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TEORIA ATÓMICA DE DEMÓCRITO

Los primeros filósofos griegos de la antigüedad fueron conocidos como


naturalistas, ya que se enfocaban en entender la naturaleza y los distintos
fenómenos que la integraban.
Uno de ellos fue Demócrito de Abdera (460 – 370 a. C.) donde creo la “Teoría
Atómica del Universo” junto a su mentor, Leucipo. En aquella época los
conocimientos no se alcanzaban mediante la experimentación, sino mediante el
razonamiento lógico, basándose en la formulación y el debate de ideas.
Demócrito sabía que si a una piedra la cortas
por la mitad, cada mitad tiene las mismas
propiedades que la piedra original. Razonaba
que, si seguías cortando la piedra en trozos
cada vez más pequeños llegarías a un punto
tan pequeño que ya no se podría dividir. Tan
básico, pero tan difícil de llegar a esta
conclusión sólo con el razonamiento.
Demócrito propuso que el mundo estaba
formado por partículas muy pequeñas e
indivisibles, de existencia eterna,
homogéneas e incompresibles, cuyas únicas diferencias eran de forma y
tamaño, nunca de funcionamiento interno. Estas partículas se bautizaron como
“átomos”, palabra que proviene del griego atémnein y significa “indivisible”.}
Entre las características del modelo atómico de Demócrito, algunas de las que
destacan son:
1. Los átomos se encuentran dispersos en el vacío.
2. Hay una fuerza que une a los átomos para formar la materia.
3. El número de átomos determina las propiedades de la materia.
Según Demócrito, las propiedades de la materia estaban determinadas por el
modo en que los átomos se agrupaban. Filósofos posteriores como Epicuro
añadieron a la teoría el movimiento aleatorio de los átomos.
Aunque más tarde otros filósofos como Platón y Aristóteles debatieron sus
postulados, pasarían muchos años para que existiera otra aportación en la
evolución del modelo atómico.
“El universo entero está compuesto por un
espacio ilimitado en el que existen
innumerables átomos. El espacio no tiene
límites, no tiene ni un arriba ni un abajo,
no tiene un centro ni frontera. Los átomos
no tienen cualidades, aparte de su forma.
No tienen peso, ni color, ni gusto. El
calor, el frío y el color son opiniones: en
realidad sólo existen los átomos, y el
vacío.”
“Los átomos son indivisibles, son los
granos elementales de la vida, que no
pueden subdividirse más, y todo se hace de ellos. Se mueven libremente en el
espacio, chocando entre sí.”
TEORÍA ATÓMICA DE DALTON
Se conoce como la Teoría atómica de Dalton o el Modelo atómico de Dalton al
primer modelo de bases científicas respecto a la estructura fundamental de la
materia. Fue postulado entre 1803 y 1807 por el naturalista, químico y
matemático británico John Dalton (1766-1844), bajo el nombre de “Teoría
atómica” o “Postulados atómicos”.
Este modelo propuso una explicación
científicamente verosímil a la mayoría
de los enigmas de la química del siglo
XVIII y XIX. Postula que toda la
materia del mundo está compuesta por
átomos, es decir, que existe un número
finito de partículas fundamentales.
Además, sostiene que simplemente a partir de la combinación de estas
partículas son posibles todas las estructuras complejas de la materia. El
antecesor directo fueron los griegos de la antigüedad clásica.

Los postulados de este modelo son:


-La materia se constituye de partículas mínimas, indestructibles e indivisibles
llamadas átomos.
-Los átomos de un mismo elemento son siempre idénticos entre sí, con la
misma masa y las mismas propiedades. En cambio, los átomos de elementos
diferentes tienen masas y propiedades distintas.
-Los átomos no se dividen ni pueden crearse ni destruirse durante las reacciones
químicas.
-Los átomos de elementos distintos pueden combinarse para formar compuestos
en diferentes proporciones y cantidades.
-Cuando se combinan para formar compuestos, los átomos se ordenan según
relaciones simples, descriptas mediante números enteros.
A pesar de la obvia importancia del Modelo atómico de Dalton en el
surgimiento de la química moderna, hay que notar que esta teoría posee
numerosas insuficiencias, como se señaló posteriormente.
Por ejemplo, Dalton pensaba que los gases eran sustancias monoatómicas, y
que las moléculas se componían siempre a partir de la menor proporción
posible. Esto lo llevó a suponer que el agua estaba compuesta por un átomo de
hidrógeno y otro de oxígeno (HO) y a calcular erradamente el peso atómico de
muchos compuestos.

Importancia de la Teoría Atómica de Dalton


El modelo sostenía que los átomos se combinaban para formar diferentes
sustancias.
Aunque no fue el definitivo en la historia de la
química, Dalton propuso el primer modelo,
fundacional para la química. Permitió resolver
cuestiones sobre la materia que no tenían
respuesta en su época.
Por ejemplo, explicó la causa de las proporciones estequiométricas fijas en las
reacciones químicas, es decir, por qué los compuestos se formaban de acuerdo a
cantidades fijas de cada átomo durante una reacción.
La posibilidad de comprobar muchos de los
postulados de Dalton sentaron las bases de la
química futura. Muchos de sus errores
permanecieron sin resolverse hasta el siglo
XIX, cuando aparecieron, por ejemplo, las
primeras evidencias de que los átomos, al
contrario de lo que suponía Dalton, sí eran
divisibles.
La gran ventaja de este modelo fue la de
explicar científicamente un conjunto inmenso
de hechos complejos y compuestos diversos a partir de una teoría combinatoria
bastante simple.

TEORIA ATOMICA DE LEWIS


También llamado “Diagrama de punto y
raya diagonal”, “Diagrama de valencia”,
“Diagrama de Lewis”, “Modelo del Átomo
Cúbico” o “Regla de octeto”.
Gilbert N. Lewis propuso una
representación gráfica de la estructura de
los átomos o molécula no polar distribuida
en forma de cubo, en cuyos ocho vértices
se hallaban los electrones.
Fue publicada su teoría, en 1916, con el
objetivo de explicar el fenómeno de la
valencia atómica y, a pesar de que rápidamente se abandonó en favor del
modelo de mecánica cuántica basado en la ecuación de Schrödinger, tiene una
importancia histórica gracias a su aporte en el entendimiento de los enlaces
químicos.
-Los enlaces covalentes simples se forman cuando dos átomos comparten un
borde (Estructura C) y esto resulta en el intercambio de dos electrones.
-Los enlaces iónicos se forman por la transferencia de un electrón de un cubo a
otro sin compartir un borde (estructura A).
-Un estado intermedio en el que sólo se comparte un rincón (estructura B)
también fue postulado por Lewis.
Los enlaces dobles se forman al compartir una cara entre dos átomos cúbicos.
Esto resulta en compartir cuatro electrones.

El modelo de átomo cúbico no pudo explicar los enlaces triples, porque no hay
forma de que dos cubos compartan tres bordes paralelos. Lewis sugirió que los
pares de electrones en los enlaces atómicos tienen una atracción especial, que
dan lugar a una estructura tetraédrica, en donde la nueva ubicación de los
electrones está representada por los círculos punteados en el centro de los
bordes gruesos. Esto permite la formación de un vínculo simple al compartir
una esquina, un vínculo doble al compartir un borde, y un vínculo triple al
compartir una cara. También explica la libre rotación alrededor de los enlaces
simples y la geometría tetraédrica del metano.

Este modelo sufrió una actualización por parte de Irving Langmuir, en 1919,
donde planteó el “átomo del octeto cúbico”.
TEORIA ATOMICA DE THOMSON
La siguiente gran aportación dentro de la evolución
del modelo atómico fue la del ganador del Premio
Nobel, J. J. Thomson (1856 – 1940). En 1897, él
retomó el modelo de Dalton, pero, a partir de una
serie de experimentos con tubos de rayos catódicos.
Los tubos de rayos catódicos son tubos de vidrio
sellados en los que se ha extraído la mayor parte del
aire. Al aplicar un alto voltaje entre los electrodos,
que se encuentran uno a cada lado del tubo, un rayo
de partículas fluye del cátodo (el electrodo
negativamente cargado) al ánodo (el electrodo
positivamente cargado). Los tubos se llaman "tubos
de rayos catódicos" porque el rayo de partículas o
"rayo catódico" se origina en el cátodo. El rayo
puede ser detectado al pintar el extremo del tubo correspondiente al ánodo con
un material conocido como fósforo. Cuando el rayo catódico lo impacta, el
fósforo produce una chispa o emite luz.

Para verificar las propiedades de las partículas, Thomson colocó el tubo de


rayos catódicos entre dos placas con cargas opuestas, y observó que el rayo se
desviaba, alejándose de la placa cargada negativamente y acercándose a la placa
cargada positivamente. De este hecho infirió que el rayo estaba compuesto de
partículas negativamente cargadas.
Thomson también colocó dos imanes a cada lado del tubo, y observó que el
campo magnético también desviaba el rayo catódico. Los resultados de este
experimento ayudaron a Thomson a determinar la razón masa a carga de las
partículas del rayo catódico, que lo llevó a un descubrimiento fascinante -−la
masa de cada partícula era mucho, mucho menor que la de todo átomo conocido
—. Thomson repitió su experimento con electrodos hechos de diferentes
metales, y encontró que las propiedades del rayo catódico permanecían
constantes, sin importar el material del cual se originaban. De esta evidencia,
Thomson concluyó lo siguiente:
-El rayo catódico está compuesto de partículas negativamente cargadas.
-Las partículas deben existir como partes del átomo, pues la masa de cada
partícula es tan solo \sim∼\sim\dfrac{1}{2000} 20001 start fraction, 1, divided
by, 2000, end fraction de la masa de un átomo de hidrógeno.
-Estas partículas subatómicas se encuentran dentro de los átomos de todos los
elementos.
Mientras que al principio fueron controversiales, los científicos gradualmente
aceptaron los descubrimientos de Thomson. Con el tiempo, sus partículas de
rayo catódico adquirieron un nombre más familiar: electrones. El
descubrimiento de los electrones refutó parte de la teoría atómica de Dalton,
que suponía que los átomos eran indivisibles. Para explicar la existencia de los
electrones se necesitaba un modelo atómico completamente nuevo.
El modelo del budín de pasas
Thomson sabía que los átomos tenían una carga total neutra. Por lo tanto,
razonó que debía haber una fuente de carga positiva dentro del átomo que
balanceara la carga negativa de los electrones. Esto llevó a Thomson a proponer
que los átomos podían describirse como cargas negativas flotando en una sopa
de carga positiva difusa. A menudo
llamamos modelo de budín de pasas del
átomo a este modelo, debido al hecho de
que su descripción es muy similar a un
budín de pasas, un postre inglés muy
popular (observa la imagen a
continuación).
Dado lo que ahora sabemos de la estructura real de los átomos, este modelo
puede sonar un poco descabellado. Afortunadamente, los científicos
continuaron investigando la estructura del átomo, y pusieron a prueba la validez
del modelo del budín de pasas de Thomson.
TEORÍA DE RUTHERFORD
El modelo atómico de Rutherford, como su
nombre lo indica, fue uno de los modelos
propuestos para explicar la estructura interna
del átomo. En 1911 el químico y físico
británico Ernest Rutherford propuso este
modelo a partir de los resultados de su
experimentación con láminas de oro.
Este modelo constituyó un quiebre con modelos
anteriores como el Modelo atómico de Dalton y
el modelo atómico de Thompson, y un paso
hacia adelante respecto al modelo actualmente
aceptado.
En su modelo atómico, Rutherford propuso que los átomos tienen un núcleo
central donde se encuentra el mayor porcentaje de su masa. Además, según esta
teoría, este núcleo tiene carga eléctrica positiva y es orbitado por partículas de
carga opuesta y menor tamaño (electrones).
Según sus consideraciones, el átomo operaba como un Sistema Solar de
electrones que orbitan alrededor de un núcleo atómico más pesado, como hacen
los planetas alrededor del Sol.
El modelo atómico de Rutherford puede resumirse en las siguientes tres
proposiciones:
La mayor parte de la masa atómica se concentra en el núcleo, de mayor tamaño
y peso que el resto de las partículas, y dotado de carga eléctrica positiva.
Alrededor del núcleo y a grandes distancias de él se encuentran los electrones,
de carga eléctrica negativa, que lo orbitan en trayectorias circulares.
La suma de las cargas eléctricas positivas y negativas de un átomo debería dar
cero como resultado, es decir, deberían ser iguales, para que el átomo sea
eléctricamente neutro.
Rutherford no solo propuso esta estructura para el átomo, sino que además
calculó su tamaño y lo comparó con el tamaño del núcleo, y llegó a la
conclusión de que una buena parte de la composición del átomo es espacio
vacío.
Este modelo, por otra parte, tiene ciertas limitaciones que se pudieron resolver
con el avance del conocimiento y la tecnología:
No se podía explicar cómo era
posible que en el núcleo atómico se
mantuvieran unidas un conjunto de
cargas positivas, pues deberían
repelerse, ya que son todas cargas
del mismo signo.
No se podía explicar la estabilidad del átomo, pues al considerar los electrones
de carga negativa que gira alrededor del núcleo positivo, en algún momento
estos electrones debían perder energía y colapsar contra el núcleo.
El modelo atómico de Rutherford estuvo vigente durante poco tiempo, y fue
sustituido por el modelo atómico propuesto por el físico danés Niels Bohr en
1913, en el que se resolvían algunas de las limitantes y se incorporaban las
propuestas teóricas desarrolladas por Albert Einstein en 1905.

El experimento de Rutherford

El método experimental de Rutherford partía de varias láminas delgadas de oro


que serían bombardeadas en laboratorio con núcleos de helio (partículas alfa,
que tienen carga positiva), midiendo así los ángulos de desviación del haz de
partículas al atravesar el oro.

Este comportamiento, que en ocasiones alcanzó desviaciones de hasta 90°, no


concordaba con el modelo atómico propuesto por Thompson, imperante en la
época.

El modelo de Thompson propone que el átomo es una esfera positiva, con los
electrones de carga negativa incrustados en ella. Por esta razón se asemeja el
modelo a un pudín con pasas: el pudín sería el átomo y las pasas serían los
electrones.
Por otra parte, el modelo de Rutherford establece que el átomo tiene la carga
positiva concentrada en el núcleo y los electrones orbitan alrededor de él. Si el
átomo tuviese la estructura planteada por Thompson, las partículas alfa
(positivas), al atravesar la lámina de oro deberían seguir sus trayectorias o
desviarse muy poco. Sin embargo,
lo que ocurrió, es que se vieron
desviaciones de estas partículas de
hasta 90 y 180°, lo que demostró
que el átomo, efectivamente, tiene
la carga positiva concentrada en su
centro (como proponía Rutherford) y no distribuida en una esfera (como
proponía Thompson).
TEORIA ATOMICA DE BOHR

El modelo atómico de Bohr supuso toda una


revolución cuando se presentó en 1913 pero,
aunque todavía se siga enseñando en las
escuelas, hace décadas que quedó obsoleto.
Sin embargo, su autor también desarrolló una
teoría cuántica mucho más amplia y
desconocida, cuyos principios fueron
cambiando con el tiempo. Investigadores de la
Universidad de Barcelona han analizado ahora
la evolución del pensamiento del físico danés,
todo un ejemplo de cómo se van forjando las
teorías científicas.

“Bohr publicó su modelo en 1913, y aunque


fue revolucionario, se trataba de una propuesta
que no acababa de explicar bien diversos resultados experimentales, así que
entre 1918 y 1923 estableció una teoría mucho más amplia y bien
fundamentada que incorporaba su modelo anterior”, explica a Sinc Blai Pié i
Valls, físico de la Universidad de Barcelona.

El modelo de Bohr fue el primero en reconocer el concepto de la mecánica


cuántica en la estructura electrónica de un átomo de hidrógeno y,
además, develó cómo era la estabilidad de los átomos.

La llamada teoría cuántica de Bohr planteaba que el electrón da vueltas al


núcleo siguiendo las leyes clásicas pero sometido a limitaciones, como las
órbitas que puede ocupar y la energía que pierde en forma de radiación cuando
salta de una órbita a otra. Pero, además, trataba de explicar de manera unificada
todos los fenómenos cuánticos vistos hasta el momento. Pero las pruebas
experimentales no evidenciaban el proceso planteado por la teoría clásica. A
partir del modelo de Bohr y del trabajo de varios físicos más, lograron
resolverlo.

Características del modelo


atómico de Bohr
El modelo atómico de Bohr, que resultó la base del modelo atómico actual,
explicaba la estabilidad de la materia y la conformación de los enlaces
químicos. Observar la representación gráfica del modelo de Bohr hará más
sencillo comprender las siguientes características:

 Los electrones que rodean el núcleo de un átomo pueden ser internos o


externos. Ambos tipos de electrones se encuentran en órbitas circulares
alrededor del núcleo, pero los electrones no pueden estar en todas las
órbitas, solo en las permitidas.
 Los electrones están en niveles definidos de energía y a distancias fijas.
La órbita más cercana al núcleo tiene energía más baja respecto a la órbita
más alejada del núcleo, que tiene más energía.
 Las órbitas tienen un número determinado de electrones, según su
distancia respecto al núcleo. Esa escala de distribución se denomina
“configuraciones electrónicas” y es equivalente a la escala de la tabla
periódica (representada en el orden de las filas).
 Los electrones pueden saltar de nivel o de órbita, y este salto solo puede
ocurrir desde y hacia las órbitas permitidas. Por ejemplo, un electrón que
salta de una órbita exterior a una interior pierde energía, que se desprende
en forma de fotón o luz. Si salta de una órbita interior a una exterior, gana
energía.
 La mínima cantidad de energía que se puede ganar o perder en cualquier
longitud de onda se denomina “cuanto de energía”, de allí surge la
expresión “salto cuántico” para hacer referencia a un cambio de los
electrones de un nivel energético a otro. Este cambio está asociado a una
pérdida o ganancia de energía.

TEORIA ATÓMICA DE SOMMERFIELD


Fue propuesto por Arnold Sommerfield en
1916, para intentar cubrir las deficiencias que
presentaba el modelo de Bohr. Por lo tanto, es
una versión relativista del modelo de
Rutherford-Bohr y se basó, en parte, en los
postulados relativistas de Albert Einstein.

El modelo atómico de Bohr no tenía fisuras


cuando se trataba del átomo de hidrógeno. Sin
embargo, cuando se trataba de átomos de otros
elementos químicos, los electrones de un
mismo nivel energético tenían distinta energía.

Modelo atómico de Sommerfeld por lo tanto,


afirmó una serie de correcciones al modelo:

Descubrió que en los electrones de ciertos átomos se alcanzaban velocidades


cercanas a la de la luz. Realizó los cálculos para electrones relativistas.

Los electrones se mueven alrededor del núcleo del átomo, en órbitas circulares
O ELÍPTICAS.

A partir del segundo nivel energético existe uno o más subniveles en el mismo
nivel con energías un poco diferentes.

La excentricidad de la órbita dio lugar a un nuevo número cuántico que


determina la forma de los orbitales: el número cuántico azimutal.

Los electrones tienen corrientes eléctricas minúsculas.


TEORIA ATOMICA DE
Se le conoce como “Modelo Cuántico-
Ondulatorio” y fue propuesto por Erwin
Schrödinger, en 1926, a partir de los estudios
de De Broglie, Bohr y Sommerfeld.

Su modelo concibe los electrones como


ondulaciones de la materia, es decir, describe el
comportamiento ondulatorio del electrón.

Schrödinger sugirió que el movimiento de los


electrones en el átomo correspondía a la
dualidad onda-partícula y, en consecuencia, los
electrones podían moverse alrededor del núcleo
como ondas estacionarias.

Esto permitió la formulación posterior de una


interpretación probabilística de la función de
onda (magnitud que sirve para describir la probabilidad de encontrar a una
partícula en el espacio) por parte de Max Born y significaba que se podía
estudiar probabilísticamente la posición de un electrón o su cantidad de
movimiento pero no ambas cosas a la vez, debido al Principio de Incertidumbre
de Heisenberg.

Schrödinger fue galardonado con el Premio Nobel, en 1933, por sus


aportaciones a la teoría atómica, el desarrollo de la ecuación para calcular la
probabilidad de que un electrón se encuentre en una posición específica.

Por lo tanto, las características de su modelo son:

-Describe el movimiento de los electrones como ondas estacionarias.

-Los electrones se mueven constantemente, es decir, no tienen una posición fija


o definida dentro del átomo.

-No predice la ubicación del electrón, ni describe la ruta que realiza dentro del
átomo. Solo establece una zona de probabilidad para ubicar al electrón.

-Estas áreas de probabilidad se denominan orbitales atómicos. Los orbitales


describen un movimiento de traslación alrededor del núcleo del átomo.

-Estos orbitales atómicos tienen diferentes niveles y sub-niveles de energía, y


pueden definirse entre nubes de electrones.
-El modelo no contempla la estabilidad del núcleo, solo se remite a explicar la
mecánica cuántica asociada al movimiento de los electrones dentro del átomo.

En la imagen se puede ver la densidad electrónica que indica la probabilidad de


encontrar un electrón cerca del núcleo. Cuando más cercana esté del núcleo
(zona morada) más probabilidad habrá, mientras que será menor si se aleja del
núcleo (zona violeta).

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