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Año
XXXIII
N.° 57
Julio de 2023
Bogotá, D. C.
CARTA DE PSICOLOGÍA
ISSN 1657-9569
María Idaly Barreto Galeano
Directora
Ever José López Cantero
Editor
Comité editorial
María Idaly Barreto Galeano
Iván Felipe Medina Arboleda
Adriana Marcela Manrique Torres
Carlos Antonio Pardo Adames
John Fredy Guzmán
Coordinación editorial
Juana Les E.
Corrección de estilo
Andrés Mauricio Enciso Betancourt
Diagramación
Xpress Estudio Gráfico y Digital S.A.S.
Impresión
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
Avenida Caracas N.º 46-22,
Casa de Psicología, bloque K
Teléfono: (601) 443 3700
Exts. 5050 y 5052
Bogotá, D. C., Colombia
psicologia@ucatolica.edu.co
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CARTA DE PSICOLOGÍA
Editorial
Especialización en Psicología
Clínica: uno de los mejores
programas de la Facultad
de Psicología
Sandra Jimena Perdomo Escobar1
Coordinadora de la Especialización en Psicología Clínica
El Programa de Especialización en Psicología Clínica fue creado
el 27 de marzo de 2001 mediante el Acuerdo de Consejo Superior
N.° 84 y comenzó su funcionamiento ese mismo año.
Durante estos 21 años, el Programa ha contado con el apoyo de
cuatro directores, en orden de asignación: profesora Nohelia Hewitt
Ramírez, profesor Diego Castrillón, profesora María Margarita Rozo
Sánchez y profesora Sandra Jimena Perdomo Escobar (coordina-
dora del Programa desde 2016 hasta la fecha), quienes estuvieron
a cargo, en su momento, de las tres reformas curriculares que se
han llevado a cabo: la primera en el 2007, la segunda en el 2012
y la tercera en el 2019. Dichas reformas se basaron en las necesi-
dades de actualización, las evidencias a partir del conocimiento
del estado del arte de la Psicología Clínica, la normativa vigente
y el resultado de los constantes procesos de autoevaluación del
Programa.
En el 2017 se realizó un análisis de currículo comparado que fue
actualizado en el 2021, en el que se encontraron 15 programas na-
cionales, 9 programas internacionales de especialización y 10 pro-
gramas nacionales e internacionales de maestría en el área clínica.
De los programas encontrados a nivel nacional e internacional, 12 de
ellos corresponden al nivel de especialización en Psicología Clínica.
1 Coordinadora de la Especialización en Psicología Clínica, Universidad Católica
de Colombia. Correo electrónico: sjperdomo@ucatolica.edu.co
Año XXXIII - Número 57 - Bogotá, D. C. - Julio de 2023

Contenido
INVESTIGACIÓN FORMATIVA
Editorial. Especialización en Psicología Clínica: uno de los mejores programas de la Facultad
de Psicología........................................................................................................................................................................................................................................................1
Sandra Jimena Perdomo Escobar
Comprensión del fenómeno de trata de personas con fines de explotación sexual en Colombia.......................6
Angie Paola Ayala Góngora, Ever José López Cantero
Procesos de socialización en niños, niñas y adolescentes (NNA) colombianos durante y
después de la pandemia......................................................................................................................................................................................................................9
Samar Elizabeth Torres Marques, María Camila Córdoba Martínez, Íngrid Romero Cortés,
Paola Andrea Pulido Escobar
Escala de Medición de la Soledad BATAN.......................................................................................................................................................................... 13
Laura Daniela Bolívar Rodríguez, Ingrid Valentina Álvarez Herrera, María Camila Torres Campos,
Nicole Daniela Prieto Arias, Itala Marina Camargo Escobar
Ciberviolencia, una aproximación desde la cognición extendida y enactiva ............................................................................ 19
Lisandro Velásquez Sarasty, Andrés Fernando Ramírez Velandia
Efectos de las prácticas de crianza en el desarrollo de niños y niñas
durante la infancia temprana en familias disfuncionales .............................................................................................................................25
Laura Daniela Aranguren Fonseca, Yulieth Fernanda Gómez Moreno, Paola Andrea Pulido Escobar
Influencia de los padres en el uso de estrategias adaptativas y desadaptativas de
regulación emocional utilizadas por los niños y niñas durante la infancia intermedia...................................................28
Ana María Tello Jiménez, Paola Andrea Pulido Escobar
Exploración acerca de las estrategias de intervención implementadas
en los niños, niñas y adolescentes víctimas del conflicto armado en Colombia...................................................................32
María Camila Sanmartín Galvis, María José Zuleta, Paola Andrea Pulido Escobar
Validación por jueces de un instrumento de medición de afectividad
y erotismo en trabajadoras sexuales de Bogotá......................................................................................................................................................36
Valentina Pinto Parra, Mateo Pardo Rodríguez, Isabela Silva Bohórquez, Andrés Felipe Avendaño Montañez
Efectos del castigo físico como agente de control y disciplina en la crianza
de niños y niñas en infancia temprana...............................................................................................................................................................................39
Karol Andrea Camargo Rojas, Maribel Cruz Gutiérrez, Valentina Díaz Acevedo, Paola Andrea Pulido Escobar
Beneficios cognitivos de los videojuegos..........................................................................................................................................................................43
María Camila Rueda, Itala Marina Camargo Escobar
Revisión teórica del estilo de crianza democrático................................................................................................................................................50
Jessica Katherine Zuluaga Canay, Karen Bernal Castro, María Fernanda González, Paola Andrea Pulido Escobar
Ser porque hemos sido: La conexión emocional en la reconstrucción del tejido social para la paz.................53
Amaranta Pardo Calderón, Nelly Ayala Rodríguez
Conexión emocional como estrategia para la construcción del sentido de país................................................................ 56
Fabián Blanco Rivero, Camila Garzón Quiroga, Rafael Puro Landivar, Nelly Ayala Rodríguez
El uso de tecnologías de la información y la comunicación en la medición de procesos psicológicos....... 60
David Santiago Casas Soriano, Juan Felipe Saavedra Chávez, Laura Geraldine Cortés de Narváez,
Manuela María del Rocío Pinzón Serrano, Gabriel Eduardo Almeida, Ivonne Edith Alejo Castañeda
Relación entre moda, imagen corporal y conducta alimentaria en Latinoamérica............................................................62
Daiani Neriad Cortés Ospina, Sara Díaz Rico, Andrés Mauricio Santacoloma Suárez
Niveles de estrés, ansiedad y depresión durante el aislamiento social obligatorio
en personas que realizan teletrabajo.................................................................................................................................................................................. 65
Luisa Fernanda D’Achiardi Gómez, Carol Dahana Arévalo Paiva, Karla Sofía Lugo,
Paula Wilches, Andrés M. Santacoloma Suárez
Contribuyendo al bienestar y calidad de vida de las comunidades.................................................................................................. 68
Nelly Ayala Rodríguez, Xiomara González Alarcón, Johana Gómez Blanco
El rol de los hermanos de niños diagnosticados con trastorno del espectro
autista (TEA): desarrollo de interacciones y comunicación, una revisión teórica...................................................................70
Estefani Moreno López, Santiago Larreal Morales, Paola Pulido

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Editorial
De los programas internacionales en Centroamérica y Suramérica, uno hace énfasis
en niños y adolescentes, uno en intervención con niños, uno en adultos y grupos, uno
en psicología clínica y de la salud, uno en terapia cognitivo conductual y dinámica, y
uno está dirigido a la intervención para la solución de problemas psicológicos. En el
ámbito regional, se encontraron seis programas de especialización, incluyendo el de la
Universidad Católica de Colombia; de los cuales tres tienen énfasis en población de niños
y adolescentes, dos en adultos y uno en intervención en crisis. De estos, dos tienen un
enfoque biopsicosocial y los demás un enfoque cognitivo conductual. Es importante re-
saltar que solamente dos de los programas abarcan el estudio de problemáticas en po-
blación infantil, adolescentes y adultos, y uno de ellos es el Programa de Especialización
en Psicología Clínica de la Universidad Católica de Colombia, lo que constituye un valor
diferencial del Programa frente a las demás especializaciones existentes en el país.

Como resultado del estudio de currículo comparado, se encuentra que la mayoría de los
programas se cursan en dos semestres y tienen como objetivo principal proporcionar com-
petencias profesionales a los especialistas en Psicología en el campo clínico. En relación
con las terapias de intervención, se encuentra que, en los programas revisados, algunos
enseñan a los estudiantes terapias cognitivo-conductuales para la atención de los casos.

Por otro lado, se hizo un estudio de mercado laboral en el que se encontró que el 78%
de los egresados que participaron en el estudio consideran que los conocimientos y las
competencias adquiridas en las especializaciones les han aportado en su desempeño
profesional y les han permitido responder a las exigencias laborales. De estos egresa-
dos, el 38% son egresados de la Especialización en Psicología Clínica de la Universidad
Católica de Colombia.

A partir del 2016 y hasta la fecha se realiza un proceso de realimentación del currículo
una vez los estudiantes culminan su año de formación. En esta actividad se ha encon-
trado que los estudiantes consideran haber logrado las competencias requeridas para
la atención infantil y adulta desde las terapias cognitivas y conductuales, tal como se
establece en el Plan de Estudios, y consideran que es una fortaleza del Programa abordar
problemáticas de la población infantil, adolescente, adulta y de parejas. De igual manera,
resaltan la importancia del acompañamiento que han recibido de los profesores moni-
tores en la atención de los casos que abordan en la práctica.

La práctica se realiza en la Unidad de Servicios Psicológicos (USP) de la Universidad y

cumple con los requisitos exigidos por la normatividad vigente en Colombia que rige el
ejercicio del psicólogo en el campo clínico (Decreto 2376 de 2010, Resolución 2003 de 2014
y Decreto 780 de 2016), donde se establece que los psicólogos en formación deben desa-
rrollar prácticas supervisadas (European Federation of Psychologists’ Association (EFPA),
2001; Resolución 3461 de 2003 del Ministerio de Educación Nacional). Y en los lineamientos
que establece el Ministerio de Educación Nacional (MEN), para el nivel de Especialización
en cuanto a la investigación (Decreto 1346 de 2010 y Decreto 1280 de 2018), se establece
que en estos niveles de formación no se requiere del desarrollo de competencias en in-
vestigación, pero sí de conocimientos en metodología.

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Editorial

En el Programa de Especialización en Psicología Clínica de la Universidad Católica de

Colombia, durante los últimos siete años se han realizado algunas acciones que han po-
tenciado su funcionamiento y han ayudado a que se convierta en uno de los mejores pro-
gramas de posgrados de la Universidad, como por ejemplo: a) asignación de cupos en la
Unidad de Servicios Psicológicos (USP) otorgada por la Sala Intersectorial para el Talento
Humano; b) renovación del Registro Calificado del Programa, otorgada el 24 de marzo de
2021; c) ampliación de la cantidad de estudiantes nuevos que ingresan al Programa, lo que
permite tener dos grupos con nuevos estudiantes, en cada uno de los periodos académi-
cos por año; d) contar con el 100% de los profesores del Programa con nivel de formación
de maestría y doctorado; e) publicación continua desde el 2019 en la Colección Dictum, la
cual busca aportar a la apropiación social del conocimiento de la psicología clínica.

En la Tabla 1 se relacionan los productos que se han publicado hasta la fecha.

Tabla 1.
Publicaciones del Programa en la Colección Dictum

Título Año Autores Link de acceso

Diana Marcela Rodríguez Núñez,

Los niños y los ogros 1. Sandra Jimena Perdomo Escobar, https://publicaciones.ucatolica.
Cuentos para prevenir el 2019 Andrea del Pilar Peña Benavides, edu.co/gpd-los-ninos-y-los-
maltrato y el abuso infantil Angie Vivirley Sánchez Ramírez, ogros.html
Óscar Javier Alayón Carrión

Víctor Alfonso Cordero Torres,

https://publicaciones-ucatolica.
A ver tus miedos con Julián Mauricio Azuero Córdoba,
2019 edu.co/gpd-a-ver-tus-miedos-
el Avestruz Lisa Marisiul Trujillo Rojas,
con-el-avestruz.html
Sandra Jimena Perdomo Escobar

Sandra Jimena Perdomo Escobar,

Apapáchame 1. Manual
de entrenamiento para
padres con niños, niñas y
adolescentes que presen-
tan bajo estado de ánimo
Santiago Alejandro Bello Flórez,
Julieth Carolina Calderón https://publicaciones.ucatolica.
2020
Camargo, edu.co/gpd-apapachame-1.html
Santiago Riveros López,
María Camila Pérez Arango

Los ogros 2. Cuentos para https://publicaciones.ucatolica.

prevenir el maltrato en el 2020 Sandra Jimena Perdomo Escobar edu.co/gpd-los-ogros-parte-2.
contexto escolar html

Apapáchame 2.
Manual de entrenamiento
2021
para niños que presentan
bajo estado de ánimo
https://publicaciones.ucatolica.
edu.co/catalog/product/view/_
ignore_category/1/id/379196/s/
gpd-apapachame-2-ma-
Sandra Jimena Perdomo Escobar
nual-de-entrenamiento-para-pa-
dres-con-ninos-ninas-y-adoles-
centes-que-presentan-bajo-es-
tado-de-animo-9789585133631/

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Título Año Autores Link de acceso
Sandra Jimena Perdomo Escobar,
https://publicaciones.ucatolica.
Ana Victoria Coronado Fonseca,
Las aventuras de Ángel edu.co/gpd-las-aventuras-de-
Jennifer Cáterin Cisneros Piza,
el oso. Vence el miedo a 2021 angel-el-oso-vence-el-mie-
Diana Marcela Umbarila Pinzón,
estar lejos de tus padres do-a-estar-lejos-de-tus-pa-
Yisela Tulande Ocampo,
dres-9789585133655.html
Yuly Alejandra Lancheros

¿Estás bajo de nota?

Paula Andrea Flórez Mozo,
Cuentos para abordar https://publicaciones.ucatolica.
Jhoan Sebastián López Sepúlveda,
la depresión infantil y edu.co/catalog/product/view/
2021 Adriana del Carmen Miranda
mejorar el estado de id/379305/s/gpd-estas-bajo-de-
Carrillo, Jesús Gernol Peña Jaraba,
ánimo a través de la nota-9789585133860/
Sandra Jimena Perdomo Escobar
comunicación asertiva

Geraldine Moreno Delgado, Daniel

SHIAME: Se ha ido alguien
Felipe Rodríguez Caballero, Angie https://publicaciones.ucatolica.
muy especial. Cuento
2022 Carolina Téllez Gutiérrez, Lorena edu.co/gpd-shiame-se-ha-ido-
para trabajar el duelo
Martínez Feo, Sandra Jimena alguien-muy-especial.html
en niños y niñas
Perdomo Escobar
Fuente: Elaboración propia.

Referencias
European Federation of Psychologists’ Association (EFPA), & Consejo General de la Psicología. (2001).
Práctica supervisada. https://www.europsy.cop.es/index.php?page=practica-supervisada
Ministerio de Educación Nacional. (2003, 30 de diciembre). Resolución 3461 de 2003. Por la cual se de-
finen las características específicas de calidad para los programas de pregrado en Psicología.
https://www.mineducacion.gov.co/1621/articles-86388_Archivo_pdf.pdf
Ministerio de Educación Nacional. (2018, 25 de julio). Decreto 1280 de 25 de julio de 2018. Por el cual se
reglamenta el Sistema de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, el registro ca-
lificado de que trata la Ley 1188 de 2008 y los artículos 53 y 54 de la Ley 30 de 1992 sobre acredita-
ción […]. http://es.presidencia.gov.co/normativa/normativa/DECRETO%201280%20DEL%2025%20
DE%20JULIO%20DE%202018.pdf
Ministerio de Salud y Protección Social. (2010, 01 de julio). Decreto 2376 de 2010. Por medio del cual se
regula la relación docencia-servicio para los programas de formación de talento humano del
área de la salud. https://www.funcionpublica.gov.co/eva/gestornormativo/norma.php?i=76013
Ministerio de Salud y Protección Social. (2014, 28 de mayo). Resolución 00002003 de 2014. Por la
cual se definen los procedimientos y condiciones de inscripción de los Prestadores de Servicios
de Salud y de habilitación de servicios de salud. https://www.minsalud.gov.co/Normatividad_
Nuevo/Resoluci%C3%B3n%202003%20de%202014.pdf
Ministerio de Salud y Protección Social. (2016, 6 de mayo). Decreto 780 de 2016. Por medio del cual se
expide el Decreto Único Reglamentario del Sector Salud y Protección Social. https://www.minsa-
lud.gov.co/sites/rid/Lists/BibliotecaDigital/RIDE/DE/DIJ/decreto-780-unico-modificado-2016.pdf
Perdomo, S. J., Carbarcas, K., Moreno, J., & Cantor, M. I. (2017). Estudio de tendencias y análisis ocupa-
cional de los egresados de las especializaciones de la Facultad de Psicología de la Universidad
Católica de Colombia. [Informe del estudio para la Especialización en Psicología Clínica].
Universidad Católica de Colombia.
Universidad Católica de Colombia. (2016). Informe General - Evaluación de Impacto Egresados
2010-2015. Universidad Católica de Colombia.

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Semillero de Investigación en Psicología Jurídica
Comprensión del fenómeno de trata
de personas con fines de explotación
sexual en Colombia
Angie Paola Ayala Góngora1, Ever José López Cantero2
Resumen
En el contexto de la psicología jurídica es
importante reconocer los elementos y fac-
tores asociados a la trata de personas con
fines de explotación sexual, ya que esta
práctica constituye la principal finalidad del
delito; por ello, en este documento se de-
sarrollan aspectos relevantes a las formas
de contacto y la estructura que subyace a
esta problemática, así como a examinar
la prevalencia y las estrategias que se han
implementado para el abordaje de este
fenómeno, con el propósito de incentivar
mecanismos de prevención tales como
la comunicación y la protección de la po-
blación vulnerable. Estos mecanismos han
aportado al fortalecimiento del marco nor-
mativo, al aumento del uso de los canales
de denuncia, a un mayor conocimiento so-
bre las diferentes formas de captación de
las víctimas y a un incremento en el apoyo
a ellas. Lo anterior invita a trabajar en los
factores de riesgo y en la ampliación del
conocimiento sobre esta situación.
Palabras clave: trata de personas, explo-
tación sexual, prevención
Introducción
La trata de personas corresponde a un de-
lito basado en la captación, traslado, aco-
gida y retención de personas mediante la
violencia, la amenaza, el engaño o el abuso
1 Integrante del Semillero de Investigación en Psicología Jurídica. Correo electrónico: apayala91@ucatolica.edu.co
2 Líder del Semillero de Investigación en Psicología Jurídica. Correo electrónico: ejlopez@ucatolica.edu.co
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de poder, con el propósito de establecer
diferentes tipos de explotación sobre ellas
(Larico, 2021). Una de sus modalidades co-
rresponde a la trata de personas con fines
de explotación sexual, y consiste en aque-
llas acciones para captar, transportar, re-
tener, entregar o alojar personas con el fin
de obligarlas a ganar dinero para otra per-
sona a través del ejercicio de actividades
sexuales forzadas (Chávez & Chávez, 2018).
Por su parte, la explotación sexual propia-
mente dicha se refiere al sometimiento
de la persona a la realización de activi-
dades como la prostitución forzada para
obtener un beneficio económico ilegal
(Vázquez, 2020).
La primera fase de la estructura de la trata
de personas con fines sexuales es la cap-
tación, la cual comprende la atracción de
la víctima aprovechando sus condiciones
de vulnerabilidad (Orbegozo, 2020). En esta
fase el tratante persuade a la víctima por
medio de familiares, parejas sentimenta-
les, ofertas de empleo, agencias de viajes
o medios de comunicación para que esta
acceda a sus propuestas y solicitudes,
teniendo como fin último el reclutamiento
(Ruiz et al., 2018).
En el segundo lugar de la cadena se en-
cuentra el traslado, el cual puede darse
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dentro o fuera del país y tiene como pro-
pósito alejar a las víctimas de sus redes
de apoyo para que no puedan ser encon-
tradas, e introducirlas como “mercancía”
exótica en otros lugares (López, 2019).
Como tercera fase se encuentra la acogi-
da, escenario en el que la víctima es recibi-
da o entregada a sus futuros explotadores
mediante la restricción de su libertad, el
suministro de drogas o la retención de sus
documentos (Organización Internacional
para las Migraciones [OIM], 2021).
Metodología
Se realizó minería de datos a partir de los
registros de ocurrencia de esta modalidad
de trata, se revisó la prevalencia toman-
do como referente internacional las cifras
presentadas por la Oficina de Naciones
Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC),
y para las cifras nacionales se consultó la
tesis de Oñoro et al. (2019).
Resultados
En cuanto a la prevalencia de este fenó-
meno, se indica que el 72% de las niñas
víctimas de trata, el 23% de los niños, el
77% de las mujeres adultas y el 17% de
hombres adultos son captados con fines
de explotación sexual. Las regiones con
el mayor porcentaje de este tipo de tra-
ta son Norteamérica, Centroamérica y
Suramérica (UNODC, 2020).
A nivel nacional, se evidencia que el 61%
de la trata se da para fines sexuales y que
el 84% de las víctimas son mujeres, de las
cuales el 80% son trasladadas fuera del
país y otro 20% son explotadas de forma
interna. El mayor número de víctimas es
reportado en los departamentos de Valle
del Cauca, Antioquia, Bogotá, Risaralda y
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Investigación formativa
Caldas; adicionalmente, se destaca que
las personas con mayor vulnerabilidad
se encuentran entre los 18 y los 30 años
(Oñoro et al., 2019).
Conclusiones
Para el abordaje de esta problemática
se reconocen estrategias de prevención
efectivas como la investigación, la educa-
ción, el diálogo, la comunicación y la pro-
tección de la población vulnerable, puesto
que se ha identificado que este es un fe-
nómeno asociado a factores psicosocia-
les como la discriminación, el desempleo,
la pobreza, el maltrato o la violencia intra-
familiar (Vázquez, 2020).
Así mismo, en la búsqueda de vías de so-
lución se ha establecido un amplio marco
normativo con comités a nivel departa-
mental y municipal que ejecutan acciones
de prevención, investigación y apoyo a las
víctimas, los cuales también realizan pau-
tas publicitarias en aeropuertos o zonas
de alto riesgo (Oñoro et al., 2019). Gracias a
lo anterior, ha aumentado en el uso de los
canales de reporte y denuncia e, incluso, el
bloqueo de páginas web que alojan con-
tenido que favorece esta problemática,
como la pornografía (Pérez, 2019).
Para su prevención, se ha ampliado el co-
nocimiento acerca de las formas de capta-
ción y explotación sexual de las víctimas. Se
identificó que, posterior a la pandemia por
COVID-19, el uso de las tecnologías de la in-
formación y las comunicaciones se ha con-
vertido en el medio principal para estos fines.
A través de estas, se utiliza la información
compartida en redes sociales para crear
perfiles falsos compatibles con las edades y
gustos de las víctimas, con el fin de generar
confianza y poder captarlas (UNODC, 2021).
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Investigación formativa

Se hace evidente la necesidad de traba- comunidades en condición de vulnerabili-

jar en el reconocimiento e intervención dad para sensibilizar acerca de esta pro-
de los factores de riesgo que ponen a las blemática y contribuir con su prevención.

Referencias
Chávez Gutiérrez, M. R., & Chávez Gutiérrez, M. A. (2018). La situación de la trata de personas con
fines de explotación sexual en México. Revista Espiga, 17(35), 31-44. https://doi.org/10.22458/
re.v17i35.1806
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). (2019). Día Mundial contra la Trata de
personas. https://www.unicef.org/colombia/comunicados-prensa/en-el-dia-mundial-contra
-la-trata-de-personas-conozca-los-riesgos-de-nuestros
Larico Portugal, L. (2021). El delito de trata de personas en la actualidad y su visión frente a la política
criminal. Lumen, 17(1), 53-71. https://doi.org/10.33539/lumen.2021.v17n1.2388
López Marroquín, S. (2019). Desaparición, esclavitud y trata de personas: situación de las mujeres
en México. Revista de Ciencias Antropológicas, 74, 163-181. https://www.scielo.org.mx/scielo.
php?script=sci_arttext&pid=S2448-84882019000100163
Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (UNODC). (2020). Reporte global de tráfico de
personas 2020. https://www.unodc.org/documents/data-and-analysis/tip/2021/GLOTiP_2020
_15jan_web.pdf
Oficina de Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (UNODC). (2021). Trata de personas y migra-
ción en tiempos de pandemia por COVID-19. https://repositorio.pucp.edu.pe/index/bitstream/
handle/123456789/182090/Trata-de-personas-y-migracio%CC%81n.pdf?sequence=1
Oñoro Pérez, M. I., Reyes Corro, E., & Sánchez Cervantes, F. M. (2019). Trata de personas en Colombia:
análisis socioeducativo y propuestas de acción. [Tesis de Maestría. Universidad del Norte].
https://manglar.uninorte.edu.co/bitstream/handle/10584/10015/32834997.pdf?sequence
=1&isAllowed=y
Orbegozo Oronoz, I. (2020). La trata de personas con fines de explotación sexual en la co-
munidad autónoma del país vasco. Ararteko. https://www.ararteko.eus/RecursosWeb/
DOCUMENTOS/1/0_4969_3.pdf
Organización Internacional para las Migraciones (OIM). (2021). Aprendiendo sobre trata de perso-
nas: una guía para jóvenes. https://repository.iom.int/bitstream/handle/20.500.11788/1421/ARG-
OIM_003.pdf?sequence=1&isAllowed=y
Ruiz Herrera, A. L., Ruiz Guevara, S. M., & López Cantero, E. J. (2018). El rol de los medios masivos de co-
municación en la comprensión del fenómeno de trata de personas. Revista Criminalidad, 60(2),
25-39. http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1794-31082018000200025
Vázquez Fernández, B. J. (2020). La trata de personas, un problema latente en la ciudad de Tarija -
Bolivia. Yachana, Revista Científica, 9(3), 28-40. http://revistas.ulvr.edu.ec/index.php/yachana/
article/view/655/516

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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar

de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales
Procesos de socialización en Niños, Niñas y
Adolescentes (NNA) colombianos durante
y después de la pandemia
Samar Elizabeth Torres Marques, María Camila Córdoba Martínez,
Íngrid Romero Cortés1, Paola Andrea Pulido Escobar2

Resumen Prácticas de crianza y procesos

Dentro de las diversas problemáticas que
ha dejado en todo el mundo la pandemia
ocasionada por el COVID-19, se reconoce
que las dificultades para socializar que
enfrentan los Niños, Niñas y Adolescentes
(NNA) constituyen uno de los problemas
más agudos. A raíz de ello, esta investiga-
ción pretende describir, en Colombia, el rol
de los padres e instituciones educativas
en los procesos de socialización de esta
población, durante y después de la pan-
demia. La investigación pretende, a través
de una metodología de revisión teórica,
exponer la importancia de las prácticas de
crianza, los límites que impuso esta con-
tingencia a la socialización, y la dinámica
disfuncional de violencia en las institucio-
nes educativas y en el núcleo familiar. Para
concluir, propone, de forma reflexiva, reco-
mendaciones para profundizar y abordar
esta problemática.
de socialización
A raíz de la pandemia se adoptaron dife-
rentes medidas gubernamentales, como
el confinamiento, para proteger a la po-
blación; sin embargo, este generó cam-
bios y alteraciones en los hábitos usuales
en la cotidianidad de los Niños, Niñas y
Adolescentes (NNA). En esta medida, los
menores de edad vieron afectados el
desarrollo de sus habilidades sociales, y
de capacidades académicas y extraaca-
démicas (Fondo de las Naciones Unidas
para la Infancia [UNICEF], 2021b). Por otra
parte, los padres y las madres, además de
lidiar con preocupaciones sobre su pro-
pia salud física, incluida la salud mental,
la adquisición de recursos económicos y
la incertidumbre sobre el futuro, también
fueron responsables del bienestar de sus
hijos en un contexto de cierres continuos
de escuelas (UNICEF, 2021a).

Palabras clave: infancia, adolescencia, Vergara (2017) señala que las prácticas de
procesos de socialización, pospandemia. crianza juegan un papel prioritario en la vida

1 Universidad Católica de Colombia, integrantes del Semillero Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca del
bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correos electrónicos: setorres76@ucatolica.
edu.co, mccordoba84@ucatolica.edu.co y iromero69@ucatolica.edu.co
2 Universidad Católica de Colombia, docente líder del Semillero Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca
del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correos electrónicos: papulido@ucatoli-
ca.edu.co, semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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de los niños. Estas prácticas son definidas
como las acciones en las que los adultos
expresan y transmiten a los menores diver-
sas responsabilidades en sus actividades
diarias. Actúan como un mecanismo de
socialización que facilita la incorporación
de los niños a la sociedad, fomentando
conductas deseables (Pulido et al., 2013).
Asimismo, Jorge y González (2017) señalan
que las prácticas de crianza y las dinámi-
cas familiares aportan a la adaptabilidad
y a la comunicación con el vínculo familiar.
De esta manera, se forjan relaciones no
solo con la familia, sino también con sus
pares bajo los procesos de socialización.
Por tanto, la socialización es uno de los
procesos principales para el desarrollo de
los NNA, ya que aporta a la formación de
los rasgos de personalidad en medio de la
construcción de su identidad. Además, el
ciclo académico es una etapa primordial
para la socialización, ya que genera proce-
sos de inclusión en un nuevo entorno social,
aumenta la necesidad de un espacio de
comunicación, e implementa y mejora las
herramientas de autorregulación e influen-
cia social (Haleta et al., 2021). En conse-
cuencia, durante el confinamiento los NNA
tuvieron una reducida interacción social, lo
cual afectó su desarrollo emocional y habi-
lidades sociales, y aumentó las dificultades
en el aprendizaje y uso del lenguaje.
Impactos de la pandemia
Individuales y familiares
Tal y como afirman Chagñay y Córdova
(2022), el confinamiento dejó en los indivi-
duos altos niveles de ansiedad, por el hecho
de no tener un contacto físico y emocional
con sus familiares y amigos, como ocurría
antes de la pandemia; por ende, no solo los
menores de edad, sino también los adul-
tos experimentaron el reciente fenómeno
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llamado “el síndrome de la cabaña”, esto es,
el comportamiento psicológico en el que
se expresa el miedo que tiene el individuo
a salir a la calle después del confinamiento.
Por otra parte, Haleta et al. (2021) afirman
que, una vez impuesto el confinamiento,
los NNA quedaron aislados de la sociedad,
viéndose en la obligación de comunicarse
y aprender únicamente a través de herra-
mientas digitales.
Desde la pandemia, en los NNA de 3 a 12 años
se han observado mayores síntomas de irri-
tabilidad, mal humor, soledad, agresividad e
intolerancia los cuales se manifiestan a tra-
vés de llanto continuo, altibajos emocionales,
cambios en la alimentación y afecciones
en el sueño (UNICEF, 2021b). Así pues, los NNA
fueron una población vulnerable durante y
pospandemia, puesto que el contacto con
sus seres queridos y el vínculo con sus profe-
sores y pares se vio afectado. Esta situación
ha dado lugar a diversas problemáticas de
socialización en los niños. Entre ellas, se des-
taca la dificultad para hablar, hacer amigos,
utilizar el baño de forma autónoma y la falta
de confianza, lo cual resulta en una comuni-
cación poco fluida. Estos condicionantes han
generado timidez y ansiedad en los niños
(Gualdrón, 2021; Infobae, 2022).
Instituciones educativas
Morales (2020) indica que las comunida-
des educativas, como instituciones de for-
mación, son importantes para desarrollar
los diferentes procesos de socialización.
Asimismo, Aguilar (2020) señala que, dentro
de las instituciones, los menores cuentan con
espacios que permiten socializar a través de
las relaciones cooperativas, solidarias y de
acción. Sin embargo, a raíz del confinamien-
to, se produjo una pérdida de sensación de
estabilidad que imposibilita los espacios de
socialización, con el agravante de que en los
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entornos virtuales no se logran detallar los
procesos de socialización, puesto que las
aplicaciones tecnológicas presentan una
realidad artificial que impiden el manejo y
expresión real de las emociones.
Violencia
Durante la crianza los NNA son considerados
aprendices de los adultos, con lo cual pocos
adultos reconocen su voluntad y capaci-
dad de tomar de decisiones; lo que deriva,
durante este proceso, en comportamientos
en los adultos que tienden a implementar
prácticas de maltrato, sobreexigencia y so-
breprotección (Pachajoa e Izzedin, 2009).
Lo anterior puede verse reflejado en
que, durante la pandemia, según el
Instituto Nacional de Medicina Legal y
Ciencias Forenses, citando el informe del
Observatorio Colombiano de las Mujeres,
entre los meses de marzo y abril del 2020 se
presentó un aumento del 142 % en la violen-
cia intrafamiliar con respecto al año 2019.
Así pues, se incrementaron los conflictos
intergeneracionales y de violencia, ya que
las desaveniencias que se resolvían antes
en espacios públicos fueron trasladadas
al espacio familiar, lo que ocasionó una
pérdida de intimidad y generó malestar en
las vivencias familiares y afecciones en los
NNA (Instituto Nacional de Medicina Legal y
Ciencias Forenses, 2021; UNICEF, 2021b).
¿Cómo fortalecer los procesos de
socialización?
Como se ha afirmó anteriormente, la pan-
demia generó distorsiones en los procesos
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Investigación formativa
de socialización de NNA; sin embargo, la
evidencia aún es escasa, por lo que desde
el semillero Infancias se sugiere continuar
ampliando el conocimiento en este tema
e involucrar en las investigaciones tanto
a padres como a hijos. Por ello propone,
en primera instancia, realizar estudios
longitudinales que evalúen la efectividad
de intervenciones que atienden las nece-
sidades de salud mental en los menores
de edad como consecuencia de esta
pandemia.
El aislamiento, como resultado de la pan-
demia de la COVID-19, ha sido uno de
los rasgos que ha impedido el fortaleci-
miento de los procesos de socialización
en los NNA. En consecuencia, se invita a
los padres a que, desde sus prácticas de
crianza, tomen consciencia del impac-
to negativo que tuvo en los menores de
edad estar separados de sus pares, y de
esta manera y, en conjunto, buscar for-
mas de ayudarlos a resocializar. De igual
manera, se les invita a utilizar la tecnolo-
gía como medio de comunicación, la cual
ha tenido gran relevancia dentro de esta
coyuntura.
Para finalizar, se sugiere a las institucio-
nes realizar talleres en los que se refuerce
la importancia de las expresiones reales
de las emociones, en comparación con
la realidad artificial que presentan las
aplicaciones tecnológicas; asimismo, se
resalta la pertinencia de potenciar los pro-
cesos de socialización acordes a la etapa
de desarrollo de los niños.
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Referencias
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demia. Estudios Pedagógicos, 46(3), 213-223. http://dx.doi.org/10.4067/S0718-07052020000300213
Chagñay, G., & Córdova, M. A. (2022). Estrés postraumático, síndrome de la cabaña, COVID-19 y psico-
logía positiva: Caso práctico. AlfaPublicaciones, 4(2), 71-88. https://doi.org/10.33262/ap.v4i2.2.217
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https://www.unicef.org/lac/media/29781/file/La-crianza-durante-la-adolescencia.pdf
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Gualdrón, J. (2021). La pandemia de COVID-19 y su impacto en los niños: perspectiva desde un punto
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Haleta, Y., Filonenko, O., Ratsul, O., Ratsul, A., & Babenko, T. (2021). The Main Factors Influencing the
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Pachajoa, A.,& Izzedin, R. (2009). Ensayo: Contexto político-legislativo de la crianza en Colombia: una
reflexión psicológica. Revista de Psicología UCA, 5(10). https://erevistas.uca.edu.ar/index.php/
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Pulido, S., Castro, J., Peña, M., & Ariza, D. (2013). Pautas, creencias y prácticas de crianza relacionadas
con el castigo y su transmisión generacional. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales,
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Vergara, L. (2017). Prácticas de crianza en la primera infancia en los municipios de Riosucio y
Manzanares. Instituto de Estudios en Educación Universidad del Norte, 27, 22-33. https://doi.
org/10.14482/zp.27.10980

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Semillero de Investigación Psicometría, medición y evaluación

Escala de Medición de la Soledad BATAN
Laura Daniela Bolívar Rodríguez, Ingrid Valentina Álvarez Herrera,
María Camila Torres Campos, Nicole Daniela Prieto Arias1,
Itala Marina Camargo Escobar2

Resumen un instrumento psicométrico que mida el

En el contexto de la evaluación psicológica,
es fundamental contar con herramientas
válidas que permitan a los profesionales
tomar decisiones informadas y orientar los
procesos de intervención basados en la evi-
dencia. Uno de los constructos que ha ge-
nerado gran interés y preocupación entre
los profesionales es la soledad, debido a su
efecto doloroso y desgastante. Su impacto
puede dar lugar a graves problemas de sa-
lud mental e incluso conducir a conductas
que afectan la integridad de la persona.
En este sentido, el objetivo de esta inves-
tigación fue determinar los criterios de
validez y confiabilidad de la escala de me-
dición BATAN. Los resultados obtenidos in-
dican que la escala cuenta con un nivel de
confiabilidad aceptable para su utilización
en la investigación.
Palabras clave: medición, soledad, Escala
BATAN.
Introducción
La soledad es una experiencia tan dolorosa
y desgastante que la gente intenta todo lo
que esté a su alcance para evitarla, inclu-
so llegando a tomar medidas que pueden
ser perjudiciales para su salud. Por ello, el
objetivo de este estudio fue la creación de
constructo Soledad con base en la teoría
de Robert Weiss (1974) en un grupo de po-
blación colombiana y española. La Escala
de Medición de la Soledad BATAN consta
de 26 ítems divididos en tres dimensiones:
a) soledad emocional, b) soledad social y
3) factor 3.
La escala fue avalada mediante la vali-
dación de contenido, para lo cual se con-
sidero la opinión de seis jueces expertos
profesionales de ambos países y poste-
riormente fue aplicada en una muestra
163 participantes mayores de edad, 75
de los cuales residen en España y 88 en
Colombia. La fiabilidad fue determinada
mediante el Alpha de Cronbach, con un
valor de 0.921 para el total de la escala;
por lo tanto, el instrumento cumple con los
requisitos psicométricos para ser usados
con fines investigativos y de diagnósticos.
Según Weiss (1974), la soledad puede defi-
nirse de este modo:
Una condición de déficit de una provisión
o provisiones específicas, es decir, una res-
puesta a la ausencia de disposiciones rela-
cionales específica, teniendo en cuenta que
este déficit es permanente ya que no es po-
sible que un individuo compense la ausencia

1 Participantes del Semillero de Investigación Psicometría: Medición y Evaluación. Correos elec-

trónicos: ldbolivar76@ucatolica.edu.co, ivalvarez18@ucatolica.edu.co, mctorres40@ucatolica.edu.co,
mdprieto57@ucatolica.edu.co
2 Directora del Semillero de Investigación Psicometría: Medición y Evaluación. Correo electrónico:
imcamargo@ucatolica.edu.co

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de una provisión relacional mediante el in-
cremento de otras; dicho de otro modo, las
disposiciones relacionales no pueden susti-
tuirse unas a otras. (p. 227)
Este autor plantea que la soledad está medi-
da por dos dimensiones: emocional y social,
y seis provisiones: apego en las relaciones,
integración social provista por la red de re-
laciones, posibilidad de ser cuidado-nutrido,
reaseguramiento del valor, alianza confiable
y guía por parte de personas en cuya auto-
ridad se confía. La carencia de alguna de las
provisiones produce como consecuencia la
soledad (Muchinik, 2004).
Asimismo, Weiss plantea que la ausencia de
una de las figuras de apego produce sole-
dad emocional pero no necesariamente so-
ledad social. La prevalencia de este tipo de
soledad depende del estilo de apego que la
persona percibe, puesto que si el apego es
inseguro es más probable que experimente
el constructo planteado (Vera, 2014).
El apego se encuentra vinculado con las
etapas de desarrollo y maduración de la
persona; por esto, Weiss se vale de la teo-
ría de John Bowlby propuesta en 1944 para
explicar la conducta de apego en niños,
ya que los primeros vínculos afectivos son
las figuras parentales debido a la protec-
ción, confianza y seguridad que brindan
(Muchinik, 2004).
Para Weiss la falta de afiliación o la integra-
ción social es clave para que se produzca
soledad social, la ausencia de una red so-
cial, de personas con las que se comparta
intereses, y la carencia de pertenencia son
factores que dan paso a esta condición
deficitaria (Muchinik, 2004). Expone que la
vida sería más difícil si no se cuenta con
esta integración, puesto que implica la
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evaluación del comportamiento por parte
de otros, ayuda mutua y asesoramiento
que permiten lidiar de manera eficaz con
el mundo (Weiss, 1974).
Metodología
El presente estudio es de tipo instrumental
o psicométrico. En este se realizó un juicio
de expertos, tres de los cuales fueron me-
todólogos y tres teóricos. Además, partici-
paron dos personas mayores de edad a
quienes se entrevistó con el fin de observar
la claridad de los ítems.
Para la aplicación del instrumento, se
efectuó un muestreo no probabilístico por
cuotas, con una muestra de 163 personas
mayores de edad, de las cuales 88 eran
residentes en Colombia y 75 en España.
El instrumento que se utilizó fue la Escala
de Medición de la Soledad BATAN, que
consta de tres dimensiones y 24 ítems, los
cuales fueron medidos en escala Likert de
1 a 5, siendo 1: Totalmente en desacuerdo
y 5: Totalmente de acuerdo. Se evaluaron
los criterios de apego en las relaciones,
posibilidad de ser cuidado- nutrido, guía
por parte de personas en cuya autoridad
se confía, integración social provista por la
red de relaciones y reaseguramiento del
valor, alianza confiable. 
Para el procedimiento se definió concep-
tual y operacionalmente el constructo de
Soledad desde la teoría de Weiss; poste-
riormente se hizo una construcción inicial
de la prueba, en la que se diseñó su es-
tructura (formato e ítems); también se es-
pecificaron las instrucciones de aplicación
de este instrumento; después se expuso
al juicio de expertos, quienes evaluaron la
prueba a partir de los criterios de suficien-
cia, relevancia y claridad, en una escala de
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1 a 4, donde 1 era No cumple con el criterio
y 4 era Alto nivel.
Se realizaron dos entrevistas cognitivas
para evaluar y dejar en evidencia cómo
las personas procesan o comprenden la
información solicitada en los ítems. Para la
selección de los participantes se tuvieron
en cuenta los criterios de inclusión, esto es,
que fueran personas mayores de edad y
que no tuvieran vínculo alguno con los in-
vestigadores. Como se ha indicado, se llevó
a cabo una prueba piloto en la que parti-
ciparon 163 personas mayores de edad,
residentes en España y Colombia. Esta se
implementó de manera virtual, mediante
un formulario de Google Forms que constó
de tres secciones: en la primera aparecía el
consentimiento informado, donde los par-
ticipantes debían aceptar voluntariamente
su participación; la segunda sección se en-
focó en los datos personales; finalmente, en
la tercera se presentó la Escala de Medición
de soledad BATAN.
El análisis de resultados se realizó mediante
el estudio de calidad de los ítems, calculan-
do los índices de discriminación y dificultad
para una prueba de rendimiento típico. Por
medio del coeficiente de alfa de Cronbach
y de Omega de Mcdonald’s se estimó la
confiabilidad de la prueba total y de cada
una de sus dimensiones a fin de evaluar la
consistencia interna de la misma y definir
si esta puede ser aceptada con fines diag-
nósticos o únicamente investigativos; debi-
do a que en este proceso se retiraron dos
ítems, se volvió a estimar la confiabilidad.
Para evaluar la evidencia de validez de
estructura interna se realizó un análisis
factorial exploratorio. Se comprobaron
los supuestos de esfericidad y fuerza de
relación entre variables y, posteriormente,
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Investigación formativa
se eligió el método de extracción máxima
verosimilitud teniendo en cuenta la dis-
tribución normal de la prueba y se aplicó
un análisis paralelo que permitió hallar el
número de factores que tiene la prueba.
Es importante mencionar que se tuvo en
cuenta una carga factorial de 0,4 para de-
terminar los ítems pertenecientes a cada
factor; además se realizó el proceso de ro-
tación oblicua de factores (oblimin) donde
se tuvo en cuenta la relación existente en-
tre las dimensiones de la prueba.
Resultados
Gracias a los resultados de validez de
contenido del instrumento según el juicio
de expertos, no se obtuvo concordancia
en los criterios de relevancia y claridad
evaluados en ambas dimensiones, pues-
to que todos los coeficientes de Alpha
de Krippendorff toman valores menores
a 0.67; para los datos de W de Kendall se
obtuvieron dos acuerdos débiles y dos
acuerdos pobres. Sin embargo, para el
criterio de suficiencia sí hubo acuerdo
en ambos índices y ambas dimensiones,
como se puede observar en Tabla 1.
Para el análisis de la calidad de los ítems
se estimó el índice de dificultad y discrimi-
nación. Los resultados indicaron que todos
los ítems tenían una dificultad cercana a
la media, es decir, 0.5 como se presenta en
la Tabla 2.
Como se muestra en la Tabla 3, el instru-
mento tiene un nivel de confiabilidad que
puede ser aceptado para investigaciones
y diagnósticos.
Con el fin de conocer la estructura interna
de la prueba, se realizó el Análisis Factorial
Explorator, con el que, en principio, se deter-
minó que la prueba tiene una distribución
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normal. Se verificó por medio del Test de
Bartlett que la prueba no es esférica y el
índice de KMO (0.891) indicó una relación
fuerte entre las variables; el método de ex-
tracción usado fue máxima verosimilitud y
para la identificación de factores se usó un
análisis paralelo, los cuales determinaron
la existencia de 3 factores que explican el
43.1% de la varianza de soledad con cargas
factoriales superiores a 0.4 para todos los
ítems. La rotación Oblimin mostró que no
hay buena correlación entre factores, como
para fusionarlos, ya que ninguna superó el
0.5. Se encontró que 13 ítems cargaron al
factor 1, 7 al 2 y 4 al 3; además, 9 de ellos no
cargaron a ningún factor por lo que fueron
retirados de la prueba.
Teniendo en cuenta que la teoría indica
que solo hay dos dimensiones que expli-
can la soledad, se nombró al tercer factor
como “Factor 3”, ya que tres de los cuatro

Tabla 1.
Acuerdo de concordancia entre jueces en la dimensión de Soledad
Promedio Promedio de
Decisión por
Criterio Ítem original de acuerdo acuerdo en Ítem oficial
tomar
en claridad relevancia
Me siento seguro/a en Se conserva el Me siento seguro/a en una
4 4
una relación amorosa ítem al 100% relación amorosa

Creo que alguna perso- Se conserva el Temo que alguna persona

na con la que manten- ítem al 100% con la que mantengo un
3 3.75
go un vínculo me puede Se modifica la vínculo afectivo me puede
llegar a abandonar claridad llegar a abandonar

Hay personas con las Hay personas con las que

Apego Se conserva el
que tengo una amistad 4 3.5 tengo una amistad muy
en las ítem al 80%
muy estrecha estrecha
relaciones
Cuando estoy
Se conserva el Cuando estoy solo/a, me
solo/a, me siento 4 3.75
ítem al 100% siento abandonado/a
abandonado/a
Cuando estoy con mi Se conserva el Cuando estoy con mi fa-
4 3.75
familia, me siento solo/a ítem al 100% milia, me siento solo/a
A menudo me siento Se conserva el A menudo me siento
4 3.5
abandonado/a ítem al 80% abandonado/a
Creo que nadie se preo- Se conserva el Creo que nadie se
4 4
cupa por mí ítem al 100% preocupa por mí
Me gustaría que la Me gustaría que mis ami-
Se conserva el
gente se interesara más 3.75 4 gos se interesan más por
ítem al 100%
por mí cuidar de mí
Me convendría encon- Me convendría encontrar
Posibilidad Se conserva el
trar a alguien que se 3.5 3.5 a alguien que se preocupe
de ítem al 80%
preocupe por mí por mí
cuidado
Me gustaría que se
Necesito que se preocu- Se conserva el
4 3.5 preocupen más por mi
pen por mí ítem al 80%
bienestar
Cuando estoy acom-
Se retiró el
pañado/a, siento que 2.25 2.75
ítem que no
tengo apoyo del resto

Nota: Resultados obtenidos en el promedio de concordancia de jueces por ítem. Versión original y oficial de la
prueba.
Fuente: Elaboración propia.

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Tabla 2.
Validez de la prueba
Prueba inicial Acuerdo entre jueces Dificultad del ítem Discriminación del ítem AFE
Número de
37 36 36 35 26
ítems
Número de
1 0 1 9
ítems eliminados

Nota: Número de ítems en cada fase de validez de la prueba.

Fuente: Elaboración propia.

Tabla 3.
Confiabilidad de la prueba
Dimensión
Ítems Versión Dimensión Segundo Ítems Versión Total de
soledad
iniciales inicial soledad social cálculo retirados oficial ítems
emocional
α=0.926 α=0.837 =0.908 α=0.932 SEC3I2 α=0.926
26 24
ω=0.932 ω=0.839 ω=0.917 ω=0.934 SSC1I3 ω=0.932

Nota: Resultados de la consistencia interna que se obtuvo inicialmente del total de la prueba y sus dimensiones.
Adicionalmente se retiraron ítems y se volvió a calcular la consistencia interna de la prueba.
Fuente: Elaboración propia.

Tabla 4.
Confiabilidad, dimensiones e ítems finales de la prueba
Confiabilidad Dimensión Ítem
Hay personas con las que tengo una amistad muy estrecha
Por lo general cuento con personas con las que puedo hablar de mis problemas diarios
Tengo personas con las que puedo contar ante una dificultad
Cuando tengo alguna dificultad sé que la puedo superar ya que cuento con una
red de apoyo
Mis amigos siempre están cuando los necesito
Soledad Me siento integrado/a en mi círculo de amigos
emocional Me siento en sintonía con las personas a mi alrededor
Cuando estoy en un grupo siento que hago parte de él
A pesar de estar rodeado/a de mucha gente no me siento en sintonía con ellos
Me siento cómodo/a con mi grupo de amigos
Me siento halagado/a frecuentemente
α = 0.926
Creo que las personas de mi círculo me conocen realmente como soy
ω = 0.932
Me siento comprendido/a o valorado/a por mi círculo de amistades
Cuando estoy solo/a, me siento abandonado/a
A menudo me siento abandonado/a
Me gustaría que mis amigos se interesan más por cuidar de mí
Soledad
Me convendría encontrar a alguien que se preocupe por mí
social
Me gustaría que se preocupen más por mi bienestar
Echo de menos contar con un buen amigo que se preocupe por mi bienestar
Aunque a menudo mantenga contacto con personas en redes sociales, me siento solo/a
Cuando estoy con mi familia, me siento solo/a
Considero que mis padres pueden brindarme buenos consejos
Factor 3
Siento acompañamiento emocional por parte de mis padres
Siento que mis habilidades son poco útiles en comparación con las de los demás
Nota: Estructura final de la prueba BATAN.
Fuente: Elaboración propia.

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ítems que este tiene se relacionan por la
soledad familiar, y el otro habla de la per-
cepción propia respecto a otros.
Discusión
Al finalizar el proceso de elaboración de
la escala de medición de soledad BATAN
se evidenció que esta cumple con las
propiedades psicométricas adecuadas,
teniendo en cuenta que se validó el ins-
trumento con una alta confiabilidad y una
consistencia interna de 0.921. Gracias a las
evidencias de validez y a los cambios en la
estructura interna de la prueba, se agregó
una dimensión más a evaluar, el construc-
to lo cual difiere con la teoría original de
Weiss, que planteaba solo dos dimensio-
nes para evaluar dicho constructo.

Referencias
Muchinik, E. (2004). Aislamiento y soledad. Eudeba. https://elibronet.ucatolica.basesdedatosezproxy.
com/es/ereader/ucatolica/6615 9?page=102
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[versión 23.5 en línea]. https://dle.rae.es/soledad [08 de marzo del 2022]
Vera, B. (2014). Crisis, soledad y apego. Universidad de Buenos Aires, Facultad de Psicología. https://
www.psi.uba.ar/academica/carrerasdegrado/psicologia/sitios_catedras/practicas_profesio-
nales/632_ambito_comunitario/material/crisis_soledad_apego.pdf
Weiss, R. (1974). Loneliness: The experience of emotional and social isolation. MIT Press.

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Ciberviolencia, una aproximación desde
la cognición extendida y enactiva
Lisandro Velásquez Sarasty1, Andrés Fernando Ramírez Velandia2
Resumen
En todo el mundo, desde hace más de una
década, internet ha estado presente en la
vida diaria y ha transformado la comuni-
cación, la educación y la socialización al
llevar a todos los países distintas maneras
tanto de acceder al conocimiento como
de establecer contacto con otras las per-
sonas alrededor del planeta. A raíz de estos
cambios, las manifestaciones de violencia,
que tradicionalmente se daban en espa-
cios físicos —como el acoso, las amenazas,
la difamación o la extorsión—, se presentan
en los últimos años mediadas por las nue-
vas tecnologías en el mundo digital. Esto
ha desencadenado nuevos desafíos para
las ciencias sociales y humanas. El pre-
sente trabajo expone, en primer lugar, una
reflexión sobre estas conductas en el inter-
net y, posteriormente, analiza estas formas
de violencia desde las perspectivas cog-
nitivas enactiva y extendida, así como las
nuevas posibilidades que brindan estas
teorías para la comprensión y el abordaje
de los fenómenos de ciberviolencia.
Palabras clave: violencia en línea, cogni-
ción enactiva, cognición extendida.
Introducción
La web 1.0 fue un paso importante para
la evolución del internet, abrió la puerta a
1 Integrante del Semillero de Investigación Atenea. Correo electrónico: lvelasquez60@ucatolica.edu.co
2 Líder del Semillero de Investigación Atenea. Correo electrónico: aframirez@ucatolica.edu.co
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Semillero de Investigación Atenea
nuevas posibilidades de intercambio de
información y contenido al permitir a los
usuarios compartir información y mate-
riales en línea. En esta primera versión del
internet, las páginas web eran muy simples,
manejaban una pequeña cantidad de te-
mas que contenían principalmente conte-
nido textual, imágenes estáticas y algunos
archivos multimedia, además no tenían
ninguna clase de interacción con el usua-
rio. Con la llegada de la web 2.0 se introdu-
jeron nuevas plataformas digitales y redes
sociales que cambiaron radicalmente la
dinámica social de las últimas décadas, lo
que ha permitido a los usuarios tener una
participación activa en la creación de con-
tenidos (O’Reilly, 2005), así como conectar
a personas de todo el mundo para com-
partir conocimientos, colaborar en proyec-
tos y crear comunidades. En consecuencia,
se generó un entorno en línea donde la
comunicación es más fácil y rápida, per-
mitiendo a los usuarios estar al tanto de lo
que está sucediendo en muchas partes del
planeta. Sin embargo, no todo es seguro
e inofensivo: debido a la naturaleza de las
plataformas digitales, los agresores tienen
la capacidad de difundir contenido infa-
mante, despectivo o amenazador a una
gran cantidad de personas, lo que favorece
la proliferación de la violencia digital, cono-
cida también como ciberviolencia.
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Investigación formativa
La ciberviolencia se define como el uso de la
tecnología para amenazar, intimidar, acosar
o dañar a otro individuo o grupo de perso-
nas. Esto incluye el acoso en línea, la crea-
ción de perfiles falsos, la difusión de rumores
o información falsa, entre otros (Corcoran,
2015). En consecuencia, se convierte en una
forma de agresión cada vez más común,
especialmente en los jóvenes, debido a la
facilidad con la que se puede acceder a
la tecnología. Gracias a este potencial es
que el ciberbullying, la ciberdelincuencia,
y otros fenómenos, han encontrado en las
plataformas digitales un lugar en el cual se
han desarrollado libremente, dando pie a
efectos devastadores (Kowalski et al., 2014).
El ciberbullying o ciberacoso es una for-
ma de expresión de violencia digital que
se produce a través de teléfonos móviles
o internet (Corcoran, 2015). Los estudios
realizados en Colombia han determinado
una prevalencia de 41.9% de implicación
en bullying y un 18.7% para el cyberbullying
(Herrera et al., 2017). En Estados Unidos, se
estima que la victimización por cibera-
coso oscila entre el 10% y el 40% (Kowalski
et al., 2014). Los adolescentes son los más
afectados por esta forma de violencia di-
gital, pues se ha asociado con aislamiento
social, depresión, ansiedad y un deterioro
significativo en su rendimiento académico,
debido a la reducción de su capacidad de
concentración y a una mayor inasistencia
escolar (Kowalski et al., 2004). También se
relaciona con problemas de salud mental,
incluidas las ideas suicidas y el intento de
suicidio (Fernández, 2019). Mujeres y hom-
bres experimentan de manera distintas
estas expresiones de violencia, aunque
son las mujeres quienes llegan a vivir for-
mas graves de ciberacoso, en concreto,
de ciberhostigamiento y de acoso sexual
en línea (Duggan, 2020).
20
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Por otra parte, la ciberdelincuencia se de-
fine como el uso de la tecnología para
cometer actos delictivos. Esto incluye el
uso de computadoras, teléfonos móviles y
otros dispositivos electrónicos para llevar a
cabo actividades como el fraude, el robo
de identidad, el uso indebido de la infor-
mación, el envío de contenido ofensivo y
la distribución de material ilegal. Aunque
estas son algunas de las actividades de-
lictivas más comunes, hay muchas otras
formas de ciberdelincuencia (Drew, 2020).
Según la Oficina de Estadísticas Nacionales
de los Estados Unidos, durante el año 2019
se registraron más de 4.000 delitos infor-
máticos (Bureau of Justice Statistics, 2020);
en Colombia, según el Tanque de Análisis
y Creatividad de las TIC (TicTac, 2020), se
habían registrado 46.527 denuncias por
distintos delitos en 2019, que equivale a un
incremento del 21% respecto al 2020 y refleja
un aumento significativo en la incidencia de
este tipo de delitos. Esta forma de crimina-
lidad también se ha asociado a una gran
cantidad de problemas, como el robo de in-
formación personal y financiera, la difusión
de contenido ilegal, la piratería informática,
el fraude electrónico y el hostigamiento en
línea (Hinchcliffe et al., 2017). La ciberdelin-
cuencia también se ha relacionado con la
violencia de género, ya que los agresores
a veces recurren a la intimidación en línea
para controlar a sus víctimas. Esta forma de
violencia a menudo puede ser aún más di-
fícil de detectar y prevenir que otras formas
de abuso doméstico (Kumar et al., 2020).
La ciberviolencia es un fenómeno cada vez
más presente en nuestra sociedad, y aun-
que se suele culpar a la tecnología como
causante de este problema, esta solo es un
medio por el cual se manifiestan fenóme-
nos comunes. Por ello, es necesario com-
prender a los sujetos que hacen uso de los
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medios digitales para generar estrategias
de cambio. Para hacer frente, se han pro-
puesto soluciones para responder a los dis-
tintos tipos de ciberviolencia. En el caso del
ciberbullying, se recomienda educar a los
adolescentes sobre los riesgos del uso de
internet, fomentar el diálogo entre adultos
y adolescentes y crear canales de comu-
nicación para reportar casos (Rodríguez,
2018). Para hacer frente a la ciberdelin-
cuencia, se propone una serie de acciones.
En primer lugar, es importante sensibilizar a
la población sobre los riesgos asociados al
uso de internet. Además, se busca mejorar
la colaboración entre las autoridades y los
proveedores de servicios de internet, con el
fin de aumentar la detección y respuesta
a estas actividades criminales y así crear
espacios digitales seguros para todos los
usuarios (TicTac, 2020)..
Sin embargo, para enfrentar de manera
efectiva este fenómeno se requiere adop-
tar un enfoque innovador que comprenda
las características psicosociales asocia-
das y promueva soluciones tecnológicas
eficaces. Y qué mejor manera de hacerlo
que a través del entendimiento de la cul-
tura digital y las habilidades con las que
los usuarios se relacionan entre sí para
conectar y compartir información.
Esto implica explorar nuevas perspecti-
vas en el campo de las ciencias cogniti-
vas, que han generado diversas teorías y
métodos para estudiar el funcionamiento
de la mente humana. En este contexto, se
destaca la importancia de la perspectiva
de la cognición enactiva y extendida.
Cognición enactiva y extendida
Las ciencias cognitivas se enmarcan den-
tro de la tradición de estudio de la mente
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Investigación formativa
humana, que ha generado diferentes pro-
puestas teóricas y metodológicas y dado
forma a este campo de investigación.
Este enfoque privilegia el estudio de los
procesos mentales desde una perspec-
tiva funcional, explora cómo las personas
utilizan sus capacidades cognitivas para
interactuar con el mundo y realizar tareas
significativas. De esta forma, las ciencias
cognitivas contribuyen de manera im-
portante a la comprensión de fenóme-
nos individuales y sociales, así como al
desarrollo de intervenciones y abordajes
eficaces para mejorar el funcionamiento
cognitivo de las personas. Ejemplo de esto
es el campo de la cognición social, en el
que teorías como la de Heider (1958) tra-
tan de abordar la violencia desde la atri-
bución causal que hacen las personas a
los grupos.
Sin embargo, entre las décadas de los
años 80 y 90 del siglo XX, gracias a los
aportes de una serie de investigadores
como Varela (et. al. 1991), Clark y Chalmers
(1998) o Maturana y Valera (1980), entre
otros, aparecieron un conjunto de teorías
cognitivas que pusieron en jaque los prin-
cipios básicos de las ciencias cognitivas
de ese momento —especialmente los su-
puestos del conexionismo y el computa-
cionalismo— (Newen et al., 2018). Hablamos
de las teorías 4E, por su origen anglopar-
lante: embodied, embedded, enactive y
extended, las cuales se enfocan en pro-
blemas derivados de la fenomenología, el
constructivismo, el uso de herramientas
del entorno, el contexto de la acción y la
interacción con el mundo que constituyen
la cognición. A continuación, presentare-
mos dos de estas teorías que considera-
mos sirven como modelos teóricos para la
comprensión de la ciberviolencia.
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Teorías enactiva y extendida de la
mente
La teoría enactiva postula que la cognición
no puede ser entendida como un conjun-
to de procesos algorítmicos que ocurren
“antes de la acción” del sujeto, ni tampoco
como aquello que emerge de los procesos
de conexiones nerviosas. Las teorías enac-
tivas afirman que los procesos cognitivos
solo son posibles en la acción misma del
sujeto (Thompson, 2007; Varela et al., 1991).
Por ejemplo, la memoria no surge como
un proceso neuronal o simbólico que an-
ticipa la acción del sujeto, sino que está en
la ejecución de tareas específicas; así, el
conocimiento requerido para “montar bici-
cleta” aparece cuando el sujeto se enfrenta
al acto de montar la bicicleta. De acuerdo
con esta perspectiva, son inseparables
cognición y acción; la cognición es el acto
mismo de montar, comer o bailar. En sín-
tesis, nuestras ideas y comportamientos
están influenciados por las formas en que
interactuamos con nuestro entorno, y con
ello se rechaza las visiones computaciona-
les de la mente. Thompson (2009) enuncia
tres principios fundamentales que sirven de
sustento al enactivismo:
1. El “pensamiento en acción” es una idea
central del enactivismo, se refiere a la
noción de que pensamos y actuamos
al mismo tiempo. Esto significa que
nuestras ideas y comportamientos es-
tán influenciados por las formas en que
interactuamos con nuestro entorno.
2. Otro principio clave es que el cuerpo es
una fuente de conocimiento, la cogni-
ción no se reduce al sistema nervioso,
sino a todo el cuerpo en movimiento.
3. El tercer y último principio del enactivis-
mo es que el mundo es codeterminado
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por el organismo. Esto significa que
la forma en que interactuamos con
el mundo condiciona la forma en que
percibimos y pensamos acerca de él.
Cognición extendida
Desde esta perspectiva, se entiende que la
cognición va más allá de los confines del
cuerpo humano. Los procesos evolutivos
han permitido que ampliemos nuestras
formas de conocimiento al incorporarlos
en herramientas, instrumentos y diversos
productos que almacenan las formas más
avanzadas de cognición (Clark y Chalmers,
1998). Por ejemplo, el pensamiento y el len-
guaje humano no son procesos que que-
dan dentro de la piel, sino que se extienden
a herramientas como las computadoras,
los dispositivos inteligentes o los teléfo-
nos celulares, los cuales facilitan proce-
sos que en otro tiempo debían hacerse
individualmente.
Ciberviolencia y cognición
Veamos la manera como las teorías enacti-
va y extendida permiten comprender algu-
nos elementos de la ciberviolencia. En esta
sociedad de la información, la violencia co-
nectada se almacena y se nos muestra, ya
que existen recursos y medios virtuales que
brindan el acceso a todas estas experien-
cias de violencia expuestas. Esto significa
que no solo es accesible aquella violencia
que nos sucede en el mundo físico, sino
también accedemos a la violencia virtual
extendida en las redes sociales y demás
contenido digital; el cual, por nuestro con-
sumo permanente, nos sumerge en una
cotidianidad en-la-violencia. Un ejemplo
de esto son los medios audiovisuales que
difunden videos, fotografías y demás men-
sajes cargados de violencia. Esto es una
muestra de que emociones en este caso
asociadas a la agresividad —como la rabia
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y similares—, que acompañan la violencia,
se extienden más allá del sujeto a los esce-
narios virtuales.
La teoría enactiva resalta que el uso fre-
cuente y excesivo de los escenarios virtua-
les, así como las acciones del individuo en
las redes, dispositivos y demás, generan
escenarios donde la violencia, la agresivi-
dad y fenómenos asociados están siempre
presentes (en el hogar, el trabajo, la vida
privada o, incluso, llegan a la propia cama
del individuo). Con el tiempo, esto impide
que el individuo tenga espacios alejados
de estas acciones violentas y, por lo tanto,
las conductas violentas se convierten en
parte de su self (identidad cotidiana). En
este sentido, las dinámicas de inserción
permanentes en el mundo digital, dificul-
ta que las personas se den cuenta de la
importancia de desconectarse de la vio-
lencia presente en las redes y de valorar
estos otros espacios.
Reflexiones finales
La ciberviolencia es un fenómeno que
afecta cada vez más a la población en
general y es importante que sepamos
cómo actuar ante estas situaciones. Sin
embargo, las acciones que se asuman
para resolver las problemáticas derivadas
Investigación formativa
de esta deben surgir de una compren-
sión profunda sobre el sujeto psicológico
involucrado. Esto se ha visto tanto en el
desarrollo de este texto como en diversas
investigaciones donde se aprecia cómo
el comportamiento de las personas y
sus estructuras cognitivas se extienden y
afectan la forma de vida dentro y fuera del
ciberespacio. Es indudable que el hecho
de anticipar las situaciones que podrían
convertirnos en víctimas de ciberviolencia
es importante, pero también lo es saber si
estamos contribuyendo desde la acade-
mia a brindar una visión adecuada a esta
problemática.
Por ello, las teorías cognitivas de nueva ge-
neración, como es el caso de la extendida
y enactiva (4E), son una herramienta eficaz
para abordar el contexto de la educación
en la era digital. Estas teorías han permiti-
do profundizar en el concepto de cibervio-
lencia y comprender mejor los procesos
emocionales y psicológicos implicados en
este fenómeno, ya que ayudan a detectar,
entender, evaluar, anticipar y actuar frente
a situaciones de violencia que de otra ma-
nera serían difíciles de identificar. Y en sí
mismas constituyen una alternativa viable
para abordar los problemas relacionados
con la salud y la psicología.

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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar

de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales
Efectos de las prácticas de crianza en el
desarrollo de niños y niñas durante la infancia
temprana en familias disfuncionales
Laura Daniela Aranguren Fonseca, Yulieth Fernanda Gómez Moreno1,
Paola Andrea Pulido Escobar2

Resumen referentes a salud, nutrición, estimulación,

Las prácticas de crianza en familias dis-
funcionales se caracterizan por el uso de
maltrato psicológico, que incluye acciones
como gritos, insultos, amenazas de aban-
dono y humillación. En muchas ocasiones,
estos actos se ven acompañados por
castigos físicos. Para el presente trabajo
se realizó una revisión bibliográfica cuyo
objetivo consistió en identificar los efectos
de las prácticas de crianza de familias dis-
funcionales en el desarrollo de niños y ni-
ñas durante la infancia temprana. De igual
manera, se buscó identificar el impacto
negativo que una familia disfuncional pue-
de tener en el desarrollo de un niño durante
su infancia temprana. Como resultado de
esta situación, los niños pueden desarrollar
comportamientos agresivos, experimen-
tar depresión, estrés, baja autoestima y
presentar dificultades en su proceso de
aprendizaje. Para finalizar , dentro de la in-
vestigación se sugiere la implementación
de programas de prácticas de crianza los
cuales ayudan a las familias y a los cui-
dadores a obtener una mejor compren-
sión sobre la importancia de la crianza, e
incluyen contenidos que abarcan temas
cuidado y protección de los menores.
Palabras clave: prácticas de crianza, fami-
lia disfuncional, niños, desarrollo, infancia.
La estructura familiar es parte fundamen-
tal del desarrollo de un individuo; especí-
ficamente es una fuente de socialización
primaria, dada desde el nacimiento hasta
la infancia. Se caracteriza por la adqui-
sición de normas, valores y patrones de
comportamiento, y de ella depende, en
gran medida, la estructuración de lazos
afectivos. En este sentido, la familia es la
primera red de apoyo y juega un papel
importante en las diferentes áreas de de-
sarrollo de un menor (Aguirre et al., 2000).
Existen algunas familias con características
particulares llamadas “familias disfuncio-
nales”. Para esta denominación suele ha-
ber múltiples definiciones; una de ellas es la
propuesta por Espinoza (2015), quien afirma
que una familia disfuncional es aquella que
incumple con las funciones básicas de la
familia: económica, biológica, educativa,
espiritual y cultural, por lo que no promueve

1 Estudiantes de Psicología. Integrantes del Semillero de Investigación Infancia: Miradas interdisciplinarias

acerca del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correos electrónicos: ldaran-
guren48@ucatolica.edu.co, yfgomez44@ucatolica.edu.co
2 Docente de la Facultad de Psicología. Líder de Semillero de Investigación Infancia: Miradas interdisciplinarias
acerca del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correos electrónicos: papulido@
ucatolica.edu.co, semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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Investigación formativa
el desarrollo favorable de todos sus inte-
grantes. Asimismo, para Yánez y Franco
(2013), un hogar exponen que un hogar
disfuncional es aquel en el que el compor-
tamiento inadecuado de uno de los padres
inhibe el crecimiento de la individualidad y
la capacidad de relacionarse sanamente
entre los miembros de la familia.
En consecuencia, es importante identificar
algunas características presentes en los
padres de una familia disfuncional, tales
como: consumo de sustancias psicoac-
tivas; conductas violentas, controladoras
o autoritarias; negligentes, distantes o so-
breprotectores; adultos con ideologías ma-
chistas y con falta de comunicación. Tales
comportamientos pueden analizarse des-
de la perspectiva de las prácticas de crian-
za, las cuales son acciones concretas que
los adultos, en especial los padres, llevan a
cabo con el propósito de orientar la crianza
de los niños y niñas, buscando promover su
desarrollo, supervivencia e integración a la
vida social. Estas prácticas representan un
medio de control para influir en sus accio-
nes y transmitir valores, formas de pensar y
actuar (Varela et al., 2015).
Siguiendo la línea de estos autores, algu-
nas prácticas de crianza en las familias
disfuncionales se basan en el maltrato psi-
cológico. Este consiste en acciones como
insultos o gritos —los más frecuentes—,
también se presentan amenazas de aban-
dono y humillación con castigos físicos.
El maltrato físico moderado se enmarca
en acciones como palmadas —siendo es-
tas las más frecuentes— y otras conductas
como sacudidas, golpes en manos, pier-
nas, glúteos con objetos y pellizcos.
Por otra parte, en un estudio hecho por
Pérez et al. (2018) se advierte que algunas
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características de las prácticas de crianza
con figuras parentales machistas se basan
en creencias culturales y brechas de des-
igualdad e inequidad entre género, tales
como: el hombre es “bueno” al desenvol-
verse en público y la mujer es “útil” en el
ámbito privado; asimismo, inculcan el pen-
samiento acerca de: la mujer es “buena”
para los cuidados del hogar y crianza de
los hijos; en cambio, el hombre es “bueno”
para los estudios y el trabajo en general.
Estas prácticas de crianza influyen en el
estado emocional de los menores; según
la literatura se plantea que a esta edad
(3 a 6 años) los niños ya sienten emociones
como empatía y culpa, así como altruismo,
orgullo y vergüenza, dadas por la socializa-
ción y patrones de interacción. Sin embargo,
en los niños criados en familias disfuncio-
nales se han identificado algunas conse-
cuencias, como, por ejemplo, trastornos en
el comportamiento. En esta línea, Yánez y
Franco (2013) sostienen que los trastornos
de comportamiento son desviaciones que
se presentan en el desarrollo de la persona-
lidad de los menores, cuyas manifestacio-
nes conductuales son en general variadas
y estables, esencialmente en las relaciones
familiares, escolares y en la comunidad. De
este modo, algunos síntomas conductuales
son: comportamiento agresivo (peleas físi-
cas y crueldad con personas o animales) y
conducta destructora (vandalismo, incen-
dios intencionales, mentira o engaño). Por
otra parte, se identifican ciertas señales en
la afectación del aprendizaje de los meno-
res, tales como: no asistir a la escuela, esca-
parse y hacer travesuras constantes.
Además, Cuervo (2010) señala otros facto-
res de riesgo, como el factor emocional, que
pueden afectar a un niño que crece y se de-
sarrolla en una familia disfuncional. Algunos
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de estos factores incluyen la presencia de
depresión y estrés en los miembros de la
familia, bajo autoestima y sensación de
soledad que está asociada al rechazo y al
desinterés de los padres; por lo que es evi-
dente el daño que puede hacer una familia
disfuncional en el desarrollo de un menor
durante la infancia temprana. Por ello, tal y
como menciona este autor, resulta impor-
tante sensibilizar a los padres y cuidado-
res sobre su rol y su responsabilidad en la
optimización del desarrollo, las habilidades
sociales y emocionales en la infancia, y la
influencia de los modelos en la familia para
el desarrollo de competencias sociales.
Teniendo en cuenta lo anterior, se sugie-
re promover programas de prácticas de
Investigación formativa
crianza que ayuden a las familias y a los
cuidadores a obtener una mejor com-
prensión sobre la importancia de la crian-
za, ya que cubren una gama extensa de
necesidades e incluyen contenidos sobre
salud, nutrición, estimulación, cuidado
y protección de los menores; estos pro-
gramas apoyan a familias con diferentes
problemas tales como la disfuncionali-
dad (Fondo de las Naciones Unidas para
la Infancia, UNICEF, 2016). Finalmente, es
importante recalcar que la familia tiene
un rol facilitador en el desarrollo de con-
ductas psicosociales en los niños, en este
sentido puede facilitar el desarrollo de ha-
bilidades de autorregulación emocional y,
a su vez, prevenir problemas psicológicos
(Varela et al., 2015).

Referencias
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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar
de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales

Influencia de los padres en el uso de

estrategias adaptativas y desadaptativas de
regulación emocional utilizadas por los niños
y niñas durante la infancia intermedia
Ana María Tello Jiménez1, Paola Andrea Pulido Escobar2

Resumen la salud, el desarrollo psicológico y acadé-

La regulación emocional es definida como
la serie de procesos extrínsecos e intrínse-
cos que se encargan de dar seguimiento
a la reacción emocional. En este sentido,
el presente trabajo tiene como objetivo in-
dagar la influencia de los padres en el uso
de estrategias adaptativas y desadapta-
tivas de regulación emocional utilizadas
por los niños y niñas durante la infancia in-
termedia. Se encontró que los padres son
una influencia determinante en el tipo de
estrategias utilizadas por sus hijos e hijas,
y que la regulación emocional de los niños
y niñas es fundamental; en consecuencia,
es de vital importancia que los padres
trabajen en sus propias estrategias de
regulación emocional para que puedan
transmitirlas a sus hijos.
Palabras clave: regulación emocional, es-
trategias adaptativas y desadaptativas,
infancia intermedia.
En los últimos años, la regulación emo-
cional ha sido un término de interés al ser
asociado con aspectos como el bienestar,
mico (Pérez & Bello, 2016). De igual forma,
el control de las emociones cuenta con
implicaciones directas para la autoestima
y la motivación, y estas, a su vez, están re-
lacionadas como indicadores de calidad
de vida. Asimismo, se ha demostrado que
los niños y niñas que cuentan con estrate-
gias adecuadas de control emocional son
considerados socialmente competentes
por sus pares (Soldevila et al., 2014).
Tomando en consideración lo anterior,
la regulación emocional se ha definido
como una serie de procesos extrínsecos e
intrínsecos que se encargan tanto de dar
seguimiento las reacciones emocionales
como de modular dichas experiencias
emocionales, con el fin de alcanzar los re-
sultados esperados por el individuo (López
et al., 2005; Thompson, 1994). Por ello, y
atendiendo a la importancia que tal regu-
lación tiene en la vida de los individuos y,
en especial de los niños y niñas, el presen-
te trabajo tiene como objetivo investigar la
influencia de los padres en el uso de es-
trategias adaptativas y desadaptativas de

1 Estudiante de Psicología. Integrante del Semillero de Investigación Infancias: Miradas interdisciplinarias acer-
ca del bienestar de los niñas y niños en las relaciones parentofiliales. Correo electrónico: amtello10@ucatolica.
edu.co
2 Universidad Católica de Colombia. Docente de la Facultad de Psicología. Líder del Semillero de Investigación
Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca del bienestar de los niñas y niños en las relaciones parentofiliales.
Correos electrónicos:papulido@ucatolica.edu.co; semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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regulación emocional utilizadas por los ni-
ños y niñas durante la infancia intermedia.
La regulación emocional presenta dife-
rencias durante el ciclo vital, en especial
en las edades de los 8 a 12 años. Durante
este período, se observa un cambio en
las estrategias emocionales, pasando de
ser principalmente conductuales a que,
alrededor de los 8 y 9 años, los niños y ni-
ñas comienzan a regular sus emociones
a través de cogniciones y pensamientos
(Garnefski et al., 2007).
Según Reyes Pérez et al. (2007), existen es-
trategias de regulación emocional que son
tácticas o habilidades que están dirigidas
hacia un logro y con las que se busca mo-
dificar ya sea la intensidad, la duración
y/o la expresión de las experiencias emo-
cionales. Con relación a lo anterior, Pulido
Investigación formativa
Escobar (2022) realizó una síntesis de esas
estrategias cognitivas, presentada en la
Tabla 1.
Con referencia a la tabla, se pueden ob-
servar estrategias que contribuyen a que
el estado emocional displacentero sea de
larga duración; así como hay otras que
buscan evaluar de manera positiva la si-
tuación y disminuir su efecto (Reyes Pérez
et al., 2021). De esta manera, las estrategias
cognitivas que se desarrollan en la infan-
cia tendrán repercusiones en el modo de
afrontar situaciones estresantes en la vida
adolescente y adulta (Orgilés et al., 2018).
El uso de ciertas estrategias cognitivas,
como son la rumiación, la autoculpa y la
catastrofización, se han relacionado con
síntomas depresivos y de ansiedad; igual-
mente se encontró relación entre síntomas
de depresión en niños y niñas de 9 a 11 años

Tabla 1.
Tabla de estrategias cognitivas
Estrategia Descripción
Adaptativas
No modificar o controlar las emociones o eventos displacenteros sino, en cambio,
Aceptación
vivirlos sin juzgarlos
Planificación Pensar en qué pasos se realizarán y cómo manejar el evento displacentero
Reenfoque positivo Mantener pensamientos agradables y alegres después de un evento displacentero
Pensamientos que agregan un significado positivo al relacionar el acontecimiento
Revalorización positiva
con el crecimiento personal y el aprendizaje
Acentuar la gravedad del acontecimiento o contrastar lo ocurrido con otros eventos
Poner en perspectiva
de mayor gravedad
Desadaptativas
Pensar excesivamente sobre las emociones o problemas asociados al aconteci-
Rumiación
miento negativo, luego de haber pasado
Pensamientos que anticipan consecuencias exageradas o desproporcionadas, es decir,
Catastrofización
es la disposición a magnificar el valor amenazante de ciertos eventos displacenteros
Autoculpa Pensamiento de culparse a sí mismo acerca del evento displacentero
Culpar a otros Pensamiento de culpar a los demás acerca del evento displacentero
Fuente: Elaboración propia a partir de información de Garnefski et al. (2007), Pulido Escobar (2022) y Reyes Pérez
et al. (2021).

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y estrategias desadaptativas como son de los padres sí se relacionan con las de

catastrofización, autoculpa, culpar a los
demás, y la rumiación; mientras que estra-
tegias adaptativas como son la reorienta-
ción positiva y planeación tienen un efecto
positivo en la prevención de la depresión
en niños y niñas (Orgilés et al., 2018).
Según Denham et al. (2015) y Laible et al.
(2015), cabe señalar que los padres influ-
yen durante el proceso de socialización en
el desarrollo de la regulación emocional
de los niños y niñas mediante procesos
como la administración de contingencias,
el modelamiento, la comunicación emo-
cional y las reacciones que pueden tener
ante los eventos emocionales de sus hijos
e, incluso, ante sus propias habilidades de
regulación emocional. Así pues, los padres
son fundamentales en la adquisición de
las habilidades de regulación emocional;
al comienzo con un acompañamiento
más directo, y luego ajustando las estra-
tegias en la medida que los niños y niñas
empiezan a adquirir sus propios métodos
(López & Puente, 2017).
Las actuales líneas de investigación se
centran en analizar la regulación emo-
cional a partir de las relaciones de apego
seguro, y no tanto en la influencia de los
padres hacia esta; aunque se ha encon-
trado que las estrategias desadaptativas
los hijos, pero no ocurre lo mismo con las
estrategias adaptativas (López & Puente,
2017). Lo anterior se relaciona con el es-
tudio de Bariola et al. (2012), en el cual se
analizaron las relaciones entre los padres
e hijos de 9 a 19 años en el uso de estra-
tegias de regulación emocional, y se en-
contró que la supresión emocional de los
padres fue asociada con la de los hijos;
no obstante, la reevaluación cognitiva de
los padres no se conectó con la de estos.
También López y Puente (2017) argumen-
tan en su estudio que el catastrofismo que
ejercen los padres hacia el niño influye en
la elección de estrategias que este use
para regularse.
Por lo anterior, se puede concluir, en pri-
mer lugar, que la regulación emocional es
fundamental para el desarrollo del niño
y de sus áreas de ajuste a medida que
crece. En segundo lugar, que los padres
son los principales agentes de influencia
en la regulación emocional de sus hijos,
ya que con el ejemplo y las interacciones
diarias brindan estrategias adaptativas o
desadaptativas que posteriormente serán
implementadas por ellos ante situaciones
estresoras o novedosas. Por eso es de vi-
tal importancia que los padres trabajen
en sus propias estrategias de regulación
emocional para que puedan transmitirlas
a sus hijos.

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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar
de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales

Exploración acerca de las estrategias de

intervención implementadas en los niños,
niñas y adolescentes víctimas del conflicto
armado en Colombia
María Camila Sanmartín Galvis, María José Zuleta1, Paola Andrea Pulido Escobar2

Resumen a aquellos que residen en zonas rurales

El presente texto exploró diferentes estra-
tegias de intervención implementadas en
los Niños, Niñas y Adolescentes (NNA) en
condición de víctimas del conflicto arma-
do colombiano. Eventos relacionados con
el reclutamiento y desplazamiento forza-
do obligan a los NNA a vivir situaciones de
amenazas, secuestros, torturas, despojo
de tierras, deserción escolar, delincuencia,
etc., cuyas consecuencias se reflejan en
aspectos físicos, psicológicos, emociona-
les y sociales de los infantes. Se encon-
traron algunas intervenciones sobre las
víctimas del conflicto armado en diferen-
tes programas, pero se tornan insuficien-
tes ya que no poseen una atención directa
y especial para NNA.
Palabras clave: víctimas, conflicto arma-
do, infancia.
El conflicto armado ha ocasionado un
sinnúmero de violaciones a los dere-
chos humanos, los cuales han influido
de forma directa o indirecta en los Niños
Niñas y Adolescentes (NNA), en especial
(Salamanca, 2017). Según Ortiz Jiménez
(2017), la Convención de los Derechos del
Niño impone a los Estados el deber de
adoptar “todas las medidas posibles para
asegurar que las personas que aún no
hayan cumplido los 15 años, no participen
directamente en las hostilidades”, para lo
cual introduce las reglas legislativas ade-
cuadas, como la tipificación penal de la
conducta (art. 38.2). Es pertinente desta-
car que el Estado colombiano promovió el
marco de protección dentro de dicha nor-
ma hasta los 18 años y, así mismo, dispuso
que los menores de edad no podrán ser
adscritos ni siquiera con el consentimiento
de sus padres.
Lo anterior permite poner en tela de juicio
si la solución está simplemente en que
exista una penalización frente a los hechos
cometidos contra los NNA por distintos
grupos. ¿Acaso lo estipulado en un papel
acaba de inmediato con las problemáticas
presentadas? ¿Ocurre realmente así en la
cotidianidad? El interés no solo se debe
centrar en establecer las consecuencias

1 Estudiantes del Programa de Psicología, pertenecientes al Semillero de Investigación Infancias: Miradas in-
terdisciplinarias acerca del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correos electró-
nicos: mcsanmartin50@ucatolica.edu.co, mjzuleta53@ucatolica.edu.co
2 Docente líder del Semillero de Investigación Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca del bienestar de
las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales, Universidad Católica de Colombia. Correos electrónicos:
papulido@ucatolica.edu.co; semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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para estos actores, sino también en el
impacto que genera en las víctimas vivir
estas circunstancias de desplazamiento o
reclutamiento y, además, posteriormente,
verse enfrentadas a reintegrarse en dife-
rentes esferas de sus vidas, y más si son
NNA.
En consecuencia, debe concederse una
importancia cada vez mayor a los diferen-
tes programas que se elaboran en torno
a esta población y a sus características
en particular. El Instituto Colombiano de
Bienestar Familiar (ICBF, 2022) expone un
programa de atención especializada, el
cual, desde el 2001, cuenta con apoyo fi-
nanciero para la protección y el restable-
cimiento de derechos a NNA víctimas de
reclutamiento ilícito y quienes, a su vez,
han sido desvinculados de grupos arma-
dos al margen de la ley.
Se pueden evidenciar de esta forma as-
pectos clave a tener en cuenta para un
proceso de intervención psicosocial en-
focado a los NNA víctimas del conflicto
armado colombiano. Arias y Roa (2015) re-
fieren que esta población lleva inscrita en
sí memorias de horror, abuso y esclavitud,
y por lo tanto, es necesario identificar las
formas de entender y desarrollar los pro-
cesos de memoria, las implicaciones que
estos acontecimientos tienen para ellos,
así como el modo de abordar el recuer-
do mediante la narración y el testimonio.
Frente a esto, el Ministerio de Salud (2017)
expone que en las estrategias de atención
psicosocial diseñadas para este fin debe
buscarse un acercamiento al sentido que
les otorgan los NNA a las vivencias: com-
prender el proceso de construcción de
identidad en la fase anterior a su inclusión
al grupo armado, la estancia, el servicio
prestado y la fase fuera del grupo armado,
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con el fin de realizar una comprensión
del sujeto y generar una mirada integral
que vincule a la familia, la comunidad y el
Estado.
Por otro lado, la corporación AVRE (2011,
como se citó en Arias & Roa, 2015) men-
ciona algunos aspectos que resultan fa-
vorables al momento de trabajar con las
víctimas: a) la valoración de las condicio-
nes sociales y subjetivas; b) un encuentro
que genere confianza y no revictimización,
y c) que este encuentro esté encaminado
a la clasificación la identidad de la vícti-
ma (edad, género, etc.) y a explorar sus
necesidades, ya que la evaluación del tipo
de riesgo y afecciones ayuda a generar el
proceso de atención y a trazar un plan en
los diferentes ámbitos que constituyen a la
persona de manera integral.
Debe considerarse que no solo los NNA
se ven afectados en estas situaciones; el
desplazamiento forzado ocasiona alte-
raciones en el núcleo familiar y/o cuida-
dores, en muchos casos estas llegan a
ser intergeneracionales e impactan en el
proceso de crianza de los menores y en la
conformación de su identidad (Doria et al.,
2021). En entrevistas realizadas a diferentes
profesionales que trabajan con pobla-
ción víctima del conflicto armado desde
diferentes modalidades y técnicas de
intervención, se encuentra que ellos con-
sideran que, en ocasiones, las entidades
deshumanizan a la población, ya que sus
intervenciones son formateadas o proto-
colizadas de tal manera que se centra en
el diligenciamiento de un formato, entor-
peciendo o limitando, en cierta medida,
la práctica, e impidiendo que se lleven a
cabo las intervenciones adecuadas a las
particularidades de cada caso. En cuanto
a la población infantil, se destaca que la
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violencia que ha vivido una víctima afecta
negativamente sus habilidades en gene-
ral y sus capacidades de crianza, lo cual
se puede evidenciar en diversos casos de
negligencia y embarazos adolescentes
(Castro & Olano, 2018).
Se menciona como ejemplo uno de los
programas enfocados a la atención psi-
cosocial de víctimas del conflicto arma-
do: el Programa de Atención Psicosocial y
Salud Integral a Víctimas (PAPSIVI), descri-
to en el Decreto 4800 de 2011, artículo 164.
Este programa, aunque busca trabajar
desde un abordaje integral, no contem-
pla una atención directa y específica a la
población infantil. Si bien se enfoca en los
componentes individual, social y familiar,
y este último abarca relaciones entre los
diferentes miembros, no existe un aparta-
do especial para los NNA; lo más cercano
a esto es una sección que contempla la
violencia sexual de la población infantil en
el marco del conflicto armado.
Por lo tanto, y teniendo en cuenta lo ex-
puesto en el presente resumen, se desta-
ca la importancia de programas a nivel
nacional y los desafíos que estos generan
en torno a las intervenciones psicosocia-
les que aspiren a considerar las particu-
laridades no solo culturales, sino también
subjetivas que se presentan en torno a los
NNA. Se trata de no estandarizar y homo-
geneizar procesos empleados para una
integración social, ya que estos pueden in-
fluir en la efectividad, el funcionamiento y
desarrollo de los infantes, ocasionando tal
vez más afecciones que bienestar. En este
sentido, el presente análisis tiene como
objetivo aportar a la construcción de po-
líticas sólidas encaminadas a abordar el
dolor, sufrimiento, tristeza, angustia en los
niños, niñas y adolescentes.

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Investigación formativa
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Semillero de Investigación en Psicología y Sexualidad

Validación por jueces de un instrumento

de medición de afectividad y erotismo
en trabajadoras sexuales de Bogotá
Valentina Pinto Parra, Mateo Pardo Rodríguez,
Isabela Silva Bohórquez1, Andrés Felipe Avendaño Montañez2

Resumen de un instrumento con énfasis en estos

La dimensión de la sexualidad marca en el
ser humano una tendencia relacional que
puede afectar de manera positiva o nega-
tiva el vínculo entre pares en los diferen-
tes contextos. En tal sentido, este estudio
se centró en el análisis del contenido del
instrumento de medición de afectividad
y erotismo en trabajadoras sexuales en
Bogotá. Para ello se presentó el instru-
mento a tres jueces expertos, con el fin de
realizar un proceso de conceptualización y
juicio sobre la validez de su contenido. Este
artículo recoge la versión final del instru-
mento. Poder contar con herramientas que
permitan su medición en estos escenarios
podría favorecer la toma de decisiones
para plantear procesos psicoeducativos
y rutas para el ejercicio y garantía de sus
derechos sexuales y reproductivos.
Palabras clave: validez de contenido, juicio
de expertos, erotismo, vinculación afectiva,
trabajadoras sexuales.
Existen pocas investigaciones en Colombia
sobre las dimensiones erótica y afectiva
en trabajadoras sexuales. En este horizon-
te, la presente investigación propone el di-
seño, elaboración, validación y aplicación
dos grandes procesos de la sexualidad. La
investigación se encuentra en curso y se
proyecta el potencial apoyo por parte de la
Asociación de Mujeres Buscando Libertad
ASMUBULI, registrada ante el Ministerio de
Trabajo como el primer Sindicato Nacional
de Mujeres Trabajadoras Sexuales de
Colombia (SINTRASEXCO) (Castellanos,
2020).
Las trabajadoras sexuales son aquellas
mujeres que ofrecen servicios sexuales
por diferentes medios, ya sea virtual o físi-
camente, a cambio de dinero. Hoy buscan
ser reconocida legal y socialmente como
trabajadoras dignas, con derechos y de-
beres, sin estar bajo el estigma social de la
vergüenza. Adicionalmente, el trabajo se-
xual es considerado como una actividad
económica, social y profesional con poco
cubrimiento jurídico por parte de las leyes,
las cuales deberían proporcionar algún
tipo de protección y derechos laborales
(Silva et al., 2014; Acero et al., 2019).
Según el estudio realizado por Segovia
y Delgado (2008) se establece que las
relaciones sexuales han cambiado de
cierta manera gracias al uso de nuevas

1 Integrantes del Semillero de Investigación en Psicología y Sexualidad. Correos electrónicos: vpinto44@

ucatolica.edu.co, mpardo23@ucatolica.edu.co, isilva40@ucatolica.edu.co, isilva40@ucatolica.edu.co
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biotecnologías como son las píldoras an-
ticonceptivas, la pastilla del día después y
el viagra, las cuales han transformado las
dinámicas sexuales entre las parejas; por
ende, y dentro del ámbito que determina
la investigación, las trabajadoras sexuales
al prestar un servicio coital se ven obliga-
das a seducir y a tener una estética cor-
poral adecuada para atraer a sus clientes,
ya que es en el acto sexual donde se ven
subordinadas a la mera satisfacción de
estos y a su versión subjetiva de lo que el
erotismo representa. En este sentido son
utilizadas como entretenimiento de con-
sumo cuya única finalidad es la satisfac-
ción del deseo sexual.
Desde una óptica complementaria, Rojas
(2001) plantea que la sexualidad es, “ante
todo, una construcción mental de aque-
llos aspectos de la existencia humana que
adquieren significado sexual y, por lo tanto,
nunca es un concepto acabado y definiti-
vo, pues la existencia misma es continua y
cambiante” (pp. 71-72).
En este contexto, se propone el diseño y
la validación de un instrumento centrado
en dos grandes subsistemas de la se-
xualidad: erotismo y vinculación afectiva
(Rubio, 1994) en trabajadoras sexuales. El
instrumento consta de 30 ítems, y ha sido
evaluado por tres jueces expertas, todas
psicólogas con amplias trayectorias en
sexualidad, evaluación, investigación e
intervención.
Referencias
Acero, M., Laverde, C., & Bedoya, J. (2019). Prostitución en Colombia: hacia una aproximación socioju-
rídica a los derechos de los trabajadores sexuales. Revista Latinoamericana de Derecho Social,
29, 289-315. http://www.scielo.org.mx/pdf/rlds/n29/2448-7899-rlds-29-289.pdf
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Investigación formativa
La validez de contenido consiste en qué tan
adecuado es el muestreo que hace una
prueba del universo de posibles conductas,
de acuerdo con lo que se pretende medir
(Cohen & Swerdik, 2001). Para evaluar el ins-
trumento se realizaron los siguientes pasos:
a) preparar las instrucciones de cómo se
debía calificar cada ítem, b) seleccionar
tres expertos con conocimientos en esta-
dísticos descriptivos y en investigación. La
calificación de las jueces fue de 1 a 4, siendo
1 No se cumple con el criterio y 4 Se cumple
con el criterio. Con relación a lo anterior, se
tomó la decisión de que si era inferior a 3.0
se eliminaba, y si sumaba 3.5 se modifica-
ba; en el caso en que la puntuación fuera
de 4.0 no se realizaba alguna modificación.
Los aspectos que se evaluaron fueron: su-
ficiencia, claridad, coherencia y relevancia.
El instrumento inicialmente constaba de 38
ítems; se modificaron 21, y se descartaron
8; por consiguiente, se dejó un instrumento
de 30 ítems, en 4 categorías: Vinculación
afectiva (1-9), Erotismo (10-20), Bienestar
(21-26) y Trabajo sexual (27-30).
Por último, se dejó abierta la posibilidad
de aplicarlo con el apoyo del Sindicato de
Trabajadoras Sexuales de Colombia. Puesto
que para esta población existen pocas in-
vestigaciones sobre estos dos subsistemas,
con este instrumento de medición se podría
llegar a plantear procesos psicoeducativos
y rutas para el ejercicio y garantía de sus
derechos sexuales y reproductivos.
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Investigación formativa

Castellanos, W. (2020). Sindicalismo y trabajo sexual en Colombia [Tesis de Maestría. Flacso

Argentina]. https://repositorio.flacsoandes.edu.ec/bitstream/10469/16313/2/TFLACSO-2020WPC.
pdf
Cohen, R., & Swerdlik, M. (2001). Pruebas y evaluación psicológicas: Introducción a las pruebas y a la
medición (4.ª ed.). McGraw-Hill.
Rojas, H. (2001). Modelos de la sexualidad humana. Revista Liberabit, 7, 71-72. http://ojs3.revistaliberabit.
com/publicaciones/revistas/RLE_07_1_modelos-de-la-sexualidad-humana.pdf
Rubio, E. (1994). Introducción al estudio de la sexualidad humana. En Consejo Nacional de Población
(CONAPO), Antología de la sexualidad humana (Tomo I, 1.a ed.). CONAPO.
Segovia, J. S., & Delgado, J. B. (2008). Guiones sexuales de seducción, erotismo y los encuentros
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org/pdf/381/38118772012.pdf
Silva, I., Salazar, F., & Ordóñez, F. (2014). Dinámicas familiares y factores psicosociales que inciden en
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Meta [Proyecto de Aula. Universidad Nacional Abierta y a Distancia, UNAD]. https://repository.
unad.edu.co/bitstream/10596/2425/3/40189663.pdf

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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar

de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales
Efectos del castigo físico como agente de
control y disciplina en la crianza de niños
y niñas en infancia temprana
Karol Andrea Camargo Rojas, Maribel Cruz Gutiérrez,
Valentina Díaz Acevedo1, Paola Andrea Pulido Escobar2

Resumen El objetivo del presente artículo consis-

El castigo físico se define como una prác-
tica utilizada en la crianza de niños y niñas,
que implica utilizar la fuerza para causar
dolor como método de control y disciplina
por parte de los cuidadores. En el presente
trabajo se realizó una revisión bibliográfica
que tuvo como objetivo recoger informa-
ción acerca de los efectos que tiene el
castigo físico como agente de control y
disciplina en la crianza de niños y niñas en
la infancia temprana. Se encontró que el
castigo físico puede ocasionar afecciones
en los ámbitos físicos, psicológicos, socia-
les y cognitivos a corto, mediano y largo
plazo. Teniendo en cuenta estos efectos,
es fundamental que se promuevan he-
rramientas que permitan entrenar a los
padres en interacciones parentales que
involucren el diálogo, la comunicación, la
expresión de afecto, el apoyo y un vínculo
cálido, sin ignorar el establecimiento de
límites y la modificación de comporta-
mientos que se consideran inadecuados.
Palabras clave: castigo físico, efectos,
prácticas de crianza, infancia temprana.
te en exponer información acerca de los
efectos que tiene el castigo físico como
agente de control y disciplina en la crianza
de niños y niñas en la infancia temprana.
De esta manera, el castigo físico es cono-
cido como el uso de fuerza por parte de
los cuidadores, el cual causa cierto grado
de dolor con la intención de corregir con-
ductas no deseadas (Capano et al., 2018).
Es normalmente utilizado como práctica
en la crianza de los niños y niñas, y busca
mediante un estímulo negativo disminuir
o eliminar un comportamiento específico.
Se distinguen dos distintos tipos de casti-
go: el castigo verbal, mediante palabras y
desaprobación; y el castigo físico, a través
de palmadas, golpes, quemaduras, ras-
guños, pellizcos y mordidas. Este último,
en ocasiones es considerado útil y eficaz
para enseñar al niño (Sauceda García et
al., 2006).
El castigo físico forma parte de la con-
ducta parental y es un método de control
para la disciplina de los niños y niñas en
muchas partes del mundo. No obstante,

1 Integrantes del Semillero de Investigación Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca del bienestar de las
niñas y los niños en las relaciones parentofiliales, de la Universidad Católica de Colombia. Correos electrónicos:
kacamargo93@ucatolica.edu.co, mcruz49@ucatolica.edu.co, vdiaz61@ucatolica.edu.co
2 Docente líder del Semillero de Investigación Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca del bienestar de las
niñas y los niños en las relaciones parentofiliales, de la Universidad Católica de Colombia. Correos electrónicos:
papulido@ucatolica.edu.co; semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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Investigación formativa
se ha encontrado una variedad de efectos
secundarios y consecuencias poco favo-
rables que se atribuyen a esta práctica
(Aguirre et al., 2006). Estos efectos varían
en relación con distintos factores como
lo son: la duración, frecuencia y gravedad
del castigo, o la edad y el estado de de-
sarrollo de los niños y niñas (Child Welfare
Information Gateway, 2019). La edad es
una de las variables más influyentes dado
que se ha encontrado que el castigo físico
ocurre con más frecuencia en menores de
5 años, y disminuye a medida que el niño
crece. También existe una tendencia de
castigar físicamente más a los niños que
a las niñas (Aguirre et al., 2006).
Las consecuencias que ocasiona el cas-
tigo físico se dan en distintos ámbitos:
físicos, psicológicos, sociales y cognitivos.
A nivel físico, se ha observado la existen-
cia de una conexión directa entre el cas-
tigo y la salud física de los niños y niñas;
se presenta un mayor riesgo de padecer
afectaciones de salud a largo plazo como:
desnutrición, problemas de vista, restric-
ción al realizar actividades diarias, daño
cerebral, migrañas y enfermedades pul-
monares. Además, es posible relacionar
el castigo físico con distintas afectaciones
en el cerebro, a nivel funcional y de creci-
miento en distintas estructuras cerebrales:
el hipocampo, esencial para la memoria y
el aprendizaje; el cerebelo, que participa
en acciones motoras; y la amígdala, fun-
damental para procesar las emociones
(Child Welfare Information Gateway, 2019).
En cuanto al ámbito psicológico, se ha
encontrado que los efectos pueden ser
diversos y dependen de características
socioculturales y personales de los niños y
niñas. Sin embargo, el castigo físico afecta
el desarrollo emocional y puede causar
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depresión, ansiedad, alteraciones aními-
cas y conductuales. Así mismo, genera
perturbaciones personales que lleva a los
niños y niñas a desarrollar mecanismos de
defensa impredecibles como la inseguri-
dad, baja autoestima, descuido físico, tris-
teza, agresividad y distracción (Huttanus
et al., 2016; Valbuena, 2017).
Por su parte, en el comportamiento so-
cial se ha encontrado una fuerte relación
entre los comportamientos delictivos y
antisociales en los niños y niñas y el cas-
tigo físico. Es posible afirmar que los niños
presentan conductas agresivas hacia sus
pares e, incluso, superiores, al internalizar
las relaciones sociales de las que forman
parte. De la misma manera, si infligir daño
es el método que usan los padres para
modificar conductas, es probable que
el niño utilice el mismo método cuando
quiera influir en los comportamientos de
los demás (Smith, 2006).
Además, se ha descubierto evidencia que
indica que las personas que experimentan
violencia física en sus primeras etapas de
vida, tienen una mayor probabilidad de
presentar futuras conductas de abuso fí-
sico hacia los niños que tengan a cargo,
e incluso, hacia su cónyuge (Burela et al.,
2014).
Por otro lado, haciendo referencia al de-
sarrollo cognitivo, se ha encontrado una
fuerte asociación entre el bajo rendimien-
to académico y el castigo físico. Esto pue-
de deberse al uso del castigo físico como
única estrategia de enseñanza, ignorando
otras estrategias que han demostrado
ser efectivas para el aprendizaje, como la
explicación y el razonamiento. Del mismo
modo, la ansiedad sentida por los niños
y niñas ante la idea de ser castigados
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físicamente puede contribuir a inhibir con-
ductas de exploración del mundo social y
físico, limitando sus habilidades cognitivas
(Smith, 2006).
Teniendo en cuenta los efectos y conse-
cuencias previamente descritas, es fun-
damental que los psicólogos promuevan
herramientas que permitan entrenar a los
padres en interacciones parentales que
involucren el diálogo, la comunicación, la
expresión de afecto y apoyo. Numerosos
estudios sobre intervenciones en parenta-
lidad positiva han mostrado que las actitu-
des y conductas de los padres en cuanto
al uso de castigo físico pueden ser cam-
biadas, y es posible entrenar estrategias
Investigación formativa
educativas para disminuir su incidencia
(González et al., 2016; Zacarías et al., 2017).
Dado que muchos padres tienen arraigada
la creencia de que el método de crianza
que aprendieron es el mejor, es importan-
te promover psicoeducación para que los
padres puedan adquirir nuevos conoci-
mientos y habilidades que les permitan
establecer límites con sus hijos, y modifi-
car los comportamientos que consideran
inadecuados, de manera que se respeten
los derechos de los niños y niñas y se cons-
truya un vínculo cálido que refleje atención,
empatía, confianza, aprobación y sensibili-
dad ante sus necesidades (González et al.,
2016; Quesada, 2019; Zacarías et al., 2017).

Referencias
Aguirre, E., Montoya, L., & Reyes, J. (2006). Crianza y castigo físico. Diálogos 4. Discusiones en la
Psicología Contemporánea. Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Ciencias. https://
www.aacademica.org/eduardo.aguirre/8
Burela, A., Piazza, M., Alvarado, G., Gushiken, A., & Fiestas, F. (2014). Aceptabilidad del castigo físico en
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pe/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1726-46342014000400008&lng=es&tlng=es.
Capano Bosch, Á., González Tornaría, M., Navarrete, I., & Mels, C. (2018). Del castigo físico a la paren-
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https://www.childwelfare.gov/pubpdfs/sp_long_term_consequences.pdf
González, M., Navarrete, I., & Capano, A. (2016). Prevención de castigo físico: promoviendo la pa-
rentalidad positiva en la temprana infancia. VIII Congreso Internacional de Investigación y
Práctica Profesional en Psicología. Universidad de Buenos Aires. https://www.aacademica.
org/000-044/309
Huttanus, S., Mazariegos, D., & Ramírez, A. (2016). Violencia en la familia: efectos psicológicos del
maltrato. Revista PsicoEducativa: Reflexiones y Propuestas, 2(4), 99-104. https://psicoeducativa.
iztacala.unam.mx/revista/index.php/rpsicoedu/article/view/53
Quesada, R., Niebla, Y., Sánchez, L., & Vázquez, W. (2019). Intervención educativa sobre violencia intra-
familiar y maltrato infantil en familias disfuncionales. Medimay, 26(1), 28-40. http://medimay.sld.
cu/index.php/rcmh/article/view/1350
Sauceda García, J., Olivo Gutiérrez, N., Gutiérrez, J., & Maldonado Durán, M. (2006). El castigo físico en
la crianza de los hijos. Un estudio comparativo. Medigraphic, 63. https://www.medigraphic.com/
pdfs/bmhim/hi-2006/hi066d.pdf

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Investigación formativa

Smith, A. (2006). The State of Research on the Effects of Physical Punishment. Social Policy Journal
of New Zealand, 27, 114-127. https://www.msd.govt.nz/documents/about-msd-and-our-work/
publications-resources/journals-and-magazines/social-policy-journal/spj27/27-pages114-127.
pdf
Valbuena, C. (2017). Efectos psicológicos de la institucionalización en niños, niñas y adolescentes.
Universidad Católica de Pereira. http://hdl.handle.net/10785/4133
Zacarías, S. X., Aguilar, V. J., & Andrade, P. (2017). Efectos de las prácticas parentales en la empatía
y la conducta prosocial de preadolescentes. Informes Psicológicos, 17(1), 71-86. http://dx.doi.
org/10.18566/infpsic.v17n1a04

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Beneficios cognitivos de los videojuegos
María Camila Rueda1, Itala Marina Camargo Escobar2
Resumen
Este artículo aborda los resultados de la
revisión enfocada en los beneficios cog-
nitivos de los videojuegos. Para ello, parte
de una descripción de las tipologías de
videojuegos y la industria, y de una carac-
terización de los productores y los consu-
midores de videojuegos. Posteriormente,
examina las restricciones que existen fren-
te a estos últimos y profundiza, finalmente,
en los beneficios que obtienen los usuarios
en materia emocional, de activación de
reflejos, en proceso de atención y tareas
para el desarrollo de motricidad fina y
gruesa. En cuanto a las conclusiones, es-
tas se abordan más allá de la estigmati-
zación; en ellas se presentan algunas de
las bondades de los videojuegos y su uso,
y cómo estos pueden favorecer procesos
que van desde la interacción hasta el pro-
cesamiento cognitivo.
Palabras clave: videojuegos, beneficios
cognitivos, evaluación.
Definición
Los videojuegos se pueden definir como
juegos electrónicos compuestos por reglas
y sistemas interactivos a los cuales se pue-
de acceder por medio de una o más pla-
taformas, como consolas, computadores,
dispositivos portátiles y árcades (Rivera &
Torres, 2018). El enfoque propuesto y desde
1 Integrante del Semillero de Investigación Psicometría, Medición y Evaluación Aplicada a la Psicología. Correo
electrónico: mcrueda43@ucatolica.edu.co
2 Líder del Semillero de Investigación Psicometría, Medición y Evaluación Aplicada a la Psicología. Correo elec-
trónico: imcamargo@ucatolica.edu.co
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Semillero de Investigación Psicometría, Medición y
Evaluación aplicada a la psicología
el cual se puede comprender y analizar la
estructura de los videojuegos es el marco
de trabajo o framework (MDA) planteado
por Hunicke et al. (2004, como se citó en
Moscardi, 2018), el cual establece tres ám-
bitos de análisis: mecánico, dinámico y
estético. El primero abarca datos y algorit-
mos, es decir, define las principales carac-
terísticas del juego, como las condiciones
de victoria y los mecanismos de aplica-
ción de reglas. El segundo se refiere a la
relación entre comportamiento y tiempo
de ejecución, es decir, a las respuestas
que obtiene un jugador tras realizar una
acción (Gallant, 2009, como se citó en
Moscardi, 2018). Y el último se refiere a las
emociones que se generan en el jugador
tras interactuar con el juego (Hunicke et al.,
2004, como se citó en Moscardi, 2018).
Clasificación
Las principales clasificaciones que tienen
los videojuegos se basan en el género y en
el público al que va dirigido. En cuanto a
su clasificación por géneros, Sedeño (2010)
categoriza a los videojuegos en:
• Acción. Consiste en actividades en las
que el jugador debe dar una respuesta
precisa, determinada y rápida. En este
tipo de juego no es necesaria la pla-
nificación debido a que se interactúa
con el ambiente mediante acciones
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Investigación formativa
simples y rápidas como disparar y
golpear.
• Estrategia. El jugador tiene la necesi-
dad de planificar y establecer estrate-
gias para avanzar en el juego.
• Aventura. Tiene como elemento fun-
damental la toma constante de deci-
siones y un alto nivel de interacción.
• Deportivos. Consisten en el entrena-
miento de habilidades, procesamiento
de información y el desarrollo de la
sensomotricidad de manera individual
o en equipos, por medio de deportes.
• Simulación. Permite experimentar e
investigar el funcionamiento de má-
quinas, fenómenos y situaciones, al
igual que asumir el mando y realizar
estrategias complejas, abarcando así
conocimientos específicos.
• Rol. Similares a los juegos de aventura,
pero la resolución de enigmas depen-
de de la evolución de los personajes.
En este género se resalta el subtipo
MMORPG (Massive Multiplayer Online
Role Playing Game), el cual consiste en
permitir el acceso de miles de jugado-
res a un mundo virtual, en el cual pue-
den interactuar entre ellos.
En cuanto a la clasificación según el pú-
blico al que va dirigido, los videojuegos se
clasifican de acuerdo con las necesidades
e idiosincrasia de cada país (MinTIC, 2015).
En la mayoría de casos, se utiliza la cla-
sificación Entertainment Software Rating
Board (ESRB), un sistema norteamericano
que se caracteriza por colocar un sello en
la carátula del videojuego (Mintic, 2015).
Este sistema categoriza los videojuegos en:
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• Early Childhood (EC) - Primera infan-
cia. Se refiere a los juegos orientados a
niños entre los 3 y 5 años. Su temática
es principalmente educativa.
• Everyone (E) - Todos. Su contenido
está dirigido a todos los públicos. Los
juegos contienen un poco de anima-
ción, violencia fantástica, así como el
uso de insultos suaves.
• Everyone 10 and up (E 10+). Dirigido a
mayores de 10 años. Contienen ani-
maciones, fantasía, violencia e insultos
leves.
• Teen (T) - Adolescentes. Dirigido a
jóvenes de 13 años en adelante, y se
caracteriza por tener violencia, suge-
rencias sexuales, humor crudo, sangre,
juegos de azar y uso de un lenguaje
fuerte.
• Mature 17+ (M) - Edad madura.
Restringidos para menores de 17 años,
ya que su contenido muestra explíci-
tamente violencia, sangre, insultos y
temas sexuales.
• Adults only 18+ (AO) - Solo para adul-
tos. Dirigido a un público mayor de 18
años, ya que su contenido tiene esce-
nas prolongadas de violencia, desnu-
dez y temas sexuales.
En Colombia, desde el 2014, con base en
la Ley 1554 de 2012, el sistema que se uti-
liza para la comercialización o alquiler de
videojuegos abarca dos categorías: la
primera corresponde a los videojuegos de
circulación abierta, es decir, a los juegos
dirigidos a todo público, entre los cuales
se encuentran los deportivos, de entreteni-
miento educativo, informativo y fantástico;

la segunda categoría corresponde a los
videojuegos de circulación restringida, los
cuales van dirigidos a un público mayor de
18 años, y abarcan temas sexuales, bebidas
alcohólicas, drogas ilegales, actos discrimi-
natorios, violencia, entre otros (MinTIC, 2015).
Industria de los videojuegos
Productores
De acuerdo con Newzoo (2021), uno de los
mayores proveedores de conocimientos y
análisis del mercado de los videojuegos,
esta industria generó 175,800 millones de
dólares en 2021. Este incremento se debe
en gran medida a las mejoras en la in-
fraestructura de Internet y a los planes
de datos más accesibles para teléfonos
inteligentes y conexión móvil a Internet.
Estos factores son especialmente impor-
tantes para el aumento de jugadores en
Oriente Medio, África y América Latina, re-
giones que experimentan un crecimiento
rápido en términos de jugadores. Además,
como se observa en la Figura 2, la región
Figura 1.
Mercado mundial de juegos por región en 2021
Europe
$31.5Bn
-5.6% YoY
Latin America
$7.2Bn
+5.1% YoY 4%
North America
$42.6Bn
-7.2% YoY
Fuente: Tomado de Newzoo (2021). https://newzoo.com/insights/trend-reports/newzoo-global-games-market-
report-2021-free-version.
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de Asia-Pacífico, que incluye Asia Central,
Meridional y el Sudeste Asiático, alberga
alrededor del 55% de los jugadores a nivel
mundial (Newzoo, 2021)., como el trabajo
a distancia y la interrupción de las líneas
de suministro, que siguieron causando
problemas en los demás dispositivos, es-
pecialmente en consolas y PCs.
Debido a que la región Asia-Pacífico utiliza
masivamente el móvil, se consolida como
la región del mundo con mayores ingre-
sos por videojuegos, con 88,200 millones
de dólares en 2021, lo cual corresponde al
50.2% de todos los ingresos, como se evi-
dencia en la Figura 1. También identifica a
China como el principal impulsor, con una
contribución de 45,600 millones de dólares.
Por otro lado, Norteamérica es la segun-
da región más importante en el mercado,
con ingresos de 42,600 millones de dóla-
res. Esta región se vio más afectada por la
emergencia sanitaria ya que este país tie-
ne énfasis en las consolas (Newzoo, 2021).
Middle East & Africa
$6.3Bn
+4.8% YoY
4%
18%
Asia-Pacific
2021 Total $88.2Bn
$175.8Bn 50%
+3.0% YoY
-1.1%
YoY
24%
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Investigación formativa
Consumidores
Para 2021 se proyectaba que habría apro-
ximadamente 3,000 millones de jugadores
en todo el mundo, cifra que, al ser com-
parada con la del 2020, supone un incre-
mento de 5.3%. Este incremento se debe en
gran medida a las mejoras en la infraes-
tructura de Internet y a los planes de datos
más accesibles para teléfonos inteligentes
y conexión móvil a Internet. Estos factores
son especialmente importantes para el au-
mento de jugadores en Oriente Medio, África
y América Latina, regiones que experimen-
tan un crecimiento rápido en términos de
jugadores. Además, como se observa en
la Figura 2, la región de Asia-Pacífico, que
incluye Asia Central, Meridional y el Sudeste
Asiático, alberga alrededor del 55% de los
jugadores a nivel mundial (Newzoo, 2021).
Prohibición en China
En China, la Administración Nacional de
Prensa y Publicaciones estableció en 2021
Figura 2.
Jugadores globales por región en el 2021
Middle East & Africa
434M
+10.1% YoY
Europe
408M
+4.0% YoY
14%
Latin America
289M
+6.2% YoY
North America
212M
+0.7% YoY
Fuente: Tomado de Newzoo (2021). https://newzoo.com/insights/trend-reports/newzoo-global-games-market
-report-2021-free-version
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una serie de regulaciones que limitan
el tiempo en que los menores de edad
juegan videojuegos, con el propósito de
“proteger eficazmente la salud física y
mental de los menores”. Estas nuevas
medidas consisten en que los menores
de 18 años solo podrán jugar viernes, sá-
bados, domingos y feriados entre las 8:00
p. m. y las 9:00 p. m . a excepción de los
días feriados, en los cuales se añade una
hora extra (BBC, 2021). En razón a esto, las
empresas de videojuegos tienen prohibi-
do brindar sus servicios a menores fuera
del horario establecido, además tendrán
que implementar sistemas de verificación
de nombres e identidad, ya que algunos
menores utilizan documentos falsos para
acceder a juegos como personas adul-
tas. Así mismo, la Administración Nacional
aumentará la frecuencia e intensidad de
las inspecciones de las empresas para
asegurarse de que cumplen los límites
de tiempo y “sistemas contra la adicción”
(BBC, 2021).
15%
Asia-Pacific
2021 Total
1, 615M
3.0Bn 55%
+5.3% +4.8% YoY
YoY
10%
7%
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Las restricciones que ha propuesto el go-
bierno de China —el principal productor y
consumidor del mundo y que justamente
categoriza a los videojuegos como “dro-
ga electrónica” u “opio espiritual” (DW,
2021)— abren de nuevo el debate sobre
los aspectos negativos y positivos de vi-
deojuegos y sobre el grado de influencia
e impacto psicológico que tienen sobre
los jugadores. Si bien es cierto que a lo
largo de la historia la mayoría de las in-
vestigaciones que abarcan las cualida-
des de los videojuegos se han centrado
en el contenido violento y su relación
con la agresividad cognitiva, afectiva y
comportamental, y con los procesos la
desensibilización, adicción y aislamiento
(Cañellas, 2014), también los videojuegos
traen consigo varios beneficios. En esta
ocasión se especificarán los cognitivos y
comportamentales.
Beneficios de los videojuegos
El uso de videojuegos puede beneficiar
las habilidades cognitivas, ya que estas
son estimuladas a lo largo de las sesiones
de juego. Entre las habilidades cognitivas
estimuladas se pueden encontrar la per-
cepción, atención, memoria, resolución de
problemas y toma de decisiones (Shatz,
2017, como se citó en Moscardi, 2018).
Así mismo, pueden generar emociones
positivas asociadas con el juego como
actividad de relajación, sensación de
satisfacción y mejora en la autoestima
(Mishra et al., 2012; Villani et al., 2018, como
se citó en González, 2018). De igual ma-
nera, los videojuegos pueden promover
hábitos saludables a través de historias
en las que los jugadores pueden sen-
tirse identificados. Así también, existen
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Investigación formativa
videojuegos dirigidos a personas que
desean hacer ejercicio, “exergames” o
“videojuegos activos”, los cuales pue-
den brindar beneficios a la salud física
(Deutsch et al., 2015; Brito Gomes et al.,
2018; Lu et al., 2012; Thompson et al., 2012,
como se citó en González, 2018).
Generalmente los juegos de acción se re-
lacionan con mejoras en la activación de
reflejos, procesamiento de información,
toma de decisiones, flexibilidad cognitiva,
procesamiento viso-espacial, habilidad
de multitarea, atención, tareas de enu-
meración, resolución espacial, coordina-
ción visomotora y tareas de seguimiento
de objetos múltiples (Eichenbaum et al.,
2014, como se citó en Moscardi, 2018). En
esta categoría también se encuentran los
shooter games, juegos que mayormente
se han relacionado con el incremento de
la agresividad cognitiva, emocional y/o
comportamental; sin embargo, se ha en-
contrado que estos pueden mejorar las
habilidades de percepción visual, atención
visual, cognición visoespacial y habilida-
des espaciales (Cañellas, 2014).
Los juegos de estrategia se relacionan
con mejoras en habilidades de planifica-
ción, anticipación y diseño de estrategias,
conmutación de tareas, capacidad para
resolver problemas complejos dentro del
mundo virtual y memoria de trabajo; y al
igual que en los juegos de acción, este gé-
nero se relaciona con la flexibilidad cogni-
tiva y toma de decisiones (Glass et al., 2013,
como se citó en Moscardi, 2018). Y, por úl-
timo, los videojuegos puzzle favorecen las
habilidades espaciales, atención selectiva,
memoria y coordinación oculomanual
(Martín Gutiérrez et al., 2009, como se citó
en Moscardi, 2018).
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Investigación formativa

Conclusión
Aunque a través del tiempo los videojuegos
han sido estigmatizados por sus efectos
negativos como la agresividad, adicción y
el aislamiento, estos mismos tienen un gran
potencial como opción actividad de ocio
para las personas, debido a que tiene varios
beneficios que pueden contribuir en el de-
sarrollo de habilidades cognitivas y compor-
tamentales de los jugadores. Cada una de
estas habilidades se puede ejercitar en ma-
yor o menor medida de acuerdo con el gé-
nero que el jugador decida escoger, ya que,
teniendo en cuenta su dimensión mecánica
y dinámica, los juegos están estructurados
de diferentes maneras, lo cual da como re-
sultado la diversificación de habilidades que
se pueden reforzar. Así también, de acuerdo
con la dimensión estética, los videojuegos
brindan emociones positivas como la rela-
jación, sensación de satisfacción y aumento
en los niveles de autoestima.
Por otro lado, uno de los motivos que
tuvo China para establecer las restriccio-
nes e intensificar las inspecciones en las
empresas de videojuegos es que los niños
juegan videojuegos de clasificaciones dis-
tintas a las que les corresponden, ya que
utilizan documentos falsos para acceder
como personas adultas. Por ello, es de
gran importancia que los padres de niños
o adolescentes, o ellos por sí mismos, se
percaten de la clasificación de los video-
juegos según el público al cual van dirigi-
dos, ya sea el de Entertainment Software
Rating Board (ESRB) o el que esté preesta-
blecido para cada país.
Por último, es pertinente destacar que el
debate sobre si los videojuegos son en
su mayoría benéficos o perjudiciales está
presente en la actualidad, ya que esta
industria es una de las que están tenien-
do mayor impacto en el mercado a nivel
mundial. La industria incrementa el con-
sumo de sus productos cada año, porque
están al alcance de la mayoría de perso-
nas gracias a la variedad de formatos en
los que se pueden presentar, por ello es
importante delimitar los aspectos positi-
vos y negativos de los videojuegos.

Referencias
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con los videojuegos a tres horas semanales. BBC Mundo. https://www.bbc.com/mundo/
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de grado. Universitat de les Illes de Balears]. https://dspace.uib.es/xmlui/bitstream/han-
dle/11201/980/TFG.%20Videojuegos%2C%20Nativos%20Digitales%20y%20Salud%20Mental.
pdf?sequence=1&isAllowed=y
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en el ámbito de la salud. Revisión bibliográfica. Universidad de La Laguna – Tenerife.
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se clasifican los videojuegos. En TIC confío. https://www.enticconfio.gov.co/conoce-como-se-
clasifican-los-videojuegos

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Investigación formativa
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Argentina, Facultad de Psicología y Psicopedagogía.] http://bibliotecadigital.uca.edu.ar/
greenstone/cgibin/library.cgi?a=d&c=tesis&d=videojuegos-habilidades-cognitivas-moscardi
Newzoo. (2021). Global Games Market Report 2021. Newzoo. https://newzoo.com/insights/
trend-reports/newzoo-global-games-market-report-2021-free-version/
Rivera, E., & Torres, V. (2018). Videojuegos y habilidades del pensamiento. Ride. Revista Iberoamericana
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educación. Comunicar: Revista Científica de Comunicación y Educación, 17(34), 183-189. https://
dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3167056

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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar
de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales

Revisión teórica del estilo

de crianza democrático
Jessica Katherine Zuluaga Canay, Karen Bernal Castro, María Fernanda González1,
Paola Andrea Pulido Escobar2

Resumen en esta relación se propicia el diálogo, con

El presente trabajo de investigación tuvo
como objetivo buscar información con re-
lación a las características y ventajas del
estilo de crianza democrático. Lo anterior,
mediante una mirada guiada por las teo-
rías y la perspectiva de diferentes autores
en cuanto a áreas del desarrollo infantil,
tales como social, conductual, emocional
y cognitiva. Finalmente, y como conclusión
de la revisión teórica, se pudo identificar
que este estilo parental es uno de los más
eficaces debido a su gran alcance al verse
representado en cada una de las etapas
de desarrollo de los niños; aun así, se re-
salta que este no es el único y que la bús-
queda del equilibrio está fundamentada
en la relación que se presenta en cada
uno de los estilos de crianza.
Palabras clave: crianza democrática, esti-
lo parental, infancia.
El estilo de crianza democrático es el equi-
librio que encuentran los padres entre las
respuestas a las necesidades de los niños,
niñas y adolescentes (NNA), y la definición
consensuada de las normas (ICBF, 2020);
una comunicación frecuente y abierta, en la
que los padres escuchan el punto de vista
y la opinión propia de sus hijos, generando
reconocimiento y respeto mutuo entre los
integrantes del núcleo familiar. Además, este
modelo implica la enseñanza de los dere-
chos y deberes, y el establecimiento de nor-
mas claras de comportamiento con apoyo
emocional a los hijos, así los padres logran
una gran influencia para promover la inde-
pendencia (Fuentes et al., 2022; ICBF, 2020).
Características
Girardi et al. (2006) identifican que la
práctica de crianza democrática tiene
altos niveles de afecto, con normas claras
y precisas que se pueden cumplir, y son
flexibles, ajustándose a cada una de las
necesidades que tienen los niños, niñas
y adolescentes. Asimismo, estos autores
destacan que los padres ponen límites y
actúan como guía para llevar a cabo el
cumplimiento de las normas.
Aunola (2000) plantea que los padres
que practican este estilo de crianza son

1 Estudiantes del Programa de Psicología, perteneciente al Semillero de Investigación Infancias: miradas

interdisciplinarias acerca del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales, Universidad
Católica de Colombia. Correos electrónicos: jkzuluaga16@ucatolica.edu.co, kdbernal57@ucatolica.edu.co, mf-
gonzalez30@ucatolica.edu.co
2 Docente líder del Semillero de Investigación Infancias: Miradas interdisciplinarias acerca del bienestar de las
niñas y los niños en las relaciones parentofiliales, de la Universidad Católica de Colombia. Correos electrónicos:
papulido@ucatolica.edu.co; semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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exigentes y receptivos, tienen una alta
participación en la vida de los NNA, y se
ocupan de incrementar la confianza y los
buenos niveles de comunicación abierta.
Esto se evidencia en el aumento de la au-
tonomía psicológica y el control de la con-
ducta; también destaca a nivel escolar, el
alto rendimiento académico y el compro-
miso de todos en la escuela.
Baumrind (1971, como se citó en Vargas
et al., 2021) afirma que esta práctica fa-
vorece la independencia, la libertad de
pensamiento y promueve la resolución
de conflictos a partir de la comunicación,
generando ámbitos con interacción social
positiva.
Ventajas
La presente tabla describe las ventajas
que se presentan en diferentes dimensio-
nes del estilo de crianza democrático:
Investigación formativa
Conclusión
A modo de cierre, es importante resaltar
que el estilo de crianza democrático es el
equilibrio en el modelo parental que va-
rios adultos implementan de forma aser-
tiva para lograr un balance entre calidez
y control (De la Torre Cruz et al., 2014). Se
puede destacar que aunque este estilo
de crianza tiene distintas ventajas no es el
único que los padres pueden implementar
en la formación de vida de sus hijos, ya que
cada familia implementa los estilos según
su criterio, cultura y experiencias. Los pa-
dres buscan establecer estilos de crianza
claros en sus hogares con el fin de validar
cada uno de los procesos de desarrollo de
sus hijos, pero aunque se quieran encami-
nar hacia un estilo en específico no hay un
modelo perfecto ni verdadero.

Tabla 1.
Ventajas del estilo de crianza democrática
Dimensión Estilo de crianza democrática
Promueve de forma positiva la socialización y desarrollo de competencias
como son: alto nivel de autoestima, bienestar psicológico, mayor autocontrol,
Social
motivación y autonomía. Facilita el vínculo con la sociedad para el reforza-
miento de dichas habilidades (Jiménez, 2009).
Se busca controlar y restringir el comportamiento de los niños, niñas y ado-
lescentes con normas y límites claros, flexibles y coherentes a sus edades. Se
Conductual infunde el método inductivo, al explicar y promover normas, principios y valo-
res para obtener comportamientos adecuados, con la opción de que los NNA
pueda debatir o discutir de forma respetuosa (De la Torre Cruz et al., 2014).
Los padres son capaces de comprender a sus hijos a nivel emocional, al
mismo tiempo ellos regulan sus propias emociones y sensaciones, lo que los
Emocional hace capaces de sobrellevar la carga emocional que puedan presentar los
infantes, a la vez que fortalecer los lazos paternos filiales (Rafael & Castañe-
da, 2021).
El niño será beneficiado con un buen lenguaje expresivo, comprensión y
estructuración espacial (Velarde & Ramírez, 2017). Se permite un desarrollo
Cognitivo
de distintas actitudes y normas morales que, como consecuencia, pueden
incrementar un buen rendimiento académico (Torres, 2020)

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Investigación formativa

Referencias
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za#:~:text=Finalmente%2C%20encontramos%20el%20estilo%20democr%C3%A1tico,la%20
definici%C3%B3n%20consecuada%20de%20normas.
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https://www.fapacealmeria.es/wp-content/uploads/2016/12/ESTILOS-EDUCATIVOS.pdf
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org/pdf/1793/179353616001.pdf

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Ser porque hemos sido: La conexión
emocional en la reconstrucción del
tejido social para la paz
Amaranta Pardo Calderón1, Nelly Ayala Rodríguez2
Resumen
Este ensayo se propone reflexionar sobre
la situación actual de la sociedad colom-
biana tras la firma de los Acuerdos de Paz,,
las expectativas que ha suscitado y la
transición social que exige su implemen-
tación. La reflexión gira en torno a uno de
los procesos fundamentales de la psico-
logía comunitaria: la conexión emocional
compartida, la cual es de vital importan-
cia para el propósito final de transforma-
ción y cambio social. Esta conexión está
compuesta por los lazos afectivos que se
construyen entre el individuo y el colecti-
vo a partir de objetivos comunes, historias
y experiencias compartidas, de ahí que
constituya uno de los rasgos distintivos del
sentido de comunidad. Para construir esta
conexión con los demás miembros del
grupo, es necesario involucrar el mundo
interior de cada individuo ya que este no
se desarrolla como un ser aparte del gru-
po y de su historia. De esta manera, desde
la psicología comunitaria, la construcción
de este lazo emocional compartido actúa
como un marco necesario que permitirá
generar avances en los procesos actuales
de reconciliación.
Palabras clave: Conexión emocional com-
partida, sentido de comunidad, psicología
comunitaria.
1 Integrante del semillero Politeia, Correo electrónico: apardo55@ucatolica.edu.co
2 Líder del semillero Politeia, Correo electrónico: nayala@ucatolica.edu.co
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Semillero Politeia
En Colombia, una de las mayores proble-
máticas a la que poca atención se le ha
prestado es el fortalecimiento de los tejidos
sociales de la población. Estos tejidos han
sido afectados desde los primeros días de
la construcción del país y han sufrido un
deterioro aún mayor debido a los graves
acontecimientos que hemos enfrentado
en nuestra historia reciente. Un ejemplo
claro ejemplo es el conflicto armado que
ha marcado la historia de Colombia desde
hace más de medio siglo; sin embargo, hoy
en día, gracias a la firma de los Acuerdos
de Paz, el país atraviesa por una fase de
desarrollo social clave, en el que la recons-
trucción y reconciliación social, aunque
cuestiones complejas de conseguir, son
elementos fundamentales del Diálogo.
Desde la perspectiva de la psicología co-
munitaria, la búsqueda de transformación
y cambio social requiere desarrollar el
sentido de comunidad, es decir, de des-
pertar y fortalecer los sentimientos de per-
tenencia, importancia, fe y compromiso
que tienen los miembros de un grupo con
el grupo. Este sentido de comunidad está
compuesto por cuatro elementos princi-
pales, interconectados entre sí, lo que per-
mite entender el sentido de comunidad
como un proceso integral y no lineal. Estos
son: sentido de pertenencia, influencia,
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Investigación formativa
satisfacción de necesidades y conexión
emocional compartida (McMillan, 1976;
McMillan & Chavis, 1986, como se cita en
Ramos-Vidal & Maya-Jariego, 2014).
En esta ocasión enfocamos nuestro inte-
rés en el último componente. La conexión
emocional compartida está constituida
por los lazos afectivos que se construyen
entre el individuo y el colectivo a partir de
objetivos comunes, historias y experien-
cias compartidas, que resultan traducirse
en redes intergrupales asimiladas como
apoyo social. Se plantea la conexión emo-
cional como fruto de la historia colectiva,
es decir, un pasado y un presente que
anteceden e identifican; por lo tanto, com-
partir la historia individual permite desper-
tar emociones en otros y darse cuenta de
que, al igual que la historia permite sentir
la experiencia ajena, esta termina por ser
más cercana, a todos y a cada uno, de lo
que parece. Un claro ejemplo es el ejerci-
cio de la Justicia Especial para la Paz (JEP)
y la Comisión de la Verdad. Tener la opor-
tunidad de escuchar la realidad desde la
perspectiva de quienes vivieron la guerra
directamente, abre un espacio para el
desarrollo no solo de empatía con la his-
toria, sino de consideración y, valga decir,
de conexiones trascendentales y únicas
(Cueto et al., 2015; Ayala et al., 2020).
De esta manera, se parte desde lo que
cada quien es como individuo hacia lo
que será como miembro del grupo. En el
momento en el que se es parte del gru-
po, se siente personalmente aquello que
le sucede al grupo y, a su vez, se permite
que el grupo sienta lo que le sucede al in-
dividuo. Sería imposible llegar a establecer
un lazo emocional sin reconocer al otro en
todo su espectro, sin tener en cuenta que
aquello que le sucede individualmente a
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otro también afecta al grupo o sin reco-
nocernos a nosotros mismos en historia y
esencia, pues el estar conectados por una
historia común, nos volvemos material y
resultado de un tejido constante.
La existencia de eventos que nos mar-
can como comunidad, los que ponen en
riesgo las tradiciones y valores, son como
una crisis, un momento en la historia en la
que solo hay dos caminos: el cambio para
avanzar dentro de la unión o el estanca-
miento que lleva a la desvinculación. La
conexión depende de la calidad de inte-
racción que provoque dicha experiencia y
el significado que tenga para cada uno de
los integrantes; de allí que sea necesaria
una inversión de tiempo, energía o emo-
ción del individuo hacia el colectivo para,
de esta manera, abrir paso al enlace espi-
ritual que concreta la conexión emocional
compartida. Conexión que permitirá que
trascienda más allá de sí mismo el vínculo
afectivo que el individuo construye en co-
munidad (Ayala et al., 2020).
De esta manera propiciar la conexión
emocional, como base del sentido de co-
munidad, tiene consecuencias positivas
para el bienestar social. Este inicia desde
la percepción del bienestar psicológico
individual y resulta en el impacto colectivo
que funciona retroalimentado todos los
procesos anteriores (Cueto et al., 2015).
Por estas razones, desde la psicología
comunitaria y retomando preceptos de
la psicología ancestral, este ensayo con-
cluye, en primer lugar, que no se puede
hacer ni construir paz, en todo el sentido
de la palabra, sin recurrir a lo personal,
sin actuar desde el interior, sin involu-
crarnos como personas en esencia; no es
posible participar de la reconciliación y
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la reconstrucción de tejidos sociales sin
hacernos hilo. Es necesario sentir, mirar al
pasado y volver a caminar desde lo que
otros han vivido, de trascender la con-
ciencia en espíritu y razón para una evo-
lución real; es necesario estar dispuesto a
conectar no en superficie sino en profun-
didad emocional, amar y sentir el dolor
con otros, y así entender como individuos
Investigación formativa
que cumplimos un papel fundamental en
la historia debemos reconocer la impor-
tancia de los demás tanto como la de
nosotros mismos. Es necesario cuestio-
narnos constantemente sobre nosotros e
involucrarnos en la realidad social que se
está desarrollando en nuestro contexto.
Debemos comprender, apropiarnos y vivir
la idea de ser porque hemos sido.

Referencias
Ayala, N., Rey, N., & Chaparro, J. 2020. Sentido de comunidad: ¿Utopía o posibilidad para la recons-
trucción del tejido psicosocial colombiano? Revista Eureka, 17(2), 326-349.
Cueto, R., Espinosa, A, Guillén, H., & Seminario, M. (2015). Sentido de Comunidad como fuente de bien-
estar en poblaciones socialmente vulnerables de Lima, Perú. Pontificia Universidad Católica del
Perú. PSYKHE, 25(1), 1-18. doi:10.7764/psykhe.25.1.814
León, L., & Pérez, P. (2020). Reflexiones ancestrales para la psicolonia en colomnia: Un debate comu-
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Ramos-Vidal, I., & Maya-Jariego, I. (2014). Sentido de comunidad, empoderamiento psicológico y par-
ticipación ciudadana en trabajadores de organizaciones culturales. Psychosocial Intervention,
23, 169-176. http://dx.doi.org/10.1016/j.psi.2014.04.001
Sant Miller, M. (2016). Sense of community: Connecting theory with practice in the Mariscal sector, Quito,
Ecuador [Sentido de comunidad: Conectando la teoría con la práctica en el sector La Mariscal,
Quito, Ecuador]. Independent Study Project (ISP) Collection. 2478. https://digitalcollections.sit.
edu/isp_collection/2478

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Semillero Politeia
Conexión emocional como estrategia para
la construcción del sentido de país
Fabián Blanco Rivero, Camila Garzón Quiroga, Rafael Puro Landivar,
Nelly Ayala Rodríguez1
Resumen
El presente ensayo busca provocar en los
lectores una reflexión sobre la necesidad
urgente que tenemos todos los colom-
bianos de instalar y/o fortalecer nuevas
formas de relacionamiento para contribuir
al mejoramiento de la calidad de vida de
las poblaciones de este país. Como estu-
diantes de psicología y pertenecientes al
semillero Politeia consideramos que no es
necesario tener un título profesional para
poder hacer aportes concretos. En nuestro
caso, hemos tenido la oportunidad de co-
nocer y entender uno de los procesos fun-
damentales de la psicología comunitaria
como es el sentido de comunidad. Uno
de los componentes de este proceso es
la conexión emocional compartida y, so-
bre ella, hemos fundamentado la reflexión
presente. Consideramos que es urgente
repensarnos y asumir una mirada crítica
sobre las formas como pensamos y senti-
mos a los demás. El país empieza en cada
uno de nosotros.
Palabras clave: Comunidad, sentido de
comunidad, conexión emocional.
Colombia es uno de los países con ma-
yor riqueza en biodiversidad, de manera
similar sus múltiples tradiciones y culturas
han hecho cálido a un país que ha sufrido
infinidad de guerras y un conflicto interno
1 Integrantes del Semillero Politeia. Correos electrónicos: fblancor08@ucatolica.edu.co, mcgarzon33@ucatoli-
ca.edu.co, rpuro75@ucatolica.edu.co, nayala@ucatolica.edu.co
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que lleva más de 50 años. Los actores de
estas hostilidades han sido numerosos:
grupos guerrilleros, bandas paramilitares,
delincuencia común, entre otros, quienes
han impuesto su autoridad y fuerza, y le
han negado a Colombia la posibilidad de
vivir en paz.
En este punto las preguntas que emergen
son las siguientes ¿El conflicto interno en
Colombia es la única problemática que
sigue desangrando al país? ¿Es acaso
nuestra indiferencia y la falta de empatía
con el otro lo que dificulta poder salir de
la encrucijada de la violencia? ¿Nos he-
mos olvidado o nunca nos han enseñado
a reconocer la importancia de ese otro en
la construcción de la vida personal y, por
ende, de país? ¿Quién es el otro y que sig-
nifica tener un sentido de país?
Como lo plantea Ayala (2019), Colombia
requiere la colaboración y cooperación de
todos los actores involucrados en la bús-
queda de soluciones, para la construcción
de un mejor futuro.
Las personas constantemente están en
relación con otras, a través de su trabajo,
estudio o lugar de residencia. Sin embargo,
las relaciones interpersonales y afectivas
no se desarrollan por la cercanía física, sino
por el vínculo y la confianza que se crea
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al compartir con el “otro”, con los demás.
Gracias a eso es que percibimos a “los
otros” como parte de nosotros, lo cual nos
lleva a comprender que no solo construi-
mos una identidad individual, sino también
una identidad colectiva. Esta comprensión
nos otorga una nueva perspectiva para
ver al “otro” como un elemento influyente
en nuestra vida personal.
Desde esta óptica, la psicología comuni-
taria —como una disciplina con propósito
de aportar al cambio social— exalta la
importancia del sentido de comunidad
como proceso psicosocial fundamental
que contribuye a hacer posible el propó-
sito referido. El sentido de comunidad es
definido por Sarason (1974) como la sen-
sación de pertenecer a un sistema social.
Lo define como aquel sentimiento de per-
tenencia compartido que da importancia
a cada uno de los miembros en sus roles
establecidos, lo que posibilita satisfacer
las necesidades y un compromiso de
mantenerse unidos. En la propuesta de
McMillan y Chavis (1986), este proceso tie-
ne varios componentes: la membresía, la
influencia, el refuerzo de necesidades y la
conexión emocional. Dado que el presen-
te ensayo se fundamenta en este último
componente, a continuación se darán
unas breves definiciones de los elemen-
tos implicados en él.
La conexión emocional según Montero
(2004) se encuentra estrechamente rela-
cionada con el hecho de pertenecer a una
comunidad, compartir fechas y aconteci-
mientos especiales, mantener relaciones
estrechas y afectivas con muchas per-
sonas, saber que se cuenta con ellas en
cualquier situación. Por otra parte, Meza
(2009) la define como la percepción que
tienen los individuos de sentirse seguros y
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apoyados por los demás integrantes del
grupo al que pertenecen; de esta mane-
ra el vivir tanto tiempo en el mismo lugar,
compartiendo con las mismas personas,
hace que se formen diferentes lazos con
cada una de ellas. Para Vega (2012), la
conexión emocional implica la percepción
del otro como un par; es decir, como un
igual con características en común en si-
tuaciones, historias, vivencias, etc.. Vallejo
et al. (2017) la definen como el sentimiento
elevado de vinculación a la comunidad, la
cual proporciona apoyo social a muchas
personas, lo que permite poner en eviden-
cia el vínculo que existe entre la conducta
participativa y la resolución de conflictos
comunitarios. Esto, a su vez, aumenta los
sentimientos de competencia y control, y
disminuye los sentimientos de alienación.
Ayala (2019) plantea cómo el desarrollo
de las capacidades de los integrantes de
la comunidad se hace posible cuando
reconocen y valoran la importancia de la
confianza y el respeto mutuo. En este sen-
tido, como lo plantea Goleman (2006), una
de las fuentes más fuertes del sentimiento
humano es la calidad de las relaciones.
Ello significa que, a mayor número de es-
tados de ánimo provenientes de las inte-
racciones con otras personas, mayor será
el contagio emocional.
A partir de los planteamientos anteriores
se hace patente la importancia que tie-
ne la construcción de cadenas afectivas
entre las personas, para favorecer la evo-
lución de una sociedad que trascienda
el individualismo y promueva formas de
pensar, actuar y sentir en relación con los
demás. En consecuencia, la construcción
comunitaria es un proceso colectivo don-
de median la historia y las motivaciones
de la comunidad para obtener ciertos re-
sultados (Ramos,2018). Casanova (2019)
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Investigación formativa

plantea cómo la participación ciudadana importancia y el impacto que tienen los

en los medios comunitarios contribuye,
entre otros aspectos, a la construcción
de una cultura democrática basada en
los principios de libertad, dignidad y per-
tenencia, y a fortalecer las comunidades
con lazos de vecindad o de mutua cola-
boración. Desde esta perspectiva, y como
lo menciona Goleman (2006), “el desafío
crucial para este siglo será el expandir el
círculo de aquellos a quienes contamos
como nosotros y reducir el número de los
que contamos como ellos” (p.452).
Actualmente, muchos colombianos creen
que la paz, la equidad, la igualdad y la
reconstrucción del tejido psicosocial es
algo utópico; sin embargo, los autores del
presente ensayo tienen la convicción de
que los grandes cambios empiezan por
pequeñas acciones y, una de ellas, es re-
conocer la importancia que tiene el otro
en la construcción de la vida personal y,
como consecuencia, de la vida comuni-
taria. Este punto de vista hace patente la
vínculos emocionales, los cuales pueden
llevar al compromiso y a la conciencia-
ción de la vida toda. Para ello es necesario
dejar de lado las posturas individualistas,
egoístas e indiferentes que llevan a hacer
pensar que las problemáticas surgen allá
afuera, ocultando el hecho de que somos
interdependientes y, en este sentido, que
el mundo social refleja el mundo personal
y este, a su vez, refleja el social. En corres-
pondencia con este planteamiento, Ayala
(2020) pone en evidencia la necesidad de
resignificar la dimensión humana, lo que
implica el fortalecimiento de la conciencia
crítica en todos los actores sociales.
En definitiva, el sentido de comunidad
como proceso fundamental de la psico-
logía comunitaria, tal y como se eviden-
cia en el apartado referido a la conexión
emocional, contribuye en gran medida a
la comprensión de lo que significa la con-
vivencia pacífica y a la construcción de la
paz en Colombia.

Referencias
Ayala, N. (2019). Sentido de comunidad en contextos de pobreza: caso Colombia. En K. Herazo, &
B. Moreno (Comps.), Investigación-intervención en Psicología Social Comunitaria (pp. 23-46).
Ediciones Universidad Nacional Autónoma de México.
Ayala, N. (2020). Re-significación de la dimensión humana como estrategia para construir paz. En
Ximena Lozano (Coord.), Psicología y praxis transformadoras (1ª ed., pp. 71-78). Ediciones Cátedra
Libre. http://catedralibremartinbaro.org/pdfs/Psicologia-praxis.pdf
Casanova, H. (2019, 21 de enero). La participación ciudadana en el espacio público. [Blog]. https://
www.laaab.es/2019/01/la-participacion-ciudadana-en-el-espacio-publico/
Goleman, D. (2006). Inteligencia social. Planeta.
McMillan, D. W., & Chavis, D. (1986). Sense of Community: A Definition and Theory. Journal of Community
Psychology, 14, 6-23. https://doi.org/10.1002/1520-6629(198601)14:1<6::AID-JCOP2290140103>3.0.CO;
2-I
Meza, G. (2009). Comunidad y sentido de comunidad. La intervención del Programa Puente en seis
familias en situación de extrema pobreza en la comunidad de La Florida [Trabajo de Grado,
Universidad de Chile. Escuela de Psicología]. https://repositorio.uchile.cl/bitstream/hand-
le/2250/106217/cs-meza_g.pdf?sequence=3&isAllowed=y

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Investigación formativa
Montero, M. (2004). Introducción a la psicología comunitaria: desarrollo, conceptos y procesos (1.a
ed.). Paidós.
Ramos, J. (2018). Los medios comunitarios indígenas como construcción de memoria en resistencia
en Bolivia. Revista América Latina Hoy, 78, 17-36. https://doi.org/10.14201/alh2018781736
Sarason, S. (1974). The Psychological Sense of Community: Prospects for a Community Psychology.
Jossey Bass.
Vallejo, M., Moreno, M., & Ríos, M. (2017). Sentido de comunidad, fatalismo y participación en con-
textos de crisis socioeconómica.Psychosocial Intervention, 26(1), 1-7. https://scielo.isciii.es/scielo.
php?script=sci_arttext&pid=S1132-05592017000100001
Vega, S. (2012). Ciencia 3-6: laboratorios de ciencias en la escuela infantil. Graó.

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Semillero de Investigación Psicología Experimental y Aplicada

El uso de tecnologías de la información

y la comunicación en la medición
de procesos psicológicos
David Santiago Casas Soriano, Juan Felipe Saavedra Chávez, Laura Geraldine Cortés
de Narváez, Manuela María del Rocío Pinzón Serrano, Gabriel Eduardo Almeida1,
Ivonne Edith Alejo Castañeda2

Resumen acerca de la atención, entendida como un

El presente artículo expone el desarrollo de
ejercicios de investigación del Semillero de
Psicología Experimental y Aplicada con el
uso de tecnologías de la información y la
comunicación para la medición de proce-
sos psicológicos. Se resaltan las ventajas
para el avance de la investigación en psi-
cología y en otras áreas del conocimiento.
Palabras clave: Procesos psicológicos,
medición, tics.
Como miembros del Semillero de Inves-
tigación Psicología Experimental y Aplicada
y en desarrollo de actividades propias de
la investigación en psicología que res-
ponden al proceso contextual y coyuntu-
ral para la investigación, y derivadas en
este caso de la pandemia por COVID-19,
se aprovechó la oportunidad para em-
plear las Tecnologías de la Información y
la Comunicación (TIC) como herramienta
para la recolección de información que
pudiera ser aplicada a experimentos rela-
cionados con los procesos de memoria y
atención en estudiantes universitarios.
Para la realización de estos experimentos se
retomó la definición de Arango et al. (2020)
proceso cognitivo básico con capacidad
limitada, cuya función consiste en con-
trolar y orientar la actividad consciente
enfocada en un objetivo. Así mismo, se
identifica la atención como un proceso
multidimensional compuesto por 5 niveles.
Los experimentos desarrollados por el
Semillero con el uso de las TIC se relacio-
naron con la atención sostenida, la cual se
encarga de mantener una conducta du-
rante un tiempo determinado en respues-
ta a un estímulo.
Para los experimentos relacionados con
el proceso de memoria, específicamen-
te con la memoria de trabajo, se parte
de la definición de Baddeley (2010), quien
refiere que la memoria de trabajo es la
capacidad para mantener información,
constituyendo esta un espacio limitado de
trabajo mental responsable de mantener
y manipular la información antes de que
se elimine. Tal y como afirman Plieger &
Reuter (2020), al hacer uso de este tipo de
memoria, los individuos tienen la capaci-
dad de tomar decisiones, ejercer control
cognitivo, aprendizaje y comprensión de
falsas creencias.

1 Integrantes del Semillero de Psicología Experimental y Aplicada, Correos electrónicos: dscasas66@ucatolica.

edu.co, jfsaavedra09@ucatolica.edu.co, mmpinzon22@ucatolica.edu.co, gealmeidal@javeriana.edu.co,
2 Líder del Semillero de Psicología Experimental y Aplicada, Correo electrónico: iealejo@ucatolica.edu.co

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En el 2021, el Semillero asumió como reto de
formación la formulación de experimentos
que pudieran desarrollarse a través del di-
seño de recursos en línea, como los formu-
larios de Google, las aplicaciones y páginas
web, de instrumentos de evaluación psico-
lógica, dado que a través de estas herra-
mientas es posible realizar las mediciones
de procesos psicológicos. En concordancia
con esto, se formuló un primer experimento
relacionado con la medición de la atención
sostenida y un segundo experimento para
la medición de la memoria de trabajo bajo
condiciones de estrés.
En el primer experimento de atención sos-
tenida se buscó relacionar las variables
e identificar si la música de videojuegos
puede favorecer o interferir en las tareas
de atención sostenida (Balderrabano,
2013); y en el segundo, determinar el grado
de incidencia del estrés sobre la memoria
de trabajo en un entorno desafiante espe-
cífico, en concreto, una catástrofe natural
como la pandemia.
Como estrategias de recolección de in-
formación, en primer lugar, se diseñaron
Investigación formativa
formularios de Google Forms tanto para los
consentimientos informados como para el
cuestionario de variables sociodemográfi-
cas y, a continuación, se realizaron las apli-
caciones de los instrumentos de evaluación
psicológica. Para el primer experimento se
aplicó Stroop del BANFE 2 (Jarrín, 2015) y la
prueba de dígitos y símbolos, y para el se-
gundo, el N-Back (Owen et al., 2005). La fase
de aplicación de los experimentos se en-
cuentra avanzada, pero se espera ampliar
la muestra de participantes, de manera
que los hallazgos puedan ser concluyentes.
En definitiva, se puede concluir que la investi-
gación buscó generar nuevas herramientas
y aportes significativos a la comprensión del
funcionamiento de los procesos superiores
en el marco de las ciencias del comporta-
miento, y para el desarrollo de ejercicios de
investigación en el Semillero, la oportunidad
para acceder a muestras de participantes a
través de la virtualidad. El uso de las TIC de-
sarrolló la creatividad y recursividad de sus
integrantes para continuar con las acciones
encaminadas al perfeccionamiento de sus
competencia, habilidades y valores como
investigadores.

Referencias
Arango, J. C., Wilson, B. A., & Olabarrieta, L. (2020). Principios de la rehabilitación neuropsicológica.
Manual Moderno.
Baddeley, A. (2010). Working memory. Current Biology, 20(4), R136-R140. https://doi.org/10.1016/j.cub.2009
.12.014
Balderrabano, S. (2013). Aspectos compositivos en la música para videojuegos: La música proce-
dural. http://www.fba.unlp.edu.ar/9jornada2013/mesa3/ponencia_balderrabano.pdf
Jarrín, C. F. (2015). Estandarización de la Batería BANFE-2 para evaluar las funciones ejecutivas en
adolescentes entre 15 a 17 años en la ciudad de Ambato [Tesis Maestría, Universidad Central del
Ecuador]. http://www.dspace.uce.edu.ec/bitstream/25000/7183/1/T-UCE-0007-61pg.pdf
Owen, A., McMillan, K., Laird, A., & Bullmore, E. (2005). N-back working memory paradigm: A meta-anal-
ysis of normative functional neuroimaging studies. Human Brain Mapping, 25(1), 46-59. https://
pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/15846822/
Plieger, T., & Reuter, M. (2020). Stress & executive functioning: A review considering moderating factors.
Neurobiology of Learning and Memory, 173(1), 1074-7427. https://doi.org/10.1016/j.nlm.2020.107254

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Semillero de Investigación Balance
Relación entre moda, imagen corporal y
conducta alimentaria en Latinoamérica
Daiani Neriad Cortés Ospina1, Sara Díaz Rico1, Andrés Mauricio Santacoloma Suárez2
Resumen
Este trabajo forma parte de los proyec-
tos de investigación dentro de las acti-
vidades del Semillero de Investigación
Balance. En él se explora la relación que
existe entre moda, imagen corporal y
conducta alimentaria no solo con el fin
de indagar la naturaleza de esta relación,
sino de poner en evidencia la importancia
de abordar estos temas para mejorar la
calidad de vida. Se definen como varia-
bles la conducta alimentaria y su relación
con aspectos personales como la moda,
la imagen corporal y la exposición a me-
dios de comunicación en población ju-
venil adulta. Para el análisis se realizó un
diseño trasversal de enfoque cualitativo.
Palabras clave: Conducta alimentaria,
moda, imagen corporal.
El objetivo del presente trabajo es cono-
cer el estado actual del conocimiento
sobre la relación entre moda, imagen
corporal y conducta alimentaria. En este
pequeño escrito, se trazan los primeros
esbozos sobre los conceptos ya men-
cionados y se manifiesta la intención de
abordar tanto la moda como la imagen
corporal desde una perspectiva de iden-
tificación de los factores relacionados
con el desarrollo de una buena conducta
alimentaria.
1 Estudiantes de Psicología, integrantes del semillero de investigación Balance, Correos electrónicos:
dncortes40@ucatolica.edu.co, sdiaz43@ucatolica.edu.co
2 Líder del semillero de investigación Balance, semillerobalance@ucatolica.edu.co
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La psicología de la moda es un campo
prácticamente desconocido o, al menos,
muy poco explorado en Latinoamérica. El
interés de los diseñadores gráficos, aseso-
res de imagen y expertos en moda no ha
llegado a encontrarse con los intereses de
los psicólogos educativos, conductuales, or-
ganizacionales y demás. No obstante, pese
a esta realidad, o más bien, debido a ella, se
ha empezado a pensar una nueva relación
entre estos diversos campos. Los participan-
tes del semillero a partir de sus intereses se
han planteado precisamente estas cone-
xiones como problema de investigación, el
cual surge dentro del marco de la búsqueda
de la calidad de vida y, específicamente, del
estudio de los factores psicológicos asocia-
dos a la conducta alimentaria.
Desde una mirada propositiva se indagará
el aporte de la moda, la asesoría de ima-
gen y el concepto de imagen en sí mismo
como herramientas para identificar los
factores relacionados con el desarrollo de
una buena conducta alimentaria, la cual
atañe no sólo al estudio de la psicología,
sino en general, a la sociedad misma.
Es importante contextualizar que pese a
existir un campo relacionado con la psi-
cología y la moda, no se abordan en este
temas de interés que fomenten la explo-
ración de la relación entre el desarrollo
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de una buena conducta alimentaria y el
impacto que sobre un individuo pueden
tener las tendencias del momento, la ves-
timenta, la percepción de imagen propia
y la opinión que los demás tengan sobre
él (Tiggemann et al., 2009); también se
dejan de lado un gran conjunto de apre-
ciaciones y características de la moda y
del diseño que pueden resultar relevantes
a la hora de evaluar la conducta alimen-
taria, sin dejar la esencia que caracteriza
la moda. Tales elementos pueden servir
adicionalmente como medio de orienta-
ción para la persona cuando esta requiera
un nuevo aprendizaje sobre la percepción
de la propia imagen, pero de acuerdo con
la importancia tanto del cuidado interior
como exterior.
Principalmente la moda se ha enfoca-
do en el uso de las prendas de vestir, sin
embargo, se desconocía que detrás de
esta se esconde un campo poco explo-
rado. Según Marc Alain (1979) la moda se
estudia por sí misma, como un fenómeno
psicosocial fundamental ya que nues-
tras sociedades se ven influenciadas por
esta. Sin embargo, atendiendo a lo que
refiere el autor, es imprescindible no pa-
sar por alto la relación que mantiene con
la conducta alimentaria. Esta es definida
por Santacoloma-Suárez (2013), como “la
acción que emite un organismo en don-
de consume o ingiere alimentos, de forma
voluntaria en pro de su vida, bienestar y
satisfacción, derivada de su biología, su
historia de aprendizaje, el contexto social,
la cultura, las propiedades del alimento y
su disponibilidad, entre otros factores”.
Una de las perspectivas desde la que ha
sido entendida la conducta alimentaria es
la biológica, en esta se parte del hecho de
que el fin de la ingesta de alimentos es el
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Investigación formativa
mantenimiento del equilibrio interno y la
promoción de un organismo homeostáti-
co; sin embargo, desde la perspectiva de
la psicología conductual, se contemplan
otros propósitos adicionales como facilitar
la interacción social y promover el refor-
zamiento ante conductas particulares, es
decir, al igual que la moda, la conducta
alimentaria se puede situar dentro del de-
sarrollo social de la persona y de la propia
percepción de sí misma.
Dentro de este orden de ideas, la socie-
dad constantemente está expuesta a un
conjunto de información y propagandas
en los medios de comunicación, que de
una u otra forma logran transmitir valores
e ideales que las personas apropian para
sí, y que pueden tener un impacto tanto
positivo como negativo en quienes consu-
men esta información, ya que esta, nota-
blemente, se encuentra ligada al contexto
de promoción de la moda.
Dentro del mismo marco, pero dirigiéndo-
se ahora a la comprensión de la imagen
corporal, a la cual define Saucedo (2008)
como “una configuración global conjunto
de representaciones, percepciones, senti-
mientos y actitudes que el individuo ela-
bora con respecto a su cuerpo y que se ve
modificada a lo largo de toda su existen-
cia, como consecuencia de cambios físi-
cos y biológicos”, esta propia percepción
se ve condicionada por el contexto, en el
que se suelen generar estándares de be-
lleza alejados de la realidad y que tienden
a la perfección. Estos se basan en modelos
pro-delgadez que generan en las perso-
nas estructuras de pensamiento que pue-
den llegar a ser un factor de riesgo para
el desarrollo de la imagen personal, de la
conducta alimentaria y de la satisfacción,
al interiorizar un ideal de cuerpo dictado
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Investigación formativa

según las preferencias socioculturales del se fortalezcan y exploren nuevas conexio-

momento (Vaquero et al., 2013).
De acuerdo con lo anterior y teniendo en
cuenta las dimensiones de necesidad, de
satisfacción, de diferenciación, de distin-
ción y de cambio (Souza & Öelze, 1998) que
ya se encuentran estudiadas por otros au-
tores acerca de la moda, se tiene una base
para generar una investigación en la que
nes que unifiquen campos diversos en los
que no se consideraba que tuvieran carac-
terísticas comunes entre sí. Estas relaciones
contribuyen a mejorar la comprensión de
la imagen corporal, la moda y la conducta
alimentaria como conceptos interrelacio-
nados y transversales de la vida. Si se ma-
nejan de manera adecuada estos enlaces
permitirán elevar la calidad de la vida.

Referencias
Marc Alain, P. F. (1979). Psychosociologie de la mode. Presses universitaires de France, reedition
numeri.
Tiggemann, M., Polivy, J., & Hargreaves, D. (2009). The Processing of Thin Ideals in Fashion Magazines:
A Source of Social Comparison or fantasy? Journal of Social and Clinical Psychology, 28(1), 73-93.
https://doi.org/10.1521/jscp.2009.28.1.73
Santacoloma, A. M. (2013). Efectos de reglas, modelos y consecuencias en la alimentación de ni-
ños con factores de riesgo de trastornos de conducta alimentaria. Repositorio Institucional
Universidad Católica de Colombia. RIUCaC. 1-712.
Santacoloma, A. M. (2010). Conducta alimentaria: Una conducta primaria para el hombre y para
la psicología. XIV Congreso Colombiano de Psicología memorias. Universidad de Ibagué,
Colombia.
Saucedo, O.M. (2008). Empleo del sorgo en la alimentación animal y humana. Taller Nacional sobre
empleo del sorgo. Universidad Central de Las Villas.
Souza, J., & Öelze, B. (1998). Da psicologia da moda - Um estudo sociológico. En Simmel e a moder-
nidade [Simmel y la Modernidad] (pp. 161-170).
Vaquero, R., Alacid, F., Muyor, J. M., & López, P. Á. (2013). Imagen corporal; revisión bibliográfica. Nutrición
Hospitalaria, 28(1), 27-35. https://dx.doi.org/10.3305/nh.2013.28.1.6016

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Semillero de Investigación Balance

Niveles de estrés, ansiedad y depresión
durante el aislamiento social obligatorio
en personas que realizan teletrabajo
Luisa Fernanda D’Achiardi Gómez, Carol Dahana Arévalo Paiva, Karla Sofía Lugo,
Paula Wilches1, Andrés M. Santacoloma Suárez2

Resumen cotidianos. Esto implicó, entre otras cosas,

La pandemia provocada por el virus Covid
19 no solo constituye es crisis de natura-
leza biológica, sino que tiene un impacto
en la salud en general. La salud, es una
condición multifactorial que abarca la
dimensión física, psicológica y espiritual
en los seres humanos. En este sentido, las
condiciones impuestas de aislamiento fí-
sico espacial y también de limitación en
los comportamientos altera la percep-
ción de bienestar de las personas y de
calidad de vida frente a una situación de
contagio masivo.
Se llevó a cabo un estudio para evaluar la
percepción de la calidad de vida frente a
los niveles de estrés, ansiedad y depresión
en personas que experimentaron el aisla-
miento social obligatorio en Colombia.
Palabras clave: Covid-19, aislamiento so-
cial, ansiedad, depresión, estrés.
La pandemia provocada por el reciente
virus Covid-19 sumió al país en un período
de aislamiento social, y obligó a gran parte
de la población a quedarse en sus hogares
mientras intentaban adaptarse a la nueva
situación y continuar con sus quehaceres
ciertos cambios en el trabajo que ha gi-
rado hacia la modalidad virtual, lo que se
denominó “teletrabajo”, diseñado como
un mecanismo para crear empleo y au-
toempleo a través de la Tecnología de la
Información y Comunicación (TIC).
En este sentido, el teletrabajo se considera
como una iniciativa que buscó implemen-
tar el uso de la tecnología en diferentes
áreas, lo que a su vez generó la necesaria
preparación de profesionales en el uso
de las TIC y posibilitó el desarrollo de nue-
vos productos y nuevas economías (Osio,
2010). Sin embargo, el cambio de activida-
des produjo consecuencias psicológicas
cuyo alcance es aún difícil de determinar.
Diferentes entidades internacionales han
adelantado programas para aquellas per-
sonas que permanecen en casa o que se
están viendo afectadas por esta situación.
Algunas de estas organizaciones son, por
ejemplo, el Comité Internacional de la Cruz
Roja (CICR) que ofrece servicios de aten-
ción sanitaria y apoyo en salud mental
(CICR, 2020), y la Organización Mundial de
la Salud (OMS) que promueve el Programa
SanosEnCasa. Este último programa

1 Integrantes del Semillero de investigación Balance. Correos electrónicos: lfdachiardi13@ucatolica.edu.co,

cdarevalo74@ucatolica.edu.co, kslugo32@ucatolica.edu.co, semillerobalance@ucatolica.edu.co
2 Líder Semillero de Investigación Balance. Correo electrónico: amsantacoloma@ucatolica.edu.co

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Investigación formativa
proporciona pautas de cuidado de la salud
mental de las personas en general y de sus
familias. Estas se centran en la promoción
de hábitos saludables y su primer objetivo
es controlar el tiempo que un individuo pasa
frente a la pantalla de un dispositivo electró-
nico como el computador (OMS, 2020).
Es presumible que en eventos o situacio-
nes de aislamiento social preventivo se
presentan factores tanto positivos como
negativos. Dentro de los positivos se ha
encontrado que las personas desarro-
llaron una mayor preocupación por los
sentimientos de los miembros de sus fa-
milias y han prestado mayor atención a su
salud mental; a la vez, gran cantidad de
personas invirtieron su tiempo en activi-
dades de descanso y ocio. Por otro lado,
las implicaciones negativas corresponden
a mayores niveles de estrés, ansiedad y
depresión como también a problemas de
insomnio, percepción de soledad, rabia y
miedo; en algunos casos se llegó a derivar
en trastornos psiquiátricos o agravar los
preexistentes (Ramírez et al., 2020).
En el contexto de esta investigación se tu-
vieron en cuenta las siguientes implicacio-
nes negativas relacionadas con el estrés, la
ansiedad y la depresión que se enumeran
a continuación: el estrés es considerado
como una experiencia de incomodidad,
molestia y frustración en la vida cotidiana
(Nowack, 2010) que se genera con el fin de
adaptarse a una situación en específica. La
depresión tiene entre sus síntomas la tris-
teza, la reducción de emociones positivas,
el estado de inhibición y los sentimientos
de desesperanza y constituye uno de los
diagnósticos psicológicos más comunes
(Belloch et al., 2009). Por último, la ansie-
dad es un mecanismo adaptativo que
permite estar alerta frente a situaciones
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peligrosas. En situaciones específicas ayu-
da a mantener la concentración, pero si
se presenta en momentos inadecuados
causa parálisis, deterioro psicosocial y fi-
siológico (Riveros et al., 2007).
El objetivo del presente trabajo consistió
en establecer la relación entre los niveles
de estrés, depresión y ansiedad, y la ocu-
pación o trabajo durante la pandemia de
COVID-19, en la población colombiana.
La pandemia generó nuevas circunstancias
como el teletrabajo y las clases remotas
que produjeron un cambio a nivel cognitivo
y conductual impactando tanto de forma
positiva como negativa a la población. Para
medir estas afectaciones se utilizó la esca-
la de Depression, Anxiety and Stress Scales
(DASS-21). Este instrumento consta de 21
ítems con una escala tipo Likert de 4 puntos
(0 - No aplica en mí para nada, hasta 3 -
Aplica para mí mucho). Cada ítem describe
estados emocionales negativos y contiene
tres subescalas que miden depresión, an-
siedad y estrés (Ruiz et al., 2019).
En general, se considera que el COVID-19
ha destacado la importancia de la con-
ducta para salvar vidas y cambiar estilos
de vida si se considera que el efecto del
aislamiento obligatorio ha sido asociado
con problemas psicológicos de ansiedad,
síntomas de estrés postraumático, ten-
dencias depresivas y trastornos del sueño
(Rana et al., 2020). En este sentido, la psico-
logía se constituye como un medio funda-
mental para generar cambios en la forma
de percibir, pensar, creer y manejar emo-
ciones, lo que se traduce en cambios de
comportamiento y estilos de vida; todos,
elementos necesarios para hacer frente a
la pandemia y a los efectos psicosociales
posteriores (Vera, 2020).
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Investigación formativa
Referencias
Belloch, A., Sandín, B., & Ramos, F. (2009). Manual de Psicopatología. McGraw-Hill.
Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). (2020). El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de
la Media Luna Roja hace un llamamiento por 3.100 miles de millones de francos suizos ($3.190
miles de millones de dólares estadounidenses) para contener la propagación de COVID-19 y
asistir en todo el mundo. https://www.icrc.org/es/document/el-movimiento-internacional-de-
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Semillero Politeia
Contribuyendo al bienestar y calidad
de vida de las comunidades
Nelly Ayala Rodríguez1, Xiomara González Alarcón, Johana Gómez Blanco2
Resumen
El artículo explora la importancia de la
comunidad en el campo de la psicología
comunitaria y su capacidad para construir
una identidad al reconocer necesidades,
problemas, recursos y potencialidades. El
sentido de comunidad resulta fundamen-
tal para lograr procesos de autogestión,
participación y desarrollo. El artículo pre-
tende dar cuenta del componente teórico
de una cartilla desarrollada por el semille-
ro Politeia, titulada “Sentido de pertenen-
cia en la comunidad: Actividades para su
fortalecimiento”. Esta cartilla tiene como
objetivo fomentar una convivencia social
positiva y propone 20 actividades para
fortalecer el sentido de membresía y per-
tenencia dentro de las comunidades, con
el fin de mejorar el bienestar y la calidad
de vida de las comunidades en situacio-
nes de fragilidad psicosocial.
Palabras clave: Comunidad, psicología
comunitaria, convivencia, calidad de vida,
cartilla.
La categoría de comunidad en el campo
de la psicología comunitaria se refiere a
un grupo que ha establecido múltiples
relaciones con su entorno físico, social,
político y cultural, entre otros aspectos, y
a través de estas interacciones ha cons-
truido su identidad. En este proceso ha
1 Líder del Semillero de Investigación Politeia. Correo electrónico: nayala@ucatolica.edu.co
2 Integrantes del semillero Politeia. Correos electrónicos xgonzalez07@ucatolica.edu.cojegomez63@ucatolica.
edu.co
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aprendido a identificar no solo sus ne-
cesidades y problemas sino también a
determinar sus recursos, posibilidades
y potencialidades. Esta construcción se
hace posible gracias al sentido de co-
munidad, un proceso psicosocial funda-
mental para comprender cómo es que
las comunidades logran procesos de
autogestión, participación y desarrollo. En
1974, Seymour B. Sarason quién le dio vida
a esta categoría al definirla como la ex-
periencia subjetiva de pertenencia a una
colectividad más amplia. Los integrantes
de la comunidad generan este sentido de
pertenencia que les lleva a ser parte de
una red de relaciones de apoyo mutuo en
la que pueden confiar.
De acuerdo con McMillan y Chavis (1986),
esta idea fue posteriormente desarrolla-
da en un modelo que consta de cuatro
componentes los cuales conformarían
la experiencia subjetiva de pertenen-
cia a una comunidad. Estos autores
definieron la experiencia como el sen-
timiento de pertenencia que tienen los
miembros, de ser parte de un grupo que
encierra significados afectivos y que les
da la confianza para sentir que sus ne-
cesidades serán atendidas a través de
su compromiso de permanecer con los
otros. De acuerdo con estos autores, los
componentes del sentido de comunidad
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son: a) la membresía, b) la influencia,
c) satisfacción de necesidades y d) la co-
nexión emocional compartida.
El primer componente hace referencia a la
historia y la identidad social que compar-
ten los miembros de la comunidad. Estas
se expresan a través de los símbolos en
común, la seguridad y el apoyo emocional
que el grupo les ofrece. También implica
los derechos y deberes que tienen que
cumplir por ser parte de la comunidad, así
como las gratificaciones que obtienen por
el hecho de ser parte de ella y el grado de
atracción interpersonal que experimentan.
Es en este componente donde se asienta la
fundamentación teórica de la cartilla, que el
semillero Politeia viene desarrollando y que
se denomina: “Sentido de pertenencia en
la comunidad. Actividades para su fortale-
cimiento”. La cartilla tiene como propósito
contribuir a hacer posible una sociedad gra-
ta para la convivencia. Para lograr esto se
Investigación formativa
diseñaron una serie de 20 actividades que
se proponen fortalecer el sentido de mem-
bresía y pertenencia a las comunidades. Se
espera que estas actividades sean de mu-
cha utilidad para los gestores, facilitadores,
docentes y líderes comunitarios, y que, al
llevarlas a cabo, se contribuya en la supe-
ración de la pobreza, una de las realidades
más preocupantes y que aumenta día a día
en el país. Según el Departamento Nacional
de Estadística (DANE), la pandemia del co-
ronavirus ha llevado a un aumento de 6,8
puntos porcentuales de pobreza monetaria,
alcanzando un 42,5% en 2020. Por lo que es
muy importante abordar esta problemática
y trabajar en conjunto para generar un im-
pacto positivo en las comunidades.
En este sentido, la ponencia muestra algu-
nas de estas actividades en la perspectiva
de aportar al mejoramiento del bienestar
de la calidad de vida de las comunidades
en condición de fragilidad psicosocial en
nuestro país.

Referencias
McMillan, D.W., & Chavis, D.M. (1986). Sense of community: A definition and theory. Journal
of Community Psychology, 14, 6-23. https://doi.org/10.1002/1520-6629(198601)14:1<6::AID-
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https://www.portafolio.co/economia/dane-revela-impacto-de-la-pandemia-en-la-pobreza-
del-pais-551470
Sarason, S. (1974). The psychological sense of community: prospects for a community psychology.
Jossey Bass.

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Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca del bienestar
de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales

El rol de los hermanos de niños

diagnosticados con Transtorno del Espectro
Autista (TEA): desarrollo de interacciones
y comunicación, una revisión teórica
Estefani Moreno López1, Santiago Larreal Morales1, Paola Pulido2

Resumen
El objetivo de la presente revisión de lite-
ratura consistió en describir el rol de los
hermanos de niños diagnosticados con
Trastorno del Espectro Autista (TEA) y ana-
lizar cómo se desarrollan las interacciones
y la comunicación entre ellos. A través de
la búsqueda de literatura se describieron
aspectos generales del TEA, y específica-
mente, las consecuencias personales en
la relación entre hermanos, el desarrollo
de interacciones y la comunicación entre
los mismos. Con base en los hallazgos, se
concluyó que el TEA es considerado como
un desafío debido a la poca capacidad
de adaptación colectiva, lo cual afecta la
relación entre hermanos. No obstante, se
resaltó la existencia de estrategias que son
imprescindibles para abordar y combatir
las dificultades en esta relación. Por último,
se recomendaron posibles líneas para con-
tinuar con la investigación en este campo.
Palabras clave: Comunicación, TEA, rela-
ción, adaptación, hermanos, habilidades
comunicativas.
Introducción
Actualmente, según la Organización
Mundial de la Salud OMS (2022), uno de
cada cien niños presenta trastorno del es-
pectro autista en el mundo, mientras que,
en el contexto colombiano, a pesar de no
haber estadísticas exactas, se ha estima-
do que alrededor de 115.000 niños poseen
este trastorno (Rojas, 2021).
En virtud de poder desarrollar esta temá-
tica correctamente, es necesario profun-
dizar en la caracterización del Trastorno
del Espectro del Autismo (TEA). De acuerdo
con el DSM-V (2014), el TEA es un trastorno
general del desarrollo, caracterizado por
deficiencias persistentes en la comuni-
cación social y la interacción en diversos
contextos, así como alteraciones en la
reciprocidad socioemocional y una dis-
minución por intereses emocionales. Esta
condición implica una afectación en la
comunicación verbal y no verbal.
Las deficiencias asociadas a este trastor-
no incluyen irregularidades en el contacto

1 Universidad Católica de Colombia. Estudiantes integrantes del Semillero Infancias: miradas interdisciplinar-
ias acerca del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correo electrónico: emore-
no20@ucatolica.edu.co sdlarreal50@ucatolica.edu.co
2 Universidad Católica de Colombia. Docente líder del Semillero Infancias: miradas interdisciplinarias acerca
del bienestar de las niñas y los niños en las relaciones parentofiliales. Correo electrónico: papulido@ucatolica.
edu.co; semilleroinfancias@ucatolica.edu.co

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visual y en el lenguaje corporal, así como
dificultades en la comprensión y uso de
gestos, llegando incluso hasta una falta
total de expresión facial. Estas caracterís-
ticas están ligadas al ámbito de la comu-
nicación y son de vital importancia para la
detección y el diagnóstico temprano del
TEA (Llorca et al., 2021).
A nivel relacional, se presentan disfun-
ciones que se hacen evidentes en el de-
sarrollo, mantenimiento y comprensión
de las relaciones. Estas dificultades inclu-
yen inconvenientes tanto para ajustar el
comportamiento a los diversos contextos
sociales, así como para compartir juegos
abstractos y para hacer amigos (DSM-V,
2014). Por lo tanto, teniendo descripciones
claras de las características y semiología
del trastorno, el objetivo de esta revisión
es describir el papel de los hermanos de
niños diagnosticados TEA y analizar cómo
se desarrollan las interacciones y la comu-
nicación entre ellos.
Relación entre hermanos
A lo largo del tiempo, se ha evidenciado la
exclusión y discriminación hacia los her-
manos de aquellos niños que presentan
TEA. Sin embargo, los hermanos de esta
población se han caracterizado por tener
habilidades empáticas y de adaptación,
mostrándose comprensivos y responsa-
bles en el rol que adoptan en la relación
de hermandad (Pilowsky et al., 2004, citado
en Ruiz y Tárraga, 2015).
A pesar de contar con dichas habilidades,
los hermanos de los niños con TEA suelen
ser excluidos y desatendidos por sus pro-
genitores, ya que la atención se centra
únicamente en el hermano que presen-
ta el trastorno. Esto pone en evidencia la
dificultad de explicar a los demás niños
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Investigación formativa
o personas de su entorno la situación del
hermano con TEA. Es importante destacar
que la dificultad no se debe a algún tipo
de déficit del lenguaje expresivo, ya que
este no es un aspecto que se vea afectado
(Garrido et al., 2022), sino por la compleji-
dad de las circunstancias en sí (Venturella
et al., 2015).
En este orden de ideas, Venturella (2016)
señala también que estos hermanos co-
múnmente se ven sometidos a situacio-
nes en las cuales no tienen clara la forma
en que deben actuar, viéndose expuestos
a burlas, exclusión y, en algunas ocasiones,
discriminación. Circunstancias que los lle-
van a experimentar un estado de ambiva-
lencia, en el que presentan principalmente
sentimientos negativos como ansiedad,
vergüenza, miedo e inseguridad.
Otros autores mencionan que el grado de
TEA puede impactar negativamente al niño
que no posee el trastorno. Este impacto se
presenta al tener que combatir las con-
ductas agresivas de su hermano, además
de la ignorancia, curiosidad y burla de ter-
ceros. Sin embargo, a pesar de estas cir-
cunstancias, ellos desarrollan habilidades
con funciones adaptativas a la necesidad
especial de su hermano (Petalas et al.,
2009 citado en Ruiz y Tárraga, 2015).
En relación con las habilidades de adap-
tación, a lo largo del tiempo se ha logrado
evidenciar que los hermanos de niños con
TEA poseen la capacidad de ser tolerantes,
tener un buen nivel de autocontrol, al igual
que un buen ajuste conductual enfocado
hacia las condiciones de su hermano. En
este orden de ideas, Ruiz y Tárraga (2015)
arrojan luz sobre diversos aspectos de la
adaptación conductual y emocional de
los hermanos de niños con TEA.
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Investigación formativa

Estos autores señalan que a pesar de la
evidencia existente con respecto a las
dificultades que presenta esta población
de hermanos, también existe evidencia de
que los hermanos de niños con autismo no
son más susceptibles a desarrollar proble-
mas de ajuste conductual comparados
con los hermanos de niños con desarrollo
neurotípico.
Relación comunicativa
Aunque la comunicación es el principal
motor del lenguaje y del entendimiento
del mundo, la evidencia apunta a que los
niños con autismo, a partir de un lenguaje
incipiente, comprenden los estados emo-
cionales de las personas mucho antes de
comprender y producir el lenguaje en la
misma medida. Esta diferencia afecta el
tipo de relación que entablan con su en-
torno social (Monfort, 2009).
Sin duda la relación comunicativa entre
los niños con TEA y sus hermanos también
está afectada por estos factores y tiene un
grado de complejidad alto. Puede producir
cansancio en el inicio de las interacciones
(Venturella, 2016) y efectos adversos para
el desarrollo temprano del lenguaje en los
hermanos (Roemer, 2021).
Pese a esto, los niños encuentran medios
alternativos que favorecen los procesos de
interacción entre ellos. Ya que, a través de
actividades como el juego y las conversa-
ciones simples, encuentran vías de expre-
sión que benefician el desarrollo de una
identidad propia (Venturella et al., 2015).
Conclusiones
Al considerar la teoría revisada, se puede
llegar a la conclusión de que el Trastorno
de Espectro Autista (TEA) es una proble-
mática derivada de la poca capacidad
de adaptación de la sociedad a la di-
versidad de las funcionalidades de estas
personas. De la misma forma que esta si-
tuación no solo afecta a la persona diag-
nosticada, sino también a sus familiares y
su entorno.
A pesar de que en general se presentan
una serie de dificultades tanto para los
niños con TEA como para sus hermanos,
existen estrategias que pueden mediar y
mejorar la interacción entre los mismos,
dadas las capacidades adaptativas, de
regulación conductual y de empatía que
los hermanos presentan.
Por último, se da por alcanzado el objetivo
de esta revisión al haber descrito el rol fra-
ternal en los niños con TEA. Se recomienda
continuar la línea investigativa centrada
en el impacto en los hermanos después
de los 3 años de edad, puesto que hay un
amplio campo de estudio por explorar en
esta área.

Referencias
Garrido, D., Carballo, G., & Valverde, P. (2022). Los hermanos de niños con autismo: Habilidades lin-
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Investigación formativa
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Organizaci%C3%B3n%20Mundial%20de%20la%20Salud%20(OMS)%2C%201,casos%20en%20el%20
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Venturella.pdf?sequence=1&isAllowed=y

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Contenido

Contenido
INVESTIGACIÓN FORMATIVA
Editorial. Especialización en Psicología Clínica: uno de los mejores programas de la Facultad
de Psicología........................................................................................................................................................................................................................................................1
Sandra Jimena Perdomo Escobar
Comprensión del fenómeno de trata de personas con fines de explotación sexual en Colombia.......................6
Angie Paola Ayala Góngora, Ever José López Cantero
Procesos de socialización en niños, niñas y adolescentes (NNA) colombianos durante y
después de la pandemia......................................................................................................................................................................................................................9
Samar Elizabeth Torres Marques, María Camila Córdoba Martínez, Íngrid Romero Cortés, Paola Andrea Pulido Escobar
Escala de Medición de la Soledad BATAN.......................................................................................................................................................................... 13
Laura Daniela Bolívar Rodríguez, Ingrid Valentina Álvarez Herrera, María Camila Torres Campos,
Nicole Daniela Prieto Arias, Itala Marina Camargo Escobar
Ciberviolencia, una aproximación desde la cognición extendida y enactiva ............................................................................ 19
Lisandro Velásquez Sarasty, Andrés Fernando Ramírez Velandia
Efectos de las prácticas de crianza en el desarrollo de niños y niñas
durante la infancia temprana en familias disfuncionales .............................................................................................................................25
Laura Daniela Aranguren Fonseca, Yulieth Fernanda Gómez Moreno, Paola Andrea Pulido Escobar
Influencia de los padres en el uso de estrategias adaptativas y desadaptativas de
regulación emocional utilizadas por los niños y niñas durante la infancia intermedia...................................................28
Ana María Tello Jiménez, Paola Andrea Pulido Escobar
Exploración acerca de las estrategias de intervención implementadas
en los niños, niñas y adolescentes víctimas del conflicto armado en Colombia...................................................................32
María Camila Sanmartín Galvis, María José Zuleta, Paola Andrea Pulido Escobar
Validación por jueces de un instrumento de medición de afectividad
y erotismo en trabajadoras sexuales de Bogotá......................................................................................................................................................36
Valentina Pinto Parra, Mateo Pardo Rodríguez, Isabela Silva Bohórquez, Andrés Felipe Avendaño Montañez
Efectos del castigo físico como agente de control y disciplina en la crianza
de niños y niñas en infancia temprana...............................................................................................................................................................................39
Karol Andrea Camargo Rojas, Maribel Cruz Gutiérrez, Valentina Díaz Acevedo, Paola Andrea Pulido Escobar
Beneficios cognitivos de los videojuegos..........................................................................................................................................................................43
María Camila Rueda, Itala Marina Camargo Escobar
Revisión teórica del estilo de crianza democrático................................................................................................................................................50
Jessica Katherine Zuluaga Canay, Karen Bernal Castro, María Fernanda González, Paola Andrea Pulido Escobar
Ser porque hemos sido: La conexión emocional en la reconstrucción del tejido social para la paz.................53
Amaranta Pardo Calderón, Nelly Ayala Rodríguez
Conexión emocional como estrategia para la construcción del sentido de país................................................................ 56
Fabián Blanco Rivero, Camila Garzón Quiroga, Rafael Puro Landivar, Nelly Ayala Rodríguez
El uso de tecnologías de la información y la comunicación en la medición de procesos psicológicos....... 60
David Santiago Casas Soriano, Juan Felipe Saavedra Chávez, Laura Geraldine Cortés de Narváez,
Manuela María del Rocío Pinzón Serrano, Gabriel Eduardo Almeida, Ivonne Edith Alejo Castañeda
Relación entre moda, imagen corporal y conducta alimentaria en Latinoamérica............................................................62
Daiani Neriad Cortés Ospina, Sara Díaz Rico, Andrés Mauricio Santacoloma Suárez
Niveles de estrés, ansiedad y depresión durante el aislamiento social obligatorio
en personas que realizan teletrabajo.................................................................................................................................................................................. 65
Luisa Fernanda D’Achiardi Gómez, Carol Dahana Arévalo Paiva, Karla Sofía Lugo,
Paula Wilches, Andrés M. Santacoloma Suárez
Contribuyendo al bienestar y calidad de vida de las comunidades.................................................................................................. 68
Nelly Ayala Rodríguez, Xiomara González Alarcón, Johana Gómez Blanco
El rol de los hermanos de niños diagnosticados con trastorno del espectro
autista (TEA): desarrollo de interacciones y comunicación, una revisión teórica...................................................................70
Estefani Moreno López, Santiago Larreal Morales, Paola Pulido