Causas del consumo de sustancias psicoactivas en los

adolescentes
Los adolescentes identificaron que el consumo de sustancias psicoactivas en el
colegio es causa de problemáticas tanto familiares como institucionales. La
disfunción familiar es una de las razones que los adolescentes identificaron como
causa del consumo. Esta violencia instaurada dentro de la familia o sociedad
puede generar que los adolescentes se sientan deprimidos, lo que los lleva al
consumo de sustancias para olvidar sus problemas. Puede ser también porque a
veces hay personas que pierden a sus familiares y quieren olvidar eso. Esto es
debido a que las sustancias psicoactivas causan un estado emocional que les
ayuda olvidar sus preocupaciones. Adicionalmente, situaciones como el bullying,
fracaso académico y decepciones amorosas, llevan a estos estudiantes a la
desesperación o rechazo, lo que tiene como consecuencia el consumo de estas
sustancias. Alrededor de las instituciones educativas existe venta de cualquier tipo
de sustancias psicoactivas utilizando el engaño como método para inducir su
consumo a temprana edad, con estrategias como regalar alimentos,
especialmente dulces. También hay igualmente, aquellos estudiantes que
consumen SPA promueven en otros esta conducta, incluso llegando a utilizar
métodos de manipulación y presión de grupo, con el propósito de ser aceptados
socialmente, lo que es característico de la adolescencia. Los adolescentes
perciben que el consumo de SPA les puede generar perjuicios para su salud física
como daños en la piel, cambio de coloración en las uñas, patologías crónicas
respiratorias, neurológicas, pulmonía, enfermedades muy graves como el cáncer,
el sida y ataques de epilepsia.
En lo concerniente al aspecto psicológico, se pueden presentar alteraciones del
estado de ánimo, desde la perspectiva de los adolescentes, que pueden conllevar
a emociones de placer o tristeza. El consumo de SPA de acuerdo a la percepción
de los adolescentes es un problema en el colegio y los alrededores, cuyas causas
principales son la disfunción familiar, ser víctima de bullying, problemas
académicos y decepciones amorosas. Esto genera como consecuencia para las
víctimas el convertirse en personas que realizan bullying, presencia de
alteraciones en salud y bajo rendimiento académico.
Los adolescentes perciben que el acceso a las drogas es fácil. En un estudio
cualitativo efectuado por Alhyas, encontraron que el colegio es el espacio principal
para iniciar el consumo de sustancias psicoactivas, el acceso a estas se alcanza a
través de amigos, farmacias o en fiestas donde las consiguen gratuitamente; Sin
embargo, la mayoría de los adolescentes refieren que el territorio escolar es
suficiente para comprar las drogas.
Como causas del uso de SPA, los adolescentes perciben el bullying, la violencia
intrafamiliar, la presión social como los principales motivos que los llevan a
consumir. La involucración en bullying y cyberbullying es un gran problema de
salud pública debido a las consecuencias en la salud física y mental (1).

1. guerrero cle. redalyc.org. [Online]; 2021. Acceso 10 de agostode 2023. Disponible en:
https://concejodebogota.gov.co/causas-y-consecuencias-del-consumo-de-sustancias-
psicoactivas-en-jovenes/cbogota/2018-07-04/155943.php.

x
Parafraseado

Los jóvenes encuentran que el uso de sustancias psicoactivas en la escuela es causa de

problemas familiares e institucionales. La disfunción familiar fue una de las razones por las
que los adolescentes fueron identificados para el consumo. Este tipo de violencia doméstica
o comunitaria puede hacer que los adolescentes se sientan deprimidos, lo que puede
llevarlos a consumir drogas para olvidar sus problemas. También puede deberse a que
algunas personas en ocasiones han perdido a un ser querido y quieren olvidarlo. Esto se
debe a que las drogas psicoactivas inducen un estado emocional que les ayuda a olvidar sus
preocupaciones. Además, situaciones como la intimidación, el fracaso académico y las
decepciones románticas pueden hacer que estos estudiantes se sientan desesperanzados o
rechazados, lo que lleva al agotamiento de estas sustancias. Todas las formas de tráfico de
drogas psicoactivas se encuentran en las instituciones educativas, que utilizan tácticas
engañosas para fomentar el consumo en edades tempranas, incluida la provisión de
alimentos, especialmente dulces. Además, algunos estudiantes después de usar SPA
publicitarán este comportamiento a otros e incluso utilizarán la manipulación, la presión de
los compañeros y otros medios para lograr el objetivo adolescente de ser aceptados en la
sociedad. Los adolescentes creen que el uso del spa puede causar daños a su salud física,
como daño en la piel, decoloración de las uñas, enfermedades respiratorias y neurológicas
crónicas, neumonía, enfermedades muy graves como el cáncer, el SIDA y convulsiones.
Psicológicamente, desde el punto de vista del joven, pueden presentarse trastornos
emocionales, provocando sentimientos de alegría o tristeza. Los adolescentes ven el uso del
spa como un problema dentro y fuera de la escuela, con familias disfuncionales, víctimas de
acoso escolar, problemas académicos y decepciones románticas como las principales
razones. Como resultado, las víctimas han sido los perpetradores de la intimidación, la mala
salud y el bajo rendimiento académico.
Los adolescentes piensan que es fácil conseguir drogas. En un estudio cualitativo realizado
por Alhyas, encontraron que las escuelas eran el principal lugar de inicio en el consumo de
psicofármacos, que las personas podían obtener de forma gratuita a través de amigos,
farmacias o en fiestas; sin embargo, la mayoría de los jóvenes informaron que los terrenos
de la escuela eran suficientes para comprar el veneno.
Como motivos para el uso de SPA, los adolescentes consideran que el bullying, la
violencia intrafamiliar y la presión social son los principales motivos de su uso. Participar
en el acoso y el ciberacoso es un problema importante de salud pública debido a los efectos
del acoso y el ciberacoso en la salud física y mental.
El consumo de drogas es un fenómeno complejo y multifacético que tiene repercusiones no
solo en la salud y la seguridad, sino también en el ámbito social y económico. Según el
informe sobre el Consumo de Drogas en las Américas (OEA, 2019), el uso de drogas
ilícitas sigue siendo un desafío importante en la región, con consecuencias significativas
para la salud pública y el desarrollo sostenible. En el orden social, además de los problemas
de salud que ocasiona el consumo de drogas, el comportamiento de las personas genera
conflictos escolares, legales y familiares Resulta preocupante que, en la actualidad, el inicio
del consumo de drogas se observa en edades cada vez más tempranas, con una tendencia a
disminuir las diferencias de evalencia de consumo entre hombres y mujeres.
Precisamente por eso, es fundamental abordar el consumo de drogas desde una perspectiva
integral que considere no solo los aspectos de salud y seguridad, sino también los aspectos
sociales, económicos y de derechos humanos. La promoción de políticas y programas
basados en evidencia, que involucren a diferentes sectores y actores de la sociedad, puede
contribuir a abordar eficazmente los desafíos relacionados con el consumo de drogas. En la
adolescencia y juventud, las consecuencias de la drogodependencia son nefastas para la
salud pues su organismo se encuentra en un proceso de maduración. Este resulta
interrumpido por sustancias externas y tóxicas que no siempre se pueden rechazar, sobre
todo si la tendencia es a incrementar la ingestión de ellas.
En Ecuador, el consumo de drogas es uno de los más altos de América Latina, con una
incidencia de 51 %; superior a la de Chile, Uruguay y Perú (Loor et al., 2018). Por otra
parte, una de las cuestiones que influyen en la drogodependencia es la permisibilidad legal
y su despenalización, que en el caso ecuatoriano permite que un consumidor, sin incurrir en
ningún delito, puede portar cierta cantidad en gramos de sustancias como: 10 g de
marihuana, 2 g de pasta base de cocaína, 1 g de clorhidrato de cocaína, 0,1 g de heroína,
0,015 g de meta, 3.4 g de metilendioxifenetilamina, 0.015 g de éxtasis y 0.040 g de
anfetaminas.
Parafraseado
El consumo de drogas es un fenómeno complejo y multifacético que afecta no
solo a la salud y la seguridad, sino también a consecuencias sociales y
económicas. Según el informe sobre el consumo de drogas en las Américas
(Organización de los Estados Americanos, 2019), el consumo de drogas
ilícitas sigue siendo un problema importante en la región, con importantes
implicaciones para la salud pública y el desarrollo sostenible.
En términos de orden social, además de los problemas de salud causados por
la adicción a las drogas, el comportamiento humano también crea conflictos
en las escuelas, las leyes y las familias. Es preocupante que la brecha en el
rango de edad en el que comienza el consumo de drogas se esté ampliando. La
diferencia en la valencia del consumo entre hombres y mujeres tiende a
disminuir. Por ello, el consumo de drogas debe abordarse desde una
perspectiva holística, teniendo en cuenta no solo los aspectos de salud y
seguridad, sino también los aspectos sociales, económicos y de derechos
humanos.
La promoción de políticas y programas basados en evidencia que involucren a
diferentes sectores y actores de la sociedad puede ayudar a abordar de manera
efectiva los desafíos relacionados con las drogas. Las consecuencias del abuso
de sustancias pueden ser devastadoras para la salud de los adolescentes y
adultos jóvenes a medida que sus cuerpos pasan por el proceso de maduración.
Se ve interrumpido por sustancias externas y tóxicas que no siempre se pueden
rechazar, sobre todo si hay tendencia a aumentar la ingesta.
Ecuador tiene una de las tasas de consumo de drogas más altas de América
Latina, con una prevalencia del 51%, superior a Chile, Uruguay y Perú (Loor
et al., 2018). Por otro lado, uno de los temas que inciden en el consumo de
drogas es la legalidad y su despenalización en el caso de Ecuador, que permite
a los consumidores transportar cierta cantidad de droga sin cometer un delito,
por ejemplo: 10 gramos de marihuana, 2 gramos de cocaína . pasta alcalina, 1
gramo de clorhidrato de cocaína, 0,1 gramo de heroína, 0,015 gramos de
metanfetamina, 3,4 gramos de metilendioxifenetilamina, 0,015 gramos de
éxtasis y 0,040 gramos de anfetamina.