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ELEMENTOS DEL GNOSTICISMO QUE NOS PODEMOS ENCONTRAR HOY EN LAS

IDEOLOGÍAS O PSEUDO ESPIRITUALIDADES MODERNAS.


El Fray Nelson Medina nos expone un Sitz et Leben del Gnosticismo. De esta corriente no se
puede afirmar que nació en siglo I o posteriores, pues esta tiene raíces desde mucho más atrás
debido a su doctrina filosófica y creencias. Aunque si podemos afirmar que tuvo su apogeo en
siglo I debido a que la doctrina de la Iglesia se mostraba flexible en su doctrina. Esta doctrina
no ha pasado de relevancia.
Desde su etimología, del griego antiguo: γνωστικός gnōstikós, que significa tener
conocimiento. El Fray Nelson afirma que:
“estos varios grupos enfatizaban el conocimiento espiritual (gnosis) por encima de las
enseñanzas y tradiciones ortodoxas y la autoridad de la iglesia. Viendo la existencia
material como defectuosa y malévola, la cosmogonía gnóstica generalmente presenta
una distinción entre un Dios supremo y oculto, y una deidad menor y malévola (en
ocasiones asociada con Yahvé (en el Antiguo Testamento) quien es responsable de crear
el universo material. Los gnósticos consideraban que el principal elemento de salvación
era el conocimiento directo de la divinidad suprema en la forma de intuiciones místicas
o esotéricas. Muchos textos gnósticos discuten no los conceptos de pecado y
arrepentimiento, sino los de ilusión e iluminación.”
De lo anterior podemos sacar muchos elementos que podemos ver en muchos grupos religiosos
o espiritualidades modernas. Sin embargo, el gnosticismo, comparado con la filosofía de
Descartes, hablando de su giro (res congintans y res extenxa), hablamos de un auge tardío del
gnosticismo, pues ya se iba haciendo relevos de las definiciones de dualidad del hombre.
Claro está que para los gnósticos lo importante es conocimiento, el saber por encima de todo.
Esto recuerda una frase de Hegel: Todo lo racional es real y todo lo real es racional. Esto, no
por lo científico, sino por el carácter que tiene el conocimiento para este campo.
Para los gnósticos, la materia es la fuente de la maldad, para lo existencialistas, de cierta
manera, la materia es imperfecta porque existe la muerte. Podemos seguir haciendo analogías
sobre este tema a lo largo del tiempo.
Pero ahora podemos empezar a enumerar los elementos gnósticos encontrados en día de hoy
en ideologías o falsas espiritualidades. Estos son:
• Uno de grupos o ideologías más latentes en este tema son los Masones. Este grupo,
además de ser grupo cerrado, está presente en sectores que representen poder. Sus
miembros son quienes posean mucha inteligencia, así muestran como el conocimiento
está por encima de todo. Realmente, la espiritualidad de estos se centra en hacer obras
de caridad solo por mostrar, más no por una creencia fuerte. Conocimiento para
alcanzar el poder es su filosofía.
• Las diferentes organizaciones religiosas (Pentecostales, Testigos de Jehová, Séptimo
Día, etc): ciertamente Martin Lutero marco un giro en el pensamiento y la historia, para
muchos allí se empezó a alimentar el orgullo de la libertad falsa. Sin embargo, estos
grupos, que han surgido por interpretaciones personales de textos bíblicos, confiesan
que están por encima de Iglesia y su doctrina. En estos grupos, podemos ser testigos
como quien enseña es como tipo de ídolo a quien le debo pagar. Además, se discute el
tema de persona, pues allí el bautismo se concibe como lo que da la santidad, pues así
lo afirma Lutero; en nuestras palabras, si ya estamos salvados, si Cristo ya nos salvó en
la cruz, ya estamos salvados.
Ciertamenta en estas organizaciones religiosas no hay sacrificio de Cristo, no hay
perdon, no hay Eucaristía, no hay casi ni organización. En estos grupos se habal de
Dios, de Cristo pero solo en un teoría mal entendida sin una práctica del misterio
pascual de Cristo.
• Las ideologías del LGTBIQ: suena extraño decir que estas ideologías están permeadas
por los gnósticos, pero la realidad es que si. Para lo gnósticos, la materia es malévola,
es decir, si es malo pues no debo aceptarla. Esto sucede con el LGTBIQ, pues vale no
acepto mi realidad, de lo que estoy constituido, de la verdad que soy, de la materia
biológica que es lo que soy. Aplicado a la persona humana, esto significa que lo material
o corporal resulta ser inferior; si es que no se trata de una prisión de la cual se debe
buscar escapar, cuando mucho sería un mero instrumento para ser manipulado a fin de
servir a los objetivos o fines de la “persona”, entendida como el espíritu, la mente o la
psique.
Radicalmente, esto nos reduce a decir que estamos en una cárcel, como lo es cuerpo,
que lo utilizo según lo que pienso. Pero demos pensar los que somos animales; animales
racionales, sin duda, pero no mentes o intelectos puros. Nuestra identidad personal a
través del tiempo consiste en la persistencia de los organismos animales que somos. De
esto se sigue una proposición crucial: la persona humana comienza a ser al mismo
tiempo que el organismo humano, y sobrevive –como una persona– al menos hasta que
el organismo deja de ser.
Pero, no somos animales brutos. Somos animales de naturaleza racional, organizados
desde un inicio para el pensamiento conceptual, y para la deliberación práctica, el juicio
y la elección. Estos poderes intelectuales no son reducibles a pura materia. Las creaturas
que las poseen son capaces, con madurez y bajo condiciones favorables, de captar
caracteres inteligibles (y no solamente sensibles) de las opciones de acción, y de
responder a esas razones con elecciones que no están determinadas por eventos
antecedentes.
Irónicamente, la ideología de género es un tipo de ausencia de la libertad, tratando de
huir de la materia. La ideología de género es la secuencia de la mentira vivida, es la
elocuencia del orgullo humado, es la visión del desorden humano y soberbia humana.
• Algunos grupos en la Iglesia: algunos grupos buscan sustituir la doctrina de la Iglesia
con interpretaciones personales con la excusa que es necesidad pastoral. Sin embargo,
no ser fiel a la doctrina de la Iglesia significa que estoy poniendo lo que pienso por
encima de todo, es un tipo de orgullo.
La Iglesia del momento se encuentra en un proceso de cambio, tal vez el Sínodo Alemán es la
imagen de lo que la Iglesia debe enfrentar a futuro. El Gnosticismo no le interesa cuanto los
siguen, este solo quiere mover masas con la elocuencia de la libertad mostrada como verdad,
en teoría, peor en práctica como una mentira.
No podemos calcular donde u como actúa estas doctrinas, es más mucho de los que la practican
ni saben que existe. Un ejemplo de lo mucho que ha hecho son los conocidos del pensamiento
de la Ilustración, ellos aseguran que no puedo conocer a Dios, conocer es lo que me salva, eso
me complementa.
Como hemos podido darnos cuenta, estas doctrinas parecen tan llenas de verdad, peor es
necesario discernir el trasfondo. No somos como y donde actúan, los gnósticos, tenemos la
tarea de discernir si hay experiencia como Jesús presente en la Eucaristía, discernir si se habal
de Cruz, etc. Esta en nosotros elegir la libertad o protestar pidiendo libertad, cuando se que una
decisión.

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