Educación Física en relación a las Técnicas

Corporales.

Agustín Martinelli 4.973.387-4

Ramiro Pelaez 4.958.804-1

Guillermo Almeida Ortiz 4.676.280-4

Práctico 3

Profesores: Ignacio Saralegui

Carla Piedeferri
Flavia Martinelli
Macarena Picos

Paysandú 2022
Marcel Mauss, entiende a las técnicas corporales como “la forma en que los hombres, sociedad
por sociedad, hacen uso de su cuerpo en una forma tradicional.” (Mauss, 1936). A partir de este
pensamiento se entiende que cada acción es un fenómeno socio-cultural. Ya que dentro de cada
“etnia”, nación, o sociedad, las acciones pueden variar en las formas en que se ejecutan. Es
decir, no existe una única técnica global para todo. Las formas de ejecutar las técnicas en cada
sociedad dependerán de la cultura, y dentro de ella las costumbres intrínsecas de cada sociedad.
(Mauss, 1936), expone ejemplos, analizando acciones como el andar o nadar, dichas técnicas
han sufrido modificaciones en base a su forma de enseñanza. Según (Mauss, 1936), denomina
dichas acciones como “habitus”, menciona que, "Estos hábitos varían no sólo con los individuos
y sus imitaciones, sino sobre todo con las sociedades, la educación, las reglas de urbanidad y la
moda." (Mauss, 1936).
A su vez cuando hablamos de técnica nos referimos a las relaciones existentes entre lo
biológico, lo social y psicológico, mediante la adquisición de diferentes hábitos, es decir las
diversas costumbres o tradiciones que se practicaban en sociedad, las cuales de acuerdo al
transcurso del tiempo fueron adquiriendo un carácter universal. Este fenómeno biopsicosocial,
a lo largo del tiempo fue desarrollando un perfeccionamiento, modificación, o extensión.
Dependiendo de la región es el procedimiento o fenómeno que se podía observar o hasta incluso
imitar.
Mauss menciona que es posible reconocer las “prácticas corporales”, nociones, etnias, culturas,
etc. de las personas con el simple hecho de observarlos llevando a cabo actividades y/o acciones
cotidianas, como lo pueden ser el andar, correr, comer, saltar, entre otras.
Siguiendo esta idea, podemos visualizar un ejemplo claro; que sería el caminar de una persona
que práctica la danza, este gesto es facilmente reconocible, ya que esta camina utilizando una
postura esbelta y con cierto grado de delicadeza, en cada uno de sus movimientos. Todo esto se
debe a las técnicas corporales (y en cierto grado a la educación corporal) que le puede
proporcionar una práctica como la danza. Es decir, la técnica corporal aprendida y ejecutada en
la danza, se exterioriza, pasando a formar parte de actividades de la vida cotidiana como el
caminar.
En base a esta temática, (Galimberti, 2001) expresa que existe una “identidad” de los
individuos, precisamente sobre la capacidad de reconocer la identidad de una persona leyendo
sus acciones o ejecuciones motrices.
Continuando con el análisis, se puede observar como algunas técnicas se vieron adoptadas por
otras regiones tanto de forma colectiva como individual mediante la imitación, esto conlleva a

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comprender que la sociedad, la educación, las reglas de urbanidad y moda van de la mano con
la imitación o repetición del fenómeno o hecho en cuestión.
Diferentes resultados y logros obedecen a una determinada técnica de imitación, este ejercicio
infiere de forma directa e indirectamente a las diferentes formas de transmisión de
educación. “El adulto imita los actos que han resultado certeros y que ha visto realizar con éxito
por las personas en quien tiene confianza y que tienen una autoridad sobre él.” (Mauss, 1936).
Esto supone que el niño en su etapa de formación adopta de forma ordenada, autorizada, y
probada, una serie de movimientos, comportamientos y hábitos, que lo vinculan con la persona
imitadora, y que luego logrará poner en práctica. Mediante esto el niño alcanza una preparación
para la vida adulta y por ende una introducción a la vida en sociedad, ya sea con la supervisión
del adulto o con la ayuda de este, a este hecho se lo puede definir como “imitación prestigiosa”,
este elemento social, permite desarrollar aún más la dimensión psicológica como biológica,
necesarias para la obtención de nuevas configuraciones cognitivas, mediante un acto tradicional
y eficaz.
Si hablamos de eficacia simbólica nos referimos a aquellos actos o prácticas que realizamos en
ocasiones especiales, ya sea como una cábala o ritual, creencia o tradición. (Mauss, 1936),
menciona que la eficacia no solamente es física sino que también oral, donde pueden existir
ciertos aspectos mágicos, los cuales se ven reflejados en la realización de rituales determinados,
donde lo psicofisiológico y lo primitivo adquiere especial importancia. Tal es el caso de algunos
pueblos australianos, los cuales realizaban una forma de ritual previa a la caza y a la carrera.
Logrando una especial y particular mentalización antes de realizar el acto en cuestión.
Las sociedades y las diferentes culturas, son las encargadas de concretar y difundir las llamadas
técnicas corporales. Basado en la “forma natural” de ejecutar un determinado acto, se puede
identificar una estructura y una forma de intervención, dejando en segundo plano el factor
psicológico o reflexivo del fenómeno en cuestión.
El hombre logra adquirir su totalidad por medio de diversos factores ya sea físico o mecánico,
psicológico o sociológico y fisiológico o anatómico, estos factores conllevan a la estructuración
de una determinada técnica corporal y por intermedio de ella se logra encontrar una totalidad
del ser, lo que Mauss define como “hombre total” (Mauss, 1936).
Mauss, considera al “hecho social total”, como un factor psicoanalítico, ósea reflexiona a partir
de un hecho específico, este refleja su complejidad y describe las relaciones existentes que se
manifiestan en sociedad. A partir de la organización del movimiento corporal, surge un
engranaje psicológico, que no es otra cosa que el análisis existente entre lo social y biológico,

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observando la causa del hecho psicológico, su momento de creación y las diferentes reformas
que se efectuaron.
Estas últimas consideraciones contribuyen a aspectos educativos o particulares de la vida en
sociedad, relacionándose principalmente con la enseñanza de dichas técnicas, la misma se da
mediante la “educación física” tanto de hombres y mujeres, y que abarcan todas las edades
(Mauss, 1936). Esto determina a la educación como un factor de importancia que presta mayor
interés a estimular la motricidad tanto de los miembros superiores e inferiores, a tempranas
edades.
(Mauss, 1936), considera necesario clasificar las técnicas corporales según determinados
indicadores, como son la diferenciación de los sexos, por edades, en relación con el rendimiento
y a la transmisión de dichas técnicas. Una diferenciación entre sexos, refiere a la educación que
se obtiene mediante diferentes estructuras, una para hombres y otra para mujeres. Entendiendo
que quizás existen técnicas que pueden resultar más acordes y eficaces, para el sexo femenino,
y viceversa. Según (Mauss, 1936), la edad como factor biológico ocasiona una modificación en
los tipos de técnicas o acciones motoras, el cambio se produce en relación al crecimiento de los
individuos, un ejemplo claro se visualiza en la niñez, diferentes acciones o movimientos se
realizan con mayor facilidad por el niño, en edades más tempranas, como el colocarse en
cuclillas, acción que edades más adultas se deja de practicar y por ende se puede perder la
“técnica”.
Considerando la clasificación según el rendimiento, este se explica netamente en la
productividad del individuo, en vínculo con el adiestramiento, entendido como la práctica y
aprendizaje de diferentes técnicas. De las cuales se busca mayor efectividad en sus ejecuciones.

Conclusión
A modo de síntesis, (Galimberti, 2001) manifiesta que en la naturaleza del hombre se puede ver
toda su vulnerabilidad ante el efecto que produce una técnica, como bien se comprende el
hombre en primer orden encomendó sus manos para de alguna forma mejorar sus condiciones
naturales. Luego de esto el hombre pasó a ser un aparato para desarrollar la técnica propiamente
dicha, manteniendo unas reglas de racionalidad, basadas en criterios de funcionalidad y
eficiencia, mediante adaptaciones al medio y a las propias exigencias del hombre.

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A su vez la técnica promueve una parte esencial del hombre, una conducta, una respuesta
cognitiva y enseñada mediante sistemas de socialización, y diferentes condicionamientos
típicos de una cultura occidental.
A partir del pensamiento de (Daolio, 1995), cualquier acto humano es un acto técnico,
transmitido tradicionalmente de generación en generación, a partir de una eficacia que en algún
nivel atiende a las expectativas del grupo dejando un valor simbólico, en otras palabras
cualquier gesto es una técnica corporal, porque más bien es una técnica cultural.
Si hablamos de Educación Física, esta reproduce una comprensión de un ámbito cultural, que
significa una influencia o una intervención social sobre el físico y toda la integridad del hombre.
Razón por la cual la técnica puede definirse como un bien cultural, es decir, algo que trasciende
en el tiempo de sociedad en sociedad.
A modo de reflexión, se puede decir que la educación física debe considerarse como un objeto
o medio, de dominio para enseñar una técnica, atendiendo los diferentes contextos
socioculturales que se presentan en las prácticas y en la composición de los grupos.

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Referencias bibliográficas
Daolio, J. (1995). Educação a partir do movimento . revista paulista de Educação fisica , 40-44.

Galimberti, U. (2001). Psiché y Techné. revista Artefacto, 1-15.

Mauss, M. (15 de abril de 1936). Tecnicas y Movimientos Corporales. Journal de Psychologie , págs.
336-356.