La energía eólica, que transforma en electricidad la fuerza de un
recurso inagotable como el viento, es una apuesta sostenible y de valor para el futuro. El aprovechamiento del viento requiere de la instalación de parques eólicos, ya sea en tierra o en alta mar, con decenas de aerogeneradores. Estos gigantes se han convertido en parte del paisaje en los últimos años, pero ¿sabemos cómo funcionan?
Otro punto a tener en cuenta es que los predecesores de los
aerogeneradores son los molinos, maquinarias que aprovechan la energía del viento, por ejemplo, para moler granos o mover agua.
En el presente, la energía eólica se desarrolla principalmente
con la instalación de parques eólicos que abastecen de energía eléctrica, particularmente, a países como Estados Unidos, España, Dinamarca y Alemania. ORIGEN DE LA ENERGÍA EÓLICA
El origen de la energía eólica corresponde a tiempos muy
antiguos, alrededor del 4.500 o 5.000 AC (Las fuentes de información difieren), cuando los egipcios comenzaron a usar el viento para impulsar sus barcos con velas y poder navegar en el río Nilo.
Más adelante, los primeros molinos fueron construidos en Asia
central en el siglo VII. Estas construcciones servían para la molienda y para la conducción de agua.
Posteriormente, en el siglo XII, durante la Edad Media,
aparecieron los molinos en Europa. Estas eran edificaciones de madera que se giraban manualmente alrededor de un poste central. De ese modo, se orientaban las aspas al viento.
CÓMO FUNCIONA LA ENERGÍA EÓLICA.
CARACTERÍSTICAS Para aprovechar la energía cinética del viento y convertirla en energía eléctrica, es necesario, tal y como ya hemos comentado, el uso de un aerogenerador. El óptimo aprovechamiento de estos gigantes — suelen tener entre 80 y 120 metros de altura— depende de la fuerza del viento. Por ello, los parques eólicos, que agrupan un gran número de aerogeneradores y hacen posible la obtención de esta energía en grandes cantidades, deben implantarse en lugares donde la presencia del viento sea predominante.
Los aerogeneradores han de orientarse en la dirección del viento —
esto sucede gracias a una veleta que se encuentra en la góndola—. A partir de ahí, la fuerza de las corrientes de aire pondrá en funcionamiento las tres principales partes del aerogenerador:
El rotor: compuesto por tres palas y el buje que las une, su
función es captar la fuerza del viento y convertirla en energía mecánica de rotación. La multiplicadora: unida al motor mediante un eje, su función es elevar la velocidad de giro de 30 revoluciones por minuto (rpm) a 1500 rpm. El generador: este elemento se encarga de convertir la energía mecánica de rotación en energía eléctrica. Tipos de energía eólica
Podemos clasificar la eólica principalmente en base a dos
criterios. Primero, según el tipo de aerogenerador que la produce: De eje horizontal: Es aquel cuyo eje de rotación es paralelo al suelo. Suelen ser los aerogeneradores más comunes y que vemos en los parques eólicos, siendo una estructura o torre que en su parte superior posee aspas que se moverán con la fuerza del viento. De eje vertical: Su eje de rotación es perpendicular al suelo. Una de sus ventajas es que no ocupan una gran superficie. Sin embargo, su eficiencia suele ser baja pues se ubican muy cerca del suelo y no pueden aprovechar del todo las grandes corrientes de aire.
Otra forma de clasificar a la energía eólica es como:
Terrestre: Cuando los aerogeneradores son ubicados en el
suelo. Corresponde a la imagen que usualmente tenemos de un parque eólico en un campo abierto. Marítima: Cuando se construyen estructuras en altamar. En dichas zonas abiertas el aire suele correr con mayor fuerza que en la superficie terrestre donde existen barreras, como montañas, árboles o construcciones hechas por el ser humano. Ventajas y desventajas de la energía eólica
Las principales ventajas de la energía eólica son las siguientes:
Es una fuente de energía renovable, pues el viento es un
recurso ilimitado, y, además, es una energía limpia, que no produce gases de efecto invernadero. Los costes de las turbinas (de los aerogeneradores) y de su mantenimiento son relativamente bajos. No es incompatible con otros usos del suelo. En un parque eólico es posible cultivar, por ejemplo, trigo, maíz o patata (papa). Es posible usar energía eólica de forma complementaria con otros tipos de energía, como la solar o la térmica, o incluso el carbón o el petróleo. Es factible construir parques eólicos en el mar, donde no se invade ningún espacio destinado a otra actividad y el viento es más fuerte y constante. Sin embargo, los costos de instalación y de mantenimiento son más altos. Esto se realiza, por ejemplo, en Dinamarca.
En contraste, la energía eólica también presenta desventajas:
Se advierte sobre el daño que pueden causar los
aerogeneradores a la fauna. Sobre este tema hay discusión, pues algunas investigaciones señalan que la mortandad de las aves por la instalación de parques eólicos es baja, además de que los estudios de impacto ambiental (antes de construir un parque eólico) consideran la presencia de fauna en la zona y sus consecuencias.
Sin embargo, otros expertos indican que las aves no
pueden visualizar las palas giratorias por la alta velocidad a la que estos aparatos se mueven.
Se trata de energía no almacenable, y este es uno de los
aspectos que genera más problemática pues, aunque se pueda producir más energía cuando hay más viento, no puede reservarse dicho excedente para cuando bajen las corrientes de aire. Esto contrasta con una demanda de energía que busca no depender de factores climáticos . ¿CÓMO FUNCIONA LA ENERGÍA EÓLICA?
Los famosos molinos de los parques eólicos,
llamados aerogeneradores, son los responsables de recoger la energía cinética del viento e iniciar el proceso de obtención de electricidad.
Las cuatro partes esenciales de cada aerogenerador son:
1. Las aspas: también llamadas palas, recogen la fuerza del
viento y la transforman en energía mecánica.
2. El rotor: es la pieza donde las tres aspas están unidas y
sirve para transmitir el movimiento.
3. La multiplicadora: es la responsable de los cambios de
velocidad de la máquina.
4. El generador: se encarga de transformará la energía
mecánica en electricidad. Aprovechar la energía del viento en el futuro
Además de las grandes ventajas de la energía eólica como
fuente de energía sostenible, también debemos sumarles el positivo impacto económico y de calidad en el empleo que está generando en nuestro país.
Todo ello, a la vez que los consumidores podemos disfrutar de
una energía 100% limpia y más económica.
Por todas estas ventajas, desde Endesa seguimos apostando
por la energía eólica, así como por el resto de fuentes de energía renovables en nuestro compromiso con la descarbonización. Continuar aprovechando la energía del viento en el futuro es una de nuestras prioridades.
Si hablamos de presente, nuestros clientes ya puedes
beneficiarse de la energía eólica y el resto de renovables para consumir solo energía verde con Única de Endesa.
Estamos ante un futuro muy alentador, y queremos que formes
parte de esta nueva forma de entender la sostenibilidad energética.