e importante que la figura. Fondo que casi siete minutos y parece iniciar al segundo
marca el compás de la pieza, marca el tiempo en cero. Devenir que forma parte de otros deveni-
el que las melodías se manifiestan. El tiempo al res y devenir al que componen otros muchos
que éste devenir está sujeto. Fondo que toma ca- devenires. Devenir…
La felicidad tiene forma esférica
Samy Zabdiel Pazaran Rodríguez
El
primavera-verano2017
futbol es el deporte con mayor cantidad a cuando queremos coquetear con quien nos
de seguidores y practicantes. Las reglas gusta, pero ahora, con este redondo y cautivador
son simples, gana quien haga más goles en la objeto sin aparente vida. Es aparente porque
portería contraria. nos la hemos ingeniado para depositar en lo
Juegan 2 equipos con 11 jugadores cada uno, que ocurra con él, nuestra euforia en una final
una cancha de 120x90 metros, dos porterías y, si de copa del mundo o la más grande de nuestras
el juego es de gran convocatoria, grandes tribu- impotencias si la perdemos en el último minuto.
78 79 nas. Ese es el mundo del futbol, en apariencia. En este altibajo que ocurre durante el parti-
Pero, el verdadero juego se da en lo que su- do, podemos notar que tratamos al balón como
elalmapública
cede con el balón, el balón parece el motivo de trataríamos a nuestra amante, al anotar un gol,
irnos a jugar, a hacer equipo, de discutir quien vamos por él como si recogiésemos a nuestra
tirará el penalti, hacer apuestas, entrenar y al chica en su casa para una cita, lo tomamos y
final del partido sentir la calidez de la victoria y lo besamos, después, nos vamos con él, eso sí,
en caso de perder, una frustración individual y abrazándolo muy cariñosamente para ponerlo
colectiva. en el campo. Pero no fuera que caemos en posi-
Cuando comienza a rodar el balón, sin ción adelantada o estrellamos un tiro en el pos-
importar si somos jugadores, árbitros o aficio- te, porque entonces se maldice toda su calidad
nados, cualquier pendiente en casa, la escuela estética, se va por él y con gran enfurecimiento
o el trabajo dejan de existir. Entonces, sólo pen- lo pateamos fuera del campo.
samos en tener el balón, triangular, romper la Podríamos decir que esta esfera perfecta, la
estrategia del equipo contrario, pero, también hemos humanizado como sólo nosotros sabe-
sentimos mientras jugamos, sentimos el gusto mos hacerlo, le rodeamos de folklore, ponemos
de dar un buen pase, hacer un túnel, de anotar, nuestra fe en él, invitamos a nuestros amigos y
cansancio, fatiga, presión del contrario y deseos familia a vernos, pero más que nada, a que sea
de salir triunfadores. un buen día para conectar con el balón y este
El balón tiene la cualidad antes descrita, de nos dote de poderes. El balón, es por excelencia,
mover personas para perseguirlo, muy parecido un hermoso camino en el que se puede ser feliz.
Solo más adelante recordé que ya existen los sueños compartidos que son, precisamente,
la realidad.
realizar un ensayo acerca de la entidad a veces como sociedad y otras como estado sal-
que el autor considera evaluar como “la mejor”, o vaje el que determina la expresión de la pieza
en otros términos, “la predilecta”, implica ne- en curso, sino ésta misma influye de manera
cesariamente el involucramiento de opiniones significativa en todo y lo que sea que se en-
individualizadas derivadas de la dificultad para cuentre a su alrededor, y no únicamente por su
hacer diferenciaciones entre el Observador y lo existencia misma sino por el efecto que causa
Observado. Dicho esto y a pesar de lo mismo, en los receptores, pudiendo crear variaciones
80 81 presento brevemente y a continuación los ar- enormes de uno a otro incluso en un estado
gumentos disfrazados de características por lo relativamente estático.
elalmapública
en una sola teoría universal, podría seguir de las cosas, en éste caso, la profundidad, que
siendo una excepción epistemológica, pues se bien se mencionó ya en las ventanas en direc-
comprende mejor desde las humanidades aun- ción positiva, aunque en dirección contraria,
ys
que las ciencias intenten darle la explicación, es decir, hacia uno mismo, es mayor todavía
aunque eso lo hacen para todo. Aún con un la profundidad que alcanza (también podría
contacto pleno y total con la paradoja de la que utilizarse la palabra saliencia o penetrancia),
hablo, desde todos sus factores y a través de to- pues no es sólo la contemplación del objeto
das sus perspectivas e incluso personalidades, mismo sino la retroalimentación y los senti-
es imposible llegar a un conocimiento total, por mientos que en el observador –específicamen-
lo que obliga a mantenerse en un intento conti- te el autor-provoca.
nuo que gradualmente se convierte en un mero De tal forma se llega a la interioridad, que
goce de interacción, lo cual además resulta más en algún sentido es la razón de la existencia
sano, efectivo y al final de cuentas es la única y de la cosa, o bien su esencia, que no puede ser
mejor manera de aproximarse naturalmente a encontrada sino en la interioridad reflejada en
mi objeto de placer. el exterior e interactuante con el Sujeto, o al
Es evidente que la descripción ya dejó a menos la razón que el sensor interpreta. En-
un lado las descripciones físicas para entrar cuentro, para finalizar mi relato, que la función
plenamente (sin implicar que no se estén que para mí tiene es ser un espejo de mi propia
traslapando todo el tiempo) en las cualidades alma y aún más allá, perdiéndose todo reflejo
internas y siempre considerando la interacción y perdiéndose toda exterioridad, confundién-
S-O. Hablando de una cualidad que es vital dose la interioridad del objeto con la de mi
en las cosas, es la claridad, que en éste caso se esencia y en momento de máxima asimilación
manifiesta de distintas formas. Primero, su cla- desapareciendo finalmente la relación esté-
ridad de color, pues aunque no es su atuendo tica que dicta la necesidad de separación del
diario, el color blanco es una de las partes más observador y lo observado. El ente se inserta
representativas de la pieza, esto remite directa- de tal manera en el observador –que no puede
mente a la claridad de los colores de alrededor ser nadie sino yo mismo-, como un estereotipo
reflejados en sus ventanas, las cuales al mismo social se inserta en la cultura hasta sus ex-
tiempo poseen transparencia suficiente para tensiones más superficiales lo envuelven por
que el observador preciso encuentre muchas completo, y más aún, definiendo gran parte de
otras características intrínsecas, innumerables las características del otro es una confluencia
para un relato breve como éste. Es necesario caótica…
continuar hablando sobre la claridad, pues El objeto de mi deseo, el ente que fortalece
ésta misma es la oportunidad para sacar a mi hedonismo es un ser humano y su nombre
colación otras características fundamentales es “Ana Roda Hernández Martínez”.
Hojas Jennyfer Teresa Miranda Guzmán
tricas, asi-
métricas, rugosas, lisas, aterciopeladas,frágiles.
Señal del desprendimiento del tiempo, tiempo
confuso en la actualidad, tiempo marcado por
su color, por su vuelo y su crujir ante el contacto
con otro.
Imperceptible para muchos pero dadoras de
82 83
vida para otros, representación de lo que algún
día fue el mundo y debió ser.
elalmapública
Psicopoder:
oriente occidente.
J
carlos arturo rojas rosales
ys
Donde entra el zombie, esto que es la descrip-
ción del afuera a diferencia del adentro, genera
una tensión intrínseca que solo se puede disten-
der a áreas donde evidentemente de entrada no
había sexualidad, digamos por ejemplo mirar TV,
de pronto ese acto se realiza como parte de una se-
xualidad y de ese modo entra en el circuito, este a
su vez se formaliza en reglas y estas reglas en los
grandes consorcios de TV o internet. Asi, se les po-
nen regulaciones estrictas y sus procesos son cada
vez más sofisticados en la no consecución de estos
fines. Incluso hay leyes no escritas del uso de estos
medios, y hay distintas semánticas de este sistema.
De modo que la lógica es la disuasión, la lógica es
el deseo latente, y motivante, pero bien en el afuera
del sistema de medios digitales de masas, se pue-
den hacer cosas reales y a las personas les viene
bien conocer gente y hacer amigos, mientras que
en el medio digital, la real emoción y la real sexua-
lidad por el factor exponencial, se deja vivir en la
totalidad de lo que verdaderamente se siente por
el otro.
Una doble moral que nos es cara, porque lo-
gramos convivir con la conciencia digital de lo que
verdaderamente deseamos y ya hemos proyectado,
pero que en el mundo real es irrealizable porque
en el mundo real, a veces ni podemos dirigirle la
palabra a la persona real. Imaginen este proceso
a gran escala llenos de deseos de todos por todos
o por muchos irrealizables del todo, que queda, Los límites del biopoder y del psicopoder de-
anclar a las personas a realidades urgentes y ne- penden del quehacer por fuera de la semántica del
cesarias, trabajar, pagar las deudas, la comida, ir sistema, y del elaborar codificaciones distintas que
por ciertas compras, vivir, olvidarse de sus deseos, luego vengan a operar dentro del sistema mismo,
hasta de sus pensamientos gozosos y alegres, in- en coordinación y coherencias nuevas. Pero nada
cluso castrarlos sexualmente, hacerlos que se enfo- en el pésimo manejo que hacen solo transvasan
quen en sus prioridades, volverlos gente de bien, la negatividad del proceso hacia el propio sistema
comprar en tiendas lujosas, a crédito tener hijos, y digital, asegurándose que todo siga igual, cuando
finalmente si piensan de más, volverlos un zombi en verdad deben enfocarse en destruir los objetivos
medicalizado. Cuando la gripe y el cuerpo se nie- tácticos de los procesos que los agobian; la formula-
primavera-verano2017
ga a trabajar, ahí esta medicinas por todos lados. ción de leyes mejores, la destitución de presidentes
Cuando el cuerpo esta enojado por las estupideces vende patrias, la destrucción de empresarios y em-
diarias, ahí el zombi aparece. Entonces una socie- presas que no sirven más que como catalizadores
dad así, es una sociedad de zombies, tecnificados del déficit. Así es como se debe ajustar la cuenta a
y codificados, pruebas de que ese biopoder o ese los que generan esta negatividad, pero la reciclan a
psicopoder no funcionan bien. De modo que hay dosis homeopáticas. Un accidente, un padre que le
86 87 que recodificarlos. La teoría luhmanniana es per- pega a un niño, adolescentes borrachos y marigua-
tinente aquí, porque debe codificar la complejidad nos, legalización de drogas, patetismos de ese tipo.
elalmapública
con una forma en la que los que están ya realizados Y que en el mundo virtual son peleas exacerba-
dentro de los límites de esta inmunitas, no mar- das que no organizan a nadie para la movilización
ginen a los que son la comunitas, que amplíen los social, solo sirven como catarsis a sus ganas de te-
horizontes de funcionamiento del sistema global y ner sexo, a sus ganas de tener amigos, a sus ganas
recodifiquen las reglas que rigen las semánticas, de de hacer verdaderamente un cambio en la orienta-
modo que no haya grandes zonas de zombies que ción política. Tener un proyecto ahora es manejar
esperen un mundo como un precepto, sino que se este déficit, es manejar esta incongruencia, la pro-
automatice el proceso a desarrollar. Que el conflic- pia insurgencia duerme en colchones de plumas y
to potencial que se desarrolla de este modo no sea paga con American Express.
un mecanismo de exclusión, sino que obligue a una Como salir de este atolladero, destruyendo es-
reorganización de las codificaciones específicas, un tos cinturones de zombificación, de hacer una vida
aprendizaje de nuevos códigos y de nuevas presta- en otro sentido, de romper la programación, de ha-
ciones de complejidad dentro de otros subsistemas cer efectivo el desarrollo de una convivencia con los
del procesamiento de esta información. demás pero no por programación digital, sino por
porque al otro día puede regresar a un peor esce- Entonces este que es un sistema de clasificacio-
nario en las antípodas de un país desecho por la nes y señales, y de codificaciones de lo zombie es
guerra o por la pesadilla de rufianes y políticos que empero un sistema que articula las políticas de los
nada han podido hacer para darles algo mejor a la medios de comunicaciones de masas y digitales, a
brutalidad y el sinsentido. Esto que ocurre en el propensiones que ellos mismos sobre significan
mundo como política mundial es el zombi como la como modos de apaciguamiento de las fuerzas so-
88 89 articulación del cambio, pero por recomposición, ciales, la idea vieja de Baudrillard de las mayorías
por reutilización, por reciclaje, por recomponer, silenciosas son ahora las mayorías zombies pre-
elalmapública
quitar, dejar, añadir, ensamblar, a la Frankenstein programables y de esta manera la economía global
o a la Lego; porque el zombie solo recompone lo ha tratado de elegir la porción de los deseos y de
que queremos decir de nuestra humanidad. las motivaciones más íntimas para hacer de ellas
A otros se les seduce, pensando que pueden ser un modo de programación que se pueda intervenir
como el zombie de élite, el elegante, el que todo a discreción para que los zombies de las naciones
lo puede, y la masa de zombies sueñan con esas hagan un equilibrio en los modos de consumo y en
imágenes y tienen como religión los centros co- los modos de producción, de modo que, se equili-
merciales, zonas de invasión zombie, zonas donde bra la balanza de los poderes fácticos de la progra-
se abre la posibilidad de que se contamine la po- mación mental de la población mundial.
blación bienpensante, como si de pronto la tv se Entonces luhmanianamente el adentro y el
instantaneizára y pusiera a disposición de quien afuera se estipula como mecanismo de exclusión e
pasa todos los deseos en masa, todo lo que quiere inclusión, digámoslo con otras palabras, la inmuni-
en masa y la gente no opta más que por reflejarse tas no zombie trama las vías políticas del ejercicio
en ese Edipo mirándose al espejo como narciso. del poder, mientras que la comunitas zombie sumi-
Donde ya pueden entregar las tripas, el corazón, el samente funciona como votante y como parapeto
cerebro a cambio de las mercancías que ahí se dis- de las decisiones que de acuerdo a un baremo inter-
ponen pero que solo es un ritual conciliatorio, no nacional de exclusas entre inmunitas y comunitas a
reciben vísceras, ni corazones pero en el trabajo todos los niveles, se programan para diseñar la vida
ahí se les va hasta la última gota de sudor. Sartre común mundial y de las acciones para propagar la
se vomitaría de ver este espectáculo. Operaciones dominación de los poderes reales de las sociedades
engaño, operaciones de la democracia para jugar de la sociedad mundial. Los hits televisivos, de ra-
con ese reciclaje y reutilización a todos los niveles: dio, de prensa, de internet, son esos focos que resis-
ys
ten el exceso de racionalidad, entretienen y progra- proponerse frente al sistema, pero digámoslo así
man la zombificación de la audiencia. no todos los frentes del sistema operan del mismo
Digamos que alguien escapa a la programación, modo, esta calibrado a distintos niveles: Entonces
el sistema le encuentra un modo distinto de ade- el modo zombie más radical se agencia de la volun-
cuarse a un activismo distinto a través de la sobre tad, de las acciones más mínimas, y de los procesos
significación de otros valores y de otras formas de más manipuladores, mientras que los otros secto-
primavera-verano2017
90 91
elalmapública
res del sistema, son procesamientos que permiten relaciones como todos lo hacen y ese es el hombre
el desarrollo de una lógica que dentro de reglas co- libre. A Spinoza le costó la persecución y la destruc-
difica procesos distintos al de la esclavitud zombie. ción de una vida común por definir por vez primera
Recordemos al perseguido Baruch Spinoza, lo que es ser un Zombie y de cómo se escapa a ello.
cuando habla de los 3 niveles de ética, perseguido Desde una lectura que le opone, desde el budis-
político, disidente, perseguido social, dice una cosa mo zen en la lectura de Byung Chul Han y François
que viene al caso, la ética esta dada en tres niveles, Jullien, como un ocurrir de esta integración del
en el primer nivel es el de los que son víctimas de biopoder con el psicopoder creados en un dispo-
la realidad, les ocurre de todo, nada saben de cómo sitivo estético, cultural, afectivo y armonizador del
llevar su vida, están envilecidos y manipulados, por mundo, son las coincidencias entre los sabios y que
sacerdotes, políticos y todo aquello que los sujete son el último bastión donde se aparca la resistencia
a una lógica de la tristeza. En un segundo nivel, se frente al zombie y que el propio Spinoza fue el pri-
dan cuenta de que ellos han decidido algunas cosas mer resistente de este proceso.
y que podrían decidirlas pero se sienten sujetos a Lo igualmente posible, lo igualmente accesible,
las fuerzas que los oprimen, pero saben que si lo lo que no se queda privilegiado eso es la sabidu-
pueden lograr lo hacen y comienzan a hacer peque- ría, de modo que todos los deseos y todas nuestras
ños cambios. Y por último los hombres libres que necesidades vistas en este plano, ya no son accesi-
se dan cuenta que todos están componiendo sus bles al proceso del zombie, el desea, quiere, busca,
lucha, no se posee nada de eso, ni se es preso de esa interioridad y, para eso significa vivir en la po-
ninguna, aquí se trata de no trazar ninguna distin- breza, sin ningún saber, ni querer tener, estar solo
ción, ningún origen ontológico, es el espacio de la ahí sin agradarse en el saber o poseer, solo es des-
libertad real, ningún pensamiento se encadena a pertar a lo ordinario, lo cotidiano, multiforme, es el
nada porque no prefirió nada en particular, se debe silencio de la mente .
renunciar a la prominencia de algo. De ahí que la apertura, la singular ausencia, no
Y eso aplica para el mundo virtual, todos los as- hablan de nada definitivo, todas las figuras pasan,
pectos de las situaciones, no debemos privarnos de el vacío es el medio de la amistad, todo se amolda y
ninguno de sus aspectos, toda la apertura es tener se adapta, todo se acomoda, se hace pasar entre las
todo junto. En resumen: el sabio tiene a bien guar- cosas del mundo, el sabio lo sabe, no busca interve-
darse de la precedencia a establecer nada, sino a nir, busca verificar el paso, toda oposición rígida se
dilucidar la evidencia porque el mundo entero esta desvanece y la montaña fluye, con las rocas con lo ys
en una flor, las cosas aparecen en su propia luz, es más sólido y se desvanece su rigidez. Es esa indife-
un mundo amistoso, que no elige con preferencia rencia amistosa, es un pasar reciproco, es como se
por nada, porque la nada como concepto central amoldan las cosas en su naturalidad.
del budismo esta vaciada de la interioridad y la sa- Tal cual la naturalidad de una obra musical en la
biduría es liberarse de ese impulso infinito de ver que el desconcierto de todas las diferencias, de todos
dios en todas las cosas realizadas por el hombre de los sonidos de lo que aislado es cada instrumento a
la hora de hacerse una misma notación en un código buenos y los aceptare, porque eso es también parte
musical que se le llama partitura ese código, no es el del paisaje que veo a diario, y del que en la alegría
código de un sistema que zombifica a los músicos, le agradezco a la vida, excepto cuando algo de eso
sino que es el código de algo que trasciende a cual- daña deliberadamente la vida es decir cuando no
quier zombificación, es el código de la elegancia, es hay reciprocidad en esa estética.
el código de la libertad. Por ello zombies que asis-
ten a un concierto regresan vivos a sus casas, lle- Dedicado a mis amigos todos.
gan como entendiendo que lo que les pasó fue que
estaban aplastados por esa lógica de la mismidad A mis mentores Pablo Fernández,
que los obliga a dinámicas únicas, a formar parte Blanca Reguero y Emily Ito.
primavera-verano2017
Suscripciones derecho a recibir en tu domicilio (sólo en México) los dos ejemplares del año
DEPÓSITO BANCARIO
Scotiabank
Sucursal 059 de México, D. F.
ys
Cuenta: 00104238911
o
TRANSFERENCIA BANCARIA
Scotiabank
CLABE: 044180001042389114
la siguiente información:
Nombre Completo
Entidad)
Colaboradores
Tania Jimena Hernández Crespo. Profesora en la Facultad de Psicología, unam.
Comité editorial
Biblioteca
www.elalmapublicabiblioteca.net
ys
www.elalmapublica.net