Jerusalén, no te olvidaré El pueblo de Israel sufría la esclavitud.

Oyó
Yahvé sus lamentos, y se acordó de su alianza con
Al borde de los canales, Abraham, Isaac y Jacob. Yahvé vio que Moisés se
Que pasan por Babilonia, acercaba y lo llamó : “Yo soy el Dios de tus padres,
Nos sentá bamos llorando el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. He visto
Al recordar a Sió n. la humillació n de mi pueblo en Egipto, y he
escuchado sus gritos. Ve, pues, yo te envío para
En los sauces, que allí crecen, que saques de Egipto a mi pueblo, los hijos de
Jerusalén, colgado
Habíamos no te olvidaré
nuestras arpas. Israel”.
Éxodo 3
Al borde cuando
Fue entonces de los canales,
nuestros vencedores
Que pasan por Babilonia,
Nos pedían canciones
Nos sentá bamos llorando
Y nuestros opresores
Al recordar a Sióde
n. alegría. Cuando Abraham tenía noventa y nueve añ os
Un canto
se le apareció Yahvé y le dijo: “Esta es mi alianza,
“Cá ntenos, nos decían,
En los sauces, quedeallí que yo voy a hacer contigo: tú será s el padre de
Un canto Siócrecen,
n”.
Habíamos colgado nuestras arpas. muchas naciones. Yo te haré crecer hasta lo
sumo; pueblos y reyes saldrá n de ti. Yo seré el
¿Có mo íbamos nosotros a cantar
Fue entonces cuando nuestros vencedo Dios tuyo y, después de ti, de tu descendencia. Yo
Canciones del Señ or
Nos pedían canciones te daré a ti y tu posteridad la tierra en que andas
En un suelo extranjero?
Y nuestros opresores como peregrino, toda la tierra de Canaá n en
UnSicanto de alegría. posesió n perpetua y seré el Dios de los tuyos”.
me olvido de ti, Jerusalén,
que mi manonos
“Cá ntenos, decían,de servirme.
se olvide
Un canto de Sió n”. Génesis 17

Que mi lengua se pegue al paladar

¿Có mo
Si íbamos
de ti nonosotros a cantar
me acuerdo,
Canciones del Señ or
O si Jerusalén no es para mí El decá logo
En un suelo extranjero?
Mi mayor alegría.
Entonces Yahvé dijo: “Yo soy Yahvé tu Dios, el
Si me olvido de ti, Jerusalén,
Acuérdate, Señ or, que te sacó de Egipto, país de la Esclavitud.
que mi mano se olvideque
De la gente edomita de servirme.
decía -No tengas otros dioses fuera de mí.
El día en que cayó Jerusalen: -No te postres antes otros dioses, ni les des
Que mi “Echen
lengua abajo
se peque al paladar
todo, culto, porque Yo, Yahvé, tu Dios, soy un Dios
Si de ti no me acuerdo,
Arrá senla hasta los mismos cimientos.” celoso.
O si Jerusalén no es para mí
-No tomes en vano el nombre de Yahvé, tu
Mi mayor alegría.
Hija de Babilonia, Dios.
Que será s destruida, -Trabaja seis días, pero el día séptimo es día
Acuérdate,
DichosoSeñ
el or,
que te hiciere de descanso, consagrado a Yahvé, tu Dios.
De la gente edomita
Los males que a nosotrosquenos
decía
hiciste. -Respeta a tu padre y a tu madre, para que se
El día en que cayó Jerusalen:
prolongue la vida.
“Echen
Dichoso abajo
aquel quetodo,
agarre a tus pequeñ os -No mates.
Arrá senla hasta
Y los haga pedazos losen
mismos cimientos.”
las piedras. -No andes con la mujer de tu pró jimo.
-No robes.
Hija de Babilonia, Salmo 137 -No des falso testimonio contra tu pró jimo.
Que serás destruida,
-No codicies la casa de tu pró jimo, ni nada de
lo que le pertenece.
Todos los cobradores de impuestos y
pecadores se acercaban a Jesú s para escucharlo. Éxodo 20
Los fariseos y los escribas comenzaron a
murmurar, y decían: «É ste recibe a los pecadores,
y come con ellos». Entonces Jesú s les contó esta
pará bola: « ¿Quién de ustedes, si tiene cien ovejas
y pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve
en el desierto, y va tras la que se perdió , hasta
encontrarla? Y cuando la encuentra, gozoso la
pone sobre sus hombros, y al llegar a su casa
reú ne a sus amigos y vecinos, y les dice:
“¡Alégrense conmigo, porque he encontrado la
oveja que se me había perdido!”- Les digo que así
también será en el cielo: habrá más gozo por un
pecador que se arrepiente, que por noventa y
nueve justos que no necesitan arrepentirse.

Evangelio de San Lucas, 15.