ZAPATOS

El zapato hoy en día se considera un símbolo de estilo. No es un simple complemento, sino que junto
con el bolso es el complemento. Es un elemento cuya función es la de proteger el pie, pero también
tiene una función estética: lo enmarca, lo exhibe, le ofrece un entorno o cuadro que forma parte del
conjunto, realza los pies.
También representan acción y movimiento. Y esto también va asociado a una exposición psicológica
que muestra la entereza o firmeza de cada uno: andar con seguridad. La forma de andar dice mucho
de una persona.
Reflejan la posición social y a qué grupo se pertenece: tribu, status, clase, estilo, etc. Los zapatos
tienen un significado social y psicológico según el entorno.
Muestran la personalidad de cada uno puesto que tienen una connotación fetichista: muestra una
actitud psicológica llamada “retifismo”, que significa obsesión por los zapatos.

HISTORIA.

El calzado surgió como un elemento que de algún modo separó al hombre de su conexión directa
con la naturaleza, puesto que surgieron nuevas necesidades que protegiesen al humano de las
inclemencias del tiempo y el desgaste nómada. Con los años se convirtió en un elemento que según
las civilizaciones mostraban costumbres impuestas: las deformaciones causadas en los pies de las
chinas, las botas inusuales que usaban los jinetes nómadas en la India, las babuchas orientales que
recuerdan que en un templo sagrado hay que entrar descalzo…

En la Antigüedad, sobre el 7000 A.C., aparecen las primeras sandalias. Los primeros zapatos eran
simples bolsas de pie para proteger de piedras o frío. El primer zapato que se conoce es un modelo
de cuero ajustado a los pies y sujeto con tiras de cuero sin curtir en Babilonia en 1600 a.C.

Este tipo de zapato es similar en el Antiguo Egipto, Grecia y Roma posteriormente dando lugar al
modelo Carabina: sandalia con suela de cuero que se sujeta con tiras de piel entrelazadas.

sandalias romanas actuales

En las civilizaciones posteriores del 4.000 A. C. como Mesopotamia y Egipto van surgiendo los tres
tipos de calzado básicos: el zapato, la bota y la sandalia.

En el medio Oriente se agregó tacos a los zapatos para alzar el pie de la arena ardiente del desierto.
En el S.IX surgen los primeros indicios de botas llamadas Heuse que estaban hechas de un cuero muy
suave y con cintas entrelazadas que cubrían la pierna como las que usaba Carlomagno, y que podían
ir adornadas con piedras preciosas.
En el S. XI llevan unos botines blandos, una especie de zapatos terminados en punta como la cola de
una serpiente que se prolongan por el S. XII, XIII, XIV cada vez más largos y que se denominaba
polaina. Estaba hecha de cuero, terciopelo o brocado.

También en el S. XIII aparecen las alpargatas o espadrillas: zapatos de tela con suela de de cuerda
procedentes del Nororeste español.
Hasta ahora todos los zapatos son de corte plano o con tacos de madera. Entre los S. XVI y XVII
aparecen los chapines en Venecia: Calzado de plataforma altísimo e incómodo usado por las mujeres
para obtener altura. Estaban hechos de madera. Aparecen también por primera vez los tacones de
color rojo pero sólo estaban destinados para la clase alta porque su teñido tenía un alto costo.

En la Edad Media el zapato fue adquiriendo un status de lujo, donde cada vez estaban más
enriquecidos con bordados y decorados. También aparece el zapato del clérigo que obligaba a usarlo
en los actos litúrgicos y estaban hechos de tela. El efecto de la punta elevada en los zapatos venía
determinado por el hecho de evitar el desgaste y ruptura de la misma.
En el S. XV los zapatos dejan de ser puntiagudos y adquieren una punta cuadrada o redondeada y de
corte ancho. Hacia el S.XVI este tipo de zapato aparece incluso con cuchilladas posteriormente y se
les llamaban escarfignons (escarpines), y mostraban las medias que se llevaban debajo.

Pero a partir del S. XVI aparecen los zapatos de tacón, que se introducen en Europa por influencia
del ejército persa en su visita a Francia. Los tacones fueron usados por siglos en el Medio Oriente
como el calzado para los jinetes, cuando los soldados se aferraban a sus estribos, el tacón ayudaba a
sujetarse al caballo y así poder disparar sus flechas con más precisión.

zapato persa del S. XVII

En 1670 Luis XIV firma un edicto donde solo los miembros de su corte podían calzar con tacones
rojos. Un ejemplo de connotación actual de exclusividad son las suelas de color rojo de Louboutin.

Zapato de suela roja de Louboutin icono de exclusividad actual

En la Europa del S. XVII usaban los tacones tan altos que necesitaban un sirviente a cada lado para
ayudar a ponérselos.
En este siglo también estaban muy adornados y enriquecidos con accesorios y apliques: hebillas,
perlas, piedras preciosas, brillantes, plata, esmalte. Todo mostraba ostentación y riqueza.
En este siglo también las puntas de los zapatos que eran redondeadas se hacen cuadradas. Llevaban
unas aberturas laterales para ajustarlas mejor y ese cierre se ocultaba frontalmente por una hebilla o
un gran lazo. El tacón permanecía para dar porte a hombres y mujeres. Las botas se denominan
ladrines o calderón y son unas botas con un puño ancho en la caña y con tacón para enganchar en el
estribo.

botas ladrones y calderón

A principios del S. XVIII apenas varían los formatos de zapatos excepto en que vuelven a ser
puntiagudos o de punta redonda. Para interior se usaban zapatos destalonados tipo chinelas y para
el exterior un zapato de tacón alto a los cuales se les podían incrustar incluso diamantes. También
hay un interés por lo oriental que se ve reflejado en las puntas hacia arriba y los brocados refinados
y ornamentados. También cogió especial relevancia la hebilla en el calzado de caballero.
 chinela S.XVIII

Hacia finales del S. XVIII los zapatos de hombre se vuelven planos, de cuero negro y con hebilla. Y en
la era napoleónica este será el formato de zapato masculino que se extenderá hacia principios del
S.XIX.

En el S.XIX, durante los inicios y la época de la regencia las mujeres usaban zapatos bajos y cómodos
tipo ballerinas que se ajustaban a la pierna mediante cintas.
Mientras que los hombres usan botas altas de estilo militar como zapato reglamentario, y esta bota
podía ser de caña alta o baja, con o sin puño.

Hacia 1830 se pone de moda el botín que va elevando poco a poco su tacón y se ajusta a la pierna
con botones o con cordones.

Aparece también el primer cubre zapato o polaina.

Y hacia 1840 la Reina Victoria (muy puritana) puso de moda la bota balmoral, que fue el primer
botín para dama, y se podían cerrar con botones, y también se podían hacer brocados y de satén.
A mediados del siglo el oxford es el zapato masculino que se impone y este modelo perdurará en la
moda hasta hoy en día.
A finales de siglo los hombres usaban calzado exagerado y con formas ridículas con puntas afiladas,
tacones grandes aplastados, etc. La mujer a final de siglo recupera el tacón.

También a finales del S. XIX en Filadelfia se fabricó el primer par de zapatos en el que el zapato
derecho era distinto al izquierdo. Hasta entonces todos los zapatos del mundo eran iguales tanto un
pie como otro. Cambian las formas cóncavas de la horma del zapato. Y también surge la producción
seriada de zapatos.
A partir del XX los zapatos evolucionan rápidamente. Ya a finales del siglo anterior empieza a haber
un cierto interés por los deportes y aparecen los primeros calzados para este tipo de actividades,
que en un inicio eran zapatos o botines acordonados y ajustados al pie. Las deportivas se inventaron
en EEUU en 1916. La deportiva de lona que venía derivada de 1830 se consolida con las Converse All
Stars de 1917 como zapatilla de baloncesto.

El estilo de bota victoriana para mujer sigue presente para el día, y más ecotados con tacón Luis XV
para la noche con lazos, cintas y brocados de satén.
Los hombres usan Derbys, Blutchers y Oxfords.

Con la Primera Guerra Mundial las mujeres tienen que incorporarse al mundo laboral y por tanto
buscan un calzado más cómodo, además de imponerse el traje sastre femenino.
Con los años 20, las faldas se acortan hasta la rodilla y por tanto las mujeres buscan zapatos de
colores llamativos, escotados, con los primeros tacones de aguja, las punteras afiladas y con trabilla
que cierra con un botón.

Los hombres llevan zapatos clásicos planos a los que aplicaban una polaina corta que les cubría el
tobillo haciendo un efecto de botín. Zapatos spectator de piel combinada en color y hacia finales de
la década zapatos que combinan piel de cocodrilo, con charol y cuero.
Hacia los años 30 los vestidos de noche se vuelven largos y con cortes sesgados por lo que los
zapatos adquieren tacones muy altos.

Con el inicio de la Segunda Guerra Mundial aparecen las cuñas, porque no había mucho material
para hacer zapatos y la cuña de madera o corcho era económica. Las cuñas ya las había creado
Ferragamo en los años 30 y en los 40 se institucionalizó.

Pero hacia finales de los cuarenta y con la aparición del “New Look” de Dior la mujer se vuelve más
femenina y la falda que llega hasta la pantorrilla acompaña su gran vuelo de unos tacones muy altos
que se extenderán hasta los años 60. Y para el día las jóvenes se acompañaban de bailarinas y
slipers. Los jóvenes estudiantes masculinos llevan desert boots o botas safari.
En los sesenta la falda se acorta y el tacón desaparece para dar lugar a zapatos de punta redondeada
y los clásicos Richelieu y Derbys se instauran junto a un nuevo formato de zapato que atrae a los
jóvenes: el mocasín. También se suben las cañas altas de las botas de mujer y se ajustan a la pierna,
además de emplearse materiales atípicos como el charol.

En los 70, en los 80, en los 90, en el 2000… son décadas de cambio donde el calzado femenino y
masculino se fue adaptando a los cambios sociales y vitales. Vuelven los tacones altos, las
plataformas, las cuñas, las botas mosqueteras, los botines, etc . La sociedad cambia y el calzado
deportivo se desmarca de su función única para convertirse en un calzado urbano, casual, diario. Los
materiales se amplían y las nuevas tecnologías aportan nuevos formatos y líneas de diseño. La
ecología y la vida al aire libre aportan nuevas visiones sobre el enfoque del calzado: se convierte en
una filosofía.

FABRICACIÓN DEL ZAPATO:

En la fabricación de zapatos hay diferentes pasos donde el primer paso si hablamos de un zapato
hecho a medida tenemos que hacer primero una toma de medidas. Si se trata de unos zapatos
generalizados pasaríamos al punto dos que es la creación de la horma directamente. Posteriormente
los siguientes pasos son comunes.
1. Toma de medidas:
Es muy importante este paso ya que aparte de la forma influye en la comodidad y anatomía. Aquí se
emplea mucho tiempo, sobre unas dos horas, ya que es muy importante tomar las medidas a los dos
pies. Además hay que tener en cuenta los cambios que nuestros pies pueden sufrir a lo largo del día,
como temperatura, esfuerzo, postura, forma de caminar y actividad producida.
La toma de medidas se debería realizar en horario matutino, cuando el pie está más descansado.
Cuando existen enfermedades o malformaciones, como dedo de martillo, callosidades, juanetes…
esto se debe tener en cuenta tanto para la comodidad como para la estética.
Las medidas necesarias para una horma son la longitud, la anchura, la altura y el contorno de pie
desde dos o más posiciones: mientras el pie apoya el peso del cuerpo y en estado relajado
(imprescindibles).Cuando la persona está de pie, la anchura del pie puede registrar una diferencia de
casi un centímetro respecto a la posición sedente; además, el arco del pie disminuye y los nervios,
músculos y tendones se tensan. Esta posición sería equivalente a la que se encuentra el pie cuando
camina soportando carga. De esta manera el zapato se ensancha al caminar, así como también a
consecuencia del tiempo, del calor y de la humedad que produce el pie.
Cuando se toman las medidas mientras la persona está sentada estas varían: el pie es más pequeño.
Estas medidas son muy importantes ya que permiten calcular cual es la diferencia de tamaño, la
anchura del pie al caminar, y la posible dilatación del zapato durante el uso.
La primera fase de la toma de medidas consiste en el estudio del pie para poder determinar su
forma; siguiendo un eje longitudinal imaginario se comprueba si el pie tiende hacia el exterior o
interior, si el arco interior es pronunciado o no, la situación del tobillo, si el talón es fuerte o débil,
como son los empeines y los laterales o si existen deformidades como talón vago, pie plano,
metatarso acentuado, quinto dedo prominente, dedos de martillo, juanetes, o pulgar saliente. Hay
casos muy evidentes visualmente, pero en otros es necesario palpar la forma y el contorno de pie. El
zapatero también observa la manera de caminar del cliente, influida por peso corporal o hábitos
adquiridos. También observa los anteriores zapatos usados (desgaste de suela, tacón, inclinaciones,
roces,….) y sus malformaciones ya que son claros indicativos de estos problemas y así solucionarlo
en la creación del nuevo par.

Se hace el dibujo del contorno, se toma la huella del pie con el pedígrafo, que transmite una imagen
precisa del puente y refleja los puntos de cruce de los arcos y la situación de los dedos.
MEDIDAS DEL PIE:
• CIRCUNFERENCIA: se mide en tres puntos.

• LONGITUD DEL PIE: Se añade 1’5 cm. a la medida para obtener un número y medio más
porque al caminar los dedos se alargan. Se mide con un pedígrafo o Sistema Brannock.

• CONTORNO DEL PIE: Se contornea el pie puesto sobre un papel y con un lápiz totalmente
vertical. Se miden los dos pies porque los contornos son distintos.
• PERFIL DEL PIE: Se coloca debajo del talón un tacón de la altura que se va a usar. Se coloca
un papel en vertical paralelo al pie y con un lápiz sujeto a una escuadra que se apoya al
papel se traza el perfil del mismo.
• HUELLA DEL PIE: Se entinta la planta y se plasma la huella en el papel. Ahí se estudian los
puntos de apoyo del pie.
• ALTURA DE LOS MALÉOLOS: Se miden con una escuadra.

2. Fabricación de la horma:
Una vez que obtenemos la ficha de mediciones la siguiente función importante es la de creación de
la horma: una copia abstracta en madera o plástico del pie humano cuya función es sustituir al pie
durante la confección del zapato y actuar como superficie de trabajo.
Las hormas correspondientes al volumen interior y la forma exterior del zapato se elaboran de
acuerdo con las medidas que se han tomado del pie, y siempre por pares. El pie derecho y el
izquierdo nunca son reflejos perfectos, se dan diferencias de tamaño y forma. Un buen hormero,
tiene en cuenta las leves diferencias especificadas en la hoja de medición y las traslada al zapato.
La horma es necesaria tanto para un zapato hecho artesanalmente y a medida, como para uno
fabricado en serie.
Una horma de zapato a medida que resulte perfecta puede utilizarse durante años, se anota el
nombre del cliente y se almacena en una sala adecuada con temperatura y humedad propias para la
conservación de forma y elasticidad como el primer día. De todas formas habrá que revisar el
volumen de la horma cada dos tres años, ya que el volumen del pie puede cambiar por la pérdida o
aumento de peso, forma de andar, práctica de deporte, algunas deformidades propias del pie,
enfermedad, accidente…En ese caso se deberían tomar las medidas de nuevo y elaborar nuevas
hormas, así como si el cliente decide un nuevo modelo de zapato diferente.
Hormas extendedoras: se trata de hormas para mantener la forma del zapato y facilitar su
conservación: puede ser clásica, regulable, con muelle, con bisagra.
-Tensora sirve para ensanchar artesanalmente el zapato. Se trata de la parte delantera de una horma
dividida en dos que se introduce en el interior del zapato. El zapatero aumenta la distancia entre
ambas partes con un tornillo.

3. Determinación del diseño: Una vez finaliza la toma de medidas se fabrica la horma y se
 determina el diseño, que se suele reflejar en la propia HORMA. Para ello se encinta la horma
y se hace o refleja el diseño sobre ella con trazados de dibujo.

4. Patrones: De ahí se sacan los patrones cortando las piezas de dibujo delimitados sobre la
cinta pegada a la horma y se matizan los patrones. Se sacan tanto los patrones exteriores
como los interiores (forros).

5. Corte del material: Se corta el material según los materiales que pueden ser de cuero de
vaca, cerdo, becerro, cordero, cuero regenerado, goma sintética, polipiel, vinipiel, etc. El
corte de corte puede ser: manual, con troquel o con máquina láser.
6. Aparado: Es todo el proceso que hay entre el corte y el armado o montaje del zapato. Aquí
tienen lugar los siguientes procesos:
-Biselado: A continuación se biselan o rebajan los bordes de las piezas cortadas para mayor
ajuste y costura y obtener un suavizado en el acabado.
-Preparación de los bordes: Según cada zapato los bordes deben tener una preparación. Si
hay vivos o ribetes hay que trabajarlos aquí.
- Colocación de ojales y fornituras: ojetes, cremalleras, hebillas, etc.
-Empaste de piezas: se unen piezas entre sí mediante cola.
-Costura: existen distintos tipos de costuras en función del tipo del zapato. Superpuesta,
solapada, costura ribeteada, plana con zig-zag de refuerzo.
-Se realiza la puntera y se añade el contrafuerte.
-Se moja la piel para ablandarla y que se adapte mejor a la horma.
Con estas acciones se va montando la parte superior del zapato.
7. Armado o montado: Se modela o adapta el corte del zapato sobre la horma para colocar la
 suela posteriormente.
A. Se clava la planta de montado sobre la horma.
B. Ajuste del forro al zapato encolado.
C. Montado de topes y contrafuertes entre el forro y el zapato.
D. Montar el corte.
E. Colocar el cerco o vira si lo lleva, rellenar la base si hace falta y colocar suela y tacón
finalmente.
El armado puede ser: pegado (el más general), inyectado o vulcanizado (para
deportivas), cosido exterior, cosido interior, goodyear (doble cosido)
8. Se aplican los forros interiores como plantillas.
9. Se pule el tacón.
10. Se lustra la suela.
11. Lujado: Alisado y bruñido (sacar brillo) con ceras en los cantos del zapato y las suelas.

PARTES DEL ZAPATO:

Arcos del pie: Arco longitudinal y latitudinal. Todo el peso del cuerpo reposa sobre ellos cuando
estamos de pie o al andar. Funcionan como un amortiguador que absorbe las vibraciones
provocadas al andar y repercuten sobre la cabeza y la espina dorsal.

Cambrillón: Resorte de acero de 10 cm de longitud y de 1,5 cm, de ancho que se introduce en el

espacio vacío entre la vira y la suela interior. Abarca desde la mitad del talón hasta el inicio del
metatarso y se adapta a la forma de la suela. Confiere estabilidad al pie y evita que el talón bascule.

Conglomerado de corcho: Rellena el vacío provocado por el cosido de la vira. Confiere a la suela
estabilidad y cierta suspensión al andar.

Cerco: Zona exterior de la palmilla.

Contrafuerte de talón: Refuerzo de piel que cubre la unión de las dos partes de la pala. Se trata de
una prolongación del tacón cuya función es retener el pie en el interior del zapato. El contrafuerte
exterior es un trozo de piel que cubre el cosido de las cañetas por la parte exterior. Puede tratarse
de una banda fina, o de una pieza grande que se adapte a la forma del tacón.
Festoneado: Eliminación de los bordes cortados de la piel que permite decorar el zapato. El zapatero
utiliza una máquina de festonear que puede incorporar herramientas de acero con diferentes
dibujos y perfiles.

Forro: El interior de la pala se reviste de piel de curtido vegetal. Está en contacto directo con el pie
por lo que debería ser de materiales que dejen transpirar bien el pie.
Forro de refuerzo: Se corta del mismo material que la piel de la pala y se introduce entre la piel
exterior y el forro, así como entre el tope duro y el contrafuerte del talón. Se trata de piezas
estrechas que evitan el ensanchamiento de la piel exterior y que ofrecen un buen apoyo a ambas
cañetas.
Los zapatos sin forro son los mocasines.
Lengüeta: Lengua de piel unida al interior o exterior de la pala. Protege la zona de abrochado de
rozaduras, presiones y de la penetración de elementos extraños, aunque a menudo también es un
elemento decorativo.
Orejas: Parte superior del zapato acordonado que consta de dos piezas encontradas donde se
practican los ojales o ojetes a la misma altura para poder pasar los cordones. Elementos que ayudan
al cierre o ajuste del zapato. Están superpuestas a la lengüeta.
Pala o empeine: Escote, parte superior del zapato. Según el tipo y modelo de zapato puede constar
de uno o más componentes.
Palmilla: Situada en el pie en el interior del zapato. Capa de piel entre 2,5 y 3,5 cm de grosor,
dependiendo de la solidez requerida por el zapato, sobre la cual se monta el zapato. Normalmente,
en el interior del zapato queda cubierta por una capa de forro muy suave, la plantilla.
Parche inferior de goma: Se trata de un parche de goma sólida de unos 6 mm de grosor y resistente
a los resbalones que se clava en la tapa del tacón.

Piel de la pala: Piel curtida al cromo procedente de la capa más valiosa de la piel. Con ella se
confecciona la pala. Normalmente precisa un grosor de 1,2 a 1,5 mm.
Puntera: Situada en el tope delantero del zapato. La puntera en el interior puede llevar una pieza
llamada “Tope duro” que ayuda a reforzar esta zona y se suele usar en aquellos zapatos cuya
puntera forma parte de la pala en una pieza entera.
Revirón: Tira de piel de 2 cm de ancho y 32 mm de grosor clavada a la suela exterior y a la palmilla.
Funciona como complemento de la vira y ofrece una base para la suela exterior o un soporte para el
talón.
Ribete: Tira de piel fina y doblada destinada a decorar y reforzar la parte superior de la cañeta.

Suela exterior: Se trata de la superficie del zapato que está en contacto directo con el suelo. En el
calzado elegante suele tener unos 5 mm de grosor y en zapatos más informales aumenta su grosor.

Plantilla: Pieza donde apoya el talón del pie en el interior del zapato. Puede ser media o entera. Se
sitúa encima de la palmilla y suele ser de badana o cuero.
Puente o quiebre: Zona intermedia que corresponde con el puente del pie. Según la curvatura, así
será la altura del tacón.
Tapa del tacón: Se trata de la parte más exterior del tacón. Está en contacto directo con el suelo.
Tope duro: Su forma depende del modelo elegido y se coloca entre la piel exterior y el forro. Hace
que el extremo delantero del zapato adquiera una forma atractiva y le ofrece un buen apoyo para
que al andar o al mojarse no se deforme. También actúa como protección para los dedos del pie.

Vira: Tira de la piel de unos 60 cm de longitud, 2 cm de ancho y 3mm de grosor. Es la estructura

sobre la descansa el zapato. Une la pala, la palmilla y la suela.

Tacón: Zona del talón externa del zapato. Las alturas van en función del puente. Puede ser de
diversos materiales y diversas formas.
Formas básicas del calzado:

Escarpín o zapato de salón plano o con

tacón

Sandalia

Botas, botines

Mocasín

Chinela, babucha o pantufla

Alpargata

Zueco, plataforma o topolino

Zapato de tacón

Variaciones o combinaciones

Formas de tacones femeninos:

• Stiletto o tacón de aguja: Su aparición se remonta a los años cincuenta, de origen italiano. Se
caracteriza por un tacón muy alto y delgado, afilado hacia abajo y termina con una superficie
 de apoyo muy pequeña, de un centímetro cuadrado aproximadamente. No tiene una altura
inferior a 8-9 cm y puede llegar a 12, incluso 12.5 cm.

• Cuña: Alargamiento de la suela hasta llegar a cubrir por completo la atura del zapato.
Inventor de este tipo de suela es Salvatore Ferragamo.

Cuña de Ferragamo

• Tacón de carrete o Luis XIV (lo popularizó): Tipo de tacón con forma de reloj de arena. No
supera los 4 cm.

• Tacón banana: Tacones altos con forma de banana. No son muy estables.
• Tacón italiano: Muy altos, puede alcanzar la altura de los de aguja. Se diferencia en que es
más grueso, lo que le confiere más estabilidad. Su altura es de 7-8 cm.

• Tacón cono: Tacón alto, en forma de cono, con mayor inclinación y anchura en la parte
superior.

• Tacón cubano: Tacón alto, por lo general revestido de cuero de forma semicilíndrica, en
general de 6 y 8 cm.

• Tacón campana: No es muy alto y tiene una superficie de apoyo inferior mayor que la
superior.
• Tacón coma: Visto desde el perfil, su forma se parece al de una coma. Creados por Roger
Vivier en los cincuenta y se convirtió inmediatamente en uno de los más usados de la década
aunque en la actualidad está casi en desuso.

• Tacón prisma o triángulo: De los setenta. Tiene tres caras planas y es similar a un triángulo
invertido.

• Tacón cuadrado: Igual tamaño superior e inferior, hace efecto de bloque.

• Kitten heel: Bajo de 4 cm y similar al de aguja, aunque sufre muchas variaciones.

TIPOS DE ZAPATOS:

• Abarca o alpargata. Tipo de calzado rústico elaborado principalmente en cáñamo, que cubre
solamente la planta del pie y se sujeta con cuerdas o correas sobre el empeine y tobillo.
Suele forma parte del calzado tradicional. Hoy en día con suela de goma, cuña y variaciones
como por ejemplo pulsera en tobillo. Una de las firmas más importantes en España.
Marca icónica: Castañer.

alpargata Castañer

• Babucha: Zapatilla o zapato de origen oriental, abierto por detrás y terminado en punta.
Fabricados en diferentes materiales como seda, piel, brocado…puede ir decorada con
bordados, pedrería, etc…

• Balmoral: Origen en Escocia (Castillo de la reina).Tipo de zapato Oxford que también admite
formato tipo botín. Zapato elegante masculino y de líneas clásicas que se caracterizan
porque tienen un corte que va desde el comienzo del acordonado frontal hasta el talón
dividiendo el zapato en dos.
• Bamba: Zapatilla con suela de caucho baja y sin talón, plana, y cuyo cuerpo o empeine es
todo de lona y con ojales para cierre con cordones. Suelen ser escotados en el tobillo. La
marca Victoria son un ejemplo de ello.

• Belgraves: Zapato abierto que se abrocha sobre el empeine. También es muy escotado en el
tobillo.

• Blutcher: Zapato masculino, menos formal, más amplio y abierto que el Oxford. Debe su
nombre al mariscal de campo prusiano y duque, Gebhard Leberecht Von Blutcher (1742-
1819), que además de derrotar a Napoleón en Waterloo, encargó la confección de estos
zapatos para sus soldados. Se trata un calzado con las costuras exteriores en cosido doble,
definido como costura prusiana, y la lengüeta como parte integral de la pieza anterior del
zapato. Se diferencia del Derby en que no lleva corte que separe la pala superior (o puntera)
del cañete (o cuerpo del zapato). Pero al igual que el Derby tiene alas o orejas montadas.

• Borcegui: Bota de origen medieval que hoy en día se utiliza este término para designar un
tipo de bota de trabajo o militar que lleva refuerzo en la puntera, cuero tratado como
repelente al agua, endurecido para dar consistencia, suela de goma dura con relieve para un
buen agarre, etc. Suele llevar cordones.
 Variante en bota Chiruca: Marca comercial especializada en calzado deportivo extremo para
trecking, senderismo, escalada y nieve. Son botas robustas con una altura que cubre el
tobillo, generalmente de Goretex siendo impermeables, con suelas adherentes, se atan con
cordones y son ligeras.

• Bota: Calzado que cubre el pie y parte del tobillo, llegando en ocasiones hasta rodilla o ingle.
Tiene origen español y como calzado de trabajo. Hay infinidad de variantes según altura,
color, material y estilo.

De esta manera podemos tener por diferentes alturas los siguientes tipos:
-Botín: Caña de la bota supera unos centímetros el tobillo.
-Bota de media caña: Caña de la bota alcanza el gemelo.
-Bota de caña alta: Caña supera el gemelo hasta casi la rodilla.
-Bota mosquetera o corsario: Caña llega o supera la rodilla y termina con solapa o vuelta.
• Bota Chelsea: Botín con banda elástica en los laterales, suela fina y tacón bajo. Origen en la
ciudad de Chelsea y fueron famosas gracias a los Beatles.

• Bota safari: También llamado Carapijo (Asturias), Kung Fu (por el actor), botas del desierto o
“desert boots” (Países anglosajones) y Pisamierdas o pisacacas coloquialmente. Botín plano
de piel de serraje con suela de goma crepé, con cordones, aunque hay versiones sobre todo
infantil con velcro. También puede llevar forro de borreguillo. Origen en los moriscos que
exportan las técnicas de curtido de pieles en el S. VIII.

• Brogue: Origen en el calzado tradicional de los campesinos irlandeses, que le practicaban

perforaciones (punteado) para facilitar el secado del interior. Primero se popularizó entre los
guardas forestales y guardabosques, y después entre la clase alta que eran acompañada por
éstos de caza. En 1930 el príncipe de Gales los llevó para jugar al golf. Con punteado en las
 costuras como en la parte delantera del zapato (semibrogue), también puede llevarlos en las
alas (fullbrogue). Se adquieren ciertas normas, como uso de color y tipo de cierre; y cada
modelo requería una cierta manera de atar los cordones. Su color debía hacer juego con el
de la pala del zapato y la longitud dependerá del número de agujeros que tuviera.

• Camperas: Llamado Cowboy o Vaqueras. Bota de media caña, puntera larga y con tacón
ancho y bajo. Su función original era como bota para trabajar de los tejanos. Hoy en día
tienen múltiples formas, materiales y apliques.

• Catiusca: Recibe su nombre de Katiusca (personaje de teatro). Las puso de moda el Duque
de Wellington. Bota de agua. Realizada íntegramente de goma.
• Chapín. Zapato antiguo de plataforma alta.

• Creepers. Origen en la Segunda Guerra Mundial para aguantar las condiciones climatológicas
del desierto. De lona con suela de goma alta. En 1949 George Cox las fabrica con el nombre
de Hamilton (su segundo nombre) como calzado de suela ancha. En los 50 las llevan los
Teddy Boys y los Rockabilly. En los 70 los Punk.

• Derby: Zapato masculino. Lengüeta y pala en una sola pieza, no va cosida. Nombre por Lord
Derby del XVIII. Se diferencia del Oxford en que las orejas están muy abiertas, no se cosen
por entero, y están unidas a la pala en los extremos montando sobre esta. La lengüeta sale
entera con el empeine o pala.

• Escarpines: También llamado D’Orsay. Zapato de tacón alto con empella que es la parte del
zapato que cubre el pie en la puntera, es decir, desde la punta hasta la mitad, con corte en
forma circular, y hacia los laterales. Zapato abierto o escotado sobre el empeine sin hebillas,
cordones ni costuras. La altura de su tacón varía según modelo.
• Flip flop: Chanclas. Sandalias de plástico o goma, con correa de sujeción entre el pulgar y el
índice o banda ancha sobre el empeine.

• Playera: También conocidas como Maripís (marca que las vendía en los 40). Hoy en día hace
referencia a cualquier zapatilla con suela de goma.
• Merceditas: También llamada Francesita o Mary Jane (1902, nombre de origen en un
personaje de comic de esa época que dio lugar a un tipo de zapato). Zapato de niña con
abertura en empeine y trabilla que lo cruza para cerrase lateralmente. Cierra con botón,
aunque hoy en día hay variantes. De piel, de tecioplelo, de diferentes colores. Muy utilizado
en el charlestón o tango. Emblema de las flappers.
 comic Mary Jane de 1902
• Mocasín: Zapato de piel blando, sin suela originalmente y se realizaba de una sola pieza.
Posee una pieza cosida en empeine con función de refuerzo y estética llamada “antifaz”.
Origen en los indios americanos. Tendencia en los 20 entre los estudiantes americanos. El
modelo con una tira ventana (abertura) se llamó en Gran Bretaña Penny Loafer porque se
usaba para guardar monedas. Hoy en día con suela y múltiples variaciones con pata, con
borlas y con una pieza metálica inspirada en el arnés de los caballos que fabricó la firma
Gucci. Tods introdujo tacos de goma en la suela.
El horse-Bit (elemento metálico que forma la brida del caballo), es un elemento que se introdujo en
un modelo de Gucci en 1953.

Mocasín con tira ventana

Mocasín con tacos de Tods Mocasín con Horse-bit de Gucci

• Monk strap: Zapato de corte semiformal. Mezcla entre mocasín y Oxford. Similar pero se
cierra con hebillas en un lateral.
• Mule: Zapato destalonado generalmente con tacón.

• Náuticos: Variante del mocasín, con cordones de cuero planos, lengüeta y suela gruesa
antideslizante para la cubierta de los barcos. Característica es el cordón que rodea el zapato.

• Oxford: Zapato de origen inglés. Zapato de cordón (cinco ojetes) masculino con pieza
perforada en puntera y empeine, pero tras la Segunda Guerra mundial también lo
empezaron a usar las mujeres. La lengüeta se cose aparte de la pala y las orejas se cierran
totalmente sobre el corte de la pala superior o empeine. Usados por los universitarios de
esta Universidad. En Estados Unidos se llama ball-type.

• Peep toes: Zapato que nace en los 50, de tacón alto y cerrados, pero con pequeña abertura
en la puntera, y que suele llevar plataforma ancha en la parte frontal.
• Plataforma: Zapato de suela muy elevada en toda su extensión para ganar más altura.
Aunque tiene su origen en los años 30 con Salvatore Ferragamo como zapato femenino,
tendrán su máxima expresión en los años 70 tanto para hombre como para mujer en
diversos materiales, colores y alturas.

• Richelieu: Zapato de cordón masculino elegante, sobrio y clásico, sin adornos. Admitido en
protocolo de etiqueta. Se puede usar con chaqué, frac y esmoquin. Nombre francés del
Oxford.
• Sabrinas: ( personaje de la película protagonizado por Audrey Hepburn en 1954). También
llamado bailarina( Ballet), manoletina(torero Manolete). Zapato femenino plano, de corte
clásico y con escote en el empeine redondeado. Hoy en día puede tener hasta 2,5 cm de
tacón.

• Sandalia: Llamadas también romanas, por su origen. Las primeras de cuero, papiro o
cáñamo. Calzado abierto de verano formado por una suela plana generalmente y tiras que
cubren por encima del pie, e incluso que pueden subir por la pierna. Dejan el pie descubierto
o muy abierto.

• Slippers: Zapato ligero y plano inspirado en las zapatillas de casa de raso o terciopelo y
bordado normalmente en dorado con el escudo heráldico de la aristocracia inglesa en el S.
XIX. Dolce & Gabbana lo introduce en 2006/7 en pasarela.

• Sneackers: También llamado deportivas, tenis o playeras. Calzado que estaba enfocado en
sus inicios para ejecutar algún tipo de deporte y que hoy en día se ha convertido en un
calzado urbano de uso diario. Pueden ser de diversos materiales como cuero, lona, tejidos
 técnicos, etc y suelen tener unas suelas con materiales y formas variables adecuadas a su
función.

• Spectator: Zapato tipo Oxford, picado o semipicado, que suele llevar dos colores de
contraste, generalmente negro, marrón u otro color en la puntera, orejas y talón, y el cuerpo
del zapato suele ser blanco en contraste. Tiene un origen inglés, con carácter deportivo, para
jugar al cricket (1898).

• Topolinos: Zapato femenino con suela de corcho o madera (material más económico) del
periodo de entreguerra. Suele tener un tacón de 7 cm. y es más estrecho en el tacón.
• Zapatilla: Zapato ligero de suela delgada, cómodo y de abrigo, de uso casero. Existe en
distintos materiales y formatos, pero suelen ser materiales y suelas de poca exposición
exterior.
• Zapato salón: Llamado también Pump ( poumpe-francés, sonido del taconeo). Zapato de
suela fina y sencilla de uso masculino (usados en el S. XVI por los lacayos en uniforme de
trabajo) y femenino. El femenino es escotado y de corte bajo en los laterales, sin adornos,
plano o tacón. El masculino es un zapato sin cordones ni pespuntes, generalmente de charol,
aunque ha sido relegado por el Oxford.

Zapato salón masculino corte S. XVI

• Zapato de tacón: Es un zapato de salón pero con tacón fino de más de 2 cm. Se considera
tacón alto a partir de los 5 cm de altura, kitten heel por debajo de los 5 cm. y los de aguja se
denominan Stiletto.

Kitten Heel

Tacón alto

Stiletto
• Zuecos. Calzado de madera de una sola pieza. Zapato de horma ancha destalonado o
también llamado descalzos. También puede tener suela de corcho o suela gruesa de madera
y cuero en el empeine. Calzado de corte tradicional que antiguamente se hacía de una pieza
y era muy cubierto. Calzado de trabajo rural u hospitales. Hoy en día admite otros materiales
alternativos. Marca icónica: Crocs.
DIFERENCIAS ENTRE ZAPATOS DE CABALLEROS:
ETIQUETA EXPLICATIVA

Tipo de etiqueta que va adherida en la suela o en el interior del zapato.

• Características:
-Debe ser visible y estar bien fijada, al menos en un zapato de cada par.
-Debe ser clara y no inducir a error. No debe estar tapada.
-Indica la composición. Indica al menos el 80% del material de composición de las diferentes partes del
zapato y si ningún material presenta esta cantidad, deberá indicar los dos principales.
-En los establecimientos de venta de calzado, en un lugar destacado debe existir un cartel que explique el
significado de los pictogramas que pueden aparecer en el etiquetado del calzado.

• Partes obligatorias :
-Identificación del fabricante con nombre, domicilio y número del registro industrial.
-Composición: especie de animal de donde procede, país de origen de la piel, parte del cuerpo utilizada,
cola, lomo,…
-Cuando esté confeccionado en España, lo indicará.
-Referencia para indicar el producto en la factura.
Además debe:
-Estar visible y fijada en la parte interior o forro de la pieza y las letras deben tener una altura mínima de 2
mm.
-La información debe estar en castellano.
-Incluir simbología usada en el etiquetado de calzado.
-La etiqueta proporciona información de la composición de cada una de las partes fundamentales.
-Los cuatro pictogramas y símbolos más usados son:
Cuero: piel de algún animal que conserva sus características y que ha sido curtida de modo que sea
imputrescible, el pelo o la lana que posee la piel del animal pueden conservarse o ser eliminados.
La mención de cuero plena flor, significa que se trata de una piel que conserva su flor original, tal como
aparece después de retirada la epidermis, sin que se haya retirado película alguna.
Cuero untado cuando posee la superficie untado o cubierta con una capa pegada. Esta capa superficial no
debe ser superior a un tercio del espesor total del producto.
Textil, se trata de materiales textiles, tanto naturales como sintéticos.
Otros materiales, hace alusión a otro tipo de materiales como derivados del poliéster.