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VOLC-SG: Sesión General Volcanología

Evolución deposicional y geoquímica del evento calderico del Paleoceno-Eoceno en Atacama

Fabián Torres1, Marianela Sepúlveda1, Natalia Rodríguez1, Juan Díaz-Alvarado1, Eugenio Aragón2.
(1) Departamento de Geología, Facultad de Ingeniería, Universidad de Atacama
(2) Universidad Nacional de la Plata, Argentina

Introduccion

La pre-cordillera de la región de Atacama guarda el registro de una espectacular historia evolutiva donde los procesos de
extensión y acortamiento cortical han afectado a las rocas que se han emplazado y depositado en esta área. El conjunto de
unidades volcánicas e intrusivas de edad Terciario inferior, definidas en el sector precordillerano de la región de Atacama entre
los 25°30´y 28°30´S, presentan relaciones de contactos y asociaciones de facies tales que han sido interpretadas como parte de
complejos volcano-plutónicos, cuyo emplazamiento ocurrió durante el ciclo evolutivo de grandes calderas de colapso (Rivera y
Mpodozis, 1994; Rivera y Falcón, 2000). Las calderas representan el final de un ciclo evolutivo de cuencas extensionales y sus
productos (edificios y depósitos volcánicos) conforman parte del relleno de estas cuencas. Estudios realizados en las últimas
décadas en este sector han permitido identificar una megaestructura volcano-plutónica denominada la megacaldera Carrizalillo
y que representa la fase inicial del ciclo de formación de calderas Paleoceno-Eoceno inferior y la culminación de un evento de
emplazamiento de cuerpos de magmas de dimensiones batolíticas. Las Calderas El Durazno y Bellavista corresponden a dos de
las cuatro calderas anidadas en la megacaldera Carrizalillo y suponen un evento de resurgencia en etapas más tardías, dónde la
cámara magmática sub-caldera evolucionó hacia cámaras de menor dimensión y que posteriormente colapsó.  

Resultados

Levantamiento geológico y petrografía Las calderas El Durazno y Bellavista presentan una excelente preservación de sus
afloramientos y de las fracturas anulares y transversales que canalizaron la efusión de material magmático, está condición
facilita el estudio que nos conduce a la determinación de los eventos eruptivos asociados a la formación de estas calderas y de
las condiciones físico-químicas de la cámara magmática asociada. A partir del estudio cartográfico, petrográfico, geoquímico
y estratigráficose pudo conocer con mayor precisión la distribución y composición de los diferentes depósitos volcánicos que
conforman la geología de las calderas. Si bien existen diferencias en los productos volcánicos de ambas calderas, se pueden
reconocer las siguientes unidades geológicas: - El basamento de ambas calderas está constituido por lavas andesíticas compuestas
por una masa fundamental (50%) fenocristales de Pl (35%), Px (10%), Hbl (4%) y minerales opacos (1%) que corresponde a Lavas
de Sierra La dichosa de edad Cretácico inferior (Arévalo, 1994; Iriarte et al., 1999). - Las facies de bordes están caracterizadas
por presentar un alto buzamiento (60º) hacia el interior de la caldera. Constituidas fundamentalmente por depósitos lensoidales
de megabrechas con bloques de hasta varios metros de diámetro de composición andesítica en la parte norte de la caldera
El Durazno. La zona suroeste corresponde a una secuencia de brechas, lavas de composición andesítica fundamentalmente
y flujos ignimbríticos. Las facies de borde de la caldera Bellavista presentan brechas de colapso con intercalaciones de flujos
ignimbríticos con estructuras de soldamiento, líticos (20-10%) de composición andesítica y líticos de dioritas y aproximadamente
entre un 20 a 35% de cristales de Or, Pl, Hbl y Bt. - Las facies de intracaldera de la caldera El Durazno están constituidas por dos
sub-unidades principales. A muro, los depósitos están conformados por flujos de ignimbrítas soldadas de color rosado, sin líticos
mayores al cm de diámetro y empobrecida en cristales. Presentan un mayor espesor en el borde occidental de la caldera. La
segunda sub-unidad ignimbrítica predomina en la parte noroccidental de la caldera y se caracteriza por ser tobas poco soldadas
con gran cantidad de líticos y fragmentos pumíceos (Figura 1e). Existe un nivel de vitrófiro con una potencia de aproximadamente
15 m, el cual se intercala entre las 2 unidades piroclásticas principales. Las unidades de intracaldera de la caldera Bellavista
expone una secuencia de flujos ignimbríticos con intercalaciones menores de flujos de lavas dacíticas. Tales secuencias se
encuentran inclinadas 10º al SE. De base a techo la secuencia corresponde a un flujo de 70 m de lavas dacíticas, suprayaciendo se
encuentra un depósito de flujo ignimbrítico con estructuras de fiames fuertemente alterados, a techo se deposita una ignimbríta
soldada y el último flujo corresponde a un depósito ignimbrítico totalmente alterado (Figura 1f, g). - Las unidades post-colapso
están constituidas por depósitos lacustres y lavas post-colapso, de composición fundamentalmente andesítica. Las lavas post-
colapso presentan una distribución irregular a techo de las demás unidades, preservándose algunos conductos volcánicos (cono
eruptivo) al interior de la caldera El Durazno. Geoquímica Se analizaron cinco muestras de la caldera El Durazno y siete de la
caldera Bellavista, mediante el método ICP-MS, se ha incluido además analisis de las muestras recogidas en ignimbrítas y lavas
de la megacaldera Carrizalillo. Los diagramas Harker evidencian un comportamiento similar para elementos como el Na2O y K2O
(comportándose como elementos incompatibles) en las calderas el Durazno y Bellavista, sin embargo estos valores se mantienen
casi constantes a medida que aumenta el sílice en la Megacaldera Carrizalillo. La clasificación TAS señala que todas las muestras

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caen dentro del campo de la serie magmática calcoalcalina. Los elementos trazas fueron estudiados utilizando diagrama de
tierras raras normalizado a condrito (Nakamura, 1995), y diagrama multielemental normalizado a condrito (Thompson, 1982).
Según el diagrama de distribución de tierras raras el perfil observado es similar en las tres calderas, siendo este enriquecido en
LREE en comparación con HREE con altos valores de las relaciones LREE/HREE (La/Yb= 22.8 – 5.8) y con anomalía negativa de EU.
Las rocas de la Megacaldera Carrizalillo presentan un ligero enriquecimiento en tierras raras pesadas (HREE) en comparación a
las rocas de la caldera El durazno. Las ignimbritas de la caldera Bellavista estan ligeramente enriquecidas en MREE y HREE (Figura
1.b, c, d). En el caso del diagrama multielemental se observó un enriquecimiento selectivo de elementos tales como Ba, Rb, Th,
además existe una anomalía negativa para los elementos Nb y Sr. Ambos grupos de muestras, tanto de la megacaldera Carrizalillo
cómo las calderas El Durazno y Bellavista presentan anomalías negativas de europio (Eu/Eu*; dónde Eu*=(Sm/Gd) /2). En base
a la utilización de elementos trazas como el Th, Yb, Ta, y Co, los cuales tienen un carácter inmóvil ante los procesos secundarios
de bajo grado, se realizaron diagramas de discriminación tectónica. Según los diagramas de discriminación de Schandl y Gorton
(2002) (Th/Yb vs Ta/Yb; Th/Ta vs Yb), las calderas se formaron bajo un ambiente de margen continental activo. Por otra parte, el
diagrama de Hastie et al. (2007) de Th vs Co permite identificar que las muestras tanto de la caldera El Durazno y Bellavista como
de la megacaldera se proyectan en el campo de dacita-riolitas de una serie magmática calcoalcalina alta en potasio (shoshonítica)
(Figura 1. a). Algunas de las muestras de la caldera Bellavista escapan al campo de andesitas y basaltos.  

Discusion y Conclusiones

La historia evolutiva del volcanismo asociado a la calderas puede explicarse en cuatro etapas: 1) Erupción pre-colapso: el inicio de
la actividad magmática a través de la fractura anular de las calderas; 2) Colapso : depositación de potentes series de ignimbritas
y brechas de colapso; 3) Post-colapso 1: lavas post-colapso y depósitos sedimentarios lacustres que se depositaron al interior de
la caldera durante una pausa en la actividad volcánica; 4) Post-colapso 2: resurgencia, con intrusión de domos y diques riolíticos
que afloran principalmente en el interior de la caldera, cortando las unidades de intracaldera. El emplazamiento coincide con
un sistema de fallas de carácter regional con orientación N15E con cinemática dextral normal. La actividad eruptiva se produjo
inicialmente en los bordes de las calderas a través de la fractura anular, sin embargo, la presencia de conductos eruptivos en la
caldera El Durazno (cono volcánico) al interior de la caldera es evidencia que la actividad eruptiva también se desarrolló en el
interior de la Caldera. La similitud entre las composiciones geoquímica de las calderas implicaría una misma cámara magmática
que habría estado constantemente siendo recargada con nuevos pulsos de una misma fuente. Las calderas Bellavista y el Durazno
serían derivadas de la gran cámara magmática que previamente habría formado la megacaldera Carrizalillo y la cual evolucionaría
a cámaras de menor tamaño.  

Referencias

Arévalo, C. 1994. La cuenca hornitos: un hemigraben extensional del Cretácico superior-Paleoceno inferior en la Precordillera
de Copiapo. VII Congreso geológico Chileno, Actas Volumen I, p. 397-401. Hastie, A.R., Kerr, A.C., Pearce, J.A, and Mitchell, S.F.
2007. Classifcation of altered volcanic island arc rocks  using immobile trace elements: development of the Th- Co discrimination
diagram. Journal of Petrology, 48: 2341- 2357. Iriarte, S., Arévalo, C., Mpodozis, C. 1999. Hoja La Guardia, Región de Atacama.
Servicio Nacional de Geología y Minería, Mapas Geológicos No. 13, escala 1:100.000, Santiago. Nakamura N. 1974. Determination
of REE, Ba, Fe, Mg, Na, and K in carbonaceous and ordinary chondrites. Geochimica et Cosmochimica  Acta 38, p 757-775. Rivera, O.,
Mpodozis, C. 1994. La megacaldera Carrizalillo y sus calderas anidadas: Volcanismo sinextensional Cretácico superior-Terciario
inferior en la Precordillera de Copiapó. VII Congreso Geológico Chileno, Actas Volumen I: 149-153. Rivera, O.M., Falcón, M.F., 2000.
Calderas tipo colapso-resurgente del Terciario inferior en la pre-cordillera de la Región de Atacama: emplazamiento de complejos
volcano-plutonicos en las cuencas volcano-tectonicas extensionales Hornitos e Indio Muerto. IX Congreso Geológico Chileno,
Actas Volumen 2, p. 67-71. Schandl, E. S. & Gorton, M. P. 2002. Application of high field strength elements to discriminate tectonic
settings in VMS environments. Economic Geology 97,629–642. Thompson, R. 1982. Magmatism Of the British Tertiary Volcanic
province. Scot. J. Geol. 18(4). p 9–107.

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Figura 1. a) Diagrama de Hastie et al. (2007) de Th vs Co. b), c) y d) diagramas REE normalizado a condrito (Nakamura, 1995) donde
en b) se plotean los valores de REE de las muestras de ignimbrítas y lavas post-colapso de las calderas Bellavista, El Durazno y
la Megacaldera carrizalillo, en c) se visualizan los patrones de las ignimbrítas de intracaldera de Bellavista y El Durazno, mientras
que en c) se puede observar el comportamiento de REE para lavas post-colapso de las calderas Bellavista y El Durazno, lavas de
la Megacaldera Carrizalillo y el plutón Cabeza de Vaca. e), f) y g) corresponde a imágenes de SEM de ignimbrítas de El Durazno y
Bellavista mostrando textura eutaxítica y los piroclastos que las componen: poméz (Pmz), Fiame (Fm) y litoclastos (Lc).

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