La historia de los faraones se enmarca en el antiguo Egipto, una de las civilizaciones más

fascinantes de la historia. Los faraones eran los gobernantes supremos de Egipto y eran
considerados tanto líderes políticos como figuras religiosas. Durante más de 3,000 años, desde
aproximadamente 3100 a.C. hasta el 30 a.C., los faraones gobernaron Egipto, y su historia se
divide en varias dinastías y períodos significativos.

Aquí hay un resumen de algunos de los faraones más destacados y períodos clave en la historia de
los faraones:

Dinastía Arcaica (c. 3100-2686 a.C.): Menes, también conocido como Narmer, se cree que unificó
el Alto y Bajo Egipto, fundando la primera dinastía y convirtiéndose en el primer faraón histórico.

Imperio Antiguo (c. 2686-2181 a.C.): Durante esta época, se construyeron las pirámides más
icónicas, como la Gran Pirámide de Giza, bajo faraones como Keops, Kefrén y Micerinos.

Primer Período Intermedio (c. 2181-2040 a.C.): Hubo una fragmentación del poder central y una
lucha por el control, lo que resultó en un período de caos político.

Imperio Medio (c. 2040-1640 a.C.): Los faraones restauraron la estabilidad y el control
centralizado. Se enfocaron en proyectos de construcción y mejoras en la infraestructura.

Segundo Período Intermedio (c. 1640-1532 a.C.): Otra vez hubo un debilitamiento del poder
central y una invasión de hicsos, un grupo de origen asiático.

Imperio Nuevo (c. 1532-1070 a.C.): Bajo faraones como Tutmosis III, Amenhotep III y Ramsés II,
Egipto se expandió y estableció imperios.

Tercer Período Intermedio (c. 1070-712 a.C.): Egipto experimentó una vez más divisiones internas
y conflictos.

Periodo Tardío (c. 712-332 a.C.): Durante este tiempo, Egipto fue gobernado por dinastías libias y
persas, hasta la llegada de Alejandro Magno.
Época Helenística (c. 332-30 a.C.): Tras la conquista de Alejandro Magno, Egipto fue gobernado por
la dinastía ptolemaica, que incluía a Cleopatra VII. Finalmente, Egipto cayó bajo el dominio romano
después de la derrota de Cleopatra.