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Salmo 37:4-5 «Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones

de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él  hará 

El Camino a los SUEÑOS

Dios diseñó al ser humano con capacidad de visualizar, planear y proyectarse


hacia el futuro.
A lo largo de la historia, Dios ha tomado hombres y mujeres, para inyectar en
sus corazones sus sueños y visiones, las cuales a su tiempo se convierten en
grandes realizaciones.

Esto sucedió con la vida de José; desde muy joven aprendió a confiar en Dios y
en los designios que él tenía para su vida.
Esa seguridad en Dios y el trato a través de las dificultades, permitieron que
José sobreviviera y prosperara donde muchos hubieran fracasado.

Los siguientes son algunos de los principios de vida que aprendemos de José:
Para. Er sus sueños realizados

1. Trabajó ardua y disciplinadamente (esforzado y trabajador)


Estudiando la palabra en el libro de Génesis nos damos cuenta que José era
muy joven pero no era ocioso.
Dios bendice al esforzado, al que honra a sus padres (vemos que José
ayudaba a su papá), y al que le sirve.

Génesis 37:2 «Ésta es la historia de la familia de Jacob: José, siendo de edad


de diecisiete años, apacentaba las ovejas con sus hermanos; y el joven estaba
con los hijos de Bilha y con los hijos de Zilpa, mujeres de su padre; e informaba
José a su padre la mala fama de ellos.»

José, siendo joven, con solo diecisiete años ya se desempeñaba como pastor
de ovejas.
El Señor respalda los sueños y visiones de los diligentes.

2. Despierta envidia, pero nunca envidió a nadie (tierra deseada)


José no se propuso despertar envidia, pero su vida marcaba la diferencia en
medio de sus hermanos; Esto era notorio inclusive en su vestimenta: Usaba
una túnica de colores.

Génesis 37:3, 11 «Y amaba Israel a José más que a todos sus hijos, porque lo
había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores.
Y sus hermanos le tenían envidia, mas su padre meditaba en esto.»

Un soñador actúa, habla y viste según sus sueños; se proyecta, no lo da por


hecho.
Los soñadores que sueñan los sueños de Dios terminan siendo como tierra
deseada.

3. Compartía a otros sus sueños (Fe)


Un hombre o una mujer de fe, no teme contar sus sueños y sus visiones
Los incrédulos y temerosos callan sus sueños, pues no tienen la certeza de
que Dios los vaya a cumplir.
José tenía tal certeza, y compartía a otros esa visión sin ningun temor.

Génesis 37:5-9 «Y soñó José un sueño, y lo contó a sus hermanos; y ellos


llegaron a aborrecerle más todavía.
Y él les dijo: Oíd ahora este sueño que he soñado: He aquí que atábamos
manojos en medio del campo, y he aquí que mi manojo se levantaba y estaba
derecho, y que vuestros manojos estaban alrededor y se inclinaban al mío.
Le respondieron sus hermanos: ¿Reinarás tú sobre nosotros, o señorearás
sobre nosotros? Y le aborrecieron aún más a causa de sus sueños y sus
palabras.
Soñó aun otro sueño, y lo contó a sus hermanos, diciendo: He aquí que he
soñado otro sueño, y he aquí que el sol y la luna y once estrellas se inclinaban
a mí.»

4. Era conocido como un hombre “visionario”


Los hermanos de José lo llamaban irónicamente “el soñador”. La manera como
somos y nos proyectamos a los demás, hará que así seamos conocidos.
La pregunta es: ¿Cómo somos reconocidos en el medio en el que nos
desenvolvemos? ¿Cómo nos llaman?
Quizás no es por «El Soñador» sino por “el mentiroso”, “el mediocre”, “el
bromista”, “el buena gente”, “el de mal genio”.

Génesis 37:19 «Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador.»

Que bueno que la cualidad o la virtud de soñar en grande, sea totalmente en


nuestra vida, y que nuestro entorno nos conocieran como «aquellos
soñadores», pues Dios nos llamo a ello.

5. Nunca se detuvo frente a los obstáculos (perseverancia)


Este personaje pasó por circunstancias muy adversas, recordemos que fue
vendido como esclavo por sus propios hermanos.
No solo eso, sino que también fue calumniado, engañado, encarcelado, pero
nunca se rindió.

Génesis 39:2-8
2 Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su
amo el egipcio.
3 Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo
hacía prosperar en su mano.
4 Así halló José gracia en sus ojos, y le servía; y él le hizo mayordomo de su
casa y entregó en su poder todo lo que tenía.
5 Y aconteció que desde cuando le dio el encargo de su casa y de todo lo que
tenía, Jehová bendijo la casa del egipcio a causa de José, y la bendición de
Jehová estaba sobre todo lo que tenía, así en casa como en el campo.

6 Y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa
alguna sino del pan que comía. Y era José de hermoso semblante y bella
presencia.
7 Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus ojos en José, y
dijo: Duerme conmigo.
8 Y él no quiso, y dijo a la mujer de su amo: He aquí que mi señor no se
preocupa conmigo de lo que hay en casa, y ha puesto en mi mano todo lo que
tiene.

A veces vivimos circunstancias en nuestras vidas, que creemos malas pero


luego nos damos cuenta que detrás de esa circunstancia venía algo muy
bueno, algo grande.
El Apóstol Pablo estando en la condición de preso, escribió cartas a las iglesias
y ahora hacen gran parte del Nuevo Testamento en la Biblia.

¿Ud. que haría en la prisión?


¿Se quejaría o viviría los sueños de Dios y sus promesas?

6. Vivía en la presencia de Dios (búsqueda continua De Dios)


La única garantía que se tiene para  alcanzar los sueños, es tener el patrocinio
del diseñador y dueño de nuestra vida: Papá Dios, el más grande gestor de
sueños.
Dios “patrocina” a los que le temen y le reverencian con su vida. José lo
entendía muy bien, y aprendió a tener comunión con Dios independiente de las
situaciones que vivió.

Génesis 39:2 «Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en
la casa de su amo el egipcio.»

7. Fue un excelente mayordomo (buen administrador)


Mayordomo es aquel que administra los bienes de “otro”. José entendió que
todo lo que era y lo que tenía se lo había dado Dios, y como tal administraba
bien su vida, y todo lo que tenía a su cargo.
A veces se cree que ser buen administrador es tarea de los papás o de los
líderes, pero José aunque era muy joven supo administrar su tiempo, sus
talentos, su dinero, su familia, etc.
Su éxito fue notorio, pues empezó como esclavo y terminó siendo el segundo
hombre en el gobierno de la nación Egipcia.

Génesis 39:3-4 «Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él
hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Así halló José gracia en sus
ojos, y le servía; Y él le hizo mayordomo de su casa y entregó en su poder todo
lo que tenía.»

8. Vivió apartado para Dios (vida de santidad)


La vida de José reflejó su amor y respeto a Dios. Aprendió a decir “no” y se
negó a sí mismo para agradar a Dios y alcanzar sus sueños.
Era firme en sus convicciones, porque sabía quién era y qué propósito tenía su
vida.

Génesis 39:7-9 «Aconteció después de esto, que la mujer de su amo puso sus
ojos en José, y dijo: Duerme conmigo. Y él no quiso, y dijo a la mujer de su
amo: He aquí que mi señor no se preocupa conmigo de lo que hay en casa, y
ha puesto en mi mano todo lo que tiene. No hay otro mayor que yo en esta
casa, y ninguna cosa me ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer;
¿cómo, pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios?»

Muchas veces nos va tocar salir corriendo de “propuestas borrador” que hacen
que mis sueños se borren.

Nos toca tomar decisiones y estar dispuestos a pagar el precio de vivir en


santidad y de no hacer lo mismo que hace el resto del mundo.

9. Nunca fue “del montón”, supo desarrollar sus talentos


Este hombre aunque estuvo encarcelado con otros cautivos, terminó siendo el
jefe de los prisioneros.
Conocía los talentos que Dios le había otorgado y los desarrolló trabajando en
todo lo que le delegaron. No buscaba fama, sólo agradar a Dios.
Lo importante no es cuántos talentos tenemos, sino qué hacemos con los
talentos que Dios nos ha dado.

Génesis 39:21-23 «Pero Jehová estaba con José y le extendió su misericordia,


y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel. Y el jefe de la cárcel entregó en
mano de José el cuidado de todos los presos que había en aquella prisión; todo
lo que se hacía allí, él lo hacía. No necesitaba atender el jefe de la cárcel cosa
alguna de las que estaban al cuidado de José, porque Jehová estaba con José,
y lo que él hacía, Jehová lo prosperaba.»

10. Proveyó para los de su casa


Josué tenía mentalidad de proveedor, no era de los que siempre están pidiendo
y esperando que le den.
Quien piense que siempre tiene algo que ofrecer, aunque sea muy joven como
José, Dios también le proveerá

Génesis 43:16, 21 «Y vio José a Benjamín con ellos, y dijo al mayordomo de su


casa: Lleva a casa a esos hombres, y degüella una res y prepárala, pues estos
hombres comerán conmigo al mediodía.

Y aconteció que cuando llegamos al mesón y abrimos nuestros costales, he


aquí el dinero de cada uno estaba en la boca de su costal, nuestro dinero en su
justo peso; y lo hemos vuelto a traer con nosotros.»

11. Se reconcilió con su familia y su pasado


Por joven que alguien pueda ser, siempre tendrá heridas emocionales que
necesitan del toque sanador de Dios.
El joven que se reconcilia con Dios y consigo mismo, está en la capacidad de
perdonar y reconciliarse con las personas más cercanas que le hayan hecho
daño.

Génesis 45:4-8 «Entonces dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y
ellos se acercaron. Y él dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis
para Egipto.
Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque
para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros. Pues ya ha
habido dos años de hambre en medio de la tierra, y aún quedan cinco años en
los cuales ni habrá arada ni siega. Y Dios me envió delante de vosotros, para
preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran
liberación.
Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por
padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra
de Egipto.»

Conclusión
Dios siempre tiene un gran propósito para nuestras vidas.
Él desea mostrarnos, de manera sobrenatural, la misión, la visión y destino que
tiene para nuestra vida; para que todo lo que pensemos, sintamos y hagamos,
sea para su gloria.

Deje su vida, sus metas y sueños en las manos de Dios. Confíe en él, y él hará
maravillas y prodigios en usted, y a través de usted.

Salmos 37:4-5 «Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones


de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará
 

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