SIMPLICIDAD TRIBUTARIA

Podría resumirse en la afirmación de que las normas tributarias deben ser

claras y transparentes, deben gozar de continuidad y su gestión y liquidación
debe ser sencilla para el contribuyente y para la Administración Tributaria.

La simplificación tributaria constituye un verdadero designio para cuyo logro es

menester adoptar una serie multifacética de decisiones, tanto de orden jurídico
como administrativo, orientadas a alcanzar el objetivo de sistematizar y
racionalizar el régimen legal de la materia y el funcionamiento de la
Administración Tributaria para que puedan desarrollarse de manera sencilla,
eficiente y eficaz, teniendo óptimo aprovechamiento de los recursos y
acrecentando la productividad del gasto.

Se trata de una meta deseada, en virtud de las evidencias ventajas que puede
aportar. Pero deberemos tener presente que la simplificación no constituye por
si sola, sino un aspecto parcial de la temática que hace a la estructura,
aplicación y funcionamiento de un sistema tributario, por lo cual no puede ser
analizada fuera de contexto.

(Ejemplo: nación, provincias y/o municipalidades).