Está en la página 1de 6
Grupo y produccién Regina Benevides, pstedloga GINM/RI Brasil Creer en el mundo es lo que més nos falta; perdimas el mundo: nos lo quitaron. Creer en e! mundo es también susctar acontecimientas, aunque pequefis, que escapen del control, o entonces hacer nacer nuevas espacio-tiempos, incluso de superficie y volumen reducidos... Bs en el nivel de cade tentativa que son juzgadas Ja capacided de resistencia 0, al contrario, Ja sumisién a un control. Son necesarios, al mismo tempo, creacién y pueblo. G. Deleuze! En las. puertas del siglo XXI, cuando, observamas el creciente proceso de individualizacién y privatizacion de las précticas sociales.y psiquicas, pensar sel grupo» se nos presenta como una posibilidad de poner en cuestion la problemética de la economia del deseo, de los procesos de subjetivacién y, quizés, de llamar la atencién para la urgencia de crear nuevos fazos de solidaridad y alianzas de cludadanta, No obstante, no basta hablar de grupo para que estén dadas las condiciones para problematizar los. procesos. de subjetivacién en curso. Tendremos que avanzar més alld de las’ dicotomias individuo/grupo, grupolsociedad, para que podamos hacer bifurcar nuevos modos de existencia que cuestionen la «unidad> y la «(otalided>, continuamente oftecidas como atributos universales. Grupo - espacio: Individualizaciéa/totalizacién Existen ciertas afirmaciones sobre lo que es un grupo que. a pesar de las diferencias tedricas y metodol6gicas, parecen haberse consagrado en el campo grupalista - «un grupo es mas que la suma de individuos que To compone>; «un grupo es un campo de relaciones interpersonales»; «un grupo es un sistema de relaciones que se estructura exteriormente a los sujetas que lo componen>; «un ‘grupo es un conjunto de personas ligadas entre sf por constantes de tiempo y espacio, y articuladas ‘por su mutua representacién interna. Esta preocupacién por definir lo que es tn grupo, en general remite a la bisqueda de ciertas esencias irreductibles, condiciones de posibilidad que garantizarfan el punto de partida para la existencia del objeto-grupo. Es en este contexto que Ia oposicién individuo-grupo gana legitimldad. Vemos desarrollarse, por tun lado, tesis eindividualistaso en las que los individuos constituyen la vnica realidad. Cuando ellos se juntan es por motivacién, necesidad o caracterstcas personales. En este émbito, el «grupo» no existe, y cualquier teorizacin a este respecto hace parte del reino de ia ficcién. Por otro lado, tenemos las tesis «grupalistas» que consideran el grupo como una entidad distinta de los individuos que lo componen. La referencia privilegiada sera al grupo que, al distinguirse como otro ser, ganar estatulo propio transforméndose en una especie de «a priori» para Ta comprensién de los movimientos que en él actéan. " Bytrafdo de «El devenir revolucionari y las creaciones politicas» (entrevista a Ton! Negri para el Futur Antérieur, N°, primavera de 1990,) Canto de fmprasiones MOO de Estudios de Pricoloain ‘Tanto en una cuanto en otra explicacion, individuo y grupo son apenas polos de un par antitético que a lo largo de la historia se afirmé como natural, construyendo campos disciplinares (sea la psicologta ola sociologia) que se encargan de mantener sus «objetos» separados y opuesios 0, en el ‘mejor de los casos, dispuestos segin una linea de continuidad. En trabajos anteriores (Benevides, 19912 y 1991b] desarrollamos algunas ideas sobre la construccién de la categoria de individuo. Esta categoria se hizo presente inicialmente en el escenario europeo, desde los siglos X VI/XVII, de un modo disperso: pero més tarde, alo largo de los siglos XVIIVXIX, fue adquiriendo cada vez mas importancia, Reflexionabamos también sobre el proceso de «interfarizacién» imputads al individuo que, al ser incitado en sus derechos de «libre ‘cludadano» aulénomo e inico, es remitido a la investigacién de las caracteristicas peculiares que definieron su identidad autocentrada. También el espacio de la casa y de la familia ganan nuevas formas y sentidos, puesto que se separan del lugar de trabajo pasando a concentrar la afectividad en su interior. Esta tecnologia del enclaustramiento fabrica de modo magistral, mas que el individuo, Jo ‘individual; es decir, un regis de sentido que marca formas de estar, de sentir. de pensar y vivir el mundo. Es lo que Foucaiilt sigulendo Deleuze, ama thodos de: subjetivacién;-modos-de existencia o de posibilidades de vida Lo>- que aétualmente esta “instalado eS" un. modo" de funcionamiento masivamente ‘eindividualizante»:sobre”los: objetos y las: précticas, construyendo:trazos de equivalencia: entre sujeto-individuo, remitiendo un enunciado al individuo que lo enuncia, interlorizando, privatizando los actos y afecios a los cuerpos que se expresan. En esle contexto, la nocién de grupo gana contornos de estas fuerzas. Los individuos, ‘garantizados en-una unidad que es autocentrada, no podrén dejar de constituir nuevas y més amplias lunidades. EL sentido se imprime sea sobre el individuo déndole-forma de UNO, sea sobre el grupo dandole forma de TODO. Es la légica del UNO, presente tanto en el individuo como en el grupo (individuo-UNO: todo se refiere a si mismo; grupo-TODO: uno refiriéndose a s{ mismo). En realidad, 1a antitesis individuo-grupo tomé et lugar de otra anterior: individuo-soctedad. Consideramos importante destacar la controversia que permea los siglos XVIU/XVIN sobre la prioridad de los inlereses individuales o colectivos en la conduccisn de las decistones politica (aqui tambign llama la atencién el sentido dado a la palabra colectivo: mas de un individuo). El grupo, en esta perspectiva, viene a insertarse como intermediario de la relacién individuo- sociedad. En la tentativa de establecer un pasaje «mds suave» de la comprensién de los fenémenos individustes a los sociales, se duplica la dicotomia individuo-grupo y grupo-sociedad. Lo que se percibe es la insistencia de lo «social» como algo «externo» al individuo manteniénose, como ya Sefialamos, la misma logic disyuntiva(iterno-externo, inividuo- grupo), En el interior de esta Wgica se establecen jerarquas: individuo - grupo - sociedad; campos de Saber: psicologia - psicalogia social - sociologia; especialismos: psiadlogos ~ psicosocidlogo ~ socidlogo, etc. En todos los elementos de estos conjuntos prevalece -st no como dato, al menos ‘como algo a ser perseguido- el sentido de unidad y totalldad, el carécter continuo y universal de las cexplicaciones. El grupo surge, por Io tanto, como objeto histérico de un desdoblamiento de la misma légica anttética, respondiendo a las imposiciones del saber-poder. Viene marcado por las caracteristcas Ge esta ldgica, de esta racionalidad, y se definiré a semejanza de los elementos anteriores de su cadena generativa -por un lado «el individuo», que le garantiza la idea de indivisible, de particular or ofo lado «la sociedad, que le da la idea de todo, de universal-. Procuraré ocupar Simulténeamente dos lugares, més bien, se constituiré en un espacio donde dispularin «el Iindividuo, sus conflicts, su historia privada, su identidad personal, versus «los individuos», sus mitos, su historia grupal, su identidad grupal. Las dimensiones de horizontalidad y vericalidad trazadas por fa historia del individuo en el grupo y por su historia personal, construyen el. grupo como espacio-arena, y sirven a la organizacién de diferentes acciones-e intercambios entre sus miembros. La insistencia en la nocién de grupo a partir de cinco elementos constituivas, aunque variables {pluralidad de individuos, objeto comin, espacio dado, tiempo definido y contexto social), refuerza Taidea que vinimos desarrollando hasta aqui de que el grupo: 1. ha sido definido con base en la nocién de individuo; 2. mantiene la dupla dicotomfa -individuo/grupo, grupo/sociedad- colocdndose como intermediario -no siempre habil- cuya especificidad es garantizar, por un lado, el llamado estrato subjetivo y, por otro lado, el estrato social: es congiderado como estructura, cuyo funcionamientoiende al equiibrio: considera el tempo en su expresin espacializada, 0 sea, cronolégica Grupo -tiempo: multiplicidad/produccién Deciamos, en el inicio del texto, que el grupo se presentaba «como una posibilidad de cuestionar. Ja problemética de la economfa del deseo, de las procesos de subjetivacién... ;Cémo escapat de su insercidn individualizante y totalizadora? EL primer esfuerzo esta en deshacer la sinonimia individuo-subjetividad. Las investigaciones de M. Foucault, P. Guattariy G. Deleuze, entre otros, aqui son decisivas para poder comprender que el {ndividuo es apenas uno de los modos de subjetivacién posibles. Cada época cada sociedad, pone en funcionamiento algunos de estos motos. Mis alla del modo-individuo, lo que hay son procesos de produccién que comprenden varios tipos de individualizacién. Como diria Foucault, segiin Deleuze, tanto individualizactones del tipo ‘sujeto, como acontecimientos sin sujeto - un viento, un sonido, una hora del dia, una batalla, La nocién de subjetividad no puede, por lo tanto, ser confundida con la de individuo. No stendo tun dato, «tampoco es pasible de totalizacién o de centralizacién en el individvo». Una cosa es la ‘ndividualizacton del cuerpo, Otra es la muliplicidad de los agenciamientos de la subjeivacion: la subjetividad es esencialmente fabricada y modelada en el registro social [Guattari y Rolnik, 1986: 31]. El término «. Pero si desplazamos la nocién de grupo hacia la nocién de subjetividad, lo que encontraremos ‘serd una multiplicidad y provisoriedad. En este caso, el grupo dejard de ser el: modo. cémo los individuos se organizan, para ser un dispositivo, un catalizador existencial que podra producir focos mutantes de creacién. La nocién de dispositivo indica algo que hace funcionar, que acciona un proceso de descomposicién, que produce nuevos acontecimientos, que acentia la pluralidad de los componentes de subjetivacién. El grupo * Un grupo de puercoespines se apilé apreiadamente en clerto dia [rio de Invierno para poder aprovechar e! calor unos de las otros y salvarse, ast, de 1a muerte por congelamiento. Pero més tarde comenzaron a sentir das espinas los unos de Jas otros. la que los Ilevé @ Separarse nuevamente. Después, cuando la necesidad de sentir calor los aprovind una ver ms, surgié muevamente el segundo mal. Fueron, 231, mpulsados para adelante y para atrds, de un problema a otro, hasta descubrir una distancia intermedia en la cual podian Coexistir més tolerablemente»; cltado por S. Freud en «Psicologia das massas e andlise do ego», Rio de Janeiro: Imago, p. $0. ‘asi producido, como dispositive analitico, podré servir a las descristalizaciones de lugares y roles que el sujeto-individuo construye y reconstruye en sus historias. La cuestién ya no seria buscar una identidad del individuo 0 del grupo, sino preguntarse sobre qué componentes de subjetivacién estarian siendo accionadas y cuales otros agenclamientos podrian ser hechos. En esta perspectiva, el grupo, el individuo, se tornan apenas formas posibles de individualizacién de la subjetividad. En otras condiciones, la subjetividad puede hacerse colectiva. «En efecto, agut el término colectivo debe ser entendido en el sentido: de una multiplicided que se desarrolla mds alld del indviduo junto al socius, asi como més allé de la persona, Jjunto a intensidades pre-verbales que derivan de una Idgica de los afectos, mas.que de una 1dgica de los conjuntos bien cireunscriptas» (Guattar\, 1990} La nocién de colectivo trafda por Guattari acaba con las falsas dicotomfas entre individuo-grupo ¥y grupo'sociedad. Pues lo que muestra es que al zambullimos en la subjetividad entendida como proceso, eniramos en contacto con la multiplicidad y no con la unidad, con la heterogeneidad y no con la homogeneidad, con la fragmentacién y no con la totalizacion, Si tomamos el grupo como dispositive, accionamos su capacidad de transformarse, de des- territorializarse, de irrumpir en devenires que nos saquen del lugar intimista y privatista en que fulmos colocados como individuos. El contacto con la multiplicidad puede, de este modo, hacer ‘emerger un territorio existencial que no sea més del orden de lo individual (sea de un individuo o de un grupo) sino del orden de lo colectivo. Tnstaurar rupturas en las tendencias totalizadoras; unificadoras y naturalizadoras, abre posibilidades para nuevos procesos de singularizacién. Es aqui. pensamos, que.ef grupo-dispositivo puede actuar como méquina de descomposicién, a comenzar por la descomposicién de. st pretendida unidad. Pero en nuestra tentativa de producir el grupo como dispositivo, atin debemos enfrentar la definicién comiinmente difundida del grupo como estructura, y la concepcién de tiempo con la que 6sta se pauta Con el tinico objetivo de tornar algunos puntos definidores de la nocién de estructura grupal (ya {que aqui no es nuestro objetivo reproducit 1a polémica y compleja discustén’ emprendida por el ‘estructuralismo), diremos que ésta ha designado una relacién entre los individuos y tna relacién con sus objetivos, de tal modo que: la transformacién en cada uno de estos elementos acarrearia una modificacién en todos los otros; al pertenecer a todos los miembros, las transformaciones compondrfan un padrén de comportamiento; al poseer un padrén de comportamiento, se puede preveer como reaccionarén los miembros en clertas situaciones: su funcionamlento pueda explicar Jos hechos observadas (sean explicitos 0 implicitos). Por Io tanto, lo que caracteriza el funcionamiento de la estructura es su tendencia al equilibrio. Ella busca compensar toda influencia que pueda modificarla y tiende a neutralizar las alteraciones para mantener el equilibrio obtenido por su totaidad. El grupo como estructura pretende colocarse como una especie de sobre-codificador de las palabras y gestos y,en este sentido, «

También podría gustarte