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Contenido: Las licencias para los trabajadores con responsabilidades familiares : hacia la consolidación
de la igualdad entre hombres y mujeres / José Antonio Guevara Bermúdez -- La justicia restaurativa : el
protagonismo de las víctimas de violencia de género / Ana Rubio Castro -- Estrategias para erradicar la
violencia contra la mujer en México / Ana María Sánchez Guevara … [et al.] -- Retos y oportunidades en
la construcción de un acceso a la justicia incluyente para las mujeres migrantes que viven violencia / Elba
Yanett Coria Márquez -- Buscando la justicia : principales obstáculos que enfrentan las mujeres cuando viven
violencia conyugal en el municipio de Santa Catarina Juquila, Oaxaca / Laura Edith Saavedra Hernández --
Las posibilidades de la jurisdicción constitucional de la SCJN para contribuir al desarrollo de los derechos
fundamentales de las mujeres en México : el caso de la acción de inconstitucionalidad 146/2007 y su
acumulada 147/2007 / Alberto Abad Suárez Ávila -- Construyendo nuevas mentalidades : el principio de
igualdad y no discriminación como fundamento de otra praxis judicial en las cuestiones de género / Lila Emilse
García -- Elementos de análisis para la aplicación de la perspectiva de género en la labor jurisdiccional /
Liliana Hernández Hernández -- Los estereotipos de género como obstáculos para el acceso de las mujeres
a la justicia / Tania Sordo Ruz -- Índice de efectividad de la cuota de género : un aporte para la armonización
de los derechos político-electorales de las mujeres / Yunuel Patricia Cruz -- ¿Las órdenes de protección son
verdaderas medidas preventivas de los feminicidios en México? / María Edith López Hernández -- La
cuadyuvancia y la perspectiva de género : ¿herramientas para mejorar el acceso a la justicia? / Laura Aragón
Castro -- La triste y cándida historia de Ilma y de su padre desalmado : violación dentro del matrimonio en
Ayutla, Oaxaca / Verónica Vázquez García y Carolina Muñoz Rodríguez -- Cuidado de la niñez : una visión de
género en la familia / Ramsés Samael Montoya Camarena.
ISBN 978-607-630-584-3
1. Equidad de género – Ética judicial – Ensayos 2. Derechos de las mujeres – Derechos humanos
3. Protección de los derechos humanos – Función jurisdiccional – Principios éticos 4. Licencia por paternidad
– Derecho a la igualdad 5. Violencia de género – Víctimas – Justicia restaurativa 6. Mujeres – Migración
7. Cuotas de género – Derechos políticos 8. Feminicidio – Derecho de la mujer a una vida libre de violencia
9. Virtudes judiciales 10. Violencia contra la mujer 11. Violencia familiar 12. Derecho a la no discriminación
13. Aborto 14. Violación 15. Acceso a la justicia 16. Protección del menor I. México. Suprema Corte de Justicia
de la Nación. Unidad de Igualdad de Género de la Coordinación de Derechos Humanos y Asesoría de la
Presidencia II. México. Suprema Corte de Justicia de la Nación. Instituto de Investigaciones Jurisprudenciales
y de Promoción y Difusión de la Ética Judicial III. Silva Meza, Juan Nepomuceno, 1944- IV. Maccise Duayhe,
Mónica, prol. V. Figueroa Jácome, Leonor, prol.
Ética
Judicial
e Igualdad de Género
MÉXICO, 2014
Primera Sala
Ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena
Presidente
Segunda Sala
Ministro Luis María Aguilar Morales
Presidente
contenido
presentación...................................................................................................................................... IX V
prólogo............................................................................................................................................ XIII
contenido
CUIDADO DE LA NIÑEZ: UNA VISIÓN DE GÉNERO EN LA FAMILIA
Ramsés Samael Montoya Camarena............................................................................ 479
VII
presentación
E n 2014, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la
Ciencia y la Cultura (UNESCO) reconoció la labor de la Suprema
Corte de Justicia de la Nación en el transcurso de los siglos XIX y XX.
IX
presentación
XI
prÓLOGO
La contribución de la ética XIII
en la apuesta por la igualdad de género
1
En tanto trabajos derivados de Concursos de años anteriores, se consideró que lo más conveniente era
respetar los datos registrados en cada uno de los textos, sin realizar alguna actualización en los casos que corres-
pondiera, a efecto de conservar el valor de los mismos en el momento de su presentación.
2
Los trabajos ganadores de las otras dos categorías –documental y reportaje escrito– también son mate-
riales enriquecedores que presentan casos, temas y planeamientos relevantes para comprender y ver, desde otra
perspectiva, la de las víctimas, los obstáculos o problemas que enfrentan al intentar acceder a la justicia. Todos
estos materiales se pueden consultar y ver en el micrositio de la Unidad de Igualdad de Género www.equidad.
scjn.gob.mx
prÓLOGO
Precisemos un poco lo anterior con las siguientes reflexiones.
vincula con la confianza y legitimidad en las mismas, así como en sus servi-
dores y servidoras públicas. Por ello, es deseable y necesario que quienes
trabajan en el servicio de la impartición de justicia tengan un sólido com-
promiso con la sociedad a la que pertenecen y cumplan con las exigencias
de conducta que la misma sociedad requiere. En este sentido, es necesario
actuar bajo las premisas de la ética judicial, especialmente en el caso de
la búsqueda de la igualdad entre mujeres y hombres, ya que, como señala
Alda Facio, en este ámbito no basta sólo con usar los lentes del género, se
XVI
requiere, además, una profunda reflexión ética. Los servidores públicos
deben concientizar la importancia de la labor que desempeñan, reflexionar
si son idóneos para ejercer el cargo, ser profesionales en sus labores y, so-
bre todo, tener una coherencia de vida.
Así, los trabajos aquí reunidos, que apuestan de manera explícita por
la igualdad, comparten esta preocupación y compromiso que son esencial-
mente éticos.
prÓLOGO
cuidado de los hijos e hijas y su participación en la vida familiar.
XVII
Con argumentos directos, observa que la regulación existente en la
actualidad es deficiente, pues el tiempo de duración de las licencias de pa-
ternidad, al ser sustancialmente dispar del reconocido a las licencias de
maternidad, más que favorecer el rompimiento de la desigualdad de géne-
ro, fortalece los esquemas de asignación de roles discriminatorios, que no
toman en cuenta circunstancias y realidades específicas, como puede ser la
existencia de familias monoparentales o la importancia de la coparticipa-
ción de hombres y mujeres en la dinámica familiar.
prÓLOGO
contra las mujeres, como es el caso de la retención de documentos migra-
torios que coloca en estado de indefensión a la mujer migrante, coartando
XIX
así su derecho de acceso a la justicia.
prÓLOGO
miso social, aspecto ético fundamental de todo servicio público.
XXI
El siguiente artículo "Elementos de análisis para la aplicación de la
perspectiva de género en la labor jurisdiccional", de Liliana Hernández Her-
nández, es un importante esfuerzo por mostrar de qué manera la implemen
tación de una perspectiva de género en la labor jurisdiccional contribuiría
al mejoramiento de la impartición de justicia. Para ello, la autora desarrolla el
marco conceptual para el entendimiento adecuado de lo que constituye
la "perspectiva de género", deteniéndose pertinentemente en el contenido
semántico de ambos conceptos para, posteriormente, situarlos en el con-
texto de una herramienta metodológica útil en el estudio y aplicación del
derecho.
prÓLOGO
El siguiente trabajo, de María Edith López Hernández, lleva por título
"¿Las órdenes de protección son verdaderas medidas preventivas de los
XXIII
feminicidios en México?" En él, la autora busca evidenciar que las órdenes
de protección como han sido implementadas hasta hoy en nuestro país, no
tienen una plena efectividad. Para ello, en primer lugar da un esbozo gene-
ral de la situación nacional en relación a la violencia contra la mujer y a las
medidas implementadas para garantizar una vida libre de violencia, abor-
dando no sólo las directrices normativas, sino la realidad que proyectan las
cifras relativas, por ejemplo, al feminicidio. Con este panorama, María Edith
López Hernández tiene elementos para sostener que dados los estereoti-
pos de género y el limitado espectro que se piensa tienen las órdenes de
protección, éstas se vuelven mecanismos ineficientes para combatir la vio-
lencia contra la mujer, por lo que es indispensable trabajar para solventar
estas fallas y que las órdenes sean medios efectivos.
prÓLOGO
atendiendo al interés superior de las niñas y niños, reconozca la capacidad
de los hombres para hacerse parte del cuidado de los hijos e hijas y parti-
XXV
cipar en el ámbito familiar, tradicionalmente considerado como el espacio
privado.
*
Una síntesis de este artículo fue presentada como ponencia en el III Congreso Internacional de Derechos
Humanos, celebrado en Lima, Perú, el 13 y 14 de septiembre de 2012, organizado por el Ilustre Colegio de
Abogados de Lima. El autor agradece a Marisol Aguilar Contreras por sus atinados comentarios al presente
estudio.
1
Decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley Federal del Trabajo, publi-
cado en el Diario Oficial de la Federal el 30 de noviembre de 2012.
2
Vid. Cámara de Diputados. Gaceta Parlamentaria, número 3613-A, viernes 28 de septiembre de 2012, p. 3.
Consultable en: http://gaceta.diputados.gob.mx/ (Última visita 11 de enero de 2013).
3
Ibidem, p. 5-6.
4
Párrafos 4 y 5 del artículo 2 de la Ley Federal del Trabajo.
5
Párrafo 2 del artículo 3 de la Ley Federal del Trabajo.
6
El párrafo 5 del artículo 1 de la Constitución establece la siguiente lista enunciativa de causas prohibidas
de discriminación: origen étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social, las condicio-
nes de salud, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra
la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas.
7
Artículo 56 de la Ley Federal del Trabajo.
8
Artículo 132 fracción XXVII Bis de la Ley Federal del Trabajo.
9
Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 18 de agosto de 2009. Dicha línea de acción se enmarca
en la estrategia 6.5. que tiene por objeto "Desarrollar, promover y adoptar políticas y acciones de conciliación
trabajo-familia [nota suprimida] que propicien la igualdad y equidad en las responsabilidades familiares, favorez-
can el trabajo de las mujeres, mejoren sus condiciones de competencia laboral y eleven su calidad de vida".
10
Artículo 170 fracciones II y II bis de la Ley Federal del Trabajo.
11
Declaración de Beijing, párr. 15. A/CONF.177/20/Rev.1.
12
Carta de las Naciones Unidas y Estatuto de la Corte Internacional de Justicia. Firmada por México el 26
de junio de 1945 y ratificada el 7 de noviembre de 1945. Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 17 de
octubre de 1945. Consultable en www.sre.gob.mx/tratados/index.php (Última visita el 7 de enero de 2013).
13
Asamblea General de Naciones Unidas. Resolución 217 A (III) de 10 de diciembre de 1948.
14
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de 16 de diciembre de 1966. Ratificado por México el
23 de marzo de 1981. Vid. treaties.un.org/Pages/ViewDetails.aspx?src=TREATY&mtdsg_no=IV-4&chapter=
4&lang=en#EndDec . Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 20 de mayo de 1981. Vid. www.sre.gob.
mx/tratados/index.php ; y Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de 16 de diciembre
de 1966. Ratificado por México el 23 de marzo de 1981. Vid. traties.un.org/Pages/ViewDetails.aspx?src=
TREATY&mtdsg_no=IV-3&chapter=4&lang=en . Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 12 de mayo
de 1981. Vid. www.sre.gob.mx/tratados/index.php . (Última visita 8 de enero de 2013).
15
Artículo 3 común al PIDESC y PIDCyP.
16
Artículo 2 fracciones f) y g) de la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación
Contra la Mujer (en adelante "CEDAW") de 18 de diciembre de 1979. Ratificada por México el 23 de marzo de
1981. Vid. treaties.un.org/Pages/ViewDetails.aspx?src=TREATY&mtdsg_no=IV-8&chapter=4&lang=en. Publicado
en el Diario Oficial de la Federación el 12 de mayo de 1981. Vid. www.sre.gob.mx/tratados/index.php. (Última
visita 8 de enero de 2013).
fundar una familia, a la cual definen como la institución que es "el elemento
natural y fundamental de la sociedad", misma que requiere de una especial
protección por el Estado. El único requisito que imponen los tratados de
derechos humanos para conformar una familia es el que las personas que
vayan a contraer matrimonio lo decidan libremente y en edad suficiente
para ello.18
17
Cfr. Corte IDH, Condición Jurídica y Derechos de los Migrantes Indocumentados. Opinión Consultiva
OC-18/03 de 17 de septiembre de 2003. Serie A Nº 18, párr. 101.; Caso Atala Riffo y Niñas vs. Chile. Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia del 24 de febrero de 2012. Serie C Nº 239, párr. 79; y Caso Nadege Dorzema y
otros vs. República Dominicana. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 24 de octubre de 2012. Serie C Nº 251,
párr. 224.
18
Artículo 10.1 PIDESC; artículo 23 PIDCyP; y artículo 17 Convención Americana sobre Derechos Huma-
nos (en adelante "Convención Americana").
19
Artículo 10.1. PIDESC.
20
Artículo 23.4 PIDCyP. Asimismo, vid., artículo 17.4 de la Convención Americana.
21
Artículo 16.1.a) CEDAW.
22
Artículo 16.1.c) CEDAW.
23
Artículo 16.1.d) CEDAW.
24
Artículo 16.1.f) CEDAW.
25
Artículo 18.1 Convención sobre los Derechos del Niño (en adelante "CDN"). 20 de noviembre de 1989.
Ratificada por México el 21 de septiembre de 1990. Vid. treaties.un.org/Pages/ViewDetails.aspx?src=
TREATY&mtdsg_no=IV-11&chapter=4&lang=en . Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 25 de enero
de 1991. Vid. www.sre.gob.mx/tratados/index.php . (Última visita 8 de diciembre de 2013).
26
Artículo 18.2 CDN.
27
Artículo 18.3 CDN.
28
Cfr. Albertson Fineman, Martha, The neutered mother, the sexual family, and other twentieth century
tragedies, Routledge, London, 1995, p. 164-5.
10
La forma y el concepto de familia varían de un Estado a otro y hasta de una
región a otra en un mismo Estado. Cualquiera que sea la forma que adopte
y cualesquiera que sean el ordenamiento jurídico, la religión, costumbres o
la tradición en el país, el tratamiento de la mujer en la familia tanto ante la ley
como en privado, debe conformarse con los principios de igualdad y justicia
para todas las personas, como lo exige el artículo 16 de la Convención.31
29
Cfr. Ibidem, p. 145.
30
Corte IDH, Caso Atala Riffo y Niñas vs. Chile..., op. cit., párrs. 145, 172-174.
31
Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer. Recomendación General Nº 21 (13o
período de sesiones, 1994). La igualdad en el matrimonio y en las relaciones familiares, párr. 13.
32
Algunos ejemplos de lo anterior, África del Sur (2002); Argentina (2010); Brasil (2010); Distrito Federal,
México (2010); Israel (2008); Andorra (2005); Bélgica (2006); Dinamarca (2010); Islandia (2006); Países Bajos
(2001); Noruega (2009); España (2005); Suecia (2003); algunas partes del Reino Unido (2005); la mayor parte
de Canadá y algunas partes de Estados Unidos; y algunas partes de Australia. ILGA. Paoli, e Itaborahy, Lucas.
Homofobia de Estado. Un informe mundial sobre las leyes que criminalizan la actividad sexual con consentimiento
entre personas adultas del mismo sexo, Mayo de 2012, Consultable en: www.ilga.org (Última visita 11 de enero de
2013).
33
Cfr. Albertson Fineman, Martha, The neutered mother… op. cit, pp. 146 y 154.
34
Cfr. SALAZAR, Rebeca; SALAZAR, Hilda y RODRÍGUEZ, Maritza, Conciliación trabajo y familia en México:
las responsabilidades compartidas de mujeres y hombres en el debate público, Colección Análisis Político, Fiedrich
Ebert Stiftung, México, Noviembre 2011, p. 15.
35
Plataforma de Acción de Beijing. A/CONF.177/20/Rev.1, párr. 29.
36
Cfr. Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación. Encuesta Nacional sobre Discriminación en México.
Enadis 2010. Resultado sobre mujeres, CONAPRED e Instituto Nacional de las Mujeres, México, 2012, p. 76.
ellas.38
Para las mujeres sigue siendo un reto lograr balance entre las respon-
sabilidades familiares y la vida laboral.39 En este contexto, la Organiza
ción Internacional del Trabajo (en adelante la "OIT") ha impulsado la discusión
sobre las cuestiones relativas a la maternidad, paternidad y el trabajo, con el
objeto de promover la "conciliación de las responsabilidades familiares y
12 laborales" tanto de las madres como de los padres. Particularmente pro-
mueven que los padres incrementen su participación en las responsabilida-
des relativas al cuidado de las/los hijas/os.
37
Cfr. Vicente Palacio, María Arantzazu, "La Ley de Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres y la conci-
liación de la vida laboral y familiar. Las modificaciones (sustantivas) en materia de Maternidad y Riesgo durante la
lactancia natural en los diversos regímenes de la Seguridad Social" en Revista del Ministerio del Trabajo y Asuntos
Sociales, Gobierno de España, Extra de n. 74, 2008, p. 148.
38
Plataforma de Acción de Beijing. A/CONF.177/20/Rev.1, Párr. 107. c).
39
ILO. Decent work. A better world starts here, backgroud brochure as part ot the ILO public awareness raising
campaign on "Gender equality at the hear of decent work", primer párrafo.
40
Cfr. García Viña, Jordi, "La paternidad como nueva situación protegida por la Ley Orgánica 3/2007, de
22 de marzo", en Revista del Ministerio de Trabajo…, op. cit., p. 203.
41
Cfr. Salazar, Rebeca, Salazar, Hilda, y Rodríguez, Maritza, Conciliación trabajo y familia..., op. cit.,
p. 6 y 12.
42
Cfr. Ibidem, p. 7.
43
Cfr. Idem.
44
Conferencia Internacional del Trabajo. La igualdad de género como eje del trabajo decente, Informe VI, 98a
reunión, 2009, párr. 113.
45
Cfr. Salazar, R., Salazar, H., y Rodríguez, M., Conciliación trabajo y familia..., op. cit., p. 26.
46
Cfr. Ibidem, p. 8 y 26.
47
Cfr. Ibidem, p. 18.
1. La protección de la maternidad 15
48
Por ejemplo cuando se trate del producto de reproducción asistida bajo la figura de subrogación materna.
49
Cfr. Öun, Ida y Pardo Trujillo, Gloria. Maternity at work: A review of national legislation. Findings for the
ILO’s Conditions of Work and Employment Database, ILO 2005, p. vii.
50
Artículo 25.2. DUDH.
51
Artículo VII. Declaración Americana sobre Derechos y Deberes del Hombre.
52
Artículo 10.2. PIDESC.
53
Artículo 15.3 inciso a) Protocolo de San Salvador.
54
Artículo 24(d) CDN.
55
Artículo 12.2 CEDAW.
56
Por ejemplo los Convenios Nº 3 (1919) y Nº 103 (1952).
57
Oficina Internacional del Trabajo. Promoviendo la igualdad de género. Convenios de la OIT y los derechos labo
rales de las mujeres, OIT, Ginebra-Santiago de Chile, 2006.
58
Cfr. J. Cook, Rebeca, Dickens, Bernard M. y Fathalla, Mahmoud F. Salud reproductiva y derechos
humanos. Integración de la medicina, la ética y el derecho, traducción de Adriana de la Espriella, Profamilia, Colombia,
2003, p. 176.
59
Tomado casi textual de ILO. Decent work..., op. cit., tercer párrafo.
60
Plataforma de Acción de Beijing. A/CONF.177/20/Rev.1, párr. 165.c).
61
World Health Organization. Postpartum Care of the Mother and Newborn: A Practical Guide, Report of a
Technical Working Group, Maternal and Newborn Health-Safe Motherhood Unit-Division of Reproductive
Health- World Health Organization, Geneva, 1998, p. 50. Vid. tb. Vicente Palacio, María Arantzazu, "La Ley de
Igualdad..., op. cit., p. 151.
El Convenio núm. 183 exige a los Estados ratificantes que concedan una
licencia de al menos 14 semanas, seis de las cuales deben tomarse inmedia-
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
tamente después del parto. La Recomendación núm. 191 propone que este
periodo debería ser de al menos 18 semanas. Esta extensión tiene por fina-
lidad poner a la mujer al amparo de las presiones en el sentido de un pron-
to regreso al trabajo, que podría resultar perjudicial para su salud o la de su
hijo. El Convenio establece el derecho a una licencia adicional en caso de
enfermedad o de complicaciones.62
62
Conferencia Internacional del Trabajo. La igualdad de género..., op. cit., , párr. 114. Por ejemplo, "miscarriage,
stillbirth, death or other complications arising from abnormal confiment". Öun, Ida y Pardo Trujillo, Gloria.
Maternity at work..., op. cit., p. 13.
63
Cfr. Ibidem, p. 7.
64
Cfr. Idem.
65
Artículo 170 fracción II de la Ley Federal del Trabajo.
66
Öun, Ida y Pardo Trujillo, Gloria. Maternity at work..., op. cit., pp. 6-7
67
ILO. Decent work..., op. cit., sexto párrafo.
68
Öun, Ida y Pardo Trujillo, Gloria. Maternity at work..., op. cit., p.11
69
Cfr. Ibidem, p. 12.
70
Cfr. Ibidem, p. 13.
71
Cfr. Ídem.
Suazilandia, en los que existe la figura de la licencia pero sin beneficios eco-
nómicos. Asimismo, indicó que solo el 36% de los países cumple el criterio
de suficiencia, es decir, el ingreso durante la maternidad es de al menos dos
tercios del ingreso de la trabajadora por 14 semanas.72
72
Cfr. ILO. Decent work..., op. cit., noveno párrafo.
73
Cfr. Ibidem, décimo párrafo.
Las licencias parentales son periodos de tiempo que se otorgan por los
empleadores por un periodo relativamente largo, ya sea al padre o a la ma-
21
Las normas de la OIT no han definido una temporalidad para las licen
cias parentales, se ha dejado a los propios Estados margen para determi-
narla.77 Para algunos, las licencias parentales tienen por objeto otorgar un
periodo largo de tiempo a los padres para evitar el gasto que implica tener
a los hijos en guarderías.78
74
Cfr. Plataforma de Acción de Beijing. A/CONF.177/20/Rev.1, párr. 165.m).
75
Cfr. Ibidem, p. 41.
76
Cfr. Ibidem, p. 44.
77
El documento OIT, La igualdad en el trabajo: Afrontar los retos que se plantean, Informe del Director General,
CIT, 96.a reunión (Ginebra 2007), pp. 91 y 92, señala que: "El periodo de licencia parental, es decir, un permiso
relativamente largo después de la expiración de la licencia de maternidad, se ofrece en algunos países tanto a
las mujeres como a los hombres. Puede tratarse de un derecho compartido, que puede ejercer uno u otro de los
progenitores (por ejemplo, en Cuba, Estonia, Hungría y Vietnam), de un derecho personal, no transferible (por
ejemplo, Bélgica, Irlanda e Islandia), o de un derecho mixto, que combina derechos personales y familiares
(por ejemplo, en Noruega y Suecia). En la Unión Europea, la directriz del Consejo relativa al acuerdo marco
sobre el permiso parental ha sido decisiva para incrementar el número de países que otorgan derechos indivi-
duales de licencia parental, y ha alegado por lo tanto a los padres a hacer uso de esa licencia, lo que redunda en
beneficio de la igualdad de género." Tomado de Conferencia Internacional del Trabajo. La igualdad de género como
eje del trabajo decente, Informe VI, 98a reunión, 2009, párr. 116, nota al pie 27.
78
Öun, Ida y Pardo Trujillo, Gloria. Maternity at work..., op. cit., p. 42.
79
ILO. Decent work..., op. cit., décimo séptimo párrafo.
80
CEDAW. Observaciones finales: REPÚBLICA CHECA. CEDAW/C/CZE/CO/3 (traducción libre).
III. Licencias
de paternidad
81
Cfr. Fagan, Colete y Hebson, Gail. ‘Making work pay’ debates from a gender perspective: a comparative
review of some recent policy reforms in thirty European countries, final report 2004, prepared by members of the
co-ordinating team of the Expert Group on Gender, Social Inclusion and Employment (EGGSIE) for the Equal
Opportunities Unit of the European Commission, p. 46. Consultable en: http://www.umist.ac.uk/management/
ewerc/egge/eggsie.html .
82
Cfr. Idem.
83
Oficina Internacional del Trabajo. Promoviendo la igualdad de género..., op. cit., p. 21.
84
Undurraga, Verónica. "Entrevista a Maria Gracia Cariola: una mirada al proyecto de ley que crea el
permiso postnatal parental, en Anuario de Derechos Humanos, Nº 7, Universidad de Chile 2011, p. 216. Consulta-
ble en: http://www.anuariocdh.uchile.cl/index.php/ADH/issue/view/1672 (Última consulta 7 de enero de 2013).
85
Cfr. Conferencia Internacional del Trabajo. La igualdad de género..., op. cit., párr. 117.
Cfr. Corte Europea de Derechos Humanos. Konstantin Markin vs. Russia, 22 de marzo de 2012,
86
91
CEDAW. Observaciones Finales: República Italiana. CEDAW/C/ITA/CO/6, párr. 37.
92
CEDAW. Observaciones Finales: República de Corea. CEDAW/C/KOR/CO/7, párr. 32.
93
Ibidem, párr. 33.
94
Artículo 132 fracción XXVII Bis de la Ley Federal del Trabajo.
95
Vid. Acuerdo General de la Comisión de Administración que contiene los criterios para conceder licencias de
maternidad y paternidad al personal del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, publicado en el Diario
Oficial de la Federación el 27 de mayo de 2011.
96
Vid. Lineamientos generales de trabajo de los servidores públicos de la Comisión de Derechos Humanos del
Distrito Federal, publicados en la Gaceta Oficial del Distrito Federal el 8 de marzo de 2012.
97
Vid. Instituto Nacional de las Mujeres. Comunicado de prensa número 47, de fecha 17 de junio de 2011.
Tomado de página del INMUJERES: http://www.inmujeres.gob.mx/index.php/sala-de-prensa/inicio-noticias/424-
licencia-de-paternidad-instrumento-para-construir-nuevas-relaciones-padre-hijoa (Última consulta el 3 de enero
de 2012).
98
Cfr. Conferencia Internacional del Trabajo. La igualdad de género..., op. cit., párr. 117.
99
Cfr. Ibidem, p. 37
IV. Reflexiones
finales
29
Para algunos autores, la familia es el lugar en donde los niños aprenden las
nociones de justicia e igualdad. Sostienen que solamente en familias en
donde los hijos son cuidados tanto por la madre como por el padre de
manera igualitaria, se pueden desarrollar plenamente las capacidades mo-
rales y psicológicas que les permitirán aprender dichas nociones e incluso
personalidades humanas integrales.102
100
Cfr. Ibidem, pp. 37-38. Vid. tb. García Viña, Jordi, "La paternidad como...", op. cit., p. 207
101
Cfr. Öun, Ida y Pardo Trujillo, Gloria. Maternity at work..., op. cit., p. 38
102
Cfr. Albertson Fineman, Martha, The neutered mother..., op. cit., pp. 154-5 y 157-8
103
Cfr. Fagan, Colete y Hebson, Gail. ‘Making work pay..., op. cit., p. 39.
104
Cfr. Idem.
Por lo anterior, se tienen que modificar tanto la Ley Federal del Tra-
bajo, así como las políticas institucionales en México para ampliar el plazo
de la licencias de paternidad.
A pesar de existir desde los años setenta un claro interés por las muje-
res, como autoras y víctimas de ciertos delitos por parte del derecho
penal y la criminología, este interés no ha logrado que la perspectiva de
género penetre en ambas disciplinas, convirtiéndose en un enfoque central.
Las críticas que desde el feminismo se han realizado a la ciencia (S. Harding,
L. Schiebinger) y a la ciencia jurídica (C. Smart) han aportado sobre el co-
nocimiento humano una nueva visión en la que la oposición entre el sujeto-
objeto, razón y emoción, espíritu y cuerpo, se rechaza.1
1
Los progresos de la ciencia neurobiológica y de la técnica creadora de la denominada inteligencia artificial
han introducido horizontes y planteamientos hasta hoy ignorados sobre cómo funciona el cerebro y la mente
humanos. Unos conocimientos que nos obligan a reconsiderar toda nuestra red de conceptos, abriendo más
preguntas que respuestas respecto al conocimiento. Entre los aspectos a destacar cabe reseñar la subjetividad de
todo conocimiento, donde la razón no ocupa ya el lugar privilegiado que le había sido otorgado. Hoy se recono-
ce que en nuestras acciones y decisiones actúa tanto nuestro nivel consciente como el inconsciente, y que las
inteligencias son múltiples. Cfr. Gardner, H. Inteligencias múltiples. La teoría en la práctica, Paidós, Madrid, 2010.
2
Smart, C., "La teoría feminista y el discurso jurídico" en El Derecho en el Género y el Género en el derecho,
Biblos, Buenos aires, 2000, pp. 48-49
3
Eugenio Raúl Zaffaroni sostiene que en la lucha contra la discriminación puede legítimamente utilizarse el
poder punitivo apelando –precisa e irónicamente– a su propia cualidad des-legitimador y sin necesidad de recu-
rrir a su ineficaz valor simbólico. La ética del feminismo –proveniente de su objetivo estratégico– le permite usar
como táctica la fuerza de su enemigo (el poder punitivo), pero poniendo pragmáticamente distancia para poder
discriminar entre una táctica coyuntural y el compromiso con los objetivos estratégicos que persigue. El feminis-
mo no necesita legitimar el discurso del poder punitivo. Más aún, no debe hacerlo, para salvar su potencial de
transformación social, que es la gran esperanza de quienes luchan contra la discriminación. Cfr. Zaffaroni, E.,
"El discurso feminista y el poder punitivo" en Birgin, Haydée (compil.), Las trampas del poder punitivo. El género
del Derecho penal, Biblos, Buenos Aires, 2000, p.36
4
Cfr. Bourdieu, P., La dominación masculina, Anagrama, 2000.
5
En España, el género se introduce por primera vez en la ley 30/2003, del 13 de octubre, sobre medidas
para incorporar en la normativa los informes de género. La Ley 30/2003 de 13 de octubre, sobre medidas para
incorporar la valoración de impacto de género en las disposiciones normativas que elabore el gobierno, introdu-
ce una modificación en los artículos 22 y 24 de la ley de Gobierno. Esta reforma establece que los proyectos de
ley y las disposiciones reglamentarias irán acompañadas de un informe, sobre el impacto por razón de género,
de las medidas que contienen. A partir de esta reforma, el Gobierno asume la responsabilidad de aportar infor-
mación sobre la incorporación de la perspectiva de género y la valoración de los efectos que las normas apro-
badas van a tener, de forma separada, sobre los hombres y las mujeres, considerando, especialmente, las
desigualdades y discriminaciones por razón de sexo (discriminaciones de género) existentes, mediante lo que se
denominan informe de género. Si tenemos en cuenta que, en el proceso de elaboración de las propuestas nor-
mativas, intervienen diferentes personas, procedentes de diferentes ministerios y ámbitos competenciales, en
muchas ocasiones con diferentes formas de funcionamiento, la eficacia de los informes de impacto de género,
en la legislación, requerirá de un acuerdo mínimo entre todas las partes para conseguir un seguimiento y coor-
dinación adecuados a los fines que imponen las políticas de igualdad de oportunidades.
6
La función legitimadora del patriarcado que reproduce el sistema penal no puede ser ignorada, como
sostiene Gerlinda Smaus. La diferencia con la que son tratadas las mujeres en los juicios penales encuentra su
explicación, sobre todo, en la preocupación del sistema de justicia criminal (masculino) en limitar su propia inter
ferencia negativa sobre el cumplimiento de los roles conferidos a las mujeres en la esfera de la reproducción. Si los
Jueces penales tratan "más caballerescamente" a las mujeres y parecen, de ese modo, desear mostrarles que su
lugar, en vez de estar en la cárcel, está en su casa al lado de sus hijos, es porque saben que no existen tantas
madres y esposas disponibles. Pero la cuestión esencial es: ¿Cómo un ordenamiento jurídico, en este caso el or-
den penal, intrínsecamente discriminatorio puede combatir la discriminación de género? El sistema penal sigue
cumpliendo una función significativa en la construcción de las representaciones sobre las problemáticas sociales
que, hasta el momento, no ha sido reemplazada por otro mecanismo. En esta situación la alianza entre las muje-
res y los sistemas penales es mucho más compleja de lo que, a primera vista, pudiera parecer. Desde las teorías
feministas se han planteado diferentes disquisiciones respecto al uso del derecho penal. Así, ciertos sectores del
feminismo se han manifestado a favor de la utilización del sistema penal tomando en cuenta que este susbsistema
social es una de las principales esferas de poder del Estado y las mujeres deben luchar por un nuevo espacio de
ejercicio de poder también en este ámbito. Reconociendo incluso las dificultades y los significados que el mismo
conlleva. Desde esta posición se defiende la utilización del derecho penal en su dimensión simbólica. La principal
representante de esta postura es Gerlinda Smaus, quien ha mantenido una postura siempre beligerante con los
teóricos abolicionistas del sistema penal sosteniendo que, en el campo de la criminología, abolicionistas y femi-
nistas se caracterizan por sus diferencias más que por sus similitudes. Cfr. Smaus, G., "Die frauenkriminalität"
en Kriminologisches Journal, 4, 1990, p. 277, citado por Baratta, Alessandro, "El paradigma del género desde la
cuestión criminal hacia la cuestión humana" en Identidad femenina y discurso jurídico, Biblos, Buenos Aires, 2000,
pp. 122-126.
II. La victimología
y el género
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
7
Young nos propone que para avanzar en la justicia social se debe escuchar sobre todo a las víctimas de la
desigualdad y la injusticia. Cfr. Young, I., La justicia y la política de la diferencia, Cátedra, Madrid, 2000
vos derechos a las víctimas. Respecto a este último punto hay que destacar
la Decisión Marco del Consejo de la Unión Europea de 15 de marzo de
2001. En esta Decisión Marco, se regula el estatuto de la víctima y se afirma
que:
8
Decisión Marco del Consejo DE 15 de marzo de 2001, relativa al Estatuto de la Víctima en el Proceso
Penal, 2001/220/JA
2. Los Estados miembros velarán por que se brinde a las víctimas especial-
mente vulnerables un trato específico que responda de la mejor manera
posible a su situación. 43
9
En España se produjo un cambio significativo en el panorama victimológico , con la Ley 35/1995, de 11 de
diciembre de ayudas y asistencia a las víctimas de delitos violentos y contra la libertad sexual. También en la re-
forma de 1999, al Código penal español de 1995, el artículo 57 amplia las medidas existentes de protección a
las víctimas respecto a sus agresores, reconociendo a estas medidas el carácter de penas accesorias (LO 14/1999,
de 9 de junio) .
10
En los supuestos de violencia de género en la pareja las víctimas indirectas y directas son numerosas, pues
se ven involucrados los madres y padres de víctimas y victimarios, hermanas/os, y las hijas e hijos. Además de las
dad por todos los sujetos implicados. Una aceptación que supone recono-
cer que todas las acciones y decisiones tienen un impacto en el entorno
además del impacto concreto. Por consiguiente, no existe una mujer-víctima
irresponsable, sin capacidad de decidir, sino una víctima que interactúa tam-
bién en el proceso violento. Desde este enfoque todos los intervinientes
son actores principales –también las victimas y los familiares cómplices silen
ciosos– en la producción del resultado. Cuando situamos a las víctimas en
44 el centro del proceso y las convertimos en actrices necesarias en el proce-
so mediador, esto afecta a la racionalidad que envuelve al proceso penal,
pero también al ideal de justicia sobre el que se asienta la funcionalidad y
los fines del Derecho. Aunque se sostiene desde la victimología que la me-
diación penal es un mecanismo de actuación complementario al proceso
penal, la racionalidad de la mediación afecta a ambos procedimientos.
Es difícil la coexistencia pacífica entre dos modelos tan diferentes de racio-
nalidad y de justicia.
compañeras/os de trabajo y la sociedad, en último término. De ahí que se afirme que la violencia de género es
una lacra social, que impide el desarrollo de un país y la paz.
11
Cfr. Beristain, A., Protagonismo de las victimas de hoy y mañana. Evolución en el campo jurídico, penal, pri
sional y ético, Tirant lo Blanch, Valencia, 2005.
(…)
Los poderes públicos no pueden ser ajenos a la violencia de género, que cons
tituye uno de los ataques más flagrantes a derechos fundamentales como
la libertad, la igualdad, la vida, la seguridad y la no discriminación proclama-
dos en nuestra Constitución. Esos mismos poderes públicos tienen, conforme
a lo dispuesto en el artículo 9.2 de la Constitución, la obligación de adoptar
medidas de acción positiva para hacer reales y efectivos dichos derechos,
removiendo los obstáculos que impiden o dificultan su plenitud.
12
En este momento está vigente el tercer programa, Daphne III, cuya vigencia comprende de 2007 a 2013.
En este programa, aunque la centralidad está en la violencia contra las mujeres, el objetivo es dedicar especial
atención a menores y jóvenes.
1. La presente Ley tiene por objeto actuar contra la violencia que, como
manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relacio-
nes de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
48
3. La violencia de género a que se refiere la presente Ley comprende todo
acto de violencia física y psicológica, incluidas las agresiones a la libertad
sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de libertad.
13
Vid. Maqueda, Laurenzo P., Rubio A., Ma. L., (Coords), Género, violencia y derecho,Tirant lo Blanch,Valen-
cia, 2008.
14
En el Informe del Banco Mundial 2012: igualdad de género y desarrollo, se sostiene que desde los hogares,
el mercado y las instituciones se produce desigualdad de género, y se evita el empoderamiento y el desarrollo
igualitario de las mujeres. En otras palabras, que existen contra las mujeres en el mundo una grave violación de
sus derechos humanos.
15
Soy muy consciente del daño, en ocasiones irreparable, que la violencia genera en las victimas y la nece
sidad que tienen de acompañamiento tanto psicológico como jurídico para afrontar de forma adecuada la dureza
del proceso. La mediación exige que el daño en la víctima no sea muy profundo, es decir que no haya quebrado
gravemente su voluntad, y que ésta la decida como una mejor opción a su situación particular.
16
La sanción para la victimología no tiene como objetivo restablecer el orden social alterado y ser un ele-
mento disuasorio respecto a futuras acciones, sino el de restaurar el daño generado.
17
Esto explica, por qué en otros momentos he defendido que lo más importante en España era la sanción
y el fin de la impunidad que existió hasta el año 2000.
18
La plataforma de acción de Beijing fue en este sentido un documento emblemático. Recordemos que fue
firmado por unanimidad por todos los Estados en 1995. Es tan importante su contenido y propuestas en la lucha
contra la discriminación de las mujeres, que las últimas conferencias de Naciones Unidas en 2000, 2005 y 2010,
se han limitado a reconocerlo y continuar con su aplicación. Por este motivo se habla de Beijing+5, Beijing +10 y
Beiijing +15. Esta última conferencia celebrada en Cádiz (España).
19
En abril de 2011 el Comité de Ministros del Consejo de Europa adoptó en Estambul el Convenio europeo
para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica. Cabe destacar en este Convenio
la universalidad del derecho de las mujeres a vivir sin violencia. En concreto en el artículo 42 prohíbe considerar
como justificación de los delitos de violencia contra las mujeres, la cultura, la costumbre, la religión, la tradición o
el supuesto honor. Para un estudio de su contenido vid.,Truchero, J., y Arnaiz, A., "Aproximación al Convenio
Europeo de violencia contra las Mujeres y la violencia Doméstica" en Revista Europea de Derechos Fundamentales,
n. 19/1semestre, 2012., pp. 123-156.
51
20
El número de denuncias de violencia de género registradas en el segundo trimestre de 2011 alcanzó en
España un total de 34.347 casos, lo que supone un crecimiento del 5,7% respecto del primer trimestre de este
año. Las denuncias presentadas entre abril y junio de 2011 implican una media de 377,4 denuncias diarias e
indican una estabilidad respecto del mismo periodo del año anterior, ya que el crecimiento respecto al segundo
trimestre de 2010 ha sido del 0,3 por ciento (34.256 casos). Datos del Observatorio contra la violencia
doméstica y de género. A pesar de estos datos, se puede afirmar que se ha generado una moderación en el
número de denuncias en los últimos años en España. Un hecho que puede tener varias lecturas. Podríamos
interpretarla de una forma más o menos positiva, dando por hecho que esta caída es reflejo de que el proble
ma de la violencia de género se está mitigando. Sin embargo, el I Informe Mujeres Víctimas de la Violencia de
Género de la Fundación Adecco ha querido ir más allá y ha preguntado a las mujeres encuestadas si la difícil
situación económica es un factor que ha mermado su voluntad de denunciar. En efecto, la respuesta es afirmativa:
un 64% comenta que la crisis supone un freno para denunciar, por el temor a no encontrar empleo y a verse sin
recursos para salir adelante. Frente a ellas, un 36% considera que la situación económica no influye en este
sentido. Según Arancha Jiménez, directora de operaciones de la Fundación Adecco: "la crisis puede incrementar
la inseguridad de muchas mujeres para dar el paso de formalizar la denuncia. Viendo ante sí el panorama
económico, temen no encontrar un empleo que les permita ser autónomas e independientes. Por este motivo,
ahora más que nunca, es necesario impulsar políticas que incentiven la participación en el mercado laboral de
estas mujeres, para que así puedan recuperar su dignidad y libertad". Informe mujeres víctimas de la violencia
de género y empleo, 25 de noviembre, día internacional contra la violencia de género, 2012.
21
Cfr. Laurenzo, P., Maqueda, Ma. L., y Rubio A., (Coords), Género, violencia y derecho, Tirant lo Blanch,
Valencia, 2008.
22
Young analiza la responsabilidad personal y colectiva que existen respecto a las violencias estructurales.
Su trabajo es de interés para este estudio porque desvela los diferentes niveles de responsabilidad que existen
en los supuestos de violencia estructural, lo que exige una resignificación de la culpa y de la responsabilidad
jurídica, para avanzar hacia una correcta sanción y prevención. Cfr. Young I., La responsabilidad por la justicia,
Morata, Madrid, 2011.
23
Las víctimas de violencia de género a manos de la pareja o ex pareja habitualmente siguen un largo pro
ceso, en ocasiones de años, hasta interponer una denuncia. Para conocer las dudas y los obstáculos que se
presentan durante este proceso vid., Bodelón E., Violencia de género y las respuestas de los sistemas penales,
Ediciones Didot, Argentina, 2012, pp. 31-57.
52 24
Las características principales de este Contramovimiento machista en España, siguiendo las líneas del
movimiento internacional de los "Derechos del padre" basadas en los principios del SAP, podríamos resumirlas de
la siguiente manera: –Desprecian la perspectiva de género, en España, por ejemplo, la Ley de Igualdad y más con
cretamente la Ley Integral, tachándola de inconstitucional, discriminatoria para el hombre, y de potenciar el
conflicto de la pareja en lugar del diálogo. Para estos grupos, se "ha ido demasiado lejos" en el intento de proteger
a las mujeres llegando a la victimización del hombre. En la práctica luchan por desprestigiar una ley cuyo objetivo
es erradicar la violencia partiendo del origen patriarcal que la justifica. Distorsionan la realidad de la violencia de
género considerando la violencia machista poco frecuente y atribuyéndole a menudo causas ajenas a la respon
sabilidad del varón que la ejerce. La violencia sexista para estas asociaciones no es tal, sino una violencia bidirec
cional en la pareja en la mayoría de los casos, y por ello tratan de imponer la denominación de "violencia
doméstica" desterrando el concepto de género. Según ellos, la mayoría de los casos de violencia de género no
son más que "conflictos de pareja". Desprecian y atacan al feminismo que defiende a las mujeres víctimas de
violencia de género, al que tachan de "radical", "revanchista" y al que culpan de potenciar políticas que acentúan
el conflicto en la pareja y el "victimismo" que debilita a las mujeres.–Dicen hablar siempre en interés superior
del menor, no en interés de ellos, los padres varones, aparentando ser neutrales, frente al feminismo que según
ellos busca el interés de las mujeres en este tema. Llevan a cabo una estrategia de mercado, sobre todo en
Internet, que potencia una imagen ficticia de padres víctimas, aparentando su preocupación por sus hijos/as,
dándole a sus intervenciones un carácter científico, pero desarrollando un discurso cargado de injurias y calum
nias contra las organizaciones de mujeres y expertos/as que prestan apoyo a las víctimas de la violencia de
género. Aparentan defender la "verdadera" igualdad entre hombres y mujeres, son defensores a ultranza de la
custodia compartida, que presentan como la solución más "igualitaria" y beneficiosa para el/la menor, pero que
en la práctica utilizan como manera de instrumentalizar a los hijos contra la mujer o de obtener ventajas eco
nómicas o de vivienda en la separación. –Legitiman el Síndrome de alienación parental como una verdad
científica y del que dicen ser víctimas a menudo, por culpa de las madres manipuladoras; no admiten que ha sido
su conducta violenta y el ejercicio de la agresividad contra la mujer y los hijos lo que hace inevitable el rechazo
de estos al padre que nunca les mostró afecto y que siempre los trató con indiferencia o agresividad. Difunden
el mito de las denuncias falsas de malos tratos al que convierten en fenómeno muy frecuente, con la intención
de acabar con la credibilidad de las mujeres víctimas de violencia de género que buscan protección en el sistema
judicial. Dicen buscar el diálogo y la conciliación en litigios de separación o divorcio, frente a la denuncia que
potencian las "feministas radicales", reivindicando e intentando imponer la Mediación Familiar obligatoria en
recursos sociales y en el sistema judicial, cuando en realidad lo que persiguen es el contacto con la mujer con
el fin de hacerla desistir de su ruptura para poder seguir manteniendo el control, el dominio y el sometimiento de
ella y de sus hijos/as. En definitiva se trata de ocultar con disfraces de falsa igualdad y defensa de la infancia una
ideología de marcado contenido machista y de valores y principios basados en un trasnochado conservadurismo,
que no pretende otra cosa que retrotraer a las mujeres a tiempos pasados donde el varón, dentro de la más
estricta legalidad, controlaba, dominaba, decidía y sometía a la mujer. Cfr. Federación de asociaciones de mujeres
separadas y divorciadas, "Invisibilización y Desprotección de las Víctimas de Violencia de Género en los Puntos de
Encuentro Familiar: Desmontando el SAP", febrero 2009. El documento puede Consultarse en la web del obser
vatorio de Violencia de Genero y violencia doméstica, España.
25
El trabajo que recogemos a continuación rompe el mito de las supuestas denuncias falsas por violencia de
género. Sólo 1 de las 530 resoluciones estudiadas podría encuadrarse como denuncia falsa. Transcurridos cuatro
años de la aprobación de la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, el
Grupo de Expertos y Expertas del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) publica un estudio sobre la apli-
cación de la Ley Integral por las Audiencias Provinciales que rompe el mito de las denuncias falsas. Sólo existe una
resolución judicial susceptible de ser encuadrada como tal, entre las 530 resoluciones analizadas en el citado
estudio. De las 530 sentencias que ha integrado la muestra total del estudio, 34 (un 6,42 porciento) correspon-
den a apelaciones contra sentencias dictadas en juicios de faltas; 472 (un 89,6 por ciento) a apelaciones contra
sentencias dictadas en procedimientos abreviados por los Juzgados de lo Penal y 24 sentencias (un 4,53 por
ciento) fueron dictadas en única instancia por las Audiencias Provinciales. De este estudio, también se desprende
que la mayor parte de las resoluciones dictadas en el ámbito de la violencia de género, bien en fase de apelación,
bien en enjuiciamiento en única instancia, son de condena, lo que sucede en 450 sentencias, un 84,91 por ciento.
Respecto a los tipos penales que originan más pronunciamientos de condena, el maltrato ocasional, tipificado en
el artículo 153 del Código Penal, es el más frecuente, con 267 sentencias condenatorias (59,33 por ciento). Le si-
guen los delitos de amenazas leves, con 98 sentencias (21,78%) y de quebrantamiento de pena o medida cautelar
o seguridad, con 46 sentencias (10,22%). Este estudio también revela que el delito de violencia habitual, regulado
por el artículo 173.2 del Código Penal, sigue siendo de aplicación residual, con 28 sentencias condenatorias
(6,22%) y 12 sentencias absolutorias (un 11,88% de las de este signo). Una buena parte de las sentencias abso-
lutorias en materia de violencia de género se producen por la dispensa de la obligación de declarar de la víctima,
recogida en el artículo 416 de la actual Ley de Enjuiciamiento Criminal, que data de 1882. Esto genera impor-
tantes distorsiones puesto que este tipo de delitos se cometen normalmente en la intimidad, adquiriendo, por
ello, la declaración de la víctima especial relevancia. La redacción de este precepto aproxima estos delitos, de
alguna manera, a la consideración de delitos privados e inciden en la desprotección de las víctimas que se niegan
a declarar. De las 530 sentencias analizadas, en 148 se valora la declaración de la víctima como prueba de cargo,
aunque en 114 de ellas concurren otros testigos o pruebas que acreditan esa declaración. En el resto, es decir,
en 34 casos, la declaración de la víctima es la única prueba practicada. De estos últimos, en 14 su testimonio sirve
para condenar al agresor, en 11 se le absuelve y en los 9 restantes se valoran otros aspectos como la inmediación
del Juez o de la Jueza. En el estudio actual se constata que aunque para este tipo de delitos se puede aplicar, alter
nativamente, la pena de prisión o la de trabajos en beneficios de la comunidad, la primera resulta de imposición
generalizada. Así, se han dictado un total de 388 penas de prisión y en 28 casos se ha impuesto la de trabajos en
beneficio de la comunidad.
III. La justicia
restaurativa
26
La doctrina se ha mostrado muy crítica con estas técnicas alternativas de regulación de conflictos en el
ámbito penal y consideran que lesionan los principios constitucionales y las garantías penales. Gordillo analiza uno
a uno los principios que conforman el sistema penal español, demostrando que la mediación es compatible con
ellos. Merece especial atención su rechazo a considerar el principio de legalidad versus el principio de la opor
tunidad. En su opinión, en todos los sistemas penales existe el principio de legalidad como regla y en algunos se
acepta el principio de oportunidad como principio que cohabita con el anterior y con otros, lo que implica acep
tarlo como excepción. Considera que el principio de legalidad debe ir cambiando hacia criterios de oportunidad
para permitir mejorar el papel de la víctima en el proceso penal. Cfr. Gordillo Santana L., "Los principios
constitucionales y las garantías penales en el marco del proceso de mediación penal", Revista Redur, n. 4, Univer
sidad de la Rioja, 2006, pp. 17-22
27
Cfr. Larrauri, E, "Tendencias actuales de la Justicia Restauradora" en In Memoriam Alessandro Baratta,
Universidad de Salamanca, España, 2004.
28
Del mismo modo que es un sin sentido enfrentar la legalidad al principio de oportunidad, lo es oponer la
igualdad a la diferencia. Lo que caracteriza a los seres humanos es precisamente sus diferencias. Lo que trata de
salvaguardar el principio constitucional de igualdad de mujeres y hombres es que las diferencias no sean utilizadas
como medios para justificar o fundamentar discriminación.
29
Cfr. Gordillo, L., "Los principios…", op. cit., pp. 24-26.
Beristain, A., Victimología nueve palabras clave, Tirant lo Blanch, Valencia, 2000.
30
Más adelante cuando analicemos los modelos humanos que Rousseau desarrolla para el orden conyugal
31
32
Cfr. Beristain, A., Protagonismo…, op. cit., pp. 124-125.
33
"... constituye un elemento probatorio nuclear, en este caso, la declaración de la víctima, la cual con arreglo
a una muy reiterada doctrina jurisprudencial puede ser hábil para desvirtuar la presunción de inocencia, aten-
diendo a que el marco de clandestinidad en que se producen determinados delitos, significadamente contra
la libertad sexual, impide en ocasiones disponer de otras pruebas". Sentencia del tribunal supremo español,
96/2009.
34
Esta sentencia donde se analiza el testimonio de la víctima y la valoración que incumbe al órgano que
V. La violencia de género
y rousseau
subjetivos y objetivos que concurran en la causa" (STS de 30 de enero de 1999 –RJ 1999, 961–). "La finalidad
perceptiva que otorga el principio de inmediación a las declaraciones de los que normalmente tienen la doble
cualidad de únicos testigos-víctimas, propicia una específica y atenta ponderación circunstanciada que, por un
lado, aparece si cabe como más rigurosa y exigente en lo que a la fiabilidad se refiere y, de otro, sugiere prestar
una extremada atención a los detalles de lugar, tiempo y modo que, como datos objetivos complementan la
constatación narrativa que ofrece la versión prestada por el agredido" (STS de 21 de septiembre de 1998
–RJ 1998, 7496–). Estas sentencias han sido extraídas de: Rives Seva, A. P., "Casos extravagantes de testimonio:
el coimputado y la víctima" en Noticias Jurídicas, Artículos Doctrinales, 2001.
36
En diciembre de 1997, Ana Orantes fue quemada viva por su ex esposo en su casa tras haber relatado en
la televisión de Andalucía, los malos tratos sufridos durante el matrimonio.
37
Cfr. Bosch, E., Ferrer V.A., y Alzamora A., El laberinto patriarcal: reflexiones teórico prácticas sobre la
violencia contra las mujeres, Prólogo de Rosa Cobo, Anthropos, Barcelona, 2006.
38
Miguel Lorente, analiza en su obra Mi marido me pega lo normal, los relatos de las mujeres maltratadas
desde una optica forense y ética. Vid. Lorente, M., Mi marido me paga lo normal. Agresión a la mujer, realidades
y mitos, Ares y Mares, Crítica, España, 2001.
39
Ley 13/2005, de 1 de julio por la que se modifica el Código civil permitiendo el matrimonio entre perso-
nas del mismo sexo. Las razones que avalan este cambio son expuestas en la exposición de motivos de la Ley:
La regulación del matrimonio en el derecho civil contemporáneo ha reflejado los modelos y valores dominantes
en las sociedades europeas y occidentales. Su origen radica en el Código Civil francés de 1804, del que innega-
blemente trae causa el español de 1889. En este contexto, el matrimonio se ha configurado como una institución,
pero también como una relación jurídica que tan sólo se podía establecer entre personas de distinto sexo. Por
este motivo, el derecho reflejando la mentalidad dominante, no precisa prohibir, ni siquiera referirse, al matrimo-
nio entre personas del mismo sexo, pues entendía que la relación era natural. La realidad social española de
nuestro tiempo deviene mucho más rica, plural y dinámica que la sociedad en que surge el Código Civil de 1889,
lo que motiva abrir al debate la apertura del matrimonio a personas del mismo sexo.
Esto hace que el hombre en "su orientación hacia el otro –en la rela
ción amorosa– siempre se refiere a sí mismo". Es decir el hombre debe
encontrar en la mujer su propia dicha.41
40
Vid. Barcellona, P., "Alla ricerca del bene comune attraverso l’esperienza individuale" en Democracia e
diritto, n. 5-6, 1991, pp. 5-11.
41
Luhmann N., El amor como pasión, Península, Barcelona, 1985, pp. 146-147.
42
Vid., el artículo de Lange, Lynda "Rousseau and Modern Feminism" en LYNDON SHANLEY, Mary y
PATEMAN, Carole (edit.), Feminist Interpretations and Political Theory, Polity Press, Oxford, p. 96. Este artículo
destaca como el análisis sobre la naturaleza de la mujer y la relación entre los sexos constituye un tema clave
en la obra rousseauniana, como lo demuestra el hecho de haber escrito el libro V, del Emilio con anterioridad a
los otros capítulos del tratado, en apariencia más relevantes. En el mismo sentido, sirve de prueba la Carta a
D’Alembert y el Segundo Discurso sobre la Desigualdad, donde se encuentran referencias constantes a las relaciones
entre los hombres y las mujeres, en las notas a pie de página de estos textos.
43
Rousseau, J. J., Emilio o de la educación, Alianza, 1990, p. 28.
44
En esta obra se analiza con todo lujo de detalles el sistema patriarcal y la construcción normativa del sexo
que realiza Rousseau: Cobo, R., Fundamentos del patriarcado moderno. Jean Jacques Rousseau, Cátedra, Madrid,
1995.
Dado que las pasiones no pueden suprimirse, dado que son un ins-
trumento necesario para la conservación de la vida humana, lo que hay que
45
Quizá hoy debiéramos reivindicar lo mismo.
46
Rousseau critica a los preceptores pagados, por entender que éstos enseñan al niño "todo, salvo a cono-
cerse, salvo a sacar partido de sí mismo, salvo a saber vivir y hacerse feliz". "Igual que la verdadera nodriza es la
madre, el verdadero preceptor es el padre". Rousseau, J.J., Emilio…, op. cit., pp. 50-51.
47
Ibidem. pp. 97-99..
68
Al analizar Rousseau las relaciones entre las mujeres y los hombres
en el orden familiar, en la nota 12 del discurso Sobre el origen de la desigual
dad, argumenta que estas relaciones son necesarias para la permanencia de
la sociedad civil, no para el mantenimiento y reproducción de la especie50.
Por esta razón deben estructurarlas y ajustarlas al nuevo orden politico.
La sociedad civil necesita un orden familiar estable y para establecerlo es
necesario que lo sea el orden conyugal. Por este motivo, el ideal del amor
romántico construye una idealización del ser amado –mi media naranja–,
que lleva a pensar que la vida sin ese ser es imposible. "Se ama mucho más
48
Ibidem, p. 301.
49
Ibidem, p. 294. Si se estableciera un paralelismo entre la vida de Rousseau, descrita en las confesiones, y su
obra política comprobaríamos cómo existe una continua proyección invertida. Todo aquello que ha vivido y que
desea lo invierte. Su análisis se mueve en dos planos: el plano del ser, sociedad civil enferma, y el plano del deber
ser, un nuevo modelo social.
50
Sostiene Rousseau que en el estado de naturaleza los hombres y las mujeres viven aislados, no existe
"ningún motivo para permanecer uno al lado de otro, ni quizás los hombres de permanecer unos al lado de
otros", es en sociedad donde nacen las razones para vivir juntos, y para que un hombre permanezca al lado
de una mujer, de ahí que sea necesario redefinir esta relación, para ajustarla a la nueva sociedad.
51
Ibidem, p. 445.
52
Ibidem, p. 472.
53
Cfr. Ibidem, pp. 483-484.
54
Ibidem, p. 509.
55
Ibidem, op. cit., p. 488.
56
Cfr. Ibidem, p. 545.
VI. BIBLIOGRAFÍA
Aguilera Rull, A., "La actualidad del análisis feminista del Derecho al hilo
de pronunciamientos judiciales recientes", Anales de la Cátedra Fran
cisco Suárez, 46, 2012.
Baratta, A., Criminología crítica y crítica del derecho penal, Siglo XXI,
México, 1986.
57
Jónasdóttir, Anna, El poder del amor: ¿le importa el sexo a la democracia?, Cátedra, España, Cap.V., nota 3,
pp. 128-129.
Laurenzo P., Maqueda, Ma. L., Rubio A., (Coords), Género, violencia y
derecho, Tirant lo Blanch, Valencia, 2008.
Mackinnon, C., Hacia una teoría feminista del Estado, Cátedra, Madrid,
1995.
Pitch, T., Un derecho para dos. La construcción jurídica de género, sexo y se
xualidad, Trotta, Barcelona, 2003.
I. Generalidades 77
1
ONU, Resolución 48/104, 1993.
2
Cfr. TORRES FALCÓN, Marta, "Los rostros de la violencia" en Memoria del Taller Internacional Mujeres Indíge
nas y violencia doméstica: del silencio privado a las agendas públicas, CNDH, México, 2007, pp. 27-29.
3
Cfr. Ibidem, pp. 29-32.
4
Cfr. SEGATO, Laura Rita, La argamasa jerárquica: violencia moral, reproducción del muncho y la eficacia simbó
lica del derecho, Universidad de Brasilia, Brasil, 2003, p. 2.
5
Cfr. TORRES FALCÓN, Marta, "Los rostros…", op. cit., pp. 32-33.
Cfr. COOK, Rebecca, "Los derechos humanos internacionales de la mujer: el camino a seguir" en COOK,
6
del dominado. Es decir, el dominado termina por creerse toda la idea que
se tiene de él: inferior, salvaje, inútil, flojo, vicioso, etc. Aunado a esta idea, el
sociólogo francés Pierre Bordieu incorporó el concepto de violencia sim-
bólica, definiéndola como esa violencia que arranca sumisiones que ni si-
quiera se perciben como tales, apoyándose en unas expectativas colectivas,
en unas creencias socialmente inculcadas.9
8
Vid. FANON, Frantz, Los condenados de la Tierra, 3ª edición, 4ª reimpresión, Colección Popular n. 47, FCE,
México, 2011.
9
Referido por FERNÁNDEZ, J.M., La noción de violencia simbólica en la obra de Pierre Bordieu: una aproxima
ción crítica, Cuadernos de Trabajo Social, 18, 2005, p. 7.
III.Violencia y discriminación:
el punto de partida de la estrategia.
10
Cfr. FERRAJOLI, Luigi, "El principio de igualdad y la diferencia de género" en CRUZ PARCERO, Juan Anto-
nio y VÁZQUEZ, Rodolfo, Debates constitucionales sobre derechos humanos de las mujeres, SCJN-Fontamara,
México, 2010, pp. 17-18.
11
Cfr. SERRANO, Sandra, Guía de estudio de la materia Estándares Internacionales de los Derechos Humanos,
de la maestría en Derechos Humanos y Democracia, 2010-2012, FLACSO, México, 2012, p. 6.
Ibidem, p. 24.
13
14
Cfr. SANTIAGO JUÁREZ, Mario y SAAVEDRA,Yuria, Guía de estudio de la materia Acceso a la Justicia de la
maestría en Derechos Humanos y Democracia 2010-2012, FLACSO, México, 2012, p. 9.
15
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe de Acceso a la Justicia para las mujeres víctimas
de violencia en las Américas, 2007, p. 3.
16
Cfr. SANTIAGO JUÁREZ, María y SAAVEDRA, Yuría, Guía de estudio…, op. cit., pp. 9 y 21.
17
Cfr. MAHONEY, Kathleen, "Enfoques canadienses a la igualdad de derechos y a la equidad de género en
los estrados judiciales " en COOK, Rebecca (ed.), Derechos humanos…, op. cit., p. 458.
18
Cfr. SANTIAGO JUÁREZ, María y SAAVEDRA, Yuria, Guía de estudios…, op. cit., p. 11.
19
Cfr MAHONEY, Kathleen, "Enfoques…", op. cit., pp. 455-458.
Asimismo, los Jueces deben resolver sus sentencias con miras al prin-
cipio de universalidad de los derechos humanos, entendido como la nece-
90 sidad de dimensionar los derechos en la realidad. La universalidad concebida
así es útil para combatir las conductas de violencia, pues se ve a la mujer
dentro de un contexto determinado, como perteneciente a un grupo que
siempre ha sido sometido. Entendido de esta forma, sirve de "marco concep
tual de inclusión de culturas y de los más desventajados"20 por lo que al
analizarse las diferencias en cada cultura y reconocer las diferencias estruc-
turales se permite que grupos desventajados, como el de las mujeres,
gocen plenamente del ejercicio de sus derechos.
20
VÁZQUEZ, Luis Daniel y SERRANO, Sandra, "Los principios de universalidad, interdependencia, indivisibi-
lidad y progresividad. Apuntes para su aplicación práctica" en CARBONELL, Miguel y SALAZAR, Pedro (coord.),
La reforma constitucional de derechos humanos: un nuevo paradigma, IIJ-UNAM, México, 2011, p. 147.
Cfr. GARCÍA, Soledad y TORRES, Isabel, "El marco teórico: la perspectiva de género y la protección inter-
22
23
Cfr. SAGÜES, Néstor Pedro, "Obligaciones internacionales y control de convencionalidad" en Estudios
Constitucionales, año 8, n. 1, Centro de Estudios Constitucionales-Universidad de Talca, Chile, 2010, pp. 118-119.
24
Cfr. Idem.
VII. La acción
civil
bleció que era necesario fijar una compensación al cónyuge que, durante el
matrimonio, se haya dedicado preponderantemente al desempeño del tra-
bajo del hogar y, en su caso, al cuidado de los hijos, siempre y cuando el
régimen bajo el cual se hubiese celebrado el matrimonio fuera el de sepa-
ración de bienes.
Cfr. COPELON, Rhonda, "Capítulo 5. Terror íntimo: la violencia doméstica entendida como tortura" en
25
VIII. La acción
penal
27
Citado por Ibidem, p. 110.
En efecto, el artículo 148 bis del Código Penal para el Distrito Federal,
105
considera que comete el delito de feminicidio quien, por razones de géne-
ro, prive de la vida a una mujer. De igual forma, precisa que por razones
de género se entiende, en lo que aquí interesa, aquella situación en que la
víctima presenta signos de violencia sexual de cualquier tipo; asimismo, es-
tablece que la pena será de veinte a cincuenta años de prisión, pero la
misma se aumentará de treinta a sesenta, si entre las personas existió una
relación de cualquier tipo que implique subordinación o superioridad; sin
embargo aun cuando el legislador identifica una de las consecuencias más
graves de violencia sexual, la privación de la vida, deja fuera la comisión de
otras conductas, que de igual forma afectan de manera grave a la mujer por
razones de género.
28
Cfr. Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe de Acceso…, op. cit., p. 53.
29
Cfr. SANTIAGO JUÁREZ, María y SAAVEDRA YURIA, Guía de estudio…, op. cit.
30
Vid. NASH ROJAS, Claudio; MÚJICA TORRES, Ignacio y CASAS BECERRA, Lidia, Erradicación de la Violencia
contra las mujeres en las Américas: el rol de los operadores de justicia. Protocolo de actuación para operadores de
justicia frente a la violencia contra las mujeres en el marco de las relaciones de pareja, Centro de Derechos Humanos
de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, 2010.
1. Planteamientos generales:
1.1. ¿Cuál es el marco jurídico que se debe aplicar para analizar un caso
de violencia contra la mujer?
viembre de 2009.
• Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Fernández Or-
tega y Otros, vs. México, Sentencia de 30 de agosto de 2010.
• Corte Interamericana de Derechos Humanos Caso Rosendo Cantú
y otra, vs. México, Sentencia de 30 de agosto de 2010.
• Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso del Penal Miguel
Castro Castro vs. Perú, Sentencia de 25 de noviembre de 2006.
• Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Perozo y otros
110
vs. Venezuela, Sentencia del 28 de enero de 2009.
• Las normas internas que cada país establezca para ello. En el caso de
México: Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de
Violencia y Ley de igualdad General entre Hombres y Mujeres.
Preguntas secundarias:
Preguntas secundarias:
1.4 ¿Cuáles son los hechos que ocasionaron que la mujer fuera víctima
de violencia?
1.6 Con la violación de esos derechos, ¿cuáles fueron las obligaciones del
Estado que se incumplieron?
31
Cfr. COOK, Rebecca, "Los derechos humanos…", op. cit., p. 9.
32
Cfr. MAHONEY, Kathleen, "Enfoques canadienses…", op. cit., p. 454.
33
Cfr. Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe de Acceso…, op. cit., párrafo 12 del resumen
ejecutivo.
34
Cfr. Ibidem, párrafo 38.
Preguntas secundarias:
en: http://cencos.org/node/28452
Instrumentos internacionales
*
Este trabajo obtuvo el segundo lugar del Concurso “Género y Justicia. Categoría ensayo”, edición de 2009.
1. Introducción 123
1
Cfr. Zapata Bello, Gabriel, "Acceso a la Justicia" en JUSTICIA Memoria del IV Congreso Nacional de Derecho
Constitucional I, Tomo I, Serie Doctrina Jurídica, n. 62, IIJ-UNAM, México, 2001, p. 384.
Ello, a partir de que, hoy por hoy, las mujeres migrantes –en su doble
condición primaria de vulnerabilidad por género y origen nacional–, sufren
los diversos tipos de violencia a los que la Convención para prevenir, san-
cionar y erradicar la violencia contra la Mujer (Convención "Belem Do Pará")
hace alusión en sus artículos 1 y 2; sin que existan mecanismo adecuados
2
Cfr. Marabotto Lugaro, Jorge A. "Un derecho humano esencial: el acceso a la justicia", Anuario de
Derecho Constitucional Latinoamericano, n. 2003, 9ª edición, Konrad-Adenauer-Stiftung A.C., Montevideo, Uruguay,
2003, pp. 291-302.
3
Artículo 8 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, artículos 2 y 14 del Pacto Inter-
nacional de Derechos Civiles y Políticos.
4
Cfr. OEA, El acceso a la Justicia como garantía de los derechos económicos, sociales y culturales. Estudio de los
Estándares fijados por el sistema interamericano de derechos humanos. OEA/Ser.L/V/II.129, Doc. 4, 7 septiembre
2007, párr. 1.
5
Corte IDH, Caso Cantos, Sentencia de 28 de noviembre de 2002, Serie C Nº 97, párr. 50.
6
Se entiende por la violencia contra la mujer "cualquier acción o conducta, basada en su género, que cause
muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como en el privado".
La violencia física, sexual o psicológica puede tener lugar en la familia o cualquier otra relación interpersonal sin
importar que el agresor comparta el mismo domicilio con la mujer; en la comunidad, en el trabajo, las instituciones
educativas, los establecimientos de salud o cualquier otro; en cualquier sitio cuando sea perpetrada o tolerada
por el Estado o sus agentes. Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra
la Mujer, artículos 1 y 2.
7
El Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer ha señalado que "La violencia contra la
mujer es considerada como una forma de discriminación que impide gravemente que goce de derechos y libertades
en pie de igualdad con el hombre". CEDAW, Recomendación General Nº 19, La violencia contra la mujer: 29/01/92,
11º Periodo de sesiones, párr.1.
8
El Informe "Estudio a fondo sobre todas las formas de violencia" señala que algunas de las formas más
comunes de violencia son: la producida en las relaciones interpersonales, la violencia sexual, mutilación genital
femenina y el abuso sexual, mientras que entre las formas insuficientemente documentadas destacan el feminici-
dio, la trata de mujeres con fines de explotación sexual y de otra índole, el matrimonio forzado, el matrimonio
precoz, el acecho, el acoso sexual y la violencia en situaciones de privación de libertad, en los lugares de trabajo
y en las instituciones educacionales, y la violencia económica, así como la violencia contra determinados grupos
de mujeres, por ejemplo, las integrantes de minorías étnicas, las mujeres con discapacidades, las mujeres migran-
tes y las mujeres indocumentadas, ONU, Informe del Secretario general. Estudio a fondo sobre todas las formas de
violencia, A/61/122/Add.1, párrs. 221, 222.
9
Artículo 7, Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres.
10
ONU, Declaración y Plataforma de Acción de Beijing. Informe de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer,
Beijing, 4 a 15 de septiembre de 1995, Naciones Unidas, Nueva York, 1996, párrs. 49, 116.
11
UNFPA. Estado de la Población Mundial 2006. Hacia la esperanza: las mujeres y la migración internacional,
2006, p. 1.
12
Cfr. ONU, Informe del Secretario general, Estudio a fondo sobre todas las formas de violencia, A/61/122/Add.1,
pp. 36 y sig.
13
Cfr. Ibidem. párr. 153.
Los datos referidos son suficientes para observar que las mujeres
migrantes constituyen un grupo constante, plenamente identificable y signi-
14
No se posee datos estadísticos confiables respecto al número real de personas trabajadoras temporales
que ingresan cada año a nuestro país. Sin embargo, sobre la frontera sur las estimaciones realizadas señalan que
no superan la cifra anual de cien mil personas. Cfr. CASTILLO, Manuel Ángel, "Los flujos migratorios en la frontera
sur de México", Amérique Latine Histoire et Mémoire, Les Cahiers ALHIM, 2, 2001. Disponible en: http://alhim.
revues.org/index603.html. Consultado el 13 diciembre de 2009.
15
Passel, Jeffrey, Size and Characteristics of the Undocumented Population in the US: Estimates Based on the
March 2005 Current Population Survey, Pew Hispanic Center, 2006, pp. ii, 4,5.
16
Este porcentaje contrasta con la información que la Relatora Especial sobre violencia contra las mujeres
obtuvo de las autoridades migratorias mexicanas quienes le manifestaron que uno de cada seis migrantes indo-
cumentados era mujer, párr. 28.
17
CONAPO, Informe de Ejecución del Programa de Acción de la conferencia Internacional sobre la Población y
el Desarrollo 1994-2003, CONAPO, México, 2004, p. 296.
18
Sin Fronteras, en el Informe Mujeres Migrantes en situación de violencia familiar en México: Retos y Desafíos,
estima que cuando menos cien mil mujeres migrantes en el país se verían beneficiadas de políticas y prácticas de
protección hacia las mujeres migrantes. Tal cifra se obtuvo considerando únicamente el número de mujeres mi-
grantes documentadas en el país en relación con la prevalencia de la violencia familiar. De tal suerte que dicha
cantidad aumentaría si se considerara a la totalidad de las mujeres migrantes que transitan o establecen su resi-
dencia en México.
19
Cfr. Sin Fronteras, Violencia y Mujeres Migrantes en México, INMUJERES y Fundación Ford, México,
2004, p. 19.
20
La encuesta concluye que 36% de las usuarias encuestadas manifestaron no haber sido objeto de violencia
frente a un 40% que omitió responder a la pregunta y un 24% que contestó afirmativamente.
21
La encuesta arrojó un global de 34.5% de reportes de violencia entre las mujeres que acudieron a algún
centro de atención médica. "Encuesta Nacional sobre Violencia Contra las Mujeres," pp. 66, 67.
22
La encuesta arrojó el dato de un 46.6% de violencia. "Encuesta Nacional de la Dinámica de las Relaciones
en los Hogares", p. 37.
23
Diversas organizaciones civiles y religiosas han dado cuenta de esta situación a través de diferentes medios
de comunicación y documentos. La Agrupación Civil Trabajando juntas por Chiapas, denuncia que 6 de cada 10
mujeres migrantes sufren de algún tipo de abuso sexual, desde acoso, manoseos, hasta violaciones consumadas,
durante su trayecto desde su país de origen hasta los estados del norte de la República Mexicana o Estados
Unidos. El Sol de México, disponible en: http://www.oem.com.mx/elsoldemexico/notas/n1431862.htm, consultado
el 11 de diciembre de 2009.
24
Consejo Económico y Social, Integración de los Derechos Humanos de la Mujer y la Perspectiva de Género:
La violencia contra la mujer (México), Informe de la Relatora Especial sobre violencia contra las Mujeres.
E/CN.4/2006/61/add.4, ONU, 62º periodo de sesiones, 13 de enero de 2006, párr. 19
Los obstáculos que enfrentan las mujeres migrantes para acceder a la justi-
cia están ligados a su estatus migratorio en el país y a los mecanismos lega-
les que el Estado ha implementado para regular la migración.
25
Destacan la falta de redes familiares o sociales de apoyo, las carencias económicas, la pobreza, el descono-
cimiento de las leyes e instituciones mexicanas, la marginación, la falta de oportunidades de empleo bien remu-
nerado y el idioma cuando no se es hispanoparlante.
El primer paso que debe dar el Estado Mexicano para combatir y erradicar
la violencia en contra de las mujeres migrantes consiste en armonizar su
legislación interna con los estándares internacionales de protección y salva-
guarda del derecho al acceso a la justicia para toda mujer víctima de violen-
cia, lo que incluye a las mujeres migrantes. Eliminando o modificando toda
26
Artículo 1º y 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
27
En esa tesitura se ubican las prohibiciones a personas extranjeras de realizar actividades y pronunciarse
en materia política; ocupar determinados cargos públicos por cuya importancia se encuentran vedados a los no
nacionales o las restricciones en materia de libertad de tránsito (artículos 8, 11, 33 Constitucionales).
143
28
Consultar, entre otros, los siguientes criterios: Trabajadores extranjeros. Con independencia de su situa
ción migratoria, tienen los mismos derechos laborales y de acceso a la tutela jurisdiccional que los trabajado
res nacionales. Localización: Novena Época, Instancia:Tribunales Colegiados de Circuito, Fuente: Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta, XXVIII, Octubre de 2008, página: 2457,Tesis: III.1o.T.97,Tesis Aislada, Materia(s): labo-
ral, y; Extranjeros. Para la procedencia de su demanda de garantías no se requiere que comprueben su legal
estancia en el país en términos de lo dispuesto por el artículo 67 de la Ley General de Población. Registro
Nº 177003, Localización: Novena Época, Instancia:Tribunales Colegiados de Circuito, Fuente: Semanario Judicial de
la Federación y su Gaceta, XXII, Octubre de 2005, página: 2351, Tesis: VI.1o.P.37 K, Tesis Aislada Materia(s): Común.
29
Denuncia o querella. Los extranjeros se encuentran legitimados para promoverla, aún cuando no acre
diten su legal estancia en el país. Registro Nº 190190, Localización: Novena Epoca, Instancia: Tribunales Colegia-
dos de Circuito, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, XIII, Marzo de 2001, página: 1740, Tesis:
XX.2o.13 P, Tesis Aislada, Materia(s) Penal.
30
Extranjeros, la condición o calidad migratoria que tienen en territorio mexicano no puede restringir
su garantía de acceso a la administración de justicia (Interpretación del artículo 67 de la Ley General de Po
blación). Registro Nº 169296, Localización: Novena Época, Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito (Tercer
Tribunal Colegiado en materia civil del primer circuito), Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta,
XXVIII, Julio de 2008, página: 1727, Tesis: I.3o.C.681 C, Tesis Aislada, Materia (s): Civil, Administrativa, Tercer Cole-
giado en Materia Civil del Primer Circuito.
31
Consultar, entre otros, los siguientes criterios: Extranjeros, solicitud de amparo por. Legitimación. Registro
Nº 204785, Localización: Novena Época, Instancia:Tribunales Colegiados de Circuito, Fuente: Semanario Judicial de
la Federación y su Gaceta II, Julio de 1995, página: 234, Tesis: I.9o.T.6 K, Tesis Aislada, Materia(s): Común. Extranje
ros. La omisión de acreditar su legal estancia en el país o su condición y calidad migratorias dentro de un
juicio de Amparo, no impide al juzgador resolver el fondo del asunto. Registro Nº 205334, Localización: Novena
Época, Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta I, Abril
de 1995, página: 151,Tesis:VIII.2o.6 K,Tesis Aislada, Materia(s): Común. Extranjeros indocumentados. Procedencia
del Juicio de Amparo promovido por. Caso no previsto por el artículo 33 Constitucional. Registro Nº 911919,
Localización: Séptima Época, Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito, Fuente: Apéndice 2000, Tomo III, Admi-
nistrativa, P.R. TCC, página: 336, Tesis: 354, Tesis Aislada, Materia(s): Administrativa
32
El Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños, define a
éste ilícito como "la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la
amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de
una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimien
to de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación. Esa explotación incluirá, como mí-
nimo, la explotación de la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, los trabajos o servicios
forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos" (Artículo 3).
Los esfuerzos que en los últimos años se han realizado por algunas
autoridades para remediar estas situaciones violatorias de los derechos de
las extranjeras, aunque loables, no logran responder adecuadamente al nivel 147
de protección y eficacia que contra estos abusos se requiere.
33
Cfr. Recomendación Nº 11/2006, Sobre el caso de las señoras LF y CS, de nacionalidad china, México, 28
de abril de 2006, pp. 19 y ss.
Por ello es indispensable que exista una disposición legal que prevea
la retención de documentos migratorios como una forma de coacción
contra la mujer migrante y ofrezca soluciones, administrativas y/o judiciales.
De lo contrario, se continuará careciendo de mecanismos, procedimientos
o medios adecuados para hacer frente a esta problemática y en incum
plimiento de los compromisos en materia de prevención, sanción y erradi-
cación de la violencia física, sexual y psicológica de las mujeres migrantes.
Cfr. Informe de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer. Objetivos Estratégicos: A.1 b) y F.5 p)
34
36
Artículos 23, 42, párrafo último, 48 de la Ley General de Población y 186 del Reglamento de la Ley
General de Población.
IV. Conclusión
General
V. Bibliografía
154 Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), Encuesta Nacional sobre Violencia
contra las Mujeres 2003 (ENVIM), México, 2003.
Ley General de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia, Diario
Oficial de la Federación el 1º de febrero de 2007, Ultima reforma
155
DOF 20 de enero de 2009.
*
Este trabajo obtuvo el tercer lugar del Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición de 2009.
I. Introducción 159
1
Amnistía Internacional, La lucha de las mujeres por la seguridad y la justicia. Violencia familiar en México,
Amnistía Internacional, México, 2008, p. 10.
... los logros plasmados en los acuerdos internacionales y las leyes nacionales
en materia de violencia no han llegado a la mayor parte de la población
que deberían proteger. En consecuencia, existe un gran abismo entre los pri
meros y la realidad de las mujeres cuando denuncian o demandan
apoyo…2
*
Este trabajo fue escrito en 2009, por lo que los datos referidos corresponden a ese año (Nota del editor).
**
En el trabajo se utiliza a menudo la expresión "procuración de justicia" en un sentido no técnico, pues no
se hace distinción entre la procuración y la impartición de justicia. En cierto sentido la distinción no es necesaria
dado que la intención de la autora se encuentra referida al fenómeno de acceso a la justicia en general (Nota del
editor).
2
González, Soledad y Valdez, Rosario, "Violencia hacia las mujeres en ocho regiones indígenas de
México: notas metodológicas en torno a la Encuesta Nacional sobre Salud y Derechos de las Mujeres Indígenas
(ENSADEMI), 2007" en Estudios Sociológicos, Vol. XXVI, n. 77, mayo-agosto, 2008, p. 441.
161
Busco poner en la mesa de discusión que no sólo son necesarios
instrumentos jurídicos que enmarquen dispositivos legales para sancionar
la violencia, ni una proliferación exhaustiva de instancias de procuración de
justicia, sino que existen situaciones adversas de todo tipo, como pueden
ser "subjetivas (como el temor y la vergüenza) y objetivas (como la falta de
información sobre sus derechos y sobre las instituciones, el control de sus
movimientos por el marido y familiares, la falta de recursos)",3 que hacen
que las mujeres encuentren obstáculos que no les permiten acceder a la
justicia.
3
González, Soledad; Mojarro, Mariana y Valdez Rosario, "Violencia conyugal y búsqueda de apoyo por
las autoridades" en Encuesta de Salud y Derechos de las Mujeres Indígenas, ENSADEMI 2008, Instituto Nacional de
Salud Pública (INSP), Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), México, 2008, p. 108.
4
Cfr. Vela, Fortino, "Un acto metodológico básico de la investigación social: la entrevista cualitativa" en
Tarrés, María Luisa (Coord.), Observar, Escuchar y Comprender. Sobre la tradición cualitativa en la investigación
social, Miguel Ángel Porrúa-COLMEX-FLACSO, México, 2008, p. 74.
5
Cfr. Ibidem, p. 77.
Una de las normativas establecidas por las Naciones Unidas, es que todo
ser humano debe tener acceso a la justicia. Una de las vertientes de la
cuestión discutida en las últimas décadas, ha sido el acceso a la justicia por
las mujeres, pues estudios de caso demuestran que aunque las mujeres
legalmente tienen acceso a la justicia, siguen existiendo discriminación y 163
prejuicios con respecto a los reclamos que estas hacen, trayendo como con
secuencia que no se les imparta justicia.
6
Entre ellas podemos citar a COLLIER, Jane, Law and social change in Zinacantan, Stanford University Press,
California, 1973; HERNÁNDEZ, Rosalva Aída, "En torno a la ley y la costumbre" en ESTRADA, Rosa Isela y
GONZÁLEZ, Gisela,Tradiciones y costumbres jurídicas en comunidades indígenas de México, CNDH, México, 1997;
MARTÍNEZ, Beatriz y MEJÍA, Susana, Ideología y práctica en delitos cometidos contra mujeres: El sistema judicial y la
violencia en la region indígena de Puebla, México, Colegio de Posgraduados de Puebla, México, 1997; SIERRA, María
Teresa, Haciendo justicia. Integralidad, derecho y género en regiones indígenas, CIESAS-Miguel Angel Porrúa, México,
2004, y SIERRA, María Teresa y CHENAUT, Victoria, "Los debates recientes y actuales en la antropología jurídica:
Las corrientes anglosajonas" en KROTZ, Esteban (ed.), Antropología jurídica; Perspectivas Socioculturales en el Estu
dio del Derecho, Anthropos-UAM, México, 2002.
7
HALL, Stuart, Representation, Cultural Representations and Signifying Practices, The Open University, 1997,
p. 17. Traducción propia.
8
De Lauretis, Teresa, "La tecnología del género" en Ramos, Carmen (comp.), El género en perspectiva de
la dominación universal a la representación múltiple, UAM, México, 1991, p. 37.
9
Cfr. Ibidem, p. 38.
10
Ibidem, p. 39.
III. Contextualizando
la discusión
11
"La ENSADEMI es la primera encuesta nacional dedicada íntegramente a medir la prevalencia de la
violencia intrafamiliar hacia las mujeres en regiones indígenas. La muestra se diseñó con base en las 25 regiones
definidas por un equipo de investigación de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas
(CDI). Este equipo empleo el concepto de ‘región cultural’ a fin de caracterizar ‘la diversidad etnolingüística y la
distribución de los pueblos indígenas en el territorio nacional’. Las 25 regiones constituyeron las unidades
primarias de muestreo para la ENSADEMI; de ellas se efectuó una selección aleatoria de ocho regiones, con
probabilidad proporcional al tamaño de la población indígena. Como en algunos casos las regiones están
conformadas por más de un estado, se seleccionó un estado para cada región, utilizando el mismo criterio de
la aleatoriedad con probabilidad proporcional al tamaño de la población indígena de la región, de manera que el
estado seleccionado fue representativo de la región. Se cubrieron localidades urbanas y rurales con diversos
grados de marginalidad Cfr. González Montes, S. y Mojarro, M., "De la victimización a la agencia: Denuncia
de la violencia conyugal por mujeres en ocho regiones indígenas de México" en TEPICHÍN VALLE, Ana María
(coord.), Género en contextos de pobreza, El Colegio de México, México, 2011, p. 204, y tb. VALDEZ, Rosario;
ÁVILA, Leticia; HIDALGO, Elisa y PALMA, Oswaldo, "Metodología de la ENSADEMI" en Encuesta de salud...,
op. cit., p. 33.
normatividades que exigen que den apoyo a las mujeres que viven
violencia.12
12
Cfr. GONZÁLEZ, S., y VALDEZ, R., "Violencia hacia las mujeres...", op. cit., p. 441.
autoridades a las
mujeres
Detuvieron a la pareja 4 0 0 0 0 0 0 0
por 72 Hrs.
Le negaron la atención 12 50 0 0 40 20 20 100
Mediación con la pareja 12 0 0 0 21 0 0 0
Citaron a la pareja y no 0 0 0 34 19 0 20 0
se presentó
Llegaron a un acuerdo 0 0 33 0 0 0 20 0
Sobornó al ministerio 0 0 33 0 0 0 0 0
público
Consideró la autoridad 23 50 33 33 0 20 0 0
que ése no era un
problema importante
personales
Por falta de pruebas 0 0 0 0 19 40 21 0
Otro 0 0 0 0 0 0 20 0
No especificó 0 0 0 0 0 20 0 0
Para profundizar vid., GONZÁLEZ, S., MOJARRO, M., y VALDEZ, R., "Violencia conyugal...", op. cit., MARTÍ-
13
NEZ, B., Y MEJÍA, S., Ideología y práctica... op. cit., SIERRA, M. T., Haciendo justicia..., op. cit.
14
Amnistía Internacional, La lucha de la mujeres... op. cit., p. 8.
15
"El nombre de Juquila se deriva del Náhuatl Jurilla que significa "Lugar de la legumbre hermosa", el nombre
correcto es Xiuquilla, contracción de Xuhqililla que significa "lugar en donde abunda el quelite azul". OEIDRUS
(Oficina Estatal de Información para el Desarrollo Rural Sustentable), Tarjeta Municipal de Información Estadística
Básica, Oaxaca, 2007, p. 1.
Por otro lado, se encuentran las autoridades administrativas que for- 173
man parte del H. Ayuntamiento y que atienden casos con tintes del dere-
cho consuetudinario, como se verá más adelante, estos son el Síndico
Procurador y el Alcalde Municipal. Dentro de estas autoridades administra-
tivas del municipio, también existen algunas instituciones como el DIF que
tiene una Procuraduría para la Defensa del Menor, la Mujer y la Familia, por
lo que, en cada municipio en donde hay oficinas del DIF, se encuentra un/a
Subprocurador/a que cuida los intereses de estos grupos y que están capa-
citados para resolver conflictos.
174
16
Cuando los golpes tarden en sanar más de quince días o haya rasgos de violencia sexual, estas instancias
tienen la obligación de enviar los casos al Ministerio Público. Estos tipos de violencia no pueden, ni deben
conciliarse o mediarse bajo ningún motivo.
En las entrevistas hechas llama la atención que las mujeres que se acerca-
ron a las instancias de procuración de justicia y las trayectorias que siguieron
sus casos dependió de dos factores: 1) con qué autoridad presentaron sus
casos y 2) la información con la que contaban al momento de exponer
sus casos ante las autoridades encargadas de la procuración de justicia.
17
Cfr. ESCALANTE GONZALBO, Ma. de la Paloma, El miedo a la violación: elementos de la cultura urbana
dominante en el Distrito Federal, Tesis de Doctorado, México, 2004, p. 72.
18
Ibidem, p. 76..
19
Cfr. Idem.
20
Cfr. VÁZQUEZ, Verónica, "El Chisme y la violencia de género. En búsqueda de vínculos" en CASTRO,
Roberto, y CACIAVE, Irene (edits.), Estudios sobre cultura, género y violencia contra las mujeres, UNAM-Centro
Regional de Investigaciones Multidisciplinarias, México, 2008, pp. 139-172.
21
Vid. Idem.
22
Parrini, Rodrigo, "Introducción" en Panópticos y laberintos. Subjetivación, deseo y corporalidad en una cárcel
de hombres, Colegio de México, México, 2007, p. 23.
VI. BIBLIOGRAFÍA
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (2007).
191
*
Este trabajo obtuvo el primer lugar del Segundo Concurso “Género y Justicia. Categoría ensayo”, edición
de 2010.
1
Engrose de la sentencia definitiva de la Acción de Inconstitucionalidad 146/2007 y su acumulada 147/2007
resuelta el 28 de agosto de 2008. Ministro Ponente: Sergio Salvador Aguirre Anguiano. Ministro encargado del
engrose: José Ramón Cossío Díaz. Consultado en http://www2.scjn.gob.mx/juridica/engroses/cerrados/publico/
07001460.019.doc
con la sociedad en general.2 Este juicio recibió mucha atención por la SCJN.
La misma naturaleza del caso lo hizo sobresalir de entre todos los juicios
que llenan su agenda.3 La diversidad de intereses representados por los acto
res que concurrieron a debatir el tema puso al tribunal en una situación
comprometida. La intervención de instituciones gubernamentales, educa
tivas y religiosas, medios de comunicación y organizaciones civiles en un
procedimiento conducido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
da una idea de la forma en la que se pueden discutir los grandes temas de los
196
derechos de las mujeres en el México de hoy. El caso de la acción de
inconstitucionalidad con motivo de la despenalización del aborto en el
Distrito Federal es el más representativo al momento de la jurisdicción
constitucional de derechos fundamentales que involucra derechos de las
mujeres.4
2
El registro electrónico de estos eventos pudo consultarse en http://informa.scjn.gob.mx/inicio.html.
3
En su discurso de apertura del primer periodo de sesiones del año dos mil ocho el entonces Ministro
presidente Guillermo Ortiz Mayagoitia señaló que: "Abrimos este año estadístico con una cifra inicial de 569
asuntos, de los cuales 236 han de ser resueltos por el Pleno, y el resto por las Salas. Entre todos ellos existen
desde luego algunos casos que son particularmente relevantes y que quiero destacar desde ahora, como parte de
las tareas de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para este año: …En acciones de inconstitucionalidad,
habrán de discutirse y resolverse entre otras: ...La relacionada con la despenalización del aborto en la legislación
del Distrito Federal,…" Ortiz Mayagoitia, Guillermo "Apertura del Primer Periodo de Sesiones de 2008"
en Ortiz Mayagoitia, Guillermo, en Conferencias de los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
2008, SCJN, Mexico, 2009.
4
La jurisdicción constitucional de derechos fundamentales es la actividad mediante la cual los tribunales
interpretan los contenidos de las normas del sistema jurídico conforme al principio de supremacía constitucional,
dando sentido a los derechos fundamentales contenidos en una Constitución. Al respecto existe una vasta
literatura nacional e internacional. Se puede revisar para una introducción histórica al tema Kelsen, Hans,
"La garantie jurisdictionnelle de la Constitution" en Revue du Droit Public, vol. 45, n. 197, 1928 (existe traducción
al español Kelsen, Hans, La garantía jurisdiccional de la Constitución, traducción de Rolando Tamayo y Salmorán,
5
Algunos de los críticos más relevantes del activismo judicial fundado en concepciones políticas son Dworkin,
Ronald, Los Derechos en Serio, traducción Marta Guastavino, Ariel, Barcelona, 2002, pp 209-233; Ely, John H.,
Democracy and distrust, a theory of judicial review, Cambridge University Press, Cambridge, 1980. Respecto de la
función de los Jueces para proveer condiciones para grandes debates en la sociedad se pueden consultar: Ha-
bermas, Jürgen, Facticidad y Validez, cuarta edición, traducción de Manuel Jiménez Redondo,Trotta, Madrid, 2005;
Guarnieri, Carlo y Pederzoli, Patricia, Los Jueces y la política, Poder Judicial y Democracia, Taurus, Madrid,
1999; Sunstein, Cass, Legal Reasoning and Political Conflict, Oxford, Oxford University Press, 1996.
6
El 24 de abril de 2007, después de ser trabajada en comisiones y de varios días de debates en el Pleno, se
aprobó en la ALDF la reforma a los artículos 144, 145, 146 y 147 del Código Penal para el Distrito Federal, así
como la adición de los artículos 16 Bis 6, tercer párrafo, y 16 Bis 8, último párrafo, de la Ley de Salud para el
Distrito Federal. La intención principal de la reforma fue despenalizar el aborto voluntario realizado dentro de
las primeras doce semanas de gestación, así como establecer la obligatoriedad de las instituciones públicas de salud
en el Distrito Federal para prestar los servicios médicos y de asesoría gratuitos para llevar a cabo los proce
dimientos. La votación fue conseguida por una mayoría de 46 votos de las fracciones parlamentarias del Partido
de la Revolución Democrática (PRD), Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Nueva Alianza (PANAL)
y la coalición socialdemócrata que integraron el Partido del Trabajo (PT), Convergencia y Alternativa Social
Demócrata, contra la negativa de 19 asambleístas del Partido Acción Nacional (PAN) y Partido Verde Ecologista
de México (PVEM) y la abstención de un diputado del PRI. La votación se dio en medio de manifestaciones de
apoyo y protesta contra la reforma por diversos sectores de la sociedad en el exterior del recinto de Donceles.
Una vez recibida la notificación de la aprobación de las reformas, el Gobierno del Distrito Federal (GDF)
procedió inmediatamente a su publicación, la cual apareció impresa el 26 de abril de 2007 en la Gaceta Oficial
del Distrito Federal, periódico oficial del Distrito Federal. La reforma entró en vigor el 27 de abril de 2007, y el
GDF giró órdenes a todas las dependencias públicas de servicios de salud para que a partir de esa fecha
comenzaran a prestar obligatoriamente el servicio. El 4 de mayo de 2007 fueron publicados en el mismo órgano
los Lineamientos Generales de Organización y Operación de los Servicios de Salud relacionados con la Inte
rrupción del Embarazo en el Distrito Federal para establecer las bases con las cuales se prestan los servicios de
atención médica y asistencia en materia de aborto en las instituciones de salud pública.
7
Existen siete características de la acción de inconstitucionalidad: "a) Se promueve para alegar la contradic-
ción entre la norma impugnada y una de la Ley Fundamental. b) Puede ser promovida por el Procurador General
de la República, el 33% cuando menos, de los integrantes del órgano legislativo que haya expedido la norma, los
partidos políticos cuando se trate de leyes electorales, y la Comisión Nacional de Derechos Humanos y, en su
caso, el organismo local de defensa de derechos humanos para normas que vulneren derechos humanos.
(La inclusión de los organismos defensores de derechos humanos se dio conforme a Decreto publicado en el
Diario Oficial de la Federación el 22 de agosto de 2006.) c) Supone una solicitud para que la Suprema Corte
de Justicia de la Nación analice en abstracto la constitucionalidad de una norma. d) Se trata de un procedimiento.
e) Puede interponerse para combatir cualquier tipo de normas. (mediante decreto publicado en el Diario Oficial
de la Federación el 22 de agosto de 1996 se elimino la restricción para normas electorales.) f) Solo procede por
lo que respecta a normas generales. g) La sentencia tendrá efectos generales siempre que sea aprobada por lo
menos por ocho Ministros". Tesis jurisprudencial P./J. 71/2000 Seminario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena
Época, t. XII, agosto de 2000, p. 965.
8
"Los artículos señalados fueron los siguientes: 1º, 4º, 6º, 14, 16, 22, 24, 73, fracción XVI, 122, Apartado C,
Base Primera, fracción V, primer párrafo, incisos h) e i), 123 y 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos." Engrose de la sentencia definitiva de la Acción de Inconstitucionalidad 146/2007 y su acumulada
147/2007…, op. cit., p. 2.
9
Cfr. Ibidem, pp. 2-21.
10
Sentencia definitiva de la Acción de Inconstitucionalidad 10/2000 Ministro ponente: Olga Sánchez Cordero.
Versión pública electrónica consultada en http://www2.scjn.gob.mx/juridica/engroses/cerrados/302/00000100.019.doc.
11
Cfr. Ibidem, p. 22-48.
12
"CONSIDERANDO CUARTO. Admisión de las demandas y trámite de las acciones de inconstitucionali-
dad." Ibidem, pp. 48-49.
13
Cfr. Ibidem, pp. 49-52.
14
Cfr. Ibidem, pp. 52-76.
15
Cfr. Ibidem, pp. 76-101.
16
Cfr. Ibidem, pp. 119-128.
17
Comparecieron ante el Pleno de la SCJN A) Exposiciones donde se sostuvo la inconstitucionalidad de los
artículos impugnados 1. Audiencia de 11 de abril: Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos,
Procurador General de la República, Jorge Adame Goddard, Rodrigo Guerra, Víctor Manuel Montoya, Jorge Eu-
genio Traslosheros Hernández, Manuel Ramos Kuri, Lorena Malpica Hernández, María de la Luz Casas Martínez,
Dora Sierra Madero 2. Audiencia de 23 de mayo, Diputada María de la Paz Quiñones Cornejo, María del Carmen
Alva López, Francisco Vázquez-Gómez Bisogno, María de Lourdes Delgado Barraza, Gabriel Ernesto Larrea Ri-
cherand, María del Rocío Gálvez de Lara, Ingrid Tapia, Carlos Llano Cifuentes, Gerardo Monroy Campero, Dipu
tado Álvaro Clemente Carrillo, Andrés González Watty, Jaime Inchaurrandieta Sánchez Medal, Diputada Federal
Dora Alicia Martínez Valero, María Emilia Montejano Hilton, Martha Tarasco Michel 3. Audiencia de 13 de junio:
Armando Martínez Gómez, Patricia Barrera Rivera, Diputada Federal María del Pilar Ortega Martínez, Senadora
María Teresa Ortuño Guza, Eduardo Gayón Vera, José Antonio Núñez Ochoa, Paz Gutiérrez Cortina de Fernán-
dez Cueto, Pilar Calva, Carlos Herrero Cembellín, Héctor Jaime Larios Santillán, Óscar Javier Martínez González,
Carlos Fernández del Castillo Sánchez, Horacio Merchán Larios, Juan de Dios Castro Lozano, Carlos María
Abascal Carranza. B) Exposiciones donde se defendió la constitucionalidad de las normas impugnadas.1. Audiencia
de 23 de abril: Presidente de la Asamblea Legislativa (Víctor Hugo Círigo), Consejera Jurídica del Gobierno del
Distrito Federal (Leticia Bonifaz), Margarita M. Valdés-Villareal, Jesús Zamora Pierce, Raffaela Schiavon Ermani,
Senador Pablo Gómez Álvarez, Marta Lamas, María del Consuelo Mejía Piñeros, Patricia Greter González, Martha
Lucía Mícher Camarena, 2. Audiencia de 30 de mayo: Fátima Juárez, Santiago Cocuera Cabezut, Pedro Morales
Aché, Julián Cruzalta Aguirre, Perla Sofía Vázquez Díaz, Gabriela Rodríguez Ramírez, Patricia Cedillo Acosta, Patri-
cia Silva Rosales, Juliana González, Juan Antonio Cruz Parcero, Alberto Begné Guerra, María de los Ángeles López
García, Edgar Armanado Cruz González, Diputada local Leticia Quezada Contreras, Adriana Or tiz Or tega
3. Audiencia de 27 de junio: Presidente de la Comisión de los Derechos Humanos del Distrito Federal, Patricia
Galeana Federico Zárate Zavala, Diputado Federal Elsa Guadalupe Conde Rodríguez, Aída Marín Acuapan, Fer-
nando Andrés Ortiz Mejía, Diputado Enrique Vargas Anaya, Pilar Murieras Juárez, Susana Lerner Sigal, Ingrid Gómez
Saracibar, Gabriela Delgado Ballesteros, Diputada Federal Claudia Cruz Santiago, María Guadalupe Ortega Ortiz,
Daphtne Cuevas, Diputado Enrique Pérez Correa. Vid. Ibidem, pp. 124-127.
18
"Estas audiencias públicas responden a tres principios constitucionales –íntimamente vinculados– que son
particularmente importantes para la Suprema Corte de Justicia de la Nación:
-
El derecho a la información;
-
La transparencia en el quehacer público, y
-
La imparcialidad en la impartición de justicia.
Comprometidos con ellos, el Pleno del Tribunal Constitucional ha abierto estas audiencias públicas que son
un espacio de oralidad para que las instituciones públicas que aducen la inconstitucionalidad de las reformas y –en
su momento– los órganos que defienden la constitucionalidad de las mismas, expresen pública y directamente
sus argumentos. También son espacios para que las agrupaciones, asociaciones y personas interesadas presen-
ten sus opiniones en uno u otro sentido." Ortiz Mayagoitia, Guillermo, "Discurso de Apertura de la Primera
Audiencia Pública relacionada con acciones de inconstitucionalidad 146 y 147 de 2007, Despenalización del
Aborto hasta la duodécima semana de gestación en el D.F." en Ortiz Mayagoitia, Guillermo, Conferencias…,
op. cit., p. 99.
19
Ortiz Mayagoitia, Guillermo, "Discurso de Presentación del micrositio sobre las acciones de incons
titucionalidad 146 y 147 de 2007" en Ortiz Mayagoitia, Guillermo, Conferencias…, op. cit., pp. 185-186.
20
Diversas instituciones educativas fueron muy activas en la discusión de los temas a favor y en contra de
las reformas. Instituciones radicadas en el Distrito Federal como la Universidad Nacional Autónoma de México,
la Universidad Autónoma Metropolitana, la Universidad Iberoamericana, el Centro de Investigación y Docencia
necido a la sociedad, ya que inclusive los partidos políticos que han inten-
tado hacer de ellos su bandera, han fracasado en el intento de mantener
permanencia en el sistema electoral mexicano.22 Los temas sociales han ido
avanzando en la agenda pública nacional gracias al apoyo de las organiza-
ciones civiles. La presión de estas organizaciones ha facilitado la apertura de
centros de comunicación con el gobierno, así como el flujo de recursos
para mantener sus actividades. Las organizaciones sociales de defensa de
los derechos de las mujeres y la salud reproductiva tienen la posibilidad
208
de recibir recursos materiales y humanos tanto del interior como del exte-
rior del país, lo que les permite establecer estructuras permanentes de
profesionales dedicados a la persecución de estos fines. Su agenda pública
es compartida con la agenda de organizaciones internacionales, lo que per-
mite el flujo de comunicación y soporte, además de la experiencia interna-
cional y la posibilidad de introducir sus temas a las agendas de las agencias
internacionales. Junto con los partidos políticos, movilizaron recursos econó
Económica y el Instituto Tecnológico Autónomo de México, entre otras, participaron de estos debates con publi
caciones, eventos y participación en medios.
21
Durante el juicio participaron activamente las siguientes organizaciones: Asociación Filosófica Feminista
A.C., Ipas México, Católicas por el Derecho a Decidir, Grupo de Información en Reproducción Elegida, El Colegio
de Bioética, Magdala: Instituto de Asistencia Integral, ELIGE: Red de Jóvenes por los Derechos Sexuales y Repro-
ductivos, RED Democracia y Sexualidad, Centro de Derechos Humanos Victoria Diez, DECIDIR. Coalición de
Jóvenes por la Ciudadanía Sexual y el Centro de Derechos Reproductivos entre otras más.
22
Los intentos de establecer una opción social demócrata dentro del sistema político mexicano que obser-
ve los derechos sociales como prioritarios han sido fallidos. El Partido Social Democracia mantuvo su registro
ante el Instituto Federal Electoral durante los años 1999 y 2000. Varios de sus integrantes decidieron agruparse
para 2003 en el partido México Posible que tampoco consiguió conservar el registro. En 2005 se fundó el par-
tido Alternativa Social Democracia que perdió su registro en las elecciones intermedias de 2009.
23
"La sesión iniciará este lunes con la lectura del proyecto de dictamen elaborado por Aguirre Anguiano, que
ha recibido críticas en la misma Corte porque, se asegura, las 610 cuartillas del documento tiene ‘demasiada in-
formación’ que versa sobre aspectos filosóficos, sociológicos y morales, pero con pocos elementos jurídicos."
"Ministros debaten hoy sobre la despenalización del aborto" en La Jornada, Nacional, 25 de agosto de 2008: "El
proyecto de dictamen del Ministro Aguirre Anguiano, ‘es un retroceso’ y una muestra del ‘más arraigado conser-
vadurismo’ que se inclina por la criminalización de las mujeres, consideraron organizaciones defensoras de los
derechos sexuales y reproductivos." "La SCJN debe hacer respetar el Estado laico en el tema del aborto" en La
Jornada, Nacional, 17 de agosto de 2008. "El Ministro Sergio Aguirre Anguiano puso a consideración de sus com-
pañeros de la Corte el proyecto de sentencia en torno al juicio sobre la despenalización del aborto en el DF, en
el que retoma los argumentos de Pro-Vida en torno al tema." "Retoma Ministro alegatos de Pro-Vida" en El
Universal, Nacional, 16 de agosto de 2008.
24
En los resolutivos del proyecto se señalaba: "De conformidad con todo lo examinado en los consideran-
dos precedentes de esta resolución, procede declarar la invalidez de las porciones normativas de los primeros
párrafos de los artículos 144 y 145 del Código Penal para el Distrito Federal, en cuanto precisan el delito de
aborto y su penalidad, respectivamente, a partir de la décimo segunda semana de gestación, así como la del segundo
párrafo del citado artículo 144 que establece el concepto de embarazo. De igual manera, resulta procedente
declarar la invalidez del artículo Tercero transitorio del Decreto impugnado, que establece la obligación del Jefe
de Gobierno del Distrito Federal de expedir la adecuación a los Lineamientos Generales de Organización y
Operación de los Servicios de Salud relacionados con la interrupción del embarazo en esa entidad. En torno a
estos Lineamientos, debe precisarse que si bien ya fueron expedidos por el citado Jefe de Gobierno, no puede
considerarse que el artículo Tercero transitorio haya cesado en sus efectos, en virtud de que los Lineamientos
que emitió siguen rigiendo en el Distrito Federal y aplicándose en las solicitudes de interrupción de embarazos que
no se refieren a las excluyentes de responsabilidad contempladas en el artículo 148 del Código Penal para esa
entidad, pues precisamente su expedición tuvo por objeto adecuar los Lineamientos para incluir dentro de los
servicios de salud, los supuestos de interrupciones de embarazos dentro de las primeras doce semanas de ges-
tación, a voluntad de la mujer, conforme al Decreto impugnado." Proyecto de sentencia definitiva de la Acción de
Inconstitucionalidad 146/2007 y su acumulada 147/2007. Versión Pública. Ministro Ponente: Sergio Salvador Aguirre
Anguiano, p. 601.
25
Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 25 de agosto de 2008. Consultada en http://ss1.webkreator.
com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_25%20de%20agosto.pdf.
26
El marco jurídico impone estrictas formalidades a la SCJN para hacer una declaración de inconstitucio
nalidad. La regla de votación 8/11 contenida en el artículo 105 constitucional es una muestra de ello. Este requi-
sito establece una formalidad que intenta regular la inconstitucionalidad como una excepción, como un último
recurso que debe estar bien fundado y soportado por un apoyo mayoritario entre los Jueces. "Las resoluciones
de la Suprema Corte de Justicia solo podrán declarar la invalidez de las normas impugnadas, siempre que fueren
aprobadas por una mayoría de cuando menos ocho votos." Artículo 105 fracción II último párrafo de la Consti
tución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
27
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro Genaro Góngora Pimentel (Sesión Vespertina del 26
agosto 2008) Respecto a los alcances del derecho de procreación, señaló que era posible establecer que la
maternidad constituye un ejercicio de libertad que no debe ser influenciado o inferido y menos aún, imponerse
a través de la vía penal. Comentó que no pueden ser considerados como suficientes para determinar un princi-
pio o derecho constitucional, los argumentos que se basan en algún proceso legislativo dentro del cual se hace
referencia al producto de la concepción. En consecuencia, señaló que dicho argumento no justifica que sea incons
titucional la interrupción legal del embarazo antes de las 12 semanas, y que el constituyente hubiera atribuido
una temporalidad en el derecho a la vida. Consideró que cuando el Estado impone a los médicos, así como a
otros funcionarios de salud, la obligación de notificar los casos de mujeres que se someten a abortos se vulnera
su derecho a la intimidad y las sitúa en un estado de riesgo, ya que ante el temor de ser denunciadas, se practican
la interrupción del embarazo en lugares inseguros, lo cual produce una afectación y desigualdad en las relaciones
de género, pues no se les reconoce su autonomía y control de su sexualidad. Hizo referencia a las interpretacio-
nes realizadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos al artículo 4º de la Convención Interameri
cana de Derechos Humanos, en donde se determinó que es obligación del Estado mexicano proteger y
promover los derechos de las mujeres como una prioridad, con el fin de garantizar la igualdad, la no discrimina-
ción y la vida libre de violencia basada en el género y que la interrupción legal del embarazo constituye un derecho
a la salud y, por tanto, los Estados que lo prevén deben facilitar estos servicios en el menor tiempo posible. Dijo
que el proyecto no aporta elementos lógico-jurídicos que permitan justificar que la Constitución Mexicana
contiene principios que contemplen el derecho a la vida del producto de la concepción o que expresen el mo-
mento en que ésta comienza, ni que señale a este derecho como absoluto o abstracto, ni que justifique la vía
penal como único medio de protección para el producto de la concepción menor de 12 semanas. Incluso en el
caso de que se estableciera la exigencia constitucional de proteger al producto de la concepción, esto no signi-
ficaría que tuviera que hacerse bajo una sanción penal. Concluyó con la afirmación de que los sistemas de dere-
chos humanos no pueden obligar a los Estados a defender el derecho a la vida desde la concepción, toda vez 213
que implicaría imponer ideologías y valorizaciones subjetivas, a través de las cuales se sacrificarían otros derechos
plenamente identificables. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 26 de agosto de 2008. Consultada
en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_26%20de%20agosto.pdf.
28
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro José de Jesús Gudiño Pelayo (Sesión Vespertina 26
agosto 2008): Señaló que si bien en el proyecto de resolución se especifica que no existe una norma constitu-
cional que de manera expresa contemple el derecho a la vida, lo cierto era que para determinar lo que realmen-
te regula la Constitución, no sólo es necesario referirse a lo que establece, sino también a lo que no dice pero
implica. Precisó que el artículo 1º constitucional debe interpretarse a la luz de los principios, valores y reglas
emanadas de la Constitución, y que son las garantías individuales. Refirió que de la dinámica de esta interacción
entre principios y valores, entre principios y normas, entre valores y reglas, es como debe hacerse una correcta
interpretación constitucional; de ahí que no pudiera sostenerse que la Constitución mexicana no establece como
un valor constitucional el derecho a la vida, ya que debe partirse de que las garantías individuales pretenden
garantizar precisamente los valores. Puntualizó que no había una sola regla en la Constitución que estableciera
una protección directa al producto de la concepción, con independencia o en contra de la voluntad de la madre.
Agregó que el valor de la vida establecido en la Constitución no es de carácter absoluto ya que debe equilibrar
valores antagónicos que pueden entrar en conflicto, en el caso concreto, es el conflicto relativo a la vida humana
el que entra en conflicto con otros valores, como la libertad de la mujer sobre su cuerpo y el no imponerle una
maternidad que no sea absolutamente querida por ella. Sostuvo que no encontró motivo alguno de inconstitu-
cionalidad, ya que se trata de una despenalización que no infringe las reglas o valores que establece la Consti
tución, porque ninguna regla obliga al legislador a penalizar conductas de particulares y, por tal motivo, se pronunció
por la invalidez de las normas reclamadas. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 26 de agosto de
2008. Consultada en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_26%20de%20agosto.pdf.
29
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro José Ramón Cossío Díaz (Sesión Matutina del 27 agosto
2008) Manifestó que "la vida", no se encuentra prevista en nuestra Constitución Federal en la calidad de un
derecho, sino de bien jurídico y por tanto no coincidía con que su protección tuviera un carácter absoluto.
El derecho a la vida no cuenta con un carácter preeminente sin el cual no tienen cabida los demás derechos
fundamentales ni constituye el presupuesto lógico de estos, ya que el hecho de que la vida sea una condición
necesaria de la existencia de otros derechos, no puede de ahí deducirse, que se deba considerar a ésta en un
valor superior al de cualquiera de los otros derechos. Los derechos fundamentales o garantías individuales, admi
ten la posibilidad de su modulación. La Constitución Federal no determina mandato alguno sobre la penalización
del la interrupción del embarazo cuando suceda dentro de las primeras doce semanas de gestación, por esa
razón queda al arbitrio del poder legislador local, limitar las conductas reprochables para la sociedad. Por tanto,
la despenalización impugnada no encuentra limitante en el texto de la Norma Fundamental y en atención a ello,
no resulta inconstitucional. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 27 de agosto de 2008. Consultada
214 en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_27%20de%20agosto.pdf.
30
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro Juan N. Silva Meza (Sesión Matutina del 27 agosto 2008)
Comentó que se debe atender a la realidad social, como requisito para hacer efectivos tanto los derechos fun-
damentales, como los bienes constitucionales que puedan estar en conflicto, y de esa manera enfatizar en la
atención a principios constitucionales como democracia, laicidad del Estado mexicano, pluralidad de los ciudada-
nos, así como el innegable carácter social de la Constitución Federal. Dijo que se deben tener en cuenta conside
raciones respecto de derechos constitucionales expresamente reconocidos a las mujeres, y no reducir a razones
sobre la protección del producto de la concepción. Expresó que el estudio sobre los derechos fundamentales de
las mujeres debía constreñirse al análisis de las siguientes garantías: protección a la vida, a la salud, a la igualdad, a la
no discriminación, a la libertad sexual y reproductiva, a la autodeterminación y a la intimidad. Indicó que toda
persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y espaciamiento de
sus hijos, y que su libre ejercicio supone la ausencia de coacción por el poder público y, por tanto, resulta oponible
al Estado. Se inclinó porque los gobernados cuentan con el derecho a que los entes de gobierno no intervengan
en la planificación familiar, en el ámbito de sus decisiones personales, y que el Estado cuenta con el compromiso de
dotar a la población de los medios suficientes e idóneos para ejercer lo que se denomina "paternidad responsable".
Habló del interés que tiene el Estado en salvaguardar la continuación del proceso de gestación del cual se infiere una
protección integral tanto a la familia como a la mujer embarazada, para que cuente con las medidas preventivas
necesarias en el trabajo y no poner en riesgo la salud del producto de la concepción. Expresó que la Asamblea
Legislativa del Distrito Federal, al reformar las normas impugnadas, buscó, entre otras cosas, cumplir con la nece-
sidad de terminar con un problema de salud pública derivado de la práctica de abortos clandestinos. Que pro-
vocó a favor de las mujeres en dicha situación, mejores condiciones de higiene y seguridad, así como un trato
igualitario sin importar sus posibilidades económicas. Insistió en que ante el incumplimiento de los fines consti-
tucionales de educar a la población en materia sexual y reproductiva, y la insuficiencia de los esfuerzos en garan-
tizar un acceso pleno a métodos anticonceptivos, no puede reprocharse a la sociedad un ejercicio irresponsable de
la libertad reproductiva mediante la penalización absoluta de la conducta en estudio. Reseña de la sesión pública
del pleno de la SCJN del 27 de agosto de 2008. Consultada en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/
sesion_27%20de%20agosto.pdf.
31
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro Mariano Azuela Guitrón (Sesión Matutina del 27 agosto
2008) Hablo de la existencia de una responsabilidad global en el fenómeno, al afirmar que no quedaba sólo en
manos de los órganos del Estado la solución ya que también los gobernados deben tener una mayor participa-
ción y no acudir a un esquema paternalista respecto del gobierno. Dijo que dentro del contexto de las actuacio-
nes de los seres humanos, la libertad se ejercita en razón de ideales y de valores, que encuentran coherencia con
el texto constitucional, situación que debe aprovecharse por parte del Estado para cumplir con sus fines de
instrucción y educación que se señala como responsabilidad gubernamental. Para él los derechos con que cuentan
tanto la mujer, como el del producto en etapa de gestación no contienen un carácter absoluto, ya que la primacía
incondicionada de los derechos fundamentales cuya titularidad corresponde a las mujeres, podría implicar el
desconocimiento de la protección de la vida en gestación, que deriva de la Constitución Federal, mientras que
la protección incondicionada de la vida en gestación podría traducirse en la anulación de los derechos fundamen-
tales de las mujeres y en su caracterización como meros instrumentos reproductivos. Señaló que, por definición,
tanto la penalización absoluta como la despenalización absoluta del aborto, podrían entrar en conflicto con la
norma fundamental, al determinar la prevalencia irrestricta de uno de los bienes constitucionales. Expresó que
si bien la Constitución Federal no establece de manera expresa el derecho a la protección de la vida del ser en
gestación, ello no implica su inexistencia, pues del análisis integral de dicho cuerpo normativo fundamental, así
como de la Ley General de Salud, se obtiene la existencia de tal protección. Puntualizó que no existe enfren
tamiento entre los derechos fundamentales de la mujer y la protección constitucional de la vida del producto de
la concepción, pues si bien la mujer está en aptitud de ejercer el derecho sobre su cuerpo de manera natural, el
producto en gestación se considera ajeno a su ser. Concluyó exclamando que la Constitución Federal protege
la vida desde el momento de la concepción y, en ese contexto, se encontraba a favor de la propuesta de declarar la
invalidez de las normas impugnadas. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 27 de agosto de 2008.
Consultada en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_27%20de%20agosto.pdf.
32
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro Fernando Franco González (Sesión Matutina del 27
agosto 2008) Dijo que no existe norma que obligue al Estado mexicano a sancionar penalmente a la mujer que
decida interrumpir su embarazo en las primeras doce semanas de gestación; además de que el ser en gestación
tiene un tratamiento y protección diferenciados, según el momento del proceso de desarrollo en que se encuen-
tre. Expresó que el aborto ha tenido tratamientos diferenciados y se le otorga protección distinta al producto
de la concepción según el momento de gestación en que se encuentre. Indicó que la Asamblea Legislativa del
Distrito Federal, en su carácter de legislador democrático para el Distrito Federal, bajo su estricta responsabili-
dad, atendió a diversos factores, a información social, jurídica y científica, así como a consideraciones éticas de
salud y moral públicas, para aprobar las reformas que ahora se impugnan. Sostuvo que dicho órgano legislativo
no tomó su decisión sobre una consideración aislada sobre el aborto, pues ello fue el producto de un juicio de
ponderación, entre los derechos que protegen al producto de la gestación en esas primeras semanas, y los dere
chos constitucionales que protegen la dignidad, la igualdad, la salud, y sobre todo la intimidad de la mujer. Agregó
216 que las reformas realizadas en materia de salubridad, sustentan y dan forma a la modificación legislativa en ma-
teria penal, pues las primeras son indispensables para que la segunda tenga sustento y cumpla con las finalidades
que señaló la Asamblea Legislativa del Distrito Federal al emitirla. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN
del 27 de agosto de 2008. Consultada en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_27%20de%20
agosto.pdf.
33
Síntesis de los puntos más relevantes de la ministra Olga Sánchez Cordero (Sesiones Matutina y Vesper-
tina del 27 agosto 2008) Abrió diciendo que los derechos fundamentales que procedía ponderar en el presente
caso eran, por un lado, el derecho a la salud y vida de la madre y por el otro, el derecho a la vida del nasciturus
antes de las doce semanas de gestación, derechos que dijo, tienen la misma categoría, pues del texto constitucio-
nal, no se desprende que el derecho a la vida sea absoluto e irrestricto. Destacó que si el propio Estado impone el
embarazo a través de la vía de la penalización de su interrupción y las mujeres irremediablemente tienen que
continuarlo aunque no lo deseen, ello las expone a diversas afectaciones a su salud física y mental, siendo la más
grave, e incluso con peligro de muerte, la práctica de un procedimiento de aborto clandestino. Manifestó que la
medida que no criminaliza la interrupción del embarazo resulta idónea para salvaguardar los derechos de las
mujeres, ya que ofrece la oportunidad de decidir sobre la no imposición de un embarazo y se optimizan las con
diciones de atención médica que protejan su vida y su salud. Refirió que la penalización del aborto lejos de salvar
vidas, provoca más muertes en las mujeres que se someten a prácticas clandestinas, por ende, recalcó que a fin
de reducir el número de abortos, el Estado debe instrumentar políticas públicas integrales y eficaces en materia de
salud reproductiva y educación sexual, para evitar embarazos no deseados. Indicó que la protección de la vida es
la regla y el aborto consentido es la excepción, el cual se justifica a partir de la no imposición de un embarazo
no deseado en condiciones que perjudiquen la vida y la salud de la mujer y que la lleven a ser sometida a tratos
crueles, inhumanos y degradantes, de ahí que no criminalizar esa interrupción en los supuestos regulados en la
legislación del Distrito Federal, sea una opción constitucional. Consideró que los preceptos impugnados que no
prevén como delito el aborto realizado hasta las doce semanas de gestación, y que en consecuencia, no lo san-
cionan, son acordes con nuestra realidad actual, la cual fue atendida por el legislador al emitir los preceptos refe-
ridos. Concluyó que es inadmisible forzar a una mujer a continuar un embarazo que le va a arrebatar la vida, por
lo que de no protegerse la libertad, la intimidad y las decisiones de una persona en lo relativo a la reproducción,
el Estado tendría el poder de intervenir en esas decisiones. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 27 de
agosto de 2008. Consultada en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_27%20de%20agosto.pdf.
34
Síntesis de los puntos más relevantes de la ministra Beatriz Luna Ramos (Sesión Vespertina del 27 agosto
2008) Enfatizó que toda función de Estado es un oficio de creación jurídica y refirió que los contenidos de las 217
normas jurídicas pueden tener tres tipos de normatividad: a)Primero.-las normas que establecen un contenido
necesario u obligatorio, b)Segundo.-las que pueden ser de contenido prohibitivo y c)Tercero.-las de conte
nido optativo, que son las que dejan al arbitrio del legislador ordinario la posibilidad de establecer este tipo de
normas ponderando cómo deben establecerse, con la única limitante de que las mismas pueden restringirse por
las garantías individuales. Puntualizó que son los actos de las autoridades y no la conducta de los particulares lo
que violenta garantías, ya que los actos de estos últimos pueden constituir, en dado caso, conductas delictivas
punibles o no, pero que al final de cuentas, por ser el resultado de normas de contenido optativo quedan al arbitrio
y ponderación del legislador; de ahí que el caso en estudio no versara sobre un tema de constitucionalidad, ya
que la Constitución protege la vida respecto de la actuación de las autoridades, no así respecto de las actitudes
de los particulares. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 27 de agosto de 2008. Consultada en http://
ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_27%20de%20agosto.pdf.
35
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro presidente Guillermo Ortíz Mayagoitia (Sesión Matutina
del 27 agosto 2008) -Señaló que abordaría la cuestión a dilucidar desde tres puntos primordiales: a) Si la Cons-
titución Federal protege la vida, b) Si la protege desde que se inicia hasta que se concluye y c) Si la protege de
manera absoluta. En cuanto a las dos primeras cuestiones señaló que la diferencia de posturas se presenta ante
el señalamiento de si se protege desde el inicio de la vida o en qué momento preciso surge dicha protección.
Indicó que en nuestra Carta Magna hay disposición expresa que tutela la vida como un valor, como un derecho
universal de la humanidad y particularmente de la nación mexicana a partir de la concepción del ser humano.
Para confirmar su postura manifestó que la Constitución Federal se refiere a ello en las fracciones V, XI y XV del
artículo 123 y, en ese orden, precisó que las dos primeras fracciones versan sobre la salud de la madre y sólo por
vía de consecuencia viene la protección indirecta a la salud del producto de la concepción, pero que en la frac-
ción XV, expresamente señala la protección a la vida y a la salud del producto de la concepción. Puntualizó que
no había duda de que el derecho a la vida está protegido por nuestra Constitución Federal desde el momento
de la concepción, así mismo, precisó que en relación a la vida hay un derecho humano universal que se enuncia
como procreación de la especie y que tiene tutela constitucional, al margen de que el producto de la concepción
sea o no persona. Expresó que existen derechos de la mujer en colisión con los del ser humano en gestación,
como son: 1. Disponibilidad sobre su cuerpo, 2. Maternidad y 3. Plan de vida. Precisó que de conformidad al ar-
tículo 4º Constitucional, la mujer cuenta con el deber de diseñar un plan de vida y su maternidad de manera libre
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
y sobre todo responsable, lo cual también significa que no puede haber ninguna imposición de embarazos a las
mujeres que libremente con su consentimiento mantienen y aceptan tener relaciones sexuales de las cuales
puede derivar un embarazo. Consideró que si bien un embarazo puede afectar el plan de vida de las mujeres, tam
bién lo es que dicho plan debe ser responsable, que no sea generado de momento y sin previsión alguna, toda
vez que tiene relación con el ejercicio de la sexualidad libre y responsable, por tanto, dijo que desde su punto de
vista no hay imposición de embarazos, sino en todo caso, ejercicio no responsable de la libertad sexual de la
mujer. Manifestó que no consideraba que la despenalización del aborto contribuya a la solución del grave proble
ma social que se padece en México, toda vez que las mujeres tienen a su alcance otros medios efectivos para
evitar los embarazos no deseados. Señaló que la libertad no se puede anteponer a la vida, ya que ésta no es un
derecho otorgado por el Estado, sino una condición necesaria para la existencia de todos los derechos del ser
humano, por lo que la libertad de la madre no puede primar sobre la vida de su hijo en gestación. Sostuvo que
la interrupción del embarazo antes de las 12 semanas de gestación, se traduce también en discriminación hacia el
embrión que se encuentra en la etapa de desarrollo y crecimiento muy temprana, sin que se pueda considerar
como un ser en potencia, ya que su información genética permanecerá inmutable durante su gestación, nacimien-
218 to, niñez, juventud, vejez y muerte. Estimó que las consecuencias de privar a la mujer de la oportunidad de decidir,
así como el daño y las obligaciones que se generan por mantener un embarazo no deseado, aun por grave que
éste sea, como puede ser un entorno social y económico adverso, siempre serán remediables, no así las deriva-
das de privar de la vida a un individuo en gestación, pues la interrupción de un embarazo no tiene reparación.
Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 27 de agosto de 2008. Consultada en http://ss1.webkreator.com.
mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_27%20de%20agosto.pdf.
36
Síntesis de los puntos más relevantes del Ministro Sergio Aguirre Anguiano (Sesión Matutina del 28 agosto
2008) Reafirmó su convicción de que si bien la Constitución Federal no consagra textualmente el derecho a la
vida, sí es explícita respecto a que es una condición necesaria para el ejercicio de todos los demás derechos.
Sostuvo que el derecho a la vida humana deriva principalmente de los artículos 1º, 14 y 22 de la Ley Fundamen-
tal, así como de la interpretación conjunta y sistemática de todas sus disposiciones, tanto de las que consagran
derechos fundamentales de los individuos, como de las relativas a su parte orgánica. Indicó que el proyecto no
sostiene un deber constitucional de penalizar el aborto, sino que asevera un deber de protección a la vida y que
fue el legislador quien eligió el derecho penal como mecanismo protector, por lo que al hacerlo quedó sujeto a
los principios constitucionales de igualdad, no discriminación, proporcionalidad y razonabilidad, entre otros. Dijo
que no se pusieron en duda los derechos de la mujer, ya que éstos son analizados en conjunción y armonía con
los del concebido; consideró que éstos últimos fueron desconocidos por la Asamblea Legislativa del Distrito
Federal, en contravención a los artículos constitucionales citados. Anticipó que las excluyentes de responsabilidad
son causas de excepción de la antijuridicidad penal de la conducta que atenta contra el bien jurídicamente pro-
tegido, en atención a las circunstancias específicas en que aquella se realizan, pero que no inciden sobre el goce,
disfrute y ejercicio del derecho a la vida. Enfatizó que el papel de la Suprema Corte de Justicia de la Nación es
examinar el apego de las normas legales impugnadas a la Constitución Federal, ya que ésta consagra los valores y
principios humanos fundamentales, por lo que se encontraba convencido de que la interpretación sostenida en
su proyecto era la correcta desde el punto de vista constitucional, a pesar de la opinión mayoritaria en contrario
expresada por los demás señores Ministros, por lo que el sentido de su voto permanecería conforme a la pos-
tura presentada originalmente. Reseña de la sesión pública del pleno de la SCJN del 28 de agosto de 2008. Consul-
tada en http://ss1.webkreator.com.mx/4_2/000/000/00f/056/sesion_28%20de%20agosto.pdf.
220
los demás derechos.También se dice que el derecho a la vida en los tratados
internacionales no se establece ni reconoce como un derecho absoluto.
Se manifiesta que el aborto es un problema de descriminalización de una
conducta específica y no existe mandato constitucional específico para su
penalización, por lo que la evaluación de las condiciones sociales y la pon-
deración realizada por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal es cons-
titucional y se encuentra dentro de sus facultades de acuerdo con principios
democráticos. La percepción general que dejó el engrose de la Acción de
Inconstitucionalidad 146/2007 y su acumulada 147/2007 es que la riqueza
de la discusión presentada en la resolución del caso, por la sociedad y por
las mismas posiciones de los Ministros, no se ve reflejada en el texto del
engrose.
37
La jerarquía católica mexicana manifestó su inconformidad blandiendo las campanas de la catedral de la
ciudad de México, en señal de luto por la decisión. Granados Chapa, Miguel Ángel, "¿Por quién doblaron las
campanas?" Plaza Pública, Primera, Reforma, 31 de agosto de 2008.
38
Versión estenográfica de la sesión plenaria del 28 de agosto de 2008 en la SCJN, p. 41.
221
La resolución final es un documento largo que incluye la sentencia
definitiva del caso, al que hay que agregar los votos particulares y minorita-
rios de todos los Ministros. Cada uno de los Ministros elaboró su voto
particular, en donde quedó claro el desacuerdo existente respecto a la
cuestión relativa a la protección del derecho a la vida por nuestra Consti-
tución. Respecto de este tema, la misma sentencia aclara que los conte
nidos del considerando octavo en donde se registra dicha discusión, no
constituyen jurisprudencia aún cuando cuentan con la votación suficiente
para hacerlo, esto debido a ser un tema en el que no hubo acuerdo en la
SCJN y del cual se descartó que la información proporcionada por las par-
tes y la sociedad civil en las audiencias, aportara evidencia suficiente para
manifestarse en algún sentido.39 Sobre este punto es en el que se puede
39
"Por todo lo anterior, se considera que los planteamientos contenidos en los conceptos de invalidez de las
demandas resultan infundados. Por lo expuesto y fundado, se resuelve: PRIMERO. Es parcialmente procedente e
infundada la presente acción de inconstitucionalidad. SEGUNDO. Se sobresee en la presente acción de incons-
titucionalidad, respecto de los artículos 148 del Código Penal para el Distrito Federal y 16 Bis 7, de la Ley de
Salud para el Distrito Federal, y Tercero transitorio del impugnado Decreto de reformas a dichos preceptos.
TERCERO. Se reconoce la validez de los artículos 144, 145, 146 y 147 del Código Penal para el Distrito Federal,
así como de los artículos 16 Bis 6, tercer párrafo, y 16 Bis 8, ultimo párrafo, de la Ley de Salud para el Distrito
Federal. CUARTO. Publíquese esta resolución en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Notifíquese;
por medio de oficio a las partes y, en su oportunidad, archívese el expediente. Puesto a votación el proyecto se
resolvió por unanimidad de once votos declarar parcialmente procedentes las acciones de inconstitucionalidad;
por mayoría de diez votos de los señores Ministros Aguirre Anguiano, Cossío Díaz, Luna Ramos, Franco González
Salas, Góngora Pimentel, Azuela Guitrón,Valls Hernández, Sánchez Cordero de García Villegas, Silva Meza y Presi
222 dente Ortiz Mayagoitia sobreseer en las acciones de inconstitucionalidad respecto de los artículos 148 del Código
Penal para el Distrito Federal y 16 Bis 7, de la Ley de Salud para el Distrito Federal, el señor Ministro Gudiño Pelayo
voto en contra; por mayoría de nueve votos de los señores Ministros Cossío Díaz, Luna Ramos, Franco González
Salas, Góngora Pimentel, Gudiño Pelayo, Valls Hernández, Sánchez Cordero de García Villegas, Silva Meza y Pre-
sidente Ortiz Mayagoitia se resolvió sobreseer en las acciones de inconstitucionalidad respecto del artículo Ter-
cero transitorio del impugnado Decreto de reformas a dichos preceptos, los señores Ministros Aguirre Anguiano
y Azuela Guitrón votaron en contra y a favor de la propuesta de declarar la invalidez de dicho artículo, y reser-
varon su derecho para formular voto de minoría; por unanimidad de once votos se resolvió reconocer la validez
de los artículos 16 Bis 6, tercer párrafo, y 16 Bis 8, último párrafo, de la Ley de Salud para el Distrito Federal; por
mayoría de nueve votos de los señores Ministros Cossío Díaz, Luna Ramos, Franco González Salas, Góngora
Pimentel, Gudiño Pelayo, Valls Hernández, Sánchez Cordero de García Villegas, Silva Meza y Presidente Ortiz
Mayagoitia se resolvió reconocer la validez de los artículos 144, 145, 146 y 147 del Código Penal para el Distrito
Federal, al no violar los principios de certeza y exacta aplicación de la ley, los señores Ministros Aguirre Anguiano
y Azuela Guitrón votaron en contra; y por mayoría de ocho votos de los señores Ministros Cossío Díaz, Luna
Ramos, Franco González Salas, Góngora Pimentel, Gudiño Pelayo, Valls Hernández, Sánchez Cordero de García
Villegas y Silva Meza se resolvió declarar infundadas las acciones de inconstitucionalidad y reconocer la validez de
los artículos 144, 145, 146 y 147 del Código Penal para el Distrito Federal, y que la resolución se publique en el
Semanario Judicial de la Federación, y reservaron su derecho para formular, en su caso y oportunidad, sendos
votos concurrentes, en el entendido que las razones que fundan el considerando Octavo de esta ejecutoria, al
no haber sido coincidentes en cuanto al reconocimiento de validez de los preceptos, no serán obligatorias en
términos de los dispuesto por el artículo 43 de la Ley Reglamentaria de las fracciones I y II del artículo 105 de
la Constitución Política de los Estado Unidos Mexicanos; de los señores Ministros Aguirre Anguiano, Azuela Güitrón
y Presidente Ortiz Mayagoitia votaron en contra y en favor de la propuesta de declarar la invalidez de dichos
artículos, y que la resolución se publique en el Diario Oficial de la Federación, en la Gaceta Oficial del Distrito
Federal y en el Semanario Judicial de la Federación, y reservaron su derecho para formular voto de minoría."
Engrose de la sentencia definitiva de la Acción de Inconstitucionalidad 146/2007 y su acumulada 147/2007…, op. cit.,
pp. 207-208.
40
Vid. Cossío Díaz, José Ramón, La teoría constitucional de la Suprema Corte, Fontamara, México, 2002.
41
Cfr. Domingo, Pilar, "Judicial Independence: The politics of Supreme Court in México" en Judicial Latin
American Studies Review, 32, Londres, 2000, pp. 705-735; Fix Fierro, Héctor, La reforma judicial mexicana, ¿de
donde viene? ¿hacia donde va?, Instituto de Investigaciones Jurídicas, México, 2002; Magaloni, Ana Laura, ¿Por
qué la Suprema Corte no ha sido instrumento para la defensa de derechos fundamentales?, Documento de Trabajo,
CIDE, México, Noviembre 2007. Magaloni, Ana Laura y Zaldivar, Arturo, "El ciudadano olvidado" en Nexos,
n. 342, México, junio 2006; Magaloni, Beatriz y Sánchez, Arianna, "An Authoritarian Enclave? The Supreme
Court in México’s Emerging Democracy" presentado en la Annual Meeting of the American Political Science
Association, Philadelphia, EUA, 2006; Magaloni, Beatriz, Weak and powerful courts under autocracy: The case of
Mexico, presentado en el evento The political courts in authoritarian regimes, 30-31 de agosto de 2006, University
of Pennsilvania Law School; Domingo, Pilar, "Rule of law, citizenship and access to justice in Mexico" en Mexican
Studies/Estudios Mexicanos, Vol. 15, n. 1, Winter 1999, pp. 151-191; Ibarra Palafox, Francisco, "La Suprema
Corte de Justicia y consolidación democrática" en La ciencia del derecho procesal constitucional, tomo II, IIJ-UNAM,
México, 2008, pp. 773-798.
42
Información consultada en el micrositio de Internet de la SCJN respecto de la despenalización del aborto
disponible en la dirección electrónica http://informa.scjn.gob.mx/documentos_enviados_por_los_ciudadanos.html
como actor político en el tema. Aún cuando todavía la sociedad no cuenta con
una participación relevante en los procesos de interpretación constitucio-
nal ante la SCJN, no deben dejar de observarse estos primeros pasos que
integran la comunicación y transparencia frente a la sociedad como elemen
tos importantes de construcción hacia tomas de decisión por la SCJN.
228
*
Este trabajo obtuvo el segundo lugar del Segundo Concurso “Género y Justicia. Categoría ensayo”, edición
de 2010
1
Para una reseña completa de las acciones emprendidas por México, vid., el Informe de la Comisión Intera-
mericana de Derechos Humanos, Situación de los Derechos de la mujer en Ciudad Juárez, México: el derecho a no
ser objeto de violencia y discriminación. OEA/Ser.L/V/II.117, del 7 de marzo de 2003. En adelante, Informe Ciudad
Juárez.
2
Informe Ciudad Juárez, op. cit., párrafo 102.
3
Cfr. CIDH, Informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos sobre la Condición de la Mujer en las
Américas, OEA/Ser.L/V/II.100, Doc. 17, 13 de octubre de 1998, Capítulo IV. En adelante, Informe Mujer 1998.
4
CIDH, Informe Acceso a servicios de salud materna desde una perspectiva de derechos humanos, OEA/
Ser.L/V/II. Doc. 69, 7 de junio de 2010, párrafo 70.
5
Comité CEDAW, Recomendación general Nº 25 sobre el párrafo 1 del artículo 4 de la CEDAW, referente a las
medidas especiales de carácter temporal, párrafo 8.
6
Cfr. CIDH, Informe Acceso a la justicia para las mujeres víctimas de la violencia en las Américas, 2007. OEA/
Ser.L/V/II.68, en adelante, Informe Acceso a la Justicia.
7
Informe Acceso a la Justicia, párrafo 5 del Resumen Ejecutivo.
8
Por "sistema de derechos humanos" entendemos tanto el derecho internacional de los derechos humanos
como norma (sistema jurídico), los mecanismos de protección de los mismos (sistema de protección), como los res
tantes componentes de lo que se refiere como "paradigma" de derechos humanos.
De esto trata el presente trabajo: una nueva praxis judicial que, fun-
damentada en el principio de igualdad y no discriminación bajo el marco
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
II. La matriz
en derechos humanos
9
Una de las discusiones modernas sobre los derechos humanos versa sobre la notable expansión (del uso)
del término derechos humanos, tanto (i) para designar nuevos derechos (los llamados de tercera y cuarta gene-
ración), (ii) para reconocer nuevos sujetos (los pueblos), (iii) para reconocer derechos basados en la diferencia
(homosexuales). Vid., por ejemplo Greppi, Andrea, "Los nuevos y los viejos derechos fundamentales" en
Carbonell, M., Teoría constitucional y derechos fundamentales, Comisión Nacional de Derechos Humanos,
México, 2002, pp. 179-201.
10
En especial referencia a los derechos humanos como instancia para rebelarse: Gargarella, Roberto,
El derecho a la protesta. El primer derecho, Ad-Hoc, Argentina, 2005.
11
Vid., Declaración Americana, Art. XXVIII; Convención Americana, arts. 23 y 29.b; Carta Democrática
Interamericana, especialmente arts. 3 y 7; en la jurisprudencia de los órganos del sistema interamericano (en
especial, Corte IDH, Opinión Consultiva OC-8/87, El hábeas corpus bajo la suspensión de garantías, párrafos
20-26; Opinión Consultiva OC-9/89, Garantías judiciales en Estado de emergencia, párrafo 37).
12
Citado por Melkevik, Bjarne, "El derecho cosmopolita: la reactualización habermasiana" en Revista Dere
chos Humanos, 1 (1), Centro de Estudios e Investigación en Derechos Humanos, Facultad de Derecho de la
Universidad de Rosario, Rosario, p. 225.
13
Cfr. Donelly, Jack, Derechos humanos universales: en teoría y en la práctica, Gernika, México, s. f. Gros
Espiell, Héctor, "La dignidad humana en los instrumentos internacionales de derechos humanos" en Dignidad
humana, Cátedra UNESCO de Derechos Humanos, Uruguay, 2003, pp. 9-33.
14
Citado por Melkevik, Bjarne, "El derecho cosmopolita...", op. cit.
Por otro lado, el segundo componente es que los califica como "huma
nos". Amén de abonar las características mencionadas en el párrafo ante-
rior, sustenta las de inherencia, inviolabilidad, indivisibilidad, su carácter de
garantía colectiva –con las correlativas obligaciones de carácter objetivo–17
y su entidad como garantías "mínimas" o mejor dicho, porque constituyen
236 un piso mínimo sobre el cual trabajan los principios de no regresividad y
progresividad.
15
Cfr. Arendt, Hannah, Los orígenes del totalitarismo, Taurus, Madrid, 1999.
16
Cfr. Donelly, Jack, Derechos humanos..., op. cit.
17
Cfr. Corte IDH, caso Tribunal Constitucional, Competência. Sentencia del 24 de septiembre de 1999, Serie
C Nº 55, párrafo 41.
18
Donelly, Jack, Derechos humanos..., op. cit., p. 25.
19
Barcesat, Eduardo, "Fundamentos filosóficos y teóricos de los derechos humanos en democracia (año
1987)" en Barcesat, Eduardo, Derecho al derecho. Democracia y liberación, Fin de siglo ediciones, Argentina,1993, p. 92.
20
Lucas, Francisco de, "Inmigración, ciudad, derechos: el paradigma de la exclusión" en Rodríguez, Ma.
Eugenia y Tornos, Andrés (editores), Derechos culturales y derechos humanos de los migrantes, Universidad
Pontificia de Comillas, Madrid, 2000, pp. 14-35.
21
Muguerza, Javier, "La alternativa del disenso" en Muguerza, Javier y Peces-Barba, Gregorio
(coord.), Los fundamentos de los derechos fundamentales, Debate, Madrid, 1989, p. 24.
22
Camps, Victoria, Paradojas del individualismo, Crítica, Barcelona, 1999, p. 50.
23
Cfr. Rabbosi, Eduardo, "Derechos Humanos: el principio de igualdad y la discriminación" en Revista del
Centro de Estudios Constitucionales, Nº 7, 1990, pp. 175-192.
24
Corte IDH, Caso "Cinco Pensionistas", Sentencia de 28 de febrero de 2003, Serie C Nº 98, párrafo 147.
25
Aunque juzgamos que la definición de derechos humanos dada por Pérez Luño es posiblemente la mejor
disponible ("un conjunto de facultades e instituciones que, en cada momento histórico, concretan las exigencias
de la dignidad, la libertad y la igualdad humanas") no concordamos con la última parte de la definición: "las cuales
deben ser reconocidas positivamente por los ordenamientos jurídicos a nivel nacional e internacional". Citado
por Muguerza, Javier, "La alternativa...", op. cit.
26
Manili, Pablo, "La difícil tarea de elaborar un concepto de derechos humanos", Manual digital de derechos
humanos. Disponible en: http://www.fongdcam.org/manuales/derechoshumanos/datos/a_1.2.html
27
Art. 2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, arts. 2.2 de los pactos internacionales sobe
Derechos Humanos (Pacto Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos; Pacto Internacional sobre Derechos
Económicos, Sociales y Culturales).
28
Corte IDH, en sus primeros casos contenciosos, dejó en claro que el deber de prevenir razonablemente
implica, para los Estados, una obligación que "abarca todas aquellas medidas de carácter jurídico, administrativo,
político y cultural que promuevan la salvaguarda de lo derechos humanos y que aseguren que las eventuales
violaciones a los mismos serán efectivamente consideradas y tratadas como un hecho ilícito" (Velásquez Rodríguez,
párrafo 187; Godínez Cruz, párrafo 197).
1. Generalidades
29
Provisoriamente y antes de abordar la definición normativa del vocablo "discriminación", entenderemos lo
que otrora el profesor Rabbosi: "discriminar es practicar un tratamiento desigual que no resulta admisible".
RABBOSI, Eduardo, "Derechos humanos...", op. cit., p. 179.
30
Naciones Unidas, "¿Qué son los derechos humanos?", consultable en: http://www.ohchr.org/sp/issues/
Pages/WhatareHumanRights.aspx
31
Carta de las Naciones Unidas, artículos 1.3, 13.1.b., etc.
32
CIDH, Informe Ciudad Juárez, párrafo 99.
240
En el Comentario General 18,34 además, el CDH deja en claro: (i) que
la prohibición de discriminación no sólo es para los derechos convenciona-
les, sino también para los reconocidos constitucional o legalmente o en
otros instrumentos internacionales; (ii) que no toda diferencia de trato
constituirá discriminación, si el criterio de tal diferenciación es razonable y
objetivo y la intención es lograr un propósito legítimo bajo el Pacto. Para
lograr la igualdad entre el hombre y la mujer, esto se conoce como "medidas
especiales de carácter temporal" (CEDAW, Art. 4, 1er. párrafo), contrario a
33
Según el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el término "discriminación" debería ser
entendido en el sentido de implicar cualquier distinción, exclusión, restricción o preferencia, la cual, basada en
motivos tales como raza, color, sexo, idioma, origen nacional o social, etc, que tenga como propósito o efecto
anular o menoscabar (impairing) el reconocimiento, goce o ejercicio por todas las personas, en un pie de igualdad,
de los derechos y libertades.
34
Este comentario específico del Comité de Derechos Humanos así como otros Comentarios, Obser
vaciones, Recomendaciones e informes emanados de distintos órganos de los sistemas de protección de dere
chos humanos resultan aplicables pues, en tanto "sistema", el de derechos humanos organiza la multiplicidad de
producciones en sus jurisdicciones en torno al principio de norma más favorable. Según este principio, resultará
de aplicación el estándar de protección más alto para la persona.
35
Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la violencia contra la Mujer, en adelante
será referida por el nombre con que se la conoce, "Belem do Pará".
36
Torres Falcón, Marta, "El marco legal de la violencia en México. Avances y desafíos" en Fernández
de Juan, Teresa, Violencia contra la mujer en México, México, 2004, pp. 99-118.
37
Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos desde sus primeros casos: "Velásquez
Rodríguez", sentencia del 29 de julio de 1988, Serie C, n° 4, párrafos 167-68 y 187; "Godínez Cruz", sentencia del
20 de enero de 1989, Serie C, n° 5, párrafos 176-77 y 197, todos citados.
38
Peces-Barba Martínez, Gregorio, Textos básicos de derechos humanos con estudio generales y específi
cos. Comentarios a cada texto nacional e internacional, Aranzadi, Pamplona, 2001, p. 273.
39
Como lo explica el profesor Pérez Luño, "con esa dimensión de universalidad se quería afirmar que la
protección de los derechos humanos y, consiguientemente, su violación no constituían ámbitos reservados a
la soberanía interna de los Estados". PÉREZ LUÑO, Antonio Enrique, La universalidad de los derechos humanos y
el Estado constitucional, Universidad Externado de Colombia, Colombia, 2002, p. 22.
40
Comité de Derechos Humanos, Comentario General #18, "No discriminación", 10/11/1989, párr. 1
41
Corte IDH, Condición Jurídica y Derechos de los Migrantes Indocumentados, Opinión Consultiva OC-18/03
del 17 de septiembre de 2003, Serie A Nº 18, párrafo 83 y 101.
42
Corte IDH, Caso Yatama Vs. Nicaragua. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas, Sentencia
de 23 de junio de 2005, Serie C Nº 127, párrafo 184.
43
Corte IDH, "Propuesta de modificación a la Constitución Política de Costa Rica relacionada con la
naturalización", Opinión Consultiva OC-4/84 del 19 de enero de 1984, Serie A Nº 4.
44
Dicho artículo establece que "las restricciones permitidas, de acuerdo con esta Convención, al goce y
ejercicio de los derechos y libertades reconocidas en la misma, no pueden ser aplicadas sino conforme a las leyes
que se dictaren por razones de interés general y con el propósito para el cual han sido establecidas".
45
Corte IDH, Condición Jurídica..., op. cit., párrafo 84.
46
Ibidem, párrafo 89.
47
Estos dos casos son: (i) cuando la diferenciación sea un instrumento para la protección de aquellos en
situación de debilidad o desvalimiento, esto es, cuando incluso la diferenciación se impone para remediar situa-
ciones de hecho desiguales; (ii) cuando las desigualdades sean limitaciones en el ejercicio de determinados dere-
chos políticos en atención a la nacionalidad o ciudadanía, supuesto que, a nuestros efectos, no resulta de
aplicación a la situación específica de la mujer "por ser mujer".
48
Corte IDH, Propuesta de Modificación..., op. cit.
49
Corte IDH, Condición Jurídica..., op. cit., párrafo 89, énfasis agregado.
50
Corte IDH, "Condición Jurídica y derechos humanos del niño", Opinión Consultiva OC-17/02 de 28 de
agosto de 2002, Serie A Nº 17, párrafo 47.
Un último punto resulta medular para entender cuáles debieran ser estos
"supuestos de hecho sustancialmente iguales" y cómo la no discriminación
ensambla directamente con el derecho a la igualdad.
CDH, Comentario General Nº 15, "La situación de los extranjeros con arreglo al Pacto", 11/04/86,
51
CCPR/C/27.
52
Corte IDH, Condición Jurídica..., op. cit., párrafo 105.
53
Cfr. Carbonell, Miguel, "La igualdad y los derechos humanos" en Carbonell, Miguel (comp.), El principio
constitucional de igualdad, Comisión nacional de Derechos Humanos, México, 2006, pp. 9-30, especialmente p. 16.
54
Por ejemplo, Bayefsky, Anne, "The Principle of Equality or Non-Discrimination in International Law" en
Human Rights Law Journal, Vol. 11, Nº 1-2, 1990, pp. 1-34.
55
Carbonell, Miguel, "La igualdad...", ob. cit., p. 12.
56
Cfr. Ruiz Miguel, Alfonso, "Sobre el concepto de igualdad" en Carbonell, Miguel (comp.), El principio
constitucional..., op. cit., pp. 31-68.
57
Cfr. Saba, Roberto, "Discriminación, trato igual e inclusión" en Abregú, Martín y Courtis, Christian, La
aplicación de los tratados sobre derechos por los tribunales locales, CELS, Buenos Aires, 1997, pp. 561-577.
58
Vid., FUCITO, Felipe, Podrá cambiar la justicia argentina, Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires, 2002.
59
Pinto, Mónica, "Protección internacional de los derechos humanos", disertación, Jornada "Nuevos para-
digmas de la igualdad", Centro de formación Judicial, Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, 25
de junio de 2009.
60
Sen, Amartya, "El derecho a no tener hambre", Estudios de filosofía y derecho, n° 3, Universidad del Exter-
nado de Colombia, Bogotá, 2002.
61
Ibidem, p. 18.
62
Ibidem, p. 19.
63
Ibidem, p. 15.
64
Idem.
Así, la CEDAW abre las obligaciones que impone a los Estados con
el acuerdo de estos de seguir, por todos los medios apropiados y sin dila-
ciones, "una política encaminada a eliminar la discriminación contra la mu-
jer" (art. 2), que se concreta en la obligación de adoptar distintas medidas
"para asegurar el pleno adelanto y desarrollo de la mujer" (art. 3), "modifi-
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
Estos tres elementos (i. obligaciones objetivas; ii. con efectos erga
omnes y iii. de garantía colectiva) abonan no sólo el carácter distintivo de
65
Cançado Trindade, Antonio, El derecho internacional de los Derechos Humanos en el siglo XXI,
Editorial Jurídica de Chile, Chile, 2006, p. 24.
66
Pinto, Mónica, Temas de derechos humanos, Editores del Puerto, Buenos Aires, 1998.
254 En este orden de ideas, no debemos perder de vista que cuando nos
referimos al "Estado", es indistinta la organización territorial –Gobierno fede
ral, provincial o estatal, municipal, etc.– y la organización funcional o división
del ejercicio del poder de la entidad de que se trate.69 Tanto ello es así que
67
Cfr. Bicudo, Helio, Presentación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ante la Comisión
de Asuntos jurídicos y políticos, 19 de octubre de 2000. Disponible en: http://www.cidh.org/Discursos/10.19.00.htm
68
Ventura Robles, Manuel, "La jurisprudencia de la Corte Interamericana en materia de acceso a la
justicia e impunidad" en Taller Regional sobre Democracia, Derechos Humanos y Estado de Derecho, Alto Comisio-
nado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, septiembre de 2005. Disponible en: http://www2.
ohchr.org/spanish/issues/democracy/costarica/docs/PonenciaMVentura.doc [Consultado el 20-06-2010].
69
El art. 28 de la Convención Americana, por ejemplo, declara que "cuando se trate de un Estado constituido
como Estado federal, el gobierno nacional de dicho Estado cumplirá todas las obligaciones de la presente con-
vención relacionadas con las materias sobre las que ejerce jurisdicción legislativa y judicial". En las materias que
competan a las provincias, "el gobierno nacional debe tomar de inmediato las medidas pertinentes a fin de que las
autoridades competentes de dichas entidades puedan adoptar las disposiciones del caso para el cumplimiento
de la convención". ¿Entonces lo que le queda es una obligación de medios de solamente tomar las medidas
pertinentes? En realidad creemos que se trata de una obligación adicional para evitar incumplimientos a la con-
vención, ya que "un Estado federal es una sola persona frente al derecho de gentes" (Barboza, Julio, Derecho
Internacional Público, Zavalía, Buenos Aires, 1999/2003, p. 170). Más aún, la Comisión IDH sostiene que "las unida-
des federativas, en tanto partes del estado federal, se encuentran igualmente vinculados por lo dispuesto en los
tratados internacionales ratificados por este último". Corte IDH, Caso Garibaldi Vs. Brasil, Excepciones Prelimina-
res, Fondo, Reparaciones y Costas, Sentencia de 23 de septiembre de 2009, Serie C Nº 203, párrafo 142.
70
Pinto, Mónica, Temas..., op. cit.
71
Jones-Bos, Reneé, "Poverty is a comprenhesive violation of human rights" en Development Issues, vol. 5,
n° 3, Instituto de Estudios Sociales, Países Bajos, Dic. 2003.
72
Jurisprudencia constante desde "Velázquez Rodríguez": Corte IDH, Caso Velásquez Rodríguez Vs. Honduras.
Fondo, Sentencia de 29 de julio de 1988, Serie C Nº 4, párrafos 167-168.
73
Ibidem, párrafo 68; y tb., Corte IDH, Godínez Cruz..., op. cit., párrafo 71.
74
Corte IDH, Caso Caballero Delgado y Santana Vs. Colombia. Reparaciones y Costas. Sentencia de 29 de
enero de 1997, Serie C Nº 31, voto del Juez A. Cançado Trindade, párrafos 3 y 4.
75
Corte IDH, Caso González y otras ("Campo Algodonero") Vs. México, Excepción Preliminar, Fondo, Repara-
ciones y Costas, Sentencia de 16 de noviembre de 2009, Serie C Nº 205, párrafo 243.
76
Cfr. Medina, Cecilia, "El derecho internacional de los derechos humanos" en Medina, Cecilia y Mera,
Jorge (edits.), Sistema jurídico y derechos humanos. El Derecho nacional y las obligaciones internacionales de Chile en
materia de derechos humanos, Sociedad de Ediciones Universidad Diego Portales, Chile, 1996, pp. 27-84.
77
Corte IDH, Campo algodonero..., op. cit., párrafo 247.
78
Jurisprudencia de la Corte IDH desde sus primeros casos: Velásquez Rodríguez, op. cit., párrafo 187, y
Godínez Cruz, op. cit., párrafo 197.
79
Ibidem, párrafos 172-74 y 181-84, respectivamente. Vid., tb., Corte IDH, caso Gangaram Panday, sentencia
del 21 de enero de 1994, Serie C, n° 16, párrafo 62 entre muchos otros.
80
Corte IDH, Caballero Delgado, Fondo, op. cit., Voto Juez Nieto Navia, párrafo 22.
81
Corte IDH, Campo algodonero, op. cit., párrafo 258.
82
Cfr. Medina, Cecilia, "El derecho internacional..." op. cit., p. 14.
Este deber de investigar implica que una vez que las autoridades es-
tatales tengan conocimiento del hecho, "deben iniciar ex officio y sin dilación,
una investigación seria, imparcial y efectiva por todos los medios legales
disponibles y orientada a la determinación de la verdad y a la persecución,
captura, enjuiciamiento y eventual castigo de todos los autores de los he-
chos, especialmente cuando están o puedan estar involucrados agentes
estatales".86
83
Velazquez Rodríguez, op. cit., párrafo 177.
84
Corte IDH, Caso Garibaldi Vs. Brasil, op. cit., párrafo 113; y tb. Corte IDH, Campo algodonero, op. cit.,
párrafo 289.
85
Véase por ejemplo: Informe Ciudad Juárez, cap. IV; Informe Acceso a la Justicia, párrafo 68.
86
Corte IDH, Caso de la Masacre de Pueblo Bello Vs. Colombia, op. cit., párrafo 143; y tb. Corte IDH, Campo
Algodonero, op. cit., párrafo 290.
87
Corte IDH, Caso de la Masacre de Pueblo Bello Vs. Colombia, op. cit., párrafo 145; y tb. Corte IDH, Campo
algodonero, op. cit., párrafo 291.
88
Corte IDH, Caballero Delgado, op. cit., voto Nieto Navia.
89
Méndez, Juan, "Derecho a la verdad frente a las graves violaciones de derechos humanos", Disponible en:
http://www.aprodeh.org.pe/sem_verdad/documentos/Juan_E_Mendez.pdf [Consultado el 20-06-2010].
tado como una autopercepción, lo cual indica que además debe trabajarse
en la educación del propio reconocimiento como un ser humano con de-
rechos que deben gozarse en igualdad y no discriminación.
90
Según el Comité CEDAW, "la Convención [CEDAW] proscribe las dimensiones discriminatorias de
contextos culturales y sociales pasados y presentes que impiden que la mujer goce de sus derechos humanos…
Su finalidad es la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, incluida la eliminación de las
causas y consecuencias de la desigualdad sustantiva o de facto" (énfasis agregado). Recomendación General Nº
25, op. cit., párrafo 14.
91
Como lo reconoce el Informe Acceso a la Justicia de la CIDH, "el trato discriminador se manifiesta en forma
individual; sin embargo, la fuente del mismo es presumiblemente grupal…la respuesta que se requiere es, entonces, de
tipo estructural" (párrafo 77).
92
Así, el Comité de Derechos Humanos reconoce que "inequality in the enjoyment of rights by women
throughout the World is deeply embedded in tradition, history and culture, including religious attitudes".
Comentario General Nº 28, Inequality of rights between men and women, CCPR/C/21/Rev.1/Add.10, 29 de
marzo de 2000.
93
Informe Acceso a la Justicia, párrafo 77.
94
Art. 5, CEDAW.
95
Art. 7.e, Belem do Pará.
96
Comité CEDAW, Recomendación General Nº 25, op. cit., párrafo 7.
97
Ibidem, párrafo 10.
98
Comité CEDAW, Recomendación General Nº 19, op. cit., párrafo 24.f.
99
CIDH, Informe de Fondo Nº 54/01, María Da Penha Fernandes (Brasil), 16 de abril de 2001, párrafo 56.
100
"Artículo 2: 1. Cada uno de los Estados Partes en el presente Pacto se compromete a adoptar medidas,
tanto por separado como mediante la asistencia y la cooperación internacionales, especialmente económicas y
técnicas, hasta el máximo de los recursos de que disponga, para lograr progresivamente, por todos los medios
apropiados, inclusive en particular la adopción de medidas legislativas, la plena efectividad de los derechos aquí
reconocidos" (énfasis agregado).
101
Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, Observación General Nº 3, La índole de las
obligaciones de los Estados parte, Doc. ONU E/1991/23, 1990, párrafo 7.
Esta adopción de medidas es, por otra parte, obligatoria no sólo bajo
el artículo 2 de la Convención, sino bajo la obligación de prevención. Como
ya hemos señalado, en algunos casos y en virtud de la obligación de garan-
tía, "la estrategia de prevención debe ser integral, es decir, debe prevenir los
factores de riesgo y a la vez fortalecer las instituciones para que puedan
proporcionar una respuesta efectiva a los casos de violencia contra la
mujer".102
Por un lado, porque entre las medidas que debe tomar el Estado para
combatir las causas de la discriminación se encuentran las judiciales. En efec-
to, medidas a las que se refiere la expresión "de otro carácter" y que deben
tomarse para cumplir las grandes dimensiones de las obligaciones estatales
revistadas incluyen a las medidas judiciales.
102
Corte IDH, Campo algodonero, op. cit., párrafo 258.
yoría de estas medidas son cumplidas principalmente por dos vías: la adop-
ción de una legislación y el Poder Judicial. De hecho, si una violación dada
en derechos humanos es reparada, sancionada, etc, por el Poder Judicial del
Estado de que se trate, generalmente esto no llega a los órganos interna-
cionales de protección como una "violación de derechos humanos". El Poder
Judicial viene a ser así la última instancia de protección de derechos.
103
Conferencia impartida en el marco del "Seminario Internacional: armonización legislativa y derechos hu-
manos", llevada a cabo en Guadalajara, México, los días 14 y 15 de abril de 2005. Por su parte, la Comisión Intera
mericana de Derechos Humanos ha destacado la importancia de una administración de justicia eficiente (además
de independiente y autónoma) para el fortalecimiento de la democracia y la vigencia del Estado de Derecho, que
reconoce como escollos, entre otros, (a) las limitaciones presupuestarias, (b) la insuficiencia de recursos, (c) la
falta de modernización, (d) la deficiente capacitación de Jueces y operadores de justicia, (e) las presiones de diversa
índole sobre ellos, (f) la falta de acceso a la justicia por sectores excluidos, (g) la falta de coordinación y colabo-
ración interinstitucional entre los diversos órganos de la administración de justicia (vid., por ejemplo, Informe sobre
Guatemala del año 2003).
104
Gargarella, Roberto, El derecho a la protesta, Ad Hoc, Buenos Aires, 2005.
105
Garro, Alejandro, "El acceso de los pobres a la justicia en América Latina" en Méndez, Juan y otros,
La (in)efectividad de la ley y la exclusión en América Latina, Paidós, Buenos Aires, 2002, pp. 279-304.
106
"En primer lugar, ocurre que el sistema legal en su conjunto ha crecido espectacularmente, abarca más
temas, afecta a más personas, reconoce nuevos derechos, crea nuevas obligaciones y acrece en consecuencia las
funciones de la justicia. En segundo lugar ha surgido una nueva cultura cívica–jurídica de reclamación, afirmación
y defensa de los derechos individuales (unos derechos que no hacen sino desarrollarse y expandirse). En tercer
lugar lo que suele designarse como "judicialización de la vida pública" ha alterado significativamente el tradicional
cambio de acción de los tribunales de justicia, ampliándolo a cuestiones y ámbitos que solían ser "territorio po-
lítico". Finalmente, el reconocimiento de la importancia que una justicia que funcione adecuadamente tiene para
la buena marcha de la vida económica sitúa a los tribunales de justicia en una perspectiva hasta ahora inédita, al
tiempo que refuerza su relevancia social". Toharia, Juan José, "Opinión pública y justicia. La imagen de la justicia
en la sociedad española", CGPJ, 2001, p. 19.
107
Correa Sutil, Jorge, "Reformas judiciales en América Latina: ¿buenas noticias para los desfavorecidos?"
en Méndez, Juan y otros, La (in)efectividad de la ley..., op. cit., pp. 257-278.
V. Conclusiones:
108
Cfr. Nagel,Thomas, "Los derechos personales y el espacio público" en Democracia deliberativa y derechos
humanos, traducción de Paola Beragallo y Marcelo Alegre, Gedisa, Barcelona, 2004, p. 50.
• Las pruebas no deben ser evaluadas con los cánones legales tradi
cionales, a efecto de no hacer recaer en la parte más débil –pero
normalmente la "actora"– toda la carga de la prueba. A tales efectos,
debe tenerse en cuenta "el conjunto de evidencias y el contexto",109
la cultura de la víctima, así como las informaciones y estadísticas dis-
ponibles que apoyen la verosimilitud de la denuncia.
109
Informe Acceso a la Justicia, párrafo 51.
110
Para estos casos, no puede válidamente argumentarse sencillamente la improcedencia de las propuestas
con base en cuestiones presupuestarias del Estado. Todo el sistema de derechos humanos está enderezado a la
protección de la persona humana, más aún cuando ésta es víctima y en segundo lugar, para que no lo sea. No pueden
anteponerse las "necesidades estatales" a la protección de la persona, sobre todo cuando el deber del Estado de
organizar todas las estructuras para garantizar y prevenir es de larga data. Este es, por demás, el contenido de la
"progresividad" que caracteriza a las cuestiones presupuestarias: no implica que ciertas medidas necesarias pue-
dan no adoptarse por razones de presupuesto, sino que debe garantizarse al menos un mínimo que irá desarro-
llándose progresivamente. Lo que imponen los derechos humanos, en este sentido, es una clara disposición sobre
las prioridades presupuestarias. Cuando los recursos económicos internos, asignados con base en prioridades, no
sean suficientes, debe recurrirse a la cooperación internacional, sobre todo considerando que los derechos huma
nos configuran una garantía colectiva y una obligación erga omnes.
111
Informe Acceso a la Justicia, Resumen Ejecutivo, párrafo 19.
112
Informe Acceso a la Justicia, párrafo 57.
113
Corte IDH, caso Heliodoro Portugal vs. Panamá, Excepciones preliminares, fondo, reparaciones y costas,
Sentencia del 12 de agosto de 2008, Serie C, Nº 186, párrafo 180.
114
Cfr. Abramovich,Víctor, "Líneas de trabajo en derechos económicos, sociales y culturales: herramientas
y aliados" en Revista de Derechos Humanos Sur, Año 2, n. 2, San Pablo, 2005, pp. 195-232, especialmente p. 213.
También disponible en www.surjournal.org.
115
Vid., por ejemplo, Diario Página 12 del día 16/08/05, pp. 16-17.
116
Cfr. Abramovich, Víctor, "Líneas de trabajo...", op. cit., pp. 214-215.
117
CSJN, Verbitsky, Horacio, 2005-05-03, Suplemento La Ley, Revista Abogados del CPACF, n° 45, Septiembre-
Octubre 2005, Buenos Aires, pp. 28-62. El planteo desde la defensa colectiva del derecho de los detenidos es
interesante pues, dada la situación de hacinamiento y superpoblación del sistema, explica la accionante que
"el intento de resolución individual se veía frustrado porque... afectaba necesariamente la situación de las demás
personas que la padecían... generando además evidentes problemas de igualdad" de esta manera la orden al
Poder Ejecutivo para que resuelva el problema provendría de un único órgano judicial. Ibidem, Dictamen del
Procurador, considerando II, párrafo 6.
118
En particular, dispone (i) que la Suprema Corte de Justicia de la Prov. De Buenos Aires haga cesar en el
término de 60 días la detención en comisarías de menores y enfermos; (ii) instruir a la misma corte y a los tribu
nales de todas las instancias para que en sus respectivas competencias hagan cesar, con la urgencia del caso, la
situación de agravamiento de la detención o cualquier otro trato susceptible de acarrear la responsabilidad
internacional al Estado federal; (iii) ordenar al Poder Ejecutivo provincial la elaboración de un informe en el que
se detallen las condiciones concretas de detención, a los Jueces competentes a fin de que éstos puedan ponderar
la necesidad de mantener la detención o dispongan otras medidas; (iv) informar a la Corte las medidas adoptadas
y (v) exhortar a los otros poderes a modificar la legislación en materia de prisión preventiva.
119
En este caso, la Corte argentina sostuvo que: "El estado nacional no puede desentenderse de la obligación
de preservar el derecho a la vida y a la salud de los menores, asumida ante la comunidad internacional en tra
tados que tienen jerarquía constitucional, so pretexto de la inactividad de otras instituciones públicas o privadas,
pues es el encargado de velar por el fiel cumplimiento de tales derechos y de asegurar la continuidad de los
tratamientos que necesiten" (CSJN, "Monteresin, Marcelino", oct. 16-2001, párrafo 13).
decisiones.
120
Ver al respecto la opinión vertida por el Juez S. García Ramírez en su voto razonado de la sentencia en el
caso Tibi (Corte Interamericana de Derechos Humanos).
Este trabajo obtuvo el tercer lugar del Segundo Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición de
*
2010. Se presentó con el seudónimo de Gertrudis Bocanegra como un homenaje a una de las heroínas de la
Guerra de Independencia de México. Tan importante en la lucha armada, tan olvidada en los libros de historia.
I. Introducción 277
1
Por operadores jurídicos entenderemos a los encargados de realizar interpretación y aplicación del dere-
cho, en ejercicio de sus funciones, generalmente esta categoría hace referencia a todo agente de poder. Sagües,
Néstor, Teoría de la Constitución, Astrea, Argentina, 2001, pp. 148-149.
2
La deconstrucción puede ser entendida como una "demolición" de las estructuras sobre las cuales se cons
truye una teoría y de ahí volver a pensar al derecho, a construir nuevamente la estructura, pero no con elementos
tradicionales, sino que, en el caso de nuestra propuesta, a través del género. Sobre el concepto de deconstruc-
ción, Cfr. Kennedy, Duncan, Libertad y restricción en la decisión judicial, Ediciones Uniandes, Bogotá, 1986, p. 47.
3
Cfr. Diccionario práctico Español-Inglés, Larousse, México, 1989, p. 404.
4
Cfr. Real Academia Española, "Voz género" Diccionario de la Lengua Española, Espasa, 20ª edición, Madrid,
1984, pp. 685-686.
5
Lamas, Marta, Cuerpo: diferencia sexual y género, Taurus, México, 2002, p. 134.
6
West Candace y Zimmerman, Don, "Haciendo género" en Navarro, Marysa y Stimpson, Catherine,
Sexualidad, género y roles sexuales, Fondo de Cultura Económica, México, 1999, p. 128.
son definidos uno en relación con el otro; de manera que una mujer bajo dis-
tintos ámbitos relacionales, puede ser vista como madre, hija, hermana,
cónyuge, amiga, maestra, etc. Sin duda alguna, una de las principales apor-
taciones de los estudios de género, es aceptar que no se puede entender a
mujeres y hombres a través de estudios completamente separados.
7
Cfr. Serret, Estela, El género y lo simbólico. La constitución imaginaria de la identidad femenina, UAM
Azcapotzalco, México, 2001, p. 91.
281
Entendida la categoría de género, procedamos a analizar el signifi
cado de la palabra "perspectiva". La Real Academia Española, refiere que
dicho concepto proviene del latín tardío perspectˉıva [ars], que significa
"óptica". Para efectos de nuestro estudio, nos interesa el significado que
hace referencia al "conjunto de objetos que desde un punto determinado
se presentan a la vista del espectador, especialmente cuando están leja-
nos…visión, considerada en principio más ajustada a la realidad, que viene
favorecida por la observación ya distante, espacial o temporalmente de
cualquier hecho o fenómeno".11
8
Cfr. Scott, Joan, "El género: una categoría útil para el análisis histórico" en Navarro, Marysa y Stimpson,
Catherine, Sexualidad, género..., op. cit., p. 61.
9
Cfr. Conway, Jill, Bourque, Susan y Scott, Joan, "El concepto de género" en Lamas, Martha (comp.),
El género: la construcción cultural de la diferencia sexual, Miguel Ángel Porrúa, México, 1996, p. 32.
10
Bargel, Lucie, Fassin, Eric y Lattém, Stéphane, "Usos sociológicos y usos sociales del género. El trabajo
de las interpretaciones" en Fassin, Eric, Género, sexualidades y política democrática, PUEG-Colegio de México-
UNAM, México, 2009, p. 47.
11
Real Academia Española, "Voz perspectiva", Diccionario de la Lengua Española, op. cit., pp. 1049-1050.
12
Idem.
13
Cfr. Aristóteles, Tratados de Lógica (Organón), Tomo II, Trad. Miguel Candel Sanmartín, Gredos, Madrid,
1998, pp. 25-81.
14
Cfr. Nietzsche, Friedrich, "Sobre verdad y mentira en sentido extramoral", p. 9, disponible en: http://www.edu.
mec.gub.uy/biblioteca%20digital/libros/N/Nietzsche%20-%20Sobre%20verdad%20y%20mentira%20en%20
sentido%20ex.pdf (consultado el 5 de julio de 2010).
15
Cfr. Olivecrona, Karl, Lenguaje jurídico y realidad, Fontamara, Argentina, 2007, p. 47.
16
Utilizamos el término ideología para referirnos al conjunto de creencias, en cuanto no tienen otra validez
que la de expresar una determinada fase de las relaciones económicas y, por lo tanto, de servir a la defensa de
los intereses que prevalecen en cada fase de la historia. Cfr. Abbagnano, Nicola, Diccionario de filosofía, 2ª ed.,
5ª reimpr., Fondo de Cultura Económica, México,1987, p. 645.
17
Cfr. Facio Montejo, Alda, Cuando el género suena, cambios trae, (una metodología para el análisis de
género del fenómeno legal), ILANUD, Costa Rica, 1992, p. 42.
18
Cfr. Amorós, Celia, Hacia una crítica de la razón patriarcal, 2ª ed., Anthropos, España, 1991, p. 25.
el Código Civil del Estado de México, en cuyo artículo 4.18, se reconoce expre
samente el valor económico del trabajo doméstico,19 como una aportación
económica dentro del matrimonio, que permite a la mujer o al hombre, el
derecho de conservar hasta el 50% del patrimonio que haya constituido
su cónyuge, y recibir alimentos en caso de divorcio, aunque el matrimonio se
haya celebrado bajo el régimen de separación de bienes. En ese contexto,
se ha observado que en 25 códigos civiles de la República Mexicana, no se
286 asignan responsabilidades iguales a los cónyuges; ocho, exigen el consen
timiento del marido para que la mujer trabaje; siete, obligan a ésta a vivir
donde aquél decida y todos hacen recaer solamente en la madre la obliga-
ción de registrar a los hijos nacidos fuera del matrimonio.20
19
Cfr. Artículo 4.18 del Código Civil del Estado de México.
20
Cfr. Coloquio Nacional sobre el Análisis de la aplicación del Protocolo Facultativo de la Convención sobre la
Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer CEDAW, Memoria, Instituto Nacional de las
Mujeres, México, 2002, p. 13.
21
Cfr. Contradicción de Tesis 5/92, entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Tercero del
Sexto Circuito, del que derivaron diversos criterios de jurisprudencia, dentro de ellos, el localizado en Octava
Época, Primera Sala, Semanario Judicial de la Federación, Tomo XIII, Mayo de 1994, p. 63, cuyo rubro refiere: "EJER
CICIO INDEBIDO DE UN DERECHO Y NO DE VIOLACIÓN, DELITO DE".
22
Cfr. Varios 9/2005-PS. Solicitud de modificación a la tesis de jurisprudencia 1a./J. 10/94, derivada de la
contradicción de tesis 5/92, entre las sustentadas por los Tribunales Colegiados Primero y Tercero del Sexto
Circuito. Solicitante: Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Segundo Circuito. 16 de noviembre de
2005. Cinco votos. Ponente: Olga Sánchez Cordero de García Villegas. Secretaria: Ana Carolina Cienfuegos Posada.
Uno de los pilares sobre los cuales se cimentó la Modernidad fue la idea de
que a través de la Ilustración, el hombre podía alcanzar su mayoría de edad,23
es decir, debía servirse de su propio entendimiento para ser libre; así, se
construyó como categoría fundamental a la razón, que sería la encargada
de diseñar al mundo y, en consecuencia, al derecho, al cual se le asignó como
289
característica fundamental el universalismo y la abstracción, para concretar
aspiraciones como la igualdad y la libertad.
23
Cfr. Kant, Immanuel, ¿Qué es la Ilustración?, versión electrónica disponible en: http://www.paginasobrefilosofia.
com/html/kantpre/textoIlustracion.html (consultado el 30 de julio de 2010).
24
Cfr. Marramao, Giacomo, "Paradojas del universalismo" en Revista Internacional de Filosofía Política, Nº 1,
Madrid, 1993, p. 8, disponible en: http://e-spacio.uned.es/fez/eserv.php?pid=bibliuned:filopoli-1993-1-4E344283-
F06B-A7C9-70FB-24614C7D0E86&24614C7D0E86&dsID=paradojas_universalismo.pdf (consultado el 5 de agosto
de 2010).
advierte esta filósofa, porque lleva a una abstracción de las diferencias, que
reduce al individuo a no ser más que un "ejemplar de una especie animal
llamada hombre".27 Por ello, Arendt sugiere evitar las trampas del humanis-
mo abstracto, porque descuida las particularidades inherentes a los diver-
sos grupos de una misma sociedad, solo siendo miembros de una comunidad
política y participando en la vida de ésta, es que los seres humanos ven
reconocida y preservada efectivamente su dignidad.
290
Tanto el universalismo como la abstracción han sido criticados por la
perspectiva de género, como una forma de invisibilizar a las mujeres, ya que
de manera reiterada se habla del hombre (como un concepto universal y
abstracto) sin utilizar referencia alguna a la mujer a través del lenguaje; tam-
bién se neutraliza el ejercicio de los derechos de las mujeres, ya que se cons
truyen normas jurídicas "universales y abstractas" que no dan cuenta de las
condiciones de vida específicas para hombres y mujeres.
25
Idem.
26
Renaut, Alain y Sosoe, Lukas, "H. Arendt y la idea del derecho moderno" en Dikaiosyne, Nº II, Revista
de filosofía práctica de la Universidad de los Andes, Mérida-Venezuela, Diciembre 2003, p. 143, disponible en: http://
www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/19058/2/articulo10.pdf (consultado el 5 de agosto de 2010).
27
Idem.
28
Cfr. Nicolás Lazo, Gemma, "Debates en epistemología feminista: del empiricismo y el standpoint a las
críticas posmodernas sobre el sujeto y el punto de vista" en Nicolás, Gemma y Bodelón, Encarna, Género
y dominación. Críticas feministas del derecho y el poder, Anthropos, Barcelona, 2009, p. 55.
29
MacKinnon, Catharine A., "Diferencia y dominio: sobre la discriminación sexual" en Navarro, Marysa
y Stimpson, Catherine, Sexualidad, género y..., op. cit., p. 78.
los hombres y darle una protección especial, en ciertos casos, pero esto es
insuficiente. Por lo que la pretensión de la perspectiva de género es alcan-
zar una igualdad material, la cual exige considerar tanto a hombres como a
mujeres iguales en el goce de los derechos humanos que cada cual nece
site,30 no se trata sólo de dar a cada sexo un tratamiento exactamente igual,
lo importante es reconocer las diferencias entre ellos, situarlos contextual-
mente y, sobre todo, garantizar la protección y ejercicio de sus derechos.
292
5. Uso del lenguaje no sexista
30
Cfr. Facio Montejo, Alda, Cuando el género suena..., op. cit., p. 20.
31
Cfr. Bengoechea Bartolomé, Mercedes, El lenguaje instrumento de igualdad, pp. 6-7, disponible en
http://www.fongdcam.org/manuales/genero/datos/docs/1_ARTICULOS_Y_DOCUMENTOS_DE_REFERENCIA/H_
USO_NO_SEXISTA_DE_LA_LENGUA/El_lenguaje_instrumento_de_igualdad.pdf (consultado el 10 de agosto
de 2010).
32
Sobre algunas formas para evitar el uso del lenguaje no sexista, Cfr. CONAPRED, 10 recomendaciones para
el uso no sexista del lenguaje, 2ª ed., Textos del Caracol, Núm. 1, México, 2009, pp. 11 y ss.
33
Cfr. "Declaración de Beijing", Anexo I, Nº 38 en Informe de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer,
Beijing, 4 a 15 de septiembre de 1995, Naciones Unidas, Nueva York, 1996, p. 5.
(…)
294 Perspectiva de género. Es una visión científica, analítica y política sobre las
mujeres y los hombres. Se propone eliminar las causas de opresión de gé-
nero como la desigualdad, la injusticia y la jerarquización de las personas
basadas en el género. Promueve la igualdad entre los géneros a través de la
equidad, el adelanto y el bienestar de las mujeres; contribuye a construir
una sociedad en donde las mujeres y los hombres tengan el mismo valor, la
igualdad de derechos y oportunidades para acceder a los recursos econó-
micos y a la representación política y social en los ámbitos de toma de
decisiones;35
34
Conclusiones convenidas 1997/2 del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas, disponible en http://
www.un.org/womenwatch/osagi/pdf/ECOSOCAC1997.2.PDF (consultado el 12 de agosto de 2010). El destacado
es nuestro.
35
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, publicada en la Primera Sección del Diario
Oficial de la Federación el 1 de febrero de 2007.
36
Bartra, Eli (comp.), Debates en torno a una metodología feminista, 2ª edición, Programa Universitario de
Estudios de Género, Universidad Nacional Autónoma de México, México, 2002, pp. 128-129.
37
Cfr. La incorporación de la perspectiva de género. Una visión general. Organización de las Naciones Unidas,
Nueva York, 2002, pp. 3-5.
38
Cfr. Ferrajoli, Luigi, "Sobre los derechos fundamentales" en Carbonell, Miguel (Ed.), Teoría del neo
constitucionalismo, Trotta/ Instituto de Investigaciones Jurídicas-UNAM, Madrid, 2007, p. 79 y ss.
39
Desde nuestra perspectiva, para evitar el uso de un lenguaje sexista, la expresión correcta debió ser "toda
persona".
40
Hay quienes sostienen que las acciones afirmativas vulneran el principio de igualdad y es que, no obstante
que impliquen un trato diferenciado en relación con los hombres, su existencia se justifica porque buscan generar
una igualdad no sólo formal sino también material, entre hombres y mujeres, por eso la necesidad de que sean
sólo de carácter temporal; en este sentido, se ha adoptado en el artículo 4º de la Convención para la Eliminación
de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, el siguiente compromiso internacional: "1. La adopción por
los Estados Partes de medidas especiales de carácter temporal, encaminadas a acelerar la igualdad de facto entre
el hombre y la mujer, no se considerará discriminación en la forma definida en la presente Convención, pero de
ningún modo entrañará, como consecuencia, el mantenimiento de normas desiguales o separadas; estas medidas
cesarán cuando se hayan alcanzado los objetivos de igualdad de oportunidad y trato". Compromiso reiterado a
través de la Recomendación General Nº 5, del Séptimo Periodo de Sesiones de 1988, del Comité para la
Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, Cfr. Compilación de los principales instrumentos internacionales
sobre derechos humanos de las mujeres, 4ª ed., INMUJERES, México, 2008, p. 24.
41
Cfr. Convención Americana de Derechos Humanos, aprobada por el Senado el 18 de diciembre de 1980 y
publicada en el Diario Oficial de la Federación el 7 de mayo de 1981.
2. Principio de no discriminación
299
Jesús Rodríguez Zepeda refiere que, el principio de no discriminación, es el
derecho de toda persona a ser tratada de manera homogénea, sin exclu-
sión, distinción o restricción arbitraria, de modo que le sea posible el ejer-
cicio de sus derechos y libertades fundamentales y el libre acceso a las
oportunidades socialmente disponibles.43
42
Cfr. Acuerdo General de la Comisión de Administración que contiene los criterios para conceder licencias de
maternidad y paternidad al personal del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, principalmente los ar-
tículos 4º, 6º y 7º, disponible en http://www.trife.org.mx/secretaria_general/acuerdos/superior/archivos/Acuerdo_
Maternidad.pdf (consultado el 20 de agosto de 2010).
43
Cfr. Rodríguez Zepeda, Jesús, "Una idea teórica de la no discriminación" en Torres Martínez,
Carlos de la, (Coord.), Derecho a la no discriminación, Instituto de Investigaciones Jurídicas, México, 2006, p. 45.
sada en el sexo que tenga por objeto o por resultado menoscabar o anular
el reconocimiento, goce o ejercicio por la mujer, independientemente de su
estado civil, sobre la base de la igualdad del hombre y la mujer, de los dere-
chos humanos y las libertades fundamentales en las esferas política, econó-
mica, social, cultural y civil o en cualquier otra esfera.
44
Este ordenamiento jurídico fue publicado en el Diario Oficial de la Federación, el 11 de junio de 2003.
45
Por ejemplo, el Código Penal para el Estado de Aguascalientes refiere en el artículo 23 que: "El estupro
consiste en realizar cópula con mujer casta, mayor de doce y menor de dieciséis años de edad, obteniendo su con
sentimiento por medio de seducción o engaño"; de forma similar se precisa la calidad específica del sujeto pasivo
como "mujer casta y honesta," en los códigos penales del Estado de Baja California (Art. 182), Estado de México
(Art. 271), Nayarit (Art. 258), Querétaro (Art. 167), Sinaloa (Art. 184), Sonora (Art. 215) y Veracruz (Art. 185).
46
Tesis: VI.4o.21 P, Tesis Aislada, Materia(s): Penal; Localización: Novena Época, Instancia:Tribunales Colegiados
de Circuito, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, IX, Abril de 1999, Página: 539, Registro No.
194207. El destacado es nuestro.
47
Cfr. Taylor, Charles, El multiculturalismo y la política del reconocimiento, Fondo de Cultura Económica,
México, 2001, p. 46.
48
Citado por Martínez Roaro, Ester, Sexualidad, derecho y cristinianismo. Visión bioética desde una
perspectiva de género, 2ª edición, Instituto Cultural de Aguascalientes, México, 1998, p. 212.
49
La Carta de las Naciones Unidas, en su nota introductoria, reafirma la fe en los derechos fundamentales
del hombre, en la dignidad y el valor de la persona y en la igualdad de derechos del hombre y la mujer; la Decla-
ración Universal de los Derechos Humanos reconoce que los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad
(Art. 1º); la Convención Americana de los Derechos Humanos consagra el derecho de toda persona al respeto
de su honra y al reconocimiento de su dignidad (Art. 11); la CEDAW protege el derecho de la mujer a que se
respete la dignidad inherente a su persona (Art. 4), entre otros.
50
El tercer párrafo del artículo 1º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos prohíbe
cualquier tipo de discriminación que atente contra la dignidad humana; la Ley de Acceso de las Mujeres a una
Vida Libre de Violencia reconoce dentro de sus principios rectores, el respeto a la dignidad humana de las muje-
res (Art. 4).
to" puede abarcar cuestiones muy amplias, sí otorga por lo menos una guía
importante para determinar aquello que no debe considerarse digno.
V. Análisis caso
"Campo algodonero"
51
Cfr. Von Münch, Ingo, "La dignidad del hombre en el derecho constitucional", Revista Española de
Derecho Constitucional, Año 2, n. 5, mayo-agosto, 1982, p. 19, disponible en http://www.cepc.es/rap/Publicaciones/
Revistas/6/REDC_005_009.pdf (consultado el 27 de agosto de 2010).
52
Cfr. Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso González y otras vs. México, sentencia de 16 de no
viembre de 2009, consultado el 30 de agosto de 2010 en http://www.equidad.scjn.gob.mx/IMG/pdf/Sentencia_
Campo_Algodonero.pdf
53
Dentro de las cuales se encuentran, entre otras: la Recomendación 44/1998 emitida por la Comisión
Nacional de Derechos Humanos, el 15 de mayo de 1998; el Informe de la misión de la Relatora Especial sobre
las ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, Naciones Unidas, E/CN.4/2000/3, Add.3, de 25 de noviembre
de 1999; el Informe de la Misión del Relator Especial sobre la Independencia de Magistrados y Abogados,
E/CN.4/2002/72/Ad.1, Naciones Unidas, emitido el 24 de enero de 2002; el Informe de México producido por
el CEDAW bajo el artículo 8º del Protocolo Facultativo de la Convención y la respuesta del Gobierno de
México.
54
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso González y otras vs. México, op. cit., p. 38.
55
"Estos factores, aunque a la larga permitan a las mujeres superar la discriminación estructural, pueden
exacerbar la violencia y el sufrimiento a corto plazo…La incapacidad de los hombres para desempeñar su papel
tradicionalmente machista de proveedores de sustento conduce al abandono familiar, la inestabilidad en las
relaciones o al alcoholismo, lo que a su vez hace más probable que se recurra a la violencia…" Ibidem, p. 41.
A través del desahogo de las pruebas, la Corte determinó que no era posi
ble acreditar que las autoridades mexicanas tuvieron demoras en el inicio
de las investigaciones sobre la desaparición de las víctimas, sin embargo,
consideró que tampoco habían quedado acreditadas las gestiones concre-
tas (ya no sólo formales) que hubiere realizado para demostrar que buscó
efectivamente a las víctimas.
56
La Corte fue muy cuidadosa en el uso de los términos y aclaró que no era posible determinar para este
caso, la existencia de feminicidios, más bien por cuestiones técnicas, debido a que la Comisión no calificó a los
hechos acontecidos en Juárez como tales, motivo por el cual, la Corte prefirió referirse a ellos como "homicidios de
mujer por razones de género", caracterizados por ser privaciones de la vida a mujeres, por el solo hecho de serlo,
aunque, debemos tener muy claro que no todo homicidio cometido contra una mujer, necesariamente, es por
cuestiones de género. Cfr. Ibidem, párrafo 137 y ss.
57
Cfr. Ibidem, p. 48.
peritajes efectuados a los cuerpos de las víctimas, pues si bien, dichas peri-
ciales concluyeron que las jóvenes presentaban muestras de haber sufrido
graves agresiones físicas antes de su muerte, y aún cuando refirieron la
posible existencia de un móvil sexual, no realizaron debidamente las inves-
tigaciones para profundizar y comprobar este hecho, es más, ni siquiera se
efectuaron las diligencias debidas para determinar la identidad de algunas
de las víctimas y aún así se procedió indebidamente a la entrega de los
restos a los familiares.
310
VI. Conclusiones
Sabemos que las y los operadores del derecho tienen un alto margen
de restricción determinado por los hechos probados y el marco jurídico
aplicable; no obstante, ello no constituye un impedimento para la aplicación
de la perspectiva de género, en principio, porque ya forma parte de los
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
Bibliografía
Facio Montejo, Alda, Cuando el género suena, cambios trae (una metodo
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
Diccionarios
Renaut, Alain y Sosoe, Lukas, "H. Arendt y la idea del derecho moderno"
en Dikaiosyne, n. II, Revista de filosofía práctica de la Universidad de
los Andes, Mérida-Venezuela, Diciembre 2003, p. 143, consultado en
http://www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/19058/2/articulo10.pdf
Legislación
317
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Contradicción de Tesis 5/92, entre las sustentadas por los Tribunales Colegia
dos Primero y Tercero del Sexto Circuito, del que derivaron diversos
criterios de jurisprudencia, dentro del ellos, el localizado en Octava
Este trabajo obtuvo el primer lugar del Tercer Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición
*
de 2011.
1
Cobo Bedia, Rosa, "Género" en Amorós, Celia (dir.), 10 palabras clave sobre mujer, Estella,Verbo Divino,
1995, pp. 55-84.
Este "deber ser" conlleva la suposición de que las mujeres son inferio
res que los hombres y que por tal motivo se encuentran impedidas para
desempeñar determinadas actividades u ocupar ciertos espacios. Este mito de
la supuesta supremacía de los hombres y de lo masculino, ha quedado des-
montado debido a que se ha demostrado que el lugar de hombres y muje
res en la estructura social depende de la organización social y cultural, y no
de las supuestas diferencias biológicas.4 En este sentido, basta con observar
las diversas formas de ser mujer que se han desempeñado a lo largo de la
322 historia (que nos muestran ejemplos de mujeres transgresoras que han
realizado actividades, tenido habilidades y ocupado espacios considerados
"naturalmente" masculinos), para establecer que son las sociedades las que
determinan las actividades de las mujeres y de los hombres basadas en los
estereotipos de género, es decir, que el lugar de las mujeres y de los hom-
bres en la sociedad atiende a una construcción social y no a algo "natural".5
2
Como establece Carmen Sáez Buenaventura: "la socialización como el proceso minucioso, constante y
complejo mediante el que somos entrenados para participar en sociedad a lo largo de toda nuestra vida y du-
rante el cual también nosotras/os somos agentes socializadores de manera continuada, minuciosa y compleja de
los demás". Sáez Buenaventura, Carmen, "Violencia y proceso de socialización genérica: enajenación y
transgresión, dos alternativas extremas para las mujeres" en Maquieira, Virginia y Sánchez, Cristina (comp.),
Violencia y sociedad patriarcal, Pablo Iglesias, Madrid, p. 6.
3
En este sentido, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha declarado que los familiares de las
víctimas de violaciones de los derechos humanos pueden ser, a su vez, víctimas. Cfr. Sentencia del Caso González
y Otras ("Campo Algodonero") Vs. México de 16 de noviembre de 2009 (Excepción preliminar, fondo, reparacio
nes y costas), Corte Interamericana de Derechos Humanos, párrafo 415, p. 105.
4
Cfr. Maquieira, Virginia, "Género, diferencia y desigualdad" en Beltrán, Elena y Maquieira, Virginia
(eds.), Feminismos. Debates teóricos contemporáneos, Alianza Editorial, Madrid, p. 161.
5
Instituto Nacional de las Mujeres, "El impacto de los estereotipos y los roles de género en México", Boletín
estadístico, México, agosto, 2007, p. 1. Disponible en http://cedoc.inmujeres.gob.mx/documentos_download/
100893.pdf (consultado el 14 de noviembre de 2011).
6
Miguel Álvarez, Ana de, "El legado de Simone de Beauvoir en la genealogía feminista: la fuerza de los
proyectos frente a ‘La fuerza de las cosas’", Investigaciones Feministas, vol. 0, Universidad Complutense de Madrid,
p. 125.
7
Cfr. Maquieira, Virginia, "Género, diferencia…", op. cit., p. 151.
8
Cfr. Ibidem, pp. 149 y 151.
9
Cfr. Miguel Álvarez, Ana de, "El legado…", op. cit., p. 131.
II. Estereotipos
de género
10
Cano Gestoso, José I., Los estereotipos sociales: el proceso de perpetuación a través de la memoria selec
tiva, Tesis Doctoral, Facultad de Sociología, Departamento de Psicología Social, Universidad Complutense de
Madrid, p. 2.
11
Cfr. Ibidem, p. 18.
12
Citados por Ibidem, p. 141.
13
Maquieira, Virginia, "Género, diferencia…", op. cit., p. 168.
14
Cano Gestoso, José I., Los estereotipos sociales…, op. cit., p. 83.
15
Casco, Beatriz, Eliminación de estereotipos y mitos en la realización de las tareas domésticas. Un aprendizaje
para la conciliación, Manuales, Albelia Consultora, Área de Gobierno de Empleo y Servicios a la Ciudadanía,
Dirección General de Igualdad de Oportunidades, Madrid, 2005, p. 35.
16
Martín Casares, Aurelia, Antropología de género. Cultura, mitos y estereotipos sexuales, Feminismos,
Madrid, 2006, p. 52.
17
Cfr. Lamas, Marta, "La antropología feminista y la categoría género" en Cuerpo: diferencia sexual y género,
Taurus, México, 2002, p. 33.
18
Cfr. Bosch, Esperanza, Ferrer, Victoria A. y Alzamora, Aina, El laberinto patriarcal. Reflexiones teórico-
prácticas sobre la violencia contra las mujeres, Anthropos, Barcelona, 2006, p. 41.
19
Cfr. García-Mina Freire, Ana, Desarrollo del género en la feminidad y la masculinidad, Narcea, Madrid,
2003, p. 122.
20
Cfr. Nash, Mary, "Identidades de género, mecanismos de subalternidad y procesos de emancipación feme
nina", REVISTA CIDOB D´AFERS INTERNACIONALS 73-74, Lo intercultural en acción, identidades y emancipaciones,
mayo-junio, Fundación CIDOB, Barcelona, 2006, p. 43.
Ellos Ellas
Actividad e iniciativa Pasividad
Fuerza Dulzura
Ambición y competitividad Abnegación
Agresividad Templanza y calma
Contención y / o represión de las emociones Explosión emotiva
Sujetos de derechos Objetos –de deseo-
Ocupación preeminente del espacio público Ocupación preeminente del espacio privado
Asertividad Obediencia
Cfr. Lagarde, Marcela, Género y feminismo. Desarrollo humano y democracia, Cuadernos Inacabados 25,
22
23
Cfr. Lagarde, Marcela, "Peritaje de la Dra. Marcela Lagarde y de los Ríos" en Sentencia de la Corte Intera
mericana de Derechos Humanos Peritaje del Caso Campo Algodonero vs. México, Serie por la Vida y la Libertad de
las Mujeres, Red de Investigadoras por la Vida y la Libertad de las Mujeres A.C., México, 2010, p. 21.
24
Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), Asamblea
General de Naciones Unidas, adoptada el 18 de diciembre 1979, artículo 1.
25
Cfr. Toledo Vásquez, Patsilí, Feminicidio, Consultoría para la Oficina en México del Alto Comisionado
de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), México, 2009, p. 37.
26
Idem.
27
CEDAW, artículo 4, inciso j).
colectivo sobre qué rol deben desempeñar los hombres y las mujeres en la
sociedad, impidiendo la participación de las mujeres fuera del ámbito pri-
vado y en las esferas de decisión.
28
CEDAW, párrafo 14.
29
Ibidem, artículo 5, inciso a).
30
Ibidem, artículo 10, inciso c).
31
Cfr. Lagarde, Marcela, "El derecho humano de las mujeres a una vida libre de violencia", apuntes otorga-
dos por la Doctora como parte de las clases Articulación académica y política de los derechos humanos de las
mujeres. El derecho de las mujeres a una vida libre de violencia, impartidas dentro de la asignatura "Género, dere-
chos humanos y globalización" los días 26-29 de abril de 2011 dentro del Máster en Estudios Interdisciplinares
de Género de la Universidad Autónoma de Madrid – Instituto Universitario de Estudios de la Mujer, año acadé-
mico 2010-2011, p. 31.
32
Convención Belém do Pará, artículo 6.
33
Ibidem, artículo 8, inciso b).
34
Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres, artículo 17, VI.
35
Ibidem, artículo 26, III.
Por otro lado, la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre
36
Ibidem, artículos 41 y 41.
37
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, artículo 8, II.
334 Es relevante indicar, que durante el 2008 y hasta el 2011 se han llevado
a cabo en el Distrito Federal diversas reformas legales trascendentales so-
bre los derechos de las mujeres y para la igualdad de derechos de las per-
sonas históricamente discriminadas por sus preferencias sexuales. En el año
2008, la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró la constitucionali-
dad de la despenalización de la interrupción del embarazo antes de las
doce semanas de gestación, aprobada por la Asamblea Legislativa del Dis-
trito Federal. En 2009, la Asamblea del D.F., aprobó y reconoció el matrimo-
nio entre las personas del mismo sexo y en 2010, la Suprema Corte de
Justicia de la Nación declaró la constitucionalidad de las reformas que per-
miten la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo en el
Distrito Federal.
38
Ibidem, artículo 17, I.
39
Ibidem, artículo 45, XII.
40
Ibidem, artículo 52, VII.
41
Karla Micheel Salas Ramírez, abogada especialista en la materia, indicó que en el caso del Estado de México
y de Guanajuato la aprobación del feminicidio como tipo penal se realizó de tal manera que es casi imposible
acreditarlo, aunado a lo anterior, estos estados no incluyen un protocolo de investigación llevando a que la tipi-
ficación realizada en ambos no sea integral. Declaraciones hechas por Karla Micheel Salas Ramírez en Torres
Ruiz, Gladis, "México: El movimiento organizado de mujeres logra la tipificación del feminicidio", AmecoPress-CIMAC,
publicado el 4 de julio de 2011. Disponible en: http://www.amecopress.net/spip.php?article7303) (consultado el
5 de julio de 2011).
42
"México: Aprueban amplia reforma penal contra el feminicidio y la violencia de género", AmecoPress, pu-
blicado el 15 de diciembre de 2011. Disponible en: http://www.amecopress.net/spip.php?article8462 (consultado
el 15 de diciembre de 2011).
sentidos".43
43
del Valle, Teresa, "El derecho a la movilidad libre y segura" en Maquieira, Virginia (ed.), Mujeres, globa
lización y derechos humanos, Cátedra, Madrid, 2006, p. 248.
los familiares por lo ocurrido con las víctimas y por la búsqueda de la verdad".
339
A partir del análisis de las Secciones de la Sentencia, se observa que
los funcionarios les dijeron a las madres de las tres víctimas lo siguiente
sobre sus hijas:
• "No está desaparecida, anda con el novio o anda con los amigos de vaga".
• "Que si le pasaba eso era porque ella se lo buscaba, porque una niña
buena, una mujer buena, está en su casa".
• "Seguro se había ido con el novio, porque las muchachas eran muy
‘voladas’ y se les aventaban a los hombres".
• "A lo mejor se fue con el novio, que a lo mejor al rato regresaba".
• "Todas las niñas que se pierden, todas […] se van con el novio o quie-
ren vivir su vida solas".45
44
Sentencia del Caso González y Otras ("Campo Algodonero") Vs. México de 16 de noviembre de 2009 (Excep
ción preliminar, fondo, reparaciones y costas), Corte Interamericana de Derechos Humanos, párrafo 401, pp.
100-102.
45
Ibidem, párrafos 198, 199 y 200, p. 57.
ban de voladas".
46
Ibidem, párrafo 153, p. 45. Este punto es muy relevante porque además de ser mujer, existen otras dimen-
siones que pueden ocasionar que las personas se encuentren en situación de mayor vulnerabilidad a determina-
das formas de violación de sus derechos humanos, como la pertenencia a un grupo étnico y otros factores
económicos y culturales. En este caso, las tres víctimas y sus familiares no pertenecían ni pertenecen al grupo
cultural y nacional hegemónico, ni cuentan con una situación económica privilegiada.
Por otro lado, las y los representantes de las víctimas relacionaron los
comentarios estereotipadores de los agentes estatales con una política que
distinguía entre "desapariciones de alto riesgo" y otras que no lo eran.
Es decir, que si la desaparecida/secuestrada cumplía con el "deber ser mu-
jer" que los agentes le asignaban, entonces se consideraba de "alto riesgo"
su desaparición, lo cual solamente sucedió en un caso como se señala más
47
El "Protocolo Alba" es un mecanismo implementado en Ciudad Juárez que fue diseñado para atender si-
tuaciones de desapariciones de alto riesgo de mujeres, niñas y niños, con el objetivo de realizar una investigación
rápida involucrando a los medios de comunicación y los familiares para que coadyuvaran con las autoridades de los
tres niveles de gobierno así como que se coordinen acciones de búsqueda y localización urgentes. A través del
"Operativo Alba" se implementa el Protocolo realizando la búsqueda de mujeres, niñas y niños desaparecidos.
48
Vid. Sentencia del Caso González y Otras ("Campo Algodonero") Vs. México de 16 de noviembre de 2009
(Excepción preliminar, fondo, reparaciones y costas), Corte Interamericana de Derechos Humanos, párrafo 505, p. 127.
• La forma de vestir
• El lugar de trabajo y el trabajo que se realiza
• La conducta
• La vida sexual
• La "moralidad" o falta de ella
• La vida social
en lugar de respetar los derechos humanos de las mujeres y seguir las leyes
y protocolos correspondientes, los funcionarios primaron la actuación ba-
sada en ideas preconcebidas de cómo consideran que debe ser una mujer
en México. Las dicotomías opuestas que señalan tareas, espacios y activida-
des diferenciadas a hombres y mujeres se hicieron presentes en este caso,
ya que de manera constante se consideró que las víctimas eran en parte
culpables por no encontrarse en el ámbito privado, demostrando la persis-
tente creencia de que el mundo público y las calles pertenecen exclusiva-
344
mente a los hombres.
V. Conclusiones
son apropiados, unos para las mujeres y otros para los hombres exclusi
vamente, sí tiene consecuencias que van más allá de ideas o palabras: afecta
los derechos humanos de las mujeres de manera sistemática y estructurada
así como favorece a que se cometan injusticias y delitos en contra de ellas.
El uso de estereotipos de género pretende justificar las violaciones a los
derechos humanos de las mujeres y lleva a que ellas sean prejuzgadas por
ser mujeres y, en sociedades patriarcales como la mexicana, incluso a que
346 sean juzgadas ellas y no los delincuentes por los delitos que se cometen en
su contra. La actuación a partir de estereotipos de género envía el mensaje
a la sociedad de que la vulneración de los derechos de las mujeres y la
violencia en su contra son toleradas por el Estado.
49
Rojas Álvarez, Martha, "Derecho de acceso a la justicia", Tribunal Constitucional de Bolivia, p. 1. Dispo-
nible en: http://www.tribunalconstitucional.gob.bo/descargHas/articulos/DAJ_MRA.pdf (consultado el 3 de di-
ciembre de 2011).
347
Como ha señalado Celia Amorós, el pensamiento patriarcal es en
gran medida el no pensamiento sobre las mujeres;50 por esto es necesario
pensar en las mujeres "con lo que significa pensar, tomarse en serio, dar vuel
tas, situarse por fuera de los propios prejuicios, intentar ir al fondo de las cues
tiones, a las raíces y a sus consecuencias en la existencia humana".51 Lo anterior
conlleva el reflexionar en lo que se transmite y proyecta, ya que en todo lo
que se realiza se transmite lo que se piensa; como señalaba Virginia Woolf
"[…] ni siquiera la crítica de una novela se puede hacer, sin tener opiniones
propias, sin expresar lo que se cree de verdad de las relaciones humanas
[…]".52 De esta manera, las personas reflejan, en todo lo que realizan, sus
creencias sobre cómo consideran que debe ser una mujer y un hombre, lo
cual cobra especial importancia cuando las personas encargadas de crear,
50
Cfr. Amorós, Celia, Hacia una crítica de la razón patriarcal, Anthropos, Barcelona, 1985.
51
Miguel Álvarez, Ana de, "El legado…", op. cit., p. 123.
52
Woolf, Virginia, "Profesiones para la mujer" en Las mujeres y la literatura, Barcelona, Lumen, 1981.
mujeres que rompan con los estereotipos de género para enseñar las diver
sas formas que existen de ser mujer y todas las posibilidades de ser que van
más allá del ámbito privado.
VI. Referencias
Bibliográficas
Del Valle, Teresa, "La Violencia de las mujeres en la Ciudad. Lecturas des-
de la marginalidad" en Maquieira, Virginia y Sánchez, Cristina
(comp.), Violencia y sociedad patriarcal, Pablo Iglesias, Madrid, 1990.
Instituto Nacional de las Mujere, "El impacto de los estereotipos y los roles
de género en México", Boletín estadístico, México, agosto, 2007. Dis-
del Caso Campo Algodonero vs. México, Serie por la Vida y la Libertad de
las Mujeres, México, Red de Investigadoras por la Vida y la Libertad
de las Mujeres A.C., 2010, pp. 11-100.
da el 18 de diciembre 1979.
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (2007)
*
Este trabajo obtuvo el segundo lugar del Tercer Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición de
2011.
Artículo 8. Los Estados Partes tomarán todas las medidas apropiadas para
garantizar a la mujer, en igualdad de condiciones con el hombre y sin discri-
minación alguna, la oportunidad de representar a su gobierno en el plano
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
29. El Comité recomienda al Estado Parte que fortalezca las medidas para
aumentar el número de mujeres en puestos directivos a todos los niveles y
356
en todos los ámbitos, conforme a lo dispuesto en su recomendación gene-
ral 23, relativa a las mujeres en la vida política y pública. Recomienda tam-
bién al Estado Parte que introduzca medidas especiales de carácter
temporal, de conformidad con lo dispuesto en el párrafo 1 del artículo 4 de
la Convención y la recomendación general 25, a fin de acelerar las gestiones
para facilitar el ascenso de las mujeres a puestos de liderazgo, en particular
en el servicio exterior.1
1
Recomendaciones del Comité de la CEDAW al 6° informe de México, 2006.
357
Por ejemplo, las medidas de acción afirmativa que promueven el ejer
cicio de los derechos político-electorales de las mujeres tales como las cuo-
tas o el presupuesto etiquetado para promover liderazgos han sido algunos
de los mecanismos implementados para aumentar la presencia de mujeres
en espacios de poder en lo federal y, si bien se han retomado como un
modelo, la adopción de dichas medidas a nivel local es muy diversa.
2
Cfr. PHILLIPS, A., Engendering Democracy, Cambrigde Polity Press, Cambrige, 1991, p. 6; PHILLIPS, A., The
Politics of Presence, Clarendon Press, Oxford, 1995, p. 65; CRASKE, N., Women and Politics in Latin America, Rutgers
University Press, New Bronswick, 1999, p. 2; McDonagh, E., "Political Citizenship and Democratization: the
Gender Paradox" en American Political Science Review, vol. 96, n. 3, 2002, p. 535; CHILDS, S., New Labour's women
MPs: women representing women, Routledge, London, 2004, pp. 7-10; Ballington, A., y KARAM, J., Women
in Parliament: Beyond Numbers, IDEA, Stockholm, 2005, p. 24; Lovenduski, j., Feminizing Politics, Polity Press,
Oxford, 2005, p. 25; y Shvedova, N., "Obstacles to Women's Participation in Parliament" en KARAM y
Ballington, Women in Parliament…, op. cit., p. 33.
3
Datos actualizados a julio de 2011. Incluye los resultados de la elección de BCS, no incluye los resultados
2011 de Nayarit, Coahuila y Michoacán. (La autora agradece a Georgina López, Laura Peniche y Beatriz Vega Segura
por su apoyo para la revisión de fuentes documentales y a la Mtra. Teresa Hevia Rocha por sus atinados comentarios
y el respaldo incondicional para que este ensayo fuera posible).
Fuente: Elaboración propia con datos de las páginas de internet de los Congresos Locales
II. Sofisticación
de la norma electoral.
4
Vid. PEÑA, B., "Sistemas de cuota y masa crítica en los gobiernos subnacionales de México" en Otras mira
das, vol. 5, n. 1, Universidad de los Andes, Venezuela, 2005; D'ANGELO, N., y REYNOSO, D., "La diversidad de las
leyes de cuota y su impacto en la elección de mujeres" en Política y Gobierno, vol. XIII, n. 2, CIDE, México, 2006; y
ZAREMBERG, G., "¿Cuánta y para qué?: los derechos políticos de las mujeres desde la óptica de la representación
descriptiva y sustantiva" en Género y derechos políticos. La protección jurisdiccional de los derechos políticos electo
rales de las mujeres en México, TEPJF, México, 2009.
5
Cfr. HUERTA, M., y MAGAR, E., Mujeres legisladoras en México: avances, obstáculos, consecuencias y propues
tas, INM-Conacyt-ITAM-Friederich Ebert Stiftung, México, 2006.
iv. Descriptivos
de las variables
Fuente: Elaboración propia con base en las legislaciones electorales de las 32 entidades federativas.
Fuente: Elaboración propia con base en las legislaciones electorales de las 32 entidades federativas.
6
Este fue el caso de la Diputada Mary Thelma Guajardo quien interpuso un medio de defensa ante el Tribu-
nal Electoral del Poder Judicial de la Federación, para que se respetará la alternancia en la integración de las listas
de RP para diputaciones federales. Se puede consultar la información en : http://www.equidad.scjn.gob.mx/IMG/
pdf/SUP-JDC-0461-2009_Genero_-2.pdf
Cláusula de excepción
370
Fuente: Elaboración propia con base en las legislaciones electorales de las 32 entidades federativas.
7
Como resultado de un JDC interpuesto por algunas militantes, el TEPJF resolvió en el expediente SUP-
JDC-12624/2011 y acumulados que para las elecciones federales "En caso de que el partido político, elija a sus
candidatos de mayoría relativa mediante un proceso de elección democrático observando y privilegiando lo pre
visto en sus estatutos respecto de la forma de elección, el partido político o coalición, en todo caso, deberá
presentar como mínimo 120 y 26 candidatos propietarios de un mismo género, a Diputados y Senadores, res-
pectivamente en términos de lo dispuesto por el primer párrafo del artículo 219 del Código Federal de Institu-
ciones y Procedimientos Electorales"
Fuente: Elaboración propia con base en las legislaciones electorales de las 32 entidades federativas.
372
V. Resultados del Índice
de Efectividad
de la Cuota de Género
Fuente: Elaboración propia con base en las legislaciones electorales de las 32 entidades federativas.
CÓDIGO ELECTO
CÓDIGO ELECTORAL CHIHUAHUA
RAL NAYARIT
(ÚLTIMA REFORMA PUBLICADA: 12 SEPTIEMBRE DE 2009)
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
(URP:18/08/2010)
Artículo 16 (…) ARTÍCULO 41: (…)
3. De la totalidad de solicitudes de registro de las candidaturas a diputados por el
XXII. Procurar y pro-
principio de mayoría relativa que presenten los partidos políticos o las coaliciones
mover la equidad
ante el Instituto Estatal Electoral, deberán integrarse con el 50% de candidatos
étnica y de género en
propietarios de un mismo sexo, lo que se observará igual con los suplentes. Que-
las candidaturas a
dan exceptuadas de esta disposición las candidaturas de mayoría relativa que sean
cargos de elección
resultado de un proceso de elección democrático, conforme a los estatutos de
popular;
cada partido.
Artículo 17
374 1. Para la asignación de diputados electos por el principio de representación pro-
porcional, cada partido político o coalición deberá registrar una lista de seis fórmu-
las de candidatos propietarios y suplentes, la cual no podrá contener más del 50%
de candidatos propietarios de un mismo sexo, lo que también será aplicable a los
suplentes.
En la lista que presenten los partidos o coaliciones se harán los registros de manera
alternada por sexo en los cargos de propietarios, sin que haya obligación de la
alternancia para las suplencias. (…)
4. Cuando del registro total de las candidaturas que hagan los partidos o coalicio-
nes por el principio de mayoría relativa, aparecieren más del 50% de candidatos de
un mismo sexo, el sexo sub-representado al cargo como propietario ocupará,
cuando menos, el segundo lugar propietario de la lista de representación
proporcional.
5. El incumplimiento de este precepto dará lugar a la negativa del registro de la
referida lista, la que, en su caso, podrá subsanarse dentro del lapso de registro
señalado para ese efecto.
Artículo 41
1. Son obligaciones de los partidos políticos nacionales y estatales: (…)
Los partidos políticos habrán de canalizar el 15% del financiamiento público para
actividades ordinarias permanentes con el fin de impulsar diversos mecanismos en
materia de perspectiva de género;
Artículo 133
3. De la totalidad de solicitudes de registro de las candidaturas a diputados por
ambos principios que se presenten por partidos políticos o coaliciones ante el
Instituto Estatal Electoral, no podrá resultar más del 50% de un mismo sexo de
candidatos propietarios, lo que también será aplicable a los suplentes, en los térmi-
nos de los artículos 16 y 17 de esta Ley.
4. Las candidaturas a miembros de los ayuntamientos se registrarán por planillas
Fuente: Elaboración propia con base en las legislaciones electorales de las 32 entidades federativas.
VII. Bibliografía
Childs, S., New Labour’s women MPs : women representing women, Routled-
ge, London, 2004.
Craske, N., Women and Politics in Latin America, Rutgers University Press,
New Brunswick, 1999.
Kanter, R., "Some effects of proportion on group life: skewed sex ratios
and responses to Token Women", American Journal of Sociology, vol. 82,
n. 5, 1997.
Zaremberg, G., "¿Cuánto y para qué?: los derechos políticos de las muje-
res desde la óptica de la representación descriptiva y sustantiva" en
Género y derechos políticos. La protección jurisdiccional de los derechos
políticos electorales de las mujeres en México, TEPJF, México, 2009.
*
Este trabajo obtuvo el tercer lugar del Tercer Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición de
2011.
I. A modo de 385
Introducción
Sin embargo, sin miedo a que suene a una frase trillada y pesimista,
estos cambios –resultado de la lucha continua por el reconocimiento de la
igualdad en dignidad y derechos de las mujeres– no sirven de mucho si aún
no encontramos formas adecuadas, rápidas y efectivas para garantizar que
las mujeres, de cualquier edad, color y condición social, no mueran en condi
ciones de violencia extrema a manos de personas conocidas y desconocidas.
Lamentablemente, lo afirmado deja entrever que la respuesta al cuestio
namiento planteado en el título de este ensayo no será la más optimista.
1
La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia que consagra las órdenes de pro-
tección, fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el 1º de febrero de 2007.
2
Vid., CIDH, Caso 12.626, Fondo, Jessica Lenahan (Gonzales) y Otros contra Estados Unidos, Informe No.
80/11, 21 de julio de 2011, párrafos 200 y 201.
3
Naciones Unidas, Informe. El progreso de las mujeres en el mundo 2011-2012, ONU Mujeres, New York,
2011, p.10.
4
Adoptada y abierta a firma y ratificación, o adhesión por la Asamblea General de la Organización de las
Naciones Unidas en su resolución 34/18º, de 18 de diciembre de 1979. Vinculación de México: 23 de marzo de
1981. Publicación: Diario Oficial de la Federación, 12 de mayo de 1981. F. de E. DOF 18 de junio de 1981.
5
Aprobada en Belém do Pará, Brasil, 9 de junio de 1994, en el vigésimo cuarto período ordinario de sesio-
nes de la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos. Vinculación de México: 12 de no-
viembre de 1998. Publicación: Diario Oficial de la Federación, 19 de enero de 1999.
6
Lagarde y de los Ríos, Marcela, "Por los derechos humanos de las mujeres: la Ley General de Acceso
de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia" en Revista Mexicana de Ciencias Políticas y Sociales, Vol. XLIX, n. 200,
UNAM, México, mayo-agosto, 2007, pp. 143-165. Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.
jsp?iCve=42120009
Por otra parte, no hay que dejar de mencionar que la creación de ley
no solo respondía al cumplimiento de las obligaciones internacionales, sino
que buscaba dar respuesta a una demanda específica: la violencia feminicida
en Ciudad Juárez, Chihuahua.Violencia que ha sido denunciada por las fami
388
lias de las víctimas que exigen investigaciones adecuadas que esclarezcan la
verdad sobre los feminicidios y que ha sido documentada por años, desde
la década de los años 90´s, por organizaciones de la sociedad civil, medios
de información, instituciones educativas, comisiones de derechos humanos.
Todo lo anterior, acompañado de la presión de los organismos internacio-
nales que exigen acciones concretas para dar una respuesta eficaz.
7
Cfr. Idem.
8
Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres, publicada en el Diario Oficial de la Federación el
2 de agosto de 2006.
9
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 5
de febrero de 1917.
"
Artículo 1°. …
…
…
…
Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, […]."
"Artículo 4°. …
El varón y la mujer son iguales ante la ley. […]" El resaltado es nuestro.
10
Cfr. Art. 3º de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
11
Cfr. Gómez Lugo, Fanny, "Resumen de los aspectos más importantes de la sentencia de la Corte Inte-
ramericana de Derechos Humanos en el Caso González y otras ("Campo Algodonero") vs. México", Disponible
en: http://www.programamujerescdh.uchile.cl/media/archivos/pdf/20100112161214.pdf
12
Vid. "Entrevista a la Ex Presidenta de la Corte Interamericana, Cecilia Medina", en Edición Especial Boletín
de Jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos 2010. Caso González y otras ("Campo Algodonero")
vs. México, Centro de Derechos Humanos. Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Chile, abril de 2010,
pp. 14-15. Disponible en: http://www.estadodederechocdh.uchile.cl/boletin/boletin_algodonero_21abril.pdf
13
Jane Caputi, Deborah Cameron y Elizabeth Frazer fueron las primeras en analizar sistemáticamente el
asesinato sexual a través de la categoría de género. Sin embargo, Diana E.H. Russell acuña el constructo teórico
femicide, en 1976. Vid., Monárrez Fragoso, Julia, "Feminicidio sexual serial en Ciudad Juárez: 1993-2001" en
Debate Feminista, México, año 13, Vol. 25, abril 2002. Disponible en: http://www.womenontheborder.org/
Articles/feminicidio_sexual_SP.pdf De igual manera hay que mencionar a las feministas Marcela Lagarde y de los
Ríos, Julia Monárrez Fragoso, Patsilí Toledo, Ana Carcedo, entre otras.
14
Cfr. Lagarde y de los Ríos, Marcela, "Introducción. Por la vida y la libertad de las mujeres. Fin al
feminicidio", en Russell, Diana E. y Harmes, Roberta A. (eds.), Feminicidio: una perspectiva global, UNAM,
CEIICH, México, 2006, pp. 16-21.
15
Cfr. Feminicidio en México. Aproximación, tendencias y cambios, 1985-2009, ONU MUJERES, INMUJERES,
México, 2011, p. 18.
16
Cfr. Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, Informe. Una Mirada al Feminicidio en México 2010-
2011, México, 2011, p. 1.
17
Documento elaborado con motivo de la Audiencia sobre "Feminicidio en América Latina" ante la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos, Washington, 2006, p. 5, citado en Ibidem, p. 12.
18
Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos, expediente 5003/10, Entidad: Procu-
raduría General de la República.
19
El Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio ha denunciado que las tipificaciones de los estados
de Guerrero, Guanajuato,Tamaulipas, Estado de México y Colima presentan elementos que acotan la persecu
ción del delito al ámbito de violencia familiar o que incorporan elementos subjetivos que abren la puerta para
interpretaciones ambiguas haciendo difícil la configuración de éste. Vid. Observatorio Ciudadano Nacional del
Feminicidio.
20
Cfr. Ibidem, p. 4.
21
Cfr. Idem.
municipios del oriente, que son un "foco rojo" para las autoridades mexi-
quenses, tal es el caso de Chimalhuacán, Valle de Chalco, Nezahualcóyotl y
Nicolás Romero. De igual forma, indicó que en 2011 la entidad mexiquense
cerró con 52 casos de feminicidio.23
22
Cfr. "ONG: feminicidios en Guanajuato se incrementaron 75% en 2011", La Jornada (en línea), Estados,
Distrito Federal, 7 de enero de 2012. Disponible en Internet: http://www.jornada.unam.mx/2012/01/07/
estados/026n1est
23
"Feminicidios, en 9 de cada 10 hay antecedente de violencia familiar", El Universal Estado de México (en
línea), Seguridad, Toluca, 15 de enero de 2012. Disponible en: http://www.eluniversaledomex.mx/toluca/nota
26576.html
24
Fiscalía General del Estado de Chihuahua, Informe Preliminar de Denuncias Presentadas ante Agencias del
Ministerio Publico. Enero- diciembre de 2011. Disponible en: http://fiscalia.chihuahua.gob.mx/investigacion/pdf/
estadisticas%20ene-dic11.pdf
[…]
Peor aún, desde julio de 2011, la Fiscalía obtuvo los resultados que confir-
maban la identidad del cadáver y no fue sino hasta noviembre que le noti-
ficó a la familia y eso no por su propia motivación, sino debido a que los
familiares se dieron cuenta de estos hechos y reclamaron la entrega de
los restos.25
25
"Los feminicidios nuevamente", El Diario (en línea), Opinión, Ciudad Juárez, 24 de diciembre de 2011.
Disponible en: http://www.diario.com.mx/notas.php?f=2011/12/24&id=ace1f2acc0bbd73bad54dea76fd416d1
26
Cfr. Naciones Unidas, Suplemento del Manual de legislación sobre la violencia contra la mujer "Prácticas perju
diciales" contra la mujer, División para el Adelanto de la Mujer del Departamento de Asuntos Económicos y So-
ciales, New York, 2011, p. 33.
27
Cfr. Idem.
Ahora bien, conforme los artículos 7º, 11, 12, 16 y 18 de la Ley Ge-
neral de Acceso, los diferentes tipos de violencia se pueden producir en
ámbitos privados y públicos, como son los ámbitos familiar, laboral, docente,
comunitario e institucional.
28
Cfr. Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, op. cit., p. 2.
29
Observatorio sobre la calidad del estado de derecho en el noreste de México, Glosario. Consultado en:
http://oced.org.mx/index.php?option=com_content&task=view&id=26&Itemid=40
30
Cfr. Los Delitos Federales, Comisión de Atención y Prevención de Delitos Federales, Consejo de Participa
ción Ciudadana, PGR, México, p. 2. Disponible en: http://www.participacionciudadana-pgr.org.mx/CATALOGO%
20DE%20DELITOS%20FEDERALES.pdf
31
Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, op. cit., p. 2.
32
Vid., Motta, Cristina y Sáez, Macarena (ed.), La mirada de los jueces. Género en la justicia latinoamericana,
Tomo I, American University Washington College of Law, Bogotá, Colombia, 2008.
33
Cfr. Casas Becerra, Lidia, Introducción a los Problemas de Género en la Justicia Penal en América Latina,
Centro de Estudios de Justicia de las Américas, CEJA, Santiago, Chile, junio 2010.
34
Cfr. Echeburúa, Enrique; De Corral, Paz et. al., Predicción del riesgo de homicidio y de violencia grave en
la relación de pareja. Instrumentos de evaluación del riesgo y adopción de medidas de protección, Centro Reina Sofía,
España, 2009, pp. 33 a 40.
35
Por ejemplo: una pareja o expareja sentimental o sexual; una persona con quien se tiene o tuvo un vinculo
afectivo; una persona con la que se mantiene un vínculo familiar; una persona con quien se mantiene o mantuvo
una relación laboral o docente; cualquier persona con la que se tiene o se tuvo algún grado de confianza.
36
Cfr. Ibidem, pp. 47.
37
Idem.
La gestión del riesgo se basa en entender por qué el sujeto eligió actuar
violentamente en el pasado, en determinar si los factores de riesgo/pro
tección que influyeron en la elección siguen presentes y lo estarán en el
futuro, en promocionar los factores que llevan a tomar decisiones no-vio
lentas, etc.39
38
Cfr. Idem.
39
Idem.
V. Algunas conclusiones
propias y ajenas
Se podría concluir este documento haciendo propios los factores más im-
portantes, señalados por la CIDH y las organizaciones de la sociedad civil
40
Vid., Motta, Cristina y Sáez, Macarena (ed.), La mirada de los jueces. Género en la justicia latinoamericana,
Tomo I, American University Washington College of Law, Bogotá, Colombia, 2008.
41
El día 4 de noviembre, mediante INFOMEX, No. de Folio 0002200164011 fue solicitada la información
referente a número de Cuantas órdenes de protección y situaciones que requieran medidas gubernamentales
de urgente aplicación se encuentran registradas en el Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de
Violencia contra las Mujeres (BANAVIM), desde su creación a la fecha actual, solicitud a la cuál se respondió que
dicha información estaría disponible hasta el segundo trimestre del año 2012.
42
Vid., Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, Comisión Interamericana de Derechos humanos,
Organización de Estados Americanos. Informe 2009.
Sin embargo, esto no será posible sin el Poder Judicial. Pues consti-
tuye la primera línea de defensa a nivel nacional para la protección de los
derechos y las libertades individuales de las mujeres y, por ello, la importan-
cia de su respuesta efectiva ante violaciones de derechos humanos. Una
respuesta judicial idónea resulta indispensable para que las mujeres víctimas
de violencia cuenten con un recurso ante los hechos sufridos y que éstos no
queden impunes.43
43
Cfr. CIDH. Informe: Acceso a la Justicia para las Mujeres Víctimas de Violencia en las Américas, OEA/Ser.L/V/
II. Doc. 68, 20 enero 2007.
*
Este trabajo obtuvo el primer lugar del Cuarto Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición de
2012.
1
Encuesta de Victimización y Eficacia Institucional (ENVEI), 2010. CIDE. Disponible en: http://www.seguridad
publicacide.org.mx/cms/
2
Artículo 3 de las Reglas de Brasilia sobre el Acceso a la Justicia aprobadas por la XIV Cumbre Judicial Ibe-
roamericana, en Brasilia el 6 de marzo de 2008.
3
Informe de la Relatora Especial sobre la independencia de los Magistrados y abogados. Misión a México.
Organización de Naciones Unidas. 18 de abril de 2011. A/HRC/17/30/Add.3 Disponible en: http://www2.ohchr.
org/english/bodies/hrcouncil/docs/17session/A-HRC-17-30-Add3_sp.pdf
4
Idem.
5
Acceso a la justicia para las Mujeres Víctimas de Violencia en las Américas. Comisión Interamericana de
Derechos Humanos. 20 de enero de 2007. OEA/Ser.L/V/II. Disponible en: http://www.cidh.oas.org/women/
Acceso07/indiceacceso.htm
Hasta enero de 2013, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha emitido varias sentencias en
contra del Estado Mexicano, pero tres corresponden a violaciones de derechos humanos en contra de mujeres
que fueron víctimas de diversos tipos de violencia de género: 1) El caso "González y Otras" también conocido
como Campo Algodonero, referente a tres desapariciones y homicidios de mujeres y niñas en Ciudad Juárez,
Chihuahua; y los casos de 2) Inés Fernández y 3) Valentina Rosendo, indígenas me´pháas que fueron violadas por
elementos del ejército mexicano en Guerrero.
6
INEGI, Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH). México, 2006.
7
Infografía. Violencia contra las Mujeres en México. 25 de noviembre de 2012. Con información de la ENDI-
REH 2011, Mukira. Disponible en: http://mukira.org/2012/11/25/violencia-contra-las-mujeres-en-mexico/
8
Birgin, Haydée y Gherardi, Natalia (coord.), La garantía de acceso a la justicia: aportes empíricos y con
ceptuales. Colección "Género, Derecho y Justicia", n. 6. Disponible en: http://www.equidad.scjn.gob.mx/IMG/pdf/
La_Garantia_de_Acceso_a_la_Justicia.pdf
9
Idem.
10
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, "El acceso a la justicia como garantía de los derechos
económicos, sociales y culturales. Estudio de los estándares fijados por el sistema interamericano de derechos hu-
manos", 2007. Disponible en: http://www.cidh.oas.org/countryrep/AccesoDESC07sp/Accesodescindice.sp.htm
(consultada el 28 de julio de 2011).
11
Pérez Correa, Catalina. Animal Político. Contra el machismo: paternalismo. 8 de diciembre de 2011. Dis-
ponible en: http://www.animalpolitico.com/blogueros-no-hay-derecho/2011/12/08/contra-el-machismo-paternalismo/
12
Hunter, Rosemary, referido por BIRGIN, Haydée y GHERARDI, Natalia (coords.), "La garantía...", op. cit.
13
En referencia al artículo académico de: Facio, Alda "Con los lentes de género se ve otra justicia. El otro
derecho", Colombia, Julio de 2002. Disponible en: http://www.equidad.scjn.gob.mx/2011/IMG/pdf/Con_los_
lentes_del_genero_se_ve_otra_justicia.pdf
14
El concepto de activismo judicial se retoma del documento "La garantía de acceso a la justicia: aportes
empíricos y conceptuales" de la colección "Género, Derecho y Justicia" (disponible en: http://www.equidad.scjn.
gob.mx/IMG/pdf/La_Garantia_de_Acceso_a_la_Justicia.pdf). Este activismo "comprende tanto el recurso estra-
tégico a los tribunales por parte de organizaciones e instituciones dedicadas al litigio de interés público, como el
mayor uso de los tribunales y las estrategias legales por parte de individuos para canalizar sus demandas al Estado
o a otros particulares".
15
Cfr. Infografía. Violencia contra..., op. cit.
16
Discurso de Miguel Angel Osorio Chong, Secretario de Gobernación durante la reunión del Consejo
Nacional de Seguridad Pública. 17 de diciembre de 2012. Discurso transmitido por la Presidencia de la República.
Disponible en: www.presidencia.gob.mx
17
El CEDEHM es una organización no gubernamental que brinda patrocinio jurídico gratuito a las víctimas
de violencia de género en Chihuahua, México. La organización es pionera en el litigio en el sistema acusatorio.
18
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. Artículo 28 "(…) Las órdenes de
protección de emergencia y preventivas tendrán una temporalidad no mayor de 72 horas (…)" Disponible en:
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/LGAMVLV.pdf
19
Causa penal 650/2011, Caso MODP, Sentencia del Tribunal de Alzada. Expediente facilitado por el Centro
de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM).
él le dijo que (…) si quería que se la entregara tenía que acudir con él a la
casa y entrar sola para entregarle la ropa, pero ella no quiso entrar pues
sabía que la iba a golpear. MM le dijo que entraría con ella y él se negó a
que ingresaran las dos, cuando ella se descuidó –MODP–, él la agarró del
pelo y la tiró al piso, le empezó a dar patadas en el estómago y después
la agarró del cuello, la estaba ahorcando, MM alcanzó a quitárselo después
20
Idem.
21
En el sistema acusatorio, la vinculación a proceso es equivalente al auto de formal prisión del sistema
inquisitorio.
22
Causa Penal 650/2011, caso MODP. Sentencia del Tribunal de Alzada, op. cit.
23
Amparo 818/2011, Carlos Alfredo Soto Morales, Juez Sexto de Distrito del Centro Auxiliar de la Segunda
Región, con residencia en San Andrés Cholula, Puebla Auxiliar 614/2011
24
Informe del Relator de independencia de los Magistrados y abogados, Sr. Dato'Param Coomarasawamy,
presentado de conformidad con la resolución 2001/39 de la Comisión de Derechos Humanos. Adición. Informe
sobre la misión cumplida en México. E/CN.4/2002/72/Add.1, 24 de enero de 2002.
25
Cfr. Ochoa Reza, Enrique, La transparencia y el ministerio público. Derecho a saber. Balance y perspectivas
cívicas. Disponible en: http://www.fundar.org.mx/mexico/pdf/pdfsderechoasaber/sec3%20enrique%20ochoa.pdf
26
Entrevista con integrantes del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM). Junio de 2012.
27
Causa Penal 650/2011, caso MODP. Sentencia del Tribunal de Alzada, op. cit.
28
Idem.
de las mujeres declaran que sus parejas las han intentado matar, y existen
pruebas de ello, sino por el tipo de penalidad y medidas cautelares alterna-
tivas que permite el delito de violencia familiar. Desafortunadamente, la
violencia familiar se sigue percibiendo como un problema privado, y de poca
trascendencia entre particulares, y se ignoran los datos que comprueban
que frecuentemente la violencia familiar constituye la ruta al feminicidio.
29
Heraldo (seudónimo), "Una aproximación humanista al Derecho de Defensa en el Proceso Penal
Dominicano", Primer Concurso Nacional de Ensayos sobre el Código Penal Procesal, CEJA, 2006. Disponible en::
http://www.cejamericas.org/index.php/biblioteca/biblioteca-virtual/doc_download/2004-una-aproximacion-
humanista-al-derecho-defensa-en-el-proceso-penal-dominicano
…
427
III. De los antecedentes de la investigación expuestos por el Ministerio Pú-
blico, se desprendan los datos que establezcan que se ha cometido un he-
cho que la ley señale como delito y la probabilidad de que el imputado lo
cometió o participó en su comisión.
Y concluyó:
30
Causa penal 650/2011, caso MODP, Sentencia del Tribunal de Alzada, op. cit.
31
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Primero, se requiere continuar con la lucha para que las y los Jueces
reconozcan que las víctimas y sus acusadoras coadyuvantes son sujetos
procesales activos, con derechos, conocimientos e intereses legítimos. Este
paso no es fácil, particularmente porque durante decenas de años, los inte-
reses y deseos de las víctimas estaban supeditados a las decisiones del mi-
nisterio público, y era éste quien las representaba.
32
El resumen es una transcripción del relato de la defensora de Rosa Emma realizada durante el juicio de
apelación y tomada del video de dicho juicio que fue facilitado por el CEDEHM.
33
Información obtenida del video del juicio de apelación facilitado por el CEDEHM.
Recordemos que
34
Entrevista a Lucha Castro, coordinadora del CEDEHM. Junio de 2012
35
Aragón, Laura, Alcances y límites de las acciones afirmativas a favor de las mujeres en los órganos electorales,
Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, México, D.F., 2011. Disponible en http://www.te.gob.mx/
documentacion/publicaciones/Serie_comentarios/42_alcances.pdf
Una de las pruebas que en ocasiones funcionan para analizar si se está ante
una situación de discriminación es cambiar el sexo de la víctima e imaginar
qué sucedería. En una estrategia de defensa arriesgada e innovadora, la
defensa de Rosa Emma comenzó a relatar la historia de Don Alejo y Don
Alfredo, dos hombres norteños que recientemente habían ejercido el de-
recho a la legítima defensa al ser asaltados en sus casas, y quienes se habían
36
Aragón, Laura, et al. El acceso a la justicia para las mujeres víctimas de violencias de género en el sistema
penal acusatorio, Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM), México, 2011.
37
Entrevista a Roxana Arroyo, 24 de noviembre de 2011. Disponible en: http://www.youtube.com/
watch?v=bhBj-I1vGNw)
la justicia para Rosa Emma. Argumentó además a su favor, con base en los
estándares internacionales de derechos humanos, incluidas la convenciones
CEDAW y Belém do Pará, que ella tenía el derecho de vivir a una vida libre
de violencia.
38
Video del juicio de apelación facilitado por el CEDEHM.
39
Video del juicio de apelación facilitado por el CEDEHM.
40
Palabras del abogado de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Chihuahua en la acusación a Rosa
Emma obtenidas del video del juicio de apelación facilitado por el CEDEHM.
436
V. Conclusión
41
La violencia de género es un fenómeno complejo que puede tomar varias formas y ser ejercida por dis-
tintos sujetos en cualquiera de los entornos en los que se desenvuelve la vida de una mujer. Sus causas se en-
cuentran tanto en las construcciones socio-culturales de una comunidad como en las disposiciones formales
institucionales de la misma, y parten de la idea de inferioridad y subordinación de la mujer.
VI. Bibliografía
439
Amparo 818/2011, Carlos Alfredo Soto Morales, Juez Sexto de Distrito del
Centro Auxiliar de la Segunda Región, con residencia en San Andrés
Cholula, Puebla Auxiliar 614/2011
Aragón, Laura et al. El acceso a la justicia para las mujeres víctimas de vio
lencias de género en el sistema penal acusatorio, Centro de Derechos
Humanos de las Mujeres (CEDEHM), México, 2011.
Facio, Alda, Con los lentes de género se ve otra justicia. El otro derecho.
Colombia, Julio de 2002. Disponible en: http://www.equidad.scjn.gob.
mx/2011/IMG/pdf/Con_los_lentes_del_genero_se_ve_otra_justicia.pdf
442
Este trabajo obtuvo el segundo lugar del Cuarto Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición
*
de 2012
1
Vid., CORSI, Jorge, "Una mirada abarcativa sobre el problema de la violencia familiar" en CORSI, Jorge
(comp.), Violencia familiar, una mirada interdisciplinaria sobre un grave problema social, Paidós, México; CORTÉS,
Guadalupe, "Pareja y violencia" en AGUILAR, Blanca y TAPIA, Martha (coords.), La violencia nuestra de cada día,
Plaza y Valdés, México; VÁZQUEZ,Verónica y CASTRO Roberto, "La universidad como espacio de reproducción
de la violencia de género. Un estudio de caso en la Universidad Autónoma Chapingo" en Estudios Sociológicos,
Vol. 26, n. 3, El Colegio de México, México, 2008.
2
Vid. HERNÁNDEZ, Rosalba, "El derecho positivo y la constumbre jurídica: las mujeres indígenes de Chiapas
y sus luchas por el acceso a la justicia" en TORRES, Martha (comp.), Violencia contra las mujeres en contextos urba
nos y rurales, El Colegio de México, México, 2004; y tb. HERNÁNDEZ, Ana; LIENDRO, Eduardo y APARICIO,
Martha, ¡Paremos la violencia contra las mujeres y las niñas! Guía para autoridades comunitarias, Consorcio para el
diálogo y la equidad, Oaxaca, 2010.
3
Cfr. GUTIÉRREZ, José y APIGNANI, Gaia (coords.), Diagnóstico sobre el fenómeno del feminicidio en el estado
de Oaxaca, Instituto Nacional de las Mujeres-Instituto de la mujer oaxaqueña-Gobierno del Estado de Oaxaca,
México, 2010.
4
Cfr. MARTÍNEZ, Beatriz y MEJÍA, Susana, Ideología y práctica de delitos cometidos contra mujeres, Colegio de
Postgraduados, Puebla, 1997 y HERNÁNDEZ, Ana; LIENDRO, Eduardo y APARICIO, Martha, ¡Paremos la violen
cia…, op. cit.,
5
Cfr. HERNÁNDEZ, Rosalva "El derecho positivo…", op. cit., FREYERMUTH, Graciela, "La violencia de género
como factor de riesgo en la maternidad" en TORRES FALCÓN, Mar tha (comp.), Violencia contra las mujeres
en contextos urbanos y rurales, Colegio de México, México, 2004. GONZÁLEZ, Soledad, "Violencia contra las
mujeres, derechos y ciudadanía en contextos rurales e indígenas de México" en Convergencia, vol. 16, n. 50, UAEM,
México, 2009
6
El pueblo Mixe se llama a sí mismo Ayuuk’j jä’äy. La lengua que hablan es Ayuuk’j, cuyo significado es:
a=idioma, palabra; Ayuuk’j=montaña, florido, y yä’äy=gente. Por lo que su significado puede traducirse como
"gente del idioma florido".
7
Cfr. BASTIDAS, M., "Reflexiones en torno a la violencia sexual marital", Ponencia presentada en las jornadas
andaluzas sobre abusos y violencia sexual, Federación Española de Sociedades de Sexología, Madrid-Sevilla, 1998.
Disponible en: http://leo.worldonline.es/fess/Articulos/articulo_0-02htm CASIQUE Irene, "¿Cuándo puedo decir
no? Empoderamiento femenino y sexo no deseado en México" en Estudios Demográficos y Urbanos, vol. 2, n. 1
(61), Colegio de México, México, 2005. Disponible en: http://aleph.academia.mx/jspvi/bitstream/56789/
21829/1/21-061-2006-0049.pdf; GARCÍA, Silvia, "Una mirada a la violencia de género, desde sus protagonistas"
en Veredas do Direito Belo Horizonte, vol. 3, n. 5, Brasil, 2006; SCJN "Diez criterios judiciales relevantes desde la
perspectiva de género", Programa de Equidad de Género en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, México, 2010.
Disponible en: http://www.equidad.scjn.gob.mx
8
Cfr. GONZÁLEZ, Soledad, "Violencia contra…", op. cit.
9
Cfr. HERNÁNDEZ, Ana; LIENDRO, Eduardo y APARICIO, Martha, ¡Paremos la violencia…, op. cit.
10
Cfr. Gutiérrez, José y APIGNANI, Gaia (coords.), Diagnóstico sobre…, op. cit.
11
Cfr. CASIQUE, Irene, "¿Cuándo puedo…", op. cit., GARCÍA, Silva, "Una mirada…", op. cit., MARTÍNEZ, Laura y
VALDEZ, Miriam, Violencia de género, visibilizando lo invisible. INDESOL, México, 2007. Disponible en: http://archivos.
diputados.gob.mx/Centros_Estudio/ceameg/violencia/sivig/doctos/adivac.pdf, VALDEZ, Rosario; et. al., "Violencia
contra la mujer en la infancia y en la vida en pareja" en Encuesta de Salud y Derechos de las Mujeres Indígenas,
Instituto Nacional de Salud Pública-CDI, 2008. Disponible en: http://www.equidad.scjn.gob.mx/IMG/pdf/
Ensademi_2008.pdf; CEAMEG, "Violencia de Género en México", Cámara de Diputados, México, 2012.
12
Cfr. CASIQUE, Irene, "¿Cuándo puedo…", op. cit., p. 52.
13
Vid. Ibidem, p. 51.
14
Cfr. VELÁZQUEZ, Susana, Violencias cotidianas, violencias de género. Escuchar, comprender, ayudar, Paidós,
Buenos Aires, 2004.
15
CASIQUE, Irene, "¿Cuándo puedo…", op. cit., p. 51.
16
Cfr. VALLEJO MORA, Guadalupe, "Tardía, tipificación de violación conyugal" en Cimacnoticias. Periodismo
con perspectiva de género, México, 22 de noviembre de 2005. Disponible en: http://www.cimacnoticias.com.mx/
node/38893
17
Idem.
18
CIILCEO, "Código Penal, Oaxaca: Congreso del Estado Libre y soberano de Oaxaca", Unidad de Investi-
gaciones de la LXI Legislatura de Oaxaca, México, 2011, p. 62. Disponible en: http://www.congresooaxaca.gob.
mx/lxi/info/legislación/008.pdf
19
Vid. CASIQUE, Irene, "¿Cuándo puedo…", op. cit., GONZÁLEZ, Soledad; MOJARRO, Mariana, y VALDEZ,
Rosario, "Violencia conyugal y búsqueda de apoyo por las autoridades" en Encuesta de Salud…, op. cit., SIERRA,
María, "Las mujeres indígenas ante la justicia comunitaria" en Desacatos, n. 31, CIESAS, México, 2009. Disponible
en: http://wwww.ciesas.edu.mx/desacatos/31%20Indexado/saberes_4.pdf; SIEDER, Rachel y SIERRA, María, Acceso a
la justicia para las mujeres indígenas en América Latina, CHR, Michelsen Institute, 2011, Disponible en: http://www.
cmi.no/publications/publication/?3941=acceso-a-la-justicia-para-las-mujeres-indigenas-en
20
Cfr. Ibidem, p. 14.
21
VARGAS, Liliana, Las mujeres de Tlahuitoltepec Mixe Oaxaca frente a la Impartición de Justicia local y el uso
del derecho internacional (2000-2008), Instituto Nacional de las Mujeres, 2011, p. 45.
22
Cfr. INEGI. "Demografía y Población", 2010. Disponible en: http://www.inegi.org.mx/Sistemas/temasV2/
Default.aspx?s=est&c=17484
23
Idem.
24
CONAPO, "Descripción de la base de datos del índice de marginación a nivel localidad de Oaxaca",
2010. Disponible en: http://www.conapo.gob.mx/es/CONAPO/Indices_de_Marginación_2010_por_entidad_
federativa_y_municipio
25
INAFED, "Ficha básica municipal San Pedro y San Pablo Ayutla" en Enciclopedia de los Municipios y Delega
ciones de México, 2010. Disponible en: http://www.e-local.gob.mx/wb/ELOCAL/EMM_oaxaca
2) Una entrevista grupal con cinco mujeres que han formado parte del
cabildo como concejalas. En la entrevista se habló de su experiencia
política, conocimientos adquiridos, conflictos vividos y proyección a
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
futuro.
26
Vid. MASSOLO, Alejandra; BARRERA, Dalia y AGUIRRE, Irma, Manual hacia un diagnóstico sobre la situación
de las mujeres en el municipio con enfoque de género, GIMTRAP, A.C., México, 2005.
27
Cfr. GONZÁLEZ, Soledad; MOJARRO, Mariana y VALDEZ, Rosario, "Violencia conyugal…", op. cit., SIERRA,
María, "Las mujeres indígenas…", op. cit., SIEDER, Rachel y SIERRA, María, Acceso a la justicia…, op. cit.
28
VARGAS, Liliana, Las mujeres… op. cit., p. 29.
29
Cfr. ONU, "El progreso de las mujeres en el mundo. En busca de la justicia". Disponible en: http://progress.
unwomen.org/pdfs/SP-Report-Progress.pdf
30
Cfr. VARGAS, Liliana, Las mujeres…, op. cit.
31
Cfr. HERNÁNDEZ, Rosalva, "El derecho positivo…", op. cit.
CHENAUT, Victoria, "Género y justicia en la antropología jurídica en México" en Papeles de trabajo, n. 15,
33
Ilma es hoy una mujer de 26 años que fue víctima de abuso sexual desde
los seis años de edad y huyó "de la casa desde los diez" para evitar seguir
siendo violentada por su "padre, abuelo y hermano mayor". Se fue a vivir a
Ilma regresó a Ayutla, donde "se enfrentó" con la historia de violencia 455
de su padre hacia su madre. Se dio cuenta de que "hacerle justicia" a su
madre equivalía a elaborar su propio duelo: "después de 14 años… sentí
que [me] hacía justicia a mí, pero [también] que le hacía justicia a mi mamá".
Fue la actitud de su padre la que motivó sus deseos de actuar:
34
Cfr. HERNÁNDEZ, Rosalva, "El derecho positivo…", op. cit.
35
MARTÍNEZ, Laura y VALDÉZ, Miriam, Violencia de género…, op. cit., p. 5.
hay un embarazo en una menor, lo cual significa que pudo haber sido vio-
lada muchas veces antes de embarazarse. Si se da seguimiento a estos ca-
sos, se descubre que el violador es algún pariente. La partera de Ayutla nos
habló de tres casos: una "chiquita" de 14 años cuyo hermano "la embarazó";
otra "chiquilla" cuyo padre fue demandado, asunto que "nunca procedió
porque no lo pudieron comprobar"; y una tercera "chica, fue su tío quien la
violó, pero ese señor sí está en la cárcel" (partera, Ayutla, septiembre de
456 2010). Según IPAS-México, una de cada tres de las niñas de entre 10 y 14
años que son hospitalizadas en la SSA llega en situación de embarazo, par-
to, puerperio y/o aborto,37 cifras que indican la frecuencia y relevancia del
problema que marcó la vida de Ilma y que la motivó a actuar.
Le decía a mi mamá que mi papá no era Dios, no era alguien que puede
hacer lo que quiera, que sí había alguien que le pusiera un alto, pero eso
36
Cfr. TORRES RUÍZ, Gladys, "México: Incesto: delito acallado que violenta a las niñas". Disponible en: http://
www.cimacnoticias.com.mx
37
Cfr. Idem.
38
VARGAS, Liliana, Las mujeres…, op. cit., pp. 119-120.
39
Idem.
Antes el hombre… nada más la iba a pedir y ella tenía que pensar qué
decía… ya después de eso no debían hablar con nadie… nadie podía decir
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
nada… ella conocía al novio hasta que se iba a casar (participante del taller,
Ayutla, septiembre de 2011).
Según Liliana Vargas, "la manera en que los pobladores recurren a las
distintas instancias de justicia, comunitaria o estatal, depende de la respues-
ta que encuentran a nivel local, de las redes de relaciones externas con las
que cuentan, de los recursos culturales, simbólicos y materiales que tienen".40
Es evidente que las organizaciones que defienden los derechos humanos
de las mujeres funcionaron bien para la madre de Ilma. Así relata Ilma la
conversación que tuvo con alguien de Consorcio Diálogo Parlamentario
de Oaxaca:
Me sentía muy mal, no sabía con quién hablar o como hablarlo… Entonces
fui y me encontré a Jessica, la de Consorcio. Diosito es tan grande que me
40
Ibidem, p. 29.
Como puede verse, una visión del mundo donde la violencia de gé-
nero no es natural y no tiene por qué ser aceptada, empieza a generarse
en Ayutla. La eficacia del trabajo de organizaciones de defensa de derechos
humanos se constata no sólo para esta comunidad oaxaqueña, sino para
41
Cfr. Amnistía Internacional México, La lucha de las mujeres por la seguridad y la justicia. Violencia familiar en
México, Amnistía Internacional, México, 2008. Disponible en: http://www.amnistiainternacional.org/publicacion-69;
SIERRA, María, "Las mujeres indígenas…", op. cit., GONZÁLEZ, Soledad, "Violencia contra mujeres…", op. cit.
42
Cfr. ONU, "El progreso de las mujeres…", op. cit., y SIEDER, Rachel y SIERRA, María, Acceso a la justicia…
op. cit.
43
Cfr. MELÉNDEZ SERVÍN, Mary Loreley, Migración masculina y depresión femenina en Temas calciago, Es-
tado de México, Tesis de Maestría en Estudios para el Desarrollo Rural, Colegio de Postgraduados, México, 2012.
44
Secretaría de Salud, Norma Oficial Mexicana, NOM-046-SSA2-2005. Disponible en: http://www.inm.gob.
mx/static7Autorización_Protocolos/SSA/Violencia_familiar_sexual_y_contra_las_mujeres_criterios_par.pdf
45
Cfr. CASIQUE, Irene, "¿Cuándo puedo…", op. cit., GARCÍA, Silva, "Una mirada…", op. cit., MARTÍNEZ, Laura
y VALDEZ, Miriam, Violencia de Género… op. cit., VALDES, Rosario, et. al; "Violencia contra la mujer…", op. cit., OPS y
OMS, Prevención de la violencia sexual y violencia infligida por la pareja contra las mujeres: qué hacer y cómo obtener
evidencias, Organización Panamericana de la Salud/OPS/OMS, Washington, 2010; CAEMEG, "Violencia de géne-
ro…", op. cit., p. 29.
Entonces la ponen en una cama… le hablaban así como que con mucho
cariño y ya le dijeron que les explicara qué estaba pasando y mi mamá nada
más se me quedaba viendo y ya les dije que no hablaba español… me di-
462 jeron… vas a traducir con las palabras exactas lo que yo te voy a pregun-
tar… pregúntale cuántas veces la violó, si fue por decirlo cinco minutos y
luego paró o fue por período prolongado y en dónde la penetró primero,
en el ano, en la vagina o en la boca… yo… pensaba, ¿cómo yo a mi mamá
le puedo preguntar eso?... ¿con qué palabras? Y ellas me hacían una seña y
me decían, mira, tranquilízate, yo sé que las palabras son agresivas, pero es
necesario, para que nosotras podamos avanzar y para que este señor pa-
gue, necesitamos punto por punto para poder hacer algo por tu mamá…
yo le tenía que preguntar, es que la señora dice que cuántas veces, en mixe
es muy feo, es muy agresivo… Pero mi mamá iba contestando las preguntas
(Ilma, Ayutla, septiembre de 2010).
463
VIII. La vida en comunidad
después de la denuncia
46
VARGAS, Liliana, Las mujeres… op. cit., p. 37.
Fue él que dijo que se aplicaran los usos y costumbres. Iban a colgar a mi
mamá y me iban a colgar a mí, me iban a hacer caminar en el pueblo sin
ropa y eso era lo que nos merecíamos… mi papá… era un ciudadano y
47
Cfr. Ibidem.
Qué derecho tiene de juzgar a su papá… vamos a aplicar los usos y cos-
IX. Conclusiones:
identificando los obstáculos
y facilitadores del caso
4) Por todos los puntos anteriores, se concluye que no hay nada escrito
ni definitivo sobre los derechos de las mujeres indígenas. La historia
Para que sean más realidad que aspiración, consideramos que las
instituciones involucradas en el caso analizado tendrían que caminar en la
siguiente dirección:
sólo debe continuar, sino que tiene que llevarse a otras regiones.
Es imperativo apoyarlo con recursos financieros y humanos. Los esfuer
zos deben dirigirse a la prevención de la violencia de género.
X. Bibliografía
Sieder, Rachel y Sierra, María Teresa Acceso a la justicia para las mujeres
indígenas en América Latina: CHR, Michelsen Institute, 2011. Disponible
en: <http://www.cmi.no/publications/publication/?3941=acceso-a-la-
justicia-para-las-mujeres-indigenas-en> [30 de octubre de 2012].
Torres Ruíz, Gladys, "México: Incesto: delito acallado que violenta a las
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
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Vargas Vásquez, Liliana Vianey, Las mujeres de Tlahuitoltepec Mixe Oaxaca
frente a la impartición de justicia local y el uso del derecho internacional
(2000-2008), Instituto Nacional de las Mujeres, México, 2011. Dispo-
nible en: <http://cedoc.inmujeres.gob.mx/documentos_download/
101199.pdf> [9 de agosto de 2012].
*
Este trabajo obtuvo el tercer lugar del Cuarto Concurso "Género y Justicia. Categoría ensayo", edición de
2012.
1
Vid. Lévi-Strauss, Claude, Las estructuras elementales del parentesco, Paidós, México, 1999.
2
Vid. para el caso Latinoamericano Herrera, Gioconda, "Los estudios de género: entre el conocimiento y
el reconocimiento" en Herrera, Gioconda (comp.), Antología de estudios de género, FLACSO-ILDIS, Quito, 2001.
3
Cfr. Durkheim, Emile, "Introduction á la sociologie de la famille", Annales de la Faculté de Lettres de Bourdeaux,
Ed. Les Editions de Minuit, París, 1975.
4
Se legitimó en la idea de la estabilidad de la familia monogámica. López Austin, Alfredo, "La sexualidad
entre los antiguos nahuas" en Familia y sexualidad en Nueva España, FCE, México, 1982, pp. 150-155.
5
El Concilio de Trento dio el último paso en la reglamentación para el matrimonio, que fue el establecimien-
to de un ritual definitivo para reconocer su validez, consistía en que para su celebración asistieran testigos y un
sacerdote para celebrar la ceremonia, validez que luego se tomó en consideración para análogamente estable-
cerlo en la legislación civil, excepto lo relativo al sacerdote, con lo cual, como en la actualidad, se daba mayor
importancia al aval eclesiástico que al legal. Lavrín, Asunción, "Introducción: el escenario, los actores y el
problema" en Lavrín, Asunción (coord.), Sexualidad y matrimonio en la América hispánica. Siglos XVI-XVII, Grijalbo,
México, 1991, pp. 15-19.
6
Lewis, Oscar, Los hijos de Sánchez, FCE, México, 2000, p. 31.
la minoría de edad, atento a que ellos son producto de las redes de intercam
bio ambiental a las cuales están sujetos, por tanto, automáticamente le atri
buyen la característica de normalidad a las familias con este funcionamiento.
7
Cfr. Ibidem, p. 100.
8
El término se refiere a la predisposición cultural homogénea (sesgo) que sostiene la competencia innata
de la mujer en el cuidado de las hijas(os), por su indelegable responsabilidad del hogar.
9
Para evitar confusiones, el texto emplea el concepto "familia monoparental", en aquella que en términos
generales ha ocurrido una separación de la pareja, con independencia de los motivos o causas que hayan origi-
nado esa situación de hecho y como "familia reconstruida" se entiende aquella organizada en una composición
posterior a la unión de una pareja (hombre o mujer, indistintamente) que con independencia de la descendencia
biológica surgen nuevos lazos familiares, en los cuales participa una dinámica-transicional continúa de diversos
aspectos para su integración, pues cada uno de sus miembros tiene identidad a partir de una historia familiar previa.
10
La Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2009 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía
muestra que del total de hogares familiares, resaltan aquellos integrados por el jefe, la cónyuge y los hijos (63.8%
por ciento) y luego siguen los hogares monoparentales (constituidos por uno de los padres y sus hijos con
20.1% por ciento).
11
Concepto que estigmatiza a las mujeres, producto de la idea de familia tradicional (dada la naturaleza del
ensayo, no es posible abordar tal problemática exhaustivamente en este texto).
12
Datos Nacionales 2010 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
13
Vid., 3a. Serie: Información temática y continua de hogares en México. "Jefes de hogar por situación conyu-
gal y sexo, 1990, 2000 y 2010", Consejo Nacional de Población.
14
Vid. Coontz, Stephanie, The way we really are: Coming to terms with america´s changing families, Basic
Books, New York, 1997.
15
La fundamentación de juicios jurídicos está actualmente validada por estimaciones concretas de deber ser,
con lo cual se internalizan razones axiológicas a las normativas, que gozan de la fuerza expansiva de estas últimas.
Las razones axiológicas son el establecimiento de un equipo de principios morales en el texto constitucional
extenso, cobijados en la modalidad de derechos fundamentales, los cuales tienen un papel central en la actuali-
dad, pues brindan una perspectiva cosmopolita y holística sobre su valía en el desarrollo de una sociedad demo-
crática. Vid., Alexy, Robert, Teoría de los derechos fundamentales, Centro de Estudios Políticos y Constitucionales,
Madrid, 2001.
10. Artículos 3, inciso d), 4, 9, 11, inciso a), 12, 13, inciso c), 23, 24, 25, 29,
31, incisos b) y c), 39, 41, 45, 46, 47 y 49 de la Ley para la Protección
de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
donde las partes tienen vida en común por fuera del matrimonio.17
16
Para esta y siguientes referencias vid., Sentencia CoIDH. Caso Atala Riffo y Niñas Vs. Chile. Fondo, Reparacio
nes y Costas. 24 de febrero de 2012.
17
Condición Jurídica y Derechos Humanos del Niño. Opinión Consultiva OC-17/02 de 28 de agosto de 2002.
Serie A No. 17, párrs. 69 y 70. Asimismo: T.E.D.H., Caso Keegan Vs. Irlanda, (No. 16969/90), Sentencia de 26 de
mayo de 1994, párr. 44 y Caso Kroon y otros Vs. Países Bajos, (No. 18535/91), Sentencia de 27 de octubre de 1994,
párr. 30.
18
Cfr. Propuesta de Modificación a la Constitución Política de Costa Rica relacionada con la Naturalización.
Opinión Consultiva OC-4/84 del 19 de enero de 1984. Serie A No. 4, párr 55.
19
Cfr. Greig, Alan; Kimmel, Michael y Lang, James, "Men, Masculinities and Development: Broadening our
towards gender equality", Gender in Development Monograph series # 10, Mayo 2000, pp. 1-21.
20
Cfr. UNICEF, Role of men in the lives of children. A study of how improving knowledge about men in families help
strengthen programming for children and women, UNICEF, New York, 1997, p. 15.
21
Cfr. Ibidem, p. 16.
22
Un desarrollo judicial interesante se encuentra en el Amparo Directo en Revisión 1573/2011 de la Primera
Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Sin duda, el rol de los niños y niñas dentro de las familias es el más vulne-
rable. La infancia está condicionada a la asignación de roles que la sociedad
500 y el Estado le imponen, por considerarlos como normales.
23
En breves términos se refiere a la aversión expresada por la hija(o) hacia uno de los ascendientes, como
resultado de la opinión negativa que uno de estos integra en la realidad psico-cognitiva de la hija(o), por con
secuencia de la separación de una familia. Vid., la obra completa CNDH, Alienación parental, CNDH, México,
2011.
1. Recopilación diagnóstica.
Edad para
Custodia Custodia Custodia
Estado determinar Legislación relativa
madre padre indistinta
custodia
Art. 304 Código Civil y 190, 242 Bis del
Aguascalientes X 7 años
procesal
Art. 377, 378 Código Civil y 662 del
Baja California X 7 años
procesal
Baja California
X 7 años Art. 262, 315, 322, 391, 392 Código Civil
Sur
Art. 271, 300, 397, 398 Código Civil y
Campeche X 7 años
1389 del procesal
Chiapas X 7 años Art. 412, 418, 255, 256, 279 Código Civil
Art. 247, 248, 358, 393 Código Civil y 206
Chihuahua X 7 años
del procesal
Art. 377, 472, 473, 521, 552 Código Civil
Coahuila X 7 años
y 325 y 573 del procesal
Art. 259, 282 Código Civil y 212 del
Colima X 12 años
procesal
504
24
Cfr. Barker, Gary y Aguayo, Francisco, Masculinidades y políticas de equidad de género: Reflexiones a partir de
la encuesta IMAGES y una revisión de políticas en Brasil, Chile y México, UNFPA-ONU Mujeres, Chile, 2012, pp. 22-35.
505
25
Un dato revelador al respecto: El presidente del Poder Judicial del Estado de México en una nota perio-
dística puntualizó que en promedio en tres de cada diez divorcios los hijos se quedan con el padre, con lo cual,
la ley privilegia a la madre (puede consultarse en http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/8786753?quicktabs_1=0).
26
Puede consultarse en http://www.inegi.org.mx/lib/olap/General_ver4/MDXQueryDatos.asp?#Regreso
&c=12238
27
Vid. Tamayo Salmorán, Rolando, "Cómo hacer razonar con normas o cómo convertir normas en
razones o cómo desenredar este lío", Isonomía, Alicante, n. 21, 1998, pp. 437-462 y Atienza, Manuel, El Derecho
como argumentación, Ariel, Barcelona, 2009. Las posiciones de los autores parecen antagónicas; sin embargo, la
teoría jurídica contemporánea tiene incidencia en el planteamiento del profesor Tamayo Salmorán, pues actual-
mente las normas y argumentos judiciales operan como razones dispositivas para la acción u omisión, según sea
el caso; ello a través de la unidad del razonamiento práctico (ético), que logra acercar a la axiología con el dere-
cho, lo cual es una premisa dominante que está latente en toda actividad jurídica de la segunda posguerra.
28
Cfr. Bestard Camps, Joan, Parentesco y modernidad, Paidós, Barcelona, 1998, p. 80.
Bajo ese panorama, es injustificado pensar que la razón de que los pa
Las diferencias siguen asociadas con las actitudes de género y las nor
mas tienen un importante papel en el escenario para impulsarlas. Hay una
dicotomía simbólica en los dominios familiares que de forma mecánica
conducen a discriminar los derechos de los integrantes de la unidad familiar.
Es la genealogía del discurso y organización para ordenar y significar la vida
familiar, su dinámica e interacción con el mundo desde una posición tradi-
cionalmente prejuiciosa.
29
Vid., la Estrategia Mundial para la Alimentación del Lactante y del niño pequeño, de la Organización Mun-
dial de la Salud y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.
Por otro lado, si se analiza la razón finalista (que la hija(o) esté con
quien garantice su bienestar) se advierte una problemática seria, en virtud
de que entre justificación y directiva hay una escisión, por cuanto hay un de
sajuste entre la prescripción de que la hija(o) está mejor con la mamá y los
valores que intenta garantizar (igualdad e interés superior de la niñez); ya
Así, que sólo es correcto que la hija(o) esté con quien mejor garan-
tice su bienestar y desarrollo, pero son los prejuicios inyectados en la norma,
los que nos hacen creer que ese bienestar depende de la madre, por ser
mujer y, por ende, la única que puede ofrecerlo, cuando, el padre puede
ser igualmente competente para garantizar estándares benéficos de afecti-
vidad y estabilidad en la crianza de las hijas(os), pero la realidad discrimi
natoria ha reducido la comprobación empírica de esta posibilidad.
30
Cfr. Atienza, Manuel, El derecho como…, op. cit., p. 223.
31
En sentido amplio porque se refiere a las normas jurídicas y decisiones judiciales.
32
La inserción femenina en el mercado del trabajo remunerado sin el correlato de una participación de igual
magnitud de los varones en el cuidado de los hijos, conlleva la sobrecarga de tareas y obligaciones y efectos
negativos sobre la trayectoria laboral y salarial de las mujeres. Vid., UNICEF, "Cuidado infantil y licencias parenta-
les", Desafíos. Boletín de la infancia y adolescencia sobre el avance de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, n. 12,
Chile, julio 2011, pp. 1-12.
De las niñas, niños y adolescentes a través del tamiz del interés supe-
rior de la infancia: libertad de personalización, educación democrática y
desarrollo integral; en el Sistema Interamericano están previstos en los artícu
514 los 3.2, 6.2, 8.1, 9.1, 16 de la Convención sobre los Derechos de los Niños,
así como 1, 3 y 4 constitucionales.
33
Cfr. Cillero Bruñol, Miguel, "El interés superior del niño en el marco de la Convención Internacional
sobre los derechos del niño" en García Méndez, Emilio; Beloff, Mary (comps.), Infancia, ley y democracia en
América Latina. Análisis crítico del panorama legislativo en el marco de la Convención Internacional sobre los Derechos
del Niño (1990-1998), Temis/Depalma, Colombia, 1998, p. 71.
34
Cfr. Freedman, Diego, "Funciones normativas del interés superior del niño" en Jura Gentium, Revista de Filoso
fía del Derecho Internacional y de la Política Global, disponible en: http://www.juragentium.unifi.it/es/surveys/latina/
freedman.htm
tido estricto.
2. Caso paradigmático
35
Cfr. Alexy, Robert, "Los principales elementos de mi filosofía del Derecho", Isonomía, n. 32, Alicante, 2009,
pp. 67-89.
36
La aplicación metodológica de la formula ponderativa requiere, en palabras de Alexy, la optimalidad de
Pareto que se combine armónicamente con el principio de proporcionalidad en estricto sentido, que se trata
de la optimización de las posibilidades jurídicas, bajo la ley de la ponderación: "Cuanto mayor es el grado de la
no satisfacción o de afectación de uno de los principios, tanto mayor debe ser la importancia de la satisfacción
del otro", Idem.
37
Esta y otras consideraciones vid., Sentencia CoIDH Caso Forneron e Hija Vs. Argentina. Fondo, Reparaciones
y Costas. 27 de abril de 2012.
518
La mujer cuenta con protección por parte de instancias como el Ins
tituto de la Mujer o el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia cuando,
derivado de una separación de pareja, se le presenta un contexto desven-
tajoso; asimismo, cuenta con mecanismos legales para asegurar sus dere-
chos (medidas de protección, refugio en albergues, procesos de atención
multidisciplinaria, etcétera); estas medidas sí tienen por objeto garantizar
una finalidad objetiva y constitucionalmente válida, que es la de generar con
diciones de igualdad así como una vida libre de violencia para la mujer.38
38
No se prejuzga sobre su eficacia.
39
Cfr. Condición Jurídica y Derechos Humanos del Niño. Opinión Consultiva OC-17/02 de 28 de agosto de
2002. Serie A No. 17, párr. 56.
40
Es un argumento de peso que debe considerarse cuando ambos ascendientes tenga posibilidad de pro-
piciar un ambiente de bienestar a la hija(o), pues al margen de cualquier prejuicio, intervienen razones subjetivas
de la niña(o) como la cercanía emocional y empatía que no pueden dejar de considerarse.
41
En este aspecto la Corte Interamericana en el Caso Atala Riffo y Niñas Vs. Chile. Fondo, Reparaciones y Costas.
24 de febrero de 2012, utilizó como referencia los siguientes precedentes: 1) Australia: In the Marriage of C. and
J.A. Doyle, (1992) 15 Fam. L.R. 274, 274, 277 ("el estilo de vida de los progenitores no es relevante sin considerar
sus consecuencias en el bienestar del niño"); 2) Filipinas: Corte Suprema de las Filipinas, Joycelyn Pablo-Gualberto
v. Crisanto Rafaelito Gualberto, G.R. No. 156254 de 28 de junio de 2005, señalando que la preferencia sexual en sí
misma no es muestra de la incompetencia parental de ejercer la custodia de menores ("sexual preference or
moral laxity alone does not prove parental neglect or incompetence. [...] To deprive the wife of custody, the
husband must clearly establish that her moral lapses have had an adverse effect on the welfare of the child or
have distracted the offending spouse from exercising proper parental care") y 3) Sudáfrica: Corte Constitucional
de Sudáfrica, Du Toit and Another v Minister of Welfare and Population Development and Others (CCT40/01) [2002]
ZACC 20; 2002 (10) BCLR 1006; 2003 (2) SA 198 (CC) (10 September 2002), permitiendo la adopción de
menores de edad por parejas del mismo sexo por considerar que no afectará el interés superior del niño y
Corte Constitucional de Sudáfrica, J and Another v Director General, Department of Home Affairs and Others
(CCT46/02) [2003] ZACC 3; 2003 (5) BCLR 463; 2003 (5) SA 621 (CC) (28 March 2003).
42
Para mayor profundidad sobre como la internalización de las normas influye en la conducta y decisión de
los jueces vid. Posner, Richard A., How judges think, Harvard University Press, Cambridge, 2010.
Esta situación es delicada. México, al igual que otros países, está obli-
gado a adoptar medidas para revertir o cambiar situaciones discriminatorias
existentes en sus sociedades, lo que implica el deber especial de protección
que el Estado está comprometido a ejercer con respecto de actuaciones y 521
prácticas que, bajo su permisividad, mantengan o favorezcan situaciones
discriminatorias43 que sean innecesarias.
43
Condición Jurídica y Derechos de los Migrantes Indocumentados. Opinión Consultiva OC-18/03 del 17 de sep-
tiembre de 2003. Serie A No. 18, párr. 101.
44
Sentencia CoIDH Caso Forneron e Hija Vs. Argentina. Fondo, Reparaciones y Costas. 27 de abril de 2012,
párrs. 91-100.
45
Cfr. Rosario Lebrón, Aníbal, "La juridificación de la familia y su construcción como ente político",
Revista Electrónica del Instituto de Investigaciones Ambrosio L. Gioja, año V, Número Especial, Buenos Aires, 2011,
pp. 616-630.
46
Vid., Barudy, J. y Dantagnan, M, Los buenos tratos a la infancia: parentalidad, apego y resilencia, Gedisa,
España, 2005.
cepción sobre sí mismo, a la que estaba sujeto por las limitaciones del
machismo. Así que, en lugar de pensar que es un signo de madurez el no
manifestar emociones, el varón en su rol de padre entra en contacto con
sus emociones y sensibilidad, ajustándose a las relaciones familiares que le
son propias.
47
Cfr. Yablonsky, Lewis, Padre e hijo: lo más desafiante de las relaciones familiares, Manual Moderno, México,
1993, pp. 25-31.
48
Para la experiencia latinoamericana vid., Zicavo, Nelson, ¿Para qué sirve ser padre? Un libro sobre el divorcio
y la padrectomía, Chile, Universidad del Bio-Bio, 2006.
Ceboratev, Nora, "Familia, socialización y nueva paternidad", Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales,
50
51
Interesantes propuestas en Leñero Llaca, Martha, Equidad de género y prevención de la violencia en
preescolar, SEP-UNAM, México, 2009.
52
Por ejemplo la virilidad que representa la primera relación sexual, la incitación a la poligamia, la valoración
del ámbito público por encima del ámbito privado, la consecución del rol de proveedor exitoso, etcétera.
Concluyo este breve texto con la opinión del profesor Andrés Ollero,
quien dice que para poner a salvo los derechos humanos, debemos esfor-
zarnos por hacer transparentes mediante argumentos las atesoradas exi-
gencias de lo humano, pues ello nos hará conscientes de lo rechazable de
un planteamiento de "doble verdad", que legitima la función narcortiza
dora de la ideología condensada de tópicos acríticamente asumidos, aun-
que ello obligue a desafiar –contra corriente– la tolerancia represiva de los
antifundamentalismos estéticos.53
53
Ollero, Andrés, Derechos humanos. Entre la moral y el derecho, IIJ-UNAM, México, 2007,
pp. 26 y 27.
Coontz, Stephanie, The way we really are: Coming to terms with america's
changing families, Basic Books, New York, 1997.
Greig, Alan; Kimmel, Michael y Lang, James, "Men, Masculinities and Develo-
pment: Broadening our towards gender equality", Gender in Develo
pment Monograph series # 10, Mayo 2000, pp. 1-21.
López Austin, Alfredo, "La sexualidad entre los antiguos nahuas" en Fa
milia y sexualidad en Nueva España, FCE, México, 1982.
Posner, Richard A., How judges think, Harvard University Press, Cambridge,
2010.
ÉTICA JUDICIAL E IGUALDAD DE GÉNERO
Zicavo, Nelson, ¿Para qué sirve ser padre? Un libro sobre el divorcio y la
padrectomía, Universidad del Bio-Bio, Chile, 2006.