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LA EXPIACIÓN DE
JESUCRISTO
EN EL JARDÍN DE
GETSEMANÍ
Por
Raúl E. Fuentes Díaz
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Por
Raúl E. Fuentes Díaz
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
LA EXPIACIÓN DE
JESUCRISTO
EN EL JARDÍN DE
GETSEMANÍ
Por
Raúl E. Fuentes Díaz
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
PREFACIO
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
INDICE
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
CAPITULO 1
JESUCRISTO, NUESTRO
SALVADOR Y REDENTOR
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
21
LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Se les dijo que fuesen a Belén donde debía de nacer tal como lo
había predicho el Profeta Miqueas. Efectivamente, cuando
llegaron a Belén encontraron al niño con su madre, María, y
postrándose, le adoraron.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Y continuó diciendo:
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; palpad y ved,
porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo
tengo.
Y diciendo esto, les mostró las manos y los pies." (Lucas 24:36-
40.)
". . . Pon aquí tu dedo y mira mis manos; y acerca acá tu mano
y ponla en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Pero estas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo,
el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengáis vida en su
nombre." (Juan 20:27-31.)
". . . fue alzado; y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos.
Los que también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis
mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido llevado de
entre vosotros arriba al cielo, así vendrá como le habéis visto ir
al cielo." (Hechos l: 10-11.)
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Al salir del bosque, el joven Smith sabía —tan seguro como que
él vivía— que Dios y Jesucristo viven, que se le había aparecido
y hablado con él en respuesta a su humilde oración. Cuando
relató esta experiencia y su visión, a los ministros y a otras
personas, a pesar de ser un desconocido joven de catorce años de
edad, fue perseguido, ridiculizado, y atormentado por los
dirigentes de las principales sectas de esos días. No obstante eso,
él continuó proclamando su testimonio: que él había tenido una
visión, que Dios sabía que él la había recibido, y que no podía
negarla.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Por el poder del Espíritu Santo, sin duda alguna podemos llegar
saber que Dios vive, que Jesús es el Cristo, el Redentor del
mundo, que vino y moró entre los hombres, que voluntariamente
dió su vida, por cada uno de nosotros.
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
CAPITULO 2
LA REALIDAD DEL
CRISTO RESUCITADO
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Lucas, quien nos habla de los pastores y los coros celestiales que
éstos escucharon, fue un hombre educado. Era un doctor griego.
A pesar de que no fue un testigo visual de Cristo, conoció a
muchas personas que lo fueron, y escribió dos relatos que dedicó
a un amigo y a un gobernante. En uno de dichos relatos dice:
En aquellos días Cristo era una realidad para Pedro y hoy día
debe ser tan verdadero como entonces.
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Y otro respondió:
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
". . . Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo, nidos, pero
el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza." (Mateo
8:20.)
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
CAPITULO 3
LA DIVINA MISIÓN DE
CRISTO SOBRE LA TIERRA
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
CAPITULO 4
JESUCRISTO EL PRIMOGENITO
HIJO DE DIOS
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Y todo aquel que escucha la voz del Espíritu, viene a Dios, sí, el
Padre." (Doctrina y Convenios 84:46-47.)
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
CAPITULO 5
EL HIJO UNIGÉNITO
DE DIOS VINO A LA TIERRA
Y con esto los probaremos, para ver si harán todas las cosas que
el Señor su Dios les mandare;
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
El también nos explicó que cada ser mortal estaría sujeto a una
muerte espiritual, careciéndo del poder de resucitarse a sí mismo
de aquella muerte:
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Y oyó una voz del cielo que decía: Eres bautizado con fuego y
con el Espíritu Santo. Este es el testimonio del Padre y del Hijo,
desde ahora y para siempre;
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CAPITULO 6
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Heredó este poder por haber nacido de la virgen María (un ser
mortal) y por ser el Hijo de Dios (un ser inmortal celestializado).
Habiendo entonces tomado sobre sí la mortalidad, y habiendo
sufrido en Getsemaní por los pecados de todos los hombres, y
habiendo dado su vida en la cruz, quedaba solamente romper las
ligaduras de la muerte —el cuarto y último requisito— para
completar su misión terrenal como Redentor.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
". . . Se volvió y vio a Jesús que estaba allí; pero no sabía que
era Jesús.
". . . ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?" (Lucas
24:5.)
Más tarde ese mismo día, cuando Cleofas y otro iban camino a
Emaús, Jesús se les acercó, pero no lo reconocieron.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
" ¡Oh insensatos y tardos de corazón para creer todo lo que los
profetas han dicho!" (Lucas 24:25)
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Así pues, en ese día tan significativo, los que habían estado
relacionados con El vieron su glorioso cuerpo resucitado; y no
solamente lo vieron, sino que escucharon su voz y palparon las
heridas en sus manos, en sus pies, y también en el costado.
Delante de ellos tomó los alimentos y comió. Entonces supieron
que había recuperado el cuerpo que ellos mismos habían
depositado en la tumba. Su tristeza se convirtió en gozo por el
conocimiento de que El vivía y era un Ser inmortal.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
El dijo:
Se presentó como:
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Jesús dijo:
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CAPITULO 7
JESÚS NO HA MUERTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Durante los cuarenta días que pasó el Salvador con los Apóstoles
y otras personas, le escucharon y vieron hacer muchas cosas
imposibles de contar. Este ministerio especial transformó al
grupo incierto, confuso, dividido y débil de Apóstoles en un
conjunto de poderosos testigos del Señor. Marcos registra que el
Salvador reprochó a los once "porque no habían creído a los que
le habían visto resucitado" (Marcos 16:14).
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y oyó
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
CAPITULO 8
LA NATURALEZA
DIVINA DE JESUCRISTO
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
"Una virgen, más hermosa y pura que toda otra virgen" (1 Nefi
11:15).
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
". . . porque vendrá hora cuando todos los que están en los
sepulcros oirán su voz;
85
LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Leemos en Mateo:
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También dijo:
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Pedro escribió:
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CAPITULO 9
JESUCRISTO UN SER
INFINITO Y ETERNO
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Pero la vida mortal, por gloriosa que sea, nunca fue el objetivo
final del plan de Dios. La vida y la muerte aquí sobre el planeta
tierra eran sólo medios para alcanzar un fin, y no el fin por el que
fuimos enviados.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
Él dijo:
Y Jesús decía:
“. . . Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti; aparta
de mí esta copa; pero no lo que yo quiero, sino lo que quieres
tú." (Marcos 14:36)
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CAPITULO 10
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". . . Pues sabemos que es por la gracia por la que nos salvamos,
después de hacer cuanto podamos." (2 Nefi 25:23).
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Moroni dijo:
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"¿No has sabido? ¿No has oído que el Dios eterno, Jehová, el
cual creó los confines de la tierra, no desfallece ni se fatiga? Su
entendimiento es inescrutable.
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
CAPITULO 11
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
PREVALECE EN CONTRA DEL INFIERNO
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
CAPITULO 12
JESUCRISTO
ESCOGIDO Y PREORDENADO
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
―Muy bien, existe cierta ley mediante la cual uno puede tomar el
lugar del otro. ¿Están todos de acuerdo?‖, preguntó el maestro.
Isaías dijo:
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Él dijo:
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CAPITULO 13
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El Señor ha dicho:
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CAPITULO 14
EL PLAN DE MISERICORDIA
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Este plan fue rechazado por nuestro Padre, porque nos privaba
de nuestro albedrío. De hecho, era un plan de rebelión. Entonces
Jesucristo, el ―Amado y… Escogido [Hijo] del [Padre Celestial]
desde el principio‖, ejerció Su albedrío para decir:
Y Dios dijo:
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CAPITULO 15
JESUCRISTO EL AUTOR
DE ETERNA SALVACIÓN
Dijo Jesús:
"Y todo aquel que vive y cree en mí no morirá jamás. . . " (Juan
11:25-26.)
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LA EXPIACON DE JESUCRISTO
llevó una vida perfecta y sin pecado, y por lo tanto, estaba libre
de las demandas de la justicia. Él era y es perfecto en todo
atributo, como el amor, la compasión, la paciencia, la
obediencia, el perdón y la humildad. Su misericordia paga
nuestra deuda con la justicia si nos arrepentimos y le
obedecemos. Puesto que, aun con nuestros más arduos esfuerzos
por obedecer Sus enseñanzas, todavía nos quedaremos cortos,
por causa de Su gracia seremos salvos "después de hacer cuanto
podamos" . (2 Nefi 25:23).
El Señor nos ha dicho que estamos aquí para ser probados, para
ver si seremos valientes y obedientes a Sus enseñanzas.
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CAPITULO 16
Jesús fue al pie del monte de los Olivos para llevar a cabo la
primera etapa de la Expiación, la cual se cumplió en el huerto de
Getsemaní. La palabra Getsemaní proviene de dos raíces
hebreas: gath, que quiere decir "prensa", y shemen, que significa
"aceite", en particular el de la oliva.
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El amor por esas otras ovejas trajo al Señor resucitado hasta ellas
en este continente americano, a quienes dijo:
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CAPITULO 17
LA NATURALEZA DIVINA
DEL UNIGÉNITO
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CAPITULO 18
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CAPITULO 19
EL GRANDIOSO Y SUPREMO
SACRIFICIO DE CRISTO
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"Porque todas las veces que comáis este pan, y bebáis esta
copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga." (1
Corintios 11:26).
Y finalmente:
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CAPITULO 20
LAS DIMENCIONES
DE LA EXPIACIÓN
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Una cosa es saber que Jesucristo vino a la tierra para morir por
nosotros, lo cual es básico y fundamental respecto a la doctrina
de Cristo; pero también es necesario que reconozcamos que el
Señor desea, mediante Su expiación y por medio del poder del
Espíritu Santo, vivir en nosotros, no sólo para guiarnos, sino
también para darnos poder.
fortalece para hacer el bien y ser benignos, y para servir más allá
de nuestro propio deseo personal y de nuestra capacidad natural.
Tal vez ningún ser humano sepa, pero el Hijo de Dios sabe y
entiende perfectamente, porque Él sintió y llevó nuestras cargas
antes que nosotros; y, debido a que Él pagó el precio máximo y
llevó esa carga, Él entiende perfectamente y puede extendernos
Su brazo de misericordia en muchas etapas de la vida. Él puede
extender la mano, tocarnos, socorrernos, literalmente correr
hacia nosotros, y fortalecernos para que seamos más de lo que
jamás podríamos ser, y para ayudarnos a hacer lo que nunca
podríamos lograr si dependiéramos únicamente de nuestro
propio poder.
Jesucriso declaró:
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CAPITULO 21
LA DIVINIDAD DEL
MESIAS PROMETIDO
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Así pues, los hombres son libres según la carne; y les son dadas
todas las cosas que para ellos son propias. Y son libres para
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Él sufrió:
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Él experimentó.
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“. . . ¡Elí, Elí!, ¿lama sabactani? Esto es: ¡Dios mío, Dios mío!,
¿por qué me has desamparado?” (Mateo 27:46.)
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CAPITULO 22
EL PLAN DIVINO
DE LA CRUCIFIXIÓN
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Esto ocurrió dos veces más hasta que a la tercera Él dice con
compasión:
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CAPITULO 23
EL PLAN DE
SALVACIÓN
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
¿No sabéis que era santo? Mas no obstante que era santo, él
muestra a los hijos de los hombres que, según la carne, él se
humilla ante el Padre, y testifica al Padre que le sería obediente
al observar sus mandamientos. (2 Nefi 31:5–7).
“Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados,
el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la
verdad muerto en la carne, pero vivificado en el espíritu.”
(1 Pedro 3:18).
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
¿Qué sucede con los obedientes? Las personas que han aceptado
y vivido de acuerdo con el Evangelio de Jesucristo también
habitan en el mundo de los espíritus. El profeta Enoc previó la
crucifixión del Salvador del mundo cuando:
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
“Mas a los inicuos no fue, ni se oyó su voz entre los impíos y los
impenitentes que se habían profanado mientras estuvieron en la
carne. (Doctrina y Convenios 138:20)
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
¿Por qué efectúan bautismos por personas que han fallecido cuya
vida en la tierra indicaba una escasa inclinación a guardar los
mandamientos de Dios? Creemos que muchas personas son
como Amulek, que una vez dijo: ―Endurecí mi corazón, porque
fui llamado muchas veces, y no quise oír; de modo que sabía
concerniente [al Evangelio de Jesucristo], mas no quería saber‖
(Alma 10:6). Posteriormente, Amulek llegó a ser un gran
misionero y maestro para su pueblo. Hubo además una época en
el Libro de Mormón en la que los lamanitas más justos
persiguieron a los extremadamente endurecidos ladrones de
Gadiantón y ―predicaron la palabra de Dios entre la parte más
inicua de ellos, de modo que esta banda de ladrones quedó
enteramente destruida entre los lamanitas‖ (Helamán 6:37).
Sencillamente, desconocemos quiénes de entre los muertos
tornarán sus corazones al Señor y se arrepentirán. No nos
hayamos en posición de juzgar; debemos efectuar la obra y dejar
esa cuestión en manos de la persona fallecida y del Señor. Para
los que lloran El Salvador mismo esperó con gran anhelo Su
visita a los obedientes que se hallaban en el mundo de los
espíritus:
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
CAPITULO 24
LA GOZOSA MAÑANA
DE LA RESURRECCIÓN
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Él escribe que:
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
“Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; palpad y ved,
porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo
tengo.” (Lucas 24:39).
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Jesús dijo:
191
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Jesus declaró:
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EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
Los que también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis
mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido llevado de
entre vosotros arriba al cielo, así vendrá como le habéis visto ir
al cielo. (Hechos 1:10–11.)
CAPITULO 25
LA VITAL IMPORTANCIA
DE LA RESURRECIÓN
195
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; palpad y ved,
porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo
tengo”. ( (Lucas 24:36-39)
Y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo
padeciese y resucitase de los muertos al tercer día. (Lucas
24:45-46).
196
EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
197
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
CAPITULO 26
LA AGONÍA EN EL
JARDIN DE GETSEMANÍ
201
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
soltaran a Jesús. Hizo esto por lo menos tres veces y cada vez
ellos dijeron:
205
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
El Salvador dijo:
206
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207
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Y Pilato les dijo: Ahí tenéis una guardia; id, aseguradlo como
sabéis." (Mateo 27:63-65)
Eso fue todo lo que dijo en esa ocasión. Pedro se explaya acerca
de este principio y nos dice (según lo hemos interpretado, aun
cuando el texto exacto no lo dice, pero al menos lo implica
claramente), que durante este período, mientras yacía su cuerpo
en el sepulcro, él predicó a los espíritus encarcelados:
209
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
210
EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
CAPITULO 27
211
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
"Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; apalpad y ved,
porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo
tengo.
212
EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
213
LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
Y luego agregó:
214
EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
El le contestó:
Dijo ella;
Le dijo a Marta.
Porque aun:
". . .Los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la oigan
vivirán." (Juan 5:25)
Y al oirla, juzgarán:
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
CAPITULO 28
218
EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
―Se nos dice [en 2 Nefi 9:7] que la Expiación debe ser infinita.
¿Por qué tenía que ser una Expiación infinita? Por la sencilla
razón de que un arroyo nunca puede ir más arriba que su
manantial; y el hombre habiendo tomado un cuerpo de carne y
mortal, y al violar una ley y habiendo puesto fin a su relación
con su Padre, quedando sujeto a la muerte; en esta condición,
como la vida mortal del hombre era breve y en sí no podía tener
esperanza alguna de beneficiarse o redimirse de su estado caído,
o de llevarse de regreso a la presencia de su Padre, alguna
entidad superior tenía que elevarle por encima de su condición
caída y degradada. Esa entidad superior era el Hijo de Dios que,
a diferencia del hombre, no había violado la ley de Su Padre,
sino que era uno con Su Padre, poseyendo Su gloria, Su poder,
Su autoridad, Su dominio‖ (The Mediation and Atonement,
1882, pág. 145).
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
220
EN EL JARDÍN DE GETSEMANÍ
―Por ser él también Dios, sí, el mismo Hijo de Dios, pudo tomar
sobre Sí la carga y el peso de los pecados de otros hombres.
Isaías profetizó sobre la buena disposición del Salvador para
hacer eso, diciendo: ‗Ciertamente llevó él nuestras
enfermedades, y sufrió nuestros dolores…
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LA EXPIACIÓN DE JESUCRISTO
BIBLIOGRAFIA
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