Como Ser Un Ganador de Almas - Dainer Periñan 20

Evangelista Dainer Periñan Castro
MINISTERIO EVANGELISTICO A DIOS SEA LA GLORIA
Cómo ser un ganador de almas
Autoría propia
1era edición
Por el evangelista Dainer Periñan
Presidente del Ministerio evangelístico
A Dios Sea La Gloria
Cartagena, Colombia
2023
2
Contenido
Presentación 4
Introducción 7
Cómo ser un ganador de almas 9
Parábola del sembrador 11
1. El sembrador 12
1.1. Todo sembrador debe tener semilla para sembrar. 13
1.2. Todo sembrador debe tener conocimiento del oficio. 14
1.3. No sembrarás tu campo con semillas mezcladas 14
1.4. El sembrador debe saber el tiempo de sembrar y de cosechar. 20
2. La semilla 46
2.1. Tipos de semilla 46
2.2. El fruto que quiero recoger. 50
2.3. Debemos sembrar la semilla del evangelio. 51
2.3.1. La Justicia de Dios 53
2.3.2. La expiación de Cristo 55
2.3.3. La propiciación 55
2.3.4. La redención. 57
2.3.5. La justificación. 60
2.3.6. La santificación. 61
2.3.7. La gracia. 65
3. La tierra 68
3.1. Pasos previos antes de sembrar un campo. 69
3.1.1. Deshacernos de las malezas y malas hierbas. 69
3.1.2. Airear el terreno y oxigenar. 69
3.1.3. Abonar el terreno. 70
3.1.4. Sembrar el campo. 70
3.2. Arando el corazón para sembrar la palabra de Dios 73
3.2.1. Los dones del espíritu Santo 73
3.2.2. Mostrando la culpabilidad del hombre. 79
3
− Conociendo quien es Dios y desobedecer. 80

− Por la ley de la conciencia. 82
− Por la ley de Moisés. 84
3.3. Tipos de terrenos 88
3.3.1. La semilla junto al camino 89
3.3.2. Tierra con pedregales 98
3.3.3. Tierra con espinos 121
− El afán. 123
− El engaño de las riquezas. 135
− La codicia de otras cosas. 147
3.3.4. Buena tierra 156
4. Jesús como buen sembrador 166
Conclusión 202
Referencias Bibliográficas 204
Presentación
4
Mi nombre es Dainer Periñan Castro, evangelista

para la obra del señor, hace 31 años Dios me llamó a
servir en este precioso ministerio, teniendo todo un
proceso que, para la gloria del señor, hoy se pueden
ver los frutos. Damos gracias a Dios por todo lo vivido,
porque de lo más vil y menospreciado nos levantó a su
luz admirable, y en su infinita misericordia, después de
no tener nada, hoy estoy felizmente casado con mi
amada esposa, Lucerly Ramos Arnedo, a quién Dios
estableció como mi ayuda idónea y compañera de
ministerio, y tenemos 5 hermosos hijos. Dios nos ha
bendecido grandemente, y a través de los años nos ha
enseñado y formado en muchas cosas para llegar al
camino de la perfección.
Durante todos estos 31 años, el señor nos ha
enseñado en diferentes áreas, lo que es ganar un
alma, los primeros 15 años estuvimos predicando en
las cárceles, parques, calles, en la ciudad de
Cartagena. Actualmente, el señor me ha permitido
conocer otros países, llevando el mensaje de la
palabra, predicando a diestra y siniestra el evangelio
del señor, manteniendo la premisa de que el evangelio
no tiene precio ni costo, y debe ser gratuito a todo a
aquel que desee conocer al señor. Sin embargo, a
pesar de que no contamos con una fuente de ingresos
fija, el señor, a través de los hermanos en la fe, nos ha
sostenido hasta el día de hoy.
5
El ministerio evangelístico tiene gran importancia en el

desarrollo de la iglesia, por lo que establecerse como
tal, no es una tarea de unos días, ni de unos pocos
meses, es un trabajo que puede tardar años en
alcanzar el nivel de formación que Dios quiere en
nosotros. Un evangelista debe contar con un carácter
definido en Dios, para cumplir su labor dentro y fuera
de la iglesia, dentro, para la formación y capacitación
de la iglesia en el ministerio de la reconciliación que
nos fue encomendado, y fuera en el propósito de
ganar almas para el reino.
11 y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros,

evangelistas; a otros, pastores y maestros, 12 a fin de perfeccionar a los
santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,
13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del
Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la
plenitud de Cristo;
(Efesios 4:11-13 Reina- Valera 1960)
6
Introducción
El ganar almas es un mandato de nuestro señor

Jesús el Cristo. Marcos 16:15-20 “ Y les dijo: Id 15
por todo el mundo y predicad el evangelio a toda

criatura”; Mateo 28: 18-20. “ Por tanto, id, y 19
haced discípulos a todas las

naciones, bautizándolos en el nombre del Padre,
y del Hijo, y del Espíritu Santo;”.
El que un alma se convierta al señor es lo único
que alegra el cielo. Lucas 15:7, “Os digo que así
habrá más gozo en el cielo por un pecador que
se arrepiente, que por noventa y nueve justos”.
Sin importar el Ministerio que se tenga, la iglesia
existe en la tierra por tres razones de mucha
importancia, y es necesario que cumplamos con
esto:
1. Para adorar a Dios
2. Aprender doctrina
3. Evangelizar al mundo y ganar almas para el
reino.
7
Por lo menos estas tres cosas veo yo, de pronto

hay más, pero yo sustraje estas tres, de las
cuales quiero tomar la tercera para mi estudio
sobre cómo ganar almas, partiendo de la
importancia de que la iglesia del señor cumpla
con esta misión, como uno de los principales
propósitos para los que el señor nos permite
estar en la tierra. Y tomaremos como maestro al
señor Jesús, el ganador de almas más grandioso
que camino por Israel, su amor y pasión por las
almas pérdidas son de gran ejemplo para
nosotros en el día de hoy.
8
Cómo ser un ganador de almas

Marcos 4: 1-20
Jesús dijo en Lucas 5:10: “pero Jesús dijo a

Simón: No temas; desde ahora serás pescador
de hombres”. (Leer Marcos 1:16-17)
Es importante tener en cuenta que es necesario
que Jesús nos enseñe cómo ser un ganador de
almas, porque nosotros no sabemos ganar
almas. Solo miremos un ejemplo, Lucas 9: 51-
56. Cuando uno lee este pasaje de la palabra,
donde estos dos discípulos del señor toman esta
actitud, indudablemente tenemos que decir que
ellos necesitan que el maestro les enseñe cómo
ganar almas.
Y si tomamos el capítulo 4 de San Juan,
podemos ver cómo el señor les enseñó cómo
ganarse a los samaritanos. Al final de esta
parábola del sembrador, estaremos dando una
explicación de cómo Jesús se ganó a los
samaritanos.
Por esta razón, es este estudio sobre
9
evangelismo, y veremos de fondo este tema tan

importante en el día de hoy.
He tomado el pasaje de Marcos, el capítulo 4, los
versos del 1 al 20, porque para mí es el pasaje
donde podemos estudiar todo el proceso de un
sembrador, desde su comienzo y desarrollo.
El apóstol Pablo, fue uno de los que puso en
práctica lo que Jesús enseñó en esta parábola
del sembrador. 1 corintios 3:6 “Yo planté,
Apolos regó, pero el crecimiento lo da Dios”.
También se lo enseñó a Timoteo, 2 Timoteo 2:6
“El labrador, para participar de los frutos debe
trabajar primero”. Miraremos paso a paso todo el
tema de la conversión y los frutos de un
verdadero creyente en el señor. Juntamente con
Marcos, estaremos viendo Mateo 13: 1-9, y
Lucas 8: 4-15, ya que en estos dos evangelios
también quedó registrado este acontecimiento
del sembrador.
En estos evangelios el Espíritu Santo tomará
estos tres evangelistas y nos dará todo el
conocimiento sobre esta maravillosa enseñanza,
y luego tomaremos el evangelio de San Juan, y
10
es donde veremos la práctica de todo lo que

aprendamos en esta parábola.
Parábola del sembrador

- ¿Qué es una parábola?, es una narración breve
y simbólica de la que se extrae una enseñanza
moral. La parábola designa una forma literaria
que consiste en un relato figurado del cual, por
analogía o semejanza, se deriva una enseñanza
relativa a un tema que no es el explícito. Es en
esencia un relato simbólico o una comparación
basada en una observación verosímil.
Pasemos a leer Marcos 4: 1-9. En estos
versículos Jesús relata la parábola del
sembrador, y en el versículo 10, dice lo siguiente:
“cuando estuvo solo, los que estaban cerca de él
con los doce, le preguntaron sobre la parábola”.
En este versículo podemos entender el interés
que tenían los discípulos por aprender de las
enseñanzas de Cristo, es claro que ellos no
entendieron sobre la parábola del sembrador, y al
no entender fueron a la fuente precisa el Cristo
de la gloria.
11
1. El sembrador
Inmediatamente pasamos al versículo 14, y

empezamos a escuchar la explicación del señor:
“el sembrador es el que siembra la palabra”.
Nuestro taller sobre el tema de ganar almas está
dirigido al que sale a evangelizar en las
diferentes áreas donde están las almas sin
Cristo, como son: los parques, las cárceles, los
hogares, las calles, los hospitales, los buses, los
colegios, las universidades, en un barco, en un
avión, etc., todos estos lugares donde hay
personas son terrenos donde se puede regar la
semilla de la palabra.
Es importante que usted sepa que cuando usted
sale a algunos de estos lugares a predicar, usted
es este sembrador, por lo tanto, el sembrador es
el que predica la palabra.
En este versículo 14, nos concentramos en el
sembrador y miraremos varias cosas importantes
de la siembra la palabra.
12
Es necesario como sembrador conocer algunas

leyes de la siembra, y la aplicaremos a la
predicación
1.1. Todo sembrador debe tener semilla

para sembrar.
Genesis 47:23, “y José dijo al pueblo, he aquí os
he comprado hoy a vosotros y a vuestras tierras
para Faraón; ved aquí semilla y sembrareis la
tierra”.
Si aplicamos esto a la predicación, lo que
estamos diciendo es que todo predicador debe
ser un buen estudiante de la palabra de Dios
para poder tener semillas que sembrar.
Precisamente uno de los consejos del señor para
muchos siervos en la palabra fue el meditar y
escudriñar las escrituras. Deuteronomio 17: 18-
20; Josué 1:7-8; 1 Timoteo 4: 6,7, 13; 2
Timoteo 3: 14-17.
Cuando como predicadores de la palabra
tomamos tiempo para meditar en ella todos los
días, tendremos suficientes semillas para
sembrar.
13
1.2. Todo sembrador debe tener

conocimiento del oficio.
Si creemos que el área del sembrador es
sencilla, erramos, no es fácil, y debemos,
amados del señor, entender esto para ser más
eficientes al momento de sembrar la palabra del
señor, y seguir las leyes que se establecen para
esta labor. Éxodo 23: 10; Levíticos 19:19.
1.3. No sembrarás tu campo con semillas

mezcladas
Esto también estaba dirigido contra una práctica
idolátrica de los antiguos zabianos, o adoradores
del fuego, que sembraban diferentes semillas,
acompañando el acto con ritos e invocaciones
mágicas, y los comentaristas han pensado
generalmente que el propósito de esta ley era
poner fin a los deseos antinaturales y a las
supersticiones insensatas que prevalecían entre
los paganos.
Pero la razón de la prohibición era
probablemente más profunda, porque los que
han estudiado las enfermedades de la tierra y los
14
vegetales, nos dicen que la práctica de mezclar

semillas es perjudicial tanto para las flores como
para los granos.
Si los diversos géneros del orden natural
gramíneos, que incluye los granos y las hierbas,
se siembran en el mismo campo y florecen al
mismo tiempo, de modo que el polen de las flores
se mezcle, la consecuencia será una semilla
espuria, llamada así por los agricultores, y que es
siempre inferior y distinta de cualquiera de los
granos que la produjeron en tamaño, sabor y
principios nutritivos. Independientemente de que
contribuyan a enfermar el suelo, nunca dejan de
producir, lo mismo en los animales y hombres
que se alimentan de ellos.
Mezclar estas semillas era muy perjudicial para la
salud por tanto el sembrador debe ser un
conocedor de esto. De la misma manera si el
predicador no es un conocedor de lo que es
predicar la palabra causara mucho daño en los
oyentes y en las almas perdidas, por eso
miremos algunos consejos de la palabra en
cuanto a este punto:
15
Leamos nuevamente Lucas 9: 51-56. Al leer

estos textos de la palabra, se formula la siguiente
pregunta, ¿sabían ellos, o tenían conocimiento
de lo que era ganar almas o predicar la palabra?,
sin duda alguna la respuesta es que no, estaban
mezclando semillas.
Al decir ellos o preguntarle a Jesús, ¿quieres que
mandemos que descienda fuego del cielo, como
hizo Elías, y los consuma?, ¿acaso no es esto
mezcla de las semillas, si tomamos en cuenta
que la semilla representa la palabra? Ellos están
mezclando un evento que sucedió en el periodo
de la ley, y lo quieren mezclar con el periodo de
la gracia, entonces preguntamos ¿Por qué
sucede esto?, por falta de conocimiento.
Por tanto, es necesario que todo predicador sea
un experto en la palabra de justicia, debe saber
cómo ganar las almas perdidas.
Nehemías 8: 1-2, “y se juntó todo el pueblo como
un solo hombre en la plaza que está delante de
la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el
escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la
cual Jehová había dado a Israel. 2 y el sacerdote
Esdras trajo la ley delante de la congregación,
16
así de hombres como de mujeres y de todos los

que podían entender, el primer día del mes
séptimo”., si miramos con mucha atención, ellos
le pidieron a Esdras el escriba, que trajese la
palabra y se las predicase.
¿Qué es un escriba?
Escribas: los escribas en el antiguo Israel, eran
hombres sabios cuyo trabajo era estudiar la ley y
transcribirla, y escribir comentarios de la misma,
ellos a veces eran contratados, cuando se
presentaba la necesidad de un documento
escrito o cuando se requería una interpretación
de un asunto jurídico. Esdras era un “escriba
diligente en la ley de Moisés” (Esdras 7:6).
Los escribas tomaban seriamente su trabajo de
preservar la escritura, copiaban y volvían a copiar
la Biblia meticulosamente, e incluso contando
letras y espacios para asegurarse de que cada
copia fuera correcta.
Podemos agradecer a los escribas judíos por
preservar las porciones del antiguo testamento
de nuestras Biblias. Los escribas eran maestros
del pueblo (Marcos 1: 22).
17
Lastimosamente muchos de ellos en el tiempo

del nuevo testamento cayeron en el error de
mezclar la ley del señor con muchas tradiciones
humanas, cayendo en la mezcla de semillas.
Ellos se convirtieron en profesionales en explicar
la letra de la ley, ignorando el espíritu detrás de
ella.
Las cosas empeoraron tanto que las
regulaciones y las tradiciones que los escribas
añadieron a la ley, se consideran más
importantes que la propia ley. Esto dio lugar a
muchos enfrentamientos entre Jesús, los fariseos
y los escribas.
Al inicio del sermón del monte, Jesús conmovió a
su audiencia declarando que la justicia de los
escribas no era suficiente para hacer que alguien
llegara al cielo (Mateo 5:20).
Así que, una gran parte del sermón de Jesús
trató con lo que había sido enseñado al pueblo,
por los escribas, y lo que Dios realmente quería
(Mateo 5: 21-48).
Hacia el final del ministerio de Jesús, condenó
totalmente a los escribas por su hipocresía
18
(Mateo 23: 22), ellos conocían la ley, le

enseñaban a los demás, pero no la obedecían.
Esdras, por el contrario, si cumplió fielmente con
su oficio, en conocimiento y aplicación.
En el nuevo testamento encontramos lo
siguiente:
- 1 Timoteo 3: 1-2, “Palabra fiel: si alguno
anhela obispado, buena obra desea, pero es
necesario que el obispo sea irreprensible,
marido de una sola mujer, sobrio, prudente,
decoroso, hospedador, apto para enseñar”.
- 2 Timoteo 2: 14-15, “Recuérdales esto,

exhortándoles delante del señor a que no
contiendan sobre palabras, lo cual para nada
aprovecha, sino que es para perdición de los
oyentes. Procura con diligencia, presentarte
a Dios, aprobado como obrero que no tiene
de qué avergonzarse, que usa bien la
palabra de verdad”.
Tomando estos textos de la palabra, podemos
concluir, que el predicador, debe tener un
conocimiento de la palabra que se va a predicar
a las almas, que él se quiere ganar para Cristo.
19
1.4. El sembrador debe saber el tiempo de

sembrar y de cosechar.
Éxodo 23, “seis años sembrarás tu tierra, y
recogerás su cosecha”.
Todo buen sembrador debe saber en qué
momento debe sembrar la semilla. Quiero que
miremos una información respecto a esto muy
importante, y luego veremos unas referencias
bíblicas para aplicar al tema que estamos
tratando.
Para efectos de este estudio, analizamos el
artículo “Descubre cómo las fases lunares
pueden afectar a los cultivos”. (INTERNACO S.A..2019).
Desde muy pequeños hemos oído afirmaciones
contundentes como “mejor córtate el pelo en luna
llena”, “planta el césped durante luna nueva”
“siembra hortalizas en cuarto creciente”.
¿Te suenan verdad? Puede que en su momento
no supiéramos que significaba, pero hoy
descubrirás que todo cobra sentido.
Las fases lunares afectan de manera muy
significativa a la vida diaria de las personas y,
20
en el caso que hoy nos ocupa, a la agricultura

y jardinería.
¿Cómo influyen las fases lunares en la
agricultura y las cosechas?
Desde hace muchos años, los agricultores han
comprobado que las fases de la luna influyen, de
una manera u otra, en sus cultivos. Para ellos, la
Luna era el “manual de instrucciones” de las
cosechas.
Al contrario de lo que en un principio pudiéramos
pensar, estas cuestiones no son simplemente
creencias populares o invenciones de nuestros
abuelos. ¡Son hechos confirmados!
La Luna contribuye, de una forma u otra, al
crecimiento, germinación o fructificación de
los cultivos. Esto es así, sin ninguna duda
posible.
La savia de las plantas, la fotosíntesis o el
enraizamiento de las semillas son algunas de las
etapas de desarrollo que se ven afectadas por la
Luna. Por tanto, sembrar en un día u otro, o lo
que es lo mismo, en una etapa lunar u otra, va a
significar que la planta prospere o no.
21
Por ello, no está de más saber cuáles son las

distintas fases lunares y qué efectos pueden
tener en los cultivos.
- La luna nueva
Luna nueva, denominada también Novilunio, es
la etapa lunar en la que la Luna no refleja luz,
por lo que es imposible verla desde la Tierra.
Durante este periodo, este satélite se encuentra
oculto tras el resplandor del sol, por tanto, sus
rayos disminuyen considerablemente. Esto tiene
consecuencias en los cultivos.
Dado que los rayos de la Luna disminuyen
significativamente, no es de extrañar que las
raíces o las hojas de las plantas crezcan a un
ritmo más lento que en otras fases lunares. En
la agricultura, puede decirse que es un periodo
en el que la vegetación crece poco o nada. Más
bien, es un ciclo de reposo.
Durante estos días, las plantas pueden adaptarse
al medio sin sufrir ningún trastorno o daño
derivado del estrés que este proceso puede
llegar a producirle. Además, es la etapa perfecta
para llevar a cabo ciertas tareas de
mantenimiento en el jardín.
22
¿Y cómo podrás aprovechar la luna nueva?

Durante esta fase en la que el satélite está
alejado de la Tierra, la savia de las plantas se
encuentra concentrada en las raíces y existen
una gran disponibilidad de agua en el suelo. Por
consiguiente, una de las tareas más
recomendadas es la del control de adventicias.
Asimismo, en Luna nueva podrás realizar
ciertas actividades de mantenimiento. Como te
hemos dicho, es una etapa de reposo, por lo que
podrás desempeñar aquellos trabajos que en otro
momento pueden suponer un gran estrés para la
planta.
Y las tareas que pueden hacer en luna nueva son
por ejemplo las siguientes:
● Aporque: cubrir con tierra plantas como el
apio o el cardo.
● Abonar: abono de todo tipo de plantaciones.
● Eliminar las malas hierbas.
● Eliminar las hojas marchitas de tus plantas.
● Sembrar prados y césped, árboles de hoja
redonda y hortalizas de raíz como por
ejemplo las zanahorias o los nabos.
● Podar
23
- El cuarto creciente
Cuando nos encontramos en la etapa de cuarto
creciente, la Luna aumenta la superficie y, por
tanto, la visibilidad de esta es mayor. Durante
esta fase lunar, este satélite se va acercando a la
Tierra y como consecuencia su presión hacia
nuestro planeta aumenta.
En estos días, la Luna tiene una forma muy
característica, pues parece un círculo partido
justo por la mitad. ¿Te suena verdad?
La salida se produce en el horizonte a las 12 del
mediodía, el cénit a las 6 de la tarde y el ocaso a
las 12 de la noche.
Si con la luna nueva te contábamos que la savia
de las plantas se encontraba en las raíces,
durante cuarto creciente ésta comienza a subir
hasta la parte superior de la vegetación.
Estos días significan que la luz lunar va en
aumento y, por consiguiente, los cultivos sufren
un crecimiento balanceado, siendo el follaje y
las raíces las partes más afectadas.
El suelo también cambia. En el terreno se
producen grandes movimientos de agua por lo
24
que las semillas podrán absorber más

rápidamente y así germinar en el tiempo previsto
(sobre todo si se plantan hortalizas como la
lechuga).
Pero, esto no siempre es así. Como quizás ya
sepas, la germinación de una planta no solo
dependerá del agua que absorba, también de la
climatología existente y de las condiciones del
cultivo (si el terreno está bien abonado, si se
riega lo suficiente, etc.)
¿Y qué tareas puedes hacer en el cuarto
creciente?
Como en esta fase lunar la vegetación crece a
un ritmo más elevado que en la anterior (luna
nueva), debes favorecer el desarrollo de la
vegetación. Además, puedes llevar a cabo lo
siguiente:
● Podar los árboles enfermos y los
árboles frutales que verán mejorado su
rendimiento y su fructificación.
● Cultivar los campos y terrenos que se
caractericen por tener sustrato arenoso.
● Sembrar flores y hortalizas de hoja como
la lechuga, la acelga o la espinaca. También
25
se recomienda realizar la siembra uno o dos

días antes de que comience esta fase.
● Realizar injertos, pues el enraizamiento
tiene más probabilidades de tener éxito.
● Y un último consejo ¡evita regar las plantas
con flor!
- La luna llena
Quizás sea la fase más espectacular de todas.
La Luna llena se produce cuando la concavidad
de la parte luminosa del satélite logra verse
en su totalidad, formando así un círculo
completo. Es la fase que marca justo la mitad del
mes lunar.
En este periodo, los rayos de la Luna van en
aumento. Como consecuencia, las hojas de las
plantas se desarrollan rápidamente, sin
embargo, las raíces crecen a un ritmo menor
pues la savia ya no se concentra en ellas.
En estos días, la vegetación cuenta con una
mayor cantidad y mayor movimiento interno de
agua y savia. Esta última está en el follaje y es
por ello que el desarrollo de esta parte es mayor.
26
Y aunque todo pueda parecer positivo, no lo es.

En luna llena las plagas suelen proliferar más
que en otras fases lunares.
Ahora te estarás preguntando, ¿cómo
aprovechar el efecto de la luna llena?
Dado que durante esta etapa la savia de las
plantas se concentra (en su mayoría) en el
follaje y que, además, hay una gran
disponibilidad de agua, las actividades de
agricultura y jardinería recomendadas guardan
estrecha relación con las hojas.
Algunas son:
● Tareas de poda.
● Cosechar frutos y hortalizas de hoja (lechu
ga, espinacas, etc.) pues así conseguirás un
mayor volumen de follaje, que es lo que
verdaderamente interesa este tipo de
vegetación.
● Plantar especies que se mantienen verdes
durante todo el año, es decir, plantas de
follaje perenne.
● Trasplante: si el trasplante se realiza durante
luna llena, la vegetación tenderá a crecer
27
rápido y a producir, como no, un mayor

volumen de hojas.
● Propagación vegetativa: si usas estacas
para la propagación vegetativa, te
recomendamos que no las cortes en esta
fase lunar. ¿Por qué? Porque al tratarse de
un periodo de gran disponibilidad acuosa, las
hormonas fundamentales para el
enraizamiento y que se encuentran incluidas
en el agua estarán muy diluidas. Por tanto, la
emisión de las raíces no se estimulará
correctamente. Además, los líquidos saldrán
y tu cosecha podría deshidratarse.
- El cuarto menguante
Cuarto menguante es la fase lunar “contraria” al
cuarto creciente. Durante estos días, la Luna
empieza a disminuir su visibilidad (recordarás
que en luna creciente el efecto era el opuesto).
Esta etapa se produce antes de luna nueva y
después de luna llena. La apariencia del satélite
es de un semicírculo decreciente.
Dura aproximadamente 13 días y es posible
observar durante las horas de la mañana, ya que
28
alcanza el cenit a las 6 de la madrugada. El

ocaso es a las 12 del mediodía.
El cuarto menguante es sinónimo de menos
actividad. La luz lunar va disminuyendo a
medida que pasan los días, la savia de las
plantas comienza a desplazarse hacia las raíces
para finalmente concentrarse en ellas, esto deja
como resultado,
un crecimiento lento del follaje y un aumento
en el desarrollo de la parte inferior de la
vegetación.
La disminución de la luz de la Luna, los
movimientos inferiores de la savia y el lento
crecimiento del follaje hacen que durante esta
etapa los mejores trabajos de jardinería (o al
menos los más recomendados) sean los
siguientes:
● Sembrar hortalizas de raíz como por
ejemplo el nabo o la zanahoria. Recuerda, la
savia de las plantas se concentra en sus
raíces.
● Eliminar las hojas marchitas
● Regar por abajo las plantas con flor y
pulverizar aquellas que tengan un follaje
verde (perenne).
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● Es la fase lunar perfecta para llevar a

cabo trasplantes, pues la cosecha no sufrirá
demasiado.
● Abonar el suelo de la plantación.
● Plantar árboles de hoja larga.
Tenemos que concluir este punto con lo
siguiente. “el fruto del justo es árbol de vida; y el
que gana almas es sabio”.
Después de recopilar toda esta información
científica, miremos algunas cosas muy puntuales
en cuanto al tiempo de sembrar la semilla, en las
sagradas escrituras.
Algo aquí muy importante es preguntarnos, ¿por
qué Jesús utiliza el método de la siembra para
ilustrar algo del reino?
La respuesta es sencilla, porque todo Israel
conocía muy bien el proceso de la siembra, eso
se debe a que Israel en aquellos tiempos en que
no había industrialización, ni esas maquinarias
que hay hoy en día, ellos tenían muchas
maneras de sembrar, su fuerte siempre fue la
agricultura. Ellos sabían cuándo era el tiempo de
30
sembrar una cosa, cuando era el tiempo de

sembrar otra cosa.
Miremos lo que dice Eclesiastés 3:2 “Tiempo de
nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar,
tiempo de arrancar lo plantado”. La pregunta es
¿Cuándo es el tiempo de sembrar?, cada
producto tenía su tiempo en que debía ser
sembrado.
Así como salomón lo dice, había un tiempo para
sembrar y había un tiempo para recoger, la Biblia
lo llama “siega”.
¿Cuándo es el tiempo de la siega? Bueno, eso
comienza a establecerse desde el momento en
que los diferentes frutos que eran sembrados en
ciertas temporadas tenían una duración de
gestación exacta, y ellos podían calcular
claramente cuando es que se podía dar cierto
producto.
En Génesis capítulo uno, nos establece que todo
era oscuridad cuando Dios estaba poniendo
orden en la creación, dice sea la luz y fue la luz, y
entonces llamó a la luz día, y a la oscuridad
noche, dice y fue la tarde y la mañana, un día.
31
Primero estaba la oscuridad y después estaba la

luz, el concepto de tiempo manejado en las
escrituras es que el día comienza al atardecer, el
tiempo de noche, el tiempo de día, y culmina. Es
por esto que en Génesis 1: 14 “dijo luego Dios:
haya lumbreras en la expansión de los cielos
para separar el día de la noche; y sirvan de
señales para las estaciones, para días y años”.
¿Qué significa estaciones? Las cuatro estaciones
que tenemos en el año son, invierno, verano,
otoño y primavera, estas estaciones señalan el
tiempo adecuado cuando se debe sembrar, o
cuando se debe cosechar.
De esta manera se establecen los tiempos
adecuados que Dios puso para saber cuándo se
da cada cosa; cuando Dios colocó el sol y la luna
como las lumbreras mayores, lo que nos dice que
las lumbreras van a marcar las estaciones, los
días, y los años, una para que se enseñorease
del día, y otra para la noche, marcando el
comienzo del día cuando cae la noche.
Por tanto, en la cultura Bíblica, no judía, ya que
aquí no estaban los judíos en este pasaje de
Genesis capitulo uno, el día y los meses
32
comienzan, no con la luz ni con el sol, sino con la

luna, por eso debe decirse el calendario bíblico,
no judío, ya que esta fue la forma que Dios
estableció cuando el pueblo de Israel todavía no
existía, y es una forma de contar el tiempo que
trascendió a otras naciones, por ejemplo China
también cuenta el tiempo guiándose con la luna,
y no con el sol, específicamente lo cuentan a
partir de la luna como elemento principal, porque
también toman en cuenta el sol, ya que los dos
fueron establecidos por el señor, uno para
señorear en el día, y el otro en la noche.
El desarrollo de la luna que no lo tiene el sol,
porque el sol siempre está en una misma forma,
una misma intensidad, pero por otro lado la luna
si puede marcar distinciones y tiempo, por que
marca un proceso en ella misma, que puede ser
visto claramente con el ojo humano sin ningún
otro instrumento, así como pudimos estudiar en
la información brindada anteriormente sobre la
luna nueva, etc.
La luna como un elemento que Dios colocó para
saber la medición de los días de los tiempos
establecidos; esos procesos lunares establecen
33
mediciones en las que esos diferentes productos

tienen que ser sembrados, pero esto se
determina por las características de los
productos, hay algunos que se siembran en
menguante y otros en creciente.
Miremos Deuteronomio 33:14: “con los más
escogidos frutos del sol, con el rico producto de
la luna”.
¿Por qué habla del rico producto de la luna?,
bueno porque es sabido de ciertas hortalizas,
frutas y verduras, que, si se siembran en la
época equivocada, sea luna menguante o
creciente, ella se va a producir, pero se produce
pequeña y no tiene buen sabor, pero cuando se
siembra en la estación correcta, crece bien, con
un tamaño más prominente y un sabor especial.
1 Samuel 20:5, “y David respondió a Jonatan: he
aquí que mañana será nueva luna, y yo
acostumbro a sentarme con el rey a comer; más
tu dejaras que me esconda en el campo hasta la
tarde del tercer día”. Podemos ver que ellos
tenían ciertas costumbres siguiendo las
estaciones, los tiempos de la luna establecidos
en un ciclo lunar, que dura 29 días.
34
V.18: “luego le dijo Jonatan: mañana es nueva

luna, y tú serás echado de menos, por que tu
asiento estará vacío”. V.24: “David, pues, se
escondió en el campo, y cuando llegó la nueva
luna, se sentó el rey a comer pan”. Aquí
podemos mirar ciertas costumbres que tenían
ellos con referencia a la luna.
Seguimos en 2 Reyes 4: 23: “Él dijo: ¿para qué
vas a verle hoy?, no es nueva luna, ni día de
reposo, ella respondió: paz”. Tomaban como
referencia a la luna para ciertos hábitos
establecidos que ellos tenían para hacer.
Salmos 81: 3, “tocad la trompeta en la luna
nueva, en el día señalado, en el día de nuestra
fiesta solemne”. Podemos ver que ellos tenían el
tema de la luna como algo importante y era un
medidor del tiempo para algunos eventos en el
pueblo.
También podemos mirar otros textos:
Isaías 1:13, “no me traigáis más vana ofrenda: el
incienso me es abominación; luna nueva y día de
reposo, el convocar asambleas no lo puedo
sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes”.
35
Cada luna nueva era el comienzo de un mes

nuevo, entonces ellos celebraban en cada luna
nueva una convocación, se reunían, tocaban
trompeta, además de todo esto, la luna les servía
como un instrumento para el tiempo de sembrar y
contaban las lunas para saber cuándo se iba a
cosechar los frutos.
Miremos Jeremías 31:35,” Así ha dicho Jehová,
que da el sol para luz del día, las leyes de la luna
y de las estrellas para luz de la noche, que parte
el mar y braman sus ondas, Jehová de los
ejércitos es su nombre”. Entonces, en cuanto a
este asunto de las leyes de la luna, el pueblo
tenía claro la forma en que a través de las
diferentes estaciones que tiene la luna, debían
regirse para sembrar.
No se rigen por el sol, porque el sol no cambia,
tiene una sola forma, no se desvanece, no hay
menos ni más. Amos 8:5, “Diciendo, ¿cuándo
pasará el mes y venderemos el trigo, y la semana
y abriremos los graneros del pan, y achicaremos
la medida y subiremos el precio, y falsearemos
con engaño la balanza?”
36
Ezequiel 46:1, “Así a dicho Jehová el señor, la

puerta del atrio interior que mira al oriente estará
cerrada los seis días de trabajo, y el día de
reposo se abrirá; se abrirá también el día de la
luna nueva”
El tiempo del trigo, y el tiempo de la cebada,
diferentes frutos se cosechan en estas
estaciones. En primavera era el tiempo de la
cebada, que se daba en el mes de abril, después
del 14 de abril donde se celebraba la pascuas, 50
días después venían los frutos que es la fiesta de
pentecostés, que tenía que ver con frutos
nuevos, debían también traer algunos frutos de la
tierra. Había también otros frutos que se daban
en otoño, que se llevaban en esos tiempos.
Podemos también contemplar en la palabra
algunos textos que nos hablan de los eclipses
lunares, la Biblia habla de las lunas de sangre
que hoy conocemos como eclipses.
Hechos 2:20, “El sol se convertirá en tinieblas y
la luna en sangre, antes que venga el día del
señor grande y manifiesto”;
Apocalipsis 6:12, “Miré cuando abrió el sexto
sello, he aquí hubo un gran terremoto y el sol se
37
puso negro como tela de cilicio, y la luna se

volvió toda como sangre”.
También se hicieron unos estudios, y estos
revelaron que se disparaba la sed de sangre y de
matar en algunas personas, con algunos cambios
de la luna, a estas personas las llaman lunáticos.
Mateo 4:24, “Y se difundió su fama por toda siria
y le trajeron todos los que tenían dolencias, los
afligidos por diversas enfermedades y tormentos,
los endemoniados, lunáticos y paralíticos, y los
sanó”
Mateo 17:15, “Señor ten misericordia de mi hijo
que es lunático, y padece muchísimo, porque
muchas veces cae en el fuego y muchas en el
agua”.
Miremos algunos textos de la palabra, que
confirman la importancia de que el sembrador
conozca los tiempos de la siembra. Miremos el
nuevo testamento: 2 Timoteo 2:6, “El labrador
para participar de los frutos, debe trabajar
primero”; Santiago 5:7, “Por tanto hermanos
tened paciencia hasta la venida del señor, mirad
cómo el labrador espera el precioso fruto de la
38
tierra, aguardando con paciencia hasta que

reciba la lluvia temprana, y la tardía”
Notemos la palabra “espera”, esto quiere decir
que hay un tiempo para sembrar, y hay un tiempo
para cosechar. Mateo 21:33-34, “Oíd otra
parábola, hubo un hombre padre de familia, el
cual plantó una viña, la cercó de vallado, cavó en
ella un lagar, edificó una torre, y la rento a unos
labradores, y se fue lejos, y cuando se acercó el
tiempo envió sus siervos a los labradores para
que revisen su fruto”.
La lluvia temprana y tardía, sabemos que habla
de los diferentes estados que en el tiempo se
dan, como cuando la lluvia cae al finalizar la
siembra, o cuando el fruto es grande y necesita
ser rociado; muchos frutos de la tierra necesitan
del agua para poder cosecharse.
Concluimos todo lo anterior en Levíticos 25:3,
“seis años sembrarás tu tierra, y seis años
podaras tu viña y recogerás sus frutos”. En este
pasaje podemos mirar tres cosas:
1. Sembrar.
39
2. Podar- cortar las ramas superfluas de los

árboles, eliminar ciertos aspectos
indeseables, esto quiero decir cuidar lo
que tu siembra.
3. Recoger los frutos.
Cada una de estas facetas del trabajo debe
conocerlas el sembrador, para poder llamarse
así. Salmos 1:1-3. “Bienaventurado el varón que
no anduvo en consejos de malos, ni estuvo en
camino de pecadores, ni en sillas de
escarnecedores se ha sentado, sino que en la ley
de Jehová está su delicia, y en su ley medita de
día y de noche, será como árbol plantado junto a
corriente de agua, que da su fruto en su tiempo y
su hoja no cae, y todo lo que hace prosperará”.
¿Cómo aplicamos todo esto a un predicador?, un
amigo e hijo Espiritual llamado Rubén Forber, de
San Andrés Islas, que se convirtió hace muchos
años en la cárcel ternera con el trabajo que
hacíamos en ese lugar, aquí en Cartagena, y hoy
en día es pastor en San Andrés, me contó el
testimonio de que la mayoría de sus ovejas se
las había ganado en velorios. Esto me puso a
40
pensar en la importancia de saber el tiempo

preciso para sembrar la palabra.
Los puntos aplicativos de este tema a tratar a
continuación, son algunos basados en
experiencias vividas durante estos 30 años de
ministerio en el campo evangelístico con buenos
resultados.
Examinemos un texto para dar una aclaración de
este versículo. 2 Timoteo 4:2, “que prediques la
palabra, que instes a tiempo y fuera de tiempo;
redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia
y doctrina”.
Este texto para poderlo entender, tenemos que
mirar su contexto, naturalmente, y así poder darle
una aplicación correcta. Es claro que Pablo se lo
está diciendo a Timoteo, para que lo aplique a
personas que están ya dando frutos o, mejor
dicho, que son creyentes.
Pero cuando nosotros vamos a ganar almas, o
sembrar por primera vez la semilla, debemos
hacerlo en el tiempo correcto. El tiempo correcto
se nos puede presentar en diferentes lugares
como:
41
a). Donde hay luto, puede ser una casa donde

estén haciendo lo que llamamos velorio, o en un
cementerio donde están enterrando a una
persona. Eclesiastés 7: 2-3, “2 Mejor es ir a la
casa del luto que a la casa del banquete; porque
aquello es el fin de todos los hombres, y el que
vive lo pondrá en su corazón. 3 mejor es el pesar
que la risa; porque con la tristeza del rostro se
enmendará el corazón.”
b). Los hospitales. San Juan 5: 1-9 “Después de
estas cosas había una fiesta de los judíos, y
subió Jesús a Jerusalén.
2 y hay en Jerusalén, cerca de la puerta de las
ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda,
el cual tiene cinco pórticos. 3 en éstos yacía una
multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos,
que esperaban el movimiento del agua. 4 porque
un ángel descendía de tiempo en tiempo al
estanque, y agitaba el agua; y el que primero
descendía al estanque después del movimiento
del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad
que tuviese. 5 y había allí un hombre que hacía
treinta y ocho años que estaba
enfermo. 6 cuando Jesús lo vio acostado, y supo
que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo:
42
¿Quieres ser sano? 7 Señor, le respondió el

enfermo, no tengo quien me meta en el estanque
cuando se agita el agua; y entre tanto que yo
voy, otro desciende antes que yo. 8 Jesús le dijo:
Levántate, toma tu lecho, y anda. 9 y al instante
aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y
anduvo. Y era día de reposo[a] aquel día
c). Las cárceles. Hebreos 10:34: “Porque de los
presos también os compadeciste, y el despojo de
vuestros bienes sufristeis con gozo, sabiendo
que tenéis en vosotros una mejor y perdurable
herencia en los cielos.
Hebreos 13:3; Salmos 79;11; Salmos
102:20.
d). Los parques o plazas. Lucas 14:21, “Vuelto
el siervo, hizo saber estas cosas a su señor.
Entonces enojado el padre de familia, dijo a su
siervo: Ve pronto por las plazas y las calles de la
ciudad, y trae acá a los pobres, los mancos, los
cojos y los ciegos. “
e). Las calles. Marcos 6: 56 “Y dondequiera que
entraba, en aldeas, ciudades o campos, ponían
en las calles a los que estaban enfermos, y le
rogaban que les dejase tocar siquiera el borde de
43
su manto; y todos los que le tocaban quedaban

sanos”. Lucas 10:10; 14: 21, Hechos 5:15, Lucas
19:5.
f). Por las casas, en momentos oportunos o
adecuados. Lucas 19:9, “Jesús le dijo: Hoy ha
venido la salvación a esta casa; por cuanto él
también es hijo de Abraham”. Hechos 5:42.
g). En la universidad, o colegios en tiempos
propicios.
h). En medios de transportes, avión, bus,
barcos, etc., Hechos 27: 20-23, “Y no
apareciendo ni sol, ni estrellas por muchos días,
y acosados por una tempestad no pequeña, ya
habíamos perdido toda esperanza de salvarnos,
entonces Pablo como hacía ya mucho que no
comíamos, puesto en pie en medio de ellos, dijo:
habría sido por cierto conveniente, oh varones,
haberme oído y no zarpar de Creta tan sólo para
recibir este perjuicio y pérdida, pero ahora os
exhorto a tener buen ánimo, pues no habrá
ninguna pérdida de vida entre vosotros, sino
solamente de la nave”.
i). En el trabajo.
44
Todos estos lugares, os brindarán el tiempo y

espacio para sembrar la palabra de Dios.
Concluimos con esta cita de la palabra:
Deuteronomio 6: 4-9: “4 Oye, Israel: Jehová
nuestro Dios, Jehová uno es. 5 y amarás a
Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu
alma, y con todas tus fuerzas. 6 y estas palabras
que yo te mando hoy, estarán sobre tu
corazón; 7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás
de ellas estando en tu casa, y andando por el
camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8 y
las atarás como una señal en tu mano, y estarán
como frontales entre tus ojos; 9 y las escribirás
en los postes de tu casa, y en tus puertas”.
Luego de haber entendido lo importante del
sembrador, en el papel de predicador, nos
concentramos en la semilla.
45
2. La semilla
La semilla o simiente, es la parte del vegetal,

mediante la cual se propagan los vegetales
espermatofitos. La semilla se produce por la
maduración de un óvulo de una gimnosperma o
de una angiosperma. Una semilla contiene un
embrión del que puede desarrollarse una nueva
planta bajo condiciones apropiadas.
2.1. Tipos de semilla

Leamos el siguiente artículo que citamos, y luego
le damos su aplicación a esta enseñanza:
Tipos de semillas que existen para sembrar
(María Franqueza 2016).
Existen muchos tipos de semillas, que cumplen muchas

funciones y su utilidad es muy variada, tanto en la
plantación de cultivos, como en la cocina, a la hora de
elaborar platos. Entre la gran diversidad de semillas
existentes, algunas mantienen una cubierta exterior dura con
pulpa permeable en el interior, y otras son comestibles y muy
fáciles de masticar. También el color varía mucho de unas
semillas a otras.
A continuación, os exponemos qué tipos de semillas hay para
la siembra:
46
Semillas criollas: Por definición, el término “criollo” quiere

decir autóctono. Por tanto, este concepto hace referencia a
una tipología de semillas que se adaptan al entorno gracias a
un proceso de selección natural o manual.
Entre las ventajas de esta clase están el evitar el agotamiento
del terreno de cultivo, y una vuelta a las técnicas tradicionales
de agricultura de consumo, pudiéndose obtener nuevas
semillas para la siembra siguiente.
Semillas mejoradas: La característica principal de las
semillas mejoradas es que son un tipo de semillas escogidas
con la ayuda del hombre, con técnicas y procesos de
polinización controlada.
Entre las propiedades de estos tipos de semillas, se
encuentran:
la alta resistencia a enfermedades y plagas
una alta producción
su precocidad
y la sencilla adaptación a todo tipo de regiones.
Semillas Baby: Con el resultado de unos granos tiernos, con
un toque especial de dulzor, delicados y de una textura y
coloración brillante, son un tipo de semillas que han
sido tratadas para detener su desarrollo.
Los aportes nutricionales son parecidos, e incluso pueden
superar, a los de las semillas ya desarrolladas.
Semillas Híbridas: Se trata, como su propio nombre indica,
del cruce de variedades puras. Entre su característica está:
47
la uniformidad
un rápido crecimiento
raíces y tallos con más resistencia y más robustos
y un fruto de más calidad.
Estas semillas tienen muchas ventajas, como es el hecho de
que puedan fructificar de forma óptima en condiciones
climáticas de todo tipo, sean ambientes cálidos, fríos,
secos, etc.
Además, el número de frutos y semillas es superior con esta
variedad, se obtiene una elevada resistencia a plagas y
enfermedades, manteniendo el rendimiento y la uniformidad
de los frutos.
Los híbridos en la plantación pueden ser de dos
variedades bien diferenciadas:
Híbridos de crecimiento determinado. Su tallo va a delimitar la
formación de nudos y la altura de la planta, sobre todo a partir
del momento de la floración.
Híbridos de crecimiento libre. En ellos, tras la floración, la
producción de nudos continúa por encima del tallo, y la altura
va siendo mayor cada vez.
Semillas de hortalizas: Su tipología abarca mucha variedad,
en cuanto a tamaño y a formas. La germinación es diferente
en todos los casos, pero es común la necesidad de
humedad y de un riego adecuado, para que la semilla
germine y progrese de una forma óptima para la producción.
Semillas de flores: Muy distinta en cuanto a formas, tamaño,
48
colores y texturas, desde el negro hasta una tonalidad color

crema.
En algunos casos, se trata de granos de un tamaño mucho
menor que el de las hortalizas, incluso corren el riesgo de
ser transportadas por un viento elevado.
Semillas de frutas: Cada fruta tiene un tipo diferente de
semilla.
Semillas comestibles: Pensemos, por ejemplo, en las
semillas de girasol (las conocidas “pipas”), producidas para
su consumo humano directamente. También está el caso
del comino, la mostaza, legumbres, frutos secos, sésamo,
etc. En lo referido al aporte en nutrientes, la mayoría de las
semillas comestibles contiene una elevada proporción de
proteínas y vitamina B, algunos minerales como el calcio, e
incluso vitamina E.
Leyendo este artículo podemos entender que, en

el momento de sembrar, debemos tener en
cuenta que lo que quiero recoger sea lo mismo
que estoy sembrando.
Leamos en Gálatas 6: 7-8, “No os engañéis; Dios
no puede ser burlado; pues todo lo que el
hombre sembrare, eso también segará”. “por qué
el que siembra para su carne, de la carne segará
corrupción, más el que siembra para el espíritu,
del espíritu segará vida eterna”.
49
Hay varias cosas que debemos tener en cuenta

al momento de sembrar las semillas.
2.2. El fruto que quiero recoger.

Antes de desarrollar este punto, miremos Gálatas
5: 22-23, “más el fruto del espíritu es amor, gozo,
paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,
mansedumbre, y templanza; contra tales cosas
no hay ley”.
Lo que sembramos, eso mismo recogeremos, es
imposible que si usted y yo, no tenemos el
espíritu santo, manifestemos los frutos del
espíritu, porque es importante la semilla al
momento de sembrar, entendiendo que cuando
hablamos de semilla, hablamos de la palabra de
Dios.
Si deseamos que las personas se salven del
pecado, del infierno, y de su condenación eterna,
debemos predicarles una palabra con ese
objetivo de salvación, de acuerdo a la semilla que
se siembre, así serán los frutos que se recojan.
Por ejemplo, si yo deseo que alguien dé amor,
pues debo predicar sobre el amor, si quiero que
50
alguien dé paciencia, mi tema será la paciencia,

pero si quiero que el matrimonio se fortalezca,
hablaré del matrimonio, y así en todo lo que
deseo ver resultados o frutos. Por lo tanto,
debemos sembrar la semilla, de acuerdo al fruto
que deseamos recoger.
Si, por otro lado, el tema que quiero reflejar, es la
salvación, pues debo sembrar la semilla correcta
para poder recoger el fruto que deseo.
Por tanto, pregunto lo siguiente, ¿Cuál es el fruto
que deseo recoger en una persona que está sin
cristo?, la respuesta es clara, la salvación.
Teniendo claro el fruto que deseo recoger, que
es la salvación, como sembrador que soy debo
seleccionar la semilla correcta.
2.3. Debemos sembrar la semilla del

evangelio.
Pablo dijo lo siguiente en Romanos 1:16, “por
qué no me avergüenzo del evangelio, porque es
poder de Dios para salvación, a todo aquel que
cree; al judío, primeramente, y también al griego”.
51
Hechos 8:4, “pero los que fueron esparcidos iban

por todas partes anunciando el evangelio”
Marcos 16:15, “y les dijo: id por todo el mundo y
predicad el evangelio a toda criatura”.
Quiero terminar con esta última cita Bíblica,
Hechos 15:35, “y Pablo y Bernabé continuaron
en Antioquía, enseñando la palabra del señor y
anunciando el evangelio con otros muchos”.
Es importante entender esto, para poder ganar a
los perdidos, tenemos que predicar el evangelio.
Evangelio:
La palabra evangelio es originaria del latín
“evangelium”, y está a su vez proviene del griego
“evanghélíon”, la misma está compuesta por 2
vocablos, “ev”, que significa “bien”, y “angelos”,
que expresa “mensajero”, por lo tanto, significa
“buena nueva o mensaje feliz”.
En el evangelio del reino está la salvación del
hombre, es la medicina que necesita el enfermo,
por tanto, es necesario conocer algunas cosas
antes de sembrar la semilla, y seguiremos
tomando como ejemplo la parábola del
sembrador.
52
Debemos conocer muy bien la semilla que vamos

a sembrar, luego de haber estudiado el papel del
sembrador (el que predica la palabra),
estudiaremos un poco lo básico del evangelio,
analizando la semilla, que es el evangelio.
¿Qué compone el evangelio?
Podemos analizar lo más básico, lo necesario
para saber cómo ganar almas.
2.3.1. La Justicia de Dios
En el evangelio se revela la justicia de Dios.
Romanos 1:17.
Este término “justicia”, es muy importante
entenderlo, ya que de ahí depende que
entendamos la salvación de nuestras almas.
Les cuento que este texto fue el que tomó el
espíritu santo para hablarle a Martin Lutero, que
pensaba que la salvación era por las obras, y ese
día estaba caminando de rodillas las escaleras
de la iglesia católica en el vaticano, era como una
especie de indulgencia, y ese día este texto le
hablo “el justo vivirá por su fe”.
Se puede afirmar entonces que la justicia de
Dios, es la salvación divina que se ha hecho
53
realidad en el presente de la vida del creyente,

en la existencia actual del cristianismo, aunque
todavía es solo una esperanza, pues se cumplirá
de modo definitivo solo al final.
Justicia: En el ámbito de las escrituras, la
justicia es la ley inmutable y responsable de las
consecuencias de las acciones, debido a la ley
de la justicia, recibimos bendiciones cuando
obedecemos los mandamientos de Dios. La ley
de la justicia también exige que recibamos un
castigo por todo pecado que cometamos.
Cuando el salvador efectuó la expiación, tomó
sobre sí nuestros pecados, pudo “satisfacer” las
demandas de la ley porque aceptó padecer el
castigo de nuestros pecados, de acuerdo con los
requerimientos de la ley. Al hacerlo satisfizo las
exigencias de la justicia y extendió misericordia a
todos los que se arrepientan y lo sigan. Romanos
3:21-31.
Todos estos versículos del libro de Romanos,
nos explican la labor de Cristo en la salvación del
hombre, ya que todos los hombres hemos
pecado, y violando su ley nos hacemos culpables
ante Dios, Cristo tomó nuestros pecados, el justo
54
por lo injusto, y cumplió las demandas de la ley,

él es nuestra justicia. Eso es el evangelio,
cumplimiento de lo que el señor decretó, “la paga
del pecado es muerte”, Cristo cumplió esa
demanda.
2.3.2. La expiación de Cristo
Algo más que nos revela el evangelio es la
expiación de Cristo. Hebreos 9: 23-28; 10: 1-39.
¿Qué es la expiación?, tal y como se utiliza en
las escrituras, espiar consiste en padecer el
castigo por los pecados, con lo cual se eliminan
los efectos del pecado, y el pecador arrepentido
puede reconciliarse con Dios.
Jesús, el Cristo, fue la única persona capaz de
llevar a cabo la expiación por toda la humanidad.
Juan 1:29, “el siguiente día vio Juan a Jesús que
venía a él, y dijo: he aquí el cordero de Dios que
quita el pecado del mundo”. Todo esto te lo
revela el evangelio.
2.3.3. La propiciación
En el evangelio se revela la propiciación. 1 Juan
4:10, “en esto consiste el amor; no en que
nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él
55
nos amó a nosotros, y envió a su hijo en

propiciación por nuestros pecados.
1 Juan 2: 2, “y él es la propiciación por nuestros
pecados, y no solamente por los nuestros, sino
también por lo de todo el mundo”.
¿Qué es la propiciación?, el concepto básico es
que es un sacrificio para apaciguar, absorber o
desviar la ira de Dios. Dios siempre fiel a todas
sus perfecciones, tiene dos atributos que
funcionan en armonía bajo condiciones normales:
su santidad, y su amor.
Su santidad describe su calidad de perfección
moral y trascendencia. Su amor, habla de su
afecto, su amabilidad, su compasión, y las
decisiones que toma para el beneficio de otros.
Estas características perfectas de Dios no tienen
ningún conflicto hasta que hay pecado, su
santidad ante la presencia del pecado, se
demuestra como ira.
En su justicia perfecta, el pecado será castigado
con la venganza que merecemos, esto es un
gran problema para el pecador. El castigo del
pecado es la muerte eterna, nosotros como
56
pecadores estamos bajo la ira de Dios que viene

bajándose del cielo y llegará a nosotros en el día
de juicio.
La propiciación es la idea de que la muerte de
Jesús en la cruz se interpone para tomar este
castigo, apaciguando (satisfaciendo) la ira de
Dios. Esta es la provisión que Cristo hizo en la
cruz, en una propiciación, un sacrificio que
absorbe la ira de Dios dirigida a pecadores.
Todo esto lo contiene el evangelio que es la
semilla que todo predicador debe saber y tener
para poder sembrar y recoger los frutos de dicha
semilla. Miremos 4 cosas más que contiene el
evangelio de Cristo.
2.3.4. La redención.
Lucas 2: 38, “Está, presentándose en la misma
hora, daba gracias a Dios, y hablaba del niño a
todos los que esperaban la redención en
Jerusalén”. Nos muestra que el pueblo esperaba
la redención de Israel.
Romanos 3:24, “Siendo justificados
gratuitamente por su gracia, mediante la
redención que es en Cristo Jesús”.
57
1 corintios 1: 30, “Mas por él estáis vosotros en

Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios,
sabiduría, justificación, santificación, y redención.
Efesios 1: 7, “En quien tenemos redención por su
sangre, el perdón de pecados según las riquezas
de su gracia”.
Hebreos 9:12, “Y no por sangre de machos
cabríos, ni de becerros, sino por su propia
sangre, entró una vez para siempre en el lugar
santísimo, habiendo obtenido eterna redención”.
Leyendo todos estos textos de la palabra
debemos investigar el significado de esta
expresión “redención”, el término refiere a la
salvación de la humanidad lograda por Jesús el
Cristo con su pasión y su fallecimiento. La fe
nuestra indica que Jesús el Cristo murió en la
cruz para redimir al hombre y permitirte el acceso
al cielo, liberándolo de la culpa del pecado.
¿Qué es la redención en el antiguo testamento?,
como asunto legal, la propiedad se redime al
pagar por completo una hipoteca, u otros cargos
a la misma. En la época del antiguo testamento,
la ley de Moisés proporcionaba diferentes
58
maneras para que los sirvientes y la propiedad

pudieran ser libres o redimidos por medio del
pago de dinero. Levítico 25: 31, “Mas las casas
de las aldeas que no tienen muro alrededor serán
estimadas como los terrenos del campo; podrán
ser rescatadas, y saldrán en el jubileo”.
Redención, del prefijo re, “de nuevo”, y émere,
“comprar”, literalmente significa “comprar de
nuevo”, se aplica al pago para obtener la libertad
de un esclavo o cautivo, o bien para volver a
adquirir o comprar algo que se había vendido,
empeñado o hipotecado.
De esta misma forma así era nuestra condición
de pecado, en sentido figurado, la redención
también es la liberación mediante una acción de
un vejamen, dolor, penuria, u otra adversidad.
El redentor es quien redime. Romanos 7:14,
“Porque sabemos que la ley es Espiritual; más yo
soy carnal, vendido al pecado”.
Juan 8: 34, “Jesús les respondió: De cierto, de
cierto os digo, que todo aquel que hace pecado,
esclavo es del pecado.” Todo esto nos lo trae el
evangelio.
59
2.3.5. La justificación.
Romanos 4:25, “el cual fue entregado por
nuestras transgresiones, y resucitado para
nuestra justificación”.
Romanos 5: 16, “Y con el don no sucede como
en el caso de aquel uno que pecó, porque
ciertamente el juicio vino a causa de un solo
pecado para condenación, pero el don vino a
causa de muchas transgresiones por
justificación”.
2 corintios 3: 9, “Porque si el ministerio de
condenación fue con gloria mucho más abundará
en gloria el ministerio de justificación”.
Romanos 3: 24, “Siendo justificados
gratuitamente por su gracia, mediante la
Les dejo unas citas más respecto a esto, para su
estudio en casa. Hechos 13: 39, Rom 2: 13; 15:
1; 5:9, 1 cor 6:11, Gal 2: 16-17, Gálatas 3: 24,
Tito 3:7.
Definamos ahora la palabra “Justificación”,
acción de justificar que convierte o transforma lo
que era injusto o no conforme a las normas, en
60
justo o verdadero, conforme a un criterio de

justicia de normas o de verdad.
De las 39 veces que el verbo “justificar” aparece
en el NT, 29 pertenecen a epístolas o
expresiones de Pablo. Esto refleja el hecho de
que, de los escritores neotestamentarios,
solamente Pablo toma como elemento básico de
su soteriología el concepto de la justificación.
Para Pablo la justificación es la acción de Dios de
remitir los pecados de los hombres culpables, y
considerarlos justos, gratuitamente, por su gracia
mediante la fe en Cristo, sobre la base, no de sus
propias obras, sino de la obediencia a la ley, y el
derramamiento redentor de su sangre por parte
del señor Jesús el Cristo, en representación de
ellos.
La doctrina paulina de la justificación es su modo
característico de formular la verdad central del
evangelio de que Dios perdona a los pecadores
que creen.
2.3.6. La santificación.
Romanos 6:22, “Más ahora que habéis sido
libertados del pecado y hechos siervos de Dios,
61
tenéis por vuestro fruto la santificación, y como

fin, la vida eterna”.
Romanos 6:19, “hablo como humano por vuestra
humana debilidad, que, así como para iniquidad
presentasteis vuestros miembros para servir a la
inmundicia y a la iniquidad, así ahora para
santificación, presentad vuestros miembros para
servir a la justicia”.
1 corintios 1:30, “más por él estáis vosotros en
Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios,
sabiduría, justificación, santificación, y
redención”.
Definamos ahora “santificación”, ser santificado
es llegar a ser limpio, puro y sin mancha, estar
libre de la sangre y de los pecados del mundo;
llegar a ser nueva criatura del espíritu santo,
alguien cuyo cuerpo ha sido renovado por el
renacimiento del Espíritu Santo.
¿Qué diferencia hay entre santificación y
santidad?, la santificación es la segunda obra de
gracia que Jesús el Cristo hace en el ser
humano, la cual prepara al creyente para vivir
una vida en santidad. Es deber de todo creyente
62
permitir que el señor obre en su vida para

corregir sus acciones y vivir en agrado a Dios.
Santificación y santidad son términos parecidos,
provienen del griego jagios-jagiasmós que
traduce “santo”, que significa separados o
consagrados. Por su lado la santificación es la
separación del viejo hombre, y acercamiento a
Dios; el hombre nuevo, decide apartarse de la
oscuridad y caminar por el sendero estrecho,
guiado por el Espíritu Santo.
Mateo 7:14, “porque estrecha es la puerta, y
angosto el camino que lleva a la vida, y pocos
son los que la hallan”. Cabe resaltar que una
evidencia de esta obra, es la manifestación del
Espíritu Santo, registrado en Gálatas 5:22-23. De
esta manera el creyente evidencia su nueva vida.
Cabe repetir que sin santificación no hay
santidad, puesto que es necesaria esta obra para
desarrollar una vida santa y agradable a Dios.
Además, este es un imperativo divino para cada
cristiano, ya que todos fueron hechos a imagen y
semejanza de Dios, con una misión especial,
llegar a la estatura de Cristo. Según efesios 4:13,
63
“hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe, y

del conocimiento pleno del hijo de Dios, a la
condición de un hombre maduro, a la medida de
la estatura de la plenitud de Cristo.
Así pues, gracias a Cristo, quien murió en la cruz
del calvario, llevó los pecados de los hombres,
espera que el ser humano pueda consagrarse
diariamente en él.
Leamos estos textos: 1 tesalonicenses 4: 3-7,
“pues la voluntad de Dios es vuestra
santificación; que os apartéis de
fornicación; 4 que cada uno de vosotros sepa
tener su propia esposa en santidad y honor; 5 no
en pasión de concupiscencia, como los gentiles
que no conocen a Dios; 6 que ninguno agravie ni
engañe en nada a su hermano; porque el Señor
es vengador de todo esto, como ya os hemos
dicho y testificado. 7 pues no nos ha llamado
Dios a inmundicia, sino a santificación. 8 así que,
el que desecha esto, no desecha a hombre, sino
a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo”:
1 Tesalonicenses 2:13, 1 Timoteo 2:15, 1 Pedro
1:2.
64
Dejamos de último el punto más importante del

contenido del evangelio y es la gracia.
2.3.7. La gracia.
Romanos 3:24, “siendo justificados gratuitamente
por su gracia, mediante la redención que es en
Cristo Jesús”.
Romanos 4: 16, “Por tanto, es por fe, para que
sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme
para toda su descendencia; no solamente para la
que es de la ley, sino también para la que es de
la fe de Abraham, el cual es padre de todos
nosotros”.
Efesios 1:7, “en quien tenemos redención por su
sangre, el perdón de pecados según las riquezas
de su gracia”.
Efesios 2:5, “Aun estando nosotros muertos en
pecado, nos dio vida juntamente con Cristo (por
gracia sois salvos)”.
¿Qué es gracia?, el término gracia es de origen
latín “gratia”, que significa benevolencia, favor o
beneficio que se recibe sin ningún tipo de
merecimiento.
65
El significado bíblico de gracia está asignado al

concepto de favor o bondad, mayormente cuando
no ha sido merecida o ganada, especialmente
para los pecadores.
En Génesis 18:3 dice “y dijo: señor si ahora he
hallado gracia en tus ojos, te ruego que no pases
de tu siervo”. Esto es en el antiguo testamento
donde la palabra gracia se usa de manera de
cortesía hacia una persona o hacia el mismo
Dios; hay humildad por parte de quien la recibe y
un favor gratuito por parte del dador.
En el nuevo testamento el significado de gracia,
también es expresado como el más alto amor de
Dios, el amor incondicional, la misericordia y el
beneficio.
Por ello es que para definir el concepto de gracia
se puede hablar en muchos sentidos, todos ellos
relacionados con el amor, con la verdad, con la
capacidad de recibir la vida divina. La gracia es
señal o prueba de la salvación de los creyentes.
Todo esto que hemos hablado, es lo que
contiene el evangelio, sin esta semilla nadie se
puede salvar.
66
Ya ha quedado definido el sembrador, y también

la semilla, ¿qué nos hace falta?, indudablemente,
la tierra para sembrar la semilla.
67
3. La tierra
Antes de sembrar la semilla debemos tomar en

cuenta algo muy importante y es que debemos
preparar el campo para el proceso de la siembra.
La actividad agraria es compleja por definición,
requiere de una serie de cuidados, procesos y
pasos recomendados para conseguir finalmente
los resultados esperados en forma de frutos.
Para ello es fundamental prestar atención a cómo
hay que preparar el campo antes del proceso de
siembra, unos requerimientos de gran utilidad
para conseguir que el terreno responda lo mejor
posible.
Las características de cómo esté el suelo son un
factor clave, al igual que pudieran serlo los
agentes externos como el frío, aire, el sol o el
agua. Por ello, antes de comenzar con la
siembra, es conveniente revisar las condiciones
de la tierra.
68
Es por eso que vamos a analizar los pasos

pertinentes para saber cómo preparar el campo
para el proceso de la siembra.
3.1. Pasos previos antes de sembrar un

campo.
A continuación, detallamos los pasos más
significativos y claves en este procedimiento
agrícola. Miremos estos pasos y luego los
aplicamos en el evangelismo.
3.1.1. Deshacernos de las malezas y malas
hierbas.
La limpieza es fundamental, de ahí surge que
antes que nada haya que quitar la maleza y la
hierba que haya surgido para evitar que
entorpezca en la siembra que posteriormente se
llevará a cabo. Es un paso básico para poder
plantar con total comodidad, es un proceso que
puede tardar un tiempo, pero mejorará las
condiciones para el trabajo de cultivo.
3.1.2. Airear el terreno y oxigenar.
Existen herramientas de diferente índole con las
que se puede realizar esta actividad. Lo
69
importante es conseguir que se aireen las capas

profundas y se consiga así el oxígeno adecuado
para que las raíces puedan crecer con todas las
garantías.
3.1.3. Abonar el terreno.
Abonar con propiedad es clave para conseguir un
sustrato rico que pueda alimentar a las raíces
para que germinen en buena condición. Existen
diferentes tipos de abonos como el abono
orgánico, el mineral, los organismos vivos o el
compost, con los que se puede dotar de
nutrientes a la tierra antes de prepararla para la
siembra.
3.1.4. Sembrar el campo.
Para una correcta siembra se recomienda el uso
de máquinas especializadas mediante las que se
puede controlar de manera precisa la
profundidad adecuada donde se requiera dejar la
semilla.
Este es un proceso que también requiere de su
tiempo, pero que se lleva a cabo fácilmente,
gracias al uso de estos sofisticados aperos para
la siembra y el cultivo de todo tipo de campos y
semillas.
70
Antes de darle una aplicación Espiritual basada

en el tema del evangelismo, tomando como
figura de ejemplo la parábola del sembrador,
miremos unos textos de la palabra para confirmar
que este proceso está en la biblia.
Isaías 5:1-4, “Ahora cantaré por mi amado el
cantar de mi amado a su viña. Tenía mi amado
una viña en una ladera fértil. 2 La había cercado
y despedregado y plantado de vides escogidas;
había edificado en medio de ella una torre, y
hecho también en ella un lagar; y esperaba que
diese uvas, y dio uvas silvestres. 3 ahora, pues,
vecinos de Jerusalén y varones de Judá, juzgad
ahora entre mí y mi viña. 4 ¿Qué más se podía
hacer a mi viña, que yo no haya hecho en ella?
¿Cómo, esperando yo que diese uvas, ha dado
uvas silvestres?”
Lucas 9:62, “Y Jesús le dijo: Ninguno que
poniendo su mano en el arado mira hacia atrás,
es apto para el reino de Dios”.
El arado es un apero de la labranza, utilizado en
la agricultura para abrir surcos en la tierra, y
remover el suelo antes de sembrar.
Quiero concluir este punto con esta importante
información:
71
¿Cómo se debe arar la tierra? La labranza

convencional o tradicional es el laboreo del suelo,
anterior a la siembra con maquinaria (aradas),
que corta parcialmente los primeros 15 cm de
suelo. El suelo se afloja, airea, y mezcla, lo que
facilita el ingreso de agua, la generalización de
nutrientes, la reducción de plagas y malezas en
superficie.
Arar, aumenta la porosidad, lo que favorece el
crecimiento de las plantas.
Todo esto se escucha interesante, pero tenemos
que aplicarlo a nuestra enseñanza sobre el
evangelismo a las almas.
¿Entonces hermano, quiere decir que antes de
sembrar la palabra, debemos preparar a las
personas para poder tener los resultados
esperados?, Es exactamente lo que quiero decir.
Entonces pregunto, ¿Cómo lo hacemos?, la
pregunta es interesante y daremos respuesta
inmediatamente.
Hay muchas formas de preparar a las personas
para sembrar la palabra del señor, de la misma
72
manera que hay diferentes tipos de arados.

Hablemos un poco de algunas de esas formas.
3.2. Arando el corazón para sembrar la

palabra de Dios
3.2.1. Los dones del espíritu Santo

Son necesarios para este procedimiento. 1
corintios 12:1-12. Todos estos dones que se
mencionan son necesarios para el evangelismo.
De ahí la importancia de las palabras del señor
en el libro de los hechos, en el capítulo 1: 7-8, “y
les dijo; no os toca a vosotros saber los tiempos
o las sazones, que el padre puso en su sola
potestad. “pero recibiréis poder cuando haya
venido sobre vosotros el espíritu santo, y me
seréis testigos en Jerusalén, en toda judea, en
samaria, y hasta lo último de la tierra”.
Podemos mirar algunos ejemplos prácticos de
algunos personajes que fueron llenos del Espíritu
Santo, y como los dones del Espíritu fueron como
esos arados que preparan el corazón para la
palabra de Dios.
73
a) Jesús el Cristo es uno de ellos. Lucas 3:21-

22, “Aconteció que cuando todo el pueblo se
bautizaba, también Jesús fue bautizado; y
orando, el cielo se abrió, 22 y descendió el
Espíritu Santo sobre él en forma corporal,
como paloma, y vino una voz del cielo que
decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo
complacencia”. Lucas 4:14-15, “Y Jesús
volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se
difundió su fama por toda la tierra de
alrededor. 15 y enseñaba en las sinagogas
de ellos, y era glorificado por todos”.
Aquí podemos ver que después del bautismo
del espíritu, regresó con poder, y los dones
empezaron a manifestarse a favor de los
perdidos.
Dos casos prueban esto: la mujer samaritana,
(San Juan 4: 15-18), y Natanael, Juan 1: 47-5,
“Cuando Jesús vio a Natanael que se le
acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero
israelita, en quien no hay engaño. 48 le dijo
Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió
Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara,
cuando estabas debajo de la higuera, te
74
vi. 49 respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú

eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de
Israel. 50 respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te
dije te vi debajo de la higuera, crees? Cosas
mayores que estas verás. 51 y le dijo: De
cierto, de cierto os digo: De aquí en adelante
veréis el cielo abierto, y a los ángeles de Dios
que suben y descienden sobre el Hijo del
Hombre”.
En estos dos pasajes es claro que se
manifiesta el don de la palabra de ciencia, en
ambos pasajes el objetivo fue salvar a las
personas y traerla a sus pies.
b) El apóstol Pedro. Hechos 3:1-8, “Pedro y
Juan subían juntos al templo a la hora
novena, la de la oración. 2 y era traído un
hombre cojo de nacimiento, a quien ponían
cada día a la puerta del templo que se llama
la Hermosa, para que pidiese limosna de los
que entraban en el templo. 3 este, cuando vio
a Pedro y a Juan que iban a entrar en el
templo, les rogaba que le diesen
limosna. 4 Pedro, con Juan, fijando en él los
ojos, le dijo: Míranos. 5 entonces él les
75
estuvo atento, esperando recibir de ellos

algo. 6 Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro,
pero lo que tengo te doy; en el nombre de
Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. 7 y
tomándole por la mano derecha le levantó; y
al momento se le afirmaron los pies y
tobillos; 8 y saltando, se puso en pie y
anduvo; y entró con ellos en el templo,
andando, y saltando, y alabando a Dios.”
c) El apóstol Pablo. 1 corintios 2:1-5, “Así que,

hermanos, cuando fui a vosotros para
anunciaros el testimonio de Dios, no fui con
excelencia de palabras o de
sabiduría. 2 pues me propuse no saber entre
vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a
este crucificado. 3 y estuve entre vosotros
con debilidad, y mucho temor y temblor; 4 y
ni mi palabra ni mi predicación fue con
palabras persuasivas de humana sabiduría,
sino con demostración del Espíritu y de
poder, 5 para que vuestra fe no esté fundada
en la sabiduría de los hombres, sino en el
poder de Dios.
76
Todos estos pasajes nos muestran la importancia

de ser llenos del poder del Espíritu Santo, no
podemos salir a evangelizar o sembrar la
palabra, si ese poder no va con nosotros, es de
mucha importancia orar por los dones del
Espíritu.
Amados, debemos entender que la manifestación
del Espíritu Santo, no es para beneficios
personales, es para salvación, de las almas
perdidas y edificación de su iglesia. Lucas 4:18.
Seguimos en nuestro estudio del evangelismo de
cómo ganar almas para Cristo, y encontramos en
el libro de Romanos una estructura de la
salvación bien diseñada. El libro de romanos es
uno de esos libros que nos hablan de la
salvación como ningún otro, pero de una forma
bien profunda. Es un libro que nos detalla todo lo
que hemos venido hablando del evangelio,
recordemos que fue Pablo el que dijo “porque no
me avergüenzo del evangelio, porque es poder
de Dios para salvación”.
Pablo desde el capítulo 3: 21, empieza a sembrar
esta semilla del evangelio, si retrocedemos un
poco al capítulo uno, versículo uno, encontramos
77
lo primero que debemos tener en cuenta antes

de salir a sembrar, “el sembrador”, leamos,
“Pablo, siervo de Jesucristo, llamado a ser
apóstol, apartado para el evangelio de Dios”.
Pablo fue llamado y apartado para llevar la
semilla del evangelio; aquí encontramos en Pablo
las dos cosas necesarias para el trabajo del
evangelismo, el sembrador y la semilla, ahora, el
necesita preparar el terreno para sembrar esta
semilla.
Desde el capítulo 3, versículo 21 y 24, vemos
que Pablo empieza esta preparación del terreno
para sembrar, leamos por favor, “pero ahora, a
parte de la ley, se ha manifestado la justicia de
Dios, testificada por la ley y por los profetas”. “La
justicia de Dios por medio de la Fe en Jesús el
Cristo, para todos los que creen en él, porque no
hay diferencia”. “Por cuanto todos pecaron y
están destituidos de la gloria de Dios”. “Siendo
justificados gratuitamente por su gracia, mediante
la redención que es en Cristo Jesús”.
Indudablemente esta es la semilla del evangelio,
aquí en estos textos está toda la salvación de
Cristo.
78
Ahora Pablo, según nuestro estudio como buen

sembrador, tenía que preparar a los romanos
para poder sembrar la palabra en sus corazones.
Él tenía que arar el terreno, ¿Cómo lo hizo
pablo?, indudablemente que, si lo hizo, el
capítulo uno verso 16-17, dice, “porque no me
avergüenzo del evangelio, porque es poder de
Dios para salvación a todo aquel que cree, al
judío, primeramente, y también al griego”. “por
qué en el evangelio la justicia de Dios se revela
por fe y para fe, como está escrito, más el justo
por la fe vivirá”.
Pablo empieza hablando del poder del evangelio,
este poder es efectuado indudablemente por el
Espíritu Santo, de lo contrario, el evangelio sería
solo palabras.
Ahora, Pablo, no solamente mostró poder para
preparar los corazones, sino que también
preparó los corazones de otra manera, y eso nos
lleva a nuestro siguiente punto, de cómo arar el
terreno para la siembra.
3.2.2. Mostrando la culpabilidad del hombre.
Este análisis que vamos a hacer, lo haremos con
mucho cuidado y profundamente, ya que la única
79
manera de que el enfermo tome la medicina, es

si le muestran que está enfermo.
La única manera que, al pecador, le podamos
sembrar el evangelio, es mostrándole su estado
de muerte o pecado, es lo que primeramente hizo
el apóstol Pablo. Volvamos a leer Romanos 3:23,
“Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de
la gloria de Dios”, Pablo ya demostró que todos
somos culpables y de inmediato presenta la
solución, en el versículo 24, “siendo justificados
gratuitamente por su gracias, mediante la
La pregunta sería, ¿Cómo el apóstol Pablo
demostró la culpabilidad de todos los seres
humanos? Podemos mirar tres maneras y añadir
una cuarta:
− Conociendo quien es Dios y desobedecer.
En esto entró toda la raza humana, y es lo que
Pablo demostrara en el capítulo 1:18 en
adelante, leamos hasta el 24.
Después de leer todos estos versículos, tenemos
que resumir lo siguiente de este pasaje, Pablo
aquí no está hablando de judíos y gentiles, él
80
está hablando de todos los seres humanos, y

está diciendo que por medio de la creación los
hombres conocieron su eterno poder y su
divinidad, la creación nos muestra quien es
nuestro Dios, pero la raza humana toma
voluntariamente la decisión de desobedecerlo a
pesar de que la creación nos muestra la
existencia de Dios, voluntariamente decido dejar
a Dios, y crear mis propios dioses de palo, de
yeso, o por otro lado, el dios del razonamiento,
donde el ser humano en su razonamiento
concluye que Dios no existe, y de ahí surgen
teorías que niegan la existencia de Dios, como lo
es la famosa teoría del Bin bang, aludiendo la
creación y todo lo creado a explicaciones
científicas y humanas, partiendo de una
explosión, seguida de un proceso de expansión
constante en el que se encuentra la tierra, y que
de esta forma la naturaleza ha evolucionado
hasta el día de hoy, sacando por completo del
panorama el concepto de creación, y por lo tanto,
al creador.
Todo esto se lo enseñamos a las almas, para
hacerles entender que esto trajo consecuencias
81
de juicio sobre la raza humana, podemos

mostrarles casos como, el diluvio, la destrucción
de Sodoma y Gomorra, y las consecuencias que
dice Pablo en Romanos 1:24-32. ¿Qué
pretendemos con todo esto?, demostrar la
culpabilidad del hombre, ya que habiendo
conocido a Dios no le glorificaron como a Dios.
Si logramos hacerlo sentir culpable, podemos
darle la solución, la medicina, que es el
evangelio.
Hechos 2, “Al oír esto, se compungieron de
corazón y dijeron a Pedro, y a los otros
apóstoles: varones hermanos, ¿Qué haremos?”.
Hasta este punto o estado, tenemos que llevar a
los pecadores, para poder darles la medicina,
esa es la forma de arar la tierra.
− Por la ley de la conciencia.
En este punto tenemos que decir lo siguiente: la
raza humana, quedo dividida en dos, en el
tiempo que Pablo escribió, estaban por un lado
los griegos, en representación de los gentiles, y
por el otro lado los judíos, en representación del
pueblo de Dios.
82
Pablo pasa a indicar lo siguiente en Romanos

2:14-16. “porque cuando los gentiles que no
tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la
ley, estos, aunque no tengan ley, son ley para sí
mismos”. “mostrando la obra de la ley escrita, en
sus corazones, dando testimonio su conciencia, y
acusándolos o defendiéndolos, sus
razonamientos”. “En el día en que Dios juzgará
por Jesús el Cristo los secretos de los hombres,
conforme a mi evangelio”.
Como predicadores debemos lograr lo que hizo
Jesús en San Juan 8:9, “pero ellos, al oír esto,
acusados por su conciencia, salían uno a uno
comenzando desde los más viejos, hasta los
postreros, y quedó solo Jesús, y la mujer que
estaba en medio”.
David dijo en el salmo 16: 7, “bendeciré a Jehová
que me aconseja, aun en las noches me enseña
mi conciencia”.
Tito 1:15, “Todas las cosas son puras para los
puros, más para los corrompidos e incrédulos
nada les es puro, pues hasta su mente y su
conciencia están corrompidos”.
83
Si logramos orar de tal manera que podamos

mostrar lo sucia y corrompida que está el alma, y
la conciencia podemos sembrar el mensaje de
vida, el evangelio de la salvación.
Hebreos 9:14, “¿Cuánto más la sangre de Cristo,
el cual, mediante el Espíritu eterno, se ofreció así
mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras
conciencias de obras muertas para que sirváis al
Dios vivo?
Así hacemos un resumen de lo que venimos
hablando, encontramos que en el Apóstol Pablo
tenemos la parábola del sembrador, encontramos
en Pablo el sembrador, la semilla, y la manera de
preparar el terreno para sembrar la semilla de
salvación.
Seguimos arando el terreno, y en esta ocasión lo
haremos de la siguiente manera.
− Por la ley de Moisés.
Esta es otra manera de mostrar la culpabilidad
del hombre. Aquí quiero explicar un poco el
motivo de la carta de Pablo a los Romanos. El
apóstol escribió la epístola antes del final de su
tercer viaje misionero (alrededor de los años 57-
84
59) de nuestra era, aproximadamente veinticinco

años después de la resurrección de Cristo. Se
encontraba en Corinto cuando la redactó, y
todavía no había realizado el último viaje a
Jerusalén.
El propósito de esta carta, es la declaración de
Pablo a los romanos más completa del evangelio
de Cristo, en el nuevo testamento. El tema
principal de la carta es que todo hombre es
pecador, pero a través de la fe en Cristo el
hombre, puede ser justificado a los ojos de Dios,
y recibir la salvación y la vida eterna.
Pero esta carta también tiene como objetivo
contrarrestar el pensamiento de algunos
creyentes judíos, de que había que guardar la ley
para poder ser salvos, por eso Pablo antes de
exponer el mensaje del evangelio, da unas
explicaciones de cuál es el propósito de la ley, y
para que fue dada, explica que, por medio de la
ley, nadie se podía salvar, ya que la ley de
Moisés solo servía para revelar lo pecadores que
somos, y la culpa que tenemos ante Dios. El
propósito de la ley, es llevarnos ante el señor
Jesús.
85
Gálatas 3:24, “De manera que la ley ha sido

nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que
fuésemos justificados por la fe”.
La carta a los romanos nos muestra más
ampliamente cuál era la función de la ley, y el
propósito por el cual el señor la dio.
También la ley trabaja como el arado, para abrir
los surcos para sembrar el evangelio de Cristo,
sin ese arado es imposible mover los corazones
a un arrepentimiento.
La palabra nos enseña que la ley fue dada para
que el pecado abundase. Romanos 5:20, “Pero la
ley se introdujo para que el pecado abundase,
más cuando el pecado abundó, sobreabundó la
gracia”. Si le enseñamos la ley al pecador, el
pecado saldrá a la vista de él, ese es el objetivo
de la ley.
También la palabra nos enseña lo siguiente
sobre la ley, que por medio de ella es el
conocimiento del pecado. Romanos 7: 7-10,
“¿Qué diremos pues, la ley es pecado?, en
ninguna manera, pero yo no conocí el pecado
86
sino por la ley, porque tampoco conociera la

codicia, si la ley no dijera, no codiciarás”.
“Mas el pecado, tomando ocasión por el
mandamiento, produjo en mí toda codicia; porque
sin la ley el pecado está muerto”.
“Y, yo sin la ley vivía en un tiempo, pero venido el
mandamiento, el pecado revivió y yo morí”.
“Y hallé que el mismo mandamiento, que era
vida, a mí me resultó para muerte”.
Lo que el apóstol nos trata de enseñar es lo
siguiente, antes de dar la semilla de salvación, se
tiene que llevar al hombre perdido a reconocer su
estado de pecado, de muerte, y de condenación.
Al llevarlo, por medio de la ley de Dios, a
reconocer ese estado de pecado, podemos
presentarle el evangelio de Cristo, solo una
persona que reconoce su enfermedad, le podrá
dar valor a la medicina.
Si queremos que las personas amen a nuestro
señor debemos llevarla al infierno por medio de
la ley, y después sacarlos por medio de la gracia.
Debemos por medio de la ley hacerles sentir tal
culpabilidad que sientan las llamas ardientes del
87
infierno, de esa manera amarán al señor que los

rescató de ese fuego ardiente.
Romanos 5: 21, “Para que, así como el pecado
reinó para muerte, así también la gracia reine por
la justicia para vida eterna mediante Jesús el
Cristo, señor nuestro”:
Por lo tanto, concluimos que, si no le mostramos
al hombre su culpabilidad, de nada sirve que le
demos el mensaje del evangelio, es como
sembrar en donde la tierra no ha sido removida,
o, mejor dicho, arada.
3.3. Tipos de terrenos

Siguiendo con nuestro estudio, miremos los
diferentes terrenos donde tenemos que sembrar.
Ya estudiamos el sembrador, la semilla, ahora
estudiemos el terreno donde sembrar esa
semilla.
Leamos los versículos 14 y 20 de la parábola en
San Marcos capítulo 4. En estos versículos
encontramos cuatro tipos de terrenos
(creyentes), que estudiaremos uno por uno.
88
3.3.1. La semilla junto al camino

V.15. “Y estos son los de junto al camino, en
quienes se siembra la palabra, pero después que
la oyen, enseguida viene satanás, y quita la
palabra que se siembra en sus corazones”.
Cuanto leemos este versículo, surge la siguiente
pregunta, ¿Cómo es posible que satanás quite la
palabra que se sembró en el corazón de una
persona, y esa persona no haga nada?
La respuesta la encontré en esta misma
parábola, pero en Mateo 13, “cuando alguno oye
la palabra del reino, y no la entiende, viene el
malo, y arrebata lo que fue sembrado en su
corazón, este es el que fue sembrado junto al
camino”. Esto quiere decir que cuando la persona
se deja arrebatar la palabra que Dios sembró, es
porque no entendió el mensaje que se predicó.
Nadie puede defender lo que no entiende, por
eso satanás pudo quitar tan fácilmente la semilla
que se sembró en el corazón de este creyente.
Ahora, analicemos algunas razones del por qué
el creyente no entiende la palabra en muchas
ocasiones.
89
1. Por falta de buenos enseñadores que enseñen

la palabra, y puedan explicar bien el mensaje
del evangelio. De ahí la importancia que la
persona que va a enseñar o predicar, esté
preparada en todo el consejo de Dios.
2. Que la persona a la que se le está enseñando
la palabra, tenga algunas dificultades para
poder recibir la palabra o entenderla
claramente.
Nadie mejor que Esdras, nos puede dar una
buena explicación de esto. En el capítulo 8:1-18,
después de leer este pasaje, podemos mirar
varias cosas que serán de mucha importancia
para tener en cuenta al momento de nosotros
sembrar la palabra del señor.
a. El versículo uno nos muestra que el que
enseña la palabra debe ser un entendido
en ella, por eso dice lo siguiente, “y se
juntó todo el pueblo como un solo
hombre en la plaza que está delante de
la puerta de las aguas, y dijeron a Esdras
es escriba, que trajese el libro de la ley
de Moisés, la cual Jehová había dado a
Israel”.
90
Si notamos, aparece la palabra “escriba”, no dice

Esdras el ingeniero, o el albañil, o el médico,
¿Por qué?, por la sencilla razón de que estos
profesionales no se necesitan para sembrar la
palabra de Dios, ellos son útiles cuando haya
alguna demanda de su trabajo o profesión.
Pero para sembrar la palabra se necesita un
experto en la palabra, y quien mejor que un
escriba que:
- Entiende el valor de la palabra de Dios, 2 “Y
el sacerdote Esdras trajo la ley delante de la
congregación, así de hombres como de
mujeres y de todos los que podían entender,
el primer día del mes séptimo”, 3 “y leyó en el
libro delante de la plaza que está delante de
la puerta de las aguas, desde el alba hasta el
mediodía, en presencia de hombres y
mujeres, y de todos los que podían entender;
y los oídos de todo el pueblo estaban atentos
al libro de la ley”.
- Que hagan entender la palabra al pueblo de
Dios, ya que es lo más importante, ya que, si
las personas entienden el mensaje, lo
defenderán.
91
V9, “y Nehemías el gobernador, y el sacerdote

Esdras, escriba, y los levitas que hacían entender
al pueblo, dijeron a todo el pueblo: día santo es a
Jehová nuestro Dios, no os entristezcáis, ni
lloréis, porque todo el pueblo lloraba oyendo las
palabras de la ley”.
Se hace necesario el tener predicadores y
evangelizadores que le den el valor que la
palabra de Dios tiene, y también que le expliquen
de tal manera que el pueblo de Dios, y más en el
caso nuestro, que las almas puedan entender
claramente el plan de salvación.
- Que las personas estén capacitadas para
poder entender lo que usted está enseñando,
debe tener en cuenta la edad, la condición
mental, y el grado de estudio. V 2, “y el
sacerdote Esdras trajo la ley delante de la
congregación, así de hombres como de
mujeres y de todos los que podían entender,
el primer día del mes séptimo”.
Podemos mirar dos citas más en el nuevo
testamento:
92
1 corintios 2: 6, “sin embargo, hablamos

sabiduría entre los que han alcanzado madurez,
y sabiduría, no de este siglo, ni de los príncipes
de este siglo, que perecen”.
Hebreos 5:14, “pero el alimento sólido es para los
que han alcanzado madurez para los que por el
uso tienen los sentidos ejercitados en el
discernimiento del bien y del mal”.
Todas estas cosas son necesarias al momento
de salir a evangelizar a las almas sin Cristo.
- Debemos asegurarnos que las personas nos
estén escuchando, por eso es necesario de
vez en cuando hacer preguntas del tema.
V.3, “y leyó en el libro delante de la plaza que
está delante de la puerta de las aguas, en
presencia de los hombres y mujeres y de todos
los que podían entender, y los oídos de todo el
pueblo estaban atentos al libro de la ley”.
- Debemos captar toda la atención del oyente,
que todos sus sentidos estén en el mensaje.
V.5. “Abrió, pues, Esdras, el libro a ojos de todo
el pueblo, porque estaba más alto que todo el
93
pueblo, y cuando lo abrió todo el pueblo estuvo

atento”.
V.7, 8. “y los levitas Jesúa, Baní, Serebias,
Jamín, Acub, Sabetai, Hodías, Maasias, Kelita,
Azarías, Jozabed, Hanán, y Pelaia, hacían
entender al pueblo la ley, y el pueblo estaba
atento en su lugar”. “y leían en el libro de la ley
de Dios claramente, y ponían el sentido de modo
que entendiesen la lectura”.
Todo esto es muy necesario para que el pueblo
pueda entender el mensaje de la palabra del
señor y las almas sin Cristo amados. Es
importante que las personas que leen las
palabras sepan leer bien ya que claramente una
buena lectura ayuda mucho a nuestros oyentes,
claro está, seguido de una buena explicación.
Teniendo en cuenta lo anterior, podemos decir
que los resultados serán los esperados, el pueblo
que entendió la palabra, inmediatamente dio los
frutos que se esperaban. V.12, “y todo el pueblo
se fue a comer, y a beber, ya obsequiar
porciones, y a gozar de grandes alegrías, porque
habían entendido las palabras que les habían
enseñado”.
94
3. Satanás ciega el entendimiento. 2 corintios

4:3-4, “pero si nuestro evangelio está aún
encubierto, entre los que se pierden está
encubierto”. “en los cuales el dios de este siglo
cegó el entendimiento de los incrédulos, para
que no les resplandezca la luz del evangelio de
la gloria de Cristo, el cual es la imagen de
Dios”:
Todas estas cosas debemos tomarlas en cuenta
al momento de salir a evangelizar. Ya que
estamos entrando en terreno dominado por
satanás, la Biblia lo llama el dios de este siglo, y
tiene su control sobre todos los que viven en
pecado.
Efesios 2, “Y él os dio vida a vosotros, cuando
estabais muertos en vuestros delitos y pecados”,
“en los cuales anduvisteis en otro tiempo,
siguiendo la corriente de este mundo, conforme
al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que
ahora opera en los hijos de desobediencia”.
Amados es tan necesario ser lleno del poder del
Espíritu Santo y mantener una vida de oración y
ayuno por las almas que están cautivas por los
95
demonios, y pedir que el señor les conceda

escapar del lazo y quite la ceguera Espiritual.
Recordando que nuestra lucha es Espiritual, se
hace tan necesario tomar toda la armadura de
Dios (Efesios 6: 10-20), y seguir los consejos que
le dio Pablo a Timoteo en su segunda carta (1
Timoteo 2: 14- 26.
Todo este versículo de la palabra nos indica la
manera cómo debemos conducirnos con todas
las armas que no conocen del señor ya que estos
textos nos enseñan cómo debe ser el carácter
del obrero.
Podemos extraer varias cosas en su orden:
1. No debemos contender sobre las palabras
v14.
2. Evitar las palabras que no son de provecho y
edificación v16.
3. Debemos con sabiduría desechar todas
aquellas cosas que no son, o no contienen
sabiduría, para ganar a los perdidos. V23
Terminamos con los versículos 24-26, " porque el
siervo del Señor no debe ser contencioso, sino
96
amable para con todos, apto para enseñar,

sufrido. " Qué con mansedumbre corrijan los que
se oponen por sí quizá Dios le conceda que se
arrepientan para conocer la verdad y escapen del
lazo del diablo en que están cautivos a voluntad
de Él".
Antes de salir a sembrar debemos tener la
precaución de orar por las almas a las que les
estaremos llevando el mensaje de salvación,
para quitar la ceguera Espiritual y que puedan
entender el evangelio de Cristo, ya que es la
única manera de poder ser salvos.
4. Satanás tiene un propósito al quitar la semilla
que se sembró, y esto lo dice Lucas, el médico
amado, quién también contó está parábola.
Lucas 8:12, " y los de junto al camino son los
que oyen y luego viene Satanás y quita de su
corazón la palabra para que no crean y se
salven".
El propósito del diablo es que no se cumpla lo
que el señor dijo en el libro de Marcos capítulo 16
versículo 15 y 16, " y le dijo y por todo el mundo y
predicad el evangelio a toda criatura el que
97
creyere y fuere bautizado será salvo más el que

no creyere será condenado".
Al evangelizar, esto debe estar muy presente,
nuestra meta final es que las personas crean al
evangelio, debemos convencerlos hasta que
crean, es la única manera de ser salvo, creer.
Miremos este pasaje en Hechos 8: 4-13, todos
creyeron en el evangelio.
Quiero que por favor lean todos, estas citas, para
ir concluyendo: Hechos 8:35-37; 16:30-31,
Romanos 10:8-15. Todas estas citas de la
palabra, tienen muchas cosas en común, el
evangelio de Cristo, y debemos lograr como
predicadores que las almas lo entiendan y lo
crean para poder ser salvos.
Terminamos esta parte con unas palabras dichas
por Charles Spurgeon: “Los que ganan almas,
deben ser los primeros que lloren por ellas”.
3.3.2. Tierra con pedregales
Pasemos a estudiar la segunda semilla, o, dicho
de otra forma, el segundo terreno. Marcos 4: 16-
17, quiero empezar con una pregunta, ¿Cuál fue
el problema de esta semilla o creyente?, leamos
98
estos versículos por favor. “Estos, asimismo, los

que fueron sembrados en pedregales: los que
cuando han oído la palabra, al momento la
reciben con gozo”. “pero no tienen raíz en sí, sino
que son de corta duración, porque cuando viene
la tribulación o la persecución, por causa de la
palabra, luego tropiezan”.
En estos textos de la palabra, podemos mirar
varias cosas que son importantes al momento de
sembrar. El objetivo de sembrar es poder recoger
lo sembrado, pero es necesario sembrar de la
manera correcta, tomando en cuenta todas las
facetas de la siembra.
En esta segunda semilla, que fue sembrada,
podemos mirar que no dio fruto, y miraremos la
importancia de arar primero el terreno.
Definamos:
- Pedregales, son lugares o terrenos cubiertos
de piedras sueltas.
Quienes han visitado tierra santa, saben que
gran parte del suelo de esta región es pedregoso,
y aunque los campesinos trataban de mantener
sus campos sin piedra, era imposible evitar que
99
algunas zonas las tuvieran. Debido a la forma en

que se sembraba la semilla, y con la ayuda del
viento, algunas de ellas irremediablemente caían
en estas áreas pedregosas.
El suelo pedregoso está mezclado con tierra,
pero esta no es suficiente para que la semilla
germine, y eche raíces profundas. Las piedras
bloquean el crecimiento de las raíces impidiendo
que las plantas crezcan lo necesario para
producir fruto.
Como Cristo dijo, cualquier cosa que comience a
crecer en un sueño pedregoso, carece de un
sistema de raíces profundas y rápidamente se
marchita y muere por el calor, sin dar fruto.
Esta semilla no puede dar frutos porque no
recibe su alimentación adecuada, y no recibe
alimentación porque no tiene raíces, y no tiene
raíces porque no es un terreno lleno de tierra,
sino de piedras.
El terreno pedregoso es uno de los obstáculos
principales para que la tierra produzca su fruta,
es importante tener esto en cuenta, y mirar esas
100
piedras, y tratar así de quitar esas piedras del

camino.
Quiero que por favor miremos algunas de esas
piedras que nos podemos encontrar en las
personas a las que vamos a evangelizar.
Tomaremos como ejemplos algunos creyentes
de la palabra: Tomas y Marta.
Ambos tenían algo en común, los dos eran
creyentes, y si los comparamos con esta
segunda semilla, encontraremos mucha relación.
Jesús dijo de esta semilla lo siguiente, Marcos
4:16, “Estos son asimismo los que fueron
sembrados en pedregales, los que cuando han
oído la palabra, al momento la reciben con gozo”.
Tomas, era uno de los apóstoles del señor Jesús,
pescador de oficio, tuvo la bendición de seguir al
señor de Galilea, Israel. En varios pasajes del
evangelio de Juan, se le nombre como Tomas
llamado el Dídimo. El nombre de Tomas significa
“gemelo”, en rameo, y Dídimo tiene la misma
acepción en griego.
Cuando el señor en el libro de Marcos capítulo 3
versículos 13-19, hizo la elección de sus
101
apóstoles, entre ellos estaba Tomas, uno puede

imaginarse el rostro de Tomás contento, alegre,
gozoso, de la misma manera que el creyente de
la parábola del sembrador cuando recibe la
segunda semilla, dice que recibió la palabra con
gozo.
El apóstol Tomas, tuvo algunas cosas negativas
como las tuvieron la mayoría de los apóstoles.
He tomado a este, porque deseo evidenciar una
de las mayores piedras que tenemos la mayoría
de nosotros, y especialmente aquellas personas
a las que les compartiremos el evangelio de
Jesús. Jesús le reprendió algo a Tomas después
que resucitó. Leamos Marcos 20: 24-29.
Por otro lado, miremos un poco a Marta, la
hermana de Lázaro. En Lucas el capítulo 10,
versos 38 al 42, encontramos la visita del señor a
Marta y María, y el versículo 38 dice lo siguiente,
“Aconteció que, yendo de camino, entró en una
aldea, y una mujer llamada Marta le recibió en su
casa”.
De la misma manera que Tomas se puso gozoso
con el llamado del señor, o la elección como
apóstol, así también Marta se puso contenta y
102
gozosa de recibir al maestro en su casa de todas

las casas, el señor escogió la de Marta para
visitarla, un gran privilegio.
Pero, igual que a nuestro hermano Tomás, el
señor reprendió a Marta por la misma piedra, San
Juan 11: 38- 40. Leamos el 39 "Dijo Jesús: quitad
la piedra; Marta, la hermana del que había
muerto, le dijo: señor, hiede ya, porque es de
cuatro días". 40, "Jesús le dijo: ¿No te he dicho
que, si crees, verás la Gloria de Dios?
¿Cuál era el problema, la piedra de la
incredulidad?, ¿Será posible que un creyente
tenga piedras de incredulidad? Si es posible,
quiero que leamos en Marcos 9:21-24.
V.24. "E inmediatamente el padre del muchacho
clamó y dijo: creo, ayuda mi incredulidad.
Cuando uno lee este pasaje, se sorprende, pero
es una realidad, hay personas que tú les
compartes la palabra y creen, la reciben con
gozo, pero no da frutos; la razón de esto es que
hay piedras que no dejan que el creyente te gane
firmeza, para resistir las tribulaciones o las
persecuciones a causa de la palabra.
103
Leamos en hebreos 3: 7-19.

La causa de que este pueblo llamado Israel no
entrará al reposo de Dios, lo podemos ver
claramente en el versículo 19, "Y vemos que no
pidieron entrar a causa de incredulidad".
Todo este pueblo que quedó postrado en el

desierto cuando salieron de Egipto, salieron con
gozo. Éxodo 15: 1- 2, "Entonces cantó Moisés, y
los hijos de Israel este cántico a Jehová, y
dijeron: cantaré yo a Jehová; porque se ha
magnificado grandemente, ha echado en el mar
al caballo y al jinete". "Jehová es mi fortaleza y
mi cántico, y ha sido mi salvación, este es mi
Dios, y lo alabaré; Dios de mi padre, y lo
enalteceré".
Este pueblo recibió con gozo la semilla, el poder
de Dios, a través del profeta Moisés, pero,
cuando leemos un poco más adelante, cuando
vino la tribulación, leemos lo siguiente:
Éxodo 16: 1-3, "Partió luego de Elim toda la
congregación de los hijos de Israel, y vino al
104
desierto de sin, que está entre Elim y Sinaí, a los

quince días del segundo mes después que
salieron de Egipto".
"Y toda la congregación de los hijos de Israel
murmuró contra Moisés y Aaron en el desierto;".
"Y les decían los hijos de Israel: Ojalá
hubiéramos muerto por mano de Jehová en la
tierra de Egipto, cuando nos sentábamos a las
ollas de carne, cuando comíamos pan hasta
saciarnos, pues nos habéis sacado a este
desierto para matar de hambre a toda esta
multitud".
¿Por qué razón no se mantuvieron en ese gozo?
La razón es que debían estar alimentándose de
la fuente de ese gozo y aquí es importante las
raíces, sin raíces ninguna planta puede
sobrevivir, ya que por las raíces las plantas se
alimentan. El versículo 17 de Marcos 4 dice lo
siguiente, "pero no tienen raíz en sí, sino que son
de corta duración, porque cuando viene la
tribulación o la persecución por causa de la
palabra, luego tropiezan".
105
Las raíces son de mucha importancia, leamos la

función de ellas en el siguiente artículo tomado
de internet:
"La raíz es el órgano que se encuentra debajo de
la tierra. Su función es sujetar la planta y
absorber las sales minerales, y el agua del suelo.
Las raíces permiten a las plantas sujetarse al
suelo y adquirir el agua y nutrientes necesarios
para realizar sus funciones vitales, en primera
instancia; al mismo tiempo desempeñan una
función ecológica importante porque su
estructura forma una especie de malla que
protege la tierra, evitando que se desprenda.
¿Cuáles son las partes de la raíz y sus
funciones?
- Raíz principal o cuerpo: es la parte
subterránea de la que salen las raíces
secundarias.
- Pelos absorbentes: es por donde penetra el
agua con las sustancias minerales para
alimentar la planta.
106
- Cofia: es la parte que protege la zona de

crecimiento de la raíz, y tiene forma de
casquete.
Job 14: 7-9, “Porque si el árbol fuere cortado, aún
queda de él, esperanza, retoñara algún día, y sus
renuevos no faltarán”. “sí se envejecieren en la
tierra, su raíz y su tronco fuere muerto en el
polvo”. “Al percibir el agua reverdecerá, y hará
copa como planta nueva”.
Todo esto nos muestra la importancia de las
raíces, en la fuente de vida para toda planta, es
por donde reciben los nutrientes necesarios para
mantener una planta con vida, y con fruto.
¿Cómo podemos aplicar esto en nuestra
enseñanza sobre el evangelio?, recordemos que
este taller es de cómo ganar un alma, de cómo lo
traemos de la muerte a la vida, y cómo
permanecer en la vida dando los frutos
necesarios.
Partamos por entender que la tierra representa la
parte humana del ser vivo, es decir, el hombre
que Dios creó fue sacado del polvo de la tierra.
Génesis 2:7, “Entonces Jehová Dios formó al
107
hombre del polvo de la tierra y sopló en su nariz

aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente”.
Cuando el hombre cae en desobediencia ante el
señor, aparece otro hombre de pecado, la vieja
naturaleza o también carne, es aquí donde están
esas piedras que impiden el desarrollo de las
raíces en nosotros, recuerden que estamos
aplicando esta parábola en nuestra vida.
Efesios 4:22, “En cuanto a la pasada manera de
vivir, despojaos del viejo hombre, que está
viciado conforme a los deseos engañosos”. En
este mismo capítulo, podemos mirar muchas
piedras que están en este viejo hombre, leamos
desde el versículo 25 al 29.
En el libro de Gálatas, el capítulo 5: 16-21,
encontramos otra lista de las características de
esta naturaleza caída, aquí Pablo la llama carne,
todas estas son piedras que tenemos que quitar
para que podamos llegar al lugar donde la
palabra producirá frutos dignos de
arrepentimiento; todas estas piedras impiden que
las raíces salgan y se profundicen, y puedan dar
vida al árbol, y dar sus frutos.
108
Marcos dice lo siguiente en el capítulo 4:5 “otra

parte cayó en pedregales, donde no tenían
mucha tierra, y brotó pronto, porque no tenía
profundidad de tierra”.
Se conoce como profundidad de siembra, la
profundidad a la que una semilla debe ser
enterrada de forma óptima para obtener la
humedad suficiente y el espacio necesario para
desarrollar sus primeras raíces y germinar
brotando sus primeras hojas.
Si sembramos superficialmente
Si enterramos muy poco las semillas o no es
suficiente, tendremos varios problemas debido a
que están excesivamente superficiales, y esa
capa normalmente se seca antes por la
exposición solar, y podemos tener problemas de
germinación, ya que se humedece y se seca
rápidamente la semilla, aparte el desarrollo y el
vigor de la planta será menor, ya que el tallo
apenas ha tenido recorrido por el sustrato. Por
último, también podemos tener problemas de que
alguien se coma nuestra semilla si no la
enterramos bien.
109
Si sembramos con mucha profundidad

¿Qué pasa si sembramos demasiado profundo?,
pues la semilla va a necesitar muchos más
recursos y energía para llegar a germinar de tal
forma que brotará mucho más debilitada, sin
apenas fuerza ni vigor, y tardará más en
desarrollarse como las demás. Esto suele pasar
más a menudo en semillas pequeñas, todas las
semillas contienen una reserva limitada para
poder germinar, de hecho, si se sobrepasa la
profundidad óptima, puede que tampoco lleguen
a germinar.
¿A qué profundidad sembrar las semillas?
Para sembrar nuestros cultivos, tanto en el
huerto en siembra directa (lugar definitivo), como
en el semillero debemos preparar un pequeño
surco o agujero a la profundidad correcta y
cubrirla con tierra, sin apretar para que no le
cueste germinar a la semilla, pero ¿Cómo saber
la profundidad?, cada semilla tiene una
profundidad de siembra diferente, y va en función
del tamaño de la semilla.
110
Tenemos el caso de semillas grandes, como

pueden ser calabazas que deben enterrarse a
más profundidad que otras semillas, como son
las lechugas o zanahorias que apenas se cubren
y se entierran muy superficialmente.
Así que por regla general es importante saber
que una semilla debe enterrarse de 2 a 3 veces
su tamaño aproximadamente. También debemos
tener en cuenta la humedad, si sembramos en
verano, es importante enterrar bien aún a las
semillas pequeñas, ya que, si se hace
superficialmente, la capa se seca de forma
excesivamente rápida, y, por lo tanto, no
germinara.
Todo esto que hemos visto, nos sigue enseñando
lo importante que es preparar la tierra antes de
sembrar la semilla. Si aplicamos esto a nuestra
formación como sembradores de la palabra,
entendemos lo importante de usar los
instrumentos necesarios para arar a las almas y
poder crear los surcos necesarios para sembrar
la palabra.
Quiero que miremos un texto muy conocido de
las escrituras. Hebreos 4:12, “Por qué la palabra
111
de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda

espada de dos filos, y penetra hasta partir el
alma y el espíritu, las coyunturas, y los tuétanos,
y discierne los pensamientos del corazón”.
También podemos ver en 1 tesalonicenses 5:23,
“y el mismo Dios de paz os santifique por
completo, y todo vuestro ser, espíritu, alma y
cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida
de nuestro señor Jesús el Cristo”.
Otros textos más es importante leer, y luego los
explicaremos.
Juan 6:63, “El espíritu es el que da vida, la carne
para nada aprovecha, las palabras que yo os he
hablado son espíritu y son vida”.
Ahora, apliquemos todo esto a la enseñanza,
como bien sabemos, nosotros somos tripartitos,
tenemos un cuerpo que representa la parte
humana, junto con el alma, y un espíritu que es la
parte que representa lo divino en nosotros, es a
través del espíritu que el señor tiene comunión
con el ser humano.
La biblia menciona el espíritu humano en
numerosas ocasiones, desde el principio la biblia
112
revela que Dios hizo a los seres humanos con

tres partes, incluyendo un espíritu. Génesis 2:7,
“Jehová Dios formó al hombre del polvo de la
tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y llegó
a ser el hombre alma viviente”.
Dios formó el cuerpo físico del hombre con el
polvo de la tierra, después Dios sopló en su
nariz, y llegó a ser el hombre, alma viviente. Esto
por supuesto apunta al alma del hombre, que
consta de la mente, la parte emotiva, y la
voluntad.
Ahora bien, ¿Dónde está el espíritu humano en
este versículo?, no vemos las palabras “espíritus
humanos”, por lo que sí vemos es el aliento de
vida. En hebreo, el idioma original del AT, la
palabra que se traduce aliento es neshamah,
esta misma palabra hebrea se traduce “Espíritu”
en proverbios 20:27, que dice: “lámpara de
Jehová es el espíritu del hombre”.
Con esto podemos ver que cuando Dios sopló en
el hombre, el espíritu humano del hombre llegó a
existir. Nuestro espíritu humano es la parte más
profunda de nuestro ser.
113
Pero, ¿Por qué Dios nos creó con un espíritu

humano? ¿no es suficiente tener cuerpo y alma
para que existamos?
¿Por qué tenemos un espíritu?
Nuestro espíritu fue creado por Dios para que
podamos contactarlo y recibirlo a él, nuestra alma
y el cuerpo tienen sus propias funciones
específicas, sólo nuestro espíritu tiene la
capacidad de contactar a Dios. Podemos ver esto
en numerosos versículos, incluyendo Juan 4:24,
“Dios es espíritu, y los que le adoran, en espíritu
y con veracidad es necesario que adoren”.
La manera en la que funciona un radio es una
buena ilustración de la habilidad única de nuestro
espíritu para contactar y recibir a Dios. Cuando
una radio está encendida y sintonizada
correctamente, puede recibir las ondas de radio
invisibles en el aire, e interpretarlas.
Nuestro Espíritu humano es como una radio, y
Dios es como las ondas de radio. Nuestro
Espíritu es la parte de nuestro ser que
corresponde a lo que Dios es, así que tenemos
que usar nuestro espíritu para contactarlo a él.
114
¿Qué hace que nuestro espíritu sea tan

importante?
Nuestro espíritu humano es tan importante para
Dios, porque Dios desea llenarnos de sí mismo.
Nuestra vida cristiana comienza con nuestro
espíritu humano, como podemos ver en Juan 3:6,
“lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que
es nacido del espíritu, espíritu es”.
La regeneración se lleva a cabo en el espíritu
humano, por medio del Espíritu Santo de Dios,
con la vida de Dios, la vida eterna e increada.
Así que ser regenerado significa, tener la vida
eterna y divina (además de la vida humana, la
vida natural), como la nueva fuente y el nuevo
elemento de una nueva persona.
En el momento en que creemos en Jesús, su
Espíritu entra en nuestro espíritu, cuando somos
regenerados, nacemos de Dios, recibimos su
vida divina y eterna en nuestro espíritu, y
llegamos a ser sus hijos.
¿Dónde radica el problema de esta parábola?, en
una piedra llamada incredulidad. Esa piedra, está
en la vieja naturaleza que fue adquirida cuando el
115
hombre pecó, y hoy está muerto en delitos y

pecados, ¿Cuál es nuestro trabajo hermanos?,
llevar la reconciliación por medio del evangelio, a
todos los que están separados de Dios, para eso
Dios puso unos ministerios, lo dice Efesios 4:10-
11.
El versículo 12 lo dice claramente, “A fin de
perfeccionar a los santos para la obra del
ministerio, para la edificación del cuerpo de
Cristo”.
Los ministerios establecidos por Dios tienen una
función, y es perfeccionar a los Santos, entre
estos encontramos al evangelista, el cual es el
ministerio que el señor nos ha entregado; y la
función de este ministerio ha sido perfeccionar a
los santos para el ministerio del señor, ¿y cuál es
este ministerio?, lo dice 2 corintios 5:18, “Y todo
esto proviene de Dios, quien nos reconcilió
consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio
de la reconciliación.
Es una tarea de suma importancia, y debemos
hacerla bien.
116
Por eso, como buenos sembradores debemos

tener en cuenta todo esto, predicar el evangelio
de Cristo, traspasar la naturaleza vieja con todas
sus piedras, llegar al cuerpo de la tierra, pero
debemos profundizar hasta llegar a la parte más
profunda, el espíritu humano, y lograr que eche
raíces, que es por donde se alimenta la planta, o
sea, llegar al espíritu humano, y que, en esa vida
oculta, de la misma manera que están las raíces,
los seres humanos cultiven una vida íntima en el
señor.
Las raíces hablan de esa vida íntima, oculta, que
debe tener todo ser humano con el señor. Las
raíces no se ven, pero es una de las partes más
importantes del creyente, pues para que el
creyente pueda dar fruto debe primero echar
raíces.
Lo que estoy tratando de dar a entender, es que,
a través de las raíces, es por donde reciben su
alimentación los árboles, y en su tiempo dan
frutos. Leamos en Salmos 1:1-3: “Bienaventurado
el varón que no anduvo en consejo de malos,
Ni estuvo en camino de pecadores,
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
117
2 sino que en la ley de Jehová está su delicia,

Y en su ley medita de día y de noche.
3 será como árbol plantado junto a corrientes de
aguas,
Que da su fruto en su tiempo,
Y su hoja no cae;
Y todo lo que hace, prosperará”.
A eso nos referimos, tenemos que cuidar que las

personas que vamos a evangelizar, tengan una
vida devocional con Dios, en secreto.
Concluyamos este punto con un ejemplo más de
la palabra, y es de nuestra hermana Marta:
Lucas 18: 38-42: “38 Aconteció que, yendo de
camino, entró en una aldea; y una mujer llamada
Marta le recibió en su casa. 39 esta tenía una
hermana que se llamaba María, la cual,
sentándose a los pies de Jesús, oía su
palabra. 40 pero Marta se preocupaba con
muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor,
¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir
sola? Dile, pues, que me ayude. 41 respondiendo
Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada
estás con muchas cosas. 42 pero solo una cosa
118
es necesaria; y María ha escogido la buena

parte, la cual no le será quitada”.
En esta lectura podemos ver cumplido lo que
analizamos de la segunda semilla sembrada, ella
recibió al señor, y lo hizo gozosa, alegre, recibió
el verbo, la palabra viva, pero si no tomamos lo
que dice el verso 39, leamos, “Esta tenía una
hermana que se llamaba María, la cual,
sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra”.
Es decir, María fue entendida de quien entró a su
casa, no solo recibió la palabra o la semilla, sino
que se sentó para que esa semilla fuera regada,
“oía su palabra”.
Pero Marta cometió uno de los errores más
frecuentes, recibió al maestro, pero no lo atendió,
al no entenderlo esa semilla que llegó a su casa,
que ella recibió con gozo, no logró el propósito
con que fue sembrada. El problema no era la
semilla en este caso, era la tierra.
Los resultados fueron los siguientes, al no tener
esa comunión con el señor, al no recibir esa
alimentación del agua de vida, los resultados en
este creyente no fueron los mejores cuando
119
vinieron las pruebas, con la muerte de Lázaro

encontramos una Marta incrédula, y a una maría,
por el contrario, dando frutos de una creyente
con raíces, y mostrando los frutos de ese riego
en su casa; cuando Jesús llegó, rego esa semilla,
y los resultados los puedes ver en María, en San
Juan 11: 1-43.
María fue una adoradora todo el tiempo, Marta
fue una reclamadora e incrédula, una echó
raíces, la otra no, las dos son creyentes en el
señor, una dejó regar la semilla, la otra no tuvo
esa devoción de atender a su señor.
Concluimos es importante que, como los
sembradores del evangelio, tengamos este
conocimiento y así regar la semilla que
sembramos para que se produzca la vida nueva
en cada persona. Terminemos con ese texto, 1
Pedro 2:1-3, “Desechando, pues, toda malicia,
todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las
detracciones, desead, la leche espiritual no
adulterada, para que por ella crezcáis para
salvación, si es que habéis gustado la benignidad
del señor”.
120
Evite el evangelio de azúcar, busque el evangelio

que rasga, que le hace brotar lágrimas, que le da
cortes y heridas a su conciencia, el evangelio que
mata el ego, porque ese es el evangelio que nos
da vida de nuevo.
3.3.3. Tierra con espinos
Quiero empezar el estudio de la tercera semilla, o
el tercer terreno que se menciona en la parábola,
con estas palabras de Chales Spogeon, “No
fuisteis salvo para que vayas al cielo solo, fuiste
salvado para que lleves a otras personas allí
contigo”.
“La razón por la que estás aquí en la tierra, es
que no puedes evangelizar a nadie en el cielo”
Leamos en Marcos 4:18-19, “estos son los que
fueron sembrados entre espinos, los que oyen la
palabra, pero los afanes de este siglo y el engaño
de las riquezas, y las codicias de otras cosas,
entran y ahogan la palabra y se hace
infructuosa”.
Quiero empezar diciendo, algo tienen en común
esos tres terrenos o creyentes, y es que los tres
la reciben, y eso es bueno. Necesitamos que las
121
personas escuchen su única oportunidad de

salvarse según nos enseña Romanos 10:13-14,
“porque todo aquel que invocare el nombre del
señor, será salvo”. ¿Cómo pues invocan aquel en
el cual no han creído?, ¿y cómo creerán en aquel
de quien no han oído?, ¿y cómo oirán sin haber
quién les predique?
Bueno ya tenemos quien les predique, cada uno
de nosotros estamos para predicar el evangelio
de la salvación, lo único que necesitamos es
quien nos escuche.
Cuando nos escuchan, es la oportunidad de
sembrar la semilla, es cuando se manifiestan lo
que los evangelistas dan a conocer en esta
parábola. Sin la predicación del evangelio, estos
acontecimientos no se darían.
Miremos los detalles de esta semilla. En esta
parábola, no tenemos mucho que explicar, es
más que todo da un conocimiento al sembrador
de lo que nos vamos a encontrar al momento de
evangelizar a los que no tienen al señor.
Podemos ver tres cosas negativas que nos
presentan en esta semilla los escritores:
122
− El afán.
Esta palabra, la Biblia la define de la siguiente
manera, “afán” del griego “merimna”, significa
ansiedad, preocupación, lo que divide, lo que
distrae la mente, y lo que hace girar la mente de
la persona angustiada en diferentes direcciones.
Antes de dar una explicación más detallada
sobre esta parábola, es necesario que nosotros
como sembradores nos ejercitemos en el
discernimiento. Leemos en hebreos 5:11-14, “11
Acerca de esto tenemos mucho que decir, y difícil
de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos
para oír. 12 porque debiendo ser ya maestros,
después de tanto tiempo, tenéis necesidad de
que se os vuelva a enseñar cuáles son los
primeros rudimentos de las palabras de Dios; y
habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad
de leche, y no de alimento sólido. 13 y todo aquel
que participa de la leche es inexperto en la
palabra de justicia, porque es niño; 14 pero el
alimento sólido es para los que han alcanzado
madurez, para los que por el uso tienen los
sentidos ejercitados en el discernimiento del bien
y del mal”.
123
La explicación es necesaria, eso nos ayuda a

poder discernir a la hora de sembrar la palabra, y
ver la manera cómo vamos a actuar frente a cada
situación.
El conocimiento nos da una capacidad de
discernir mucho más amplia que aquel que no
tiene conocimiento. Por eso les pido toda su
atención en estos pequeños detalles de la
parábola.
Continuamos con la explicación de la palabra
afán, y encontramos varias cosas en esta
parábola:
Ansiedad:
¿Qué significa la ansiedad?, es un sentimiento
de miedo, temor e inquietud, puede producir que
la persona sude, se sienta inquieto y tenso, y
tener palpitaciones puede ser una reacción
normal al estrés.
¿Qué es y que causa la ansiedad? El trastorno
de ansiedad generalizada, se caracteriza por una
ansiedad, y una preocupación persistente y
excesiva por actividades o eventos, incluso
asuntos comunes de rutina.
124
La preocupación es desproporcionada con

respecto a la situación actual, es difícil de
controlar y afecta la forma en que te sientes
físicamente.
Muchas personas experimentan ansiedad en
algún momento de su vida. De hecho, la
ansiedad es una respuesta bastante normal a
eventos estresantes de la vida, como mudarse,
cambiar de trabajo, o tener problemas
financieros.
Los trastornos de ansiedad pueden llegar a ser
debilitantes, pero es posible controlarlos con la
ayuda de nuestro señor y que los predicadores o
sembradores entiendan que nos encontraremos
estas espinas en el momento de sembrar.
Reconocer los síntomas es el primer paso.
Aquí podemos estudiar los síntomas comunes de
un trastorno de ansiedad, y cómo enfrentar esta
situación. Recordemos no todo es demonio, las
luchas más grandes hoy en día son con el estrés,
y todo esto lo ocasiona.
1. La preocupación excesiva.
125
La preocupación asociada con los trastornos de

ansiedad es desproporcionada respecto a los
eventos que la desencadenan y suele ocurrir
como respuesta a situaciones normales y
cotidianas.
La preocupación también debe ser grave e
intrusiva, afectando la habilidad de concentrarse
y realizar las tareas diarias.
Las personas menores de 65 años, tienen mayor
riesgo de desarrollar el trastorno de ansiedad
generalizada, especialmente los solteros, con un
nivel socioeconómico más bajo y con muchos
factores estresantes en su vida.
¿Por qué tener estos factores del afán en
cuenta?, porque esto es lo que ahoga la palabra.
Sembrar la palabra entre los espinos, no es
recomendable, miremos este detalle en Marcos
4:7, “Otra parte cayó entre espinos, y los espinos
crecieron y la ahogaron, y no dio fruto”.
El sembrador debe quitar los espinos y luego
sembrar. Si sembramos entre los espinos, ellos
crecerán y ahogarán tu semilla, ¿Cómo los
quitamos?, primero tenemos que identificarlos, y
126
es lo que estamos haciendo, el afán es uno de

esos espinos, y produce ansiedad.
2. Síntomas de ansiedad, sentimientos de
agitación.
Cuando alguien se siente ansioso, parte de su
sistema nervioso simpático se potencia.
Esto desencadena una serie de efectos en todo
el cuerpo, como un pulso acelerado, palmas
sudorosas, manos temblorosas, y boca seca.
Estos síntomas ocurren porque el cerebro cree
que ha percibido un peligro y comienza a
preparar el cuerpo para reaccionar ante la
amenaza.
3. Intranquilidad.
La intranquilidad es otro síntoma común de
ansiedad, especialmente en los niños y
adolescentes.
Cuando alguien se siente intranquilo, a menudo
lo describe como sentirse “nervioso”, o con una
“incómoda necesidad de moverse”.
4. Fatiga
127
Fatigarse fácilmente es otro síntoma potencial del

trastorno de ansiedad generalizada.
En algunos casos la fatiga puede provocarse
después de un ataque de ansiedad, y en otros la
fatiga puede ser crónica.
La fatiga es la sensación física o mental de
incapacidad o dificultad para poder continuar con
un trabajo o actividad que ya se ha prolongado
bastante, lo que es igual a cansancio.
5. Dificultad para concentrarse
Muchas personas con ansiedad informan que les
cuesta concentrarse. Un estudio de 157 niños y
adolescentes con trastornos de ansiedad
generalizada, encontró que más de dos tercios
tenían dificultades para concentrarse.
Otro estudio de 175 adultos con el mismo
trastorno, encontró que casi el 90% informó tener
dificultades para concentrarse, cuanto peor era
su ansiedad, mayores eran sus dificultades.
Algunos estudios muestran que la ansiedad
puede interrumpir la memoria funcional, un tipo
de memoria responsable de retener información
a corto plazo. Esto puede ayudar a explicar la
128
disminución dramática en el desempeño que las

personas suelen experimentar, durante los
periodos de mucha ansiedad.
¿Puede usted entender la importancia de
conocer todo eso?, es que ¿cómo recibe la
palabra una persona con todos estos trastornos?,
imposible, se ahoga la palabra.
6. Irritabilidad
La mayoría de las personas con trastornos de
ansiedad también experimentan irritabilidad
excesiva.
Según un estudio reciente que incluyó más de
6.000 adultos, más del 90% de las personas con
trastorno de ansiedad, reportaron sentirse muy
irritables durante los peores momentos de su
trastorno de ansiedad.
Irritable o irritar significa, ira o enojo.
7. Músculos tensos.
Tener músculos tensos la mayoría de los días de
la semana, es otro síntoma frecuente de
ansiedad.
129
Muchas veces vamos a una casa a evangelizar, y

encontramos todo tenso, puede que no sean los
músculos, pero el ambiente nos indica que algo
está mal, podemos percibirlo mediante el
discernimiento, hay espinas, por lo que tenemos
que hacer algo para que eso cambie, puede ser
una oración, un abrazo cálido, una sonrisa
amable, o unas alabanzas.
Cuando los músculos están tensionados, se
recomiendan unos buenos masajes, nosotros
usamos los masajes espirituales, recomendados
allá arriba.
8. Dificultad para conciliar el sueño o
permanecer dormido
Los trastornos del sueño se relacionan
fuertemente con los trastornos de ansiedad. Los
problemas de sueño son muy comunes en
personas con ansiedad, por lo general, tratar la
ansiedad, también puede ayudar a mejorar la
calidad del sueño.
Nota importante: cuando usted visita un hogar,
sería bueno preguntar por cortesía, y con
sabiduría, ¿Cómo durmió?, ¿sí pudo descansar?,
130
eso le puede indicar en qué condición está la

persona para recibir la palabra.
9. Ataque de pánico
Un tipo de trastorno de ansiedad llamado,
trastorno de pánico, está asociado con ataques
de pánico recurrentes.
Los ataques de pánico producen una sensación
de miedo intensa y abrumadora que puede llegar
a ser debilitante.
Este miedo extremo suele estar acompañado por
ritmo cardíaco rápido, sudoración, temblores,
falta de aliento, presión en el pecho, náusea, y
miedo a morir o perder el control.
Los ataques de pánico pueden ocurrir de manera
aislada, pero sí ocurren con frecuencia e
inesperadamente pueden ser una señal de
trastorno de pánico.
10. Evitar situaciones sociales
Es posible que muestren señales de un trastorno
de ansiedad social, si encuentras que:
131
a. Te sientes ansioso o temeroso por las

situaciones sociales que se aproximan.
b. Te preocupa que otros te juzguen o
examinen.
c. Sientes temor de ser avergonzado o
humillado delante de otros.
d. Evitas ciertos eventos sociales debido a
temores.
El trastorno de ansiedad social es muy común, y
afecta aproximadamente al 12% de los adultos
estadounidenses en algún momento de su vida.
La ansiedad social tiende a desarrollarse en una
etapa temprana de la vida.
Las personas con ansiedad social pueden
parecer extremadamente tímidos y callados
cuando están en grupo o al conocer gente nueva,
si bien podrían no parecer angustiados por fuera,
por dentro sienten miedo y ansiedad.
Esta actitud de distanciamiento a veces puede
hacer que las personas con ansiedad social
parezcan presumidas o poco amigables, pero el
trastorno se asocia con baja autoestima, alta
autocrítica, y depresión.
132
11. Temores irracionales

Los temores exagerados sobre cosas
específicas, como las arañas, los espacios
cerrados, o las alturas, podrían ser una señal de
fobias.
Una fobia se define como ansiedad extrema o
miedo a un objeto o situaciones específicas. La
sensación es lo suficientemente intensa, como
para interferir con tu capacidad de funcionar
normalmente.
Algunas fobias comunes incluyen: animales, al
entorno de la naturaleza, huracanes, a la sangre.
La agorafobia es otra fobia que implica temor a
por lo menos dos de los siguientes:
- Uso de los transportes público
- Uso de espacios abiertos
- Estar en espacios cerrados
- Hacer una fila, o estar en una multitud
- Salir de casa solo
Entender esto es clave para los consejos que yo
quiero dar, y que se debe tener muy en cuenta,
ya que el evangelismo que yo más deseo
practicar es lo que veo en el libro de los hechos
133
5: 42, “y todos los días, en el templo y por las

casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesús
el Cristo”.
Amados, el propósito es enseñar el evangelio del
señor en sus propias casas, tomando en cuenta
que, si sembramos con el afán y todos estos
síntomas que produce, es como sembrar entre
espinos, todo esto ahora la palabra que
sembremos.
Tomando todo esto como ejemplo, nosotros
aconsejamos no invitarlos al templo, a muchos
no les gusta salir, por lo que hay que dejar que el
Espíritu empiece a quitar todos esos miedos y
fobias, ser sabios en el día y la hora que
escojamos para sembrar la semilla; recuerde
todo esto, en espinas no se puede sembrar.
Con que nos abran las puertas de sus casas, es
más que suficiente para empezar a hacer el
trabajo. Dejemos que ellos mismos tengan el
deseo de asistir al templo, es parte del fruto que
se manifestara después de sembrar la palabra.
Jesús nos dio la medicina contra el afán y la
ansiedad, Mateo 6:25-34. Esta es la medicina
134
contra el afán, con sabiduría, al discernir que así

están las personas que evangelizamos, le
aplicamos esta palabra de dulzura, les
enseñamos que nuestro Dios tiene el control de
todo.
Amados, evangelizar es más que una invitación a
una reunión en un templo, o una campaña, es un
trabajo de mucha dedicación, entrega, es una
labor sacrificada, es un camino de amor al
prójimo, tener mucha paciencia para con las
almas. Dios nos ayude.
3.3. Entre espinos
Lo segundo que podemos encontrar en esta
parábola, o más específicamente en la tercera
semilla es:
− El engaño de las riquezas.
Podemos dividir esta frase en dos:
-Engaño: Proceso y resultado de engañar o de
engañarse. Llevar deliberadamente a alguien a
creer lo que no es cierto.
Dicho de un efecto sensorial, llevar a inferencias
inexactas acerca de lo que le da origen; producir
la ilusión de los sentidos, distraer, entretener.
135
Quiero mirar varias citas de la palabra, y luego

aplicaremos todo eso.
Jeremías 17:9, “engañoso es el corazón más que
todas las cosas, y perverso, ¿Quién lo
conocerá?”.
Jeremías 17:1, “el pecado de Judá escrito está
con cincel de hierro, y con punta de diamante,
esculpido está en la tabla de su corazón y en los
cuernos de su altar”.
Proverbios 23:26, “Dame, hijo mío, tu corazón”.
¿Qué es lo Dios pide del ser humano?, el
corazón, pero resulta que el corazón del pecador
está lleno de pecado, lo dijo Jesús también,
Mateo 15:19, “porque de corazón salen los malos
pensamientos, los homicidios, los adulterios, las
fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios,
las blasfemias”.
Todo esto tiene el corazón de las personas que
están perdidas sin Cristo. Si Dios pide este
corazón es para cambiarlo, él dice en Ezequiel
36:26, “os daré corazón nuevo, y pondré espíritu
nuevo dentro vosotros, quitaré de vuestra carne
136
el corazón de piedra, y os daré un corazón de

carne”.
1 Samuel 10:9, “y sucedió que cuando él volvió la
espalda para dejar a Samuel, Dios le cambió el
corazón, y todas aquellas señales le
acontecieron”.
El único que puede cambiar el corazón del
hombre, es Dios, nadie más lo puede hacer, ¿la
pregunta seria como lo hacer el señor?, leamos
en Jeremías 23:29, “¿No es mi palabra como
fuego, dice Jehová, y como martillo que
quebranta la piedra?”
Leamos otro texto de la palabra, Romanos 2:29,
“sino que es judío el que lo es en lo interior, y la
circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en
letra; la alabanza del cual no viene de los
hombres, sino de Dios”.
La manera del hombre es por la palabra viva y
eficaz, y esa palabra es la que contiene el
evangelio del señor Jesús explicada en las
primeras enseñanzas de este módulo, y el
Espíritu Santo es el encargado de este trabajo.
137
Juan 16:8, “y cuando él venga, convencerá al

mundo de pecado, de justicia, y de juicio”.
Es una labor del Espíritu Santo, ¿Cómo lo haces
es otra pregunta?, la respuesta es clara y precisa
por la palabra o el evangelio de Cristo que es
predicado por hombres preparados y capacitados
para esta labor.
Pablo dijo lo siguiente, 1 corintios 3:6, “yo planté,
Apolos regó, pero el crecimiento lo ha dado
Dios”.
Nuestro trabajo es plantar, regar, claro está, todo
esto es por Espíritu Santo en nosotros. 2
corintios 5: 17-21, “De modo que, si alguno está
en Cristo, nueva criatura es, las cosas viejas
pasaron, he aquí todas son hechas nuevas”.
“Y todo esto proviene de Dios, quien nos
reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el
ministerio de la reconciliación”.
“Que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo
al mundo, no tomándoles en cuenta a los
hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros
la palabra de la reconciliación”.
138
“Así que somos embajadores en nombre de

Cristo, como si Dios rogase por medio de
nosotros, os rogamos en nombre de Cristo,
reconciliaos con Dios”.
Nosotros somos los instrumentos del Espíritu
Santo, para llevar esta palabra del evangelio de
Cristo, el Espíritu habla por medio de nosotros.
Mateo 10:20, “porque no sois vosotros los que
habláis, sino el Espíritu de vuestro padre que
habla en vosotros”.
Quienes debemos estar preparados somos
nosotros, para poder hacer el trabajo, como buen
obrero de Jesús. 2 Timoteo 2:14-16, “recuérdales
esto, exhortándoles delante del señor, a que no
contiendan sobre palabra, lo cual para nada
aprovecha, sino que es para perdición de los
oyentes”. “procura con diligencia presentarte a
Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué
avergonzarse, que usa bien la palabra de
verdad”. “más evita profanas y vanas palabrerías,
porque conducían más y más a la impiedad”.
Somos importantes para esta gran misión,
predicar su palabra, sembrar la semilla. Ahora
139
entra en este escenario un personaje que casi no

hemos nombrado, pero es necesario en esta
semilla nombrarlo un poco.
El hace presencia en la primera semilla, pero en
esta no se le ve directamente, pero si esta, como
lo que el engañador de las almas.
Apocalipsis 12:9, “y fue arrojado el gran dragón,
la serpiente antigua que se llama el diablo y
satanás, el cual engaña al mundo entero, fue
arrojado a la tierra y sus ángeles fueron arrojado
con el”
Seguiremos mostrando a este personaje y luego
aplicaremos a nuestra enseñanza de esta
semilla.
Juan 8:44, “vosotros sois de vuestro padre el
diablo, y los deseos de vuestro padre queréis
hacer. Él ha sido homicida desde el principio, y
no ha permanecido en la verdad, porque no hay
verdad en él, cuando habla de mentira, de suyo
habla, porque es mentiroso y padre de mentira”.
2 corintios 11:14, “Y no es de extrañar pues aún
satanás, se disfraza como ángel de luz”.
140
Todos estos pasajes nos muestran quién es este

personaje, nada más y nada menos que es
maestro del engaño, así que cuando usted
escuche engaño sepa que el diablo está por ahí.
La parábola dice “el engaño de las riquezas”, es
claro que las riquezas por sí solas no engañan.
Ahora por otro lado definamos la otra parte de la
frase: el engaño de las riquezas
-Riquezas: conjunto de las cosas que se poseen,
especialmente dinero, bienes o cosas valiosas.
Cosas de gran valor.
La riqueza es la abundancia de recursos
materiales, e inmateriales, también la posesión
colectiva-riqueza social o nacional- o posesión
individual-riqueza personal de bienes y activos
financieros, por lo general concretados en forma
de propiedades, bienes muebles e inmuebles.
Esto es lo que satanás utiliza para mantener al
ser humano engañado. Miremos dos ejemplos
claros en la Biblia:
Génesis 3:1, pero la serpiente era astuta, más
que todos los animales del campo que Jehová
Dios había dicho: la cual dijo a la mujer, ¿conque
141
Dios os ha dicho: no comáis de todo árbol del

huerto? V.6. “y vio la mujer que el árbol era
bueno para comer, y que era el árbol era bueno
para comer, y que era agradable a los ojos, y
árbol codiciable para alcanzar la sabiduría, y
tomó de su fruto y comió, y dio tan bien a su
marido, el cual comió, así como ella”.
Amados del señor, ¿Cómo fue que satanás
engañó a Eva, e hizo que se extraviara?, 2
corintios 11:3 “pero temo que como la serpiente
con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos
sean de alguna manera extraviados de la sincera
fidelidad a Cristo”.
Amados hermanos, satanás hizo que Eva se
extraviara, perdió el camino, el rumbo, la
dirección, que uso para eso las riquezas de esta
tierra, porque la sabiduría es un tesoro, y atacó
los sentidos de Eva para este propósito, le hizo
creer algo que no era así, la engaño, la ilusiono,
y ella calló, pero nos preguntamos ¿Qué tiene
que ver esto con nuestra tercera semilla?,
mucho, ya que estamos hablando del engaño de
las riquezas.
142
Hemos dicho que las riquezas en sí mismas no

son malas, como tampoco el árbol de la ciencia
del bien y el mal, ya que todo lo que Dios creó es
bueno.
Pero, ¿qué es lo que hace el enemigo de las
almas? Miremos lo que dice 2 corintios 4:3-4,
“pero si nuestro evangelio está aún encubierto,
entre los que se pierden está encubierto”. “En los
cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento
de los incrédulos, para que no les resplandezca
la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual
es la imagen de Dios”.
Mis amados hermanos, en este texto podemos
ver resumido todas las problemáticas de las tres
semillas.
1. La primera semilla, satanás la quita, porque
no la entendieron, es decir, por que la
persona no entendió la palabra
2. La segunda semilla, la de las piedras, y
hablamos de la incredulidad.
3. En la tercera, estamos hablando del engaño
de las riquezas.
143
Y en este texto encontramos las tres razones

marcadas en el versículo 4, “en los cuales el Dios
de este siglo cegó el entendimiento de los
incrédulos (escuchen con atención cuál es el
objetivo), para que no les resplandezca la luz del
evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la
imagen de Dios”.
Señores, satanás utiliza las riquezas de esta
tierra y tiene a los pecadores engañados, como
engaño al personaje de esta historia contada por
Jesús. Lucas 12:19.21
De la misma manera satanás tiene a muchas
personas engañadas, y eso nos tocará enfrentar
a nosotros, por tanto, el consejo de la palabra
ante de salir a evangelizar es el siguiente:
2 Timoteo 2:”4-26- 24 Porque el siervo del Señor
no debe ser contencioso, sino amable para con
todos, apto para enseñar, sufrido; 25 que con
mansedumbre corrija a los que se oponen, por si
quizá Dios les conceda que se arrepientan para
conocer la verdad, 26 y escapen del lazo del
diablo, en que están cautivos a voluntad de él.
144
Efesios 2:1-2, “Y él os dio vida a vosotros,

cuando estabais muertos en vuestros delitos y
pecados, 2 en los cuales anduvisteis en otro
tiempo, siguiendo la corriente de este mundo,
conforme al príncipe de la potestad del aire, el
espíritu que ahora opera en los hijos de
desobediencia,”.
Amados, si queremos sembrar la semilla del
evangelio, debemos ser sabios para ganar las
almas, ese mensaje de pelear con las almas,
jamás dará resultado, el sabio gana almas.
Ese vocabulario ofensivo no gana almas, no
sigamos el mal ejemplo de algunos llamados
evangelistas, que no lo son, solo sirven de
tropiezo, ofendiendo a las personas, peleando
con ellos, entendamos que están cautivos por
satanás, él los tiene engañados a su voluntad,
son esclavos de él, por eso Pablo dice que
nuestra lucha no es contra sangre ni carne.
Miremos contra quién peleaban los discípulos o
los apóstoles. Hechos 13: 4-12, hechos 16:16-18,
hechos 19:22-24.
145
Ellos sabían contra quién peleaban amados

hermanos, y usaban el poder contra las fuerzas
de satanás, por eso el señor nos manda antes de
salir a evangelizar, que hagamos esto. Marcos
3:23-27, resaltamos el verso 27, “Ninguno puede
entrar en la casa de un hombre fuerte y saquear
sus bienes, si antes no le ata, y entonces podrá
saquear su casa”.
Este “atar”, no es amarrar con cuerdas, el
diccionario también lo definen de la siguiente
manera: dejar sin libertad de movimiento a
capacidad de acción. Jesús vino para deshacer
las obras del diablo. Hechos 10:38, “cómo Dios
ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús
de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes
y sanando a todos los oprimidos por el diablo,
porque Dios estaba con él.”
1 Juan 3:8, “El que practica el pecado es del
diablo; porque el diablo peca desde el principio.
Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer
las obras del diablo.”
¿Porque usted cree que juntamente con la
comisión de predicar el evangelio está el
mandato mandato de echar fuera demonios?
146
Marcos 16: 14-18, también dio esta orden Lucas

24: 45-49, y Hechos 1:8, “pero recibiréis poder,
cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu
Santo, y me seréis testigo en Jerusalén, en toda
judea, en samaria, y hasta lo último de la tierra”.
Amados míos, si no fuera necesario el poder, el
señor no le hubiera dicho esto a ellos, lo
necesitamos para deshacer las obras del diablo y
poder quitar el engaño en que tiene a las
personas, y así poder sembrar el mensaje en una
tierra buena preparada sin el engaño de las
riquezas, es una guerra contra los demonios por
las almas perdidas debemos tomar la armadura
de Dios descrita por Pablo en Efesios 6:10-20. Si
usted es entendido, sabrá que esa armadura es
Cristo, si nosotros no nos revestimos de Cristo no
podremos hacer su obra.
− La codicia de otras cosas.
Definamos la codicia: es el deseo vehemente de
poseer muchas cosas, especialmente riquezas o
bienes.
Hemos hablado de la incredulidad, del engaño de
satanás y de muchas cosas negativas que nos
encontraremos en el camino del evangelismo,
147
antes de sembrar en la tierra buena, estamos a

un paso de entrar, pero quiero que miremos el
mayor opositor para que sembremos la palabra, y
es el viejo hombre, él es la fuente de todos los
males, con este señor nos vamos a topar
siempre.
Esta semilla fue sembrada entre los espinos,
miremos lo que dice el verso 7, del capítulo 4,
“otra parte cayó entre espinos, y los espinos
crecieron y la ahogaron, y no dio fruto”. Si
comparamos con lo que dicen Mateo y Lucas,
podemos concluir algo muy interesante.
Lucas 8:7, “otra parte cayó entre espinos y los
espinos que nacieron juntamente con ella, la
ahogaron”.
Mateo 13: 7, “Pero parte cayó entre espinos, y
los espinos crecieron y la ahogaron”.
En los tres evangelios, la semilla que cayó entre
espinos, concuerda con la misma interpretación,
Marcos dice en el capítulo 4:18-19, “estos son los
que fueron sembrados entre espinos, los que
oyen la palabra”, “pero los afanes de este siglo, y
el engaño de las riquezas, y las codicias de otras
148
cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace

infructuosa”.
Mateo 13:22, “el que fue sembrado entre
espinos, éste es el que oye la palabra, pero el
afán de ese siglo y el engaño de las riquezas
ahogan la palabra, y se hace infructuosa”.
Lucas 8:14, “la que cayó entre espinos, éstos son
lo que oyen, pero yéndose son ahogados por los
afanes, y las riquezas, y los placeres de la vida, y
no llevan fruto”.
Todos los tres evangelistas dicen lo mismo, en
cuanto a la semilla que fue sembrada entre
espinos. Ahora, ¿Qué es lo que ahoga la
semilla?, son los espinos que crecen, ya que la
semilla la sembraron entre espinos, que estaban
también como semillas sembradas, o sea los
espinos están también sembrados en esa tierra,
la cual los escritores la llaman tierra mala.
Usted preguntará, ¿Dónde lo dice?, en el ver 15
de Lucas 8; “más la que cayó en tierra buena”.
Marcos 4:20, “y estos son los que fueron
sembrados en buena tierra”.
149
Mateo 13:23, “más el que fue sembrado en

buena tierra”.
Esto nos lleva a la conclusión de que hay buena
tierra, y hay mala tierra, una tiene espino, y la
otra no.
Volvemos a preguntar, ¿Qué representa la
tierra?, la tierra representa a los seres humanos
de hecho, de ahí fue sacado el ser humano.
Génesis 2:7, “entonces Jehová Dios formó al
hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz
aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente”.
Este tipo de ser humano, esta mala tierra,

podemos identificarlos por lo que transmite en
esta parábola. ¿Qué transmite, o que frutos está
dando?, espinos, frutos malos, Jesús dijo lo
siguiente en Mateo 7:15-20, “Guardaos de los
falsos profetas que vienen a vosotros con
vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos
rapaces”. “Por sus frutos los conoceréis, ¿acaso
se recogen? (un abrojo era una planta de tallos
largos y rastreros, hojas compuestas, fruto
redondo y espinoso, y flores amarillas).
150
“Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el

árbol malo da frutos malos”. “no puede el buen
árbol dar malos frutos ni el árbol malo dar frutos
buenos.
“Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y
echado en el fuego”. “Así que por sus frutos los
conoceréis”.
Por tanto, al mirar los frutos de este ser humano
que son afán, el engaño de las riquezas, y como
dice Lucas, “Los placeres de la vida”, y Marcos
dice “las codicias de otras cosas”. Por estos
frutos podemos identificar la fuente, es decir,
podemos conocer el árbol.
Y este árbol es la naturaleza caída del viejo
hombre, el hombre de pecado, el ser humano
que empezó a vivir sin Dios, y a andar en sus
propios deseos. Miremos lo que esta fuente
caída produce.
Gálatas 6:7-8, “7 No os engañéis; Dios no puede
ser burlado: pues todo lo que el hombre
sembrare, eso también segará. 8 porque el que
siembra para su carne, de la carne segará
151
corrupción; más el que siembra para el Espíritu,

del Espíritu segará vida eterna”.
Cuando miramos en gálatas capítulo 5:19-21,
19 Y manifiestas son las obras de la carne, que
son: adulterio, fornicación, inmundicia,
lascivia, 20 idolatría, hechicerías, enemistades,
pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones,
herejías, 21 envidias, homicidios, borracheras,
orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de
las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho
antes, que los que practican tales cosas no
heredarán el reino de Dios”.
Todas estas manifestaciones, las podemos
resumir en lo que dijo Marcos, “las codicias de
muchas cosas”, la codicia, sale de la tierra mala
del viejo hombre corrompido.
El apóstol Pablo, habló de esto en Romanos 7:7-
25.
Amados hermanos, todos estos textos nos
resumen hasta aquí lo que venimos enseñando,
y nos preparan para entrar a la tierra buena; si no
preparamos la tierra para sembrar, y no hacemos
las cosas que venimos haciendo, usando el
152
arado para preparar la tierra y limpiar las piedras,

los espinos, jamás veremos los resultados
esperados. En este capítulo, podemos ver que
Pablo primero tuvo que ver su naturaleza caída,
la codicia que estaba en ese viejo hombre en su
carne mala, en esa tierra había espinos, y no se
podía dar el evangelio a ese viejo hombre. Mateo
9:14-17.
La ley tenía que venir como ese instrumento que
surca la tierra, y expone el mal que hay, y poder
llegar a ese hombre interior, profundizar la
palabra viva, eficaz que es el evangelio de Cristo,
y llegar a salvar a ese hombre interior que fue
despertado con ganas de servir al señor, porque
logró entender la palabra, la quiere poner en
práctica, pero no puede, es entonces que se
produce el grito de angustia para ser salvo, “cree
en el señor Jesús, y serás salvo tú y tu casa”.
Tenemos que llevar al ser humano, a ese punto,
para poder sembrar correctamente la palabra de
verdad, y que digan lo que dijeron en hechos 2:
“Al oír esto, se compungieron de corazón, y
dijeron a Pedro, y a los otros apóstoles: varones
hermanos, ¿qué haremos?”. Pedro preparó la
153
tierra, y luego cuando ya estaba sin espinas, sin

piedras, les sembró el evangelio, y los resultados
se vieron.
Hechos 2:38-42: “Pedro les dijo: arrepentíos, y
bautícese cada uno de vosotros en el nombre de
Jesús el Cristo, para perdón de pecados, y
recibiréis el don del Espíritu Santo”. “Por qué
para vosotros es la promesa, y para vuestros
hijos, y para todos los que están lejos, por cuanto
el señor nuestro Dios llamare”. “Y con otras
muchas palabras testificaba y les exhortaba
diciendo: sed salvos de esta perversa
generación”. “Así que, los que recibieron su
palabra, fueron bautizados, y se añadieron aquel
día como tres mil personas”. “Y perseveraban en
la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos
con otros, en el partimiento del pan y en las
oraciones”.
Cuando se prepara la tierra, y se siembra la
semilla, los resultados se ven inmediatamente
(tres mil almas perseveraban), cuando no es así,
quiere decir que la tierra no es buena, no des las
perlas a los cerdos, no sembremos donde no hay
154
interés en lo que tú tienes, esa semilla vale, dale

el valor que ella tiene.
Cuando Felipe llegó a Samaria, primero preparó
el terreno, un terreno que fue ablandado por el
señor Jesús, cuando se convirtió la Samaritana,
él llegó a sembrar o, mejor dicho, regar lo que el
señor sembró. Leamos Hechos 8:4-15.
Aquí tenemos lo que necesitamos para ganar las
almas, un sembrador, Felipe, la semilla, el
evangelio, y el arado, poder del Espíritu santo,
esto es todo, y la tierra lista, verso 6 del capítulo
8 dice: “y la gente unánime, escuchaba
atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo
y viendo las señales que hacía”.
Una tierra lista para la semilla, sin espinos,
amados procuremos sembrar en buena tierra, no
en la tierra mala, en esa naturaleza caída,
busquemos a ese hombre que Dios creó y ahí
sembremos la palabra viva. Terminemos con
Mateo 9:9, “Pasando Jesús de allí, vio a un
hombre llamado Mateo, que estaba sentado en el
banco de los tributos públicos, y le dijo: sígueme,
y se levantó y le siguió”.
155
¿Qué vio Jesús?, un hombre, él no vio a un

ladrón, un estafador, él vio a un hombre creado a
imagen de Dios, ese es el hombre al que le
debemos sembrar la semilla, debemos llegar
hasta lo profundo del ser interior y sembrar la
palabra de vida, es hora que los muertos
escuchen la voz de Dios.
Nuestra labor es sembrar la palabra del
evangelio, fue lo que se nos encomendó, pero no
entre espinos, no donde hay piedras, no junto al
camino, sembremos en buena tierra.
Concluyamos con estas palabras, “¿cómo podrás
derribar las fortalezas de satanás, si ni siquiera
tienes la fuerza para apagar tu televisor?”
Leonard Raverhill.
3.3.4. Buena tierra
Llegamos a nuestro estudio de la última tierra
que se menciona en la parábola, la semilla que
cayó en buena tierra.
Quiero comenzar con las palabras de un
predicador que leí: “cuando colocas el evangelio
en el centro de tu vida, tu mayor anhelo no será
llegar a tener una comunión cada vez más íntima
156
y deleitosa con aquel que entregó su vida por ti

en la cruz del calvario. El deseo de predicar
mejor, no necesariamente te ayudará a ser mejor
cristiano, pero en la medida en que te acercas
más a tu señor y salvador, eso de seguro
contribuirá a que prediques mejor, si Dios te
llamó a hacerlo.
Leamos en Marcos 4:20, “y estos son los que
fueron sembrados en buena tierra: los que oyen
la palabra y la reciben, y dan frutos a treinta, a
sesenta, y a ciento por uno”.
Antes de explicar sobre este versículo de la
palabra, quiero leer un artículo muy importante
sobre el valor que tiene la semilla, y su poder de
vida, si cae en buena tierra.
El poder que hay en una sola semilla (Camacho, A.
N. 2019)
Una semilla contiene el poder y potencial de

multiplicarse. En sí mismo, no es muy virtuosa,
pero cuando es plantada, esa pequeña semilla
tiene el poder suficiente para enraizarse
profundamente en la tierra. Una persona puede
necesitar alguna herramienta para cavar en la
157
tierra, pero la semilla tiene el poder en sí misma

de hacerlo.
Una vez que la semilla ha penetrado en la tierra,
tendrá el poder suficiente, para abrirse camino y
salir a la superficie de la tierra en forma de
planta.
¿De dónde proviene el poder suficiente para
hacer que las raíces penetren bajo el suelo?
Como sabemos, este poder viene intrínseco en la
misma semilla. Marcos 4:26-29: “26 Decía,
además: Así es el reino de Dios, como cuando un
hombre echa semilla en la tierra; 27 y duerme y
se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y
crece sin que él sepa cómo. 28 porque de suyo
lleva fruto la tierra, primero hierba, luego espiga,
después grano lleno en la espiga; 29 y cuando el
fruto está maduro, en seguida se mete la hoz,
porque la siega ha llegado”.
Jesús nos dijo que “el poder y potencial de una
semilla nunca se podrá ver manifestado, sí se
deja sin plantar. Por lo tanto, la cosecha morirá
dentro de la misma semilla, y se perderá. Juan
12:24, “De cierto, de cierto os digo, que, si el
158
grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda

solo, pero si muere, lleva mucho fruto”.
Esto nos muestra 3 cosas, la importancia del
sembrador al tener este conocimiento, la semilla
con su poder intrínseco, y la tierra que recibe
esta semilla; y es lo que la palabra demanda del
hombre, creer en el evangelio, recibir la semilla, y
ella hará lo demás por si sola.
Dos cosas importantes dicen el texto de Marcos v
20, “los que oyen la palabra, y la reciben”, esto
es lo que también dice Mateo en otras palabras,
dando a entender lo mismo. Mateo 13:23, “más el
que fue sembrado en buena tierra, éste es el que
oye y entiende la palabra, y da su fruto”. “Oír y
entender”, el resultado es creer. Lucas nos dice
lo mismo en el capítulo 8, verso 15: “más la que
cayó en buena tierra (es la clave), estos son los
que con corazón bueno y recto retienen la
palabra oída”.
Para retener deben primero oír y luego creer, al
creer se derriba el plan del diablo, que Lucas nos
muestra en el versículo 12 del capítulo 8: “y los
de junto al camino, son los que oyen, y luego
159
viene el diablo y quita de su corazón la palabra

para que crean y se salven”.
La guerra es para que no crean, por eso el diablo
no desea que salgamos a sembrar la palabra, es
la única manera de que las almas se puedan
salvar, esto lo explica Romanos 10:8-15. Todos
estos textos lo explican bien, nosotros somos los
responsables de que esta semilla se reproduzca
o no, ella tiene todo lo necesario para cumplir su
función salvadora.
Sigamos leyendo el artículo.
Una semilla tiene poder y potencial para la
humanidad, y que nunca pasemos hambre, por lo
que la semilla trasciende y germinará por los
siglos de los siglos. Por eso Dios nos provee de
semillas, si somos sembradores, pero debemos
plantar la semilla en la tierra para que se
multipliquen, y de esta manera ver multiplicadas
las cosechas y poder recoger nuestros frutos de
generación en generación.
Quiero que miremos dos textos de la palabra en:
2 corintios 9:6, “pero esto digo: el que siembra
escasamente, también segará escasamente, y el
160
que siembra generosamente, generosamente

también segará”.
Y el verso 10, “y el que da semilla al que
siembra, y pan al que come, proveerá y
multiplicará vuestra sementera, y aumentará los
frutos de vuestra justicia”.
Un ejemplo de esto es Pedro el señor, le puso
una semilla, y miren como se multiplicó, en un
solo mensaje ganó tres mil almas, y esos
generaron a otros. Si podemos multiplicarnos,
solo tenemos que sembrar la semilla que
tenemos, no la guardes, pongámosla en la tierra.
Podemos aprender más acerca del poder de la
multiplicación de la semilla, viendo a un grano de
maíz, podemos tomar un pequeño grano y
comerlo, pero si lo plantamos, ese mismo grano
de maíz en la tierra, el promedio de lo que
produce un grano es un tallo con dos mazorcas
mínimo de choclo de maíz, cada mazorca de
maíz produce en un promedio de 616 granos. ¡Es
impresionante!, lo que hace un total de 1.232
granos de un solo pequeño grano de maíz
plantado en la tierra.
161
Podríamos cocinar esas mazorcas, y comer esos

granos, y seguramente quedaremos satisfechos
por algunas horas, pero si tenemos la mentalidad
de un sembrador o agricultor, plantaríamos de
nuevo los 1.232 granos de maíz y de cada grano
se obtendría una planta, y cada planta produce 2
mazorcas mínimo, y ellos entonces se multiplica
en una cosecha de 1.517.824 granos de maíz.
¡Esto es maravilloso!
Dios da como regalo ese poder, y potencial que
tiene la semilla para crecer en la tierra para que
en el mundo no exista pobreza ni desnutrición, él
puso en funcionamiento la “ley del incremento
sobre la faz de la tierra de la semilla”.
¿Pensaríamos que Dios haría esta ley más
efectiva para un grano plantado en la tierra que
un plantado en su reino? ¡No!, la ley de siembra y
cosecha es más real en el mundo espiritual que
en el natural, así que no temamos plantar una
semilla en buena tierra, pero siempre creemos en
el poder que tiene la semilla para multiplicarse.
Leamos en Marcos 4:20, “y estos son los que
fueron sembrados en buena tierra, los que oyen
162
la palabra y la reciben, y dan frutos a treinta,

sesenta y a ciento por ciento”.
Es una verdad la multiplicación. ¿Por qué
algunas iglesias no crecen?, por que comen la
cosecha y no ponen las semillas a producir, si
antes eran 5, hoy son 20, si todos esos 20 salen,
se producirán más todavía. Pero tenemos que
tomar el ejemplo de Jesús, tomó 12 discípulos,
los entrenó en tres años, les enseñó cómo
pescar los peces, ganar las almas, sacarlas del
mar, luego murió como debe morir la semilla, y
los frutos salieron. Pedro ganó 3 mil, luego 5 mil,
Felipe toda samaria, Pablo miles en diferentes
continentes. ¿Qué tenemos que hacer?, salir a
sembrar la semilla, y nos multiplicaremos.
Quiero leer algo más que debemos conocer y
vamos cerrando este taller, luego de esto
veremos el más grande de los sembradores, a
nuestro señor Jesús, en plena tarea ganando un
alma que luego se trajo a una ciudad a los pies
de Jesús.
163
-La semilla-
La semilla, simiente, o pepita, es cada uno de los
cuerpos que forman parte del fruto que da origen
a una nueva planta, es la estructura mediante la
que se realizan la propagación de las plantas que
por ello se llaman espermatofitas (plantas con
semillas), la semilla se produce por la
maduración de un óvulo de una gimnosperma o
de una angiosperma.
Una semilla contiene un embrión del que puede
desarrollarse una nueva planta bajo condiciones
apropiadas. También contiene un embrión del
que puede desarrollarse una nueva planta bajo
condiciones apropiadas, también contiene una
fuente de alimento almacenado y está envuelto
en una cuerda protectora.
Por lo tanto, es importante saber que una semilla
está formada de tres partes: el embrión, los
tejidos de almacenamiento, y las cubiertas
protectoras. La semilla va a ser el inicio de
nuestro huerto, o siembre, con el objetivo final de
obtener un alimento saludable en nuestra mesa.
164
Mis amados hermanos, toda esta información es

tan importante que por eso Santiago en su carta
dice lo siguiente:
Santiago 5:7-8, “Por tanto, hermanos, tened
paciencia hasta la venida del señor, mirad cómo
el labrador espera el precioso fruto de la tierra,
aguardando con paciencia hasta que reciba la
lluvia temprana y la tardía, tened también
vosotros paciencia, y afirmad vuestros
corazones, porque la venida del señor se
acerca”.
¿Por qué es necesaria la paciencia?, por el
proceso de la semilla, dejemos que ella trabaje
en las personas, a nosotros solo nos toca seguir
regando la semilla con agua, y esa agua es la
palabra, la oración, orar por los que estamos
evangelizando, y esperar lo que dijo Pablo: “yo
sembré, Apolo regó, pero el crecimiento lo da el
señor”.
165
4. Jesús como buen sembrador
Para finalizar este taller, mis amados, tomaré al

sembrador más grande de este universo, y lo
tomaremos para mirar todo lo que hemos
estudiado de forma práctica, ya que, si no
ponemos en práctica lo que hemos recibido,
perdimos el tiempo, pero si practicamos lo que
recibimos, veremos y recogeremos muchos
frutos.
Jesús como sembrador y Samaria como la tierra
para sembrar. Comenzamos leyendo en Lucas
9:51-55: “51 Cuando se cumplió el tiempo en que
él había de ser recibido arriba, afirmó su rostro
para ir a Jerusalén. 52 y envió mensajeros
delante de él, los cuales fueron y entraron en una
aldea de los samaritanos para hacerle
preparativos. 53 Mas no le recibieron, porque su
aspecto era como de ir a Jerusalén. 54 viendo
esto sus discípulos Jacobo y Juan, dijeron:
Señor, ¿quieres que mandemos que descienda
fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma?
55 entonces volviéndose él, los reprendió,
166
diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu

sois;”
En este pasaje, podemos mirar varias cosas,
Jesús les manda a hacer unos preparativos a
algunos de sus discípulos a una tierra en
conflicto con los judíos, los samaritanos no se
trataban con judíos, un pleito de muchos años.
Eso viene desde el antiguo testamento, en los
tiempos del rey Oseas, ya Israel y Judá estaban
divididos, quedando Jerusalén como la capital de
Judá, y Samaria como la capital de Israel, más o
menos en el año 722 a.C., Ezequías reinaba
Judá, y Óseas reinaba Israel.
Israel en cabeza de su rey, provocaron a ira al
Dios de Israel, y después de muchas
advertencias de parte de Dios, otra vez de los
profetas vino la destrucción de Samaria, por
mano de sus más fueron enemigos, los Asirios
que su rey para ese entonces fue Salmanasar. 2
Reyes 17:1-8; 9-23.
Luego de invadir Samaria, la capital, se llevaron
en cautiverio a todo Israel, V5-7, “5 Y el rey de
Asiria invadió todo el país, y sitió a Samaria, y
estuvo sobre ella tres años. 6 en el año nueve de
167
Oseas, el rey de Asiria tomó Samaria, y llevó a

Israel cautivo a Asiria, y los puso en Halah, en
Habor junto al río Gozán, y en las ciudades de
los medos.7 Porque los hijos de Israel pecaron
contra Jehová su Dios, que los sacó de tierra de
Egipto, de bajo la mano de Faraón rey de Egipto,
y temieron a dioses ajenos,”.
Todos fueron llevados cautivos, ¿cómo fue que
samaria volvió a poblarse?, el versículo 24 nos
dice lo siguiente: “Y trajo el rey de Asiria gente de
Babilonia, de Cuta, de Ava, de Hamat y de
Sefarvaim, y los puso en las ciudades de
Samaria, en lugar de los hijos de Israel; y
poseyeron a Samaria, y habitaron en sus
ciudades”.
Cuando ya estaban instaladas, el señor les
mandó leones, que los mataban, las causas las
explican en el verso 25, “25 Y aconteció al
principio, cuando comenzaron a habitar allí, que
no temiendo ellos a Jehová, envió Jehová contra
ellos leones que los mataban”.
Para el rey de Asiria, la forma de solucionar el
conflicto, fue mandar a los sacerdotes que les
enseñaran la ley de Dios. V27-28, “27 Y el rey de
168
Asiria mandó, diciendo: Llevad allí a alguno de

los sacerdotes que trajisteis de allá, y vaya y
habite allí, y les enseñe la ley del Dios del país.
28 Y vino uno de los sacerdotes que habían
llevado cautivo de Samaria, y habitó en Bet-el, y
les enseñó cómo habían de temer a Jehová”.
Pero el problema fue, y de ahí nacen las disputas
contra los judíos, que estas personas extranjeras
nunca dejaron sus costumbres paganas como
leemos en el versículo 29, “Pero cada nación se
hizo sus dioses, y los pusieron en los templos de
los lugares altos que habían hecho los de
Samaria; cada nación en su ciudad donde
habitaba”.
De ahí salió un pueblo mezclado, como los
católicos que hablan de Dios y adoran imágenes,
verso 41, “Así temieron a Jehová aquellas
gentes, y al mismo tiempo sirvieron a sus ídolos;
y también sus hijos y sus nietos, según como
hicieron sus padres, así hacen hasta hoy”.
Imagínense cuantas piedras y espinos tenía esta
tierra, tanto así que los discípulos Juan y Jacob,
dijeron, oremos como Elías para que todos
mueran. Ellos tenían que ser enseñados por
169
Cristo, por eso Jesús les dijo, yo les haré

pescadores de hombres.
Permítanme dar una buena explicación de este
tema final. Jesús conociendo que Samaria era
una tierra difícil, cuando los mandó a predicar les
dijo que no llegaran a Samaria. Mateo 10:5, “A
estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones,
diciendo: Por camino de gentiles no vayáis, y en
ciudad de samaritanos no entréis,”.
Veamos, el señor les mandó hacer un mandado,
y cuando llegaron no los recibieron y Juan y
Jacob los querían desaparecer, usando la ley mal
aplicada, porque lo de Elías paso en tiempos de
la ley, y ellos querían usar la semilla de la ley en
Samaria, Pablo dijo en 1 Timoteo 1:8, “Pero
sabemos que la ley es buena, si uno la usa
legítimamente;”. Ellos no la estaban usando de la
manera como explicamos en capítulos anteriores,
ellos lo usaron para destruir, no para preparar el
terreno, no para sembrar la semilla del evangelio,
se les olvidó que Jesús no vino a perder a las
almas, si no a salvarlas.
Tristemente tengo que decir que ese es el
pensamiento de muchos de nosotros, salimos a
170
evangelizar y nos encontramos personas en la

idolatría, en fornicación, en adulterios,
borracheras, en sadismo, y en toda clase de
pecados, una tierra dura, llena de piedras, y
espinos, y tomada por satanás. La pregunta que
yo hago es, ¿acaso no decimos, esta gente si es
dura de corazón, el juicio de Dios les caerá
encima?, son muchos pensamientos como estos
los que pasan por nuestras mentes, y tratamos
de calmar las conciencias diciendo: “ya les
hemos predicado, ya los invitamos a la iglesia, su
sangre corre sobre su cabeza, ya yo soy libre de
su sangre, ellos no recibieron el mensaje, me
sacudo los pies de esta tierra”, me sigo
preguntando, ¿le hicimos el trabajo correcto que
se le debe hacer a la tierra?¿le preparamos para
que recibiera la semilla del evangelio?, sigo
preguntando, ¿sembramos de verdad y
regamos?, o ¿nuestra semilla no pasó de la
carne pecaminosa?, o sea, ¿la sembramos entre
las piedras, el espino, y las riquezas engañosas?,
¿satanás se levantó, nos hizo la guerra y listo,
hasta ahí llegamos?, solo pregunto, ¿será que no
estábamos preparados como deberíamos estar,
o necesitamos preparación?, ¿será que ya no se
171
puede hacer más nada?, ¿todavía hay esperanza

de poder sembrar el evangelio?, yo creo que sí,
para eso es este taller, para tener formación y
ganar almas, entonces vamos a Samaria, la tierra
difícil, dura, con piedras, y espinos, y miremos
como el señor se gana a esta ciudad.
Llegamos a la tierra dura de Samaria, Juan 4:1-
42. Llegamos, pero con un buen sembrador,
preparado y con la semilla del evangelio, y con
todos los instrumentos para preparar la tierra, y
uno poco mencionado en todo mi recorrido, pero
lo dejamos para el último vino, que es el mejor,
¿saben qué es lo primordial, para ganar las
almas?, el amor, sin amor no podemos hacer
nada, Cristo lo manifestó en todo este capítulo,
entremos en Samaria.
Esta nota de entrada es muy importante. Los
versículos 1-2.
Amados, estos versículos nos muestras, que
nuestra labor como evangelizadores, debe
terminar cuando bautizamos a las personas,
porque realmente los pastores no eran los que
bautizaban, si no los evangelistas, el ejemplo de
Felipe, que bautizó en Samaria, y al eunuco, la
172
labor del pastor, es pastorear las ovejas, y

nuestra función como evangelistas, es ganar las
almas, y traerlas convertidas para que el pastor
las pastoree.
Por años hice un trabajo incompleto, yo decía: en
las campañas se convirtieron 30, ahí tiene pastor,
y la realidad era otra, 30 personas con malas
mañas, más dolor de cabeza, recordemos que el
pastor pastorea ovejas, no ladrones, ni
drogadictos, ni brujos, el pastorea ovejas, así que
tengamos eso presenté cuando estemos
evangelizando (respetando las normas de casa
concilio, claro está, ya que en algunos solo los
pastores bautizan, por lo menos traigamos las
almas listas para bautizar).
Leamos los versículos 3-6, Cristo llegó a la tierra
de Samaria, recordemos a qué vino él, a darnos
una enseñanza práctica, él fue el primero que
llegó al pozo, los discípulos se fueron a buscar
comida, él se fue a sembrar la semilla, no perdía
el tiempo.
Notemos algo interesante, amados, la mujer
llega, ni siquiera lo saludo, claro, ellos
consideraban a los judíos enemigos, muchas
173
veces nos ha pasado lo mismo, y nos seguirá

pasando, nos trataran como si fuéramos lo peor,
nos tiraran la puerta en la cara, nos insultes, ni
siquiera nos darán el saludo, pero siempre
recuerda, a Jesús le hicieron lo mismo.
Recuerdo un día sembrando la palabra con un
amigo, íbamos en un bus de viaje para un ayuno
y nos paramos a predicar, nos bajaron con todo
el equipaje. En otra ocasión, en un parque me
metieron preso, y me pegaron, un teniente racista
y católico, que no quería que predicara.
El verso 7, “vino una mujer de samaria a sacar
agua, y Jesús le dijo: “dame de beber”.
Tremendo lo que el señor hizo, aquí eso es amor,
el amor por esa alma sin esperanza, fue lo que
hizo que él se humillara al decirle a una persona
que lo odiaba sin motivos, solo por ser judío, y
tener una costumbre desde niña, y es que el
señor manifestó amor desde que se humilló
haciéndose hombre y despojarse de ser Dios. Si
no tenemos ese amor capaz de soportar toda
clase de insultos, jamás lograremos sembrar la
semilla de vida, Jesús aquí usó el arado de la
174
humillación impulsado por el amor, para ablandar

la tierra llena de piedras religiosas y de espinos.
Amados la blanda respuesta puede apartar lo
que estorba para poder sembrar la vida,
recordemos la luz la tenemos nosotros, el mundo
está muerto en pecado, solo lo que portamos los
puede salvar.
La respuesta de ella fue áspera y dura, V9.
Somos enemigos, muchas personas rechazan
nuestra manifestación de amor, por sus prejuicios
y sus tradiciones, usted es evangélico, yo soy
católico, no caigamos en el terreno de la
discusión, estoy ahí porque deseo salvar al
perdido.
La respuesta de Jesús siguió siendo amable y
dulce, a pesar de tanta hostilidad y aspereza, él
no cambió, ese es un sembrador con
conocimiento y lleno de amor, V10.
Amor puro, verdadero, el ofreciéndole la vida
eterna, paz verdadera, ese debe ser el
comportamiento de los sembradores, sembrar la
semilla, preparar la tierra, el amor cubrirá la
multitud de faltas, sufrimos como Pablo que fue
175
apedreado en listra, todo por amor, el amor en

nuestra vida es tan necesario que debe ser la
base, el motor que nos mueva a llevar las buenas
nuevas.
La respuesta de la mujer fue una respuesta que
dejó ver la ignorancia que había en ella, los
versículos 11-12, lo muestran, primero no sabía
quién está delante de ella, y segundo no sabía de
qué agua le habla el señor, y, por último, tenía la
enseñanza del pozo de Jacob por tradiciones,
religión sin salvación, piedras, espinos, la
ignorancia es lo que más abunda en esta
sociedad, y por eso mismo es que hay muchos
males.
Es importante que, como sembradores de la
palabra, sepamos esto, así que hagamos un
paréntesis para mirar este punto. Leamos en 2
Reyes 4:38-41. ¿Qué pasó aquí?, había hambre,
nada de comida, y uno de los que estaban ahí
salió en busca de algo para comer y por
desconocimiento trajo veneno. ¿era su intención?
Claro que no, ¿Por qué lo hizo?, por ignorancia.
En la mayoría de las personas a las que vamos a
evangelizar se mueven en ignorancia, ellos
176
buscan un bien para sí mismos, pero lo hacen en

su ceguera; pelear con ellos no los ayuda,
buscan en la bebida pensando que eso llenara el
vacío que tienen, buscan la idolatría, por
ignorancia, y así todas las demás cosas. Hechos
17:30 “Pero Dios, habiendo pasado por alto los
tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos
los hombres en todo lugar, que se arrepienta”.
También notamos que la mujer le dijo “señor”, al
principio fue hostil como las espinas, picosa, ya
esta expresión muestra que eta cediendo;
sigamos a ver que responde Jesús, V.13-14,
“Respondió Jesús y le dijo: Cualquiera que
bebiere de esta agua, volverá a tener sed; más el
que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá
sed jamás; sino que el agua que yo le daré será
en él una fuente de agua que salte para vida
eterna”.
Notemos varias cosas importantes, ella en su
ignorancia trata de defender lo que a ella le
enseñaron, por tradición, ella tiene a Jacob como
el más grande, sin saber que Jacob habló del
señor, del Mesías, como el rey de Israel. Ella no
sabe, solo defiende el pozo, a Jacob, los ídolos
177
que no pudieron llenarla a ella, su vacío, Jesús

no cayó en el terreno de ella, él quiere sacarla de
ahí, así que siguió con su ofrecimiento de vida,
que sacio el alma seca con agua viva. Le dijo,
“cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a
tener sed”, de nada han valido tus creencias,
están vacías, de nada te sirvió el placer sexual, la
religión, están vacíos, todo esto en amor
amados, Jesús nunca la maltrato, recuerde él
está preparando el terreno para sembrar la
semilla del evangelio. ¿Qué está utilizando?, el
arado del amor, y los frutos del Espíritu,
paciencia.
La respuesta de ella es lo que esperaba el
maestro, V15. “La mujer le dijo: señor, dame esa
agua, para que no tenga yo sed, ni venga aquí a
sacarlo”.
Mostró interés en lo que el señor le está
ofreciendo, es lo que debemos despertar en las
personas sin Cristo, interés en lo que tenemos
nosotros, que es lo que ellos necesitan.
Cuando yo estaba meditando en esto, que ella
deseo me imagino el gozo que sintió en ese
momento y el Espíritu me recordó las dos
178
semillas anteriores, estoy más que seguro que

todos la recibieron con gozo. En el versículo 16
del capítulo 4 de Marcos, dice, “Estos son
asimismo lo que fueron sembrados en
pedregales, lo que cuando han oído la palabra, al
momento la reciben con gozo”.
Y es que esto paso en gran parte del ministerio
del señor Jesús, por citar solo un ejemplo,
tenemos la multiplicación de los panes y los
peces (San Juan 6: 22-24). ¿Por qué buscaban a
Jesús?, Cristo de los dijo en los versos siguientes
V. 25-27, de ahí en adelante el señor empezó un
mensaje tratando de sembrar el evangelio en lo
más profundo de su ser. Pero ellos al final lo
rechazaron, no quisieron y muchos lo dijeron, “al
oírlas muchos de sus discípulos dijeron: dura es
esta palabra, ¿Quién la puede oír?”
El 61 “sabiendo Jesús en sí mismo que sus
discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿esto os
ofende?, 62 “¿Pues qué, si viereis al Hijo del
Hombre subir adonde estaba primero?”, 63 “El
espíritu es el que da vida; la carne para nada
aprovecha; las palabras que yo os he hablado
son espíritu y son vida”.
179
La multiplicación de los panes y peces, les

alimento la carne, el cuerpo, pero el señor quería
profundizar, esta semilla que no se quedara en
las piedras de la incredulidad, sino que creyeran
en él, por eso hizo la señal de la multiplicación;
amados de la misma manera que la semilla
necesita la tierra para poder dar fruto, así
también la palabra del señor que es Espíritu,
necesita el espíritu del hombre para dar frutos
dignos de arrepentimiento, la palabra debe entrar
al corazón, ya que con el corazón se cree para
justicia, pero con la boca se confiesa para
salvación. Romanos 10:10
Aquí tenemos el mismo problema de la segunda
semilla, no hay profundidad de tierra Marcos 4:5,
“Otra parte cayo en pedregales, donde no tenía
mucha tierra, y broto pronto, porque no tenía
profundidad de tierra”.
¿Estaban gozosos?, claro que, si recibieron los
panes con gozo y alegría, se volvieron sus
discípulos, pero no creían en el cómo el Mesías y
salvador, porque es con el espíritu que se cree,
es la parte profunda del ser, el corazón es ahí
donde debe llegar la semilla.
180
Si miramos el versículo 64 de San Juan, “pero

hay algunos de vosotros que no creen. Por qué
Jesús sabía desde el principio quienes eran los
que no creían, y quien le había de entregar”
¿Qué queremos nosotros cuando salimos a
evangelizar o predicar en las grandes
campañas?, la respuesta es que crean en el
señor Jesús, por eso son las manifestaciones de
poder, los milagros, las señales para que crean
en el señor; miren esta pregunta de los que
comieron el pan cuando Jesús les dijo esto en los
versos 26-29, del capítulo 6 de Juan.
Jesús les dice, si ustedes ven la señal, me
creerán que yo salí del padre, entenderán que no
soy de esta tierra porque nadie puede hacer
estas señales sino esta Dios con él.
Ellos preguntan en el verso 29, ¿“Esta es la obra
de Dios, que creáis en el que él ha enviado?
Ahí es donde nosotros como los portadores de la
semilla del evangelio, debemos llevar a todos las
personas que estamos evangelizando, ya sea en
las casas, en los hospitales, o en las campañas,
la mayoría tienen interés en el agua de vida, en
181
saciar sus vacíos, en los milagros, en las

sanidades, en la palabra de ciencia, pero esto no
salva a nadie, hay que darles la doctrina
verdadera, el pan que descendió del cielo; el
punto es, amados hermanos, que tenemos que
llevarlos a que conozcan a Jesús y al padre.
Juan 17:3, “y esta es la vida eterna: que te
conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesús
el Cristo, a quien has enviado”.
La vida eterna está en conocer que Jesús vino en
carne, que Dios se hizo carne, y esa es la
doctrina de salvación, ese es el evangelio, no
podemos quedarnos por encima, en lo
superficial, hay que llevar la palabra hasta tocar
el espíritu muerto. ¿Cuál fue la reacción de
algunos discípulos? verso 66 del capítulo 6.
Desde entonces muchos de sus discípulos
volvieron atrás, y ya no andaban con él.
Señores evangelizadores, no se extrañe que
cuando usted les de la doctrina de la salvación
muchos le dirán “no venga más”, no queremos
seguir, solamente los que son de Dios se
quedaran, pero no podemos negar la semilla de
vida. Leamos el 68-71.
182
Solo los traídos por el poder se quedarán, no

todos obedecen al evangelio, a nosotros solo nos
toca hacer lo que se nos mandó, y enseñó,
sembrar, regar, y el señor dará el crecimiento.
Volviendo a la Samaritana, nos daremos cuenta
que ella está en lo mismo que los que comieron
el pan, tenía solo interés de saciar el vacío
momentáneo. Pero ahora Jesús utilizara la ley,
para mostrar su pecado, y los dones del Espíritu,
los dos instrumentos del arado para preparar la
tierra para sembrar el evangelio de la salvación.
Por eso le dice lo siguiente en el verso 16 del
capítulo 4 de San Juan, “Jesús le dijo: ve, llama a
tu marido, y ven acá”, uno se preguntará ¿esto
que tiene que ver con lo que ella quería?, pues
mucho, Jesús no podía darla la vida eterna en
esa condición de pecado. Recordemos que fue lo
que Jesús le está ofreciendo, verso 14, “más el
que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá
sed jamás, sino que el agua que yo le daré será
en él, una fuente de agua que salte para vía
eterna”.
Mis amados, ni ella sabía lo que Cristo le estaba
ofreciendo, ella está en ignorancia, pero tiene
183
interés de saciar su vacío, en pocas palabras,

saciar sus necesidades es lo que quieren las
personas, suplir para sus necesidades, por esto
dicen “ore por esto, ore por aquello”, pero cuando
les dices que tienen que dejar de pecar, muchos
se devuelven; podemos ver el caso del joven rico
en Marcos 10:17-22, quería la vida eterna pero
no quería desprenderse del engaño de las
riquezas, cuando Jesús le dio la semilla de vida
no la quiso recibir, o mejor dicho, cuando Jesús
quiso preparar el terreno, no dejo que le quitaran
los espinos de su afán y el engaño de las
riquezas.
Recordemos, la vida eterna es saber quién es
Jesús, por eso el señor la está llevando poco a
poco con paciencia como todo un sembrador
profesional, y es que él es nuestro maestro.
Ella le respondió en San Juan 4:17 “Respondió la
mujer y dijo: no tengo marido. Jesús le dijo: bien
has dicho, no tengo marido”.
Amados, me gusta la forma de nuestro maestro
de tratar con las personas, aun sabiendo su
estado, y condición de pecado, recordemos que
esta mujer está en el mundo, perdida, sin fe, sin
184
esperanza, Jesús sabe que está en adulterio,

que la ley la condena, sin embargo, él quiere
salvarla, porque el vino fue a salvar, no a
condenar. Este pez había que arreglarlo, claro
que no se saca un pez, y se frita sin arreglarlo
antes, se arregla por dentro, sacando las tripas, y
por fuera, quitando las escamas, pero, primero se
saca del mar, de su hábitat, y es lo que está
haciendo el señor, pescando a la samaritana, por
eso le pone la carnada del agua de vida, ya ella
está picando el anzuelo, solo es cuestión de
tiempo. Muy sabiamente el maestro le dice por
ciencia de poder, verso 18: “Porque cinco
maridos has tenido, y el que ahora tienes no es
tu marido; esto has dicho con verdad”.
Amados, miremos esta combinación de ley y
poder, esto tenían los profetas, por lo que a ella
no le toca sino es reconocer algo, verso 19: “le
dijo la mujer: señor, me parece que tú eres
profeta”.
¿Por qué digo que le hablo la ley?, porque la ley
es la que prohíbe el adulterio, y ella estaba en
adulterio, el que tienes no es tuya, era de otra.
185
Ese es el objetivo, cuando explique que por

medio de la ley es el conocimiento del pecado,
claro está que Jesús no le hablo de la ley
directamente, ella no era no era judía, si la debía
conocer, por lo que ella era una mezclada, y
además, también tenía conciencia, que nos dice
lo que es correcto o lo que no, y fue ahí donde
Jesús tocó, así que ya ella no solo está viendo
Jesús como señor, sino también como profeta,
cambió la perspectiva sobre Jesús, al principio lo
vio como su enemigo, ahora ya no; pero, esto no
basta para la salvación, solo se abrió el camino,
se surco la tierra, había que seguir arando, ella
todavía tenía otras piedras más, la piedra de la
religión también había que sacarla, y Jesús
estaba ahí para eso.
Ella respondió en el verso 20, “Nuestros padres
adoraron en este monte, y, vosotros decís que en
Jerusalén es el lugar donde se debe adorar”.
Confusión total, y así anda el mundo, que no
saben en quien creer, esto es la tradición que les
permite tener mandamientos de hombres, ella
guardando un pozo, pero en adulterio, ella
defendiendo a Jacob, pero en adulterios; los
186
judíos defienden el tempo, pero viviendo en las

apariencias, confusión total, es la triste realidad
del ser humanos sin Dios.
La gente defendiendo las imágenes, pero en
pecado, eso es ceguera total, es el cuadro de
muchas vidas, amados, ¿qué les puede sacar de
esa ignorancia?, la verdad, la semilla del
evangelio sembrada en el espíritu, y es lo que
empieza a hacer Jesús en la samaritana, la tierra
está lista para sembrar el evangelio, dar a
conocer quién es Jesús, el mesías, el salvador
del mundo. Versos 21-24
“Jesús le dijo: mujer, créeme, que la hora viene
cuando ni en este monte ni en Jerusalén,
adorareis al padre”.
Eso necesitan las personas, ser sacados de sus
tradiciones, y dogmas humanos, y llevarlos a que
crean en Jesús, no en los hombres, es en el
señor que se debe creer, por favor sembradores,
ese es nuestro trabajo, que crean en Jesús y en
el padre. El padre es Espíritu, ya lo que Jesús
está haciendo es sembrar en el Espíritu de la
Samaritana que cuando confesó “me parece que
tú eres profeta”, ella está reconociendo que
187
Jesús tiene la verdad, en pocas palabras está

confesando lo que ya está creyendo, con el
corazón se cree para justicia, pero con la boca se
confiesa para salvación, ¡aleluya, gloria al señor!
Esta confesión hace que el señor lo hable claro, y
le señale la verdad, leamos en San Juan 8: 31-38
“31 Dijo entonces Jesús a los judíos que habían
creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi
palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará
libres. 33 le respondieron: Linaje de Abraham
somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie.
¿Cómo dices tú Seréis libres?
34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os
digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo
es del pecado. 35 y el esclavo no queda en la
casa para siempre; el hijo sí queda para siempre.
36 así que, si el Hijo os libertare, seréis
verdaderamente libres. 37 sé que sois
descendientes de Abraham; pero procuráis
matarme, porque mi palabra no halla cabida en
vosotros. 38 yo hablo lo que he visto cerca del
Padre; y vosotros hacéis lo que habéis oído
cerca de vuestro padre”.
188
¿A quién le dijo la verdad? a los que habían

creído; por eso Jesús al ver que la Samaritana
creyó que él era profeta, empezó el camino para
ser salva, al reconocer su estado de pecado, ese
es el comienzo para la libertad. Amados, el mero
conocimiento no me quita el pecado, ya que el
pecado es una ley en mis miembros, que me
impulsa a pecar, aunque no lo desee siempre
pecare, es un poder en nosotros. Pablo dijo
“miserable de mí, quién me librará de este cuerpo
de muerte”, es el paso para la libertad, reconocer
que soy pecador, ella lo hizo. ¿Pero cómo me
salvo de esto? solo Cristo tiene la respuesta, más
nadie, el evangelio es la solución, siembre la
semilla en esta tierra que está preparada para
recibir la palabra de vida.
Continuamos en Juan 4:22, “vosotros adoráis lo
que no sabéis, nosotros adoramos lo que
sabemos, porque la salvación viene de los
judíos”. No es que la salvación la tienen los
judíos, sino que viene de allá, ya que fueron el
pueblo que Dios escogió para traer al salvador,
amados, Dios nos escogió para presentar al
salvador, pero debemos ser claros, somos solo
189
eso, un instrumento, que portamos la semilla de

vida.
Verso 23, “Mas la hora viene, y ahora es cuando
los verdaderos adoradores adorarán al padre, en
espíritu y en verdad, porque también el padre
tales adoradores busca que le adoren”.
Esta semilla está buscando el lugar correcto, el
espíritu del hombre, la espada penetró a lo más
profundo, es muy poderoso esto mis amados, él
vino nuevo no se echa en odres viejos, sino en
odres nuevos, es ahí donde se deposita esa
semilla que empezará a producir frutos. Mis
amados, queridos sembradores, si queremos
ganar almas es lo que el señor nos deposita en
nuestras manos un conocimiento y al maestro
enseñándonos cómo se lleva a la práctica todo lo
que encontramos en la parábola del sembrador.
V24. “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en
Espíritu y en verdad es necesario que adoren.”
Es aquí en el Espíritu que se da la verdadera
relación con el Dios que es Espíritu, es ahí que
se nace de nuevo, la semilla cae en ese lugar y
ocurre el misterio del nuevo nacimiento. El que
190
es nacido de la carne, carne es, pero el que es

nacido del Espíritu, Espíritu es, amados, ¿será
casualidad que el capítulo anterior, el 3, el señor
habla del nuevo nacimiento con Nicodemo? yo
creo que no, en Jesús no hay esas casualidades,
tres evangelios nos hablan de esta parábola del
sembrador, Marcos, Mateo, y Lucas; Juan no nos
dice nada, pero nos muestra la práctica de este
conocimiento de cómo ganar un alma para
Cristo, Juan es un libro que nos revela al padre, y
al hijo en todo su esplendor, el verbo encarnado,
¡aleluya, Gloria a su nombre! demos una
alabanza al rey, él es tan bueno, que le plació
enseñarnos estas cosas a nosotros, los
resultados fueron los esperados por el señor, es
que cuando tú haces lo que se te manda, los
resultados son positivos.
Verso 25 “le dijo la mujer: sé que ha de venir el
mesías, llamado el Cristo, cuando él venga nos
declarara todas las cosas”, ¡Aleluya, aleluya,
aleluya! Comparemos con Mateo 16: 13-17, “13
viniendo Jesús a la región de Cesárea de Filipo,
preguntó a sus discípulos diciendo: ¿quién dice
los hombres que es el hijo del hombre? 14 ellos
191
dijeron: unos, Juan el bautista, otros Elías, y

otros Jeremías, o alguno de los profetas”
Algunos llegan hasta verlo como un profeta, pero
él quiere que lo vean como el hijo de Dios, como
el mesías, no nos quedemos ahí mis amados,
metámonos más profundo, dentro busquemos
esa comunión con él para que el padre nos
revele quién es él, solo los que sepan quien es el
hijo, lo darán a conocer a los demás.
V15 “Él les dijo: y vosotros, ¿quién decís que soy
yo?” Es el interés realmente de Cristo, fue el
interés de Pablo cuando les escribió a los
Gálatas, y les dijo en Gálatas 3:1: “¡Oh Gálatas
insensatos! ¿quién os fascinó para no obedecer
a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesús el
Cristo fue ya presentado claramente entre
vosotros como crucificado”
Gálatas 4:19 “Hijitos míos, por quienes vuelvo a
sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea
formado en vosotros.”
Ese era el único interés de los apóstoles que las
personas conocieran quién era él y su propósito
al venir a la tierra, no era otro que dar a conocer
192
al señor, y que el que vea a Jesús pueda llegar al

padre, algo totalmente distinto a la presentación
de muchos hoy en día un evangelio como lo
llamo Pablo, maldito, un evangelio sin Cristo, sin
cruz, sin resurrección, ese evangelio de plata, de
prosperidad material, no salva a nadie, el
evangelio que salva, que cambia, es el del señor
Jesús, las buenas nuevas de salvación, el que
toca el Espíritu, y le da vida. Cambiemos ese
evangelio por lo que es el evangelio de Cristo
que da a conocer al mesías, como dice una vez
más Pablo en 1 corintios 2:1-5. Esto es el
evangelio, el poder de Dios y las almas se
convertirán al señor.
La Samaritana estaba lista para recibir el vino
nuevo, ya estaba preparada para el cambio, sus
argumentos religiosos cayeron por tierra, ya no
tenía más argumentos, ya estaba como la tierra
buena, para recibir la semilla de salvación; si
podemos notar en toda la vida ministerial, pocas
personas recibieron de parte del señor esta
semilla que el señor le dio a esta mujer, en el
versículo 26 “Jesús le dijo: yo soy el que habla
contigo”, Aleluya, aleluya, yo soy el mesías.
193
Una de las cosas que más atormentaba a los

judíos era esa, Lucas 22: 66 “cuando era de día,
se juntaron los ancianos del pueblo, los
principales sacerdotes, y los escribas, y le
trajeron al concilio, diciendo:” 67 “¿eres tú el
Cristo?, dínoslo, y les dijo: si os preguntare, no
me responderás, ni me soltareis” 69 “pero desde
ahora el hijo del hombre se sentará a la diestra
del poder de Dios”. 70 “dijeron todos luego: ¿eres
tú el hijo de Dios? y él les dijo: vosotros decís
que lo soy.” 71 “entonces ellos dijeron: ¿qué más
testimonio necesitamos? porque nosotros
mismos lo hemos oído de su boca”.
Eran tierra mala, toda la cúpula de los más
eruditos, no le creían, por eso Jesús nunca se los
dijo, el siempre trato de arar la tierra, pero ellos
nunca quisieron, a pesar de que Jesús usó el
poder para ver si a través de las manifestaciones,
creían, pero nada, solo los discípulos se dejaron
arar, crear los surcos necesarios para las
semillas (Juan 14: 6-14), él dijo: miren mis obras
que hago, es el padre que mora en mí, él las
hace para que crean que él me envió para
salvarlos.
194
Mateo 11: 20-24, las señales de Cristo son el

poder que él usaba para preparar la tierra, sacar
las piedras, los espinos, y sembrar al mesías en
los corazones, pero ellos se rehusaron a creer.
Juan 10: 34-41. Amados se dan cuenta que era
el debate más grande, ellos no creyeron en él
como mesías, jamás permitieron que esa semilla
fuera sembrada, nuestro trabajo como
sembradores del reino es ese, preparar la tierra
usando todas las herramientas disponibles, amor,
la ley de la conciencia, la ley de Moisés, el poder
del Espíritu Santo, el fruto del Espíritu Santo, la
creación domo prueba de la existencia de Dios,
nos corresponde a nosotros poder llevar a las
personas como Jesús llevó a la Samaritana a
desear al mesías, él preparó la tierra y fue lo
último que le dijo “yo soy el mesías”, de ahí para
adelante, esa semilla hizo que lo que los
discípulos no pudieron en principio, claro está,
traer toda la ciudad a los pies de Jesús, V 18-31.
Amados lo que ella recibió, eso dio ¿no será este
el mesías?
De qué más podía hablar, del salvador del
mundo, él es nuestra razón de ser.
195
Quiero aprovechar para, en amor, dar una

pequeña exhortación, que es más que persuadir
con fuerza a alguien, para que haga o deje de
hacer algo, yo deseo que no desperdicien el
tiempo en cosas que no tienen valor, en el reino,
y empecemos a hacer lo único que alegra al
cielo, que es cuando un alma se vuelve al señor,
por tanto, dejemos ya esa mentalidad mediocre;
si usted mira el versículo 6 de Juan 4, notara algo
muy interesante, “y estaba allí el pozo de Jacob,
entonces Jesús cansado del camino, se sentó así
junto al pozo, era la hora sexta”.
Él estaba cansado, con hambre, fatigado, era el
mediodía, tenía calor, estaba agotado de tanto
caminar, era humano a veces se quedaba
dormido en las embarcaciones, muchas veces no
tenía tiempo ni para comer, salía del culto e
inmediatamente iba para algún hogar a sanar a la
suegra de Pedro, no rehusó ir con Jairo a pesar
de la batalla en la región de los ganaderos,
pasaba noches enteras en oración, y al día
siguiente cumplía con su labor evangelística,
todo un ejemplo, mientras los apóstoles fueron a
buscar afanados comidas, él estaba pendiente de
196
otra comida, 21-34 “Entonces salieron de la

ciudad, y vinieron a él”, una multitud venía para
donde estaba el, hambrienta de escuchar al
mesías, la multitud de este tiempo tiene hambre y
sed de oír la palabra para que se cumpla lo dicho
por el profeta, Amós 8:11 “He aquí vienen días,
dice Jehová el señor, en los cuales enviaré
hambre a la tierra, no hambre de pan, ni sed de
agua, sino de oír la palabra de Jehová”, les digo
que esos días llegaron, ¿que estamos haciendo
nosotros?, ¿estaremos como los apóstoles?
Leemos en los versículos siguientes 31 “entre
tanto, los discípulos le rogaban, diciendo: Rabí,
come”. Así estamos muchos de nosotros,
comiendo y bebiendo, y las multitudes como
ovejas sin pastor (Mateo 9: 35-37), ellos rogando
a Cristo que comience, y Jesús nos manda en el
versículo 38 de Mateo 9, “rogad, pues, al señor
de la mies, que envíe obreros a su mies”.
Tristeza tiene mi corazón al pensar en una
multitud que viene en camino, evangelizados por
una mujer considerada una adúltera, que nadie
quería estar con ella, que tenía que sufrir el
ardiente sol del mediodía, despreciada por su
197
comunidad, sin paz, y sin esperanza. A esta

mujer, considerada la más mala de la ciudad, el
señor la abrazo con su gracia salvadora, y le dio
una semilla a un pueblo condenado por todos en
Israel, inclusive por sus apóstoles, Juan y Jacob,
queriendo aplicarle la ley del antiguo testamento
mal aplicada.
Esta mujer fue la que el señor usó, sin mucho
conocimiento del mesías, pero transformada por
el amor del señor, soltó su cántaro, se olvidó de
su necesidad física, y pensó en los que estaban
en las mismas condiciones que ella, mientras los
apóstoles, los ministros, estaban pensando en
sus propias necesidades, de verdad que
vergüenza, y dolor siente mi corazón, nosotros
pensando en carros, casas, viajes, y ropas, que
comprar, que comer, y nuestros vecinos
perdidos, que si mueren hoy, se pierden en el
infierno, por toda una eternidad, por favor, y
decimos que tenemos a Cristo en nuestros
corazones, vergüenza deberíamos tener, el que
tiene a Cristo, debe andar como él anduvo,
pensar como él pensaba. 1 Juan 2: 6 “El que dice
que permanece en él, debe andar como él
198
anduvo”, y ¿cómo anduvo el en este pasaje?,

miremos el versículo 34, “Jesús les dijo: mi
comida es que haga la voluntad del que me
envió, y que acabe su obra”.
Este es el pensar del señor, la samarita no tenía
el conocimiento de los apóstoles, pero si el
primer amor que muchos de nosotros hemos
perdido, ella soltó sus intereses y como Jesús
tenía otra misión, dar a conocer al mesías.
Amados despertemos de los sueños, es el
tiempo de empezar a recoger la siembra de
muchos años. Leamos los versículos 35-38.
Saben amados, Jesús no bautizó a ninguno de
samaria, pero si lo hizo Felipe, el grano cayó,
murió, y trajo muchos frutos, siempre la semilla
debe cumplir el propósito, el ciclo de la siembra
debe morir. Leamos 4: 26-29, y complementamos
con Juan 12: 24.
-
Quiero ir cerrando este taller con lo siguiente, la
semilla fue sembrada en los samaritanos, pero
fue después de su muerte que se recogieron
grandes cantidades de cosechas, cumpliéndose
199
lo dicho en Juan 12: 23-26, “23 Jesús les

respondió diciendo: Ha llegado la hora para que
el Hijo del Hombre sea glorificado. 24 de cierto,
de cierto os digo, que, si el grano de trigo no cae
en la tierra y muere, queda solo; pero si muere,
lleva mucho fruto. 25 el que ama su vida, la
perderá; y el que aborrece su vida en este
mundo, para vida eterna la guardará. 26 si
alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere,
allí también estará mi servidor. Si alguno me
sirviere, mi Padre le honrará”.
Amados hermanos consiervos del ministerio,
dejemos de servirnos a nosotros mismos,
muramos como murió la semilla principal de vida,
Cristo, y que nosotros también muramos a
nosotros mismos, después del aposento ellos
salieron a cumplir la gran comisión, ahora sí
estaban listos, la semilla cumplió su proceso,
Cristo murió, y resucito y les dijo esto en hechos
1:8 “Pero recibiréis poder cuando haya venido
sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis
testigo en Jerusalén, en toda judea, en samaria,
y hasta lo último de la tierra”.
200
Ahora sí estaban listos para sembrar la semilla

de vida, ya sabían cómo hacerlo y tenían todas
las armas necesarias para hacerlo, pregunto
¿estás listo amado para salir a cumplir lo que el
señor te mandó? o ¿todavía necesitas encerrarte
y orar por poder?
Termino leyendo los versículos 39 al 42 de Juan
4. “39 Y muchos de los samaritanos de aquella
ciudad creyeron en él por la palabra de la mujer,
que daba testimonio diciendo: Me dijo todo lo que
he hecho. 40 entonces vinieron los samaritanos a
él y le rogaron que se quedase con ellos; y se
quedó allí dos días. 41 y creyeron muchos más
por la palabra de él, 42 y decían a la mujer: Ya
no creemos solamente por tu dicho, porque
nosotros mismos hemos oído, y sabemos que
verdaderamente este es el Salvador del mundo,
el Cristo”.
Todos creyeron, esa es la parte inicial para ser
salvos, luego llegó Felipe Hechos 8: 4- 25, y
terminó lo que otro empezó, amados este es el
trabajo de un evangelista, dar a conocer el
evangelio, y enseñar a otras personas que sigan
su ejemplo.
201
Conclusión
Hemos terminado este material de cómo ganar

un alma para Cristo, quiero terminar con las
palabras de Pablo en 1 corintios 9: 13-18: “13
¿No sabéis que los que trabajan en las cosas
sagradas, comen del templo, y que los que sirven
al altar, del altar participan? 14 así también
ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio,
que vivan del evangelio.
15 pero yo de nada de esto me he aprovechado,
ni tampoco he escrito esto para que se haga así
conmigo; porque prefiero morir, antes que nadie
desvanezca esta mi gloria. 16 pues si anuncio el
evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque
me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no
anunciare el evangelio!
17 por lo cual, si lo hago de buena voluntad,
recompensa tendré; pero si de mala voluntad, la
comisión me ha sido encomendada. 18 ¿Cuál,
pues, es mi galardón? Que, predicando el
evangelio, presente gratuitamente el evangelio
202
de Cristo, para no abusar de mi derecho en el

evangelio”.
Amados hermanos Pablo resaltó lo siguiente,
verso 16, “Pues sí anuncio el evangelio, no
tengo por qué gloriarme; porque me es
impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no
anunciare el evangelio!”
203
Referencias Bibliográficas
- INTERNACO S.A. (2019). Descubre cómo las fases lunares pueden afectar
a los cultivos. 11 noviembre 2022, de Husqvarna. Sitio web:
https://tiendahusqvarna.com/blog/fases-lunares/
- María Franqueza. (2016). Tipos de semillas que existen para sembrar.
2023, enero 04, de Agroptima Blog. Sitio web:
https://www.agroptima.com/es/blog/tipos-de-semillas-para-sembrar/
- Camacho, A. N. (2019, junio 16). El poder que hay en una sola semilla.
Engormix. https://www.engormix.com/agricultura/articulos/poder-hay-sola-
semilla-t43803.htm
- Reina-Valera 1960. Valera, R. R. (2006). Santa Biblia, Reina-Valera (Rvr
1960). Grupo Nelson.
204
¡Todos a dar frutos!
205

Como Ser Un Ganador de Almas - Dainer Periñan 20

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Evangelista Dainer Periñan Castro

MINISTERIO EVANGELISTICO A DIOS SEA LA GLORIA

Cómo ser un ganador de almas

− Conociendo quien es Dios y desobedecer. 80

Mi nombre es Dainer Periñan Castro, evangelista

El ministerio evangelístico tiene gran importancia en el

11 y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros,

El ganar almas es un mandato de nuestro señor

por todo el mundo y predicad el evangelio a toda

haced discípulos a todas las

Por lo menos estas tres cosas veo yo, de pronto

Cómo ser un ganador de almas

Jesús dijo en Lucas 5:10: “pero Jesús dijo a

evangelismo, y veremos de fondo este tema tan

es donde veremos la práctica de todo lo que

Parábola del sembrador

Inmediatamente pasamos al versículo 14, y

Es necesario como sembrador conocer algunas

1.1. Todo sembrador debe tener semilla

1.2. Todo sembrador debe tener

1.3. No sembrarás tu campo con semillas

vegetales, nos dicen que la práctica de mezclar

Leamos nuevamente Lucas 9: 51-56. Al leer

así de hombres como de mujeres y de todos los

Lastimosamente muchos de ellos en el tiempo

(Mateo 23: 22), ellos conocían la ley, le

- 2 Timoteo 2: 14-15, “Recuérdales esto,

1.4. El sembrador debe saber el tiempo de

en el caso que hoy nos ocupa, a la agricultura

Por ello, no está de más saber cuáles son las

¿Y cómo podrás aprovechar la luna nueva?

que las semillas podrán absorber más

se recomienda realizar la siembra uno o dos

Y aunque todo pueda parecer positivo, no lo es.

rápido y a producir, como no, un mayor

alcanza el cenit a las 6 de la madrugada. El

● Es la fase lunar perfecta para llevar a

sembrar una cosa, cuando era el tiempo de

Primero estaba la oscuridad y después estaba la

comienzan, no con la luz ni con el sol, sino con la

mediciones en las que esos diferentes productos

V.18: “luego le dijo Jonatan: mañana es nueva

Cada luna nueva era el comienzo de un mes

Ezequiel 46:1, “Así a dicho Jehová el señor, la

puso negro como tela de cilicio, y la luna se

tierra, aguardando con paciencia hasta que

2. Podar- cortar las ramas superfluas de los

pensar en la importancia de saber el tiempo

a). Donde hay luto, puede ser una casa donde

¿Quieres ser sano? 7 Señor, le respondió el

su manto; y todos los que le tocaban quedaban

Todos estos lugares, os brindarán el tiempo y

La semilla o simiente, es la parte del vegetal,

2.1. Tipos de semilla

Existen muchos tipos de semillas, que cumplen muchas

Semillas criollas: Por definición, el término “criollo” quiere

Semillas de flores: Muy distinta en cuanto a formas, tamaño,

colores y texturas, desde el negro hasta una tonalidad color

Leyendo este artículo podemos entender que, en

Hay varias cosas que debemos tener en cuenta

2.2. El fruto que quiero recoger.

alguien dé paciencia, mi tema será la paciencia,

2.3. Debemos sembrar la semilla del