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Tema 1. La tierra en el universo. Geología de los planetas.

Origen de la tierra y del


sistema solar.
ÍNDICE
Introducción
Índice
Justificación
1. Origen y organización de la materia universal
2. Origen y organización del Universo
3. El Sistema Solar y sus planetas
4. Origen y evolución de La Tierra
Aplicación didáctica
Conclusión
Legislación
Bibliografía
Webgrafía
Introducción
El estudio del Universo ha sido constante a lo largo de la evolución histórica. Las
nuevas tecnologías, han permitido estudiar, no sólo los cielos desde la Tierra sino
también hemos realizado viajes espaciales, hemos lanzado sondas, satélites alrededor
de la Tierra, e incluso nos hemos atrevido a enviar mensajes a la espera de una
respuesta. Conocer el universo nos permite entender el origen y evolución, no solo de
la materia sino de la vida, esa que ansiamos encontrar fuera de nuestro planeta.
Índice
A continuación, se plantearán las diferentes hipótesis sobre el origen del Universo y la
formación de los elementos químicos, del Sistema Solar, así como de los planetas que
forman parte del mismo, entre los que se encuentra la Tierra. También se expondrán
las diferentes fases de evolución de la Tierra.
Justificación
El desarrollo de los conocimientos científicos permite comprender el mundo que nos
rodea y a su vez nos permite desarrollar actitudes responsables sobre aspectos ligados
a la vida, la salud o el medioambiente, acercándonos a la cultura contemporánea y
constituyendo una tarea colectiva inserta en el contexto social.
Estos saberes básicos se imparten en 4º de la ESO, en la materia de Biología y
Geología, bloque V. La Tierra en el universo, y en la asignatura de Biología, Geología y
Ciencias Ambientales en base a los saberes básicos: III. Historia de la Tierra y la vida,
según el Decreto 30/2023, de 16 de marzo, por el que se establecen la ordenación y el
currículo de la Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato, en la Comunidad
Autónoma de Canarias. Todo esto basado en el currículo nacional, según recoge el Real
Decreto 217/2022, de 29 de marzo, por el que se establece la ordenación y las
enseñanzas mínimas de la Educación Secundaria Obligatoria y el Real Decreto
243/2022, de 5 de abril, por el que se establecen la ordenación y las enseñanzas
mínimas del Bachillerato.
El Universo está formado por galaxias, nebulosas, estrellas, planetas, satélites,
asteroides, cometas y otros astros. Concretamente, la Tierra, planeta en el que
habitamos, se encuentra en el Sistema Solar constituido fundamentalmente, por el Sol,
otros 7 planetas con sus satélites, además de asteroides y cometas.
1. Origen y organización del Universo
El Universo está constituido por una serie de sistemas macroscópicos y microscópicos,
cuyos orígenes y evolución están íntimamente ligados entre sí. Existen tres teorías que
hipotetizan los comienzos del Universo.
1.1. La teoría del estado estacionario
La Teoría del estado estacionario, se propuso a mediados del siglo XX y plantea que la
formación de los elementos ha sido un proceso continuo (que continúa en la
actualidad), manteniendo una densidad constante pero un volumen en expansión
constante, pues la materia está en continua creación. Esta teoría surge de la aplicación
del llamado principio cosmológico perfecto, el cual sostiene que para cualquier
observador, el universo debe parecer el mismo en cualquier lugar del espacio y
tiempo, siendo sus propiedades constantes en ambas dimensiones. Se postula que el
Universo es uniforme espacial y temporalmente, que no existe un centro del espacio ni
un origen del tiempo, proponiendo que el Universo ha existido siempre y siempre
existirá, sin comienzo ni fin. La creación constante y espontánea de la materia no sigue
las leyes físicas, lo cual hace que esta teoría no tenga tanto apoyo científico.
Sin embargo, con el descubrimiento en 1964 de la radiación electromagnética
denominada de fondo (o el fondo cósmico de microondas) se confirmó el modelo
cosmológico predominante para explicar el origen, comienzos y posterior evolución del
Universo, la teoría de la Gran Explosión o el Big Bang.
1.2. La teoría de la gran explosión o Big Bang
El Big Bang es el modelo estándar que postula que el universo se hallaba en un estado
de altamente elevado de densidad (toda la energía y materia estaba comprimida en un
punto) y temperatura y luego tras una explosión inicial comenzó a expandirse. En
contraposición al estado estacionario, esta teoría afirma que debido a su continua
expansión, la densidad del Universo disminuye progresivamente. Tras esa explosión
inicial, el universo se enfrió lo suficiente como para permitir la formación de partículas
subatómicas, y posteriormente los átomos formando nubes gigantes de elementos
químicos primordiales, que, por condensaciones sucesivas y gracias a la gravedad,
formarían los cuerpos estelares y galaxias.
Sabemos que cuanto más lejos miramos, más atrás en el tiempo vemos, ya que en el
espacio las distancias se miden en años luz, la velocidad a la que viaja la luz en el vacío
en un año (1al = 9,461 x 1012 Km). Así por ejemplo, la luz que observamos del sol nos
llega 8 minutos después de emitirse. Sí observamos, la siguiente estrella más cercana a
nosotros, es la Alpha Centauri y está a 4 años luz. Cuanto más lejos miramos, más atrás
en el tiempo vemos. Por ello es lógico preguntarse, que si miramos más lejos,
¿podríamos ver el inicio del universo? La respuesta es no, ya que al inicio no había luz.
La primera imagen que podemos observar, es esa radiación de fondo de microondas
descubierta en 1965. Se trataba nada más y nada menos que del eco de la creación del
universo. Esta radiación proporciona una imagen, del momento en el que la
temperatura inicial descendió lo suficiente como para permitir que los electrones y
protones formaran átomos de hidrógeno, lo cual sucedió 379 000 años después del Big
Bang, que se estima en 13.700 millones de años.
1.3. La teoría del Universo Pulsante
Según la teoría del Universo Pulsante, el Universo tendría dos tipos de fases periódicas:
de expansión y de reducción de la densidad, y de contracción y condensación de la
materia hasta una nueva explosión. Este modelo puede ser compatible con el Big Bang,
dado que la fase actual de expansión (evidenciada por el efecto Doppler) podría ser
seguida de otra de compresión. El efecto Doppler explica que la luz que nos llega de las
estrellas sufre un desplazamiento hacia el espectro rojo, en comparación con los
espectros obtenidos en laboratorio de determinados elementos químicos. Cuanto más
alejada está una galaxia, las bandas de absorción aparecen cada vez más desplazada
hacia el rojo, con mayores longitudes de onda. Esto explica que si todas las estrellas se
alejan de nosotros, el universo debe ser un sistema en expansión y a su vez en el
pasado debieron estar concentradas en un mismo punto.
2. Organización del Universo
La aparición de las distintas partículas elementales y de las fuerzas que rigen su
comportamiento en el Universo, no es más que el resultado del enfriamiento
progresivo de la energía primordial liberada de la gran explosión. Se conocen diversas
eras tras la explosión.
- La era cuántica, donde toda la materia se hallaba en forma de energía
existiendo únicamente la fuerza electronuclear gravitatoria.
- La era hadrónica, una primera bajada de temperatura permitío separar las
fuerzas gravedad, fuerza nuclear fuerte y débil y electromagnetismo,
apareciendo las primeras asociaciones estables de partículas (protones,
neutrones, mesones y antipartículas 1)
- La era leptónica, desaparece la antimateria y se producen fotones
- Era radiactiva, donde empiezan a asociarse protones y neutrones formando
núcleos de H, y gracias a (aún) elevada temperatura se dan reacciones de
fusión nuclear formando núcleos de He. Los electrones libres se combinaron
con los núcleos de H y He formando átomos.
- Finalmente la era estelar, que abarca hasta el momento actual. A partir de las
inmensas nebulosas de H y de He, pudieron formarse las galaxias por un
mecanismo de inestabilidad gravitatoria.
La materia dispersa tiende a concentrarse por la atracción que unas partículas ejercen
sobre otras, pero al acercarse van desprendiendo parte de la energía en forma de
calor. Esta energía desprendida forma la energía nuclear. Excitados los núcleos y
separados de los electrones por la inmensa agitación térmica, superan las fuerzas de
repulsión nuclear y se producen choques y procesos de fusión nuclear. Los nuevos
núcleos tienen una masa igual a la suma de los que chocaron menos una parte que se
ha transformado en energía, que es emitida como radiación La materia emisora y
receptora de esta radiación se expande deteniendo momentáneamente en colapso
gravitatorio y durante un tiempo se mantiene el equilibrio (etapa larga y tranquila de la
vida de las estrellas), pero acaba venciendo la gravedad.
Con respecto a la organización del Universo y partiendo del nivel de cuerpo estelar,
considerado como cualquier unidad estructural existente, la gravitación, junto con la
expansión universal, ha dividido la materia inicialmente homogénea en estructuras
cada vez menores, galaxias, estrellas, planetas, etc.
Dentro de las estrellas y objetos estelares se encuentran: estrellas simples, binarias,
gigantes, enanas; cuásares, fuentes astronómicas de energía electromagnética, que
incluye radiofrecuencias y luz visible (son muy lejanos en el Universo); pulsars, estrellas
muy pequeñas de neutrones que giran rápidamente y que producen radiación
electromagnética como los rayos X; novas y supernovas, estrellas que han explotado,
con un brillo muy alto; cometas, constituidos por hielo, polvo y rocas, orbitan
alrededor del Sol según trayectorias elípticas, parabólicas o hiperbólicas; agujeros
negros, cuerpo de masa grande y poco volumen que absorbe cualquier materia o
energía de su campo de acción, incluida la luz; galaxias y grupos de galaxias, grandes
acumulaciones de materia con aspecto de nebulosa al telescopio óptico.
3. El Sistema Solar y sus planetas
El Sistema Solar se encuentra en la zona periférica de la galaxia llamada Vía Láctea.
Esta galaxia es de tipo espiral y presenta dos brazos, integrándose a su vez en el
llamado Grupo Local, constituido por otras 16 galaxias del entorno cercano como
Andrómeda, la Osa Menor o las Nubes de Magallanes. A mayor distancia, en lo que se
denomina “porción cercana del Universo”, se encuentran galaxias como Perseo,
Hércules o la Osa Mayor.
Los cuerpos del Sistema Solar se formaron hace 4500 o 5000 millones de años a partir
de una masa grande y difusa de materia estelar en rotación, que se fragmentaría para
dar lugar a otras masas que constituirían el Sol, los planetas y cuerpos de menor
tamaño. La diferenciación entre estrella y planeta depende de la cantidad de materia
de cada uno de los cuerpos. Las grandes masas darán lugar a estrellas, debido a su
contracción gravitatoria que genera energía suficiente para iniciar procesos de fusión
nuclear, emitiendo una gran cantidad de energía.
El sistema solar está formado por el Sol, 8 planetas y más de treinta satélites. Las
acumulaciones de materia también han generado asteroides (con un tamaño de unos
centímetros a cientos de metros), concentrados especialmente entre Marte y Júpiter.
Se cree que la atracción gravitatoria de Júpiter impidió que la contracción suficiente de
materia para que se formase otro planeta entre él y Marte. Además, se han producido
eventos de captura gravitatoria de cuerpos externos al Sistema Solar que han pasado
cerca y se han visto atrapados por su campo gravitatorio, como los cometas, que
tienen órbita excéntrica al Sol, pero son atraídos por él en su viaje.
En cuanto a los planetas del Sistema Solar, se puede establecer una diferenciación
entre planetas mayores y menores. Los planetas menores (interiores) son Mercurio,
Venus, La Tierra y Marte. Estos cuatro primeros planetas cuentan con un núcleo
metálico en su interior y poseen una corteza sólida, por lo que también reciben el
nombre de planetas rocosos. Presentan elementos químicos con masa atómica
elevada, atmósfera poco extensa en comparación a su radio, una órbita casi circular y
pocos o ningún satélite. El único planeta en el que se han dado las condiciones
adecuadas para la vida ha sido en la Tierra. Sin embargo, existen indicios que apuntan
a que Marte, un planeta actualmente seco, rocoso, inhóspito y frío, pudo ser en el
pasado un mundo más cálido cubierto de agua, motivo por el que los científicos no
cesan en su empeño de encontrar signos de vida pretérita.
De hecho, en Marte podemos encontrar agua a día de hoy, no obstante la atmósfera
marciana es demasiado delgada para que exista agua líquida por mucho tiempo en la
superficie, por lo que la mayor parte del agua se encuentra en forma de hielo debajo
de la superficie en las regiones polares.
Por su parte, los planetas mayores (exteriores) son Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno,
con órbitas mucho más lejanas al sol. Presentan una corteza fluida, densidad próxima a
la del agua, elementos químicos de baja masa atómica, atmósfera muy extensa y rica
en H y He, órbita excéntrica y numerosos satélites. También se conocen como planetas
jovianos. Júpiter, el planeta más grande del sistema solar, y Saturno, famoso por sus
anillos, son los únicos totalmente gaseosos. En el caso de Urano y Neptuno, están
constituidos principalmente por hielo, roca y gas.
Plutón, es una excepción. Desde su descubrimiento en 1930 se le consideraba el
noveno planeta, pero en el 2006 la Unión Astronómica creó la categoría plutoide en la
que se incluye. En la actualidad sigue discutiéndose su categoría como planeta, planeta
enano o sistema de planeta doble junto con Caronte.
4. Origen y evolución de La Tierra
La Tierra se originó a partir de una acumulación de materia estelar a baja temperatura,
que fue aumentando progresivamente por el efecto de la contracción gravitatoria. En
su evolución posterior sucedieron una serie de procesos: desgasificación, reducción de
óxidos, diferenciación y calentamiento. Debido al pequeño tamaño del planeta se
perdieron una serie de gases frecuentes en otros planetas mayores (desgasificación).
Al calentarse la materia debido a la contracción gravitatoria y por la acción de H e, el Fe
primitivo que estaba en estado oxidado se reduce a Fe metálico desprendiendo vapor
de agua (reducción de óxidos). Además de esto, la contracción gravitatoria provocó la
conversión de la energía potencial en calorífica, y sumado a otros procesos radiactivos
se produjo el calentamiento del planeta. Aún hoy hay flujo de calor hacia el exterior
terrestre.
La diferenciación consistió en la separación de las capas de la Tierra (geosferas) según
un gradiente de densidad, los materiales más densos se hundieron y los más ligeros
ascendieron. Con ello se generaron geosferas sólidas (Corteza, Manto y Núcleo) y
fluidas (Atmósfera e Hidrosfera). La hidrosfera se formó a partir del H 2O que formaba
parte de la Tierra primitiva, dado que se incorporó a los compuestos cristalinos y
posteriormente parte de ella fue devuelta a la superficie debido a la actividad
volcánica, enfriándose. La atmósfera terrestre ha pasado de un ambiente anaerobio y
reductor a oxidante y aerobio, debido a la acción de los seres vivos.
Aplicación didáctica
En base a la importancia en los contenidos anteriormente expuestos, el objetivo
prioritario será lograr el aprendizaje significativo. Hasta ahora los alumnos no han sido
ajenos a los conceptos planteados, por lo que partiendo desde sus conocimientos
previos establecerán conexiones con la nueva información, logrando la comprensión y
la memorización de los mismos. Para ello, se empleará la metodología de investigación
guiada y los alumnos/as realizarán un estudio comparado de los planetas del Sistema
Solar y sobre las distancias del Universo.
Conclusión
El Universo se compone de una serie de sistemas que pueden observase a distinta
escala en función del tamaño del sistema. Existen diferentes teorías sobre el origen de
este y de los elementos, siendo la principal de ellas el Big Bang: una gran explosión tras
la que comenzó un proceso de expansión continua a partir de la cual se generaron los
elementos químicos y por condensación sucesiva generó los cuerpos estelares. Del
mismo modo, la Tierra deriva de la acumulación de materia estelar que ha sufrido una
serie de procesos evolutivos como la formación de sus diferentes capas. Los cuerpos
estelares son muy variados y de características diversas, constituyendo distintas
unidades estructurales que podemos observar del Universo.
Legislación
Real Decreto 217/2022, de 29 de marzo, por el que se establecen la ordenación y las
enseñanzas mínimas de la Educación Secundaria Obligatoria. Boletín Oficial del Estado,
76, de 30 de marzo de 2022.
Real Decreto 243/2022, de 5 de abril, por el que se establecen la ordenación y las
enseñanzas mínimas del Bachillerato. Boletín Oficial del Estado, 82, de 6 de abril de
2022.
Decreto 30/2023, de 16 de marzo, por el que se establecen la ordenación y el currículo
de la Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato en la Comunidad Autónoma
de Canarias. Boletín Oficial de Canarias, 58, de 23 de marzo de 2023.
Bibliografía

Asimov, I. (2000). El Universo. Alianza.

Castaño, E., Cuello, A., Gutiérrez, N., Rivero, A., Sampedro, C., y Solís-Ramírez, E. (2007).
Educación y cultura científica. Consejería de Educación de la Junta de Andalucía.
Lillo, J., López. M. T., Redonet, L. F., Robles, F., Usera, J. M. (1982). Geología. Ecir.
Webgrafía
Rodríguez, H. (2023). Así son los 8 planetas del sistema solar. National Geographic
España.

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