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El poder del nombre de Cristo

Pasaje bíblico:
Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
Marcos 16:17

Objetivo: Exponer a los presentes la importancia de conocer cuál es el poder y la autoridad que tiene el
nombre de Cristo Jesús, nuestro Señor.

Introducción:
Todos los que estamos aquí presentes, tenemos un nombre propio por medio del cual nos llaman y nos
identifican.

Este ministerio al que pertenecemos, también tiene un nombre, con el cual se identifica en medio de otros
ministerios.

La mayoría de empresas y negocios, tienen un nombre también, este nombre sirve para identificarse y
distinguirse en medio del mercado laboral.

Cuán importante es tener un nombre que genere un alto prestigio en nuestro medio, desde tiempos muy atrás,
el nombre a servido para identificar a alguien o a algo.

En el caso de nuestra fe, siendo cristianos evangélicos, y seguidores de Cristo Jesús, El nombre de nuestro
Señor y Salvador, es Jesús, en algunos pasajes aparece también el nombre Jesucristo, uniendo así 2
nombres de nuestro señor, Jesús y Cristo.

Hoy quiero hablarte sobre el poder y la autoridad que tiene el nombre de nuestro Señor Jesucristo, esto con el
fin de que cuando invoquemos este bello nombre, cosas especiales y poderosas sucedan en el lugar donde lo
estemos invocando.

Desarrollo del sermón:


Aprendamos que significa el vocablo nombre.

…. En mi nombre echarán fuera demonios…. Marcos 16:17

El vocablo nombre viene de la palabra griega ónoma y esta tiene 3 significados:

1. Identifica el Nombre propio de una persona u objeto. Por ejemplo, aquel pescador cuyo nombre era
Simón, al cual Jesús lo nombró Pedro.

2. El nombre también tiene que ver con la fama o Reputación de una persona o empresa, es decir, lo que se
dice acerca de una persona o de una empresa, sea malo o sea bueno, por buena fama o por mala fama.
Por ejemplo, al hablar de una persona, podríamos decir, que Pedro, fue un gran siervo de Jesucristo, los
escritos bíblicos nos dicen cómo fue usado poderosamente por el Señor.

3. Y el nombre también tiene que ver con títulos y dignidades que ciertas personas y empresas adquieren.
Por ejemplo, Pedro, se ganó el título de apóstol de Jesucristo.

Esto es lo que significa el vocablo nombre.

¿Qué significa el nombre Jesús?


Ahora aprendamos el significado del nombre Jesús.

El nombre Jesús, viene del vocablo griego iesous, y es una traducción del nombre hebreo Josué, que
significa, Jehová es salvación, es el salvador.
Entonces el nombre de Jesús, significa, salvación. Mateo 1:21,

Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. Mateo
1:21

Fue el ángel Gabriel el enviado de Dios para darle el nombre a José y a María de como abría de llamarse el
salvador del mundo. Lucas 2:21

Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre JESÚS, el cual le había sido puesto
por el ángel antes que fuese concebido. Lucas 2:21

Nuestro Señor y Salvador se llama, Jesús.

Leamos Marcos 6:14


Oyó el rey Herodes la fama de Jesús, porque su nombre se había hecho notorio; y dijo: Juan el Bautista
ha resucitado de los muertos, y por eso actúan en él estos poderes. Marcos 6:14

La reputación de Jesús era buena.

Para aquel entonces el nombre Jesús, era un nombre muy común en medio de la sociedad judía. Muchos
llevaban el nombre Jesús. Como hoy también hay algunas personas que los han llamado Jesús, quizás tu
conoces a alguien que hoy lleve el nombre Jesús.

Pero el nombre Jesús, en la persona de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, alcanzó una reputación y una
fama muy elevada en medio de aquella sociedad donde se desarrolló el ministerio de Cristo.

Antes de que surgiera Cristo, el nombre Jesús era común y corriente en la sociedad, pero durante el ministerio
de Cristo, ese nombre alcanzo una autoridad muy grande que hasta ahora y por siempre durara.

Leamos Filipenses 2:5-11


Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, Filipenses 2:5

el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, Filipenses 2:6

sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; Filipenses 2:7

y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte
de cruz. Filipenses 2:8

Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, Filipenses
2:9

para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo
de la tierra; Filipenses 2:10

y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. Filipenses 2:11

El servicio y la obediencia que Jesús llevó a cabo en esta tierra durante su ministerio, hizo que Dios su Padre
lo exaltara a la posición mas elevada en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra.

Dios Padre, también dio a nuestro Señor Jesucristo un NOMBRE, SOBRE TODO NOMBRE, el nombre de
Jesús, esta por encima de todo nombre de esta tierra.

El nombre de Jesús, es respetado y valorado en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra.


El nombre de Cristo, tiene poder y autoridad.
El nombre Jesús representa el titulo y la dignidad del Señor.

El poder y autoridad del nombre de Cristo.


Observemos como trabaja poderosamente en nuestro medio y diario vivir el nombre de Cristo Jesús nuestro
Señor y Salvador, cada vez que lo invocamos, en una oración, o en una canción.

Nosotros al ser cristianos y seguidores de Cristo, al ministrar en la obra de Dios, no operamos en nuestro
nombre, sino que operamos en el nombre de Cristo.

Quizás tu nombre y mi nombre, no sean reconocidos en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra, como para
operar grandes milagros y maravillas, pero cada vez que estamos ministrando u orando y lo hacemos en el
nombre de Jesús, las cosas cambian, y nuestra oración y acción tienen peso, porque estamos operando en el
nombre de Cristo Jesús.

Tenemos la credencial del nombre de Cristo para operar, esa credencial nos vuelve implacables ante el reino
de las tinieblas para echar fuera demonios, y ante los espíritus de enfermedad para curarlas y expulsarlas del
cuerpo de nuestros hermanos.

El nombre de Jesús es eficaz para:

1. Para echar fuera demonios.


Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
Marcos 16:17

Los demonios tiemblan y se sujetan ante el nombre de Cristo, no soportan oír el nombre de Cristo, salen
expulsados inmediatamente, cuando un ministro de Dios los reprende en el nombre de Jesús.

Es por ello que ante cualquier situación que se presente en tu vida o ministerio, no dudes en orar para echar
fuera los demonios que estén atormentando la vida de alguna persona.

No dudes, no temas, ya que no vas en tu nombre y en tu fuerza, vas en el nombre de Jesús, eso es mas que
suficiente para echar fuera demonios.

Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los
echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia. Mateo 10:1

Volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios se nos sujetan en tu nombre. Lucas
10:17

Y les dijo: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo. Lucas 10:18

He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os
dañará. Lucas 10:19

Pero no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres están
escritos en los cielos. Lucas 10:20

Al creer en Jesucristo, como nuestro Señor y Salvador, somos portadores de esa credencial o autoridad para
echar fuera demonios en el nombre de Jesús.

2. Para sanar toda enfermedad.


Otra área donde se manifiesta el poder y la autoridad del nombre de Jesús, es la sanidad de enfermos, al orar
en el nombre de Jesús por algún enfermo, este tiene que sanar inmediatamente, ya que la enfermedad
también se sujeta bajo la autoridad del nombre de Jesús.
Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración. Hechos 3:1

Y era traído un hombre cojo de nacimiento, a quien ponían cada día a la puerta del templo que se llama la
Hermosa, para que pidiese limosna de los que entraban en el templo. Hechos 3:2

Este, cuando vio a Pedro y a Juan que iban a entrar en el templo, les rogaba que le diesen limosna. Hechos
3:3

Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos. Hechos 3:4

Entonces él les estuvo atento, esperando recibir de ellos algo. Hechos 3:5

Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret,
levántate y anda. Hechos 3:6

Y tomándole por la mano derecha le levantó; y al momento se le afirmaron los pies y tobillos; Hechos 3:7

y saltando, se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando, y alabando a Dios.
Hechos 3:8

Y todo el pueblo le vio andar y alabar a Dios. Hechos 3:9

Y le reconocían que era el que se sentaba a pedir limosna a la puerta del templo, la Hermosa; y se llenaron
de asombro y espanto por lo que le había sucedido. Hechos 3:10

Puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo, de qué manera éste haya
sido sanado, Hechos 4:9

sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a
quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de los muertos, por él este hombre está en vuestra
presencia sano. Hechos 4:10

3. Para pedir aquellas cosas que necesitemos a Dios Padre.


Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Juan
14:13

Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré. Juan 14:14

4. Para tener vida.


Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo,
tengáis vida en su nombre. Juan 20:31

Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que
podamos ser salvos. Hechos 4:12

5. Señales y prodigios
mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu
santo Hijo Jesús. Hechos 4:30

Aplicaciones:
a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos con todos
los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro: 1
Corintios 1:2
Conclusiones:

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