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LA ESFERA JURÍDICA DE LA PERSONA

La esfera jurídica es el conjunto de las relaciones jurídicas de los que una


persona es titular. Dentro de ella pueden identificarse dos partes:
 Una formada por las relaciones de contenido patrimonial, denominada
patrimonio.
 Una segunda formada por la relaciones de contenido personal, dentro de
la cual ocupan un lugar destacado los denominados derechos de la
personalidad.

El patrimonio.
Se define como el conjunto de relaciones jurídicas susceptibles de valoración
económica. El patrimonio es una cuestión abstracta y es fruto de la deducción
de los autores del Derecho civil. Tenemos un conjunto de instituciones que se
admiten las ideas de patrimonio, por ejemplo, la herencia. Cada autor tiene sus
propias ideas sobre determinadas instituciones y del patrimonio.

El contenido del patrimonio


Se hacen dos puntualizaciones:
 Forman parte del patrimonio los derechos sobre las cosas y no las
cosas. Al ser los derechos y no las cosas los que forman el patrimonio,
una misma cosa puede encontrarse en dos patrimonios distintos.
 Si las deudas deben incluirse dentro del patrimonio. Actualmente se
considera que sí. Las deudas son un dato que nos permiten saber la
solvencia de una persona.

Finalidades del activo del patrimonio


 Satisfacer las necesidades y los fines de esa persona.
 Garantizar a los acreedores de esa persona la satisfacción o el
cumplimiento de sus créditos frente al deudor. Esto se conoce como
“responsabilidad patrimonial universal”, recogido en el artículo 1911 del
Código civil.
Si alguien no cumple lo prometido, se le fuerza a través del patrimonio.
Se responde patrimonialmente y no personalmente.
Aunque habla de universal no abarca a todos (no los bienes aquellos
que permiten nuestra subsistencia).

La capacidad patrimonial
Es una manifestación de la capacidad jurídica. Nos permite ser el titular de
derechos patrimoniales para lo que no es necesario que el patrimonio sea muy
abundante.
Todos tenemos patrimonio (por ejemplo los recién nacidos no). Quien tiene
deudas también tiene patrimonio. Al Derecho civil no le importa cuál es el
patrimonio neto de una persona, lo que se valoran son otras cuestiones.

¿Es posible transmitir en un solo acto jurídico todo el patrimonio?


No, el derecho no nos permite crear problemas que no existen. En el Estado
Democrático de Derecho, las personas ayudamos en conjunto aquellas
personas que no tienen.
Si una persona tiene y se quiere deshacer de todo, no sería justo que el resto
le mantuviera. La única forma sería por donación, pero el ordenamiento jurídico
no nos permite transmitir todos nuestros bienes (634 del Código civil).
El supuesto que nos permite transmitir todos nuestros bienes en un solo acto
jurídico es la herencia.

Tipos de patrimonio
 Patrimonios separados: masas patrimoniales que durante un
determinado momento están diferenciados o separados del resto del
patrimonio de su titular, para tener una finalidad específica. Por ejemplo:
la herencia aceptada a beneficio de inventario.
 Patrimonios colectivos: aquellos en los que hay varios titulares. Por
ejemplo: patrimonio ganancial o herencia indivisa.
 Patrimonios de destino: nuestro Derecho admite la existencia de
patrimonios sin titular pero de forma transitoria. Por ejemplo: herencia
yacente, mientras no se acepte la herencia está en situación yacente.

Derechos de la personalidad.
Recaen sobre determinados atributos o cualidades del ser humano.
Presenta unas características que los distinguen de otros derechos subjetivos:
 Son derechos necesarios, los tiene todo el mundo.
 Son inseparables de la persona. A su vez implica que:
o Son derechos inalienables, no se pueden enajenar, no podemos
disponer de ellos.
o Son irrenunciables.
o Son imprescriptibles.
o Son innatos u originarios, se ostentan en el mismo momento del
nacimiento.
o Son derechos absolutos, se pueden ejercitar y exigir ante todo el
mundo.
o Son extrapatrimoniales.

Principales derechos de la personalidad


 Derechos de la personalidad de la esfera corporal:
o Derecho a la vida.
o Derecho a la integridad física.
o Derecho de libertad.
 Derechos de la personalidad de la esfera espiritual:
o Derecho al honor.
o Derecho a la intimidad personal y familiar.
o Derecho a la imagen.
o Derecho al nombre.
o Derecho de autor.

Las formas de defensa de estos derechos


Tienen una especial defensa por parte del ordenamiento jurídico. Hay distintos
disciplinas en nuestro ordenamiento que confieren protección a estos derechos:
 Desde el punto de vista penal.
 Desde el derecho civil las protege a través del artículo 1902.
(ambas protecciones son compatibles)
 Desde el punto de vista constitucional: algunos son derechos
fundamentales, además de ser derechos de la persona.
Tienen la protección de la Constitución: a través del instrumento
normativo (ley orgánica), también del artículo 53.2 de la Constitución
española, en el que se dice que si se lesiona uno de estos derechos de
un particular, puede acudir a los tribunales ordinarios que deberán dar
una respuesta aplicando los principios de preferencia y sumariedad. Si
no se tiene satisfacción por medio de los tribunales ordinarios, tienes
posibilidad de recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.
Preferencia: va primero los derechos de una persona y después el
resto.
Sumariedad: procedimiento más breve que el procedimiento
ordinario.

El derecho a la vida se recogen el artículo 15 de la Constitución. Según la


sentencia 53/1985 de 11 de abril, el Tribunal Constitucional Dijo que el
nasciturus no tenía subjetividad jurídica por lo que el artículo 15 no le afectaba,
aunque considera que es un bien protegible y que debe estar protegido por el
ordenamiento jurídico.
En el caso del aborto, se contraponen dos derechos: el derecho del nasciturus
y el de la mujer. Si se dan los supuestos de la sentencia, prevalece el derecho
de la mujer y si no, el del nasciturus. Desde el 2010 el aborto es libre y está
controlado por un sistema de plazos.
En España, la eutanasia no es legal. Hace referencia a las personas con
enfermedades mortales. Lo que sí está permitido en el ordenamiento jurídico es
elegir los tratamientos que nos vayan a aplicar. No se puede aplicar nada que
no hayamos accedido, y si no estamos conscientes se puede elaborar un
testamento vital o puede hacerlo otra persona.

El derecho a la integridad física es esencial y nadie puede consentir que se


dañe dicho derecho. Las personas que intentan suicidarse atentan contra su
propio derecho pero no es castigado a no ser que lo lleve a cabo un tercero.
Hay supuestos en los que se puede poner en peligro la integridad física, pero
son cuestiones admitidas socialmente. Por ejemplo el ejército, los bomberos,
policía, etc.
Podemos disponer de determinados órganos de nuestro cuerpo como los
riñones, la sangre, el material genético etc. pero solo se puede ofrecer de
forma altruista, no se pueden vender. Solo pueden donarse si se es mayor de
edad. En cuanto a los órganos de los cadáveres, todos somos donantes
potenciales de órganos. Todo lo que pueda reutilizarse en un cadáver se
reutilizan, a no ser que esa persona durante su vida haya mostrado su
negativa. No se necesita un documento donde queda recogido su voluntad.
El derecho a la libertad se recoge en el artículo 17 de la Constitución. Nadie
puede ir en contra de ella, porque si no incurriría en un delito como la detención
ilegal, el secuestro etc.
El máximo tiempo que nos pueden tener retenidos los cuerpos de seguridad es
de 72 horas.

Los derechos de la esfera espiritual también se pueden llamar derecho a la


integridad moral que recoge el honor, la intimidad y la imagen. La ley orgánica
1/1982 de 5 de mayo, establece las bases de nuestro ordenamiento jurídico
para la protección de nuestra integridad moral.
El honor hace referencia a la reputación de cada persona.
Estos derechos son bastante conflictivos es para los tribunales españoles al
estar relacionados con otros derechos como la intimidad o el derecho a la
información. En los momentos en el que sea de interés público ya que implica
información para los ciudadanos a la hora de participar en las elecciones,
entonces se dará prevalencia al derecho a la información.
Haber dado nuestro consentimiento para que se sepa algo y después
denegarlo es totalmente legítimo.
Sin nuestro consentimiento no se pueden instalar sistemas escuchas o echar
fotografías, porque es ilegal.

EL NEGOCIO JURÍDICO
El principio de autonomía de la voluntad supone que el derecho privado no
impone una regulación a los particulares en su vida privada, sino que permite
que sean ellos los que decidan la relaciones jurídicas que quieran establecer.
Este principio implica la capacidad que tenemos de autorregularnos. El
ordenamiento jurídico no nos obliga y tampoco determina el contenido de esa
relación jurídica.
Si los interesados no establece nada, el ordenamiento jurídico dispone de una
regulación recogido en el artículo 1255 del Código civil.
Esto no implica que no haya límites. Los contratantes pueden establecer los
pactos, cláusulas y límites que tengan por conveniente, siempre que no afecte
a la moral, al orden público o a la ley.
Casi todas las normas de materia de contrato son de carácter dispositivo, pero
en otros ámbitos no. Por ejemplo, el testamento podemos decidir si hacerlo o
no, pero si aceptamos hay leyes que lo regulan y que deben cumplirse; el
matrimonio podemos decidir si casarse o no, pero si contraemos matrimonio,
hay que cumplir una serie de leyes recogidas. En otras materias matrimoniales
podemos elegir como por ejemplo las capitulaciones.
A través del negocio jurídico se pone en práctica este principio de autonomía
de la voluntad.

Dentro del acto jurídico pueden diferenciarse:


 El acto jurídico: tiene lugar cuando una conducta humana produce un
efecto jurídico pero por determinación de la ley, no como consecuencia
de la voluntad humana. Por ejemplo, un accidente.
 El negocio jurídico: tiene lugar cuando una conducta humana produce
un efecto jurídico buscado por la voluntad del interesado. Por ejemplo, el
matrimonio.

Un negocio jurídico es todo acto jurídico lícito regulado por el derecho,


constituido al menos por una declaración de voluntad aunque puede estar
constituido por más de una voluntad o contar con otros elementos (por ejemplo,
el testamento solo cuenta con una voluntad; la fundación con varios voluntades
encaminadas a la misma dirección). Algunos contratos para existir necesitan la
voluntad de dos personas y de otros elementos (por ejemplo, un préstamo
necesita dos voluntades más dinero entregado).
La teoría del negocio jurídico es una construcción doctrinal a partir de la cual se
han sacado características comunes. Los principales negocios jurídicos son: el
testamento, el matrimonio y los contratos.

La clasificación de los negocios jurídicos:


 Negocios intervivos y mortis causa:
o Los negocios intervivos se producen entre personas vivas. Son
aquellos que regulan relaciones jurídicas en vida de los personas
que lo celebran. Por ejemplo, el matrimonio.
o Los negocios mortis causa producen efectos tras la muerte del
interesado. Por ejemplo, el testamento.
 Negocios personales y patrimoniales:
o Los negocios personales se refieran a relaciones de naturaleza
personal de los interesados. Por ejemplo, el matrimonio o la
adopción.
o Los negocios patrimoniales regulan relaciones de contenido
patrimonial y por tanto son susceptibles de valoración económica.
Por ejemplo, el testamento.
 Negocios jurídicos típicos y atípicos: hace referencia a si este
negocio está regulado en el Código civil. El matrimonio o donación son
típicos, la relación de hecho es atípico.
 Negocios jurídicos gratuitos u onerosos:
o Los negocios gratuitos: la prestación de una de las partes no se
ve correspondida con contraprestación digna. Se lleva se llaman
gratuitos o lucrativos. Por ejemplo, la donación o testamento.
o Los negocios onerosos: aquellos en los que la razón de ser de
la prestación de cada parte es la contraprestación que espera
recibir de la otra. Por ejemplo, una compraventa.
 Negocios jurídicos unilaterales o bilaterales:
o Los negocios jurídicos unilaterales: proceden de una sola
parte. Por ejemplo, fundación o testamento.
o Los negocios jurídicos bilaterales: se producen de al menos
dos partes. Por ejemplo, matrimonio o contrato.
 Negocios jurídicos no solemnes o solemnes: en función de si se
requiere o no forma para realizarlos. Si no existe una forma
determinada, podemos obligarnos de la manera que sea. Algunos
negocios para que tengan validez deben llevarse a cabo como
determina la ley.
Los elementos del negocio jurídico.
Se distinguen tres tipos de elementos:
 Elementos esenciales: aquellos que resultan imprescindibles. Sin ellos
no hay negocio jurídico. Los elementos esenciales en todos los negocios
jurídicos son:
o Consentimiento: constituido por la declaración de voluntad. Para
ser válido tiene que reunir dos requisitos: haber sido emitido por
una persona capaz y tiene que haberse formado libremente.
 La libertad de la formación: el consentimiento tiene que
que formarse libremente Y no puede estar viciado por la
voluntad. Los vicios son:
 Violencia: empleo de fuerza física para arrancar el
consentimiento. Si se ejerce una fuerza más fuerte,
hablamos entonces de ausencia de consentimiento,
no de consentimiento condicionado.
 Intimidación: implica infundir en otra persona un
temor racional y fundado y de sufrir un mal
inminente o grave en su persona o bienes o en sus
familiares o bienes de sus familiares. No debe
confundirse con el temor reverenciar, que es el
temor de desagradar a alguien que se encuentra
una posición jerárquica con respecto a nosotros. En
ese caso no sería un consentimiento viciado.
 Error: falsa representación mental de algo.
 Dolo: cuando empleando palabras o maquinaciones
insidiosas se induce a alguien a celebrar un negocio
jurídico. Existe el dolo bueno o dolus bonus, que
suele utilizarse en publicidad y que no es suficiente
para cancelar un contrato. También existe el dolo
incidental, que se produce cuando a consecuencia
de su empleo una de las partes acepta condiciones
más desfavorables para ella. No anula el contrato,
pero si se sabe argumentar podemos exigir la rebaja
de esas condiciones desproporcionadas.
o Objeto: aquello sobre lo que recae el negocio jurídico. Las cosas
o los seres vivos a los que se refiere el negocio jurídico del que se
trate. Debe cumplir: ser lícito, posible y ser determinable sin
necesidad de nuevo pacto.
o Causa: la finalidad perseguida por el negocio. La finalidad se le
atribuye el ordenamiento jurídico, no nosotros. No es lo mismo lo
que nos mueve a nosotros a llevar a cabo un contrato que la
finalidad que le da el ordenamiento jurídico.
Existen negocios jurídicos reales y negocios jurídicos formales. En los
negocios jurídicos reales para que ese negocio exista, Debe una de
las personas dar algo: préstamo, depósito, etc. En los negocios
jurídicos formales el ordenamiento jurídico pide que la voluntad se
realice de una forma determinada, si no se realiza de la manera
adecuada no existe.
 Elementos naturales: son aquellos que forman parte de la regulación
del contrato pero que las partes pueden excluir del mismo. Se impone la
voluntad de los interesados por encima de las circunstancias o
elementos del contrato. Por ejemplo: en la compraventa es el
saneamiento. Es una obligación del vendedor recogido en el Código
civil. En el contrato de préstamo es la gratitud.

 Elementos accidentales: no forman parte de la regulación general del


contrato jurídico pero las partes pueden incorporarlos. Si se añaden
deben respetarse como si fueran esenciales. Éstos elementos
accidentales son:
o Condición: supone hacer depender la eficacia de un negocio
jurídico de un acontecimiento futuro e incierto. Puede ser:
 Suspensivo: cuando el negocio no produce efectos
mientras no se verifique la condición.
 Resolutorio: cuando el negocio jurídico produce efectos
mientras no se verifique la condición.
o Término: implica establecer un plazo a partir del cual o hasta el
cual producirá efectos en el negocio jurídico en cuestión. Se habla
de negocio jurídico sometido a plazo o término. La condición es
incierta, pero el término aunque no sepamos cuándo, sabemos
que se va a producir. El término esencial implica que a veces el
término es impredecible para alguna de las partes.
o Modo: elemento que se incorporan los negocios jurídicos
gratuitos y supone el establecimiento de un gravamen o cargo de
la persona que recibe la liberalidad. Por ejemplo, en una herencia.

La ineficacia de los contratos jurídicos.


Se produce cuando un negocio jurídico no produce los efectos esperados.
Dentro de la ineficacia se identifica:
 Invalidez: se produce cuando algún contrato jurídico presenta algún
defecto estructural que le impide producir efectos. En función de la
gravedad del efecto se distinguen:
o Nulidad: también llamada nulidad radical y absoluta o radical de
pleno derecho. Se produce por: la falta de alguno de los requisitos
esenciales (consentimiento, objeto y causa o entrega en los
reales o la forma en los formales), que se infrinjan los límites de la
autonomía de la voluntad (artículo 1255 del Código civil). La
declaración de nulidad puede solicitarla cualquier interesado, no
solo los que celebran ese negocio jurídico. El plazo es
imprescriptible.
o Anulabilidad o nulidad relativa: hay un defecto pero menos
grave. Las causas son: que haya un defecto de capacidad en
alguna de las partes o que concurra un vicio de consentimiento.
Las únicas personas que pueden pedir la anula habilidad son las
personas viciadas o los que no tengan total capacidad. El plazo
para esa impugnación es de 4 años, y si nadie lo impugna se
convierte en intocable. También se puede confirmar a posteriori.
Las figuras que pueden llevar a cabo la invalidez.
La ineficacia ….
 Mutuo disenso: constituye un acuerdo en virtud del cual dos personas
acuerdan dejar sin efecto un negocio jurídico anterior. Es necesario que
el negocio jurídico no esté consumado.
 Resolución o incumplimiento: en negocios jurídicos bilaterales.
Normalmente las partes cumplen sus partes del contrato al mismo
tiempo. Si una de las partes no cumple con su parte, el otro individuo
puede exigirlo o reclamar la resolución, es decir, desvincularse del
negocio. Incluso pueden llevarse a cabo las dos: primero una y después
la otra. Puede reclamarse indemnización por daños y perjuicios. Queda
recogido en el artículo 1124 del Código civil. No indica este precepto un
plazo específico, por lo que será de cinco años hasta que prescriba.
 Rescisión: la ley en determinados casos establece que un negocio
jurídico válido no produzca efectos o derivase de una lesión para alguien
a una de las partes del negocio jurídico o un tercero. Se puede llevar a
cabo también por fraude de acreedores. Recogido en el artículo 1111 del
Código civil. El plazo es de 4 años.
 Revocación: se contempla para determinados negocios jurídicos
gratuitos como la donación o la herencia, que permite a la persona que
los autor otorga dejarlo sin efecto. Para que opere la revocación es
necesario que se cumpla una circunstancia contemplada por la ley, por
ejemplo la supervivencia o la sobreviniencia.
 El desistimiento unilateral: hay supuestos en los que se permite a una
de las partes de un negocio jurídico dejarlo sin efecto. No tiene porque
haber un motivo por la que la parte que tenga que desistir, desista. Por
ejemplo: un contrato de obra.

La representación.
El negocio jurídico exige como mínimo una declaración de voluntad,
normalmente la persona que quiere llevar a cabo ese negocio jurídico,
mediante acción directa (nosotros mismo) o mediante acción inidirecta
(mediante otras personas). Podemos permitir que otra persona lo haga por
nosotros. Las figuras se denomina representante o representado (principal).
se pueden distinguir dos tipos:
 La representación legal: procede de la ley. Hace referencia a que es la
ley la que determina cuando se produce, la que señala que personas
pueden actuar como representantes, la que define o establece las
facultades son los poderes de ese representante y la que determina
cuándo se extingue la representación legal. Pueden ser un tutor,
representantes legales del ausente o los representantes de la patria
potestad. La ley es la que decide qué representación se establece.
Cuando hay representante legal, actúa él y no es representado.
 La representación voluntaria: procede de la voluntad. La voluntad es
la que determina esta representación. Es una persona que aunque tenga
pena capacidad de obrar, autoriza a otra persona para que lo haga por
ella. No implica perder la capacidad de obrar. Se pueden distinguir:
o Representación voluntaria indirecta: tiene lugar cuando el
representante actúa por cuenta del representado pero el nombre
propio.
o Representación voluntaria directa: el representante actúa por
cuenta y el nombre del representado.

El apoderamiento es el proceso mediante el cual el poderdante da el poder y el


apoderado lo recibe. Consiste en la declaración de voluntad del poderdante
autorizando al apoderado a actuar por el.
El poderdante tiene que tener capacidad para realizar el negocio jurídico para
el que autoriza el apoderado.
En función del contenido ese poder puede ser:
 General: cuando abarca todos los negocios del poderdante.
 Especial: cuando abarca solo algunos o alguno de los negocios
jurídicos.

Hay algunos en los que no se pueden autorizar representación como por


ejemplo el matrimonio.
El apoderado deberá actuar conforme a las instrucciones que haya obtenido y
en defecto de éstas, tal y como lo haría un buen padre de familia. Tiene que
actuar en interés del poder poderdante. Si actúa en contra, esto se denomina
abuso de poder y tiene consecuencias: revocación del poder, la indemnización
de los daños producidos, y la nulidad del negocio celebrado. La nulidad
depende si el tercero va con buena fe.
El poder se puede extinguir por:
 El paso del tiempo.
 Por el cumplimiento de un negocio.
 Por la muerte del poderdante o apoderado.
 La revocación.
 La incapacitación

El negocio jurídico celebrado por otro sin poder es nulo pero se puede utilizar
posteriormente a través de la ratificación aunque se haya llevado a cabo el
negocio jurídico sin poder para ello.
La ratificación es un negocio jurídico basado en una declaración de voluntad
en virtud del cual una persona manifiesta querer para sí los efectos jurídicos del
negocio que un tercero realizó por el sin poder para ello. Se llama
apoderamiento a posteriori. Es preciso que se realice antes de que el tercero
revoque su oferta.

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