3.

El lenguaje del video

Características generales del video

Las cámaras de video fueron desarrolladas principalmente durante las décadas de los
años 70 y 80. El principio fundamental de la cámara de video es el de grabar las imágenes
en movimiento en una cinta magnética o digital, lo cual permite su reproducción ya sea en
una grabadora especial (VHS, u otro sistema) o en una computadora. Los primeros
modelos de video fueron desarrollados básicamente para televisión y tenían un costo muy
alto. Años más tarde empezaron a salir las cámaras para el consumidor común y corriente,
las llamadas cámaras de video “casero”.

El principio de funcionamiento de ambos sistemas es el mismo, aunque su costo es

realmente distinto. Las cámaras que emplean los canales de televisión son sumamente
costosas y por lo general la mayoría de las personas no tenemos acceso a utilizar un
complejo equipo de ese tipo. Por otro lado, las cámaras de consumo o de tipo “casero” son
relativamente más baratas (cada vez es más bajo el precio de algunos modelos) y su
funcionamiento es muy similar al de las profesionales. Para nuestros videos partiremos de
que cualquier cámara – grande, chica, nueva, vieja, compleja o simple – nos puede servir
para contar nuestras historias. La mejor cámara del mercado no garantiza un buen video y
por otro lado una cámara más “vieja” no es impedimento alguno para realizar un buen
trabajo. Lo que importa es la creatividad que hay detrás de la cámara que escojamos o
tengamos a disposición.

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Imagen # 7: filmar videos con cámara del teléfono celular

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 Teoría y ABC de la imagen y el video

“Trabajando” con la cámara

La cámara que utilizaremos debe ser manejada respetando ciertas normas que
permitirán obtener imágenes entendibles y agradables al ojo humano. Con un poco de práctica
obtendremos imágenes estéticas y útiles para nuestro proyecto. Nadie nace siendo un buen
camarógrafo, eso se aprende y mejora con la práctica. A continuación revisaremos algunas
recomendaciones fundamentales.

Sosteniendo la cámara

Para obtener imágenes estables – así se evitará el molestoso movimiento agitado –

hace falta desarrollar confianza y control en el uso de la cámara de video. Se puede optar por
dos tipos de maneras de sostener la cámara. La cámara podrá estar sobre un trípode o
sostenida por las manos de quien la opere. Dependiendo del proyecto y del estilo que se desee
dar, ambas formas son válidas. Aunque las tomas con trípode serán seguramente algo más
estables, los movimientos con las manos – siempre y cuando sean sutiles y armoniosos –
pueden dar un efecto interesante a lo filmado.

Dependiendo del tema, del guión y del estilo visual que se desee obtener,
trabajaremos con la cámara en trípode o sostenida entre las manos.

Trabajo con trípode

La cámara sujetada sobre un trípode nos da cierta seguridad y estabilidad. Aún así, nos
quita movilidad, por lo que será recomendable el empleo del trípode para situaciones
controladas (escenas actuadas, entrevistas, tomas de paisajes, etc.), mientras que para ciertas
escenas de movimiento (tomas de animales en movimiento, tomas desde un carro o bote,
tomas mientras se camina o corre, etc.) es recomendable que sostengamos la cámara con la
mano. Para ver los diferentes movimientos de cámara ver capítulo 7.

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 Imagen # 8: cámara de video en trípode

Imagen # 9: cámara de video en trípode

Cámara en mano

La cámara debe sostenerse preferiblemente con ambas manos – eso le da más estabilidad a la
imagen - ya sea frente a la cara o sosteniéndola frente al cuerpo. Con ambas manos podremos
entonces realizar los diferentes movimientos de cámara (ver capítulo 7).

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Imagen # 10: cámara de video sostenida por las manos (opción correcta e incorrecta)

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